LOS MOGGONITAS

Articulo creado por Skippy Farlstendoiro y maquetado por Al Noah, los xenobiólogos de SithNET
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Los Moggonitas


 
"Nos recompensará cortándonos el gaznate. ¡Todo el mundo sabe que los moggonitas son las criaturas más traicioneras de la galaxia!" (Obi-Wan Kenobi)

¡Con lo majo que ha sido Ben toda la vida, siempre viendo lo mejor en los demás! Para que piense esto de una especie entera, deben ser especialmente despreciables. Admitamos que Kenobi tenía trece años cuando dijo esta frase y le quedaba mucho que aprender para ser el maestro que todos recordamos… así que supongo que no le cortaron el gaznate en ese momento como él decía, ¿verdad? ¿Les apetece acompañarme para conocer a los moggonitas?

Pongamos rumbo al sector Sertar del Borde Exterior. A través de la ruta hiperespacial Túneles de Shaltin podemos llegar a Vanqor Syngia y desde allí acceder a mundos tan interesantes como Elom, origen de los eloms y de los elomin, o Florrum, que vio dos batallas durante las Guerras Clon. Nos encontramos además a tiro de piedra de otras zonas colindantes, como el sector Mortex y los temibles Mundos Sith, especialmente Korriban.

El mundo que nos ocupa hoy es el selvático Arorua. En su superficie, árboles nudosos con ramas del grosor de robustos troncos se entremezclaban unos con otros, haciéndose sombra en un ecosistema de crecimiento espectacular bajo el caluroso sol. Existían también zonas montañosas y dotadas de agua.



Arorua.

Había muchas formas de vida exóticas, incluyendo una medusa voladora de color rosa claro, un pequeño batracio púrpura y un animal bípedo anaranjado y jorobado parecido al kaadu de Naboo que podía ser cabalgado; sus pequeñas patas delanteras no eran usadas para moverse. También estaban los blagwahr, que preparaban trampas para cazar a otros seres y devorarles. Es posible que los blagwahr fuesen una especie primitiva local.

Una criatura especialmente famosa era el squollyhawk: Era una serpiente descomunal como un edificio, con dos mandíbulas como guadañas capaces de romper los enormes árboles. Su color era en general verde, con una mancha roja en la cabeza; pero además tenía una protuberancia ósea parecida a la cara de un bebé, que le servía para atraer presas incautas hasta sus fauces. Pese a lo temible de este ser, en realidad era muy vulnerable: Si se le golpeaba en la boca hasta romperla, la bestia pasaba a ser incapaz de comer, y moría rápidamente de inanición porque necesitaba comer muy a menudo: Su rol en el ecosistema era el de un depredador.



Un squollyhawk.

Otro ser visto en Arorua era el silano, parecido a una larva gigante con un rostro simétrico dominado por bocas en cuyo interior había más bocas, todas ellas bordeadas por dientes afilados y puntiagudos. El silano crecía a lo largo de toda su vida hasta alcanzar tamaños enormes en su senectud, convirtiéndose en una monstruosidad llena de tentáculos y colmillos que solía anidar en cuevas. En general los silanos, que eran afortunadamente escasos, eran considerados seres míticos fuertes en el el lado oscuro y su mera cercanía provocaba escalofríos. Algunas culturas, especulativamente incluyendo a los blagwahr, adoraban a los silanos ofreciéndoles sacrificios, con postes en donde dejaban cráneos de sus víctimas uno sobre otro. Los silanos podrían haber sido resultado de experimentos alquímicos sith en tiempos anteriores a la República, y varias veces en la historia fueron perseguidos por los jedi cuando éstos los detectaban.

Pero hablemos de los moggonitas, una especie inteligente nativa de Arorua. Eran humanoides rechonchos que no alcanzaban el metro de estatura, y posiblemente se quedasen rondando el medio metro o poco más.

Los principales rasgos de los moggonitas eran sus rostros simiescos y sus largas orejas triangulares que asomaban bajo su cabellera, con enormes cantidades de pelo asomando de su interior. Pese a estar cubiertos de pelo, tenían vello adicional en ciertas zonas del cuerpo, incluyendo barba y largos cabellos en los nudillos y en la cabeza. Sus ojos tenían el iris amarillo y su piel era demasiado rosada para confundirla con la de un humano.

Pero las extremidades acababan siendo críticas para descartar cualquier parecido: La mano de un moggonita tenía sólo dos dedos enormes más un pulgar oponible, y sus pies acababan en pezuñas hendidas de caballo. Aunque podían caminar, preferían moverse por tracción ajena, como por ejemplo cabalgando un animal o convenciendo a otra persona para que cargase con ellos.

Los moggonitas podían tener hambre y se alimentaban con comida estándar.

Los moggonitas tenían las vulnerabilidades típicas de otras especies y morían cortados por un sable láser o devorados por depredadores en su ecosistema, siendo ésta una situación más frecuente de lo que parecía. El uso de poderes curativos de la Fuerza podía sanar heridas de los moggonitas.

Los híbridos entre moggonitas y humanos eran posibles, aunque se parecían muy poco a los moggonitas y a los humanos: Se trataba de antropoides simiescos mucho más altos y poderosos que un humano, no quiero contar que un moggonita, y no mostraban las tendencias culturales de ninguna especie. Eran, eso sí, de rostro simiesco y orejas triangulares.


Cultura


 

Los moggonitas eran, por imperativo biológico, una especie egoísta que traicionaba a quien estuviese lo bastante cerca para tomar todo lo posible y asegurar su supervivencia. Un moggonita se tenía a sí mismo en muy alta estima, despreciaba a los demás y exigía un trato preferente: Una persona que encontrase a un moggonita debía, en opinión del moggonita, entregar parte de su comida en pago por los supuestos favores que el moggonita hacía por los demás. El moggonita entonces comería la comida con desdén y eructaría de forma desagradable. Los seres de otras especies sabían que los moggonitas eran gente peligrosa y procuraban evitarlos, al menos en general.



Mosko Bolpa, un moggonita genérico.

Los moggonitas no solían preocuparse de aprender el idioma Básico en profundidad: En vez de conjugar los verbos, se referían a sí mismos en tercera persona, por ejemplo cuando el moggonita Mosko Bolpa decía "¡Mosko no necesita ayuda!".

Los moggonitas solían vestirse con ropas a menudo demasiado grandes (en parte porque pocos fabricantes se adaptaban a tallas tan pequeñas). Eran frecuentes los colores brillantes y los feces. Rara vez usaban zapatos, aunque el bastón era un complemento habitual. Muchos moggonitas decoraban sus orejas con pendientes de oro, y adornaban su fosa nasal con un aro del mismo estilo.


Historia


 

El planeta Arorua entra en la comunidad galáctica muy temprano, antes incluso de que se fundase la Antigua República. En 27.700 ABY, los rakata intentaron conquistar Korriban pero fueron derrotados por el Rey Adas. Tras esta guerra, los sith comprendieron que no eran los únicos seres poderosos en la galaxia animados por la Fuerza, lo cual era un insulto para su orgullo, y además tenían la tecnología espacial rakatana. Se inició un periodo de expansión del Imperio Sith en que sus guerreros massassi se dispersaron por mundos vecinos para acabar con las formas de vida allí. Los sith alcanzaron mundos diversos con varios objetivos: Malchor y Thule se convirtieron en fortalezas contra posibles contraataques y puestos avanzados para conquistas de nuevas civilizaciones (como la República); Tund pasó a ser una prisión para los herejes; y Arorua hospedó monstruos creados por la hechicería sith.

Con el paso de los milenios, la República llegó a conocer a los sith y les plantó cara varias veces. También se enfrentó a sus bestias: En 3.993 ABY, el jedi Duron Qel-Droma asume la tarea de limpiar su apellido destruyendo remanentes de los sith y participando en la llamada Gran Caza para erradicar creaciones pesadillescas del enemigo, incluyendo silanos y otros monstruos como terentatek y wyrms gigantes.



Un silano.

Después de su época, Arorua se vio muy afectado durante las Guerras Mandalorianas (3.976-3.970 ABY), y formó parte del Imperio Sith de Darth Revan (3.959-3.956 ABY).

Nada relevante parece haber sucedido en Arorua hasta 44 ABY, cuando el Consejo Jedi envió allí al maestro Qui-Gon Jinn y a su aprendiz padawan de trece años, Obi-Wan Kenobi, por motivos no especificados. Los dos jedi construyeron un campamento en la base de un árbol durante su estancia, y exploraron el entorno. Jinn encontró a un moggonita, Mosko Bolpa, apresado en una trampa blagwahr. Aunque los moggonitas eran un peligro para Jinn, él lo liberó para evitar que los blagwahr se lo comiesen, y lo llevó a su campamento para alimentarle porque se compadeció de la hambrienta criatura.

Kenobi mientras tanto encontró un squollyhawk. Basándose en la cara infantil de la bestia, Kenobi lo tomó por un animal inofensivo y achuchable. Cuando el animal reveló su aspecto, Kenobi intentó huir acrobáticamente y en el proceso rompió la boca del squollyhawk. Corrió Kenobi entonces a advertir a su maestro; y Jinn le explicó pacientemente que Kenobi había herido fatalmente a un depredador que no hacía otra cosa que cumplir su función social.

Jinn, que llevaba consigo a Bolpa, dirigió al grupo hacia su campamento. Kenobi recriminó a Bolpa la actitud soez que éste mostraba, y preguntó a su maestro porqué aceptaba críticas falaces de ese pequeño moggonita. Jinn explicó a Kenobi que debían servir a la Fuerza viva sin esperar una recompensa a cambio. Después de comer, Bolpa comprobó que los jedi estuviesen solos y se retiró, porque Bolpa quería reunir a un grupo de bandidos para atacar el campamento esa noche, intentando pillar por sorpresa a los jedi.

Por supuesto, los jedi vencieron en ese conflicto y mataron a los atacantes, incluido Bolpa. Jinn sin embargo decidió abandonar de inmediato el lugar, porque según él había sido "perturbado", y también porque podrían llegar más bandidos y Jinn prefería no matar si podía evitarlo. Los jedi dejaron parte de su equipo atrás y exploraron el paisaje. Al amanecer, Kenobi le preguntó a Jinn por sus acciones, y Jinn justificó cada una de ellas como movida por la ética y por la voluntad de la Fuerza.

Kenobi propuso acampar en una montaña que percibía como siniestra. Allí encontraron un altar de sacrificios para un silano, y Jinn optó por ir allí para eliminar a la bestia del lado oscuro. Pidió a Kenobi que no le acompañase en tan difícil misión, pero Kenobi insistió. Encontraron al silano en una gruta subterránea y le hicieron trizas con sus sables. Al salir, Kenobi lamentó haber matado a una forma de vida que sin duda también tenía su propósito; pero Jinn le explicó que un jedi debía servir a la Fuerza.



Obi-Wan y Qui-Gon en Arorua encuentran un altar en honor al silano.

Desde los tiempos de las Guerras Clon (22-19 ABY) hasta después de la batalla de Endor (4 DBY), el híbrido humano-moggonita Gizman, llamado Gran Gizz, obtuvo infamia como piloto de swoop, líder de bandas, aliado de los jedi y sicario del jefe criminal Jabba el Hutt, activo en varios mundos de la galaxia como Bilbringi, Tatooine y Vaced.

El planeta Arorua cambió de manos varias veces en los años posteriores a la batalla de Endor. Hasta el año 8 DBY, formaba parte del Imperio de Zsinj, uno de los señores de la guerra imperial. En 9 DBY, esa zona de la galaxia estaba entre los aliados del Gran Almirante Thrawn, aunque también parecía estar cubierta por la Segunda Flota Neorrepublicana, que centraba su actividad en el cercano Elom. Desde el 10 al 17 DBY, Arorua estaba fuera del control de las potencias centrales de la galaxia, del Remanente Imperial y de los intentos neorrepublicanos de controlar ese territorio.

La especie extragaláctica yuuzhan vong no parecía interesada en conquistar un mundo selvático y sin apenas tecnología: Durante su invasión de los años 25 a 29 DBY, no hay pruebas de que hollasen Arorua. Es posible que la cercanía del temible mundo sith Korriban les ahuyentase, ¡pero Elom era un mundo crítico para la Nueva República y estaba en el mismo sector! Bien podría merecer su interés, ¿no?

Arorua fue neutral durante la Nueva Guerra Civil Galáctica (40-41 DBY).

En 137 DBY, Arorua formaba parte del Imperio Sith de Darth Krayt. Dejando de lado lo completista que fue Krayt, también es cierto que Korriban estaba cerca y los mundos sith eran importantes para el emperador Krayt.


Moggonitas Notorios


 

Mosko Bolpa: Mosko Bolpa era un pequeño moggonita activo en el planeta Arorua en 44 ABY. Bolpa vestía ropa de colores brillantes, incluyendo un fez rojo, y tenía un anillo dorado en la nariz y otros dos en la oreja izquierda. Caminaba con un bastón, y tenía vínculos con un grupo de bandidos. Como la mayoría de moggonitas, Bolpa era traicionero y soez.

Bolpa fue aprehendido por una trampa blagwahr. El maestro jedi humano Qui-Gon Jinn, que estaba de visita en Arorua, le encontró y decidió rescatar a Bolpa, puesto que si no lo hacía, los blagwahr le devoraría. Jinn usó sus poderes de la Fuerza para curar a Bolpa. Después Jinn decidió llevar a Bolpa a su campamento para darle de comer, porque Bolpa estaba hambriento y Jinn se apiadó de él. Antes de llegar, Jinn se reunió con su aprendiz de trece años, Obi-Wan Kenobi, que acababa de pelear con un temible depredador y le había vencido; Jinn le explicó la naturaleza de ese animal y le hizo ver que Kenobi había herido fatalmente a un animal que sólo ocupaba su nicho. Bolpa, groseramente, les criticó por ocuparse de tareas que no le beneficiasen a él directamente.

Los jedi llevaron a Bolpa a su campamento sólo para que éste lo criticase como indigno. El moggonita incluso exigió comida, explicando que era un honor para los jedi alimentar a Bolpa y después poder decir que Bolpa les había honrado comiendo la bazofia que le ofrecían. Bolpa incluso insultó directamente a los jedi. Kenobi se horrorizó al ver que su maestro, a quien él respetaba, aceptaba ese castigo sin dudar, especialmente de un moggonita que sin duda se declararía su enemigo.

Después de comer, Bolpa preguntó a los jedi si estaban solos porque pretendía emboscarles y robar sus posesiones. Jinn le dijo la verdad. Bolpa se fue con un eructo, aunque Jinn le ofreció su hogar para descansar.

Durante la tarde, Bolpa reunió a bandidos que atacarían desde sus monturas por la noche. Bolpa participó en la incursión, atacando a los jedi. Jinn reprimió fácilmente la emboscada y mató a Bolpa y a otros bandidos. Decidió después abandonar el campamento porque, si llegaban nuevos saqueadores, entonces Jinn tendría que matarles, y él no quería hacer eso. Durante su excursión, Jinn justificó sus acciones ante Kenobi como éticas: Si encontraba a un ser en una trampa, lo liberaba. Si encontraba a un ser hambriento, le alimentaba. Si alguien le preguntaba, le respondía la verdad. Mas, si un ser intentaba matarle, entonces Jinn se defendería con fuerza letal si era necesario, porque debía seguir sirviendo a la Fuerza hasta que la Fuerza le dijese que era su momento de morir.


El Gran Gizz


 

Gizman, conocido como Gran Gizz, era un híbrido humano-moggonita y un brutal piloto de swoop y líder bandas criminales. Durante las Guerras Clon, se asoció primero con una banda criminal en Vaced y después con el padawan chiss Nuru Kungurama y su equipo, el Escuadrón de Escape, pero pretendía mantener su autonomía. Durante la Guerra Civil Galáctica se le vio como líder de la banda de swooperos de Jabba el Hutt, realizando actividades criminales para éste. Tras la muerte de Jabba, intentó buscar nuevas actividades criminales con uno de sus antiguos subordinados, el espía loco chiss Spiker, y acabó acompañado por varias otras lamentables formas de vida.



Gizman, el swoopero.

Gizman era un descomunal bruto monstruoso de más de dos metros de estatura, con una enorme panza y vello corporal por doquier, incluyendo una línea vertical desde la nuez hasta la entrepierna que él no dudaba en exhibir. Tan grande era su tamaño, que costaba encontrar equipo de su talla: No había literas en las naves estándar, ni cabía en una cápsula de escape. ¡Apenas podía pasar por una escotilla! Un problema que parecía más serio para él era que casi nadie fabricaba cascos de su talla, siendo el casco una feliz idea para un piloto temerario.

No pudiendo proteger su testa, Gizman exhibía un cabello negro largo, crespo, enmarañado, sucio y despeinado, completado con patillas largas y una perilla vertical. En ocasiones, para evitar que su melena ondease (y crujiese) en la brisa, se lo ataba con una cinta o se lo arreglaba en un moño o en una coleta. Del interior de su cabellera emergían sendas orejas , largas y puntiagudas hasta el punto de ser cónicas. No era su único rasgo facial alienígena: Tenía un hocico porcino perforado por un enorme aro de oro, dos ojos rojos y dientes torcidos y afilados en una feroz sonrisa desde donde profería su voz profunda.

Gizman estaba cubierto de piel correosa color naranja oscuro, y tenía manos de cinco dedos dotados de enormes uñas con una higiene mejorable. Buena parte de su cuerpo era visible, puesto que Gizman desaprobaba el uso de camisas y prefería un equipo reminiscente del estilo de incursor vagabundo, harapiento y tachonado con recuerdos personales. Solía vestir un chaleco improvisado que aparentemente había sido una gabardina larga a la que le había roto las mangas, y protegía sus manos con guantes o mitones, según la ocasión, además de llevar muñequeras de cuero negro con púas. Los pantalones eran, gracias a Dios, más estándar, aunque decorados con rodilleras protectoras. Extrañamente para un piloto de swoop, Gizman elegía usar zapatos en vez de botas.

Además de su aro nasal, Gizman decoraba sus orejas con pendientes en forma de argollas, habitualmente llevando dos o tres en cada oreja. Durante el tiempo en que trabajó para Jabba el Hutt, Gizman se tatuó el símbolo del clan de Jabba, Desilijic, en el antebrazo derecho; varios otros miembros de la banda también lo hacían, para mostrar su filiación.

Lejos de salir desprotegido, Gizman llevaba un cuchillo en cada bota y una carabina bláster. Ocasionalmente llevaba también sendas pistolas bláster pesadas en fundas tobilleras, y una bolsa con algo de dinero en efectivo, raciones y rapé de especia ryll. Después de todo, Gizman era un excelente luchador, pero se valía por sí mismo y sin armas: Le bastaba chocar con un mamparo para abollar una nave espacial, y podía levantar objetos enormes y pesados, así que más de una vez alzó a un humanoide por sus solapas. Era lo bastante vigoroso para resistir varios impactos de rifle bláster; pero un disparo bien dirigido de un arma menor podía dejarle inconsciente. Tampoco era invulnerable: Un accidente de swoop podía romperle una extremidad, y un golpe cuidadoso con una piedra podía abrirle la cabeza, dejándole al borde de la muerte. Viéndole respirar, uno podía confirmar que seguía con vida.

Por supuesto, su equipo no estaba completo sin su moto swoop, un vehículo repulsor monoplaza; después de todo, pese a su tamaño, Gizman no se movía mucho más rápido que un humano. No sólo era un piloto bastante bueno, sino que sabía reparar las swoops y se manejaba bien con motos-jet. En una nave espacial, su estilo temerario no era adecuado para el timón y él se veía más como artillero. Estaba también familiarizado con la tecnología bélica, incluyendo los efectos de un AT-ST y los diversos droides de combate de la historia, como el IG-97 y el hecho de que el Imperio Galáctico nunca había producido droides de combate (El proyecto Dark Trooper fue secreto). Conocía los colectivos del crimen organizado, podía sobrevivir en el desierto, era un líder nato y un capaz interrogador que intimidaba a sus víctimas sugiriendo que iba a recurrir a la violencia. Como estratega, era especialmente agresivo y prefería perseguir a un enemigo en retirada para aprovechar su ventaja.

Gizman hablaba Básico, pero no podía leerlo; le avergonzaba si el tema salía a colación. Su mera forma de hablar era muy informal, con abreviaturas y problemas de pronunciación. Blasfemaba con las expresiones "skrag" y poodoo (término éste del idioma huttés). Pese a que pasó bastante tiempo en Tatooine, Gizman no aprendió a hablar jawaés.

Gizman era inequívocamente maloliente y repulsivo. Como era reacio a ducharse, a veces sus compañeros usaban filtros de respiración en su presencia. En cuanto a la respiración, Gizman optaba por aspirar especia ryll cuando podía. Resultaba sorprendente, considerando su olor corporal y su consumo de drogas, que el hocico porcino de Gizman pudiese usarse para rastrear: Gizman podía averiguar dónde había ido una moto jet oliendo sus gases residuales.

A veces, Gizman perdía el habla ante una chica guapa e intentaba impresionarla con torpeza y una demostración totalmente equivocada de habilidades; y reconozcamos que su higiene personal no ayudaba.

La enorme barriga de Gizman no era un rasgo de su especie o algo parecido: Gizman zampaba a Dios por una pata, regando su alimento con jugo de nepoy cuando estaba disponible.

Gizman rechazaba las asociaciones en general porque no le gustaba recibir órdenes, sólo mandar. Tampoco aprobaba el protocolo y se negaba a que le llamasen "Señor Gizman" o "Maestro Gizman".

Después de una descripción detallada de un par de páginas, ha llegado el momento de empezar a contar la vida del caballero. Nos ponemos en 22 ABY, en plenas Guerras Clon, y en el planeta Vaced, un puesto avanzado de bajo presupuesto con plataformas de aterrizaje y edificios ruinoso en mitad de un bosque. Con una pistola bláster, Gizman corría con otros cuatro swooperos: Tres humanos sin afeitar y un advosze, Frutchoo. Llevaba poco allí, sin embargo. Gizman llevaba allí el tiempo suficiente como para conocerse el terreno, pero no mucho más: Tres meses antes de estos eventos, aparentemente, Gizman había estado en Ahorros y Préstamos Zygianos en Treylón II, cometiendo un delito que después negaría. Un oficial del puerto espacial acusaba a Gizman de varios delitos, incluyendo insobriedad pública, perturbar la paz y no pagar deudas, y ansiaba el momento de encadenarle y enviarle a prisión; pero él era incapaz de derrotar físicamente a Gizman.

A un nivel más galáctico, la guerra continuaba. El planeta Kynachi pretendía aliarse con la República; y el comisionado Langu Sommilor, representante de este mundo, viajaba a Coruscant con escala en Vaced. El padawan chiss Nuru Kungurama y sus tropas, el Escuadrón de Escape, se reunirían con Sommilor en Vaced para escoltarle, viajando en el YT-1760 privado Arpía Apresurada. Ahora, este plan hacía aguas por todas partes: Uno de los clones, Agudo, había sido reemplazado por un multiforme clawdita que trabajaba para Asajj Ventress. Otro clon, Rompedor, había descubierto que tenían un rastreador en la nave, pero no podía encontrarlo. Sommilor también era un impostor. Por último, los sith habían contratado a Hudu Chuzo, un francotirador mandaloriano de la Guardia de la Muerte para asesinar a los falsos enviados de Kynachi. Todo ello formaba parte de un enrevesadísimo plan de Darth Sidious y Darth Tyranus.

Kungurama y su equipo llegaron primero, casi a la vez que Chuzo (que aterrizó discretamente lejos del asentamiento). Los pilotos de swoop se acercaron a recibirles. Tras un malentendido sugiriendo que eran la ley local y que Gizman estaba entre sus subordinados (Gizman se ofendió al oírlo), Frutchoo pretendía exigir a los recién llegados un supuesto "impuesto del puerto espacial" a modo de extorsión, para proteger su nave contra daños causados por maleantes, como había sucedido a un arcona que estaba reparando la nave. Gizman esperaba terminar esa reunión pronto para ir a beber y, cuando uno de los swooperos humanos le acusó de beber demasiado, Gizman le levantó de su swoop con una mano. Kungurama entonces usó su truco mental jedi para que Frutchoo dejase de pedir el impuesto y que después invitase a todos a una taberna.

Más tarde, el mandaloriano Chuzo noqueó a un clon y lo ató a un árbol del bosque. Cuando llegó el Comisionado y saludó a Kungurama, Chuzo le disparó un dardo letal. El joven jedi decidió perseguir al francotirador, para lo cual "tomó prestada" la swoop de Gizman. Gizman se dio cuenta e intentó detenerle; cuando no pudo, avisó a sus compinches para que le persiguiesen en sus swoops, él corriendo detrás. Viéndose repentinamente perseguido por el jedi y cuatro pilotos, Chuzo preparó una granada. El jedi se dio cuenta e intentó proteger a los otros pilotos, pero no lo consiguió y sólo Gizman sobrevivió, con una herida en su bíceps izquierdo que pronto se ampollaría. Chuzo se subió a una moto jet y echó a correr hacia su nave.

Kungurama persiguió a Chuzo en la swoop de Gizman, pero se detuvo cuando encontró a Rompedor inmovilizado para liberarlo. Cuando intentó retomar la caza, Gizman le había alcanzado y estaba agarrando la popa del vehículo para que no pudiese arrancar. Gizman estaba enfadado con el francotirador porque le había estropeado su swoop (no parecía afectado por la muerte de los otros swooperos), así que, al saber que el muchacho también quería detenerle, se unió a la persecución, montando con Kungurama. Eso sí: El gigante se sentaría a los mandos, con Kungurama de paquete delante de él. Gizman impresionó al joven jedi cuando pudo seguir el rastro de la moto jet oliendo los gases de escape de la moto jet.

El swoop llegó al borde del bosque, emergiendo a una llanura de yerba con una meseta rocosa a lo lejos. Gizman comprendió que Chuzo iba al cañón Roca Rota, que era peligroso; pero con una chanza para su compañero de viaje, puso rumbo allí.

Chuzo efectivamente había dejado su nave en el cañón. Esperaba ser perseguido por el jedi, y le sorprendió ver al gran piloto de swoop; sólo después su aguda vista notó al pequeño jedi. Comprendiendo que le atraparían en cuestión de segundos, Chuzo tiró doce granadas compactas de impacto al suelo, a modo de minas. Kungurama no se imaginaba que Gizman pudiese ir en zigzag para evitarlas todas; y Gizman ni siquiera lo intentó. En vez de eso, lanzó su swoop en ascenso pronunciado y, cuando empezaron a explotar las granadas más cercanas, aprovechó su impulso mientras forcejeaba con los controles para mantener el control. Sólo después hizo un picado para volver a la altura del suelo, pero a partir de ese momento flotó su swoop lo más alto posible para evitar estos problemas.

Gizman siguió la moto jet hacia un barranco y, cuando tuvo a su enemigo en el alcance visual, soltó una mano de los controles para coger una pistola bláster. Su disparó falló porque Chuzo viró en seguida en cuanto vio la sombra de la swoop. El mandaloriano devolvió el fuego, apuntando directamente al pecho de Gizman; y ése era el momento de que Kungurama pudiese hacer algo: Encendió su sable láser y desvió el tiro. Gizman se sorprendió al ver que era un jedi, y se preocupó de que fuese a por el propio Gizman por delitos pasados. Kungurama no estaba interesado en eso, pero pidió a Gizman que no matase al mandaloriano, porque quería interrogarle.

Chuzo aprovechó para escabullirse, pero la nariz de Gizman recuperó el rastro. Gizman se dio cuenta de que su enemigo había cogido un camino sin salida, pero Kungurama percibió peligro. Efectivamente, Chuzo había girado en U y, rifle alzado, confrontaba a sus adversarios. Gizman estaba encorvado hacia adelante, con ambas manos en los controles, así que Kungurama no podía alzar el sable esta vez. El disparo de Chuzo dio a Gizman en la zona superior del pecho, haciéndole aullar de rabia y dolor. Un segundo disparo hizo explotar los mandos de control de la swoop. El vehículo dañado cayó al suelo. Kungurama intentó salvar a Gizman, pero fue Gizman el que agarró a su joven amigo con su codo izquierdo para saltar de la swoop. El vehículo explotó al golpear el suelo, y Gizman y el jedi rodaron hasta parar en un parche de yerbas muertas. Gizman absorbió la mayor parte del impacto.

Kungurama estaba boca arriba, sobre el pecho de Gizman pero atrapado por el peso del brazo derecho de éste. Viendo que Gizman no se movía, Kungurama comprobó que estuviese vivo. Chuzo volvió a atacarles, pero la oportuna llegada del Arpía dio a Kungurama un refuerzo óptimo. Chuzo decidió retirarse, pero antes se cubrió golpeando las yerbas con un lanzallamas para poner a Gizman en peligro. Kungurama hizo que sus clones subiesen a Gizman a la nave. Un clon, Nudillos, era reacio a hacerlo, pero obedeció las órdenes; y un droide de combate aliado, Cuchilla, lo ató a la cubierta junto al inconsciente Rompedor porque no había una litera lo bastante grande.

Chuzo lanzó su retrocohete al Arpía, sacudiendo la nave. Kungurama se negó a permitir que evacuasen a Gizman, pese a que desequilibraba la nave. Peor todavía: Chuzo consiguió subirse a su nave clase Perseguidor y enfrentó al Arpía, obligándolos a aterrizar cerca del puerto espacial entre llamas. Sin embargo, la nave de Chuzo también explotó. Kungurama corrió a comprobar como estaba los heridos; pero Agudo y Nudillos ya estaban soltando a Gizman, y Rompedor estaba despierto.

Gizman recuperó la consciencia, y admitió que podría haber sufrido una concusión porque veía cuádruple. Kungurama le explicó que eran clones aliados, y que el francotirador había muerto. Satisfecho con el resultado, pero con un enorme dolor de cabeza, Gizman decidió "descansar los ojos un momento" y se echó a roncar.

Un oficial del puerto espacial llegó a intentar arrestar a Gizman, acusándole de todo lo sucedido ese día, y afirmando que nadie lloraría a la banda (Ya saben, ¿esa banda que cobraba extorsión a los pilotos sin que las autoridades les hubiesen detenido?). Kungurama respondió por las acciones de Gizman, pese a lo cual el hombre pretendía enviarle a una prisión de otro mundo. En cuanto el burócrata se hubo marchado, Kungurama hizo que todos se fuesen en TL-1800 Suwantek de Sommilor, con un arranque el frío. Nudillos y Agudo preguntaron si dejarían atrás a Gizman; pero Kungurama simpatizaba con el swoopero: Sospechaba que Gizman había tenido una vida difícil y que merecía una oportunidad; y también, que estaría agradecido si no despertaba en prisión. Kungurama confiaba en su instinto para esto, y además Gizman le había salvado la vida.

La nave despegó llevando consigo a Kungurama, Gizman, cuatro clones, los tres cadáveres de Kynachi y un comando droide; la capitana del Arpía quedó atrás por voluntad propia. Pusieron rumbo a Depósito Bilbringi, siguiendo pistas que había encontrado Cuchilla en los restos del asesino. Kungurama hizo poner a Gizman en un banco tras la consola de carga, con los tres cadáveres en una cámara hermética. Gizman rápidamente se acabó las provisiones de la nave, y propuso conseguir más comida en Bilbringi. Sin embargo, en la intimidad, Gizman dio las gracias a Kungurama por librarle de la cárcel.

Sucedió que Depósito Bilbringi había sido tomado por la Tecno Unión para fabricar naves bajo el mando del Supervisor skakoano Umbrag, con doce droides de combate a su cargo. Los Separatistas también usaron esa base para que el Conde Dooku retuviese al jedi capturado Ring-Sol Ambase, maestro de Kungurama, con el fin de manipularle; de hecho, las pistas obtenidas sugerían que Ambase estaba allí, y por eso Kungurama quiso investigarlo.

Rompedor sospechaba que les hubiesen preparado una emboscada en Bilbringi. Gizman replicó que nadie estaba preparado para alguien como él, y que protegería a su pequeño amigo Kungurama. Rompedor sarcásticamente le dio la razón. En cuanto vieron la nave de Umbrag, un viejo enemigo de Kungurama, Gizman se mostró predispuesto a zurrar la badana al tal Umbrag, sin siquiera conocerle. La nave de Kungurama aterrizó, desoyendo un falso aviso de cuarentena y abriendo fuego.

Cuando Umbrag supo de la invasión, el enemigo estaba a las puertas... literalmente. Uno de sus droides reportó desde el pasillo los detalles, y entonces fue interrumpido, eh, permanentemente. La puerta se abrió y entró Kungurama con el monstruoso Gizman. Viendo ese enemigo, Umbrag se desmayó, y Gizman lo cargó sobre su hombro, camino a la rampa de abordar el carguero para meterlo en la bodega.

La batalla fue rápida: Once droides habían sido abatidos; el último estaba en paradero desconocido. Kungurama informó al mando, y éstos enviaron un crucero para llevarles a Coruscant de modo que la nave de Sommilor pudiese ser devuelta a Kynachi. Mientras Kungurama lamentaba no haber podido salvar a Sommilor, Gizman, con muy poco tacto, pidió que fuesen a buscar comida. Gizman estaba intentando llenar aún más su panza cuando Kungurama se reunió con su interés romántico Aristocra Sev'eere'nuruodo del Imperio Chiss, que le dio información valiosa, sólo para que ella pareciese ser asesinada poco después por la nave del maestro Ambase, que estaba convencido de que Kungurama había caído en el lado oscuro. Por último, mientras Gizman estaba a bordo, en la plataforma el droide de combate superviviente, antes de ser destruido, consiguió disparar y herir gravemente a un clon, Parlanchín (pero consiguieron estabilizarle).

Mientras tanto, Gizman y Cuchilla encontraban, en un camarote de la nave de Sommilor, a tres hombres atados y amordazados que afirmaban ser Sommilor y sus tripulantes, Pikkson y Sunmantle. Salió a informar a Kungurama de que deberían ver eso, pero desestimaron su mensaje porque estaban ocupados intentando salvar la vida de Parlanchín. Por suerte, llegó un crucero clase Consular de la República, con médicos y equipo para curar a Parlanchín, y con un maestro jedi: El general nautolano Kit Fisto.

Oyendo el informe de Kungurama, Fisto se sorprendió al descubrir que el padawan se había llevado al swoopero como aliado. Cuchilla insistió en interrumpirles para explicar, una vez más, que Gizman había encontrado a tres hombres vivos que afirmaban ser la delegación de Kynachi. Fisto y Kungurama fueron a verles, y les encontraron con Gizman. Las presentaciones fueron tensas: El saludo de Gizman era demasiado casual para un general, y Fisto cerró sus fosas nasales ante el intenso olor corporal de Gizman. De hecho, el clon Nudillos teorizó en broma que los kynachianos habían quedado inconscientes no por una agresión, sino por el hedor de Gizman.

Sommilor explicó que le habían raptado antes de reunirse con Kungurama, y concluyeron que un sospechoso claro era la Tecno Unión, enemigo natural de Sommilor. Gizman propuso preguntar a su prisionero Umbrag, de la Tecno Unión y, antes de que nadie interviniese, empezó un interrogatorio entrando a presión en la cámara que servía de celda de Umbrag. El skakoano intentó apelar a sus derechos como prisionero de guerra, pero Gizman ignoró sus súplicas, y las de Kungurama. El monstruoso piloto exhibió su enorme puño sugiriendo que servía de detector de mentiras, porque golpeaba invariablemente a cualquiera que mintiese en su alcance, y eso amedrentó a Umbrag. Gizman hizo unas rápidas preguntas, estallando sus nudillos y apretando sus dientes. Umbrag negó haber secuestrado a Sommilor, directa o indirectamente. Gizman dudó de su palabra; Umbrag, atemorizado, intentó protegerse con sus manos esposadas sin retractarse y entonces Gizman quedó satisfecho y salió por la puerta, dejando que Umbrag recuperase el aliento. Fisto recomendó métodos menos agresivos, pero agradeció a Gizman su colaboración.

Rompedor analizó los cadáveres de los falsos kynachianos y descubrió que llevaban piel sintética. Gizman sospechó que un plan rebuscado sólo podía ser cosa de la organización criminal Sol Negro. Así, él corrió hacia los difuntos, antes de que Fisto pudiese impedir que manipulase las pruebas, y retiró la falsa piel del brazo derecho del supuesto Sommilor para mostrar un tatuaje de la banda. Gizman además explicó que Sol Negro era una organización temible y que había sido bueno que muriesen antes de perjudicar a Kungurama.

El grupo siguió rumbo a Coruscant: Sommilor seguía queriendo su reunión con la República; el erudito jedi anx Harro Kelpura quería hablar con Kungurama sobre la cápsula de escape en que Kungurama había sido encontrado de bebé por Ambase; y Gizman hizo guardia frente a la celda de Umbrag (en vez de tomarse una ducha, que habría sido una labor más agradecida; los clones empezaban a dejarse los cascos puestos en su presencia para aprovechar el filtro de respiración). Mientras tanto, Darth Tyranus manipulaba a Ambase para hacerle creer que Kungurama quería recuperar su cápsula de escape por motivos malvados; el maestro Ambase, junto con el verdadero Agudo, viajaba a Coruscant en un carguero clase Corona para detener a Kungurama, con la ayuda discreta del cazarrecompensas duro Cad Bane, contratado por Tyranus. Además, Dooku encargó a Ventress que ordenase al falso Agudo eliminar a Umbrag, y consiguió ocultar la implicación de la Guardia de la Muerte haciendo que se encontrase el cadáver de un coreliano con armadura mandaloriana en Vaced, para sugerir que Chuzo no era un verdadero mandaloriano.

En su celda, Umbrag fingió una emergencia médica para que redujesen la guardia y le diesen ocasión de tomar como rehén a quien se acercase a ayudarle. Umbrag mantenía un bláster oculto en su guantelete izquierdo y, en el momento clave, agarró a Kungurama para estrangularle y disparó a Gizman en la parte superior del pecho, noqueándole. Agudo y Cuchilla, sin embargo, dispararon a Umbrag y le mataron al momento. Cuando Gizman despertó, le animó saber que Umbrag no había sobrevivido. Kungurama, por su parte, se preocupó por el estado de su amigo Gizman.

Cuando llegaron a Coruscant, Kungurama pidió a Gizman y Cuchilla que se quedasen en la nave; éste no le discutió, pero aquél sí, sobre todo porque volvía a tener hambre. Kungurama volvió con el maestro Kelpura porque necesitaban una nave para ir a su laboratorio; y resultó que en ese momento sonó una alarma porque alguien (concretamente el maestro Ambase) estaba intentando robar la cápsula. Par acabar de arreglarlo, el carguero fue atacado, literalmente embestido, por la lanzadera de Cad Bane, causando que el equipo de aterrizaje se enredase en restos de metal. Kungurama envió a Cuchilla y a Gizman a separar trozos de metal, para que el carguero volviese a volar.

Kungurama se mantuvo justo en la escotilla abierta, aunque Gizman le recomendaba que no lo hiciese. Bane disparó un proyecto al carguero, haciendo que Kungurama, Cuchilla y Agudo perdiesen pie y cayesen a un tejado contiguo. Eso llevó a un doble duelo de Kungurama contra Ambase, y Agudo contra el falso Agudo. Cuchilla intentó ayudar, pero murió en el intento.

El carguero se recuperó y Gizman llegó como refuerzo, con Nudillos y Rompedor. Gizman recogió a Kungurama, que había sido catapultado por la telekinesis de Ambase, y después apuntó su pistola al claro enemigo. Disparó a Ambase, pero éste deflectó su disparo con su sable. Entonces Kungurama pidió a Gizman que detuviese su ataque e intentó convencer a su maestro del problema. Lo logró mientras Agudo mataba a su imitador y revelaba su naturaleza alienígena. Tras esta extraña victoria, el grupo se retiró a un centro médico para recuperarse de sus heridas.

Gizman más tarde irrumpió en los barracones con contenedores de comida. Afirmó que una camarera del distrito Co-Co se los había dado, pero le había pedido que no volviese a su restaurante hasta que se hubiese dado un baño. Mientras empezaban a comer, Kungurama llegó con noticias de una nueva misión que le había encomendado el Maestro Yoda. Gizman aceptó, pero se llevó las costillas.

No hay más detalles sobre esta misión, pero conocemos otra aventura de Gizman con su amigo Kungurama. Todo empezó cuando, en 22 ABY, el pirata neimoidiano Dool Pundar estaba atacando envíos de cerebros droides de Noggox el Hutt a los astilleros republicanos de Fondor. Noggox pidió escolta jedi para sus transportes, y el Canciller Palpatine convenció a Yoda para que encargase la tarea a Kungurama, apelando a sus éxitos (incluyendo la victoria en Bilbringi con la colaboración de Gizman). Al recibir el encargo, Kungurama decidió que Gizman le acompañaría y fue a buscarle.



Gizman y su amigo Nuru Kungurama.

Gizman estaba en el Restaurante de Dex, propiedad del besalisko Dexter Jettster, flirteando con su camarera humana Hermione Bagwa con una demostración de fuerza. Bagwa, ofendida, insinuó que Gizman no sabía leer, y él, avergonzado, quedó sin palabras y abandonó el local. Kungurama le interceptó y le invitó a la misión, ofreciéndole una ocasión de zurrar a los piratas si éstos no se rendían. Gizman aceptó, pese a que los clones, sobre todo Rompedor, le daba por un bala perdida. Kungurama sin embargo creía que estaba dando a Gizman una ocasión de enderezar su vida.

Mientras tanto, Darth Tyranus hacía asesinar a Noggox el Hutt y a su séquito, pero dejando intacto el cargamento. Kungurama y su grupo llegaron al lugar de una masacre en una lanzadera clase Nu e informaron, para que enviasen a Inteligencia Clónica a analizar el lugar. Yoda además le mandó a otro jedi de apoyo, Kit Fisto. Cuando Fisto empezó a dar órdenes, Gizman le protestó e incluso le empujó con un dedo. Fisto reconoció que debía ceder el mando a Kungurama porque era la misión de éste; y el grupo partió hacia Fondor con el cargamento. Los clones iban en la nave de Kungurama; Gizman viajaba en un carguero con Fisto y Kungurama, y se echó a dormir en seguida, soñando sobre swoops. Fisto explicó a Kungurama que apreciaba cómo había hecho amigos fuera de su círculo habitual.

Al salir del hiperespacio en Fondor, despertaron a Gizman (que se quejó por ello) y entonces fueron atacados por la nave pirata de Pundar y doce droides. Kungurama envió a Gizman al puesto de artillero. Al descubrir que había al menos un jedi en el carguero, Pundar decidió centrar el fuego en esa nave; y Gizman se dio cuenta de que les estaban abrumando. Kungurama llevó al carguero en rumbo de colisión al hangar de la nave nodriza de Pundar, con sacudidas que impresionaron a Gizman, y realizaron un abordaje.

Pundar y su gente huyeron en cápsulas de escape. Aunque Gizman proponía seguirles, Fisto sólo alertó a la Patrulla Espacial de Fondor, porque la misión era llevar el cargamento a Fondor. Cuando consiguieron hacerlo, Yoda encargó a Fisto que buscase a Pundar mientras el resto del grupo volvía a Coruscant; Gizman se disgustó porque el encargo de Fisto parecía más violento, ergo más divertido que el suyo.

En la superficie, se les acercó una atractiva twi'lek que afirmaba ser Kovuta Pindi, voluntaria de Ayuda Infantil de la República que intentaba escoltar a un grupo de huérfanos hasta Foless, pero el carguero acordado no se había presentado. Ella alegaba haber sido estafada y les pedía ayuda por haber oído que eran jedis. Gizman, fascinado por la belleza de la dama, le prometió llevar a los niños a Foless, e incluso tapó la boca a Kungurama literalmente cuando éste intentó discutirle. Kungurama aceptó hacer la escala, al saber que sólo les retrasaría una hora.

A bordo de la nave, mientras los niños correteaban, Gizman intentó ser educado con Pindi y alabó sus ojos, ofendiéndola: Un niño especialmente soez, el trandoshano Charky, que intentaba que Gizman le leyese un cuento, le señaló que Pindi era ciega. Pindi se dio cuenta de que Gizman no lo había notado y ensalzó su dulzura. Charky insultó a Pindi y Gizman, enfurecido, lo encerró en una despensa diciendo a los otros niños que lo había tirado al espacio exterior. Los niños se echaron a llorar; Gizman, creyendo que lo tenía controlado, explicó lo sucedido y reconoció haber metido la pata. Después intentaría congraciarse con Charky para impresionar a Pindi.

En Foless, Pindi se despidió bruscamente y, al hacerlo, mencionó que llevaría a los niños en un vehículo verde. Gizman se dio cuenta de que Pindi había mentido al decir que era ciega (porque entonces no habría reconocido el color), y por tanto podría haber mentido en más aspectos (Por ejemplo, no mencionó que el piloto del bus verde era Pundar). La Autoridad del Puerto Espacial de Foless confirmó que Pindi había raptado diez huérfanos en Abregado. Antes de que Kungurama decidiera perseguirles, Gizman robó la swoop de un policía para hacerlo; Kungurama y los clones fueron detrás, en swoops prestadas (No acabo de entender porqué la de Gizman es robada y las otras son prestadas, pero venga).

El problema era que la swoop policial reglamentaria no estaba preparada para la masa de Gizman ni para los intentos de éste de ascender; apenas puede Gizman evitar obstáculos, hasta que finalmente choca con un camión y es catapultado. Durante su breve vuelo, vio a los niños en el bus de Pindi (y éstos a él; se preguntaban si Gizman intentaba matar nuevamente a Charky); y al aterrizar, fue recogido por Kungurama en su vehículo. Juntos, persiguieron el autobús. Kungurama intentaba convencer a Gizman de que atendiese a razones y permitiese a Pindi explicarse; pero la confianza de Gizman ya estaba perdida.

Kungurama saltó de la swoop al bus, dejando a Gizman en los controles de la swoop. En cuanto Kungurama se dejó ver, Pindi atacó a su cómplice Pundar a bastonazos, fingiendo ser una prisionera también. Sus golpes causaron que Pundar perdiese el control del bus y el vehículo, desviado, chocó con la swoop de Gizman, causando su explosión (Bueno, era la swoop de Kungurama... Bueno, la swoop de un poli, que Kungurama tomó prestada... Yo esto no lo acabo de entender). En todo caso, Gizman saltó sobre el bus, irrumpiendo y noqueando a Pundar. Kungurama entró a continuación para encargarse de los controles.

Gizman se mostró agresivo con Pindi, mientras que ella interpretó el rol de damisela desvalida. Después de detener el vehículo, Gizman amenazó con retorcer los lekkus de Pindi si ella insistía en mentir. Perpetuando su falacia, Pindi alegó no ser totalmente ciega. Entonces llegó la lanzadera con los clones, y se descubrió el ardid: Pindi estaba proveyendo de esclavos a Pundar, que acabó confesando. Cuando llamaron a Fisto, Gizman volvió a sonreír: Al final, la misión divertida no había sido para Fisto, sino para ellos.

Pero Pindi escapó, tomando a Charky como rehén con un cuchillo. Gizman lamentó entonces no haber registrado a la chica, lo cual le revela como más caballeroso de lo que parecía. Sin embargo, Charky se liberó mordiendo el brazo armado de Pindi.

Pindi intentó entonces huir a un bosque cercano, perseguida por Gizman y Kungurama. Ella pasó un cartel de peligro que, con sus problemas de visión, no pudo leer; Gizman entendió la palabra marcada, y continuó su persecución. Pindi se detuvo ante un pantano, se giró para encarar a Gizman y le apuntó con una pistola, jurando matarle por haber arruinado sus planes. Kungurama y Gizman, viendo a un enorme depredador nativo tras ella, intentaron advertirle, pero ella creyó que era un farol. La bestia devoró a Pindi. Kungurama creyó que Gizman se sentía triste por lo sucedido, pero éste estaba satisfecho. Por otro lado, Gizman decidió no interesarse más por las mujeres hermosas, jurando repudiar incluso un baile con una bella zeltron si se presentase la ocasión.

Al volver a Coruscant, sin embargo, Kungurama fue al Restaurante de Dex y explicó a Bagwa que Gizman había rescatado a un grupo de niños huérfanos con riesgo para su propia vida. Después, Kungurama llevó al local a Gizman, casi a rastras, y Bagwa le recibió como un héroe, pagándole la cena entre sonrisas.

Perdemos de vista a Gizman durante casi un cuarto de silgo. Las Guerras Clon terminaron en 19 DBY y, como es bien sabido, los jedi desaparecen: Casi todos mueren violentamente; algunos se ocultan o caen en el lado oscuro. Los asociados de los jedi no son perseguidos con tanto ahínco, sin embargo.

Veintidós años después de la misión de Fondor, Gizman operaba en Tatooine como líder de una banda de swooperos criminales que trabajaban para el jefe criminal Jabba el Hutt. Eran lo peor que se podía encontrar en Mos Eisley, que ya es decir: Asesinos, forajidos, ladrones, matones, rufianes, vagos y pilotos de swoop en horas bajas conformaban el grupo criminal, con ropas harapientas personalizadas que sistemáticamente llevaban la insignia del clan Desilijic cosida y bien visible; muchos pandilleros, incluido Gizman, también llevaban un tatuaje con el mismo símbolo. Usaban motores swoop muy modificados y rugientes, y la mayoría llevaban gafas protectoras y cascos de impacto, dándoles un aspecto que algunos colonos valientes ridiculizaban por lo bajini. La mayoría llevaban un bláster y además algún tipo de arma de cuerpo a cuerpo, como un cuchillo en una funda en su bota, una cañería de duracero o palanca metálica, o un palo de algún tipo. Casi todos eran audaces y estridentes, pero sólo se mostraban violentos cuando tenían ventaja contra un enemigo; de lo contrario, su opción era la retirada.

Malhumorados y abusones, los swooperos de Jabba realizaban trabajos para el jefe criminal: escoltaban a Jabba y a sus subordinados cuando viajaban del palacio al almacén de Jabba en Mos Eisley, trabajaban como "forzadores" acosando a la gente en las dunas entre Mos Eisley y Wayfar, llevaban a cabo un negocio de extorsión recogiendo el pago de "protección" a vendedores acobardados y granjeros de humedad, sembraban el caos en los asentamientos y vigilaban las actividades del puerto espacial en nombre de Jabba. Cuando no estaban ocupados con estas tareas, pilotaban su swoops entre las dunas, aterrorizaban a los jawas o iban de fiesta a las cantinas.

Gizman consiguió ser capitán de la banda de swooperos, manteniendo a raya a sus subordinados con bravatas e intimidación, y reclutando nuevos y despreciables miembros en las malas calles con promesas de swoops potentes, muchas armas y acceso fácil a varios vicios. La personalidad dominante y feroz de Gizman, y la presión del grupo, solían bastar para llevarles a actividades violentas; aunque controlarles y hacer que se relajasen era más complicado. Gizman controlaban a su banda con normas rudimentarias, similares a las de un cacique bárbaro sobre una horda que fuese su destacamento personal. Los otros pilotos se veían obligados a reír los chistes malos de Gizman, dejarle conducir en vanguardia y abstenerse de eclipsarle en modo alguno, so pena de que Gizman les disparase sumarísimamente. Se especula que el liderazgo de la banda se heredaba cuando un candidato más fuerte y poderoso reemplazaba al líder anterior, y que había sido así como Gizman consiguiera el poder.

Los pilotos debían responder a cualquier capricho de Jabba y reportar regularmente ante él en persona; pero su actitud barbárica y comportamiento alborotador e insolente no solía estar a la altura de las circunstancias: Los swooperos solían entrar en el palacio y recorrer los pasillos sobre sus motos, atormentando y asaltando a los sirvientes del Hutt; el séquito y los mercenarios en su nómina encontraban estas payasadas divertidas. La arrogancia temeraria de Gizman a menudo ponía a prueba la paciencia de Jabba, que dependía de su autoridad: A veces Jabba regañaba a Gizman de palabra, y otras veces le recordaba lo tenue de su posición ejecutando a uno de sus pilotos menos importantes. Esto solía bastar para intimidar a Gizman, al menos hasta que él se volviese a relajar pilotando por las llanuras. Gizman hacía lo posible por respetar a Jabba, dirigiéndose a él con epítetos como "el gordo Jabba" y "El Hinchado", pero sencillamente no estaba en su naturaleza. Los pilotos de swoop y el mismo Gizman se labraban una reputación, siendo reconocidos por el sobrino de Jabba, Gorga el Hutt, y por los lacayos de éste.



Los swooperos irrumpen montados en el palacio de Jabba.

Como he mencionado, varios pilotos de swoop dejaban el grupo permanentemente, ora porque Gizman les disparase en la cara, ora porque Jabba se los entregase a su monstruo; ora porque morían en actividades violentas, ora porque Jabba les destinaba a otros trabajos. En general la banda tenía aproximadamente una docena de miembros, con identidades variables excepto por el líder Gizman. Por ello Gizman solía buscar nuevos miembros con frecuencia.

Algunos pilotos de swoop notables eran Hombre Hacha, un probable humano sediento de sangre que llevaba un enorme vibrohacha y atacaba con la muletilla de "Hacer buena muerte"; Vol Hamame, un piloto que se escindió de la banda de Gizman de forma nada amistosa para seguir trabajando en el mundillo criminal de forma independiente; y un aqualish, un morseeriano y un nikto de identidad desconocida.



En esta imagen vemos a algunos de los otros swooperos; y a Dash Rendar escuchando en una esquina.

Pero el piloto único más importante de la banda de Gizman era Spiker, llamado así por su armadura dotada de púas que le cubría incluso la cara. Spiker era quizá el único piloto que no se sentía acobardado por la personalidad de Gizman, y demostró tener astucia y talento para estrategia y tácticas, convirtiéndose en el segundo de Gizman por méritos propios, siendo un excelente recaudador e instigador de miedos. También era un excelente piloto de swoop que tendía a arriesgar su vida en maniobras peligrosas que ocasionalmente acababan en choques, y a empezar peleas con gente más grande que él. Al combinar esto con su aguda risa de maníaco, Spiker daba la imagen de ser un demente, quizá con problemas de aprendizaje, quizá con daños cerebrales por los choques.

En realidad, Spiker fingía todo esto. Jabba no confiaba del todo en Gizman y temía que éste olvidase quién era su auténtico amo, así que metió a Spiker en la banda para que éste fuese su espía, reportando al Hutt todas las actividades de la banda, especialmente aquéllas de las que Gizman no informase a Jabba y de posibles peligros como intentos de asesinato. Spiker reía los chistes de Gizman, pero en realidad le despreciaba a él y al resto de la banda, a quienes consideraba sólo palabrería sin sustancia. Spiker trabajó con Gizman durante años, sin que Gizman descubriese el engaño.

A cambio de esta labor, Jabba proporcionó a Spiker su armadura de púas para mantener bien protegido su cuerpo y su identidad. Bajo su casco, Spiker era un varón de piel azul y ojos rojos, lo cual sugería especie chiss (y era correcto). Además de la armadura y la swoop, Spiker llevaba una pistola bláster pesada, un bláster de bolsillo y dos cuchillos. Spiker era un magnífico luchador con y sin armas, intimidante y un excelente piloto, incluso mejor que Gizman. También sabía de seguridad y primeros auxilios.

Aunque Gizman no era ningún genio, mantenía sus enormes orejas abiertas y estaba atento a su entorno, sabiendo que en cualquier momento alguien podría dar información valiosa. Por ejemplo, Gizman oyó a Jabba decir que había escondido una nave bien abastecida en Montaña de Cristal, para usarla en una ruta de escape si alguna vez él caía en desgracia. Gizman no hizo nada al respecto de esto, pero tomó nota del dato para futuro uso.

Se especula que poco después de la batalla de Yavin, Gizman y sus huestes viajaron a Mos Eisley a recoger un dinero y una cantidad de especia que el viejo contrabandista twi'lek "Zumbador" debía a Jabba. Encontraron al sujeto en un pequeño patio donde se juntaban varios callejones; Zumbador empujaba un carro repulsor con una caja metálica. Los swooperos le rodearon en seguida y empezaron a insultarle por encima del rugido de sus motores, hasta que Gizman les hizo callar alzando una mano. Gizman se acercó a Zumbador de forma intimidante y, echándole el rancio aliento en la cara, exigió la propiedad de Jabba. Los otros swooperos le apoyaron gritando insultos especiesistas a Zumbador.

Entonces Gizman se fijó en la caja, y esa atención incomodó a Zumbador. Gizman exigió a Zumbador abrir la caja, bajo amenaza de violencia, y descubrió que estaba llena de especia ryll. Zumbador explicó que estaba en proceso de vender esta caja a una contrabandista para obtener el dinero que debía a Jabba, y después podría conseguir una nueva caja; suplicó a Gizman unos días más para pagar su deuda con Jabba. Gizman alzó a Zumbador por el cuello del chaleco, resistiéndose a aceptar excusas, y le empujó contra la caja. Entonces convocó a su lado a Spiker con un chasquido, y le encargó apalizar a Zumbador… pero inmediatamente después reconoció que sólo estaba asustándole.

Spiker, en su labor de agente infiltrado, incitó a Gizman a desafiar las órdenes de Jabba: Le propuso dar más plazo a Zumbador, a cambio de una muestra de especia. Gizman le ofreció dos días, que dedicaría a planear daños brutales a Zumbador, y tomó un puñado de ryll para consumo inmediato, vertiendo parte del polvo en su chaleco y en su swoop, sin que Zumbador osase intervenir. Gizman se reclinó sobre su asiento satisfecho, y Spiker tomó la palabra: El pacto estaba realizado. Los swooperos se retiraron. Es probable que volviesen por Zumbador, pero no hay constancia de ese nuevo encuentro.



Gizman con Spiker.

Después de la batalla de Yavin, Gizman reposaban en la cabaña abandonada de Ben Kenobi con dos de sus pilotos, Spiker y Twitch, ambos de piel azul, después de buscar algo de valor en su interior. Ahuyentaron a unos jawas y Twitch mencionó su desprecio por los droides. Entonces Gizman propuso tomar una copa en la Cantina de Chalmun antes de volver al Palacio de Jabba.

Sucedió que el destructor estelar clase Victoria Diezmador se acercaba a Tatooine con el ejército droide de 12-4C-41 ("Unodós"), que buscaba al droide interrogador EV-9D9 para vengarse de ella. EV-9D9 estaba en el Palacio de Jabba. Unodós y sus droides irrumpieron en la cantina de Chalmun y atacaron a los pilotos de swoop, exigiendo que revelasen dónde estaba el palacio de Jabba. Gizman y su gente defendió la cantina, pero descubrieron que Unodós había robado un swoop e iba al palacio de Jabba. Un piloto, posiblemente Twitch, persiguió al droide, interceptándole y derrotándole en el Cañón del Mendigo; el piloto fue capturado, pero consiguió enviar un mensaje al Palacio de Jabba para advertir de que iban a ser atacados por una barcaza cargada de droides. Los otros pilotos advirtieron a Jabba de un intento de asesinato.

Esto permitió a Jabba preparar una defensa y repeler la barcaza. Unodós consiguió escapar, y Jabba puso una recompensa por sus droides para que los cazarrecompensas se ocupasen de ellos. Similarmente, el piloto capturado consiguió escapar de Unodós. Jabba entonces quedó contento con sus swooperos por el aviso. Los swooperos descubrieron finalmente que Unodós en realidad había ido a por EV-9D9, pero decidieron no mencionar este detalle a Jabba.

En 3 DBY tuvo lugar un encuentro decisivo que cambiaría la vida de Gizman para siempre. Él y sus compinches entraron en Mos Eisley a lomos de sus swoops para una tarde de bebidas alcohólicas, intimidando a los viandantes; Gizman de hecho frenó su vehículo empujando a un jawa de una patada, entre ánimos de Spiker. Entonces un extraño interceptó a Spiker, derribándole de una patada. Se trataba de un humano musculoso, apenas vestido y con una larga coleta castaña. Sus actos habían sido una declaración de conflicto; Gizman sacó su bláster y le apuntó a la cara. En un instante, los otros swooperos estaban apuntando al recién llegado con sus propias armas, pero éste estaba apuntando a la cara de Gizman. Incluso si los swooperos disparaban, el desconocido podría matar a Gizman de un solo disparo. Antes de que el conflicto escalase, el hombre se presentó como "Jix", amenazando con que ése sería el último nombre que oyese Gizman.

Los swooperos se abalanzaron sobre el tal Jix, vapuleándole con puños y cadenas. Gizman entonces levantó a Jix del suelo por sus solapas, y admitió que el truco sucio usado por Jix le había impresionado favorablemente. Se ofreció a perdonarlo todo a cambio de que Jix le invitase a una copa y, notando su aspecto vagabundo, le ofreció un empleo trabajando para Jabba, resaltando lo interesante de la profesión. Spiker, aún enfadado por haber sido atacado, aceptó a desgana.



Gizman y Jix.

Grande, silencioso y veloz, Jix afirmaba ser un técnico naval expulsado del carguero pesado en que había servido por noquear al capitán en la cubierta, lo cual había sido considerado insubordinación y no asalto. Todo esto era mentira: Wrenga Jixton era un espía enviado por Darth Vader para monitorear las actividades de Jabba el Hutt y asegurarse de que sus intereses personales no fuesen amenazados. En concreto, Vader quería capturar con vida al piloto rebelde Luke Skywalker. El rival de Vader, el jefe criminal de Sol Negro Xizor, quería perjudicar a Vader y para ello puso una recompensa por Skywalker, muerto, sin que Vader o Jixton lo supieran. Xizor informó de este negocio a Jabba, y el hutt decidió encargar el trabajo a sus swooperos.

Jabba convocó a la banda de Gizman en su palacio. Ellos irrumpieron en sus vehículos, con la apuesta de que el último en llegar a Jabba pagaría una ronda. Una vez se personaron ante Jabba y su séquito, incluido el bufón Salacious Crumb y la chamán jawa Herat, él les recriminó haber entrado montados, y Gizman jocosamente resaltó la urgencia de la convocatoria. Jabba habría aceptado reunirse con ellos después del desayuno y amenazó con lanzarles al rancor.

Antes de darles la misión, Jabba se fijó en Jix. Él no había llegado a donde estaba sin ser observador, y exigió saber sobre el nuevo. Jix no mostró especial interés en seguir trabajando para Jabba, lo cual era un farol; pero Gizman respondió por él porque, dijo, Jix era una rata womp traicionera y rastrera, con lo que era adecuado para el puesto. Jabba aceptó la recomendación.

Jabba habló de la recompensa por Skywalker, y dijo que el chico había sido visto cerca de la antigua cabaña de Ben Kenobi. Gizman, intentando comer del plato de Jabba (pero el hutt le golpeó la mano con una espumadera), preguntó si quería al piloto con vida; pero el hutt dejó claro que sólo quería su cadáver. Los swooperos partieron hacia Mos Eisley y, antes de ir a la cabaña, hicieron una escala en la cantina de Chalmun para remojar el gaznate.

Allí, Jix hizo abiertamente preguntas, destacando que sabía de la recompensa de Vader por Skywalker. Spiker y Gizman intentaron que se soltase un poco, dejando claro que los swooperos hacen el trabajo sucio, no las preguntas. Gizman incluso bromeó ante sus amigotes con la idea, sorprendentemente precisa, de que Jix era amigo personal de Darth Vader. Después de brindar por la muerte de Skywalker, y prometer cien créditos extra a quien le diese el golpe de gracia, Gizman sacó a su gente del bar. Ellos ignoraban que les había oído el contrabandista Dash Rendar, amigo personal de Skywalker.



Atacando a Skywalker.

Entonces Gizman dirigió a sus tropas hacia la cabaña. Él ordenó que nadie disparase, para que pudiesen pillar desprevenido al piloto. Jix sin embargo decidió abrir fuego y fallar aposta, lo cual avisó a Skywalker de que iba a tener problemas (El droide de Skywalker se escondió dentro de la cabaña); y, cuando Gizman le reprendió por ello, Jix dijo que había creído tener un buen blanco. Skywalker se escondió detrás de un peñasco y, con su nuevo sable verde recién fabricado, rompió la swoop del primer atacante, posiblemente Hombre Hacha.

Sabiendo que no tenían el factor sorpresa, los otros swooperos atacaron. Gizman disparó desde el morro de su swoop. Skywalker esquivó, derribó a un piloto y montó en su swoop pera huir. Gizman ordenó a todos perseguirle. Rendar llegó a la cabaña más tarde, siguiendo el rastro de los swooperos para ir en ayuda de Skywalker.

Skywalker guió a los swooperos a Cañón del Mendigo. Antes de que pudiese llegar, Gizman tuvo a Skywalker en su mira. Jix, dándose cuenta, embistió la swoop de Gizman con el suyo, fingiendo que su timón había fallado. Ambos swoops se estrellaron y explotaron, dejando varados a Jix y a Gizman. Jix se rompió la puerta en el choque.



Jix hace chocar a Gizman.

Spiker tomó el mando de los swooperos, pero Skywalker demostró ser buen piloto y se libró de varios de sus perseguidores. Cuando llegó Rendar como refuerzo, los swooperos reconocieron que estaban superados y convencieron a Spiker para que ordenase la retirada. Rendar entonces explicó a Skywalker que sus enemigos eran sicarios de Jabba el Hutt que le querían muerto.

Pero Gizman y Jix estaban recuperándose, y Gizman se dio cuenta de que estaban en una posición óptima para resolver el problema. El monstruoso swoopero reprochó a Jix su mala suerte y apuntó a Skywalker con su pistola. Gizman aún creía que Jix era un aliado, pero se equivocaba: Jix cogió una pesada piedra del suelo y golpeó a Gizman en la cabeza por la espalda. Gizman cayó de rodillas, inconsciente y con el cráneo abierto, pero vivo. Jix se fue de allí y volvió al palacio de Jabba, donde alegaría que Gizman había muerto en el accidente.

Jabba estaba enfurecido por el fracaso de sus pilotos. Spiker aguantó el chaparrón con dignidad. Cuando Jabba acusó a Jix, él presentó su herida en la pierna como prueba de lealtad y criticó a Spiker por su retirada, sugiriendo cobardía. Después Jix informó a Vader de sus progresos pero, para proteger su identidad secreta, tuvo que matar a un sicario de Jabba; y Jabba acabó convencido de que el culpable había sido uno de los pilotos de swoop. En cuanto Jix tuvo ocasión, durante la entrega del cuerpo crionizado de Han Solo, dejó pruebas comprometedoras cerca de Spiker, que había sido malherido, para cargarle con el muerto.

Gizman fue encontrado por un monje b'omarr con talentos curativos. Este hombre operó a Gizman, curándole con cirugía y reconstrucción craneal que incluía una placa metálica en el cráneo para tapar el agujero; el único problema era que ahora su cabeza recibía ocasionalmente comunicaciones cercanas. Sin embargo, Gizman no volvería a estar en condiciones de pilotar hasta un año después, tras la muerte de Jabba. Durante su recuperación, los monjes revelaron a Gizman que Jix había sido un espía de Darth Vader.

Su estado no era un secreto bien guardado: Aunque Spiker creía muerto a Gizman, el cazarrecompensas coreliano Dengar sabía que Gizman había conseguido sobrevivir al servicio de Jabba. Dengar encontró además restos de la swoop de Gizman y consiguió restaurarla hasta tener un vehículo que pudiese ser usado, reemplazando muchas piezas demasiado quemadas para funcionar.

Spiker también se recuperó a manos de los monjes b'omarr, aunque totalmente aislado del exterior. Sólo en 4 DBY, después de la muerte de Jabba el Hutt, los monjes le permitieron salir y recibir una visita: Gizman, que había conseguido dos swoops. Gizman le explicó cómo se había recuperado (incluyendo el detalle de la placa), el trabajo de Jix como agente de Vader, y que, como Jabba había muerto, quería volver a montar con Spiker. Gizman tenía un plan que le contó en cuanto estuvieron lejos de los oídos de los monjes: Hacerse con la nave de escape de Jabba, armada y protegida, y meterse a piratas espaciales en esa zona del espacio. A Spiker le parecía un buen plan, y pusieron rumbo a Montaña de Cristal

Simultáneamente, Gorga el Hutt descubrió la existencia de la nave, y de su cargamento de ocho valiosísimas urnas funerarias mendacianas de la dinastía Krung temprana. Gorga codificaba ese botín y envió a sus matones a Montaña de Cristal. La gente de Gorga capturó y torturó al guardián asignado por Jabba, el pequeño lizling Onoh, y consiguió abrir el hangar secreto de la nave, preparándola para despegar a continuación. Sólo entonces llegaron Gizman y Spiker.

Gizman entendió en seguida que alguien se les había adelantado; pero no cejó porque, en su mente, el hecho de haber trabajado para Jabba le legitimaba a parte de su herencia. Gizman y Spiker atacaron a los sicarios de Gorga desde sus swoops, con embestidas y patadas, y tirando accidentalmente a Onoh a un foso de mordedores de dunas pero en el proceso rescatándole. Gizman desarmó a uno de sus enemigos y le tiró el rifle a Spiker, que disfrutó masacrando a los demás. El dueño original del rifle acabó enganchado en la proa de la swoop de Gizman, así que él hizo un picado vertical hacia arriba para después soltarle y que cayese a su muerte. Sólo uno de los agentes de Gorga quedaba indemne: Milmit, un mercenario humano que consiguió esconderse.

Gizman y Spiker analizaron su nuevo tesoro: La nave de ataque interestelar Espíritu de Jabba. Onoh les agradeció el rescate, pero presento quejas cuando comprendió que querían llevarse la nave de Jabba. Cuando le dijeron que Jabba había muerto, sin embargo, su resistencia se redujo. Onoh insistió en que Jabba era tan temible que su ira incluso le podría sobrevivir. Spiker fue razonablemente agradable con el inofensivo Onoh, pero Gizman se centró en analizar la nave: Comprobó las armas iónicas y de protones, los rayos tractores e incluso el abastecimiento de comida. Tomó las urnas funerarias por algún tipo de alimento repugnante que podría gustar a Jabba.

Spiker despegó su nuevo crucero de combate. Milmit, el hombre de Gorga, estaba reportando el secuestro de la nave, pero fue incinerado accidentalmente por los motores. Su mensaje fue también oído por la placa metálica en la cabeza de Gizman; así que éste se dio cuenta de que tendrían problemas con Gorga. El plan de Gizman era llegar hasta la órbita y saltar al hiperespacio para que Gorga no pudiese interceptarles; en cuanto estuvieron en el espacio, Gizman celebró la victoria prematura bebiendo jugo de nepoy de Jabba. Spiker decidió reclutar a Onoh para su tripulación pirata, puesto que no podían devolverle a Tatooine con facilidad.

Sucedía que Jabba había dejado una medida de seguridad en la nave: Una inteligencia artificial que controlaba una cinta de seguridad interactiva con el aspecto de Jabba en la pantalla. "La cinta de Jabba" acusó a sus subordinados insubordinados de beber su vino. Aún cuando Gizman presentó el problema obvio de que era una cinta con órdenes que no tenían sentido, porque Jabba estaba muerto, la inteligencia artificial era inflexible: A menos que metiesen un código de seguridad secreto, la nave quedaría paralizada, los sistemas inutilizados, y el oxígeno del puente empezaría a drenarse durante cuatro minutos, con las salidas selladas.



Gizman durante el tiempo del robo de la nave de Jabba.

Entonces apareció el carguero de escolta Nemphas, a las órdenes de Gorga, para interceptar el Espíritu. El capitán del Nemphas les conminó a rendirse, pero la cinta de Jabba no les permitía ni siquiera enviar una respuesta. El Nemphas, pues, disparó y dañó el Espíritu, apuntando a las armas y a los sistemas de gravedad aunque, eso sí, rompió un mamparo y consiguió resolver el problema de falta de oxígeno. Gizman suplicó a la cinta en vano. Evitando dañar la carga, el Nemphas destruyó las armas de estribor.

Sólo entonces Onoh reveló que conocía el código que pedía la cinta. Lo introdujo, desactivando esa medida de seguridad, y permitiendo que Gizman presentase su rendición; pero para entonces el Nemphas no quería negociar porque el Espíritu ya no tenía armas. El Nemphas ordenó al Espíritu seguirle hasta un muelle de atraque privado de Gorga en Mos Eisley.

La placa de Gizman recibió otra transmisión: Gorga ordenaba a su gente que matasen a los swooperos en cuanto aterrizasen. Sabiendo que no tenían mucho que perder, Gizman decidió no cooperar tanto y buscar una alternativa. Spiker, por su parte, se preguntaba porqué Gorga estaba interesado en una nave que él mismo había prácticamente destruido, pero Gizman era más de no hacer preguntas y decidió que era la insondable mente de un hutt.

El plan de Gizman era escapar del Nemphas, corriendo como una swoop en superficie, pero para eso tenían que perder peso. Onoh y Spiker fueron a la bodega para vaciar todo el cargamento; Gizman estaría en los controles, maximizando la velocidad y abriendo la escotilla. Cuando el Espíritu estuvo sobre el muelle de Gorga, sus bodegas se abrieron y el cargamento de obras de arte cayó sobre Gorga y su séquito, haciéndose añicos. Entonces el Espíritu metió zapatilla, volando tan bajo que rompió tejados de edificios cercanos. El capitán del Nemphas ordenó no disparar, porque se arriesgaban a destruir Mos Eisley; y después Gorga les dijo que ya no tenía interés en esa nave, y que la dejasen ir.

El Espíritu estaba tan dañado que se estrelló en mitad del desierto y en plena noche, lejos de la civilización. Gizman y Spiker empezaron una larga andadura de regreso a la civilización, seguidos por el pequeño Onoh. Spiker descubrió que ahora empezaba a sentir respeto por Gizman, y le preguntó si la placa de su cabeza podría recibir algo de música para animarles. Gizman le hizo notar que, aunque así fuese, sólo Gizman la podría oír; Spiker propuso que Gizman cantase simultáneamente.

Gizman y Spiker consiguieron sendos swoops, pero no se libraron de Onoh en el proceso. Se les vio más tarde durmiendo al aire libre cerca de las ruinas del Gran Estadio de Mos Espa. Les despertó, en plena noche, el estruendoso ruido de tres reptadores de arena jawa que huían descontrolados al punto de casi atropellarles. Bueno, les despertó a todos menos a Gizman, que tenía el sueño más profundo. Spiker por suerte le sacó del camino del vehículo agarrándole desde su swoop; pero las orugas de los jawas aplastaron la swoop de Gizman. El trío observó entonces, con sorpresa, cómo los reptadores llegaban al borde del estadio y caían cincuenta metros por las gradas.

Gizman quería vengarse por la pérdida de su swoop y corrió hacia el reptador más grande, seguido por sus amigos. Éstos observaron en el vehículo muchos agujeros de bláster, que sospechaban eran de origen imperial. Gizman encontró en el swoop a un superviviente, el varón jawa Klepti B'ay, que les instaba a escapar, en parte porque el reptador había sido dañado e iba a explotar, pero no sólo por eso: Onoh tradujo del idioma jawaés, puesto que Gizman no lo entendía: Los jawas habían sido atacados por un droide nunca visto, lo cual les hizo huir. La descripción del jawa relacionaba al droide con el Imperio; pero Gizman estaba seguro de que el Imperio nunca había fabricado droides de combate.

Resultaba que sí había sucedido: En 1 DBY, el General Mohc había llevado a cabo un proyecto secreto, Dark Trooper, creando temibles droides de guerra. Sus tropas habían atacado un campamento rebelde, Base Tak, en Talay, y una de estas "tropas oscuras", modelo II, había subido a bordo del crucero rebelde Damisela Gris. Masacró a todos los tripulantes y droides, pero la nave había entrado ya en el hiperespacio y, sin nadie al timón, acabó chocando en Tatooine, en el desierto cerca de Mos Espa. La tropa oscura había permanecido tres años inactiva, pero en perfecto estado, hasta que el clan jawa B'ay encontró los restos del Damisela y, al intentar desenterrarlos, reactivó a la temible Tropa.

Gizman exploró la zona y encontró sólo un primitivo droide IG97. Onoh se sentía aterrado, pero él era de sentirse aterrado siempre. Gizman vio cómo el IG97 se caía solo, se tranquilizó… y entonces oyó las explosiones causadas por la Tropa Oscura, destrozando el muro exterior del reptador desde dentro con cañones pesados comparables a un AT-ST.

El jawa y el lizling estaban aterrados; Gizman todavía no, pero sentía un saludable respeto por el recién llegado: Viendo que sobrevolaba la zona retrocohetes, Gizman ordenó al grupo dispersarse para no ofrecer un blanco fácil. Sólo Spiker escuchó, de camino a su swoop: Los pequeños Onoh y Klepti siguieron a Gizman cuando éste corrió hacia las gradas. Por suerte, fue suficiente: La Tropa preparó un misil para el grupo, pero Spiker le disparó desde su swoop e hizo que el tiro se desviase.



Gizman hace sonar un gong… con un jawa.

Spiker pidió a Gizman que distrajese al enemigo mientras él preparaba un plan. Gizman observó que el jawa tenía una pistola iónica y la requisó, empujando a Klepti contra el gong de Jabba el Hutt. Entonces gritó al robot para atraer su atención, y Spiker aprovechó para intentar atar al enemigo con un cable conectado al reptador. Gizman se encaramó a la tarima, pese a que Onoh le señaló lo inestable de la superficie. Gizman disparó, viendo que se unía a la lucha el droide IG97; pero la Tropa Oscura aguantaba los disparos. Spiker les recordó que el reptador iba a explotar, y formaba parte de su plan.

La Tropa Oscura rompió el cable que le ataba, pero un disparo del IG97 le dio en la mano, desarmándole y ganándole un sutil cumplido de Gizman (pero el IG97 cayó desactivado poco después). Sin el cañón, la Tropa no intimidaba a Gizman; pero Spiker, más listo, comprendió que la Tropa intentaría recoger su arma, y corrió a cogerla antes. Spiker se adelantó, pero el cañón pesaba demasiado para que él lo usase, y la Tropa agarró la popa de su swoop, impidiéndole escapar. Gizman tampoco podía disparar a la Tropa, porque estaba demasiado cerca de Spiker y no tenía un blanco claro. Spiker se salvó solo desactivando los propulsores para hacer que el swoop embistiese a la Tropa contra el reptador, y lanzándose él al suelo. Gizman corrió a ayudar a su amigo, que había perdido el casco.

La Tropa se recuperó, pero ahora Gizman podía dispararle. Era en vano: Spiker ya sabía que ese calibre no detendría al monstruoso droide. La Tropa les apuntó, pero entonces quedó sepultado por un derrumbamiento causado, desde las gradas, por Onoh y Klepti. De nuevo, Gizman les felicitó…

…pero la bestia metálica no se dio por aludida: Se levantó entre llamas. Spiker notó que la explosión del reptador era inminente y corrió con Gizman. Esta vez, el estallido dejó al droide hecho piezas; Gizman y Spiker, más lejos, quedaron sólo aturdidos en un cráter, y se recuperaron en seguida gracias a Onoh y Klepti. Klepti juró seguir por siempre al grupo, nombrándoles su nueva tribu pese a las protestas de Spiker.

Gizman estaba encantado de haber ganado, pero cuando vio moverse a un droide, decidió rendirse. Entonces se fijó en que era el IG97, que se volvió a caer. Gizman decidió que el droide les había salvado y era el único con un arma, así que decidió llevárselo con ellos. Spiker le propuso quedarse sólo el arma; y entonces Klepti sugirió usarlo como mercancía y venderlo en el siguiente campamento. Gizman se sintió ofendido ante la idea de comerciar, pero de todos modos preguntó por el precio que podía alcanzar, y Klepti decidió dejarlo en el aire pero ser tentador. Gizman tomó el mando e hizo que el grupo se pusiese en marcha hacia la sombra antes del amanecer, así que no pudieron ver cómo droides de boxes de Mos Espa se activaban e intentaban reconstruir a la Tropa Oscura…

Las actividades de Spiker después de estos eventos no quedaron registradas, y se cree que desapareció misteriosamente poco después. Tampoco se sabe qué sucedió con Gizman, Onoh o Klepti.


Curiosidades


 

Gizman, alias "Gran Gizz", fue creado para la campaña multimedia de 1996 "Sombras del Imperio", que incluiría una novela, un cómic, un videojuego, una línea de juguetes, una colección de cartas y una banda sonora, además de varios textos de anticipación como los artículos en Star Wars Insider Nº 29 y en Star Wars Galaxy Magazine Nº 6 y 7. El libro de referencia Secrets of Shadows of the Empire (1997, Mark Cotta Vaz) contaría curiosidades del proceso creativo, incluyendo cómo se resumía la acción básica en forma de memorandos para que las descripciones no fuesen contradictorias.

Según este último, incluir a la banda de pilotos de swoop, versión futurista de nuestros "moteros" contemporáneos, fue una idea del autor John Wagner para aparecer en varios productos: En la novela y en el videojuego, los swooperos serían todos iguales, pero en el cómic Wagner se tomó la molestia de resaltar a Spiker y a "Big Gizz", el líder. La primera descripción de Wagner hablaba de un hirsuto gigante de más de dos metros, con huesos a través de sus orejas o nariz, o ambas, y un rostro comparable a "Tiburón", el enemigo de James Bond. El artista Kilian Plunkett hizo un boceto temprano de Gizz desde cero, pendiente de añadirle bolsillos, bolsas, cachivaches y tatuajes, declarando después que había sido muy gratificante. Los otros pilotos de swoop, apodados "coneheads" ("cabeza-conos") por el equipo de diseño, sería aprovechados para la edición especial de La Guerra de las Galaxias (1997, G. Lucas).



Diseño temprano de Big Gizz, por Plunkett, publicado en Secrets of Shadows of the Empire.

Gizman apareció en dos de las cartas coleccionables, en una de ellas acompañado por Jix y en la junto a Dash Rendar, y que serían reeditadas en The Art of the Brothers Hildebrandt (1997, Bob Woods). Sin embargo, su primera aparición fue en la serie de cómics Sombras del Imperio (1996, guion John Wagner, lápiz Kilian Plunkett y tinta de P. Craig Russell). Ryder Windham fue el primer editor de la serie, pero abandonó el proyecto y fue reemplazado por Peet Janes cuando estaban listos cinco guiones y el lápiz de un cómic y medio.

Al año siguiente continuaron las aventuras de Gizman en el cómic The Jabba Tape (guion de John Wagner y lápiz de Kilian Plunkett), publicado inicialmente en Star Wars Galaxy Magazine Nº 13 (1997), después en Star Wars Galaxy Collection Nº 1-3 (1998), y entonces recopilado en un cómic único por Dark Horse (1998). La portada de Plunkett para ello fue después reeditada (sin logotipos ni textos molestos) en el recopilatorio de portadas Star Wars: Panel to Panel Volume 2: Expanding the Universe (2007, Randy Stradley ed.), en la subsección de cazarrecompensas (aunque especifica que no es exactamente un cazarrecompensas).

También en ese año, Gizman vuelve a aparecer en una fuente compleja y rebuscada, un libro-juego en tabla blanda publicado por Scholastic Inc llamado Star Wars Mission 10: Showdown in Mos Eisley (1998, Ryder Windham). Bueno, "publicado" puede ser decir mucho: Estas cosas se enviaban por correo postal a los suscriptores con ilustraciones, dados y mercaderías variadas. Son difíciles de conseguir veinte años después.

En 1999, la primera historia del primer número de Star Wars Relatos (1999) fue "La vida, la muerte y la Fuerza viva" (guion de Jim Woodring, dibujo de Robert Teranishi); y por cierto la última de ese número fue "Skippy, el droide jedi". En "La vida…" aparece por primera vez el planeta Arorua y el primer moggonita identificado como tal, Mosko Bolpa. Recordemos que hasta ahora no se ha identificado la especie de Gizman. Sin embargo, las aventuras de Gizman continuaron en "Ráfaga de arena" (guion y dibujos de Kilian Plunkett), publicado en Star Wars Relatos Nº 4 (2000).

En algún momento Arorua tuvo un artículo en el Databank, enciclopedia online en la web oficial de Star Wars hasta su retirada en 2011; pero no he encontrado esa referencia. Hay otras enciclopedias, sin embargo: The Complete Star Wars Encyclopedia (2008, vv.aa.) compila información sobre Gizman, los moggonitas, Arorua, varias formas de vida de allí y varios conocidos de Gizman (El squollyhawk no tiene entrada, pero es mencionado en el artículo sobre Arorua). The Essential Atlas (2009, Jason Fry y Daniel Wallace) ubica en el mapa Arorua a grandes rasgos y permite extrapolar alguna información a partir de ello, pero sin detallar: El mapa de la página 127 no deja claro si Arorua está o no en la República en 5.000 ABY; el de la página 133 no aclara si, durante el final de las Nuevas Guerras Sith, Arorua era un mundo sith o neutral (No puede ser republicano, sin embargo); y en las páginas 150 no está claro si es separatista o neutral durante las Guerras Clon; aunque en la página 151 se le ve como neutral.

Ryder Windham, aficionado a utilizar elementos previos del Universo Expandido, recuperaría a Gizman para sus novelas Clone Wars Secret Missions 3: Duel at Shattered Rock (2011, Ryder Windham) y Clone Wars Secret Missions 4: Guardians of the Chiss Key (2012, Ryder Windham), que tienen lugar durante las Guerras Clon y alían a Gizman con el padawan jedi Nuru Kungurama. Es la primera fuente que identifica a Gizman como híbrido mestizo moggonita; en la novela, esto es una teoría de Kungurama, pero The Essential Reader's Companion (2012, Pablo Hidalgo), que apenas menciona a Gizman al describir estos libros, confirma la especie de forma inequívoca.

Las aventuras de Gizman y Kungurama también continuaron en el cómic The Clone Wars: Strange Allies (2011, guion de Ryder Windham, dibujo de Ben Dewey). Algunas de las páginas de éste, que incluían a Gizman, fueron distribuidas gratuitamente por Dark Horse con el título Opress Unleashed para promover el interés por los comics.

Hablemos ahora de los juegos de rol. Gizman tiene ficha en dos juegos de rol: El original, de West End Games; y el siguiente a éste, de Wizards of the Coast. Su primera ficha aparece en Shadows of the Empire Sourcebook (1996, Peter Schweighofer), con ilustraciones de Gizman en blanco y negro por Storn Cook. La segunda aparece en Rebellion Era Sourcebook, sin imágenes pero con una idea de aventura en que los personajes jugadores desafían a una banda de pilotos de swoop que aterroriza a inocentes y que, cada par de semanas, asalta su asentamiento para robar suministros. Es posible que los colonos, granjeros o lo que sean, incluso contraten a los personajes jugadores; y que éstos planeen defensas con fortificaciones. Claramente alguien había visto Los Siete Samuráis (1954, Kurosawa Akira) o alguna de sus adaptaciones, que no digo que esté mal, pero Kurosawa-sensei hizo más cosas, ¿saben?

En cuanto a los silanos, son mencionados en la novela Cult Encounters of the Star Wars Universe, escrita por Joe Bongiorno y publicada en 2018 en su web starwarstimeline.net, con autorización de LucasArts pero después del reboot. Según esa novela, los silanos están entre las bestias nacidas de Tilotny cuando ella muere. Además, un hechicero silano (Es todo un concepto, porque el silano aparecido en Star Wars Relatos no parece ser una persona inteligente capaz de ejercer una profesión) concede al Culto de los Cinco poderes y longevidad a cambio de que ellos le den víctimas torturadas para su sacrificio (Admitamos que en Relatos parece que se hacían sacrificios a los silanos).

Para terminar, veamos los problemas de continuidad y coherencia de los moggonitas:

The Complete Star Wars Encyclopedia tiene una entrada sobre el planeta Arorua, pero en la entrada sobre los moggonitas dice que vienen del planeta "Arorlia".

En Relatos Nº 4, edición española, Mosko Bolpa se refiere a sí mismo como "Mosco".

La entrada sobre "Gizz, Big (the Gizman)" en la Encyclopedia dice que tiene un físico musculoso ("well-muscled physique"), pese a que en todas sus apariciones lo que parece estar es gordo.

Los ojos de Gizman son rojos en Sombras del Imperio, amarillos en Strange Allies y negros en Relatos Nº 4. Sus dientes tienen aspecto normal en Relatos Nº 4, pese a que se describen como "muchos dientes afilados" en Secret Missions 3 y "un bocado de dientes torcidos" en Shadows of the Empire Sourcebook. En cuanto al número de pendientes que lleva, también es variable; por ejemplo, en la portada de Strange Allies lleva tres aros en cada oreja, y dentro del cómic sólo lleva uno; pero supongo que puede ponerse y quitarse pendientes a su gusto. Eso también explica que su swoop sea muy diferente en las cartas de Hildebrandt (donde Gizman aparece además con cuernos) y en el cómic de Sombras del Imperio.

Just Another Day's Work, un relato breve en Shadows of the Empire Sourcebook, presenta a Gizman y a su séquito acosando al contrabandista Zumbador (Whizzer en el original). Los swooperos deciden darle dos días a Zumbador para pagar su deuda; pero inmediatamente después, Spiker y los otros le advierten que volverán en una semana. ¿Al final son dos días o una semana?

En The Mandalorian Armor, Dengar explica que Gizman había chocado y ardido con su swoop. En el cómic de Sombras del Imperio, el swoop explota y Gizman cae al suelo, pero no veo exactamente que él arda.

La entrada de Gizman en la Encyclopedia dice que Gizman trabajó con el agente imperial Jix, pero Gizman descubrió tanto sobre el pasado de Jix, que éste le disparó. A ver, todo eso es falso: En Sombras del Imperio, Jix no dispara a Gizman, sino que le abre la cabeza con una piedra; y Gizman no descubre el pasado imperial de Jix hasta bastante después de despertar.

Rebellion Era Sourcebook identifica a Gizman como humano (al menos a efectos de juego de rol). Sin embargo, The Essential Reader's Companion confirma que, como se había sugerido en The Clone Wars: Secret Missions 3: Duel at Shattered Rock, Gizman es un híbrido humano-moggonita. ¿Que si no, iba a estar yo dedicándole páginas y páginas a Gizman en un artículo sobre los moggonitas? Claro que, sin Gizman, posiblemente yo hubiese escrito sobre otra especie.



© S I T H N E T

Sección creada por Skippy Farlstendoiro y Al Noah para SithNET
Prohibida la reproducción total o parcial sin el consentimiento de los autores.

Aquí puedes encontrar todas las fuentes consultadas en la elaboración de este artículo.

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