Por supuesto, Jabba no iba a permitir que un excelente técnico
y operario de esquifes se les escurriese entre sus grasientos dedos, así
que, aunque se atuvo estrictamente a la letra del contrato, estafó
impíamente a Barada: Le pagaría la cantidad estipulada en
el contrato, y después le cobraría exactamente la misma cantidad
por comida y alojamiento. La idea de Jabba era que, como Barada no tendría
otro modo de obtener dinero, seguiría sirviendo indefinidamente
al hutt.
(Jabba no contaba con que Barada apudiese jugar al sabacc y obtener
unos ingresos adicionales, pero de todos modos Barada no era ningún
gran jugador, y tardaría en ganar 2.000 créditos por ese
camino).
Irónicamente, Barada era uno de los pocos cortesanos de
Jabba con verdadera responsabilidad. Lejos de sentarse desocupadamente
y "aconsejar" a "Su Eminencia" (que después haría lo que
le viniese en gana), Barada estaba al mando de algo. Estaba al mando de
los repulsores. Era responsable de la obtención, modificación,
tripulación y cuidado de los esquifes adaptados al clima de Tatooine
y habitualmente modificados con armamento y una cobertura externa más
resistente. Similarmente, y debido a que Barada era también un buen
combatiente, debía capitanear la barcaza cuando ésta entraba
en combate o cuando Jabba estaba a bordo. Incluso los relativamente pequeños
repulsores que daban al hutt movilidad personal, caían bajo la responsabilidad
de Barada.
Aunque Barada era un solitario, se llevaba bien con Ephant Mon.
El chevin confiaba en el mecánico y le pedía consejo. Puesto
que Ephant era espía de Jabba en busca de conspiraciones y traiciones,
Barada estaba bien informado de lo que sucedía en la corte.
Algunos dicen que Barada descubrió el cuerpo sin vida de Ak-Buz entre la basura del palacio, pero parece que en realidad fue Porcellus quien lo encontró.
Cuando Jabba ordenó tirar a Luke Skywalker, Han Solo y
Chewbacca al pozo de Carkoon, Barada estaba en el esquife y fue el primero
en caer al sarlacc.
Se podría interpretar que, en este último acto,
Barada fue, al fin, libre.
Este enorme klatooiniano nació en el planeta colonia de
Shawti. Hijo de una familia que había
servido al clan Desilijic durante siglos, Umpass-Stay sirvió
durante su niñez en una plantación agrícola
propiedad de Shebba Kalshi Desilijic.
Cuando Umpass-Stay se hizo mayor, recibió entrenamiento
para mantener los baños de lodo de los líderes del
clan hutt. Esta tarea se le daba bien, y Umpass-Stay llegó
a ser el favorito de Shebba. Por ello fue ascendido para servirle
personalmente, primero como catador y más tarde,
después de recibir entrenamiento en técnicas de
autodefensa, como guardaespaldas.
Debido a sus nuevos trabajos, Umpass-Stay se pasaba el rato
viendo las idas y venidas del negocio hutt. Combinando un talento
natural con la práctica, acabó descubriendo que
tenía una habilidad para juzgar las intenciones de quienes
se acercaban a Shebba. Éste aprendió a confiar en los
instintos de Umpass-stay, y le convirtió en secreto en su
consejero de confianza. No era extraño que Shebba tuviese
un guardaespaldas klatooiniano cuando saludaba a parientes y asociados.
Tan brillante como pudiera parecer el futuro de Umpass-stay,
de pronto se fue al garete cuando el klatooiniano malinterpretó
las intenciones de un sobrino de Shebba llamado
Jabba. Sintiéndose insultado,
Jabba hizo matar a Shebba por desconfiado, y entonces se fijó
en Umpass-stay.
Jabba había oído hablar muy bien y muy mal de ese
klatooiniano, alabanzas y maldiciones. Así que le ofreció
un empleo en su corte, similar al que había tenido para Shebba:
Umpass-stay se haría pasar por un humilde sirviente, y vigilaría
a otros miembros de la corte, intentando averiguar quiénes planeaban
dañar a Jabba.
Umpass-stay aceptó (a fin de cuentas, él seguía
siendo esclavo de los Desilijic) y fue a Tatooine. Normalmente, servía
aperitivos a los miembros de la corte, aunque ocasionalmente tocaba un
gran tambor junto a Ak-Rev, que era
un verdadero maestro de ello (Muchísimo mejor que Umpass-stay). Ambos pasaron a ser dos de los guardespaldas de más confianza de Jabba.
En cierta ocasión, un equipo de asesinos se hizo pasar
por una banda de juglares para intentar matar a Jabba. Fracasaron, por
supuesto. Sin embargo, Jabba pasó a desconfiar de los músicos
desconocidos y, a partir de ese momento, insistió en que todas las
bandas que tocasen en su corte tuviesen acompañamiento de tambores.
La mayoría de la gente, ignorando las habilidades de lucha y de
observación de Umpass-stay (y el bláster que escondía
mientras actuaba), creía que se trataba de otra en la larga lista
de excentricidades de Jabba.
En ocasiones, algunas bandas no querían incluir el tambor
de Umpass-stay en sus actos por lo que denominaban, y cito, "principio
artístico" porque los tambores no iban bien con su música.
Jabba no veía que esto fuera un problema, pero entonces insistía
en que las bandas tocasen en el interior del pozo del
rancor. Los sonidos subsiguientes no
tenían necesariamente una gran calidad musical, pero de
todos modos a Jabba le divertían igualmente.
En cuanto se extendió el rumor de lo que sucedía
con estas bandas, el tambor se benefició de un gran renacimiento
entre los grupos musicales que trabajaban en el palacio de Jabba y Mos
Eisley.
Por ejemplo, Max Rebo y su banda consiguieron en cierta ocasión
un empleo en el palacio de Jabba. El mayordomo twi'lek
de Jabba, Bib Fortuna, les advirtió de los deseos del hutt.
Por eso la banda Rebo, cuyos componentes tenían intención
de vivir largos años, trajo preparados varios números
musicales que incluían acompañamiento de tambores.
Umpass-stay tocó con Max Rebo durante un tiempo, mientras
vigilaba (no sin motivos) a un sospechoso guardia que se hacía
llamar Tamtel Skreej. Umpass-stay descubriría que Skreej, un
humano con bigote negro y piel oscura, no era en absoluto quien
fingía ser.
Pero, antes de que pudiese hacer nada, apareció un tal
Skywalker, una especie de Jedi o algo parecido, y Jabba decidió
tirarle a él y a sus compañeros al
sarlacc. Umpass-stay no pudo acompañar
a los demás hasta el pozo de Carkoon sin destrozar su
tapadera como sirviente menor; simplemente, no tenía
autoridad para ser invitado. Tampoco llegó a tener
ocasión de advertir a su amo del engaño de "Skreej".
Cuando Jabba murió, Umpass-stay volvió al espacio
hutt. Lo último que se ha sabido de él es que estaba
trabajando para otro miembro del clan Desilijic.
Cuando Jabba murió, Umpass intentó llegar a Mos Eisley con Ak-Rev, pero fueron emboscados por moradores de las arenas. Los moradores mataron a Ak-Rev acusándole de crímenes contra los banthas, pero dejaron libre a Umpass-stay.
Umpass-stay llegó a Mos Eisley, y allí conoció a Darson Kinderlot. Kinderlot aceptó llevar al klatooiniano al espacio hutt, y allí, finalmente, Umpass-stay acabó trabajando para Jocoro Desilijic Tiure en Du Hatta.


Aquí puedes encontrar todas las
fuentes consultadas en la elaboración de este artículo.
Si deseas leer sobre alguna raza alienígena en particular,
no tienes más que mandarnos un emaul ;-)
© SithNET - 2002
|