"¡Mire esas balizas espaciales, amo Luke! ¿Por cierto, qué tipo de planeta es Vorzyd 5?"
"¡Lo llaman el Mundo del Jugador, Trespeó! ¡Es un planeta sin límites… donde todo vale… y todo está controlado por el emperador… para…su beneficio, Luke!"
(C-3PO y la Princesa Leia Organa)

En una sociedad lo bastante grande, siempre habrá alguien que ofrezca aquéllo que otro desee consumir, y los juegos de azar nunca fueron una excepción. Muchos ciudadanos de la galaxia, especialmente los que tenían dinero de sobra, disfrutaban apostándolo en un intento de multiplicarlo. La referencia en este campo, más allá de las omnipresentes manos de sabacc y las carreras de amorfoides umgulianos, era el Mundo del Jugador. Conozcamos hoy el sistema Vorzyd.

El sistema Vorzyd se encontraba en el Borde Exterior y formaba parte de La Comunidad, una confederación política de nueve sectores que trabajaban con objetivos comunes. La Comunidad estaba gobernada por humanos en el planeta Columex, en la Ruta Perlemiana, que además controlaban el acceso a todos estos nueve sectores por su posición estratégica en la interseección de dos rutas (el Corredor Salin y la Ruta de Comercio Perlemiana) y, por tanto tenían importante influencia: Cuando había un Senado Galáctico, por ejemplo, los votos de la Comunidad podían ser decisivos. Algunos creían que Columex se aprovechaba demasiado de su posición, pero indiscutiblemente había convertido la Comunidad en una potencia económica de la zona.

Uno de los sectores de la Comunidad era el sector Vorzyd, que incluía los sistemas Columex, Farbog, Hraki, Kilmauls, Paigu, Seftek y Yablari. Existía también el Cúmulo de Vorzyd, un conjunto de once sistemas que habían sido explorados y colonizados por los nativos de Vorzyd en tiempos pretéritos, como Hraki, Kilmauls, Paigu y Seftek.

El sistema Vorzyd se encontraba en el Corredor Salin, orbitaba la estrella Vorzyd y tenía cinco mundos: Vorzyd I, una roca abrasadora sin lunas; Vorzyd II, un gigante gaseoso con ocho lunas; Vorzyd III, un mundo terrestre con una luna; Vorzyd IV, otro mundo terrestre con otra luna, y Vorzyd V, un mundo terrestre sin lunas. A lo largo de la historia, se utilizaron numerales variados para nombrarlos: A veces se decía Vorzyd V, a veces Vorzyd 5 y a veces Vorzyd-5.

Los dos mundos más externos estaba habitados. Vorzyd 4, el mundo de origen de la especie vorzydiak y hogar de su población más grande, era un mundo industrial, conocido como la fábrica del Cúmulo Vorzyd porque producía y exportaba la mayor parte de su comida y bienes duraderos. Los cielos estaban despejados, por lo que las noches eran tan oscuras como silenciosas; y la fauna local incluía un ave de presa de aguda mirada llamada hark.

En cuanto a Vorzyd 5, era un mundo templado, con gravedad estándar y atmósfera respirable. Sus medidas hacían de él un mundo pequeño: Diámetro de 14.900 kilómetros, día de 22 horas estándar y año de 277 días estándar. Ciudades y llanuras cubrían su superficie; la ciudad capital era Efavan y había sido reconstruida para cubrirla de casinos en los últimos años de la República, que después proveían de dinero al Imperio. Desde el espacio y en las rutas orbitales, docenas de holo-paneles, anuncios holográficos y vallas publicitarias anunciaban la ubicación de Vorzyd 5 en el sistema.

Vorzyd V visto desde el espacio.

Los vorzydiaks era una especie cuasihumana de seres físicamente similares a los humanos en general. Las principales diferencias eran unos ojos un poco demasiado grandes para sus cabezas, dos largas antenas y en ocasiones una pigmentación algo diferente. Un humano podía pasar por vorzydiak simplemente poniéndose un sombrero para ocultar su falta de antenas.

Entrando en mayor detalle, los vorzydiaks eran humanoides que alcanzaban un metro ochenta de estatura media en la madurez. Algunos de ellos tenían la piel amarilla, dorada o de color gris oscuro; y su cabello podía tener un exótico tono azul, o ser de un mundano castaño.

Sus grandes ojos eran tan expresivos como los de un humano, pudiendo parapadear, llorar y expresar confusión o miedo abriéndolos en exceso. No era el único órgano sensorial sobredimensionado: Los oídos de un vorzydiak eran especialmente sensibles y vulnerables a sonidos muy agudos.

En cuanto a las largas antenas de un vorzydiak, que colgaban o se agitaban, eran un excelente medidor del estado de ánimo de un vorzydiak. Si las antenas se estremecían de preocupación o dolor, entonces el vorzydiak realmente tenía estas sensaciones, aunque intentase mantener una actitud flemática. Un vorzydiak sorprendido por algo inesperado podría ondear salvajemente sus antenas. La incomidad se mostraba retorciendo las antenas y a menudo con una mirada de confusión. Un vorzydiak que estuviese nervioso podría mover sus antenas hacia adelante, al punto de tocar a una persona cercana; uno que estuviese a la vez nervioso y agresivo movía sus antenas como si sus puntas fuesen avews buscando cómo aterrizar; y quien estuviese muy frustrado agitaría sus antenas como si intentase anudarlas. Si perdía los estribos, las antenas apuñalaban el aire; y se podían enderezar si estaba especialmente serio. Un vorzydiak realmente aterrado podría quedar totalmente paralizado, incluyendo sus antenas.

Una vorzydiak.

La esperanza de vida de un vorzydiak, de 90 años, era una década superior a la de un humano. La adolescencia biológica empezab a los trece años, y la madurez llegaba a los veinticinco, bastante después que la de un humano. Similarmente, no sentían achaques hasta los cincuenta, y no se jubilaban hasta los setenta y tres años. Biológicamente, un vorzydiak podía llegar a vivir tres lustros más sin problemass, pero en algunas culturas expiraban antes porque sentían sus vidas vacías al no poder contribuir a la sociedad.

Los vorzydiaks estaban acostumbrados a mantener una rigidez de pensamiento. Si se les sacaba de su zona de confort, se sentían físicamente indispuestos y podían llegar a sufrir enfermedades.

Los vorzydiaks eran vulnerables al daño como la mayoría de especies y podían morir por aplastamiento, explosiones, disparos de bláster o ausencia de oxígeno.

Los poderes de la Fuerza tenían efecto sobre los vorzydiaks, y era técnicamente posible que un vorzydiak aprendiese a usar la Fuerza, aunque no hay precedentes conocidos de esto último.

Los vorzydiaks tenían reputación de trabajar duro, y también de ser pensadores inflexibles y testarudos hasta casi el absurdo. Aunque costaba hacerles ver otros puntos de vista, otras especies admiraban su dedicación, lealtad y asombrosa ética de trabajo. Realmente las mentes vorzydiaks estaban adaptadas para ser versátiles, tener una precisión matemática superior y dominar rápidamente tareas especializadas; pero al mismo tiempo tenían menos intuición que otras especies y dificultades para aceptar ideas y costumbres ajenas a su cultura; situaciones especialmente inesperadas podían llevarles casi hasta la catatonia. Se hablaba de un caso crítico en que un desastre industrial en Vorzyd V obligó al planeta a endeudarse, pero sus líderes no fueron capaces de adoptar cambios para reducir el gasto por la pérdida de producción, y endeudaron el planeta durante siglos.

Vorzyd 4 consiguió un éxito notable como mundo industrial durante la Antigua República. Todos los habitantes trabajaban los siete días de la semana. Los niños tenían clase cada día hasta cumplir los diez años, momento en que pasaban a tener seis días de clase y uno de trabajo; y cada año posterior hasta los diecisiete, tenían un día más de trabajo y uno menos de clase. A los setenta años, los vorzydiaks se jubilaban porque se creía que no podían mantener el ritmo de trabajo, pero a menudo morían pocas semanas después por causas desconocidas.

El duelo en Vorzyd 4 era un tema delicado. Los cadáveres eran cubiertos con pesadas telas negras y retirados en un vehículo. Los amigos y familiares del difunto quedaban atrás, guardando silencio excepto por el vibrar de sus antenas. Las comunidades más emotivas conversaban entre sí más tarde para intercambiar recuerdos del finado.

Por entonces, Vorzyd 4 estaba obsesionado con la productividad y con seguir los planes con acción inmediata. Hasta el ritmo de caminar era rápido, y no dedicaban atención a la conversación casual durante los paseos. Cuando no trabajaban, sólo comían y dormían, dedicando cualquier momento de ocio a leer instructuales (manuales de instrucciones) para mejorar su trabajo. La despedida tradicional era "a trabajar", y repentían como un mantra "Que mañana sea tan productivo como hoy". Si una familia no se reunía para que uno de sus miembros trabajase más, eso era rutinario y admirable.

Esa actitud era negativa para la sique vorzydiak. Un vorzydiak era incapaz de manejar nada que se saliese de su rutina y, si no podía trabajar por algún motivo, sentía nauseas literales y entraba en shock. Eran capaces de enfermer por el estrés, lo cual amenazaba su salud física y mental a la vez. Los jubilados y su muerte prematura eran un caso típico.

En cuanto a los jubilados, eran enviados a edificios dedicados y a partir de ahí, sus familiares y amigos podían visitarles. Eso no sucedía a menudo: Los vorzydiaks no parecían darse cuenta de que había una vida después del trabajo, y muy pocos vorzydiaks podían o sabían mantener una relación emocional con alguien que no trabajase. O con cualquiera, en realidad: Muchos vorzydiaks estaban a un paso de la depresión. En sus silenciosos bloques de jubilación, los pasillos se extendían por todas direcciones con múltiples puertas.

La arquitectura en la ciudad capital de Vorzyd 4 era estandarizada, con edificios hexagonales altos sin gastos estéticos o estilísticos como arcos, decoraciones, toldos o ventanas grandes: Todo era eficiencia, incluyendo el terreno hexagonal y su código de colores anodinos. No había parques ni espacios abiertos, sino barrios que pasaban de "zona de trabajo" a "zona de viviendas" con una línea y un mensaje de megafonía, siendo la única diferencia que los edificios de este segundo lugar eran un poco más bajos. Apenas se podía identificar un edificio por las placas con nombres, y aún así si se sabía qué se buscaba: Multycorp no era sólo una empresa, sino también el edificio de gobierno.

Era un sistema muy organizado para encontrar una zona concreta, pero no ajeno a anomalías. Existían barrios enteros llenos de edificios abandonados. En los viejos despachos vacíos aún quedaban muelles polvorientos y olvidados.

No había vehículos privados ni paseantes: Todos se movían en lanzaderas comunes, con paredes de transpariacero. Los vorzydiaks salían como una masa y entraban en un espacio de trabajo, en que cada trabajador se ocupaba de introducir información, hablar por un dataset o cualquiera que fuese su tarea, sin cháchara inútil ni una voz alzándose sobre otra.

En un aula, los alumnos miraban fijamente a grandes pantallas mientras un adulto en pie explicaba técnicas de trabajo que adoptar a rajatabla. El pensamiento crítico y las ideas propias no eran estimulados. Por otro lado, era relativamente fácil para un adolescente escabullirse de clase fingiendo una dolencia. Entonces esa persona iría a la enfermería hasta que un adulto le revisase y le diese el alta. La enfermería sólo se podía abrir por fuera.

El domicilio del President Port era de una sola planta y muy poco ostentoso: Estaba amueblado y bien abastecido, como cocina, reflector, tablero de datos y muebles adaptables por ordenador, pero carecía de detalles personales de sus ocupantes. Un visitante de otro mundo, Obi-Wan Kenobi, lo comparó con el espacio estéril que se alquilaba a viajeros en Coruscant; básicamente una habitación de hotel. Era muy representativo de la vida en Vorzyd 4.

Todos los vorzydiaks vestían un mono monocromo sin detalles, sin siquiera cuello de la ropa. Los más rebeldes adolescentes rompían las normas y se adornaban la ropa con tejidos de colores brillantes, sombreros improvisados o pañuelos.

La ciudad de Efavan, en Vorzyd V.

Vorzyd 5 tuvo una cultura totalmente distinta, sobre todo desde que se convirtió en el Muno del Jugador. Tenía una población de dos millardos de seres, de los cuales un 63% eran vorzydiaks; el resto se repartían entre hrakianos (10%), humanos (8%), kilmaulsi (6%), selonianos (4%) y ciento ochenta millones de seres de otras especies, incluyendo paiguns y squalrises. El planeta no podía satisfacer su demanda interna, así que no exportaba realmente, sino que basaba su economía en el sector terciario e importaba, normalmente a Vorzyd 4, bienes de consumo, comida y productos industriales. Aunque los vorzydiaks tenían su propio idioma, el vorzydiak, éste no se usaba oficialmente en Vorzyd 5, posiblemente para favorecer el turismo.

He explicado antes que Vorzyd 5 era el Mundo del Jugador, lleno de casinos y locales de juego. Se decía que en Vorzyd 5, todo vale, lo cual era totalmente falso: Los casinos tenían estrictas medidas de control sobre qué valía y qué no, y muchos juegos estaban amañados para que ganase la casa. Lo que sí se permitía era que un jugador apostase si otra persona iba a ganar o no. De un modo u otro, la mitad de dinero de la galaxia pasaba por esos casinos, y el emperador se llevaba buena parte de los beneficios, gracias a su trato con el corrupto Simon Greyshade. Muy poca gente sabía esto, ni suqiera los ciudadanos de Vorzyd.

La ciudad de Efavan era el sueño de los jugadores y fiesteros, que a menudo eran algunos de los seres más influyentes de la galaxia. La contrabandista Celia "Carmesí" Durasha, copiloto de la Tryan Kajme, recordaba con mucho afecto haber jugado al Azar Cósmico en Vorzyd 5, y desaprobaba los juegos como el sabacc que estaban a su alcance en tiempos de la Guerra Civil Galáctica.

Los casinos tenían varios niveles, con sistemas de antigravedad carísimos, chips físicos que representaban las ganancias, y a menudo guardias de seguridad kilmaulsi. Uno de los casinos más pequeños del distrito Westrex, en la llamada Línea Casino, se llamaba El Bote de la Mano.

El casino más grande y conocido de Vorzyd 5, que databa de la Antigua República, era el Casino Royale: Kilómetros de salas de juego, restaurantse y estadios en una zona céntrica, con variedad de juegos, desde Azar Cósmico hasta sabacc pasando por apuestas de choquebola y de carreras de vainas. La seguridad la ponían cientos de kilmaulsi acorazados y enérgicos, pero extremadamentee ducados hasta con los clientes más indisciplinados; y además una legión de droides policía serie R que patrullaban la zona. Después de un lamentable episodio con droides poco después de la inauguracón, el Royale sólo aceptaba droides crupieres (con la excusa de que podían ser una ventaja abusiva para ciertos jugadores), y se restringía incluso el acceso de cíborgs. El Royale contaba con taxis flotantes pilotados por droides para transportar a sus clientes hasta o desde el puerto espacial o los hoteles.

El Casino Royale.

El río Jokoflujo recorría la ciudad de Efavan y se terminaba sólo al derramarse en Lago Joko.

Además de los casinos, la ciudad de Efavan tenía callejas de tugurios y tiendas poco iluminadas a pie de calle. Destaca entre ellas el Emporio de Hu, una tienda casi legal en que el paigun Kitak Hu vendía armamento y tecnología avanzados. También había tiendas de mirapónica y tubos de carga para llevar mercancías de un punto a otro.

El transporte por tierra en las ciudades o entre ciudades se podía hacer en taxi flotante o coche flotante, con piloto droide. Cintas de transporte llevaban a los peatones de un barrio a otro, pero un turista podía ser atacado por ladrones allí; y el Imperio tenía la capacidad de sabotearlas. Afortunadamente se podía llamar a la policía local, formada por droides que respondían a los problemas de viva voz.

Un droide policía.

Existían además revoloteadores, pequeños speeders aéreos monoplaza que se alquilaban a cientos de visitantes. Este vehículo de metro y medio permitía alcanzar 300 kilómetros/hora en atmósfera, con un techo de vuelo de un kilómetro y una capacidad de carga de diez kilos, y costaba 4.000 créditos nuevo ó 900 usado. Se soñían preprogramar para seguir una única ruta y permitir hacer turismo, desde una altitud segura, con piloto automático y sistemas de autodetección; pero algunos operadores los programaban para conseguir emociones fuertes, como vuelos en picado y rizos. Esto atraía a los turistas más jóvenes, y los que eran jóvenes y ricos sabían sobornar discretamente a los encargados para obtener esta ventaja.

Un revoloteador.

El puerto espacial de Felana (bautizado en honor a la familia dominante de Vorzyd V) era enorme, con capacidad para unas mil naves. Era una distribución circular que conectaba hangares con salones de servicio que ofrecían barracones baratos, centros de reabastecimiento, grúas de reparación, alquiler de revoloteadores y cantinas; a menudo se veía a tripulantes borrachos entre hangares, y cada noche había peleas entre dos tripulaciones rivales o una tripulación y una banda callejera de freelies. Se esperaba que los capitanes protegiesen sus propias naves; algunos lo hacían con sus tripulaciones, con personal de acceso inflexible que detenía a visitantes sin autorización o contratando guardias kilmaulsi. La policía sólo respondía a llamadas de emergencia.

El puerto espacial de Vorzyd V.

Contrariamente a la moda estandarizada de Vorzyd 4, el vecino Vorzyd 5 presentaba una variedad de estilos de vestuario entre los vorzydiaks, muchos de ellos inspirados en las tendencias de otros mundos. Algunos vorzydiaks valoraban la comodidad en sus movimientos. La Presidenta Natala Vanden vestía con ostentación, llevando un gran tocado en su cabeza, una capa similar a las plumas de un ave y con collar con decoraciones.

Pero no todos en Vorzyd 5 tenían estas ventajas: Existían barrios bajos llenos de pobreza, donde habitaban humanos en condiciones de miseria. Según un maestro jedi, la familia de la joven humana Tallisibeth Enwandung-Esterhazy estuvo encantada de entregar a su pequeña a la Orden Jedi, sin posibilidad de volver a verla, a cambio de que la alejasen de su vida de penurias; Tallisibeth tenía una capacidad baja de uso de la Fuerza y por eso fue necesario que sus progenitores suplicasen. Pese a ello, llegó a ser una padawana de éxito identificada por el mote "Scout". Otro nativo humano de Vorzyd 5 fue Bislav Merril, que también dejó el planeta y fue guardia en Ciudad Nube, Bespin.

Tanto Vorzyd 4 como Vorzyd 5 eran democracias, cada una con su Presidente electo.

La cocina de Vorzyd 4 era dura e insípida, de nuevo según la opinión externa de Kenobi. Él simplemente encontraba algunos bocados peores que otros. Se pondía tomar kibi frío o patot panak. El chef besalisko Dexter Jettster ideó hamburguesas a la parrilla inspirándose en sus viajes por la galaxia, y una era la Hamburguesa de Vorzyd: Un medallón de carne coronado por champiñones y tres tiras de kibi, disponible por 6,7 créditos en Coruscant poco antes de las Guerras Clon. Admitamos que Jettster se inspiró más en Vorzyd 5 para esto.

Los vorzydiaks tuvieron poco contacto con la galaxia en general, e incluso se resistieron a tener un Senador (Afortunadamente, les representaba el senador de la Comunidad). Muchos vorzydiaks pasaban todas sus vidas sin ver seres de fuera de su sistema, o al menos de su Cúmulo. Algunos vorzydiaks abandonaban Vorzyd para abandonar el estancamiento en su modo de vida y dejar su propia huella en la galaxia.

Todas las sociedades vorzydiaks enfrentaban el problema de una soceidad adolescente hostil a la conformidad de sus mayores y que, en Efavan, incluían a seres de otras especies. Las familias unidas y la soceidad estricta intensificaba la agitación adolescentes y les llamaba a rebelarse contra su asfixiante soceidad, a menudo con actos de vandalismo, violencia y hasta brutalidad; había grupos de reelies que acosaban, robaban y mataban, y otos que mantenían un mantra de sabotajes sorprendentes y secretos, pero siempre serenos. Desdeñados como parásitos, los rebeldes adolescentes fueron apodados freelies, un mote que ellos adoptaron con orgullo. Podían okupar edificios abandonados para usarlos como bases de operaciones.

La cultura vorzydiak, de dedicación inflexible, afectó directamente a su historia: A menudo su civilización mantenía un estancamiento sociocultural durante largo tiempo, que era repentinamente destrozado por un cambio filosófico brutal. En cuanto los vorzydiaks se adaptaban a su nueva circunstancia, empero, volvían a las andadas.

Los vorzydiaks evolucionaron en Vorzyd. Su mundo no llamó la atención del Imperio Rakata en tiempos prerrepublicanos, aunque sus vecinos cercanos Maridun y Rhen Var, con potentes firmas en la fuerza, atrajeron a esos invasores.

Durante la mayor parte de la historia de la República, la zona de la galaxia donde estaba Vorzyd se encontraba más allá del espacio explorado. En 5.000 ABY, la República ponía su frontera en Rhen Var, aunque conocía parte del Pasillo Salin. Sólo a partir de 4.000, durante la Gran Guerra Sith (4.000-3.996 ABY) y eventos posteriores, el territorio espacial de Vorzyd empezó a ser recorrido: En el último año de las Guerras Mandalorianas (3.976-3.960 ABY), los líderes republicanos Revan y Malak llevaron a cabo una contraofensiva contra los mandalorianos yendo de Yablari a Vorzyd. Allí enfrentaron a los mandalorianos, venciéndoles y haciéndoles huir hacia el norte, a Stenos, y el oeste, a Lucazec. Revan y Malak les persiguieron hacia allí y vencieron en Stenos, pero no en Lucazec. La República venció y poco después, entre 3.959 y 3.956 ABY, el territorio espeacial de Vorzyd formaba parte del Imperio Sith de Darth Revan. Durante todo ese periodo, los alienígenas posiblemente no se molestaron en pisar la superficie de Vorzyd; al menos ninguna prueba lo sugiere.

Vorzyd estaba en un territorio fronterizo conocido como la Trans-Hydiana, al norte de la Ruta de Comercio Perlemiana. Aunque las especies nativas prosperaban y evolucionaban, el espacio de esa zona no fue explorado hasta relativamente tarde ni su economía pudo favorecerse por el comercio interestelar. Eso se debía a la cercanía de potencias expansionistas, como los sith y los mandalorianos, y a un número de anomalías astronómicas que dificultaban el viaje.

Ajenos a estos problemas, los vorzydiaks desarrollaron por sí mismos tecnología primitiva de hiperspacio, y dominar la tecnología sublumínica, en algún momento anterior a 1.019 ABY, posiblemente incluso antes de 2.000 ABY. Eso permitió a los vorzydiaks empezar a expandirse por once sistemas habitables, que llegarían a ser el Cúmulo Vorzyd.

En ese momento, exploradores de la República Galáctica descubrieron a los vorzydiaks y establecieron contacto pacífico. La República regaló a Vorzyd su tecnología hiperespacial, y éstos la usaron para explorar su zona del espacio en un proceso que terminó con siglos de turbulencia social y política en casi una docena de mundos vorzydiak. Además, los vorzydiaks hicieron contacto pacífico con otras cuatro especies en su territorio: Los hrakianos, cuasihumanos pendencieros y piloto; los paigun, larguiruchos y tecnológicamente aptos; una colonia perdida de selonianos en Seftek y, en último lugar, las robustas aves inteligentes kilmaulsi.

Por entonces, la vida en Kilmauls estaba en peligro por las guerras religiosas entre tribus rivales. La llegada de naves con hrakianos, paiguns y vorzydiaks, y su contacto pacífico con el liderazgo kilmaulsi, detuvo el conflicto de golpe. Los kilmaulsi quedaron fascinados por las posibilidades de usar esa avanzada tecnología y unirse a la civilización galáctica.

Durante las décadas siguientes, el Cúmulo de Vorzyd creció y pasó a ser una zona concurrida por naves comerciales. Los mundos vorzydiaks se convirtieron en centros neurálgicos industriales, con apoyo técnico paigun, transporte en naves hrakianas y trabajadores kilmaulsi y selonianos. Vorzyd 4, productor principal de bienes perdurables y alimentos de su sistema, pasó a ser conocido como fábrica del Cúmulo de Vorzyd.

Pero Vorzyd no tenía especial interés en la galaxia más allá de su Cúmulo, y hasta se resistían a ser representados en el gobierno de la República. Un siglo después de su descubrimiento, las cinco especies locales fundaron una confederación llamada La Comunidad y prosperaron durante los cuatrocientos años siguientes. Ahora bien, su único punto de acceso a la galaxia exterior era el puesto avanzado republicano en el planeta Columex, y el flujo entre el Cúmulo y otras zonas era muy reducido.

Cinco siglos después de aquel primer contacto, inversores de Commenor liderados por la gamilia Greyshade se asentaron en Columex y empezaron a comerciar activamente con el Cúmulo, atraidos por el potencial. Los commenorianos obtuvieron derechos sobre Columex e invirtieron para convertirlo en un importante mundo comercial, aprovechando su posición destacada como contacto entre Cúmulo y República. Consiguieron que Columex se uniese a la Comunidad y, en sólo unas pocas generaciones, los commenorianos a invertir agresivaamente en los mundos de allí. Ofrecieron condiciones muy generosas para obtener participaciones minoritarias en activos importantes como Banco de Sistemas Internos de Paigu, Colectivo Central de Mano de Obra de Kilmauls, Transportes Intracumulares Hraki, madrigueras selonianas y, en Vorzyd 4, Multycorp. A su vez, la Comunidad entró en la República como un quinteto de sectores bajo el gobierno de Columex.

Durante el último siglo de la República, Columex decidió tomar Vorzyd 5, por entonces un mundo industrial mal gestionado habitado principalmente por vorzydiaks, e instalar espléndidos casinos en un movimiento que demostró ser muy popular: Vorzyd 5 prosperó rápidamente y su situación cambió. Hasta entonces, Vorzyd 4 proveía a Vorzyd 5 con su excedente y a menudo Vorzyd 5 tenía problemas para pagarlos. Eso no molestaba a Vorzyd 4, porque su situación era sólida. De pronto, sin embargo, Vorzyd 4 percibía que Vorzyd 5 estaba intentando mostrarse como el mundo más poderoso del sistema. Las dos culturas eran además muy diferentes, lo cual no facilitaba el entendimiento: En Vorzyd 4, los nativos trabajaban sin cesar y sin salirse nunca de los procedimientos en un método industrial; mientras que Vorzyd 5, más aficionado a la fiesta, al ocio y al sector servicio, encontraba la vida de su vecino muy monótona.

Hasta entonces, Vorzyd 5 sólo había podido cubrir menos de la mitad de sus propias necesidades con su producción interna, y dependía del comercio con Vorzyd 4 para sobrevivir, endeudándose para ello. Vorzyd 4 no tenía problema con ello porque sólo le vendía el excedente, y Vorzyd 5 tampoco se angustiaba. Mas, cuando Vorzyd 5 empezó la construcción de casinos, pagó con el beneficio una buena parte de sus deudas. Vorzyd 4 empezó a calumniar a su vecino, diciendo que Vorzyd 5 quería ser el mundo más importante y parecer más fuerte ante otros planetas; Vorzyd 5 lo negaba y se enfadó por las acusaciones.

Entonces, en 40 ABY, Vorzyd 4 empezó a sufrir sabotajes frecuentes. Los responsables eran los adolescentes locales, que habían formado una banda activista llamada los freelies y pretendían perturbar la productividad de sus mayores para que éstos dedicasen algo de tiempo a relacionarse con sus familias; muchos vorzydiaks estaban a un paso de la depresión por su modo de vida. El líder de los freelies, Grath, de quince años, se aseguraba cuidadosamente de que no hubiese heridos en ninguno de sus actos o gamberradas.

Como los freelies no se atribuían sus obras, muchos adultos de Voryzd 4 acusaron a Vorzyd 5. El Presidente de Vorzyd 4, Port (que era también el padre de Grath) expulsó a los diplomáticos de Vorzyd 5 y a cualquiera sospechoso de ser espía; pero la Presidenta de Vorzyd 5, Felana, negó de plano todas las acusaciones. La tensión escaló al punto en que se corría el riesgo de una guerra por primera vez entre mundos del sistema.

Antes de permitir eso, el Presidente Port solicitó mediación independiente al Consejo Jedi de Coruscant; el mero hecho de pedir ayuda externa al Cúmulo daba a entender que la situación era tensa. El Consejo Jedi envió a dos jedis humanos, el maestro Qui-Gon Jinn y su padawan adolescente, Obi-Wan Kenobi. Después de investigar datos con la bibliotecaria jedi Jocasta Nu, los mediadores llegaron a Vorzyd 4 sin estar seguros de que Vorzyd 5 fuese el responsable del problema pero, cuando hablaron con Port, éste no mostraba ninguna duda (pese a ser incapaz de aportar pruebas fiables).

Los freelies lanzaron una de sus bromas el día que llegaron los jedi, saboteando el sistema informático del edificio de gobierno y de Multycorp para impedirles trabajar. Los vorzydiaks de Vorzyd 4 se sintieron amedrentados y hasta físicamente enfermos al no poder mantener su rutina. Kenobi tomó el puesto de un técnico para intentar resolver el fallo de software, pero no hizo falta porque la broma tenía una duración predefinida y expiró mientras él estaba buscando información; sin embargo, algunos trabajadores creyeron erróneamente que Kenobi había salvado sus sistemas.

Port alojó a los jedis en un bloque de jubilados, en la habitación que la madre de Port había ocupado hasta su deceso unos meses antes. Por entonces era raro que un jubilado tuviera visitas; la cultura de Vorzyd 4 daba a entender que no había auténtica vida si no se estaba trabajando; pero Kenobi vio a una adolescente, Tray, disfrutar de la compañía de su abuela Ina. Como era el comportamiento emocional que Kenobi había visto en Vorzyd 4, él decidió seguirla, y acabó infiltrándose en una reunión secreta de los freelies, en una gran oficina vacía. Los muchachos explicaban sus bromas y el efecto causado, que hacía pensar y/o sonreír a una minoría de adultos. Descubierto por una freelie, Kenobi se vio obligado a fingir ser un vorzydiak, ocultando su falta de antenas.

Kenobi creía que la sociedad vorzydiak estaba perjudicando a los propios vorzydiaks y que los freelies estaban pidiendo ayuda. Por eso, al día siguiente, convenció a su maestro para que le permitiese infiltrarse entre los freelies durante tres días para animarles a revelarles y a discutir sus asuntos con los adultos. Kenobi ignoraba que Grath había descubierto su verdadera filiación, porque había oído a su padre hablar de los jedi.

Un vorzydiak varón en el centro de la imagen.

Los freelies se escabullían de responsabilidades como las clases con excusas; y Kenobi se unió a ellos en una enfermería en la que fingían estar indispuestos. Fue con ellos a apagar el ordenador de operaciones central que controlaba la ciudad, algo que impediría el trabajo y que emitiría un pitido molesto (una melodía, por dar un toque romántico a la chanza), pero que además tenía ramificaciones imprevistas: El abastecimiento a un hospital infantil, por ejemplo, podía ser interrumpido. Afortunadamente, Jinn consiguió resolver el problema; pero el Presidente Port estaba tan angustiado que contactó por holoconferencia con la Presidenta Felana de Vorzyd 5 para reiterar sus denuncias. Felana se enfadó aún más al descubrir que Port había pedido mediadores. Jinn se sirvió de sus dotes diplomáticas, que eran muchas, y sugirió que se trataba de un malentendido, que Port no estaba acusando a Vorzyd 5 sino advirtiéndole de un ataque terrorista que podría afectar también al mundo vecino. Felana no le creyó, pero aceptó retirarse de la reunión con tranquilidad y dejando claro que su mundo estaba listo para la guerra.

Mientras, Kenobi colaboraba con los freelies distribuyendo bombas en un hangar de transporte. El plan de Grath era detonarlas de noche, cuando las lanzaderas estuvieran en el hangar. Eso privaría a los trabajadores de los vehículos que les llevaban al trabajo, obligándoles a ir a pie y disfrutar del paisaje.

El problema fue que un freelie con ideas radicales, Flip, prefería pasar a acciones violentas porque creía que la estrategia actual era inútil, y porque pretendía mostrar iniciativa e impresionar a Grath. Flip activó las bombas en el turno de mañana, causando muchos heridos.

Jinn intentó evitar que Port tomase una decisión precipitada, lo cual no fue fácil: Felana visitó personalmente Vorzyd 4 y se entrevistó con Port en sus oficinas, para amenazarle nuevamente. Mientras tanto, entre los freelies, Flip se atribuía con orgullo el atentado. Grath se oponía a esas medidas, pero los freelies empezaron a dividirse en sendas facciones, apoyando a uno u otro. Flip y su asociada Tray decidieron preparar un ardid para librarse de Grath y controlar a los freelies, aprovechando en parte que Tray había visto a Kenobi en el bloque de jubilados y sabía que era un jedi infiltrado.

Flip llamó a las autoridades para que irrumpiesen en la reunión, y a la vez había preparado una ruta de escape que llevaría a los freelies a un tejado cercano. Una vez allí, acusó a Kenobi de ser un infiltrado y a Grath de haberlo sabido, socavando la autoridad de éste. Kenobi fue expulsado con efecto inmediato y Grath perdió parte de su apoyo, pero una freelie amiga de Grath, Nania, descubrió que Flip había planeado ese momento y se posicionó con Grath.

Al día siguiente, Kenobi y Jinn convencieron a Grath para que se reuniese con los adultos y dialogase, sin siquiera poner sobre la mesa la opción de que los freelies fuesen arrestados o castigados. Mientras Grath convocaba a los freelies para pedirles que asistiesen en masa, Jinn avisaba a Port y a los trabajadores. Una multitud de adultos y jubilados acudieron a la improvisada reunión en el edificio de Multycorp. Ignoraban que Flip estaba escondido en el sótano, preparando una bomba que derrumbaría toda la estructura: Flip creía que el edificio estaría vacío porque no había reuniones programadas para ese día.

Tray acudió a la reunión en que Grath animaba a los freelies a hablar con los adultos; y reveló los detalles del plan porque se dio cuenta de que su propia abuela, una jubilada, corría peligro físico real en la explosión. Pero no hubo forma de impedirla: Flip había cortado las comunicaciones, y sólo la telepatía de los jedi permitió a Kenobi avisar a Jinn para que desalojase el edificio. Los freelies volaron en lanzadera hacia la zona, pero no llegaron a tiempo.

Hubo razonablemente pocos heridos, incluidos Port e Ina; pero Flip quedó atrapado y murió por los daños sufridos. Los freelies y Kenobi consiguieron encontrarle a tiempo de que, con su último aliento, Flip hiciese las paces con Grath. Después de ese desastre, sin embargo, el President Port comprendió que Vorzyd 4 no era el paraíso que él insistía en ver.

Los jedi se dirigieron a las masas para calmar a los más agresivos, pero su condición de forasteros les quitaba autoridad. Port y Grath dieron un paso al frente juntos, mostraron su apoyo y explicaron que los nativos de Vorzyd 4 debían trabajar juntos para resolver el desastre que ellos mismos habían provocado. De momento, habían alcanzado la paz con Vorzyd 5, y ahora era el momento de conseguir la armonía interna.

En un par de días, Vorzyd 4 había empezado importantes reformadas, impulsadas por Port y ejecutadas con el ahínco con que los nativos llevaban a cabo su trabajo: La jornada laboral de siete días había sido reducida a seis, para que el último día se dedicase a otros proyectos no tradicionales pero igualmente importantes. Los jóvenes y los trabajadores trabajarían en equipo para construir un espacio exterior para los jubilados. Las visitas a los bloques de jubilados se empezaban a disparar, y la población mostraba una actitud mucho más positiva y feliz.

Era ésta una época en que ciertos humanos tuvieron relevancia relacionada con Vorzyd 5. Se sabe que, en 34 ABY, nació en Voryzd 5 la humana Tallisibeth Enwandung-Esterhazy, que fue reclutada por la Orden Jedi pese a que su conexión con la Fuerza era pobre. Años después, habiéndose cortado todo trato con una familia a la que Enwandung-Esterhazy no conocía, ella oyó a un maestro jedi decir que su familia había sido tan pobre que habían suplicado a los jedi que se llevasen a su pequeña para no condenarla a una vida de pobreza. Enwandung-Esterhazy se sentía atormentada, pensando en sus progenitores y posibles hermanos malviviendo en los barrios bajos locales. Enwandung-Esterhazy, apodada "Scout" por su velocidad analizando situaciones con la Fuerza, llegó a ser una próspera aprendiza jedi y, en 19 DBY, ganó contra toda expectativa en Torneo de Aprendices merced a su astucia y pasó a ser padawana de Jai Maruk.

Otro nativo humano de Vorzyd V fue Bislav Merril. Merril prosperó como guardia en Ciudad Nube, pese a que sus colegas le desdeñaban por su actitud. Junto con otro guardia, el sargento Isdam Edian, Merril escoltó el cuerpo crionizado de Han Solo en carbonita para subirlo a la nave de Boba Fett, Esclavo I, en 3 DBY.

Izquierda: Padawan Tallisibeth Enwandung-Esterhazy, "Scout".
Derecha: Bislav Merril, guardia de Ciudad Nube.

Hablaré ahora de un humano influyente en Vorzyd pese a haber nacido en otro mundo, Columex: Simon Greyshade. Greyshade destacó a lo largo de su vida como rico empresario, aventurero, político y galán. Venía de una familia acomodada: Su primo Jheramahd Greyshade fue senador de la Comunidad hasta su asesinato en 23 ABY. Simon Greyshade había estado implicado en la muerte de Jheramahd, pero la ley no pudo demostrarlo, así que Simon sucedió a Jheramahd como Senador.

Viendo el éxito de los casinos de Vorzyd V, el nuevo Senador Greyshade convenció a la República para que invirtiese en más centros de juego, a cambio de una mayoría de los beneficios: Aunque en toda la galaxia los negocios de ocio estaban sufriendo pérdidas por la Crisis Separatista y la población no quería viajar grandes distancias, los casinos seguían generando beneficios con estabilidad: El Primer Ministro de Vorzyd 5 en ese momento, Kalasaad Woztu fue entrevistado por Noticias de HoloNet en 22 DBY para preguntarle por el secreto de su éxito, pero sólo alegó que la genet se sentía afortunada.

La República aceptó ser socio capitalista del negocio, pero era reacia a aprobar un proyecto de ley propuesto por Greyshade: Impuestos a los centros de juego para abastecer a los cofres republicanos de millardos de créditos. La idea tuvo apoyo de importantes figuras públicas como el Virrey Nute Gunray, que afirmaban que mucha gente preferiría jugarse su dinero antes que confiarlo a un banco que podría dejar la República en unas horas. Otros, como Bail Organa, eran más escépticos. No faltaron legisladores que se burlaban de la idea. Greyshade sin embargo capeó ese temporal, esperando las circunstancias que hiciesen propicia su idea.

Por entonces, el codificado speeder de Greyshade, Narglatch XJ-6, fue robado en Coruscant por Reymet Autem, hijo de un guardia senatorial asignado a la escolta de Greyshade. Las autoridades recuperaron el transporte y, mientras arrestaban a Autem, no pudieron impedir que fuese robado nuevamente, esta vez por el jedi Anakin Skywalker para perseguir a la cazarrecompensas Zam Wesell. Greyshade juró hacer la vida imposible a quienes le habían estropeado el día. Esto afecta sólo al Senador Greyshade y tiene poco que ver con Vorzyd, pero no le falta su gracia.

Durante las Guerras Clon, los separatistas se hicieron con el control de la Comunidad pero, al terminar, hubo muchos cambios con la caída de la República. El Senador Greyshade volvió a representar al territorio con el beneplácito del nuevo gobierno federal, el Imperio Galáctico, y declaró el estado de emergencia. El emperador llamó entonces a Greyshade en privado para revisar su proyecto de ley de gravar casinos. Greyshade aceptó dar al Imperio la mayor parte de los beneficios del juego de Vorzyd V, pero pidió algo a cambio: Pidió que las tropas imperiales se hiciesen con una famosa estación espacial del Borde Medio, La Rueda, y se la entregasen a una compañía columexi controlada por Greyshade, para que él la convirtiese en un paraíso del juego. El Imperio aceptó, aunque se mantuvo en secreto que los beneficios de Vorzyd V iban en su mayoría al emperador.

Durante los primeros años del Imperio, se abrió el Casino Royale en Vorzyd V, que llegaría a ser el más grande y conocido del planeta. El casino contaba con importante seguridad de guardias kilmaulsi. Cuando el local llevaba abierto menos de un mes, una banda de freelies enfadados robaron doce droides de protocolo, les metieron detonadores termales y los programaron para vagar por el interior del casino abarrotado y después detonar. Un droide CZ modificado (aunque con el vocalizador modificado para no poder hablar) consiguió contactar con un grupo de viajeros espaciales y advertirles de este peligro. En menos de treinta minutos, los viajeros buscaron a los droides entre los invitados. Después de eso, el Casino Royale pasó a restringir el acceso de droides, e incluso de cíborgs porque la tecnología utilizada podía llegar a ser peligrosa.

Empezó entonces la Guerra Civil Galáctica: El Imperio consiguió un enemigo digno de mención cuando las facciones opuestas se asociaron en la Alianza para la Restauración de la República o Alianza Rebelde. La zona Transhydiana donde estaba Vorzyd se conocía extraoficialmenet como Las Fronteras, y allí había tanto facciones leales al Imperio como simpatizantes de la Alianza. Los vorzydiaks en concreto estaban hartos del gobierno imperial, sobre todo los que sabían que el Imperio se llevaba el grueso de los beneficios de los casinos. Existía una célula rebelde en Vorzyd V que incluía al humano Paxin, al seloniano Falud y a su líder, el squalris Sanglui.

Poco antes de la batalla de Yavin, el emperador disolvió el Senado. El Moff Diedrich Greyshade tomó el control de la Comunidad. El senador Greyshade abandonó la política para dedicarse a ser sólo el administrador de la Rueda y mantener cierta neutralidad a base de pagar altos impuestos; pero eso duró menos de un año: Cuando el Comandante Imperial Strom se excedió en sus atribuciones en un intento de desacreditar a una visitante rebelde, la Princesa Leia Organa, y tomar el control de la Rueda, Greyshade decidió tomar partido, simpatizó con Organa y acabó matando a Strom y muriendo él mismo poco después de la batalla de Yavin.

Simon Greyshade pone de los nervios al Comandante Strom.

Es bien sabido que la Alianza dio un duro golpe al Imperio en la batalla de Yavin, y el héroe que la venció, Luke Skywalker, obtuvo fama y valor propagandístico. La Alianza quiso enviar a Skywalker para reunirse con grupos antiimperiales y neutrales indecisos a los que convencer para unirse a la Alianza. A menudo le acompañaba su amiga la Princesa Leia Organa y sus droides C-3PO y R2-D2. En ese tiempo, además, la prioridad de la Alianza era reclutar nuevos miembros más que vencer en batallas. Por eso, el grupo rebelde fue enviado a Vorzyd 5, a interrumpir el flujo de dinero hacia el Ipmerio y a reunirse con un simpatizante secreto de alto rango en el gobierno local: La Presidenta planetaria, Natala Vanden (aunque ellos ignoraban su identidad).

El Imperio descubrió el plan rebelde, aunque una vez más no sabía quién era el contacto secreto, y decidieron enviar allí a un agente de inteligencia, el adepto del lado oscuro Agujero Negro. Las órdenes de Agujero Negro eran no revelar su presencia: Si el Imperio mataba a los rebeldes, crearía mártires, y no buscaban eso. Por eso enviaron a un espía discreto, uno que, usando soldados de asalto con armaduras azabache y contactos infiltrados como el kubaz Rbann, capturó a Falud y a Paxin rápidamente. Agujero Negro retuvo a sus activos con rayos paralizadores y los encerró en su nave, atracada en el puerto espacial. Les interrogó, pero ellos no tenían la información que él buscaba.

Agujero Negro tortura a sus prisioneros.

Agujero Negro había desucbierto, gracias a sus visiones en la Fuerza, que Luke Skywalker y la Princesa Leia Organa eran los hijos gemelos del lord del sith Darth Vader, mano derecha del emperador. Esto es algo que ni siquiera ellos sabía en este momento. Decidió que, si conseguía apresar a Skywalker y Organa, tendría una importante influencia sobre Vader que le beneficiaría en sus propios y ambiciosos planes.

En algún momento, un grupo de adolescentes de Vorzyd IV se escindió de los freelies de allí y viajaron a Vorzyd 5 en busca de diversión. Para ellos la diversión incluía intimidar y robar a los clientes de los casinos, estando incluso dispuestos a asesinar. Dos de ellos, Bemmie y Merf, eran vorzydiaks; uno era un seloniano, Choyd, hijo de Falud; y el lider extraoficial era el humano Jax. Consiguieron el control de una base bien protegida, capaz de resistir un asedio militar, pero ellos mismos eran bastante ineptos en sus actividades. Se consideraban apolíticos porque se preocupaban sólo de sí mismos, y el Imperio no conocía siquiera su existencia.

¡Oh, no! ¡Freelies!

Cuando Skywalker y Organa llegaron a Vorzyd 5, tenían instrucciones que esperar a que les contactasen sin llamar demasiado la atención. Skywalker jugó al Azar Cósmico en el Casino Royale y, contra todas las posibilidades ganó. Dos veces. Eso atrajo la atención de los agentes de Agujero Negro. En cuanto el grupo rebelde dejó el casino y viajó a otro punto en una cinta transportadora, Agujero Negro aprovechó la ocasión: Apagó las luces y envió a sus tropas oscuras a capturarles. Skywalker se defendió con su sable, pero los imperiales pudieron con él y se lo llevaron, junto con Organa. Agujero Negro desestimó a los droides.

C-3PO y R2-D2 tenían más recursos de lo que Agujero Negro había esperado, aunque también tuvieron problemas: R2-D2 se aseguró de que no advirtiesen a la policía, puesto que su misión era secreta; y los cuatro freelies antes mencionados intentaron robar a los droides en cuanto éstos quedaron solos. R2-D2 avisó a la policía robótica, que ahuyentó a los freelies. Esto es lo que no consiguieron: Ahora veremos lo que consiguieron.

C-3PO identificó el acento de uno de los soldados como hrakiano, así que los droides buscaron naves hrakianas atracadas en el puerto y subieron a bordo de una de ellas acompañados por un tripulante borracho. Una vez dentro, tomaron el control de los ordenadores de a bordo, apagaron los rayos paralizadores, avisaron a sus amos por megafonía y les ayudaron a escapar abriendo escotillas y lanzando espuma anti-incendios a sus perseguidores. Falud murió en el tiroteo, pero los otros tres rebeldes y los dos droides salieron de la nave. Agujero Negro prohibió a sus tropas perseguirles en un lugar público y reportó su fracaso a Vader. Vader entonces ordenó a Agujero Negro impedir que Skywalker y Organa pusiesen en peligro los intereses imperiales en Vorzyd V.

Durante el cautiverio, Skywalker y Organa fueron torturados por Agujero Negro. El imperial quedó impresionado por estos cuerpos jóvenes y poderosos en la Fuerza, y consideró transferir su propia esencia a uno de ellos, una idea que mantendría en su mente durante años.

R2-D2 insistió en que él y C-3PO comprasen armas y sistemas de defensa para proteger a sus amos, y le llevó al Emporio de Hu. El dueño, el paigun Kitak Hu, intentó tentarles con equipos ofensivos y un detector de intenciones malignas. Los freelies de antes decidieron dar un golpe en el Emporio y se acercaron; al ver a los droides, quisieron robarlos antes de que se pudiesen activar las defensas. La torpeza de C-3PO sin embargo activó el detector de intenciones malignas, que a su vez reaccionó a los freelies y desencadenó todas las armas. Los freelies huyeron con el rabo entre las piernas, antes de que les vieran, y los droides, disgustados con el equipo "defectuoso" de Hu, compraron sólo localizadores.

Jax seguía deseando robar a esos droides y les siguió cuando salieron de la tienda; pero no quiso emboscarles porque creía que los droides estaban alerta, fingiendo ser despistados. Los droides subieron a su nave, y los freelies quedaron una vez más frustrados.

Organa, Paxin y Skywalker se reunieron con Sanglui en la lujosa suite de éste en un rascacielos céntrico de Efavan. La Presidenta mantuvo contacto con Sanglui enviándole droides mensajeros con sus instrucciones: Ella mismo no podía revelar su propia identidad porque, si caía en manos imperiales, posiblemente el Imperio arrasaría medio planeta. Por eso, ella se reuniría sólo con un rebelde, que seguiría unas detalladas instrucciones en una especie de yincana o teleconcurso pensado por la Presidenta para burlar a los obvios perseguidores que tendría: El contacto rebelde debía coger un revoloteador concreto, que estaba preprogramado para un vuelo audaz en que perdiese perseguidores; y después pasar ante un inocente local de mirapónica, que enviaría una señal para estropear droides de espionaje; para finalmente tirarse por un tubo de carga, algo que muy rara vez haría una persona. Las instrucciones no entraban en las razones para hacer ese recorrido.

Sanglui quiso echar a suertes quién se reuniría con el contacto, y ganó Skywalker. Él dejó a Organa en su nave y partió, seguido discretamente por las tropas oscuras y droides "ojos espía" de Agujero Negro. Éste había dado orden de no interceptar a Skywalker hasta que el contacto se revelase. Sin embargo, el revoloteador le permitió perder a casi todos los soldados y la tienda de mirapónica inutilizó los ojos espía. Agujero Negro decidió arriesgarse a no descubrir al contacto y ordenó a sus soldados capturar al rebelde; pero Skywalker despistó a los imperiales al tirarse por el tubo.

Una tienda de mirapónica. Han pasado años y sigo sin saber qué es mirapónica.

La Presidenta, con dos soldados de escolta, se reunió con Skywalker y aceptó transferirle en persona un millón de créditos en los tubos de carga bajo la ciudad; pero la reunión fue interrumpida cuando fueron atacados por una persona o personas desconocidas. Los soldados protegieron a la Presidenta mientras ella hacía huir a Skywalker.

Mientras tanto, Choyd revelaba a sus compañeros freelies que la Princesa Leia Organa, importante líder de la Alianza, estaba en el planeta; él lo había descubierto gracias a que era hijo de Falud. Los freelies engañaron a C-3PO para que les dejase subir a bordo de su nave y entonces raptaron a la Princesa y a R2-D2. Dejaron atrás a C-3PO para que entregase un mensaje a Skywalker: Soltarían a la Princesa a cambio de un rescate de cinco millones de créditos, y posiblemente los dos droides.

Cuando Skywalker volvió y supo del rapto, decidió que no pagaría porque no podía fiarse de los freelies. Entonces C-3PO le explicó que podía rastrear el localizador de R2-D2 y averiguar dónde estaba. Fueron allí en un hover-taxi.

Rbann descubrió también el secuestro e informó a Agujero Negro. Éste decidió enviar a sus tropas a capturar un freelie para torturarle y que les entregase a Organa gratis. Efectivamente, en la zona casi abandonada de la ciudad, tres soldados de Agujero Negro vapulearon a Bemmie y le pusieron una sonda mental; pero Skywalker les vio al llegar y les rescató, matando a un soldado y capturando a los otros dos. Eso le ganó la confianza de Bemmie, que llevó a su salvador, a C-3PO y a los soldados capturados a la Guarida Freelie.

Pero Jax no aprobaba eso porque, según él, nadie estaba del lado de los freelies. Jax quería disparar inmediatamente a Skywalker y a los soldados, que eran una amenaza potencial; Organa sólo se salvaba porque les servía para obtener dinero. Sin embargo, antes de que pudiesen ejecutar a los cautivos, un pelotón de soldados de Agujero Negro atacó la Guarida, iniciando un asedio.

Los freelies supieron defenderse con lásers y cañones. Skywalker se ofreció a ayudar, pero Jax seguía viéndole como una amenaza o un activo que vnder. Por eso, Bemmie avisó a Skywalker para que huyese, ofreciéndole una salida secreta. Los rebeldes y sus droides huyeron por allí, pero Bemmie murió de un disparo en el proceso. Otros freelies resultaron heridos.

La misión no fue un éxito completo, puesto que los contactos entre Vorzyd y la Alianza fueron breves. C-3PO dio un informe al superordenador BRT Maestra Mnemos.

Por lo demás, Agujero Negro quedó tan impresionado por las capacidades místicas y mundanas de Organa y Skywalker, y concbió a Skywalker como "un agente innato de la oscuridad", así que empezó a conspirar para transferir su conciencia a él. Lo intentó más tarde, en Mindor y en 5 DBY, usando el nombre de Lord Shadowspawn; y por entonces Skywalker recordaba perfectamente sus inquietantes encuentros con la holoproyección de Agujero Negro en Vorzyd V, incluyendo la malicia humana que percibía en este enemigo. Por supuesto, Agujero Negro fracasó en este plan.

Las actividades rebeldes y contramedidas imperiales continuaron en Vorzyd V durante los años siguientes. Los rebeldes tenían un nuevo plan para desviar el flujo monetario Vorzyd-Imperio y ganar simpatizantes en Vorzyd, pero Inteligencia Imperial desucbrió partes de éste. El Imperio, dudando de la lealtad de los Greyshade y sus asociados, envió agentes en secreto en un carguero hrakiano que usar como bases. El Moff Greyshade no quería problemas abiertos con Inteligencia Imperial, pero tampoco quería dejarse avasallar, así que contrató a agentes independientes para que encontrasen a los espías imperiales y los revelasen públicamente, de modo que no se pudiese rastrear esta actividad hasta él (y también contrató a una banda de asesinos para perseguir a sus propios agentes y asegurarse de que no le traicionasen).

Después de 4 DBY, la Alianza se reconvirtió en la Nueva República; pero la Comunidad seguía en manos de facciones imperiales: Fue parte del Mayor Maldrood hasta el año 8 DBY, y durante el año siguiente estuvo en un grupo llamado Regiones Fronterizas, aliado al Gran Almirante Thrawn.

Tras la muerte de Thrawn, el Imperio redujo sus fronteras y ya no llegaba hasta Vorzyd. El flujo de dinero generado en Vorzyd, y que ya no iba al Imperio, atrajo la atención de Quaffug el Hutt, jefe criminal del sistema Blimph en el Borde Medio. Quaffug aterrizó su yate en el puerto espacial de Felana, en Vorzyd V, y reclutó abiertamente a kilmausli que trabajaban en casinos. Quaffug esperaba que los vorzydiaks comprendiesen que él tenía una mano mejor, y que le diesen su tajada sin problemas; de lo contrario, si empezaba una batalla abierta entre Columex y un grupo hutt, se arriesgaban a que el turismo se detuviese y los casinos perdiesen su clientela. Los casinos, sin embargo, contrataron a personas independientes para echar a Quaffug de Vorzyd sin violencia, pero con cualquier otro truco.

La Nueva República ofreció filiación a la Comunidad, pero ésta rechazó la oferta y se mantuvo relativamente independiente. Pese a ello, las fuerzas de una facción imperial, la Alineación Pentaestelar, recorrieron el Corredor Salin hasta Columex, un mundo que conquistaron, en 10-11 DBY. Entre 12 y 13 DBY, la República lanzó ataques desde Columex hacia Quell, Botajef y Arda.

Vorzyd V y alrededores durante la invasión yuuzhan vong (26-27 DBY).

En 25 DBY, la población de Vorzyd era de entre mil millones y diez mil millones de habitantes. Fue entonces que los extragalácticos yuuzhan vong iniciaron su invasión a la galaxia conocida. En seguida conquistaron y devastaron Columex; pero no se sabe con certeza qué hicieron en otros mundos de la Comunidad. Sabemos que, al inicio de 27 DBY, no había golpeado Vorzyd, aunque ya controlaban buena parte de la zona, incluyendo Rhen Var y el sur de la Carrera Salin. Para el final de la guerra en el 29 DBY, dominaban el territorio de Vorzyd, Columex, Belderone y muchos mundos críticos, justo antes de ser derrotados.

Vorzyd no tomó partido claro durante la Nueva Guerra Civil Galáctica de los años 40 a 41 DBY.

En 137 DBY, Vorzyd estaba dentro del Imperio Sith de Darth Krayt.

Jolos Aarn: Un famoso vorzydiak.

Bemmie: Este vorzydiak de cabello castaño era miembro de la banda de delincuentes juveniles los freelies en 1 DBY. Había viajado a Vorzyd V, el mundo de casinos y juegos de azar, junto con otros tres freelies (El humano Jax, el seloniano Choyd y el vorzydiak Merf) para llevar a cambio actos de gamberradas. Eran forajidos dispuestos a robar, secuestrar y asesinar. Pertenencían a una escisión de freelies que, en los tempranos días del Imperio, habían decidido viajar a Vorzyd 5 en busca de distracciones y pasaron a coaccionar y robar a los jugadores y turistas.

Bemmie armado y rodeado de rebeldes.

Los freelies se ocultaban en un edificio apodado Guarida de los Freelies en la zona más vieja de la ciudad, que rara vez era visitada, y habían abastecido su domicilio con monitores para controlar los exteriores, lásers defensivos en las zonas exteriores e incluso interiores, portas para cañones en caso de asedio y una ruta secreta de emergencia a través de una puerta oculta tras una pila de chatarra. Por bien pensada que estuviese su base, en realidad los freelies eran una banda poco eficiente que nunca había conseguido tener un droide y a menudo se olvidaban de llevar las herramientas adecuadas para sus golpes, contando cada uno con que otro se acordaría.

Sucedió que en 1 DBY, un grupo de rebeldes visitaron Vorzyd V en una misión secreta. Dos de ellos, Luke Skywalker y la Princesa Leia Organa, fueron capturados por agentes secretos del Imperio Galáctico. Los droides de los rebeldes, C-3PO y R2-D2, intentaban viajar al puerto espacial en busca de un modo de rescatar a sus amos, pero fueron acosados por los cuatro freelies en un tubo de transporte. Aunque los droides insistieron en que eran propiedad privada, los freelies intentaron hacerse con ellos. R2-D2 escapó para avisar a la policía mientras Choyd, Jax y Merf aferraban a C-3PO. Entonces se dieron cuenta de que ninguno llevaba una herramienta para quitarle el rayo restrictor y empezaron a culparse unos a otros. Eso dio tiempo a R2-D2 de volver con un droide policía, que persiguió a los freelies. Los freelies soltaron a C-3PO para huir.

Más tarde, los freelies decidieron dar un golpe en el Emporio de Hu, una tienda de tecnología gestionada por el paigun Kitak Hu. Bemmie y Choyd dudaban que su plan fuese a funcionar porque no tenían dinero, pero Jax, el líder extraoficial del grupo, insistió. Cuando llegaron al local, Merf buscó al dueño pero fue Choyd quien le identificó… y Bemmie se fijó en que los dos droides de antes estaban con él, haciendo una compra. Bemmie propuso capturar o robar a esos droides y, cuando Jax oyó que estaban comprando defensas tecnológicas, concluyó que era el momento, antes de que las activasen.

Hu mandó a los droides a un campo de pruebas, y entonces Jax ordenó a Choyd atacar al dependiente. El problema fue que C-3PO, torpe por naturaleza, cayó sobre R2-D2, activó el interruptor principal de sus defensas, y la tecnología detectó las aviesas intenciones de los freelies. Granadas de gas, un pulverizador de olor nocivo y un sonido aturdidor se activaron. Los freelies empezaron a toser, cubriéndose los ojos. Jax quería seguir adelante con el plan porque aún no habían sido detectados, pero Bemmie y Choyd desistieron, y Merf les dio la razón: Ya no tenían oportunidad de capturar a los droides y su mejor opción era escapar antes de que les echasen las culpas del desastre. Jax cedió y salieron al exterior dle local.

C-3PO se quitó los aparatos, convencido de que eran defectuosos, y adquirió sólo localizadores. Los droides salieron a la calle, sin saber que los freelies les observaban ocultos. Merf y Choyd preguntaron a Jax cómo y dónde atacarían; Bemmie estaba igualmente ansioso. Sin embargo, Jax desconfiaba: Después de lo sucedido, esperaba que los droides tuviesen la mosca detrás de la metafórica oreja, y se negaba a creer que fuesen tan tontos de no haberse dado cuenta del peligro. Jax dudó demasiado tiempo, y entonces los droides subieron a una nave. Estaban a salvo.

Los freelies engañaron a C-3PO para que les dejase subir a bordo de su nave y entonces secuestraron a la Princesa Leia y a R2-D2. Dejaron atrás a C-3PO para que diese un mensaje a Skywalker, en ese momento ausente por una misión, pidiendo un rescate de cinco millones de créditos y posiblemente dos droides; y entonces se llevaron a sus cautivos hasta la guarida.

Cuando volvió Skywalker y C-3PO fue informado del rapto, aquél era reacio a pagar porque no se fiaba de los secuestradores. C-3PO le dio una alternativa: R2-D2 tenía un localizador, así que, sabiendo dónde estaba, podían intentar un rescate.

Pero el rapto no pasó desapercibido: Rbann, un soplón kubaz asociado al Imperio, informó al oficial secreto imperial en Vorzyd, Agujero Negro. Agujero Negro hizo que Rbann guiase a sus soldados de asalto hasta la Guarida de los Freelies para que capturasen a uno de los freelies; y entonces Agujero le intimidaría para que le entregase a la Princesa gratuitamente. De noche, tres soldados encontraron a Bemmie y le apresaron en la misma calle. Ante un holograma de Agujero Negro, pusieron una sonda mental al joven freelie y le torturaron, causándole mucho dolor. Afortunadamente, Skywalker llegó en ese momento y rescató a Bemmie, matando a uno de los soldados y capturando a los otros dos en el proceso. Bemmie estaba cediendo a la tortura, pero entonces Skywalker le explicó lo sucedido, que ya estaba a salvo.

Bemmie fue capturado por Agujero Negro, pero Luke Skywalker le rescató.

Bemmie llevó a Skywalker, C-3PO y sus prisioneros a la Guarida pero, cuando entraron, los otros freelies les emboscaron por la espalda. Bemmie intentó explicar a Jax que Skywalker estaba de su lado, pero Jax se negó a aceptarlo ni a confiar en cualquiera que no fuera un freelie. Jax quería matar a Skywalker y a los soldados en ese momento y, si Bemmie seguía protestando e interponiéndose, también le dispararía a él (La Princesa estaba a salvo porque pensaban cambiarla por el rescate).

Entonces Merf dio la alarma: Un pelotón de soldados de asalto imperiales habían rodeado la guarida e iniciaban el ataque. Falud confirmó que habían atravesado la defensa exterior y decidió que era el momento de usar el botón de pánico. Lásers defensivos reaccionaron al ataque, las luces se apagaron por seguridad y los freelies ocuparon sus portas.

Con los freelies distraidos, Skywalker desató a Organa, tomó una pistola y se puso a las órdenes de Jax para proteger la zona; pero Jax seguía decidido a vender los rebeldes a los imperiales. Agujero Negro no estaba de humor para negociar y pretendía simplemente tomar el edificio, aunque el asedio era difícil. Agujero Negro guiaba a los soldados desde una proyección holográfica, y Falud le vio, reconociéndole por una descripción que le había dado Bemmie.

Bemmie comprendió que, incluso si vencían, Skywalker estaba perdido, y eso no le gustaba. Decidió ayudar a Skywalker a huir en pago por salvar su vida, y le reveló la ruta de emergencia. Sin embargo, durante el asedio, esa zona no era totalmente pacífica: Todo el que la usase, debía hacerlo corriendo para evitar un disparo perdido de los soldados. Organa escapó la primera, seguida por los droides. Bemmie quedó atrás para cubrir a Skywalker, pero fue abatido en ese momento. Los rebeldes quedaron libres y volvieron a su nave, pero Bemmie no vivió para ver otro amanecer.

Después de eso, C-3PO reportó su misión en Vorzyd al superordenador BRT Maestra Mnemos.

Segra Bezu: Un famoso vorzydiak.

Bryn: Bryn era la esposa de Port, Presidente de Vorzyd 4 en 40 ABY, y madre de Grath, un muchacho de quince años que en secreto lideraba la banda juvenil conocida como los freelies.

Bryn era una mujer delgada que, como la mayoría de habitantes de Vorzyd 4, vestía un mono de colores sosos. Ella intentaba ser organizada, pero se ponía muy nerviosa en situaciones imprevistas, como daba a entender el histrónico movimiento de sus antenas.

En 40 ABY, el Presidente Port pidió a la Orden Jedi que enviase mediadores para una crisis planetaria. La Orden envió al maestro Qui-Gon Jinn y a su padawan Obi-Wan Kenobi. El día que llegaron, Bryn fue informada de que su hijo no se uniría a ellos para la cena, teóricamente porque estaba trabajando.

Más tarde ese día, Port se personó en su domicilio con los dos jedi, a quienes había invitado a cenar. Jinn se presentó y ofreció su mano a Bryn; ella asintió con la cabeza, pero no tomó la mano. En vez de eso, se fue a la cocina a configurar dos asientos más, e informó a su marido de la ausencia de Grath. Jinn sugirió que era una lástima no disfrutar de la compañía de un hijo; mas Bryn y Port insistieron en que trabajar era actividad honorable y la productividad debía mantenerse. Los jedi encontraron insípida y dura la comida preparada.

Durante la cena, Kenobi preguntó qué hacían los vorzydiaks con su tiempo libre vespertino. Bryn le miró confusa y explicó que la única opción concebible era leer instructuales para mejorar su rendimiento.

Más tarde, Jinn concluyó que los Port se sentían especialmente incómodos y sofocados, y diagnosticó que Bryn era infeliz y que podría estar sufriendo depresión.

Bryn no debe confundirse con el capitán Bryn, un varón humano que sirvó al Imperio Sith cerca de 3.600 ABY según el MMORPG Star Wars: The Old Republic, ni con Bryn Apice, un viajero humano que se disfrazó de clon durante las guerras clon según el cómic This Precious Shining. Simplemente son personajes distintos que se llaman igual.

Felana: Felana era la líder planetaria del planeta Vorzyd 5 en 40 ABY. Muy alta para un vorzydiak, y con una postura que destacaba aún más su estatura, Felane era una mujer de aspecto regio que solía llevar turbante.

Poco antes de 40 ABY, la economía de Vorzyd 5, hasta entonces dependiente de las exportaciones de su vecino Vorzyd 4, empezó a despegar gracias a una industria basada en casinos y juegos de azar. Vorzyd 4 temía que Vorzyd 5 intentase destacar como el planeta más poderoso del sistema; mientras que Vorzyd 5 estaba contento de separarse de la cultura obsesiva y metódica de su vecino.

Entonces Vorzyd 4 empezó a ser víctima de múltiples sabotajes que eran causados por delincuentes juveniles locales, los freelies. Los adultos de Vorzyd 4 creían, sin embargo, que el culpable era Vorzyd 5. El Presidente Port de Vorzyd 4 expulsó a todos los diplomáticos y sospechosos de ser espías del mundo rival, pese a lo cual no se detuvo el sabotaje. Port insistía en que Vorzyd 5 era el culpable, y llegó a pedir al Consejo Jedi que enviasen mediadores jedi. Así fue: El maestro Qui-Gon Jinn y su padawan Obi-Wan Kenobi viajaron a Vorzyd, y lo primero que querían era asegurarse de que Vorzyd 5 fuese el culpable. Jinn se negó a permitir que Port contactase con su homólogo de Vorzyd 5.

Pero entonces tuvo lugar una gamberrada que apagó el ordenador central de operaciones que gestionaba toda la ciudad. Jinn fue al sótano del edificio a arreglarlo y, para cuando volvió al despacho de Port, le encontró ante una proyección holográfica de Felana, a la que acusaba de sabotaje. Felana se sentía insultada por sus antiguos opresores y, cuando Port presentó al jedi como testigo, Felana se ofendió nuevamente al ver que Port había pedido asesoramiento externo sin decirle nada. Jinn tranquilizó a Port usando sus poderes de la Fuerza y después matizó la llamada: El jedi dijo a Felana que Vorzyd 4 había sufrido un ataque terrorista y que Port estaba llamando a Vorzyd 5 para alertarle del posible peligro a su planeta. Felana no le creyó, pero eligió no discutirle. En vez de eso, hizo una amenaza velada: Vorzyd 5 estaba preparado para enfrentarse a los enemigos que hiciera falta, y Jinn comprendió que la guerra estaba a un paso.

Felana decidió viajar a Vorzyd 4 y reunirse personalmente con Port. Mientras tanto, un nuevo sabotaje provocaba heridos por primera vez: La explosión en un hangar de lanzaderas. Para entonces Jinn sabía que Vorzyd 5 no era responsable, pero no quería revelar al culpable porque eso le impediría dar con una solución pacífica. Port estaba decidido a contactar con Felana y exigirle responsabilidad, y Jinn estaba vez no tenía un motivo claro para detenerle. Entonces Felana se personó en el umbral de su puerta, sin ser anunciada y con dos escoltas; con el caos provocado por las explosiones, no le fue difícil entrar en el edificio.

Ahora Port estaba en desventaja: Él no estaba acostumbrado a que sucediesen cosas fuera de su control, desde luego no una visita política inesperada y hostil. Confuso y asustado, retrocedió parpadeando mientras Felana irrumpía a zancadas. Ella dejó claro que no era culpable, aunque Port insistía en sus acusaciones: El móvil era perjudicar a Vorzyd 4 de modo que Vorzyd 5 pareciese, o fuese, más fuerte ante el sistema. Felana negó que Vorzyd 5 tuviese ese interés: A Felana y sus ciudadanos no les importaba la productividad de otros mundos, y encontraban la cultura de Vorzyd 5 muy aburrida. Port intentó sentirse ofendido. Felana insistió en que se retirasen las acusaciones, o de lo contrario esos sabotajes serían el menor de los problemas de Port.

Gracias a Jinn y a su padawan, Vorzyd 4 hizo las paces con Vorzyd 5 al identificar al auténtico culpable, y después Vorzyd 4 empezó a modificar sus costumbres para mejorar las relaciones entre sus distintos habitantes.

Flip: Flip era un joven vorzydiak nacido en Vorzyd 4 en algún momento posterior a 55 ABY; tenía menos de quince años en 40 ABY.

Durante su temprana adolescencia, Flip se oponía a la cultura de Vorzyd 4, que priorizaba el trabajo ante cualquier otra cosa y lo interrumpía sólo para las tareas imprescindibles. Flip se unió a otros adolescentes realizando gamberradas, primero como mero entretenimiento y después en un intento de obligar a los adultos a dejar de trabajar y prestar más atención a sus relaciones familiares. La banda de saboteadores se hacía llamar los freelies y estaba dirigida por Grath, el hijo del Presidente Port. Grath, de quince años, era mayor que Flip y éste le admiraba y buscaba formas de que aquél se enorgulleciese de Flip.

Flip mantenía además una intensa amistad con otra freelie, la morena Tray. Las bromas de los freelies eran invariablemente no violentas y se esforzaban por no causar heridos. Tray convenció a Flip de que, si él pasaba a realizar sabotajes violentos, se ganaría el respeto de Grath (No está claro a quién se le ocurrió la idea de realizar sabotajes violentos).

Mientras tanto, el Presidente Port creía que los ataques venían del vecino planeta Vorzyd 5 y había pedido a la Orden Jedi que enviasen unos jedi como mediadores. El maestro Qui-Gon Jinn y su padawan adolescente Obi-Wan Kenobi viajaron a Vorzyd 4; y Kenobi descubrió a los freelies en una reunión secreta en que se atribuían los sabotajes. Flip participó en este encuentro.

Kenobi decidió infiltrarse en la banda de los freelies, convencido de que eran éstos los culpables. Al día siguiente, Grath, Flip y dos mujeres freelies, Nania y Pel, se saltaron las clases fingiendo estar enfermos para que les llevasen a la enfermería. Habían acordado que Tray les abriría la puerta por fuera para que escapasen. Kenobi les vio y, antes de que Tray llegase, les sacó. Los freelies le tomaron por uno de los suyos, excepto Grath que sabía la verdad pero eligió callarse por el momento.

Mientras iban a por una lanzadera, Flip sugirió que reclutasen a más alumnos, puesto que su profesor, Entrenador Nalo, a menudo se quedaba absorto con sus lecciones magistrales y no se daría cuenta de las ausencias. Grath le felicitó por la iniciativa pero decidió no hacerlo aún porque supondría un riesgo meter a más gente en el plan; Flip se entusiasmó por sus halagos.

Los freelies pretendía apagar ese día el ordenador central de operaciones que abastecía a la infraestructura de la ciudad, para que tocase una melodía en vez de enviar instrucciones. Para eso fueron a un centro de reciclaje a un kilómetro de la escuela, donde habían ocultado una vieja lanzadera bajo un montón de basura. Cuando la revelaron, Flip dio la señal de subir y Nania pilotó. Aunque ella advirtió a todos de que debían agarrarse, Flip no lo hizo bien y cayó sobre el regazo de Grath. Ninguno dio importancia a ello y bromearon sobre el efecto de sus bromas: Con la música de hoy, los adultos estarían bailando; y mañana caminarían porque les iban a dejar sin sus lanzaderas de transporte.

Los freelies llegaron a un hangar de transporte donde tomaron explosivos. Flip fue con Grath y Kenobi hacia el oeste para detonarlos; y Grath explicó que el plan incluía explosiones nocturas con un detonador remoto, en un momento en que no hubiese nadie en los hangares. Flip, sabiendo esto, decidió cambiar el plan y activar las bombas durante el primer turno de transporte: Hubo múltiples heridos, algunos en condiciones críticas. Flip creía que sólo así se ganarían la atención de sus mayores.

Al día siguiente, en una nueva reunión en el centro de reciclaje, Grath explicó lo sucedido, y Flip se levantó para atribuirse el mérito, orgulloso y esperando alabanzas. Grath estaba boquiabierto y enfurecido; pero algunos freelies se pusieron del bando de Flip. Se inició un debate, primero entre Grath y Flip; este último decía que su decisión había sido correcta y necesaria. Esto escaló en un cisma entre las dos facciones de freelies.

Nania detuvo la riña antes de que llegase a mayores, subiendo a una pila de escombros y haciendo que todos callasen. Les instó a volver a sus aulas y reunirse de nuevo esa noche, con la cabeza más fría. Flip habló con Tray en ese momento; su amiga le animó a tomar medidas porque, con Grath en contra, aún no tenían el control. Kenobi les oyó, pero no supo los detalles: Flip avisaría a la policía para que interrumpiesen la reunión de los freelies, y después aprovecharía varios trucos preparados (una bomba de humo y una salida secreta) para salvar al grupo y ganarse su respeto. Además, Tray había reconocido a Kenobi como jedi, porque los jedi se hospedaban en el bloque de jubilación al que ella había ido para visitar a su abuela Ina.

Kenobi intentó delatar a Flip ante Grath, pero no consiguió tener un instante con Grath antes de subir a la lanzadera de Nania por la noche, momento en que era tarde porque Flip y Tray iban a bordo. Grath saludó a Flip, pero éste seguía enfadado y no le respondió. Grath intentó dialogar con Tray, pero ella creía que los adultos estaban perdidos y era necesario intimidarles para que no les detuvieran. Una vez más, la reunión degeneró en una pelea, y pronto pasaría a ser una batalla campal: La policía había llegado.

Flip reaccionó con eficiencia lanzando su cápsula de humo verde, que impedía la visión pero no afectaba a la respiración, y guió a los otros niños por una salida secreta a un túnel. Tras cruzar una puerta de duracero pesado, se encontraron al aire libre, en el trejado de otro edificio.

Entonces Flip reveló a Kenobi como un jedi infiltrado y añadió que Grath lo sabía. Tray le apoyó, y criticaron a Grath por haber metido al grupo. Nania apoyó a Grath, explicando que siempre había tomado decisiones pensando en el bien del grupo. Grath perdió prestigio y Kenobi fue expulsado de inmediato, pese a que intentó convencerles con elocuencia. Poco después, Flip y Tray se reían juntos de lo fácil que había sido engañar al grupo, ignorando que Nania les oía.

Kenobi se reunió con Jinn y ambos jedi coincidieron en que Flip era el responsable y en que debían trabajar con Grath para que los freelies se revelasen ante los adultos. Grath fue receptivo cuando Kenobi se lo pidió, en parte porque Nania también le contó lo que Flip había hecho. Grath estaba sorprendido del cambio que había sufrido Flip; pero Kenobi y Nania le animaron a seguir adelante. Grath aceptó reunirse con los adultos en el edificio de Multycorp.

Grath convocó una reunió de los freelies, pero Flip no fue. En vez de eso, fue a los sótanos del edificio de Multycorp a preparar su bomba y se aseguró de cortar la comunicación con éste. Tray fue a la reunión en su nombre, lista para alegar no saber dónde estaba Flip (Nania se lo preguntó, y Kenobi estaba seguro de que Tray mentía). Afortunadamente, Tray se derrumbó al oír que varios adultos y jubilados, incluída su abuela, estaban ya reunidos en Multycorp. Tray expuso el plan, y Kenobi avisó telepáticamente a Jinn para que evacuasen el edificio.

Ajeno a todo esto, Flip activó los explosivos, derrumbando todo el inmueble. Hubo heridos, varios magullados, muchos sorprendidos, pero los daños a personas fueron minimizados. En concreto hubo una persona muy afectada: El propio Flip quedó atrapado en el sótano, con un trozo de duracero sobre su pecho inmovilizándole.

Maltrecho, Flip intentó llamar la atención de los equipos de rescate golpeando un puntal periódicamente. Sus amigos le estaban buscando, especialmente Tray. Grath oyó el sonido en un sótano y advirtió a los trabajadores. Fue necesario mover una pesada viga, lo cual exigió a una docena de adultos y a un grupo de freelies trabajando a la vez. Cuando se abrió un acceso, Kenobi y Tray entraron, esta última gritando el nombre de su amigo y aquél guiando hacia el lugar de donde venía el ruido.

Encontraron a Flip, le quitaron el obstáculo de encima, y entonce Tray cogió la mano de su amigo y se disculpo entre sollozos murmurados. Flip intentó hablar, para lo cual cogió aire y entonces tosió, estremeciéndose de dolor. Llamaron al equipo médico, que se llevó a Flip en una gravi-camilla, con Tray a su lado.

Cuando emergieron, Grath quería acercarse a hablar con Flip, pero sólo se animó cuando Kenobi le impulsó a hacerlo. Grath habló a Flip; éste ya no podía responderle pero, con una mirada, dejó claro que todo estaba perdonado entre ellos. Entonces Flip expiró y las antenas cayeron sobre su cuerpo inmóvil. Tray se echó a llorar, su cabeza sobre el pecho de él, y Grath intentó animarla explicando que no había sido culpa suya.

El cuerpo de Flip fue cubierto con una pesada tela negra y puesto en un transporte. Grath, Tray y Kenobi observaron en silencio, y pronto se unieron más freelies a llorarle.

Gracias a Port y Grath, los vorzydiaks aceptaron realizar importantes cambios sociales y organizativos, iniciando actividades no tradicionales que también eran un trabajo importante. Grath y el padre de Flip fueron al bloque de jubilación a despedirse de los jedi amistosamente, pero se detuvieron un rato para hablar con Ina, intercambiando recuerdos sobre Flip.

Ina: Este vorzydiak era la abuela de la adolescente Tray en 40 ABY. Era una mujer de cuerpo delgado y pequeño, pero lleno de energía.

Ina estaba aún casada con el abuelo de Tray y ambos vivían en Vorzyd 4. Desde su jubilación, se habían ido a vivir al bloque de jubilados. Rara vez los vorzydiaks allí eran visitados por sus familiares, obsesionados como estaban con el trabajo. Tray era una excepción y a menudo visitaba a Ina. Aunque la cultura de Vorzyd 4 era entonces muy protocolaria y ajena al ocio, Ina y Tray reían juntas (normalmente del abuelo) y disfrutaban de su mutua compañía. Ni siquiera se despedían con el saludo tradicional de su cultura, que era "a trabajar". Lo que sí hacía Ina era frotar suavemente la cara de su nieta con sus antenas.

Tray era miembro de una banda de jóvenes saboteadores y revolucionarios, los freelies, y pretendía provocar cambios sociales y culturales. Ina no creía que lo fuesen a conseguir; parecían más bien las fantasías típicas de los jóvenes, aunque incluso a Ina le resultaba una idea agradable. En todo caso, Ina sabía que estaba enferma y que no le quedaba demasiado de vida, así que no esperaba verlo en el mejor de los casos.

En 40 ABY, dos jedis fueron a Vorzyd 4 a mediar en una crisis con su mundo vecino Vorzyd 5 debida a los sabotajes, y se alojaron en el bloque de jubilados. El más joven de los jedi, el padawan Obi-Wan Kenobi, vio a Tray hablando con su abuela y se sintió satisfecho porque era la primera vez que veía a dos vorzydiaks en una relación emocional. Decidió seguir a Tray e investigarla.

Más tarde, Ina topó con Jinn en el pasillo y le preguntó si era un trabajador vorzydiak visitando a alguien. Jinn, encantador hasta el final, se ofreció a visitar a Ina y charlar un rato con ella. Ella explicó que el modo de vida vorzydiak les dejaba poco tiempo para visitar, y les daba a entender que no había realmente vida tras la jubilación. Nadie se fijaba en los jubilados, decía ella, y ella misma había llegado a desear que no hubiese vida sin trabajo. Ina habló a Jinn de Tray y de algunas de sus ideas, pero sin darle detalles.

Gracias a que Tray seguía visitando a Ina, descubrió que Kenobi era uno de los jedis.

Los jedi convencieron a los adultos y a los freelies para que se reuniesen y dialogasen en el edificio anexo de Multycorp, con gran asistencia de adultos y jubilados. Tray y su amigo Flip eran de una facción freelie violenta que pretendía provocar heridos para motivar a los adultos; y habían preparado una explosión que derribaría ese mismo edificio un día en el que no había reuniones previstas. Mientras Flip preparaba las bombas, los freelies fueron convocados a una reunión donde explicaron la cuestión, y entonces Tray se derrumbó al darse cuenta de que su abuela corría peligro.

Kenobi consiguió advertir a Jinn para que evacuase el edificio y se minimizasen los daños. Ina fue herida cuando un pequeño escombro le cayó en la cabeza mientras salían, y quedó inconsciente, con sangre en la cara. Jinn se aseguró de que ella estuviese bien. Cuando llegaron los freelies, Tray fue a ver a Ina, llorosa, y Jinn le tranquilizó. Ina abrió los ojos y extendió la mano hacia su nieta, que la tomó aún horrorizada. Jinn explicó a Tray lo que había sucedido y alabó el valor de Ina; Tray miró agradecida a Jinn, llorando. Poco después, Tray se alejó para buscar a su amigo Flip, y llegó a tiempo de verle morir.

Dos días después, habían empezado importantes cambios sociales en Vorzyd 4. Varias amigos de los jedi fueron al bloque de jubilación a despedirles, pero antes se detuvieron a charlar un rato con Ina. Entre estas personas estaban Tray, el padre de Flip, el líder de los freelies Grath y el Presidente Port, padre de Grath. Charlaron amistosamente sobre Flip y, cuando vieron a los jedi, les saludaron ondeando sus antenas y explicando sus nuevos planes: Los jóvenes explicaron a Ina que iba a construir un espacio exterior para los jubilados, con ayuda de los trabajadores. Para permitir esto, Port había reducido la semana laborable de siete días a seis. Los cambios habían empezado.

Merf: Este vorzydiak de cabello azul era miembro de la banda de delincuentes juveniles los freelies en 1 DBY. Había viajado a Vorzyd V, el mundo de casinos y juegos de azar, junto con otros tres freelies (El humano Jax, el seloniano Choyd y el vorzydiak Bemmie) para llevar a cambio actos de gamberradas. Eran forajidos dispuestos a robar, secuestrar y asesinar. Pertenencían a una escisión de freelies que, en los tempranos días del Imperio, habían decidido viajar a Vorzyd 5 en busca de distracciones y pasaron a coaccionar y robar a los jugadores y turistas.

Merf.

Los freelies se ocultaban en un edificio apodado Guarida de los Freelies en la zona más vieja de la ciudad, que rara vez era visitada, y habían abastecido su domicilio con monitores para controlar los exteriores, lásers defensivos en las zonas exteriores e incluso interiores, portas para cañones en caso de asedio y una ruta secreta de emergencia a través de una puerta oculta tras una pila de chatarra. Por bien pensada que estuviese su base, en realidad los freelies eran una banda poco eficiente que nunca había conseguido tener un droide y a menudo se olvidaban de llevar las herramientas adecuadas para sus golpes, contando cada uno con que otro se acordaría.

Sucedió que en 1 DBY, un grupo de rebeldes visitaron Vorzyd V en una misión secreta. Dos de ellos, Luke Skywalker y la Princesa Leia Organa, fueron capturados por agentes secretos del Imperio Galáctico. Los droides de los rebeldes, C-3PO y R2-D2, intentaban viajar al puerto espacial en busca de un modo de rescatar a sus amos, pero fueron acosados por los cuatro freelies en un tubo de transporte. Aunque los droides insistieron en que eran propiedad privada, los freelies intentaron hacerse con ellos. R2-D2 escapó para avisar a la policía mientras Merf y Jax aferraban a C-3PO, y después le derribaron con la ayuda de Choyd. Entonces se dieron cuenta de que ninguno llevaba una herramienta para quitarle el rayo restrictor y empezaron a culparse unos a otros. Eso dio tiempo a R2-D2 de volver con un droide policía, que persiguió a los freelies. Los freelies soltaron a C-3PO para huir.

Más tarde, los freelies decidieron dar un golpe en el Emporio de Hu, una tienda de tecnología gestionada por el paigun Kitak Hu. Cuando llegaron al local, Merf buscó al dueño pero fue Choyd quien le identificó… y Bemmie se fijó en que los dos droides de antes estaban con él, haciendo una compra. Bemmie propuso capturar o robar a esos droides y, cuando Jax oyó que estaban comprando defensas tecnológicas, concluyó que era el momento, antes de que las activasen.

Hu mandó a los droides a un campo de pruebas, y entonces Jax ordenó a Choyd atacar al dependiente. El problema fue que C-3PO, torpe por naturaleza, cayó sobre R2-D2, activó el interruptor principal de sus defensas, y la tecnología detectó las aviesas intenciones de los freelies. Granadas de gas, un pulverizador de olor nocivo y un sonido aturdidor se activaron. Los freelies empezaron a toser, cubriéndose los ojos. Jax quería seguir adelante con el plan porque aún no habían sido detectados, pero Bemmie y Choyd desistieron, y Merf les dio la razón: Ya no tenían oportunidad de capturar a los droides y su mejor opción era escapar antes de que les echasen las culpas del desastre. Jax cedió y salieron al exterior dle local.

C-3PO se quitó los aparatos, convencido de que eran defectuosos, y adquirió sólo localizadores. Los droides salieron a la calle, sin saber que los freelies les observaban ocultos. Merf y Choyd preguntaron a Jax cómo y dónde atacarían; Bemmie estaba igualmente ansioso. Sin embargo, Jax desconfiaba: Después de lo sucedido, esperaba que los droides tuviesen la mosca detrás de la metafórica oreja, y se negaba a creer que fuesen tan tontos de no haberse dado cuenta del peligro. Jax dudó demasiado tiempo, y entonces los droides subieron a una nave. Estaban a salvo.

Los freelies engañaron a C-3PO para que les dejase subir a bordo de su nave y entonces secuestraron a la Princesa Leia y a R2-D2. Dejaron atrás a C-3PO para que diese un mensaje a Skywalker, en ese momento ausente por una misión, pidiendo un rescate de cinco millones de créditos y posiblemente dos droides; y entonces se llevaron a sus cautivos hasta la guarida.

Cuando volvió Skywalker y C-3PO fue informado del rapto, aquél era reacio a pagar porque no se fiaba de los secuestradores. C-3PO le dio una alternativa: R2-D2 tenía un localizador, así que, sabiendo dónde estaba, podían intentar un rescate.

Pero el rapto no pasó desapercibido: Rbann, un soplón kubaz asociado al Imperio, informó al oficial secreto imperial en Vorzyd, Agujero Negro. Agujero Negro hizo que Rbann guiase a sus soldados de asalto hasta la Guarida de los Freelies para que capturasen a uno de los freelies; y entonces Agujero le intimidaría para que le entregase a la Princesa gratuitamente. De noche, tres soldados capturaron y torturaron a Bemmie; pero Skywalker le rescató y capturó a dos de los soldados. Agradecido, Bemmie llevó a Skywalker, C-3PO y los soldados a la Guarida.

Cuando entraron, Jax y Choyd les emboscaron por la espalda. Jax no confiaba en nadie que no fuese un freelie y quería matar a Skywalker y a los soldados en ese momento y, si Bemmie seguía protestando e interponiéndose, también le dispararía a él (La Princesa estaba a salvo porque pensaban cambiarla por el rescate).

Entonces Merf dio la alarma: Un pelotón de soldados de asalto imperiales habían rodeado la guarida e iniciaban el ataque. Falud confirmó que habían atravesado la defensa exterior y decidió que era el momento de usar el botón de pánico. Lásers defensivos reaccionaron al ataque, las luces se apagaron por seguridad y los freelies ocuparon sus portas.

Con los freelies distraidos, Skywalker desató a Organa, tomó una pistola y se puso a las órdenes de Jax para proteger la zona; pero Jax seguía decidido a vender los rebeldes a los imperiales. Agujero Negro no estaba de humor para negociar y pretendía simplemente tomar el edificio, aunque el asedio era difícil. Se sabe que muchos freelies fueron heridos en esta emboscada; y Bemmie en concreto murió por fuego imperial intentando ayudar a los rebeldes a escapar. No se conoce el destino concreto de Merf.

Después de eso, C-3PO reportó su misión en Vorzyd al superordenador BRT Maestra Mnemos.

Tyko Mez: Un famoso vorzydiak.

Nalo: Este vorzydiak era un profesor que daba clase a Flip en 40 ABY. Según Flip, a Nalo le obsesionaba tanto la materia que impartía desde sus instructuales, que sería incapaz de darse cuenta si la mayoría de alumnos abandonaban el aula.

Nania: Nania era una adolescente y miembro de los freelies, banda juvenil de saboteadores activa en Vorzyd 4 en 40 ABY. Nania solía pilotar una pequeña lanzadera de mantenimiento para trasladar a los freelies a sus lugares de reunión secretos. Aunque era una buena piloto, conducía de forma errática y daba giros muy cerrados.

En esos tiempos, los freelies estaban causando daños a la productividad de los vorzydiaks adultos en un intento de provocar un cambio social que obligase a sus mayores a dedicar más tiempo a relaciones familiares y menos al trabajo. Los adultos, creyendo que la culpa era del planeta vecino Vorzyd 5, pidieron la mediación externa de dos jedis. El más joven de estos era el padawan Obi-Wan Kenobi, un adolescente humano. Kenobi decidió seguir a una joven freelie, Tray, que había demostrado afecto a su abuela. Tray se reunió con el líder freelie Grath, hijo quinceañero del Presidente Port, delante del domicilio de éste, para esperar la lanzadera. Nania llegó con la lanzadera con un breve retraso, debido a que sus padres habían vigilado a Nania con especial ahínco y ella no había logrado escabullirse antes de que ellos se quedasen dormidos. Kenobi se coló de polizón agarrándose al exterior de la lanzadera, lo cual fue una proeza atlética.

Nania llevó a su grupo a una vieja oficina grande y desocupada. Salió del vehículo con Grath, charlando animadamente hasta el lugar de reunión. Allí se juntaron con otros freelies y éstos reportaron por turnos sus actos de sabotaje, detallando además los efectos de éstos en los adultos. Kenobi escuchó la reunión y comprendió que eran los culpables, pero también que tenían buenos motivos y que su punto de vista era interesante y poco peligroso.

Al día siguiente, Nania, Grath y otros dos freelies, Flip y Pel, fingieron estar enfermos para eludir las clases y ser enviados a la enfermería. Otra freelie, Tray, les abriría la puerta para salir según lo acordado. Antes de que Tray llegase, Kenobi abrió la puerta, fingiendo ser un freelie. Mezclado con los otros, les acompañó a un centro de reciclaje a un kilómetro de la escuela, donde ocultaban la lanzadera bajo una capa de desperdicios. Después de retirar la basura, todos subieron, Nania tomó el volante y les llevó a un hangar de transporte. Les advirtió de que se agarrasen, aunque Flip no lo hizo lo bastante bien. En su destino, Nania y los demás tomaron explosivos para distribuirlos por el hangar; el plan era detonarlos de noche, cuando las lanzaderas estaban paradas, obligando así a los adultos a ir a pie al trabajo y ver el exterior. Nania fue con Pel para cubrir la zona este, mientras los varones se ocupaban del oeste.

Flip activó las bombas deliberdamente cuando había muchos trabajadores en la zona; él creía que las bromas no estaban causando suficiente efecto y que era necesario pasar a tácticas más violentas. En la siguiente reunión freelie, en un centro de reciclaje, Flip se atribuyó con orgullo el desastre. Grath se oponía a esos medios, pero hubo freelies que apoyaban a Flip. Se inició una discusión entre facciones muy agresiva, hasta que Nania se subió a una pila de basura y gritó a todos que se callasen. ¡Y lo hicieron! Aunque enojados por la interrupción, aceptaron escuchar, y Nania les convenció de que debía aplazar esa discusión para volver a clase, y reunirse esa noche nuevamente para retomarla con la cabeza más despejada.

La lanzadera de Nania recogió a varios freelies, incluidos Flip y su amiga Tray, antes de pasar ante la casa de Grath para recogerle a él y a Kenobi. Les llevó a un edificio para la reunión, pero una vez allí, la policía se personó para arrestarles. Flip lanzó una bomba de humo para cubrir su huída y les guió hasta un tejado cercano; lo tenia todo preparado porque él había avisado a las autoridades. Una vez allí, Flip y Tray revelaron a Kenobi como jedi infiltrado y acusaron a Grath de haberlo sabido, socavando la confianza de los freelies en un líder por haberlse mentido. Nania tomó partido por Grath, apoyándole por haber tomado las decisiones en los momentos difíciles, siempre con el bien del grupo en mente. Flip y Tray expulsaron a Kenobi de inmediato y debilitaron la posición de Grath; pero Nania pudo oírles después riéndose de lo fácil que había sido engañar al grupo, y se lo dijo a Grath.

Nania fue a casa de Grath y habló con él. Decidieron ir a buscar a Kenobi, pero éste fue a buscarles antes. Los tres se dieron cuenta de que estaban en el mismo bando, compartieron lo que sabían y decidieron un plan: Los jedi habían convencido a los adultos para que se reuniesen con los freelies y discutiesen sobre los posibles errores de ambos bandos. En la siguiente reunión, Grath convocaría a los freelies para que acudiesen al anexo de Multycorp.

Nania llevó a Grath y Kenobi al centro de reciclaje para la siguiente reunión. Flip no acudió. Grath expuso su punto de vista y pidió, no ordenó, a los freelies que fuesen. Nania les animó a hacerlo, pero también aclaró que, si alguien estaba en contra, no tenía porqué ir. Entonces Nania se acercó a Tray, esperando una discusión, y la vio meramente taciturna. Con las antenas enhiestas, Nania preguntó a Tray por Flip, y Tray negó saber dónde estaba. Pero, cuando los freelies oyeron que el lugar de reunión sería el anexo de Multycorp (y ya habían llegado), eso tuvo un efecto: Tray reveló que Flip iba a volarlo, porque creían que iba a estar desocupado.

Con las comunicaciones cortadas por el sabotaje, Kenobi advirtió a Jinn telepáticamente para que desalojase la estructura, y los freelies subieron a la lanzadera. Tray tomó los controles; Nania consideró quitárselos, pero decidió que Tray necesitaba algo que hacer en ese momento porque tenía miedo por su abuela. El problema era que Tray era mala piloto y sus pasajeros sufrieron varias sacudidas.

Cuando al fin vieron el edificio en lontananza, era demasiado tarde y se colapsó. Nania lo contempló, demasiado estupefacta para decir nada. Los freelies llegaron y ayudaron en las tareas de rescate, pero Flip mismo murió por su propia bomba. Grath y Port hicieron las paces, sin embargo, e iniciaron varios cambios radicales en la cultura del planeta.

Pel: Esta joven vorzydiak era adolescente y miembro de los freelies en el año 40 ABY.

Ella asistió a una reunión de los freelies en la que se había infiltrado el padawan Obi-Wan Kenobi. Kenobi estaba escondido pero, cuando se asomó para respirar, Pel se fijó en él y le preguntó qué hacía lejos del grupo. Kenobi se puso la capucha para ocultar que no tenía antenas y fingió estar enfermo y descansando. Pel se fijó en que Kenobi llevaba ropa poco habitual; en Vorzyd 4, casi todo el mundo vestía monos de trabajo de colores muy sosos. Kenobi improvisó y dijo que era su albornoz nuevo porque había tenido que salir corriendo sin tiempo de cambiarse. Pel sonrió y le dejó en paz.

Al día siguiente, Pel se unió a otros tres freelies (Flip, Grath y Nania) fingiendo enfermedad para que les llevasen a la enfermería en vez de ir a clase; desde allí pensaban escabullirse cuando otra freelie, Tray, les abriese la puerta. No fue Tray quien les abrió, sino Kenobi, esta vez disfrazado. Kenobi pretendía infiltrarse en el grupo. Aunque él reconoció a Pel, ella parecía no sospechar de él.

Pel y los otros freelies fueron a un centro de reciclaje para recuperar su lanzadera, que estaba oculta bajo una capa de desperdicios. Subieron a bordo y fueron a la la lanzadera de un hangar de transportes. Los freelies tomaron explosivos y los distribuyeron por la zona. Pel fue con Nania por el este de la instalación.

Los explosivos detonaron demasiado pronto, causando daños. Esto precipitó una serie de eventos que desencadenaron cambios sociales en Vorzyd 4.

Port: El President Port era el Jefe de Gobierno del planeta Vorzyd 4 en el año 40 ABY. Como otros vorzydiaks, tenía grandes ojos y antenas que se movían, a veces revelando sus verdaderos sentimientos cuando él intentaba mantener cierta compostura.

Port seguía a rajatabla la cultura de su mundo, con una dedicación exclusiva de su atención al trabajo y siguiendo procedimientos estrictos de los que no se salía fácilmente. Sencillo en su vida personal, vestía con un mono monocromo como la mayoría de sus colegas, no tenía un lenguaje corporal que destacase como solía pasar con líderes de otros mundos, y vivía en un edificio totalmente mundano de una planta. Su hogar, amueblado y razonablemente cómodo, no tenía ningún artículo que revelase la personalidad de sus habitantes y resultaba aséptico cual una habitación de hotel.

Port compartía su domicilio con su esposa Bryn y su hijo adolescente Grath, ajeno a que aquélla esaba posiblemente al borde de la depresión y éste mantenía una vida secreta como líder de la banda de delincuentes juveniles los freelies. La madre de Port se había jubilado y pasó a habitar un bloque de jubilación hasta su deceso en 41 ó 40 ABY. El Presidente Port podía hablar de esa pérdida impertérrito, excepto por la sutil vibración de sus antenas.

Tradicionalmente Vorzyd 4 había sido el principal productor de suministros para el sistema y por tanto la economía más fuerte. En 40 ABY, el vecino planeta Vorzyd 5 empezaba a prosperar como centro de ocio gracias a sus casinos, algo que era visto con desdén en Vorzyd 4 tanto por la diferencia con su cultura como por la amenaza a la interdependencia del sistema. Entonces empezaron a sucederse sabotajes relativamente inocuos en Vorzyd 4, reduciendo la productividad pero sin provocar heridas físicas. Muchos nativos sospechaban que Vorzyd 5 era responsable.

Se equivocaban: Los adolescentes locales, organizados en la banda de los freelies, estaban insatisfechos con la rutina de extenuante trabajo y prentendían obligar a sus mayores a detener su actividad para que pensasen más allá de su sistema y prestasen atención, en primer lugar, a sus hijos. El hijo de Port, Grath, era su líder. Como los freelies no se atribuían sus logros, sin embargo, Port y los demás adultos acusaban al enemigo evidente.

Port era tajante en su opinión: Vorzyd 4 era culpable, aunque lo negasen. Port expulsó a los embajadores y diplomáticos de Vorzyd 5 y acusó duramente a la líder de Vorzyd 5, Felana, en conferencia holográfica. Como ella seguía negando su responsabilidad, Port decidió pedir mediación externa y contactó con el Consejo Jedi de Coruscant, algo inaudito en un sistema tan aislacionista. Mas también era inaudita su situación, a un paso de la guerra entre dos mundos. Port ni siquiera informó a Vorzyd 5 de que hubiese tomado esta medida.

El Consejo envió al maestro jedi humano Qui-Gon Jinn y a su padawan adolescente, también humano, Obi-Wan Kenobi con esta misión. Cuando aterrizaron en el puerto espacial, un guía nativo les llevó a una sala de reunión pequeña y fue a buscar a Port. Port se reunió con ellos de inmediato para exigir que tomasen medidas contra Vorzyd 5. Port no quiso escuchar a Jinn, que dudaba de la implicación de Vorzyd 5; pero Jinn era igual de testarudo que Port y se negó a cooperar hasta tener ocasión de examinar las escenas de los crímenes y averiguar más sobre la cultura local. Port, sorprendido, explicó que su cultura sólo incluía trabajar, comer y dormir.

Este encuentro fue interrumpido por una trabajadora que informó a Port de un nuevo ataque. Los ordenadores habían quedado bloqueados por un rebanador y por tanto la distribución podría retrasarse hasta seis días. Muchos trabajadores vorzydiaks en el mismo edificio quedaron desconcertados al no poder trabajar, sin saber qué hacer con su tiempo, y el estrés les causaba molestias físicas reales; algunos trabajadores sentían nauseas. Aunque Port tampoco se encontraba bien, intentó mantener una calma relativa y guió a los embajadores jedi. Jinn acompañó a Port en un intento de calmar a los trabajadores mientras Kenobi intentaba reparar el software. El padawan consiguió resolver el problema, aunque no averiguar su causa.

Pese a ello, el final de la jornada fue una decepción para Port y para sus empleados, porque habían podido trabajar menos horas y eso les frustraba. Al oír el timbre de salida, Port se unió a la masa de trabajadores para ir en lanzadera pública a los espacios domésticos, llevando consigo a los jedis: Port les invitaba a cenar en su casa. Explicó a sus invitados que habían cambiado de barrio, pese a que los edificios eran similares a ojos de un extranjero.

En su domicilio, Port informó a su esposa Bryn de la visita, y ella explicó que su hijo Grath no comería con ellos porque estaba trabajando, algo que sus progenitores encontraban más digno que el disfrute de su compañía. La comida que cenaron, en un bol, era dura e insípida para los humanos, y la conversación resultó incómoda a los vorzydiaks.

Después de la cena, Port llevó a los jedi al bloque de jubilación y les explicó que podrían ocupar la habitación de su difunta madre, procurando que no se notase la tensión emocional que había supuesto la pérdida para él.

Más tarde, Port habló de los dos jedis humanos que habían ido de visita y su hijo Grath le oyó. Esto resultó especialmente relevante porque Kenobi siguió en secreto a Grath cuando éste abandonó el domicilio familiar con nocturnidad para una reunión secreta de los freelies. Kenobi, ocultando su falta de antenas con una capucha, fingió ser un freelie; Grath decidió no delatar a Kenobi porque esperaba que el jedi les ayudase y, si lo revelaba, quizá se lo impidiesen. Kenobi reportó la implicación de los freelies a Jinn, y éste quería revelar el dato clave a Port; pero Kenobi esperaba alcanzar una colaboración entre ambas partes y convenció a su maestro de que le dejase infiltrarse durante tres días.

A la mañana siguiente, Port y su familia fueron a trabajar antes de que los jedi despertasen. Les dejaron kibi frío y patot panak para que desayunasen, y un mensaje de Port en el tablero de datos pidiendo que se reuniesen de inmediato con él para contactar con Vorzyd 5. Jinn fue a la oficina de Port en solitario, pensando formas de retrasar la conferencia.

Los freelies habían preparado una nueva broma, saboteando el ordenador de operaciones centrales que controlaba la rejilla de actividad de toda la ciudad. Eso no sólo impedía el trabajo rutinario, sino que ponía en peligro el abastecimiento de instalaciones críticas como los hospitales. Jinn encontró a Port al borde de las lágrimas, pero aún decidido a llamar a Vorzyd 5. Jinn le convenció de que era más urgente resolver el problema, y le pidió que le indicase dónde ir. Port envió a Jinn al subsótano a hablar con el técnico central, a quien avisó de la inminente llegada del jedi. A su vez, Jinn encargó una tarea a Port: Mantener ocupados a todos los trabajadores aunque fuese con tareas inútiles, para impedir que se extendiese el caos.

En cuanto el jedi reparó el ordenador, y antes de que volviese a la planta 24, Port contactó por holoconferencia con Felana para acusarla. Ella reaccionó previsiblemente con hostilidad. Cuando Jinn entró en la sala de reunión y Port intentó cederle la palabra, Felana criticó el atrevimiento de Port al implicarle. Jinn, en vez de tomar partido por Port, tranquilizó a éste con su spoderes de la Fuerza antes de que dijese algo más, y presentó una versión distinta: Según palabras de las Jinn, Vorzyd 4 había sufrido un ataque terrorista y Port había querido alertar a Vorzyd 5 por si el mismo enemigo les atacaba. Felana decidió no enfrentarse al jedi, pero dejó claro que estaban a un paso de la guerra. Jinn después explicó a Port que habían podido evitar las víctimas por muy poco.

Al día siguiente, una nueva broma de los freelies se salió de madre, provocando heridos por primera vez: Una explosión en los hangares de lanzaderas que los freelies habían pretendido detonar fuera de horario, había tenido lugar durante las primeras horas, dañando a vorzydiaks en su camino a los primeros turnos. Port explicó a Jinn el problema, y éste tomó el control de la crisis, haciendo que Port evacuase y vaciase las lanzaderas. Los vorzydiaks reaccionaron confusos a la instrucción por los altavoces pero, viniendo del Presidente, obedecieron. Jinn hizo que Port inspeccionase las lanzaderas y después pidió a Kenobi que consiguiese que los freelies se entregasen.

Resuelta la cuestión, Port quiso contactar nuevamente con Vorzyd 5, a quienes seguía acusando, y esta vez Jinn no podía distraerle. Le sorprendió descubrir que Felana había viajado a Vorzyd 4 y se personó físicamente en la sala, con otros dos vorzydiaks. Confudido, asustado y poco acostumbrado a visitas inesperadas de tanta importancia, Port quedó intimidado, retorciendo incontrolablemente sus antenas. Él intentó presentar su caso, y Felana siguió negándolo. Ella dijo que Vorzyd 5 no tenía interés en cómo iba la economía de su vecino, pero también criticó la cultura del trabajo local por ser demasiado aburrida. Port intentó sentirse ofendido, y Felana negó el insulto. Mirándole a los ojos, ella insistió en que, si las acusaciones sin fundamento se perpetuaban, Port se enfrentaría a algo peor que esos sabotajes.

Mientras Kenobi se reunía con los freelies y les instaba a entregarse, Jinn explicaba a Port la situación. Jinn convenció a Port para acordar una reunión en el anexo de Multycorp, un edificio junto a la oficina de Port: Un gran número de trabajadores y jubilados fueron allí para la ocasión. El problema era que la facción más agresiva de los freelies había preparado la destrucción de ese mismo edificio, que ellos pensaban estaría vacío.

Cuando Kenobi supo el lugar y los freelies confesaron el problema, el joven padawan alertó telepáticamente a su maestro y éste preparó la evacuación rápidamente. Hubo poco tiempo y varios heridos: El propio Port resultó lesionado en un brazo, que no pudo utilizar en ese momento; su rostro acabó chamuscado y no podía caminar con propiedad. Los freelies llegaron poco después y Grath, al ver a su padre, le llamó a gritos. Port, sin recriminaciones, aceptó el afecto de su hijo y se lo mostró enrollando sus antenas con la de él.

El desastre instaba a un grupo de adultos a culpar a los freelies en vez de colaborar. Jinn intentó convencer a ambos grupos para que buscasen un terreno común pero, siendo un forastero, no fue bien recibido. Cojeando, el Presidente Port tomó la palabra y presentó su nueva estrategia: Los vorzydiaks de Vorzyd 4 debían resolver los problemas que adultos y jóvenes habían causado, y para ello adultos y jóvenes trabajarían juntos.

En apenas un par de días, la situación había cambiado favorablemente. Port estaba en el bloque de jubilación, en vez de en su oficina, para plantear nuevos proyectos con los jóvenes y mejorar la relación con ellos. El President Port había reducido la jornada laboral de siete a seis días para permitir esta clase de actividad. Port reconoció ante Jinn que este otro tipo de trabajo era también importante y estrechó su mano, aunque no le sonrió. El futuro de Vorzyd 4, sin embargo, mostraba más sonrisas que antes.

El título de Port en la novela en inglés es Chairman, que significa presidente… de una empresa o de un comité, no de un gobierno. Por el contrario, el gobierno de Vorzyd V parece siempre en manos de una President.

Kel Razda: Un famoso vorzydiak.

Tray: Esta joven vorzydiak de cabello negro era miembro del grupo de saboteadores adolescentes los freelies y amiga íntima de otro miembro, Flip, en 40 ABY. También era mala piloto de lanzadera. Vestía un mono claro y llevaba un reloj en el cinturón.

En esa época, los freelies eran delincuentes juveniles que gastaban bromas pesadas a sus mayores en Vorzyd 4. Los freelies creían que los adultos estaban demasiado obsesionados con el trabajo y que debían dedicar más atención a la vida familiar. Por ejemplo, los ancianos eran enviados a un bloque de jubilados, donde rara vez recibían visitas de sus descendientes. Tray era una excepción a esto: Ella visitaba a menudo a su abuela Ina y conversaba afectuosamente con ella, rompiendo el protocolo tradicional de su mundo basado en la eficiencia. Ni siquiera se despedían con la frase tradicional, "a trabajar".

Tray además intentaba animar a Ina prometiéndole inminentes cambios gracias a su acciones criminales. Los freelies, guiados por el quinceañero Grath, se aseguraban de no dañar a nadie con sus bromas, pero sacaban a los adultos de sus zonas de confort obligándoles a interrumpir su trabajo. Flip, el joven amigo de Tray, admiraba a Grath y deseaba su respeto. Tray convenció a Flip de que impresionaría favorablemente a Grath si empezaba a usar violencia en sus bromas y así obtenía progresos más claros: Por entonces, los adultos de Vorzyd 4 estaban convencidos de que los crímenes eran causados por el mundo vecino y rival, Vorzyd 5.

Dos jedi fueron enviados para mediar enter Vorzyd 4 y 5. Eran el maestro Qui-Gon Jinn y su padawan Obi-Wan Kenobi, y se hospedaron en el bloque de jubilados donde vivía Ina. En ese momento, Tray visitó a Ina y Kenobi las oyó reír; él decidió fisgar en el encuentro, porque no había oído muchas risas desde su llegada. Tray estaba criticando a su abuelo, de ahí las chanzas; pero tenía que irse. Prometió volver pronto y, cuando su abuela le recordó que no viviría mucho más, Tray negó la mayor para animarse. Ina frotó el rostro de Tray con sus antenas, y después ambas enrollaron sus antenas.

Esa noche, Tray iba a una reunión de los freelies, para lo cual tomaría una lanzadera de mantenimiento pequeña pilotada por la freelie Nania. Tray se reunió con Grath delante de la casa de sus padres, y ambos subieron a bordo. Kenobi estaba siguiendo a Tray y se coló de polizón agarrándose al exterior del vehículo. Así, Kenobi asistió a la reunión y descubrió que los adolescentes estaban detrás de los sabotajes.

Al día siguiente, Kenobi quiso infiltrarse entre los freelies, ocultando su especie con un discreto disfraz. Cuatro freelies (Grath, Nania, Flip y Pel) pretendían hacer novillos fingiendo estar enfermos, de modo que les mandarían a la enfermería del centro de estudios. La puerta sólo se podía abrir por fuera, pero acordaron que Tray se escabulliría de clase más tarde y les liberaría. Kenobi se le adelantó y se unió al grupo, saboteando un ordenador público.

Mientras tanto, Qui-Gon Jinn conocía a Ina y charlaba con ella. Ina estaba encantada de tener visita y le habló en detalle de Tray. La anciana no conocía sin embargo datos concretos de la actividad de Tray y no pudo delatarla.

Finalmente, con apoyo de Tray, Flip elevó una de las bromas y causó múltiples heridos: Los freelies pretendían poner una bomba en un hangar de lanzaderas y detonarla por la noche, para dejar a los trabajadores sin transporte hasta sus puestos. En vez de eso, Flip la hizo explotar durante uno de los turnos. Grath, al descubrirlo, estaba horrorizado, y convocó a los freelies a una reunión de urgencia en un centro de reciclaje.

Cuando Grath explicó la crisis, Flip se atribuyó el mérito, esperando alabanzas. Grath se oponía a esos métodos e inició un debate en el que varios freelies tomaron partido por uno u otro. La reunión fue pospuesta, y Tray habló inmediatemente con Flip: Según ella, debían tomar más medidas urgentemente porque, si Grath estaba en contra, podrían perder prestigio ante los freelies. Ignoraban que Kenobi les había oído; pero Kenobi ignoraba que Tray le había reconocido como jedi al haberle visto cuando ella visitaba a Ina.

La decisión que Flip tomó fue avisr a la policía de la siguiente reunión, en unas oficinas abandonadas, para que irrumpiesen. Entonces, Flip salvaría a todo el grupo, para lo cual llevaba preparada una bomba de humo y una ruta secreta de escape. Una vez libres, delatarían a Kenobi como jedi infiltrado y acusarían a Grath de saberlo. Este plan salió bastante bien; Kenobi no tuvo ocasión de advertir a Grath contra Flip:

Flip y Tray fueron a la reunión en la lanzadera de Nania, sentados juntos y hoscos. Flip se negó a hablar con Grath; Tray respondió al líder freelie que los adultos no reaccionaban a sus bromas y era necesario intimidarles. Antes de que llegasen a la reunión, las dos facciones freelies se habían separado en lados opuestos del vehículo.

Cuando llegó la policía, Flip ejecutó su plan y llevó a los freelies a una azotea cercana. Entonces él acusó a Kenobi; Tray le apoyó, explicando cómo lo había descubierto. Grath fue igualmente perjudicado, pero recibió apoyo de Nania. Tray insistió sin embargo en que el jedi debía irse de inmediato. Kenobi no tuvo ni un partidario, pese a que dio un emotivo discurso para intentar convencer a los muchachos. Se fue, viendo sonreír a Tray y Flip. Pronto, Flip se reiría discretamente con Tray, diciendo que había sido muy fácil engañar al grupo. Esta vez fue Nania quien les oyó, y ella se lo dijo a Grath en la intimidad.

La siguiente broma prevista era hacer explotar el anexo a Multycorp, un edificio usado para reuniones, durante un día en que no hubiese reuniones previstas. El problema era que los jedis habían convencido a Grath y al Presidente Port para organizar una reunión entre los freelies y los adultos, con asistencia masiva incluso de jubilados, ese día. Grath convocó una reunión freelie en el centro de reciclaje, para informarles de la oportunidad y pedir a quienes quisieran ir que asistiesen.

Tray fue a esa reunión, pero Flip no porque estaba oculto en el sótano del edificio, preparando las bombas. Tray no tenía la labia de Flip y no debatió con Grath; simplemente se enfadó y golpeó el suelo con un pie cuando vio que Grath estaba ganándose a su público otra vez. Nania se fijó en la taciturna Tray y la interrogó sobre Flip; ella negó saber dónde estaba él, pero mentía y Kenobi lo comprendió. Entonces Grath dijo dónde iba a ser la reunión, y Tray se tiró al suelo asustada: ¡Sin duda su abuela estaría allí!

Tray quería detener la explosión, pero Flip había cortado las comunicaciones con el edificio. Por suerte, Kenobi se comunicó telepáticamente con Jinn para que desalojase las instalaciones. Mientras tanto, los freelies subieron a la lanzadera y Tray tomó los mandos (Nania consideró quitárselos, pero decidió que Tray necesitaba algo que hacer). Siendo Tray una mala piloto, sus pasajeros se sacudieron durante el trayecto. También durante el viaje, Grath se culpó por lo sucedido, pero Tray confesó su parte de culpa.

El edificio se derrumbó instantes después de que tuviesen línea de visión sobre él. Tray se derrumbó sobre sus controles. La lanzadera paró y el grupo corrió hacia allí.

Jinn, Port e Ina estaban juntos, esta última desvanecida y con el rostro ensangrentado. Tray se arrodilló ante ella, incapaz de hablar, pese a que Jinn diagnosticó que Ina se iba a recuperar. Tray, aún aterrada, cogió la mano de su abuela, semiconsciente, y entre lágrimas miró agradecida al jedi.

Kenobi preguntó a Jinn por Flip, intentando que Tray no le oyese, pero ella le oyó porque en esta historia todo el mundo oye de más. Tray renovó su vigor y empezó a buscar a Flip, con ayuda de Kenobi. Fue Grath quien se fijó en un sonido rítmico en el sótano, que estaba haciendo Flip en un intento de avisar a los equipos de rescate. Adultos y freelies abrieron un acceso al sótano, y Tray insistió en ir. Bajó gritando, mientras Kenobi intentaba guiarla hacia el lugar de donde venía el ruido. Encontraron a Flip atrapado, con un pesado trozo de duracero sobre el pecho que le quitaron. Tray cogió la mano de Flip y en susurros se disculpó ante él, sollozando. Flip ya no podía responderle: Tosió y se estremeció de dolor al intentar hablar.

Kenobi dejó a Tray con Flip mientras avisaba a los médicos. Éstos sacaron a Flip en una gravi-camilla, sin que Tray dejase su lado en ningún momento. Cuando llegaron al exterior, Grath habló un momento con Flip, Flip perdonó a Grath… y entonces Flip exhaló su último aliento. Tray se echó a llorar nuevamente, su cabeza sobre el cuerpo de él, admitiendo que ella se había equivocado. Grath intentó exculparla también: Flip había tomado sus propias decisiones. Tray se unió a Grath y a Kenobi mientras el cuerpo de Flip era envuelto en un sudario y retirado. Varios freelies más se unieron a ellos, sus antenas zumbando de dolor.

El efecto de este desastre y las decisiones de Grath y Port llevaron a cambios radicales en la cultura de Vorzyd 4: Se dedicaría más tiempo a actividades distintas a la productividad tradicional, incluyendo las relaciones familiares y proyectos de otros tipos. Dos días después de ese evento, Tray estaba en el bloque de jubilados, charlando con Ina, Grath y el padre de Flip para recordar al chico perdido, despedirse de los jedi y tomar decisiones. Cuando vieron a Kenobi, le saludaron animados ondeando las antenas y le explicaron su idea de construir un espacio exterior para los ancianos, trabajando en equipo con los adultos.

Natala Vanden: Esta vorzydiak de piel amarilla y enormes ojos negros era la Presidenta de Vorzyd V en 1 DBY. Ella vestía una capa parecida al plumaje de un ave, un enorme tocado y un collar decorado.

La Presidenta Vanden.

Aunque Vorzyd V era un mundo próspero afiliado al Imperio, la Presidenta se oponía al emperador, tachándole de tirano. Así, cuando la Alianza envió una misión a Vorzyd V en 1 DBY para interrumpir el flujo de créditos al Imperio, la Presidenta se presentó como un contacto de poder político que debía reunirse con los rebeldes para ultimar los detalles. Por supuesto, la Presidenta tomó medidas para su protección, convencida de que el Imperio intentaría frustrar a los rebeldes: Los rebeldes debían reunirse con Sanglui, un intermediario squalris que les daría las indicaciones para llegar hasta la Presidenta. Ni siquiera Sanglui sabía quién era el contacto, sólo que era un alto cargo del gobierno: La Presidenta se comunicaba por droide mensajero.

El Imperio supo el plan rebelde, pero tampoco conocía la identidad del contacto secreto; sólo sabían que era "un alto funcionario". Darth Vader envió a un agente de inteligencia, Agujero Negro, en misión secreta. Agujero Negro logró capturar a los rebeldes enviados, Luke Skywalker y la Princesa Leia Organa, además de a dos rebeldes locales, Paxin y Falud, y les interrogó intentando averiguar quién era su contacto. Afortunadamente, los droides rebeldes C-3PO y R2-D2 rescataron a tres de los rebeldes (Falud murió intentando escapar), y Agujero Negro no podía arriesgarse a atacar de nuevo porque su misión exigía secretismo.

La Presidenta envió un mensaje a Sanglui con instrucciones para la reunión: "El contacto secreto" sólo se reuniría con uno de los rebeldes porque, si era descubierto o descubierta (Sanglui creía estar tratando con un varón), temía que el Imperio matase a la mitad de la población. En el documento, para asegurarse de que la reunión era secreta, el rebelde elegido debía tomar un aerodeslizador hasta la plataforma de revoloteadores en el extremo oeste del puerto espacial y recoger el revoloteador 555, ya prealquilado y con una ruta preprogramada para que volase solo y perdiese a los perseguidores. Entonces debía ir a pie desde la terraza de un casino, caminar directamente al sur y pasar ante una tienda de mirapónica, donde un mecanismo apagaría cualquier tecnología de seguimiento tipo ojos-espía. Entonces debía ir hacia los gravi-tubo, en la zona 53B, hata el nivel 4, salir al tubo de carga ZZ8, ignorar señales de no acceder y lanzarse por un tubo de carga.

Pese a lo heterodoxo de las instrccuiones, Sanglui insistió en que se siguiesen. Sanglui se reunió con Skywalker, Organa y Paxin; y Skywalker salió elegido al azar. Skywalker dejó a Organa en su nave y siguió las instrucciones; pero los soldados de asalto y los ojos-espía ya le estaban siguiendo. Agujero Negro insistió en que no fuesen a por Skywalker todavía, porque quería descubrir quién era el contacto. Sin embargo, las medidas de seguridad de la Presidenta funcionaron bien: Los soldados quedaron atrás después del revoloteo, cinco ojos-espía quedaron inutilizados por la tienda de mirapónica, y entonces Agujero Negro desistió de llegar al contacto: Ordenó a sus soldados de asalto capturar a Skywalker. Incluso así, los soldados fallaron. Skywalker ya estaba a tiro del tubo de carga, y los soldados no esperaban que Skywalker se lanzase como si fuese una mercancía. Eso les despistó, y Agujero Negro volvió a perder la pista.

La Presidenta esperaba a Skywalker en la salida del tubo, con dos soldados acorazados escoltándola. Skywalker reconoció a la mandataria por su reputación, y viceversa. La Presidenta estaba satisfecha de poder tratar con un rebelde tan famoso y explicó que le trasferiría un millón de créditos en persona en los tubos de carga bajo la capital.

La Presidenta y uno de sus escoltas cuando llega Luke Skywalker.

Antes de que terminase la reunión, sin embargo, el lugar fue atacado. Los soldados protegieron a la Presidenta y ella pidió a un droide que sacase de allí a Skywalker en otro tubo de carga. Skywalker emergió hacia el puerto espacial y volvió a su nave, a reportar a la Princesa.

La misión fue un éxito parcial, porque los contactos entre la Rebelión y Vorzyd no duraron. Al final, el droide C-3PO detalló lo sucedido en Vorzyd al superordenador BRT Maestra Mnemos.

La presidenta aparece en el cómic Gambler's World (1979), en que no se da su nombre. Se la identifica por primera vez en el artículo The Imperial Warlords: Despoilers of an Empire, Part 3 (2014), publicado 35 años después.

Grath era el hijo de Port, Presidente de Vorzyd 4, y de su esposa Bryn. Durante su adolescencia, fue el líder secreto de una banda criminal revolucionaria llamada los freelies.

Nacido en 55 ABY, Grath creció en una sociedad obsesionada con la productividad: Los vorzydiaks de su mundo no hacían otra cosa que trabajar, parando sólo para comer y dormir, y siempre siguiendo estrictos protocolos. Cuando Grath alcanzó la adolescencia, su deseo era introducir cambios en su cultura y hacer que los vorzydiaks se viesen fuera de su zona de confort, instándoles a relacionarse con sus familias: Un problema serio para los jóvenes era que sus padres les dedicaban mínima atención.

Grath organizó un grupo clandestino, los freelies, bajo su propio mando. Los freelies realizaban sabotajes a modo de broma, siempre sin provocar daños a las personas, pero perjudicando su capacidad de trabajo (Por ejemplo, impidiendo su acceso a ordenadores o transportes). Inicialmente lo hacían sólo para divertirse, pero después Grath decidió usarlo con una actitud revolucionaria, en busca de una reacción.

Algunos de sus colaboradores eran los adolescentes vorzydiaks Nania, Pel, Tray y el joven Flip. Este último admiraba especialmente a Grath y buscaba su aprobación. Tray instó a Flip a que realizase sabotajes más violentos precisamente para ganarse el respeto de Grath.

En 40 ABY, las bromas de los freelies causaban angustia a los adultos y, como los freelies no se atribuían la autoría, muchos adultos creían que eran responsabilidad del mundo vecino Vorzyd 5. Vorzyd 5 había dependido económicamente de Vorzyd 4 hasta que, poco antes de 40 ABY, Vorzyd 5 había fortalecido su propia economía con casinos y locales de juego, que resultaban desagradables para la cultura de Vorzyd 4. Vorzyd 4 y especialmente Port acusaron al otro mundo, que por supuesto negó ser responsable.

Port pidió mediación externa de la Orden Jedi, y éstos enviaron al maestro humano Qui-Gon Jinn y a su padawan adolescente, también humano, Obi-Wan Kenobi. El día que éstos llegaron, los freelies lanzaron un sabotaje al sistema informático que impidió a muchos adultos trabajar durante un tiempo; cambiaron varias señales de tráfico para que los trabajadores llegasen tarde; y enviaron órdenes falsas a una fábrica de electrónica para que los trabajadores montasen mal las máquinas. Incluso hicieron que una máquina emitiese música en vez de estática.

Grath se escaqueó de cenar con sus padres y sus invitados jedi, con la excusa de que estaba trabajando; pero escuchó hablar a su padre de los jedi y supo el aspecto físico de Kenobi.

Qui-Gon Jinn y Obi-Wan Kenobi en Vorzyd IV.

Por la noche, Grath se reunió con los otros freelies en un viejo edificio de oficinas abandonado. Viajó allí en una lanzadera de mantenimiento pilotada por su amiga freelie Nania, con un leve retraso por parte de ésta. Cuando Grath dejó la casa de sus padres para ir, Kenobi le vio y les siguió agarrándose al exterior del vehículo. Grath dejó la lanzadera y caminó al encuentro, charlando animado con Nania a través de un pasillo oscuro e irregular.

En la reunión, los freelies reportaban por turnos las bromas realizadas y el efecto obtenido. Grath estaba satisfecho. Kenobi, oculto en el edificio, descubrió que los freelies y no Vorzyd 5 eran culpables de los sabotajes, y también que se negaban a causar heridos. Kenobi fue casi descubierto por otra freelie, Pel, pero fingió ser un vorzydiak tapándose la cabeza para ocultar que no tenía antenas.

Al día siguiente, Grath y otros tres freelies, incluidos Flip, Nania y Pel, fingieron sentirse indispuestos en clase para que les enviasen a la enfermería. Allí les analizaría un adulto y no podrían salir hasta que alguien abriese la puerta por fuera; pero acordaron con Tray que ella se escabulliría y lo haría; eso permitiría que el club de los cinco pudiese escapar. Simultáneamente a esto, Obi-Wan Kenobi decidió infiltrarse oficialmente y abrió la puerta, esperando que le tomasen por un joven simpatizante vorzydiak que aspiraba a unirse a ellos. Grath sabía quién era Kenobi, pero decidió no delatarle: Grath creía que Kenobi estaba intentando ayudarles, y si lo descubría, quizá los adultos y su maestro se lo prihibiesen.

Grath y sus asociados salieron de la zona de escuelas caminando. Flip, ambicioso, propuso sacar a más alumnos de las aulas la próxima vez. Grath estaba contento con la idea, pero admitió junto con Nania que era un riesgo. Grath explicó la broma que iban a cometer, principalmente para oídos de Kenobi: Apagarían el ordenador de operaciones central, que controlaba la actividad en toda la ciudad, para que nadie pudiese trabajar.

Grath les guió a un centro de reciclaje a un kilómetro de la escuela, donde hurgaron en la basura porque la lanzadera que usaban estaba oculta debajo de esa montaña. Todos subieron a bordo y, mientras Nania pilotaba, Flip y Grath dijeron en broma que en Multycorp debían estar bailando (porque sus ordenadores emitían música), y que mañana caminarían (porque les privarían de las lanzaderas de transporte).

El grupo fue a un hangar de transporte donde cogieron explosivos. Grath fue con Kenobi y Flip al oeste, mientras las damas iban al este. Durante el paseo, Kenobi preguntó por los detalles de la broma, y Grath explicó que ocultarían las bombas para que no las viesen en el transporte vespertino y, más importante, que usarían un detonador remoto para que explotasen de noche, cuando el hangar estuviese cerrado.

Algo salió mal: Flip decidió activar las bombas por la tarde, aposta Grath creyó inicialmente que había sido por un fallo técnico y pidió una reunión de emergencia, a la que asistió Kenobi. Horrorizado pero intentando mantener el tipo, Grath explicó el problema, y Flip se atribuyó el mérito con orgullo, esperando alabanzas. Grath quedó patidifuso y enfurecido, pero una parte de los freelies estaban a favor de la idea de Flip: Un sabotaje pacífico no estaba dando el resultado esperado y esto podría haber sido lo correcto. Grath se opuso desde el principio por motivos éticos e incluso estratégicos: No podían ir a la guerra contra sus propios padres.

Pero el grupo ya estaba dividido y el debate degeneró en una discusión abierta entre grupos, a un paso de la violencia. Con Grath demasiado alarmado para detenerla, Nania se encaramó a una pila de escombros para hacerles callar y ordenarles que volviesen a sus clases, emplazándoles para una reunión más tarde. Sin embargo, Tray susurró a Flip que, con Grath en contra, no conseguirían el control de los freelies a menos que tomasen ciertas medidas. Kenobi escuchó esto a escondidas.

Grath meditó en casa de sus padres y, cuando llegó el momento de ir a la reunión, se sentía revitalizado. Viendo que los adultos disfrutaban del tiempo libre, Grath insistía en que su método no violento podía funcionar. Kenobi se reunió con Grath en el umbral de su padre para hablarle de la conversación entre Flip y Tray; pero la lanzadera de Nania llegó en ese momento, y Flip estaba dentro. Entraron, Grath saludó a Flip y éste se mantuvo callado, aún enfadado. Grath aún así presentó su punto de vista, y Tray rebatió que los adultos estaban demasiado idos y era necesario recurrir al miedo para convencerles. En seguida la lanzadera se dividió en dos grupos, físicamente separados, criticando las opciones del otro.

En la reunión, las desavenencias se recrudecieron, y además tuvieron una sorpresa: Alguien les había delatado y las autoridades habían enviado un cuerpo policial. Los freelies se miraron nerviosos, sin saber qué hacer, pero Flip reaccionó a tiempo lanzando una bomba de humo verde, inocua para sus respiraciones. Flip guió a los freelies a una salida secreta a un túnel, cruzando varios pisos y una puerta de duracero pesado, para llegar al tejado de otro edificio. En cuanto pudieron recuperarse, Flip y Tray revelaron a Kenobi como jedi infiltrado, añadiendo además que Grath lo sabía. Que Grath fuese un mentiroso debilitaba su posición como líder, pero Nania le apoyó, recordando que Grath siempre había tomado decisiones difíciles y beneficiando al grupo. Tray exigió que Kenobi se fuese, y todos salvo Grath aceptaron. Kenobi miró a Grath buscando apoyo, pero éste no pudo dárselo. Kenobi intentó dar un breve discurso, pero no les convenció y se fue.

Kenobi informó a Jinn, y ambos concluyeron que Flip había sido el traidor. Jinn envió a Kenobi de nuevo con Grath, en un intento de conseguir que ambos bandos se escuchasen. Kenobi fue a buscar a Grath.

Grath estaba en casa de sus padres con Nania; ambos sabían también que Flip era el traidor porque Nania le oyó jactarse ante Tray. Iban a ir a buscar a Kenobi, pero éste llegó antes. Grath se disculpó, preseentó sus motivos y convenció a Kenobi de que le ayudase: Lo que querían realmente era fortalecer su relación con sus padres; pero ahora la prioridad era detener sabotajes que pudiesen causar heridos. La siguiente broma planeada iba a ser violenta: Hacer explotar el edificio de Multycorp, donde se reunían los adultos, pero un día en que no hubiese reuniones planificadas. Grath y sus dos amigos también hablaron de Flip; Grath estaba confuso al ver que Flip se había desviado de su camino; Nania y Kenobi le dijeron que Flip aún admiraba a Grath, y que éste no debía culparse de los actos vandálicos de otro. Finalmente, Kenobi convenció a Grath para convocar una reunión entre freelies y adultos.

Cuando el maestro de Kenobi lo supo, quiso ir a la reunión de los freelies, pero Kenobi le convenció de que era mala idea. Sin embargo, Jinn se reuniría personalmente con Grath. El muchacho entró tímido y cabizbajo en la sala, sin saber cómo tratar a un maestro jedi, pero Jinn le trató con respeto y dignidad, alabándole como líder de los freelies. Después de convencerle de que estaban del mismo lado, Grath fue con Kenobi a esperar la lanzadera de Nania para ir a su nuevo lugar de reunión: El centro de reciclaje.

Una vez allí, Grath se dirigió a los freelies, presentó sus disculpas y se explicó. Su público fue receptivo en general, aunque no todos le siguiesen. Una excepción: Tray reaccionó golpeando violentamente el suelo en protesta (Flip no había sistido). Grath y Nania ofrecieron a los freelies que quisieran reunirse con los adultos y los ancianos en Multycorp. Esto alertó a Tray: El anexo Multycorp iba a explotar ese mismo día, poniendo en riesgo las vidas incluso de los familiares de Tray. Ella reveló la amenaza.

Como Tray y Flip habían bloqueado los sistemas de comunicación tradicional, todos subieron a la lanzadera, con Tray pilotando. Siendo ella mala piloto, Grath y sus otros pasajeros tuvieron un incómodo viaje. Kenobi alertó a su maestro telepáticamente; Grath lo observó y le deseó suerte mientras se preocupaba por su propio padre. Grath y Tray admitieron sus mutuas responsabilidades, con Tray negándose a reconocer la culpa de Grath.

Llegaron a ver el edificio de Multycorp justo cuando éste empezaba a derrumbarse. Grath se tapó la cara con las manos ante ese horror pero, cuando pudo acercarse, vio a su padre magullado y herido, pero en pie. Corrió hacia él y ambos abrazaron sus antenas, enrollándolas para decirse uno a otro que todo iría bien. Port estaba con Ina, la abuela de Tray, y con el maestro Jinn, que explicó que habían podido evacuar a casi todo el mundo.

Grath oyó un sonido que venía del subsuelo y advirtió a los equipos de búsqueda. Se trataba de Flip, atrapado bajo una viga y golpeando un puntal para pedir ayuda. En un intento de acceder a la zona moviendo pesados escombros, los trabajadores aceptaron escépticos la ayuda de un grupo de freelies dirigidos por Grath. Allí encontraron a Flip, tan malherido que necesitó una gravi-camilla para salir.

Grath estaba inquieto al ver salir a su amigo y quería hablarle, pero se encontraba emocionalmente bloqueado. Los jedi lo notaron y Kenobi susurró palabras de ánimo a Grath al oído. Grath a su vez habló con Flip y éste, incapaz de responderle con palabras, le perdonó con la mirada. Sus antenas se tocaron brevemente, y Flip expiró. Tray lloró conmocionada, y Grath intentó animarla, explicando que Flip, no ella, era responsable de sus actos, y que ya habían abandonado esos métodos. El cuerpo de Flip fue tapado y partió en un transporte. Grath y varios freelies zumbaron de dolor en un momento de paz.

Después de eso, los adultos empezaron a recriminar a los freelies, acusándoles del desastre e iniciando un nuevo duelo de gritos. Kenobi se adelantó y instó a todos los vorzydiaks a trabajar en equipo pero, siendo un forastero, no fue escuchado. Port, como líder planetario, avanzó apoyándose en su hijo y casi ordenó a los vorzydiaks resolver los problemos que ellos mismos habían causado.

Después de la época de Grath, otros freelies han sido más controvertidos.

Dos días después, la sociedad había dado pasos de gigante. El bloque de jubilación había sido adaptado para recibir viistas, con sillas y mesas para conversar, y Grath estaba en el centro de un círculo formado por los conocidos de Flip, como Port, Tray, Ina y el padre de Flip. Al ver a Kenobi pasar cerca, le saludaron ondeando las antenas, y Grath se levantó para agradecerle su ayuda. Explicó que habían ido a hablar con Kenobi, pero eligieron parar antes y compartir recuerdos de Flip con Ina. En todos explicaron también que planeaban colaborar entre generaciones para construir un espacio exterior; el President Port había reducido la jornada laboral de siete a seis días para permitir esta clase de actividad. Grath y sus amigos se despidieron de los jedi con felicidad.

Vorzyd 5 y los vorzydiaks aparecen por primera vez en la tira cómica de Star Wars publiacda en periódicos desde 1979 a 1984, y distribuida por Los Angeles Time Syndicate; concretamente en el primer arco argumental, Gambler's World, escrito y dibujado por Russ Manning y publicado entre el 12 de marzo y el 8 de septiembre de 1979 (excepto domingos). Eso convierte a Vorzyd 5 en uno de los primeros mundos explorados por el Universo Expandido. Esta historia sería después coloreada y reeditada por Dark Horse en Classic Star Wars: The Early Adventures Nº 1 a 3 (1994), y en la sección oficial Hyperspace.

Según se cuena en el artículo Authors of the Expanded Universe: Russ Manning, por Michael Kogge, publiacdo en Star Wars Insider Nº 140 (2013), Manning consideraba que este cómic había estado entre sus mejores trabajos; pero los síntomas de un cáncer de estómago empezaron a afectarle mientras trabajaba en ello. Aunque Manning intentó ocultar su problema a sus ayudantes, su sufrimiento se hizo obvio y, poco después de terminar Gambler's World, cedió cada vez más responsabilidades de guión a Don Christensen, Steve Gerber y Russ Helm (seudónimo de Archie Goodwin). Abandonó su trabajo definitivamente más tarde; pero sus creaciones fueron retomadas y continuadas por otros autores; memorablemente Agujero Negro tuvo un protagonismo importante en la novela Luke Skywalker and the Shadows of Mindor (2008, Matthew Stover) y, con menos talento, en una de mis propias fanfictions.

Además, se menciona Vorzyd en la publicación online HoloNet News (2002) y dos artículos del blog de Rich Handley y Abel Peña en 2013, Viva Space Vegas! The History of the Marvelous Wheel, Part 1 y Part 2, mencionan de pasada el sistema pero se centran más en Simon Greyshade.

Los vorzydiaks tuvieron otra aparición especialmente relevante en la novela juvenil Aprendiz de Jedi: La Amenaza Interior (2002, Jude Watson), décimooctavo libro de la serie Aprendiz de Jedi. El libro The Essential Reader's Companion (2012, Pablo Hidalgo) resumen la aventura y menciona el protagonismo de varios vorzydiaks, concretamente Grath, Port y Tray.

También se menciona a Vorzyd y los vorzydiaks en The Complete Star Wars Encyclopedia (2008, vv.aa.), que incluye artículos sobre Merf, Felaana, Flip, Grath, Ina, Nalo, Nania o Port. No aparecen personajes como Bemmie o Vanden.

Según la Wookieepedia, los vorzydiaks aparecen en la novela Imperial Commando: 501st (2009, Karen Traviss), pero lo he revisado y no los encuentro. Este dato fue añadido por un anon, hace una década, diciendo que era una primera aparición. Mi teoría: Error o troleo.

Hay un número de vorzydiaks que aparecen en la novela La Amenaza Interior con cierto protagonismo, aunque no se den sus nombres. No los he incluído en la lista de vorzydiaks notorios porque en realidad se disponía de muy poca información de cada uno de ellos. Ellos son:

• El guía que recoge a los jedi en el hangar y los lleva al edificio de Multycorp.
• Una trabajadora vorzydiak que interrumpe la reunión para avisar a Port.
• El técnico asignado a un puesto que Obi-Wan requisa para una reparación.
• La difunta madre de Port.
• Un anciano vorzydiak paseando por el bloque de jubilados empeñado en trabajar.
• El abuelo de Tray, mencionado por ésta y por Ina.
• El técnico del ordenador central.
• Una mujer en una sala llena de circuitos.
• El padre de Flip.

El juego de rol de Wizards of the Coast presenta las reglas para generar personajes vorzydiaks en el libro Geonosis and the Outer Rim Worlds (2004, Craig Robert Carey, Jason Fry, Jeff Quick, Jeffrey Quinn y Daniel Wallace), junto con un ejemplo de personaje vorzydiak medio (Un plebeyo, vaya). Un vorzydiak tiene bonificación a su Inteligencia y penalización a su Sabiduría. Por la dificultad que tienen los vorzydiaks aceptando ideas alienígenas, los personajes de otras especies tienen una penalización cuando intentan convencerles de algo contra su tradición o de que aprueben a seres de otras especies. Los vorzydiaks con clases heroicas o profesionales (pero no los plebeyos) reciben puntos de habilidad extra y una dote adicional para representar su versatilidad.

Existen algunos problemas de continuidad en ciertas fuentes. En primer lugar, el mismo planeta es llamado Vorzyd V en el cómic Gambler's World; Vorzyd 5 en la novela La Amenaza Interior; y Vorzyd-5 en HoloNet News. He intentado justificarlo por técnicamente son momentos históricos distintos: La Guerra Civil Galáctica (1 DBY), los tiempos de la Antigua República (40 ABY) y la Crisis Separtista (22 ABY), respectivamente.

Hay algo que me atormenta en la continuidad de la novela La Amenaza Interior. Los jedi organizan una reunión entre los adultos y los adolescentes, en el anexo del edificio de Multycorp. Grath está de acuerdo en que tenga lugar allí, pero él y Nania ya habían dicho que la siguiente broma iba a ser "explosiva" y tenía un potencia muy dañino, así que parecen tener claro que iba a ser volar ese edificio. Considerando que Flip ya ha demostrado su disposición a dañar a gente, y que está suelto, el mero hecho de permitir que sea en ese edificio supone correr un gran riesgo. La verdad es que Grath y Nania no dicen a Obi-Wan Kenobi que sepan cuál edificio va a ser atacado, y sólo sale el tema cuando Qui-Gon Jinn ya está allí reunido; pero bien que podrían Grath y Nania haber advertido a Kenobi y evitar estos problemas.

Por último, según el artículo sobre Vorzyd IV en The Complete Star Wars Encyclopedia, los vorzydiaks de Vorzyd IV piden mediación al Consejo Jedi porque, según ellos, los nativos de Vorzyd V no quieren trabajar por los créditos que Vorzyd IV les está ofreciendo. Esto no tiene nada que ver con lo que se dice en la novela La Amenaza Interior: El problema en ésta es que Vorzyd IV acusa a Vorzyd V de haber saboteado sus instalaciones. Vorzyd IV no quiere contratar a nativos de Vorzyd V en ningún momento.

© S I T H N E T

Sección creada por Skippy Farlstendoiro y Al Noah para SithNET
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