De capital importancia para Endor y los ewoks fue el hecho de que el
Imperio Galáctico, el cuerpo de gobierno
de la galaxia de aquel momento, escogiese Endor como sede de uno de sus más
ambiciosos proyectos.
Se trataba de la segunda Estrella
de la Muerte, después de que la primera fuese destruida en órbita
sobre Yavin. La segunda Estrella de la Muerte había sido diseñada
por el mismo científico que estuvo detrás del diseño
de la original, Bevel Lemelisk, después de que hubiese sido heptaejecutado
por no haber cuidado suficientemente el diseño de la estación
espacial original.
El Imperio envió varias expediciones imperiales de exploración
en busca de planetas hospitalarios, deshabitados y lejos de ojos indiscretos
e hiperrutas importantes para poder construir su proyecto ultrasecreto.
El equipo de reconocimiento IX 3244-B, al mando del capitán Toss,
encontró Endor y realizó un rudimentario análisis
de la superficie planetaria. Toss descubrió que la luna de Endor
cumplía todas las características exigidas, y el descubrimiento
de importantes vetas de minerales en el sistema y en el cercano planeta
Eloggi hizo que Toss sintiese un irrefrenable ansia por informar a sus
superiores y obtener así un ascenso.
Por el contrario, el topógrafo Kiviett, de servicio como segundo
de Toss, sugirió analizar en más detalle a la fauna local.
En particular, Kiviett sospechaba que los ewoks podrían no ser tan
mansos como parecían. De hecho, el ewok que Kiviett había
visto, Wuta, ya estaba informando a su pueblo
de la presencia de los recién llegados. Sin embargo, el informe
de Kiviett a los suyos no fue bien recibido: Toss le regañó
y, haciendo oídos sordos a sus avisos, eliminó toda referencia
a los ewoks de los informes.
Aunque el destino final de Toss es desconocido, se sabe que el Imperio
leyó con atención sus informes y eligió llevar a cabo
en Endor su gran proyecto, la construcción de una segunda Estrella
de la Muerte. Para ello se construyó la Cañería
Santuario; el propósito específico era mantener en secreto
la localización de Endor pese a que se harían imprescindibles
los envíos de suministros por toda Zuma.
Al mando del proyecto estaría el Moff Jerjerrod, que hasta entonces
controlaba el sector Quanta desde su palacio familiar en Tinnel IV. Jerjerrod
era un tipo satisfecho y poco ambicioso, carente del orgullo que mató
a Tarkin y perdió la primera Estrella de la Muerte. El Ministerio
de Energía nombró antes a Jerjerrod director de su rama de
Sistemas de Energía Imperiales, que debía desarrollar generadores
de energía portátiles a gran escala para llevarlos a zonas
de desastre y que ayudasen a los refugiados. Los historiadores suelen decir
que se trataba de una tapadera para el desarrollo de sistemas de energía
de la Estrella de la Muerte. Después de varios años como
director de SEI, Jerjerrod fue enviado a Endor.
La nueva Estrella de la Muerte, mucho más grande que la primera,
debía tener casco de quadanio, 30000 baterías turboláser,
7500 cañones láser, 5000 cañones de iones y 768 rayos
tractores, así como un destacamento de 7200 TIEs de diversos tipos,
3600 lanzaderas clase landa, 2480 naves de bombardeo, 1860 naves de descarga
y 13000 vehículos de apoyo, incluyendo entre otros al menos 1400
AT-ATs, otros tantos AT-STs, 178 bases de mando móviles, 1420 tanques
repulsores, 1520 naves repulsoras, 355 fortalezas flotantes y 4848 juggernauts.
Respecto a los cazas, es sabido que había varios escuadrones
creados especialmente para defender la Estrella de la Muerte. Entre ellos
destaca el Escuadrón Cimitarra de bombarderos, bajo el mando del
Mayor Rhymer, se encargaba de atacar blancos secundarios y dar cobertura
en carreras de bombardeo para proteger el generador del escudo. El Escuadrón
Guadaña, formado por cazas TIE con impulsores de maniobra mejorados
P-w702, debía identificar y eliminar cazas que intentasen atacar
a la Estrella de la Muerte desde dentro. El Escuadrón Ónice
fue el primer escuadrón compuesto exclusivamente de Defensores TIE,
y no vieron acción hasta Endor. El Escuadrón Obsidiana estaba
compuesto de pilotos muy entrenados a los mandos de TIEs atmosféricos
con paneles solares que incrementaban el daño de las armas; éstos
ya habían visto acción en Ciudad Nube. Pero quizá
el escuadrón más famoso sea el Escuadrón Sable, formado
por interceptores TIE reunidos exclusivamente para defender la Estrella
de la Muerte. Bajo el mando del barón Soontir Fel, todos los cazas
Sable tenían una línea roja de "sangre" pintada, y requisito
indispensable para entrar era haber provocado diez muertes en pilotos enemigos.
Otros pilotos del Escuadrón fueron el mayor Turr Phennir (Sable
2), DS-181-3 "La Ira de Fel" (Sable 3) y DS-181-4 (Sable 4).
El interior de la Estrella de la Muerte estaría principalmente
dedicado al arma principal, el superláser, que exigía 168
artilleros y 14 soldados para su manejo. El nuevo superláser, gran
triunfo de ingeniería sobre el anterior, podía destruir un
planeta cada día, o una nave comandante cada minuto, lo cual
le daba una capacidad de combate mucho más interesante.
El fracaso de la Estrella de la Muerte anterior se debía a una
reacción en cadena provocada por el impacto de un torpedo de protones
en una escotilla para expulsar calor. En esta nueva estación espacial
acorazada, no se utilizaría una escotilla para expulsar calor, sino
que se expulsaría el calor uniformemente a través de una
miríada de pequeñas salidas microscópicas distribuídas
por todo el casco. Esta nueva idea de Lemelisk fue acogida con gran interés
y aceptación, como demostraba el hecho de que Lemelisk no hubiese
sido ejecutado más veces desde entonces.
Ahora bien: Había muchos pozos reactores por todas las zonas
habitables. Incluso había uno en la sala del trono del emperador,
el centro de mando funcional con acceso a todos los sistemas de la estación
que, por política imperial, se desarrollaba en todos los vehículos
de mando por si acaso el emperador decidía ir allí (Durante
la construcción no estaba previsto que esto sucediese). Se dice
que el emperador en persona desestimó la construcción de
barandillas u otros sistemas de protección para los pozos, por encontrarlo
demasiado caro; en particular él consideraba que se sentiría
seguro lo alto de la torre del polo norte de la estación, en su
sala del trono, que estaba más protegida por escudos, escáners
de seguridad y trampas que ningún otro punto de la Estrella de la
Muerte, por no hablar de la protección de su guardia personal y
de Lord Darth Vader. Además, al emperador le gustaba tener una vista
del núcleo reactor para recordar a sus visitantes su increíble
poder.
El problema se daba durante la construcción de la Estrella de
la Muerte. La estación espacial incompleta no tenía todo
su casco; más bien le faltaba una buena parte. Para permitir el
trabajo de construcción, además de proteger la Estrella de
la Muerte contra cualquier posible ataque, se decidió construir
un generador de escudos modelo SLD-26 de CoMar, que proyectaría
el escudo desde la cercana luna de Endor.
Aterrizaron entonces equipos de construcción en la superficie.
Los aterrizajes y una serie de bombardeos destruyeron una cantidad inusitada
de árboles. Los ewoks fueron por ello alertados del peligro, aunque
no revelaron su presencia a los imperiales.
El Imperio construyó, a parte del generador, un pequeño
complejo de cuarteles para la guarnición que protegería el
generador del escudo, así como varios puestos de escucha en el bosque.
Debido a lo accidentado del territorio endoriano, se escogió para
formar el grueso de la guarnición a los soldados exploradores imperiales,
una división de soldados de asalto especializada en exploración
y reconocimiento. Los soldados exploradores, o exploradores a secas, patrullan
en dos parejas recorriendo la zona, con apoyo de AT-ST si el terreno lo
permite. Especialmente adoctrinados para mantener horario de reconocimiento
y patrullas activas incluso en mundos seguros, no son sin embargo exhaustivos,
puesto que ninguno de ellos encontró ewoks (Por el contrario, los
yuzzum fueron avistados inmediatamente). Normalmente una guarnición
incluye cuarenta soldados exploradores, aunque se ignora si se destinaron
más tropas a Endor, bajo el mando de un teniente y cuatro sargentos,
con un pequeño número de técnicos para el mantenimiento
del equipo.
El equipo de un soldado explorador incluye armas más pequeñas
y ligeras que el soldado normal, una variante más ligera de la armadura,
y un casco mejorado que añade una placa de visión macrobinocular
y sensores. Sin embargo, lo más destacable del equipo es la moto
jet Aratech 74-Z, versión militar de la 74-Y. Con una velocidad
de hasta 300 km/h en terreno abierto y un techo máximo de vuelo
de 25 metros, su única arma es un cañón láser,
pero tiene la ventaja de ser totalmente monoplaza, por lo cual obtuvo el
favor de los soldados imperiales de Endor.
De toda la guarnición de Endor, sólo conocemos el nombre
de siete soldados exploradores:
- Cabo Avarik: Antiguo matón y luchador callejero, recibió
órdenes de monitorear la actividad yuzzum.
- Sargento Barich: Nativo de Wakeelmui y empleado de Sienar, se entrenó
como soldado de asalto normal, pero después mostró más
aptitud para exploración y reconocimiento y se le asignó
a los soldados exploradores, convirtiéndose en uno de los mejores
pilotos de moto jet del Imperio. Sin embargo, se ha revelado que su auténtico
deseo era pilotar un caza TIE.
- Cabo Drelosyn: Nativo de Coruscant, creció pilotando swoops
en Ciudad Imperial. Por ello se comportaba de modo demasiado audaz ante
una moto jet. Aún estaba templando su habilidad cuando fue ascendido
a cabo y asignado a Endor.
- Sargento Elsek: Nativo de Kuat pero graduado en Corulag, podría
haber servido como teniente. En Endor, formó una amistosa rivalidad
con el cabo Avarik.
- Sargento Irol: Nativo de un planeta boscoso no identificado donde
aprendió a pilotar su moto jet, demostró tener una gran habilidad
de vuelo y equilibrio. Pecaba, sin embargo, de ser algo engreído.
- Cabo Misik: Hijo de un diplomático de Tatooine, se unió
a la Academia Imperial y demostró ser un buen tirador y un buen
piloto de moto jet. Desarrolló varias tácticas de moto jet,
a menudo trabajando con el sargento Barich. Misik deseaba llegar al Equipo
de Demostración del Emperador.
- Cabo Oberk: Nativo de Ukio, se le asignó a los exploradores
cuando demostró habilidad en ese campo. Oberk deseaba impresionar
a sus superiores, pero no lo consiguió.
La guarnición de Endor incluía también a varios oficiales
que no vestían la armadura del soldado de asalto, sino la armadura
estándar de dieciocho piezas, o en su defecto el uniforme gris oliva
(Recordemos que por debajo de teniente todos visten la armadura). Incluso
había también varios guardias combatientes sin armadura en
el interior del búnker. Los conocidos son:
- Soldado de asalto Arno: Este soldado respondía directamente
al mayor Lesim.
- Cabo Drazin: Nativo de Bespin, estaba en su planeta después
de la batalla de Hoth y disparó al androide C-3PO cuando éste
descubrió presencia imperial en Ciudad Nube. Fue asignado a la guardia
de honor de Igar.
- Coronel Dyer: Este oficial estaba asignado a coordinar la defensa
del búnker de control. Un líder nato que había trabajado
con Moff Jerjerrod en las fases iniciales de la estrategia de medidas de
seguridad, se cree que fue Dyer quien decidió mantener una fuerza
de reserva de soldados de asalto y otro personal fuera del búnker,
para que se les invocase en caso de que apareciera una fuerza invasora.
- Tropa Naval Fenson: Nativo de Rendili, su especialidad era el combate
personal. Trabajaba con Vesden monitoreando la actividad alrededor del
búnker.
- Teniente Grond: Nativo de Corelia y antiguo piloto de swoop, había
servido en el Equipo de Demostración del Emperador. Era el ayudante
principal del coronel Dyer y coordinaba las varias acciones de xploración
para proteger el geneador.
- Mayor Hewex: Este oficial imperial era el líder del destacamento
asignado a guardar el búnker durante la construcción; también
era enlace entre el personal de mando y los técnicos.
- Comandante Igar: Nativo de Kuat, sirvió a las órdenes
del general Veers en la Unidad Ventisca en Hoth. Después, Vader
le asignó personalmente coordinar la defensa de superficie de Endor.
Considerado por sus superiores un líder nato, Igar tenía
el mando sobre todos los escuadrones de motos jet y, extraoficialmente,
de todos los vehículos.
- Mayor Lesim: Uno de los oficiales de mayor rango asignados a la
guarnición.
- Teniente Renz: Líder de una de las mejores legiones de tropas
del Imperio, es famoso porque siempre buscaba actividad rebelde.
- Sargento Tarl: Nativo de Corelia, se entrenó en Corulag y
fue veterano de la captura del Tantive IV.
- Oficial de contrainteligencia Vesden: Públicamente era el
operario de sensores de la guarnición, escaneando posible infiltración
en el búnker. Sin embargo, nadie en Endor sabía que Vesden
era un oficial del Despacho de Seguridad Imperial.
- Sargento Wallen: La unidad de este soldado de asalto fue recomendada
al comandante Igar por el gobernador Yount de Wakeelmui.
La guarnición se completaba con una compañía de inmensos
andadores. Debido al terreno, la mayoría de éstos debían
ser AT-STs, no AT-ATs, así que se escogió un escuadrón
específico que había visto acción durante la subyugación
de Kashyyyk: El Escuadrón Tormenta. Formado por al menos seis andadores
AT-STs (Exploradores Tormenta 1 a 6) y un AT-AT (Tormenta 1; vehículo
de mando del comandante Igar que utilizaba un sistema de puntería
adaptado de los TIEs para combatir la maniobrabilidad de los T-47s, así
como varios programas especializados que corregían debilidades expuestas
en Hoth), se dedicaban a coordinar actividades de combate del destacamento
de motos-jet, buscar potenciales trampas y realizar patrullas de perímetro.
Los AT-ATs en Endor tienen un uso demasiado limitado debido al follaje,
pero el vehículo era perfecto para patrullar la zona alrededor de
la instalación del generador del escudo. La mayoría de los
AT-STs estaban modificados para cubrir más terreno, mantener la
precisión en el follaje y/o coordinar datos de combate; la energía
adicional para estos sistemas era desviada de los sistemas de propulsión
y estabilidad. La tripulación de los andadores había sido
entrenada durante muchos meses sobre terreno boscoso. Conocemos los nombres
de tres de estos tripulantes:
- Teniente Arnet: Asignado al AT-ST de mando del Escuadrón
Tormenta, estuvo al mando de un AT-ST prototipo a las órdenes del
general Veers en Hoth. Arnet era un veterano de combate con órdenes
de preparar un contraataque contra cualquier actividad enemiga que lograse
capturar el búnker.
- Mayor Marquand: Nativo de Kessel, este oficial había sido
tripulante de AT-AT en el Devastador antes de ser transferido a
Endor con su copiloto, Watts.
- Teniente Watts: Nativo de Corulag, experto en artillería
y disparo, era famoso por ser muy preciso con casi cualquier arma. Se le
asignó temporalmente a Astilleros Kuat durante el desarrollod e
los sistemas de armas de los AT-STs.
Mientras tanto, orbitando la luna boscosa, la Estrella de la Muerte continuaba
construyéndose. Se sabe que Jerjerrod arrancó los brazos
a su droide supervisor AV-6R7 por no monitorear un droide de potencia defectuoso.
Algunos opinan que Jerjerrod identificó el error gracias al operario
de sensores magnéticos del casco, capitán Godherdt.
El emperador planeaba aniquilar a la Alianza Rebelde y atraer a Luke
Skywalker hasta el reverso tenebroso de la Fuerza, y pensó que la
Estrella de la Muerte era el cebo perfecto. Sólo tenía que
permitir que los rebeldes se enterasen de este importante proyecto, y sin
duda irían a Endor con toda su flota, donde una Estrella de la Muerte
totalmente operativa les aniquilaría, con la colaboración
de una flota imperial perfectamente preparada llena de naves comandante
y con el almirante Firmus Piett al mando. Intentarían destruir el
escudo en la superficie de Endor, pero el emperador pensaba desplegar una
legión de sus mejores tropas para protegerlo, bajo el mando del
teniente Renz. Además, sin duda Skywalker iría con ellos
y el emperador planeaba usar a Darth Vader, el padre de Skywalker, para
llevarle a su presencia.
Kadann, el Profeta Supremo del reverso tenebroso, predijo que el Imperio
se estremecería si Palpatine permitía que ese plan se llevase
a cabo. Sin embargo, el emperador no estaba dispuesto a permitir que el
enano dirigiese la galaxia y le dijese cómo hacer su trabajo, y
lo destituyó.
El Imperio filtró a la Red de Espías Bothan
pruebas de que el carguero imperial Suprosa llegaría
en unos pocos días al sistema Both, llevando valiosa información
secreta. Luke Skywalker y su reciente aliado Dash Rendar viajaron a Bothawui
para ayudar a capturar la nave. Allí, Skywalker preparó a
dos docenas de pilotos y artilleros bothan en alas-Y, el Escuadrón
Azul para atacar lo que parecía ser un carguero sin armas, que
resultó estar fuertemente armado y blindado; la mitad de los alas-Y se
perdieron antes de capturar el carguero, pero lograron hacerse con la
información codificada.
Skywalker llevó la información a Kothlis para que la descodificasen
los mejores criptógrafos bothan. En el piso franco, un grupo de
mercenarios barabel los localizaron y capturaron
a Skywalker mientras un técnico bothan huía con la información.
Darth Vader fue enviado a recoger al prisionero de los barabel y a recuperar
los datos robados. Cuando Skywalker logró escapar, Vader destruyó
la estación espacial de Kothlis II y un puerto ilegal en la segunda
luna del planeta. Muchos bothan murieron en el proceso, lo cual hizo creer
a los rebeldes que la información era muy valiosa cuando en realidad
el emperador había preparado todo para que así lo creyesen.
Sin embargo, la susodicha estaba codificada, y haría falta tiempo
para superar la protección criptográfica.
Mientras tanto, el supervisor Gurdun había recibido órdenes
de obtener un núcleo informático para la Estrella de
la Muerte. Gurdun había sido el creador del proyecto Droidephlauta,
que produjo a los androides IG-88. De camino a Endor, Gurdun fue atacado
por IG-88A, que destruyó su nave y cargó su consciencia y
memoria en el núcleo informático. Se apagó para el
transporte y esperó a ser instalado en la Estrella de la Muerte.
Planeaba dejar que los humanos se confiasen antes de hacer nada, por lo
que no afectó a la construcción inicial.
Pero dejar a los humanos a su ritmo no estaba exento de problemas, en
particular porque el personal asignado a la construcción era claramente
insuficiente. Con la fecha de terminación inminente, la Estrella
de la Muerte iba con retraso, y Jerjerrod estuvo en la nada envidiable
posición de informar a sus superiores de la falta de progresos.
La semiesfera presentaba visiblemente el esqueleto de la Estrella de la
Muerte; se usaba un escudo deflector perfectamente operativo desde Endor
para proteger las brechas.
Preocupado por su proyecto estrella, el emperador envió a Darth
Vader como emisario para motivarles a base de miedo puro. La lanzadera
de Vader estaba pilotada por antiguos pilotos de prueba, el coronel Jendon
y su copiloto, el capitán Yorr, que según algunos historiadores
después pilotaron cazas TIE de la Estrella de la Muerte. La lanzadera
de Vader fue transportada por su flota de élite, el Escuadrón
de la Muerte, que ya le había servido después de la batalla
de Hoth. En particular, se vio sobre Endor a los destructores Acusador,
Merodeador, Juez, Quimera, Sentenciador, Tirano
y Vengador, en el que viajaba Vader.
Mientras Luke Skywalker, la princesa Leia Organa, Lando Calrissian,
Chewbacca, C-3PO y R2-D2 participaban en una
intrépida misión para rescatar a Han Solo de las garras del temible
Jabba el Hutt, el alto mando rebelde descubre
qué era la valiosísima información: Se trataba de los planos
de una nueva Estrella de la Muerte, mucho más poderosa que la anterior,
así como de la presencia del emperador en una visita oficial durante la
construcción. Incluso capturaron los planos de la Cañería
Santuario para poder llegar. El hecho de que la estación especial aún
no estuviese terminada la hacía especialmente vulnerable, y Mon Mothma
ordenó a sus consejeros de más confianza preparar una estrategia
de ataque. Reunidos en el sistema Delfii, en el espacio profundo, se prepara
el plan. Aparte del general Crix Madine, el almirante Ackbar
y el general Walex Blissez, consejeros jefes de Mothma, colaboraron en
la estrategia la cabo Kira Lar, veterana de Base Eco y miembro de la plantilla
personal de Madine; el piloto de caza Diblen Harleys, experto en tácticas;
el sargento Junkin, demoliciones, para la ubicación de las cargas;
y el mayor Panno, explorador y comando dresseliano, que había colaborado
en la logística de varias operaciones de ataque. Se dice que la
princesa Leia Organa estuvo entre los primeros informados de los resultados.
Evidentemente, la presencia de un escudo protector en la superficie
de la luna boscosa exigiría que un comando de tierra aterrizase
en Endor sin despertar sospechas del Imperio y destruyese el búnker
generador del escudo. El modo lógico de llegar hasta allí
sería en una lanzadera imperial, pero la Alianza no tenía
ninguna. Por ello, el general Crix Madine, experto en inteligencia y tácticas
de tierra, y consejero de Mon Mothma, dirigió personalmente la misión
robando la lanzadera clase lambda Tydirium de la plataforma espacial
imperial Avanzada. Al mismo tiempo, Madine se hizo también con un
viejo código de seguridad, Acreditación Azul. No está
claro si el emperador también permitió esto, o si los rebeldes
estaban mostrando más iniciativa.
Fue también afortunado el desarrollo poco tiempo antes del caza
monoplaza RZ-1 Dodonna/Blissex llamado ala-A, la nave sublumínica
más rápida disponible. Debido a la falta de recursos de la
Alianza, a menudo los alas-A se construían en tiendas privadas,
añadiendo modificaciones personalizadas. En la rebelión,
muchos pilotos de alas-X se pasaron a alas-A.
La obtención de armas para el comando se consiguió utilizando
transportes contrabandistas, entre ellos el Injusticia y el Taberna,
que facilitaron la obtención de rifles E-11B y granadas de protones
7-PrG de MerrSon con base magnética. Un antiguo empleado de BlasTech,
Janse, dejó la empresa con un alijo de rifles bláster A280
que también se utilizarían en la misión.
El recientemente rescatado general Han Solo se ofreció voluntario
para liderar el equipo de asalto, e hizo que el general Crix Madine le
ayudase a seleccionar y entrenar al equipo de asalto, compuesto por voluntarios
seleccionados principalmente entre las tropas de élite que defendieron
base Eco. Se valoraría experiencia en exploración y combate,
así como habilidades específicas y capacidad creativa. Acabaron
escogiéndose a miembros de las Fuerzas Especiales de la Alianza,
diez divisiones de luchadores entrenados en varias habilidades que destacan
en entrenamiento, moral, liderazgo y capacidad de improvisación
para llevar a cabo misiones variadas, desde sabotaje hasta asesinato pasando
por correo, búsqueda y rescata, reconocimiento, operaciones encubiertas
o contrainteligencia. Algunos de ellos eran criminales para el Imperio.
El comando seleccionado estaba formado por al menos los siguientes:
- Cabo Beezer: Entrenada en exploración por Brooks Carlson,
experta en comunicaciones, sensores y descodificación. Se sentía
incómoda con las técnicas poco ortodoxas de su oficial superior,
Solo, hasta el punto de preocuparse cuando éste intentaba arreglar
algo.
- Teniente Blount: Antiguo miembo del Despacho de Seguridad Imperial,
veterano de combate, explorador y piloto de caza. Desertó después
de Hoth, y sirvió como hombre ala de Airen Cracken antes de esta
misión.
- Sargento Brooks Carlson: Rastreador, explorador y antiguo imperial
que desertó con el general Crix Madine.
- Sargento Bruckman: Explorador coreliano reclutado por Madine para
esta misión especialmente.
- Soldado Dacia: Experimentada y con habilidades útiles para
la misión que no han sido especificadas.
- Cabo Delevar: EXplorador y médico, orgulloso de su eficiencia
como soldado, había servido con Bren Drelin en Hoth. Por algún
motivo, pese a su experiencia en la batalla, los historiadores le consideran
el único novato elegido.
- Mayor Bren Derlin: Segundo de Solo, líder de la unidad y
veteranísimo de la batalla de Hoth, donde había estado al
mando de casi toda la base.
- Teniente Greeve: Famoso guía reclutado por la unidad de
Madine en Kashyyyk. Era un experto francotirador, y utilizaba un A280 en
vez del E-11B reglamentario.
- Cabo Janse: Nativo de Ukio, ex-francotirador, ex-evaluador de armas
para BlasTech, cazador y explorador. Había desertado, como ya se
ha dicho, de BlasTech llevándose un alijo de rifles A280.
- Sargento Junkin: Experto en demoliciones, colaboró en la
preparación de la estregia.
- Cabo Kensaric: Otro veterano de Base Eco, su misión era asegurarse
de que se cubrían los rastros del equipo.
- Cabo Midge: Nativo de Chandrila, tirador y francotirador autodidacta.
Se unió a la Alianza después de que lo hubiese hecho Mon
Mothma. Fue reclutado por Madine como técnico de campo.
- Sargento Page: Reclutado por Madine y bajo el mando de Derlin en
Hoth, ya entonces tenía una prometedora carrera. Madine apostaba
por su futuro.
- Soldado Squalls: Experto en demoliciones, estuvo entre los primeros
en ofrecerse voluntario.
- Soldado Varran: Nadie tiene muy claro por qué le eligieron.
- Capitán Yutani: Explorador y especialista en armas pesadas,
usaba microrrepulsores en su armadura de campo para moverse fácilmente
llevando artillería ligera.
Si había más miembros en el comando, sus nombres e historiales
son desconocidos. Curiosamente, algunas fuentes indican que eran sólo
once, sin contar a Derlin.
Evidentemente, después de que el comando de superficie destruyese
el generador del escudo, haría falta que la flota rebelde atacase
la Estrella de la Muerte y golpease directamente en el núcleo reactor;
el hecho de que el casco estuviese incompleto facilitaría esta operación,
aunque se preveía que la Estrella de la Muerte tuviese varios escuadrones
de cazas dentro. Desgraciadamente, Vader acababa de diezmar a la flota
rebelde en la batalla de Bajic y habría que apañarse con
lo que se pudiese conseguir; afortunadamente contaban con unos cuantos
escuadrones de cazas, y sin duda Wedge Antilles, veterano de Hoth y Yavin,
sería la punta de lanza perfecta. Además, después
de que la Alianza ayudase a terminar la Guerra Civil Virgiliana, el recién
nombrado gobierno virgiliano envió veintidós de sus mejores
naves a incrementar la flota rebelde, incluyendo el Ducado. De hecho,
las naves conocidas (es decir, aquéllas de las que sabemos el nombre)
son sólo dos corbetas corelianas CR90 (Antigua República
y Masanya), una fragata de escolta (Antares Seis), cuatro
cruceros calamarianos (Desafío en retaguardia, Hogar Arrecife,
Independencia y Libertad en vanguardia, y Hogar Uno, entonces
la mayor nave de la flota rebelde, como nave de mando), dos fragatas Nebulon B
armadas (Piedad y Rendención), un crucero clase Carraca
(Jerjes) y un transporte médico modificado (Luminoso).
Además, sólo había cinco escuadrones de cazas:
- El Escuadrón Azul, de cazas ala-A y ala-B, con misíles perforadores
de armadura y mantenimiento verpine,
especializados en ataques con formación densa para concentrar potencia de
fuego y atravesar escudos deflectores. Muchos pilotos eran sullustanos, especialmente
en los cazas ala-B (Destaca el ex-artillero Ten Nunb en Azul 5). Su misión
sería dirigir el ataque contra las naves comandante y atraer cazas para
despejar a otros el camino hacia la Estrella de la Muerte.
- El Escuadrón Gris, de cazas ala-B y ala-Y, bajo el mando del veterano
coronel Horton Salm con Kin Kian como artillero. El teniente Telsij, hombre
ala de Salm, era el piloto de Gris Dos, con Karie Neth reemplazando a su
artillero bothan perdido en la misión de los planos. El escuadrón
fue casi totalmente aniquilado en la batalla. Se supone, sin embargo, que
tenían un importante papel decidido por Ackbar y que, pese al coste
en vidas, estuvieron a la altura (De hecho, Salm fue ascendido a general).
- El Escuadrón Oro, bajo el mando directo de Lando, estaba compuesto
de cazas demasiado variados, como los cazacabezas Z-95 de Tala.
- El Escuadrón Verde, de cazas ala-X y ala-A para escolta, bajo el
mando de Arveyl Crynyd. Destaca el popular alderaaniano Tycho Celchu como
Verde 3 Asignados como pantalla de cazas para cubrir a Jefe Oro, hicieron
lo que pudieron con todas las bajas.
- El Escuadrón
Pícaro, a veces llamado Rojo, bajo el mando directo de Wedge
Antilles.
Poco tiempo antes, la Alianza Rebelde había rescatado a un importante
líder sullustano capturado por los imperiales,
y los sullustanos, que llevaban bastante tiempo rebelándose contra
el Imperio, obligaron a su corporación gobernante pro-imperial a
votar para alcanzar oficialmente la secesión del gobierno. La flota
rebelde se reunió cerca de Sullust para reunirse antes del ataque.
El comandante Syub Snunb, de la Guardia Sullustana, recibiría el
honor de llevar a la flota rebelde desde Obica, en el borde del sistema,
hasta Sullust, y después recibiría el mando de la fragata
Antares Seis.
En una reunión teóricamente de alto secreto (que no pasó
desapercibida para el alto mando imperial), Madine, Ackbar y Mon Mothma
explicaron el plan a seguir, y se reveló que el general Solo se
había ofrecido voluntario para liderar el ataque de tierra. Esta
declaración resultó frustrante para Orrimaarko, que deseaba
ese puesto. Sin embargo, Solo no tenía una tripulación para
la lanzadera, así que prácticamente todos sus amigos que
habían participado en su rescate se ofrecieron voluntarios. Notable
fue la excepción de Lando Calrissian, recién nombrado general,
que recibió el rango de Jefe Oro para encargarse de codirigir con
Wedge Antilles el ataque de los cazas. Impresionado por su amigo, Solo
le cedió el Halcón Milenario para ese trabajo. El
copiloto de Calrissian en esta labor sería el héroe sullustano
Nien Nunb.
La lanzadera de Solo abandonó Sullust en dirección a Endor,
y mientras tanto el emperador desestimaba el valor de la presencia rebelde
en Sullust. Sin embargo, ordenó a toda la flota imperial de Piett
mantenerse oculta detrás de la luna. Entre éstos estaban
los destructores clase Imperial-I Formidable, Implacable,
Rostro y Vengador; los destructores clase Imperial-II Vehemente,
Virulencia y Quimera, los destructores clase Victoria Adjudicador
y Dominador, el Ejecutor y varios otros hasta ahora no identificados.
Piett y sus hombres lo ignoraban, pero en realidad el emperador estaba utilizando
una técnica de la Fuerza para controlar sutilmente las acciones
y la moral de prácticamente todos los componentes de la Marina Imperial.
La lanzadera logró atravesar el bloqueo naval de Endor utilizando
una autorización robada, pero la autorización, si bien válida,
era lo bastante poco ortodoxa para llamar la atención. El Imperio
sabía que los rebeldes ya estaban allí, e informaron al búnker.
De camino al búnker, el comando encontró una pequeña
unidad de dos soldados exploradores. Han Solo intentó ocuparse de
ellos silenciosamente, pero fue un desastre y, pese a que Solo combatió
a uno de los soldados en un emocionante cuerpo a cuerpo, cuando al menos
uno de ellos llegó a su moto jet, Luke y Leia se vieron obligados
a iniciar una temible persecución a través del frondoso bosque
a casi 300 km/h, a la que no tardaron en unirse otros dos exploradores.
Aunque Skywalker y Organa lograron acabar con todos ellos (Entre los que
se encontraban Misik y Barich, este último cuando miró hacia
atrás para buscar a su presa), se separaron durante el proceso.
Mientras tanto, Darth Vader pretendía reunirse con el emperador,
pero descubrió que una horda de dignatarios, correos y sicofantes
variados habían llegado con el mismo propósito. Vader despreciaba
a "esos necios pomposos" y se dirigió al elevador para ir a la torre
del emperador. Un oficial imperial le ordenó detenerse, y Vader
utilizó la Fuerza para estrangularle. Sin embargo, para no ganarse
la enemistad del emperador, Vader dejó vivo al oficial y se alejó
sin haber visto a su amo.
Una pequeña flota imperial fue a hostigar a la flota rebelde
en Sullust, para indicar que habían percibido su presencia. La flota
imperial incluía, entre otros, el destructor clase Victoria Errante,
el destructor clase Victoria-II Protector y el crucero clase Carraca
Nexo. No fue un verdadero problema, porque de todos modos tenían
que irse pronto.
Al volvar donde estaba el comando rebelde, Skywalker descubrió
que Leia aún no había aparecido, y Solo, preocupado por la
mujer a la que ama, ordena a Derlin llevar al comando hacia el generador
del escudo mientras él, Skywalker, Chewbacca y los dos androides
buscan a su aliada perdida.
Ésta había quedado aturdida después del choque
de su moto-jet, y fue encontrada por el ewok Wicket
Wastry Warrick. Wicket amenazó a Leia varias veces, sobre todo
cuando ésta hizo un gesto extraño al quitarse su casco. Con
gestos amistosos y un regalo de comida, Leia consiguió confraternizar
con el inicialmente reacio Wicket. Éste observó, gracias
a su agudo olfato, la presencia de un imperial en las inmediaciones y se
ocultó. Leia no entendía el comportamiento de su nuevo amigo
y, mientras intentaba buscar una explicación, apareció el
cabo Oberk y la amenazó. Sólo gracias a la cooperación
entre Leia y Wicket, Oberk fue derrotado. Wicket llevó entonces
a Leia al Pueblo del Árbol Brillante, donde consiguió ser
miembro honorario de la tribu.
Mientras tanto, en la Estrella de la Muerte, los dignatarios imperiales
habían terminado su reunión y Vader esperaba poder hablar
ya con su amo. Dos guardias reales se enfrentaron a Vader, pero el lord
del sith usó la Fuerza para estrangularles brevemente y, antes de
matarles, usó el truco mental para hacer que se alejasen. Finalmente,
Vader se encaró con su amo con el conocimiento de que Luke Skywalker
estaba entre los rebeldes que habían aterrizado en Endor.
El susodicho acababa de encontrar el casco de Leia en la luna boscosa.
Sabiendo que Leia había estado allí, Luke le preguntó
a Han si Chewbacca podía usar sus agudos sentidos para encontrar
a Leia. La exploración determinó que "algo más" había
estado en la zona, y ese "algo más" no era un imperial. Esta criatura
desconocida había cubierto cuidadosamente los rastros de ambos cuando
se alejó, así que podría haberse llevado a Leia.
Sin embargo, Chewbacca encontró otra cosa que atrajo su atención:
Se trataba de un pedazo de carne muerta en un palo. Cuando Chewbacca intentó
hacerse con la carne, el equipo de rebeldes descubrió que se trataba
de una red de caza compuesta por una fibra sólida. Los rebeldes
lograron liberarse, pero cayeron en manos de una partida de caza ewok liderada
por Teebo, que les amenazó con su
lanza (Lo cual no deja de ser curioso, puesto que Teebo prefiere el hacha
de piedra como arma de elección). Los ewoks capturaron a los rebeldes,
pero se sintieron impresionados al ver al androide C-3PO, que además
era el único podía hablar su idioma. Confundiéndole
con el dios El Áureo, los ewoks capturaron a los otros rebeldes
orgánicos para comérselos en un banquete en honor a El Áureo.
R2-D2, por su parte, sería desguazado para reaprovechar sus fragmentos.
Cuando los ewoks se preparaban para encender fuego debajo de sus presas,
pese a las medidas preventivas que intentaba tomar el general Solo, El
Áureo les amenazó, siguiendo las indicaciones de Luke Skywalker,
con usar su poderosa magia contra ellos si no dejaban en paz a sus ungidos.
Los ewoks, sin embargo, continuaron con su estrategia habitual. Ni siquiera
la insistencia de la princesa Leia logró convencerles. Entonces,
Luke Skywalker utilizó sus poderes de la Fuerza para hacer que C-3PO
se elevase en el aire sobre su trono. Los ewoks se sintieron especialmente
confusos e impresionados, y aceptaron soltar a sus prisioneros. R2-D2 se
vengó utilizando su capacidad de electroshock para molestar al ewok
que más había insistido en desguazarle. Mientras tanto, C-3PO
se sentía impresionado por lo que creía eran sus propios
poderes.
El comando de Derlin tuvo varios problemas en el proceso. Delevar, de
gatillo fácil, estuvo a punto de revelar su posición disparando
al azar, pero Derlin le retuvo. Sin embargo, fue imposible evitar que Dacia
resultase herida en un encuentro con soldados exploradores.
Esa misma noche, C-3PO relató a los ewoks la historia de las
muchas aventuras de los héroes de Yavin, en correcto ewokés
y con interesantes efectos de sonido. Después de esto, los rebeldes
intentaron que los ewoks se uniesen a su causa, ora por el peligro que
suponía el Imperio, ora por religión, ora por los árboles
que el Imperio destruía. Fue Wicket quien acabó convenciendo
al Jefe Chirpa, animándoles a combatir no por los árboles,
sino por las hojas de los árboles, que aguantan como pueden contra
elementos superiores. Esta narración convenció a las criaturas
para que aceptasen a los rebeldes en su tribu, ansiosos por formar parte
del relato. Debido a su cultura, mito y vida están fuertemente entrelazados
para los ewoks. Al convertirse en parte del relato, los ewoks se convertirían
en parte de la rebelión.
El Jefe Chirpa convenció al Consejo de Ancianos para que se pusiesen
del bando de los rebeldes, pese a que Logray era reacio. Sin embargo, en
una decisión que pudiese poner en peligro a la tribu, Logray no
tenía carta blanca y debía contar con la aprobación
del Consejo. Chirpa incluso contactó con la tribu Panshee para que
contribuyesen al esfuerzo anti-imperial.
Mientras tanto, Luke Skywalker sintió la necesidad de enfrentarse
personalmente a su padre, Darth Vader. Después de revelarle a Leia
que ella y Luke eran hermanos gemelos e hijos de Vader, se rindió
a los imperiales; Leia explicó a los demás que el plan de
Luke era distraer a Vader. Uno de los soldados a los que se rindió,
Arno, le llevó ante su superior, el mayor Lesim, que estaba de servicio
en ese momento. Lesim quería sacarse una holografía con el
criminal más buscado de la galaxia pero Luke, impaciente por reunirse
con su padre, utilizó la Fuerza para que le llevasen ante Vader.
Pese a que Luke creía que Anakin Skywalker no le traicionaría,
Vader le llevó ante el emperador.
Mientras tanto, el equipo de Solo se acercó lentamente al generador
del escudo. Solo declaró que él y Chewbacca habían
entrado en lugares más protegidos, pero Chewbacca expresó
que no recordaba cuándo. Su amigo tuvo que hablarle de las bóvedas
de especia de Gargon, pero tampoco él recordaba cómo
lo habían hecho, hasta que uno de los guías ewoks indicó
que el generador del escudo tenía una puerta trasera, y Han indicó
que había sido así como lo habían hecho.
La flota rebelde, bajo el mando de Lando Calrissian, Wedge Antilles
y Ackbar, se preparaba en ese momento para el ataque sobre la Estrella
de la Muerte. Lando confiaba en que su amigo Han Solo no le fallaría.
Después de todo, Han había fallado a Lando "únicamente
una vez, en un sistema lejano, muy lejano...". La flota rebelde utilizó
el nodo de la Cañería Santuario en Sullust para llegar a Endor.
Solo y sus aliados discutieron sobre cómo infiltrarse en el generador
del escudo, pero el ewok Paploo, ansioso
por llegar a la acción, distrajo a los imperiales robando una moto
jet. Esto permitió a los rebeldes eliminar a la guardia externa.
Pero, como el emperador en ese momento reveló a Luke Skywalker,
sus amigos se dirigían a una trampa. Una legión de tropas
perfectamente preparadas, con líderes de élite y equipo especializado,
lograron capturar al comando. Chewbacca usó su gran fuerza para
lanzar una puerta sobre cinco soldados de asalto y eliminarlos, pero era
inútil.
La flota rebelde salió del hiperespacio en ese momento, cayendo
de lleno en la trampa del emperador. La flota imperial apareció
de pronto: Como expresó locuazmente Nien Nunb, les estaban esperando.
En cuanto Lando dedujo que el escudo deflector seguía operativo,
ordenó a todos los cazas detenerse, pero tres alas-X no lograron
parar a tiempo, colisionaron con el escudo y explotaron. Era un sacrificio
tal vez mayor al que podían permitirse.
En la superficie planetaria, sin embargo, los ewoks hicieron su llamada
a la guerra para avisar a todo el Pueblo del Árbol Brillante y a
la tribu Panshee, y atacaron a los imperiales. Planeadores y catapultas
desconcertaron a unos imperiales que no estaban preparados para ese tipo
de tácticas, por no mencionar que los nativos estaban aprovechando
el terreno hasta un nivel insospechado. En el caos subsiguiente, Leia y
Han decidieron intentar nuevamente entrar en el búnker. R2-D2 resultó
abatido mientras intentaba conseguir esto, así como la ewok Niki,
esta última fatalmente.
Pero el superláser de la Estrella de la Muerte estaba totalmente
operativo y, bajo el mando directo del moff Jerjerrod, destruyó
el crucero calamariano Libertad, matando a cientos de rebeldes.
Desesperado, Calrissian ordena a los cazas enfrentarse a las naves comandante
a quemarropa. La protesta inicial de Ackbar indicaba que no se conocía
ninguna táctica para combatir una nave comandante a quemarropa desde
un caza, pero Calrissian se estaba marcando un farol: No sabían
más que los imperiales, pero los imperiales creerían que
sí. Jerjerrod utilizó el superláser para destruir
más cruceros clave de los rebeldes. Mientras tanto, monitoreando
toda la situación desde el núcleo informático de la
Estrella de la Muerte, IG-88A contaba con que los imperiales pudiesen destruir
a la pequeña flota rebelde.
Al mismo tiempo, la nave turista Endor Express, bajo el control
del androide piloto RX-24 "Rex" (en su primer vuelo), después de
varios incidentes notables, apareció en mitad de la batalla con
un montón de turistas que lamentaban haberse metido ahí.
Chewbacca consiguió hacerse con un AT-ST, más exactamente
con Tormenta 7, con la ayuda de los ewoks Icky
Ted y Charnuba, incapacitando al
mayor Marquand y al teniente Watts. Varios ewoks inutilizaron más
AT-STs virtiendo bolsas de aceite de lagarto hirviendo. La tecnología
ewok sirvió contra otros varios AT-STs, y así los rebeldes
y los ewoks aliados consiguieron hacerse con la victoria. Finalmente, Han
encontró el modo de entrar en el generador del escudo y colocar
las cargas.
El generador del escudo explotó, pero el moff Jerjerrod tenía
órdenes específicas de cómo comportarse en ese caso.
El emperador en persona le exigió que, en caso de que el generador
de escudo llegase a ser destruido, la luna boscosa de Endor habría
dejado de tener utilidad práctica, y por eso la Estrella de la Muerte
debería destruirla. Así, al menos, la persona o personas
responsables de la destrucción del generador del escudo serían
aniquiladas en represalia. Jerjerrod empezó a girar la Estrella
de la Muerte para destruir Endor.
Mientras tanto, Luke Skywalker había logrado vencer a Darth Vader
en combate personal y estaba a punto de matarle, pero entonces comprendió
que eso era lo que quería el emperador. Ignorándolo los tres,
el escudo había caído y la flota rebelde empezó a
atacar a la masiva Estrella de la Muerte mientras el emperador atacaba
a Skywalker. Sin embargo, Vader reaccionó atacando al emperador
y tirándolo al pozo reactor de su sala del trono, aparentemente
matándole. Aunque después se descubriría que el emperador
era más difícil de matar que eso, la situación de
incorporeidad le impidió seguir utilizando la técnica mental
para controlar a la mayor parte de la flota.
Lando y Wedge se introdujeron al mismo tiempo en el esqueleto de la
Estrella de la Muerte, en busca del generador de potencia. De cerca les
perseguía el Escuadrón Guadaña, pero no lograron superar
la maniobrabilidad que éstos tenían.
Al mismo tiempo, Arvel Crynyd, Jefe Verde, viendo que su nave estaba
condenada, eligió lanzarse contra el puente de mando del Ejecutor.
Esto acabó con el equipo de mando del superdestructor y lanzó
la nave contra la Estrella de la Muerte.
Vader falleció poco después, por las heridas sufridas
en combate contra el emperador, pero para entonces se había redimido
y había vuelto a ser Anakin Skywalker. Lamentó entonces no
haber podido agradecer a Yoda el entrenamiento que le había dado
a Luke, y expiró satisfecho de que su hijo se hubiese convertido
en el hombre que él una vez había querido ser.
Lando Calrissian y Wedge Antilles lograron llegar al núcleo reactor
de la Estrella de la Muerte y Lando lo bombardeó con torpedos de
protones mientras Wedge se encargaba del regulador de potencica que impedía
que se sobrecargase el núcleo reactor en caso de impacto de torpedos
de protones. Ellos apenas consiguieron escapar. Por el contrario, Jerjerrod
seguía intentando girar la Estrella de la Muerte para destruir el
planeta, pero la estación espacial explotó cuando el moff
necesitaba apenas treinta segundos más. IG-88A también fue
destruido.
Sin la Estrella de la Muerte como baza real ni el apoyo mental del emperador
a su moral y tácticas como baza psicológica, la flota imperial
se sintió abatida y prácticamente derrotada. ¡Al destruir
la Estrella de la Muerte y el Ejecutor, los rebeldes habían
conseguido lo imposible! Sin duda, incluso el emperador habría muerto.
¿Era sensato arriesgar inútilmente sus vidas contra una fuerza
como ésa? El Virulencia escapó rápidamente,
intentando alcanzar el espacio imperial antes de que la Alianza les atrapase.
El comandante del Quimera falleció durante el conflicto y
el capitán Pellaeon, tomando el mando de la nave, ordenó
la retirada general hacia Annaj. El capitán Dorja, del Implacable,
obedeció la orden aunque no estaba nada contento con que Pellaeon
hubiese asumido el mando. Incluso la 181ª de cazas se retiró.
Durante su retirada, la flota imperial contaminó el mundo cercano
de Biivren.
Aún así, muchas naves comandante imperiales, como el Adjudicador,
que había sufrido daño pesado y no estaba en condiciones
de maniobrar rápidamente, fueron apresadas por los rebeldes. Otros
seis destructores fueron destruidos por los rebeldes. Al final de la batalla
apareció la nave de patrulla Filo del Puñal, que comprendió
que el día estaba perdido, pero logró destruir la corbeta
Antigua República antes de retirarse.
Se cree que poco después, probablemente esa misma noche, el Impenitente
estuvo en Endor lanzando droides sonda sin ser detectado y luego se retiró
a Annaj.
Mientras tanto, con los fragmentos de la Estrella de la Muerte aún
ardiendo al entrar en la atmósfera de Endor, los rebeldes celebraban
su victoria. A nivel personal, Han Solo y Leia Organa reconocieron lo que
sentían el uno por el otro, Luke Skywalker incineró la armadura
de Darth Vader, y los espíritus de Obi-Wan Kenobi, Yoda y Anakin
Skywalker se aparecieron a quienes podían verlos. Desde una perspectiva
un poco más política, los ewoks dieron una fiesta para celebrarlo,
demostrando que sus aptitudes musicales les permitían construir
instrumentos armónicos con fragmentos de armaduras imperiales, y
la Alianza concedía el Parche de Endor a todos los pilotos de caza
supervivientes, incluyendo el coronel Bowman Gavin, Ibtisam
y Derek Klivian. Se ignora si las víctimas (entre las que se contaban
Arvel Crynyd, Snoke Loroan, Morgan Q. Raventhom, Lak Sivrak y Jennie Lee
Taggar) recibieron alguna condecoración póstuma, aunque un
destructor capturado poco después fue llamado Crynyd en honor a
Jefe Verde.
Muchos científicos han especulado sobre la posible subsistencia
de vida en Endor después de esto, por causa del efecto de los restos
de la Estrella de la Muerte sobre el ecosistema. A menos que se hubiesen
tomado unas medidas particularmente drásticas y de naturaleza totalmente
desconocida en el momento inmediatamente posterior, se supone que, en el
mejor de los casos, la vida en Endor habría sufrido un importante
cambio y habría sido necesaria la introducción de tecnología
para salvar a los nativos. De hecho, el Imperio mantuvo esta propagando,
explicando que los pequeños y simpáticos ewoks, criaturas
primitivas de un planeta lejano, se habían extinguido por la acción
directa de los criminales rebeldes. Sin embargo, en la actualidad se sabe
que los ewoks siguen en Endor con su vida normal, ignorando incluso que
el Imperio mantiene esta postura.
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