LOS GORAX

Articulo creado por Skippy Farlstendoiro y maquetado por Al Noah, los xenobiólogos de SithNET
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Endor


 
"Los ewoks saben que el temible gigante gorax tiene cautivos a los padres de los niños y también saben que el gigante gorax vive en un lugar del que ningún ewok ha regresado jamás". (El narrador)

En la Luna Boscosa de Endor residía el temible gigante gorax, que alcanzaba treinta metros de altura. Esta criatura de perfil humanoide había crecido tanto aprovechando la baja gravedad, pero mentalmente era un brutal bárbaro que cazaba ewoks y alienígenas visitantes para retenerlos en jaulas como mascota. Sorprendemente civilizado, el gorax utilizaba herramientas y muebles adaptados a su tremendo tamaño. Era afortunadamente tan escaso en número que muchos expertos lo consideraban una mera leyenda. Conoceremos hoy todo lo que ustedes siempre quisieron saber del gorax y nunca se atrevieron a preguntar.



El temible gigante gorax.

Aunque ustedes ya conocen la luna de Endor, me permitiré repasar algunos aspectos astrogeográficos que pueden ser relevantes. En primer lugar, en los territorios del Borde Exterior había dos regiones planetarias superpuestas en el disco galáctico: Zuma Exterior, formada por los sectores Fusai, Ikenomin, Kakani y Sugai, y Zuma Interior, formada por los sectores Ablajeck, Moddell y Spar. El sistema Endor estaba en el sector Moddell, un territorio en las Regiones Desconocidas durante la mayor parte de la historia de la República. Aún en tiempos de la Nueva República era difuso saber si esta zona estaba en el Espacio Salvaje o en el Borde Exterior.

El sistema Endor, a 43.300 años-luz del Núcleo, estaba formado por cuatro planetas que orbitaban la estrella Ibleam, a veces llamada también Endor. El gigante gaseoso plateado Endor, llamado Tana por los nativos y orbitado a su vez por nueve lunas, era el más cercano a su sol; los otros tres planetas, Eloggi, Megiddo y Dor, alejados y sin lunas, tuvieron fama casi exclusivamente por haber sido minados masivamente por el Imperio durante la construcción de la segunda Estrella de la Muerte.

El gigante gaseoso Endor estaba orbitado por nueve lunas. La mayor de éstas, llamada Luna Boscosa de Endor, Luna Santuario o simplemente Endor, era habitable, con una atmósfera respirable, una superficie terrestre y un núcleo de metal estable fundido con gruesa corteza de silicato. Con un diámetro de 4.900 kilómetros, la luna tenía el tamaño de un planeta pequeño, días de 18 horas estándar y años de 402 días estándar. Desde la superficie de la luna se podía ver el gigante gaseoso en el cielo, visible la mayor parte del tiempo y dando luz incluso por las noches. Por desgracia no era lo único que hacía "Tana".

El sector Moddell estaba cubierto de sumideros y torbellinos hiperespaciales que dificultaban el viaje estelar, y la navegación se dificultaba más porque el espacio apenas había sido cartografiado. Por último, dentro del sistema Endor, la masiva sombra gravitacional del gigante gaseoso Endor exigía complicados saltos hiperespaciales para evitar disgustos. El atrasado sector Moddell no atraía visitas habitualmente, pero con el paso de los milenios, centenares de naves se estrellaron en la mayor de la lunas, convirtiéndola en un cementerio de pecios del espacio. Más tarde les hablaré de algunos de estos náufragos.

Otro de los efectos del gigante gaseoso era una masiva atracción, que se combinaba con una gravedad ligera en la luna boscosa (sólo 0.85 g). Esta combinación permitía que algunas formas de vida nativas pudiesen crecer de modo inusitado. Los árboles alcanzaban cotas de miles de metros, aunque lo normal era que se quedasen en "sólo" trescientos metros, y algunas bestias locales como el gorax pudieron hacerse inmensos.

La órbita regular de la luna alrededor del gigante gaseoso, y la baja oblicuidad de la eclíptica lunar (es decir, su inclinación axial) ayudaban a crear un clima templado con lluvias frecuentes. Eso convertía a la Luna Santuario en una pequeña esfera verde llena de vida, cubierta de bosques de varios tipos, lagos y estanques de agua dulce, montes, praderas y savanas rocosas. También había desolación en el planeta: Los yermos del sur estaban salpicados de pozos de azufre y lagos secos en una árida expansión llamada el Desierto de Salma. Más allá de este lugar, en una sierra rocosa e inhóspita, prácticamente carente de vegetación, habitaban los temibles goraxes y unas pocas criaturas más, acoso los seres más robustos de la luna. En general, los predadores de esa zona viajaban hasta los bosques para cazar; pero los habitantes de los bosques rara vez se aventuraban en esos riscos de caliza.



Aunque era difícil llegar a la luna de Endor, hubo desafortunados que naufragaron allí y conocieron al gorax.

Muchas eran las formas de vida que prosperaban en este mundo. Famosos en toda la galaxia eran los ewoks, seres inteligentes y primitivos que formaban el 95% de la población local de treinta millones de seres. Los zancudos yuzzums, también perceptores, vagaban por las llanuras en una población estimada de un millón doscientos mil personas, y varios de ellos dejaron la luna en naves de paso y colonizaron otros mundos. El hábitat natural de los yuzzums, la Savana del Pellejo de Dragón, era compartido con una civilización de Merodeadores Sanyassanos, supervivientes de un naufragio que buscaban prosperar en la luna. Los veloces y diminutos teeks y los malhumorados duloks venidos de otro mundo estaban también entre los más destacables. La bestia semiintiligente brodok, el necio blurrg, los greñudos y terribles borras, los monstruosos dragones cóndor y los relucientes wisties parecidos a hadas se contaban también entre las criaturas, terroríficas o amistosas, que compartían el entorno con los náufragos de mundos cercanos.

Merece la pena hablar un poco sobre los ewoks antes de continuar, en tanto eran la forma de vida dominante. Omníveros bípedos velludos de un metro de estatura, los ewoks eran excelentes cazadores, y acostumbrados a lidiar con predadores pertinaces, se mantenían en constante alerta. Aunque tecnológicamente primitivos y con contacto limitado con otras civilizaciones, eran muy ingeniosos en sus desarrollos y construían sus pueblos en las copas de árboles o en lagos, con defensas naturales contra posibles enemigos; en las casas en copas de árboles, los ewoks vinculaban sus casas con escaleras, cuerdas y viñas, y tenían listos planeadores para bajar. Incluso había quien atribuía a los ewoks una capacidad sobrenatural para percibir el peligro y utilizar la Fuerza. Su cultura era tribal, con un cacique al mando de cada poblado y un chamán que interpretaba la señales de los espíritus. El ewokés era el idioma principal de la luna de Endor, aunque el yuzzum, el sanyassano y el Básico también se hablasen.

Los Gorax


 

El gorax (acento en la segunda sílaba; plural "los gorax" o los "goraxes") era un malhumorado y horrible gigante semiinteligente nativo de la luna de Endor. A menudo un gorax superaba los seis metros de estatura, pero podían llegar hasta los veinte metros y había registros de inmensos gigantes de treinta metros. Esta cifra era alta incluso para un ser que hubiese evolucionado en un mundo con esa baja gravedad.

La silueta del gorax era humanoide, en parte porque, biológicamente, seguía siendo un primate. Sus cuerpos simiescos estaban cubiertos de vello grueso y apelmazado que solía ser marrón, negro o gris, pero que dejaba al descubierto parte de su piel: El rostro y el torso estaban despejados, permitiendo al gorax exhibir sus pezones. Los antebrazos eran en algunos casos especialmente velludos, mientras que había menos pelo entre el codo y el hombro.



El gorax era gigantesco en comparación con los ewoks. Éste en concreto tenía antebrazos hirsutos.

Los brazos acababan en manos de dos zarpas más un pulgar oponible, en cada una de las cuales podían caber fácilmente los dos ewoks; el gorax utilizaba sus zarpas como arma principal, y el mordisco como arma secundaria. Los pies mostraban dos dedos. Siendo bípedo, caminaba el doble de rápido que un humano medio, pero no más. La planta del pie estaba acolchada de forma natural.



Las suelas de los pies del gorax eran acolchadas.

Estudiemos ahora la cara del gorax, afilada, con mentón estrecho y coronada por una larga melena negra. De ésta sobresalían dos grandes orejas copetudas, puntiagudas y triangulares, del tamaño de alas de dragón, curvadas hacia atrás y adaptadas para ser muy sensibles a los ruidos realizados por animales pequeños. En cuanto al rostro propiamente dicho, estaba dominado por una mandíbula inferior protuberante llena de colmillos afilados, un ceño pesado y un hocico porcino. La boca del gorax no parecía permitirle utilizar palabras, sino únicamente gruñir y rugir para expresar emociones brutas. El idioma del gorax, si se le puede llamar así, era rudimentario.

Los dos pequeños ojos del gorax estaban adaptados para ver con poca luz. Aunque ha habido casos de gorax atacando a la luz del día, el gorax era un cazador principalmente nocturno que pasaba los días en cuevas oscuras; sus ojos no estaban acostumbrados a la luz brillante y eran vulnerables a destellos directos ante su cara; eso les podía causar auténtico dolor. Cromáticamente, se han visto goraxes con ojos azules, marrones y en un caso verdes sin pupilas visibles.



La cara del gorax, con sus ojos pequeños, sus orejas grandes y sus colmillos.

El gorax era una criatura poderosa, pero menos resistente de lo que cabría esperar. Un disparo de rifle bláster bien dirigido podía entrar por su ojo, perforar su cerebro y no sólo matarle, sino hacer un agujero de salida en la nuca. Evidentemente un ataque de artillería, como con los cañones bláster de un AT-ST, podía causar el mismo efecto. Pero incluso las armas primitivas de un ewok podían causar dolor, incluso si eran arrojadas por manos aficionadas.

Era sin embargo el gorax fuerte como pocos seres. Con meros manotazos en la pared de una montaña, podía causar un derrumbamiento, con las estalactitas cayendo sobre su propia cabeza. Afortunadamente no eran rápidos en actuar.

La dieta del gorax incluía carne; es discutible si era carnívoro u omnívoro.

Los gorax preferían entornos cálidos y mantenían fuegos ardientes en sus cuevas en todo momento.



El gorax era un mamífero, obsérvese un pezón.

Estos seres eran escasos en número, y se creía que la población planetaria era de menos de dos docenas. Además, solían rehuir la compañía de otros gorax.

Los jedi han declarado que la presencia de un gorax se puede percibir a través de la Fuerza.


Cultura


 

Los gorax desarrollaron inteligencia relativamente poco antes de la era del Imperio. Eso les convertía en seres primitivos, además de bárbaros.

En general los gorax habitaban los enormes interiores cavernosos de las formaciones montañosas del desierto, en las sierras de la luna de Endor. Allí utilizaban muebles ásperos adaptados a su colosal tamaño y algunas herramientas básicas de piedra y madera, como palos y cayados.



El hábitat de un gorax con muebles de su tamaño y una hoguera.

Un utensilio favorecido era el hacha, construido con una enorme roca atada al tronco de un árbol. La manufactura era sorprendente elegante y eficaz, puliendo el mango de su arma para que las ramas no molestasen; y sólo resulta más impresionante porque el gorax vivía en el profundo desierto, una zona sin árboles. Era preciso viajar hasta los bosques sólo para obtener materias primas.

Contrariamente a otros primates simiescos, el gorax llevaba ropa y adornos. Sus prendas de vestir eran de piel, cosida con larguísimas e irregulares puntadas y de forma muy tosca. Rara vez se cubrían todo el cuerpo: Un gorax podíoa llevar sólo un taparrabos, y otro moverse con una hombrera. La joyería era más peculiar: Sus abalorios eran del tamaño de personas. Pendientes grandes como una nave o anclas de barco colgaban de sus cuellos. Algunos gorax utilizaban los cadáveres de sus víctimas como decoración, por ejemplo exhibiendo cráneos en un cinturón o los cuerpos enteros a modo de bandolera.



Este gorax adorna su cuerpo con una práctica bandolera y decoraciones en su pelo.

El hábitat de un gorax fue analizado en cierto detalle: Se trataba de una montaña en cuyo interior se conectaban una red laberíntica de cavernas. Desde el exterior, pequeñas aperturas parecidas a ventanas eran accesibles, pero sólo un excelente escalador podría alcanzarlas desde fuera; posiblemente el gorax las usase como puerta. Los accesos a nivel de suelo estaban bloqueados con piedras pesadísimas que no se podían mover fácilmente. Quien entrase por allí descubriría pequeños animales parásitos que se alimentaban de los restos de comida del gorax, como las arañas de crianza (de las que hablaré más adelante); el gorax parecía ignorar a estos seres.



Una de las arañas de crianza.

Cerca de los aposentos de gorax había unas enormes escaleras de aspecto sorprendentemente artificial, pero de un tamaño práctico sólo para un bípedo grande como un gorax. La guarida propiamente dicha tenía muebles de piedra, incluyendo mesas y sillas, así como hogueras y hasta cestos, cuerdas y otros objetos de tamaño normal, sin duda saqueados. El techo esta lleno de estalactictas, pero el suelo era totalmente plano. El gorax a menudo se sentaba a la mesa para roer huesos enormes de un animal desconocido. No se sabe quién construyó esta fortaleza.



Las escaleras del hogar del gorax parecen más avanzadas que su capacidad de ingeniería.

Los gorax eran cazadores nocturnos que utilizaban armas manuales. También eran escandalosos, rugiendo hacia el cielo para anunciar su presencia y así sobrecoger a sus presas; y el atronador caminar del gorax causaba terror en el más valiente guerrero de Endor. Aunque se moviesen relativamente despacio, los gorax no eran ajenos a las peculiaridades de una pelea, sobre todo contra enemigos múltiples: Un gorax que acabase con uno de sus adversarios a menudo podía golpear a otro oponente en las inmediaciones en una fracción de segundo.

Una vez terminaba la caza, el gorax se llevaba a sus presas para comerlas directamente, o no: Se conocían casos de gorax que almacenaban comida para consumirla más tarde. Algunos gorax mantenían presas vivas capturadas en jaulas colgantes lejos del suelo, con fines de mero entretenimiento, aunque a veces el gorax se olvidaba de sus mascotas, provocando que acabasen muriendo. En otros casos, el gorax cambiaba de opinión y mataba directamente a sus animales de compañía simplemente porque se aburría.



Cazador nocturno que avanza entre las sombras sosteniendo un enorme hacha.

Muchas especies podían sucumbir a los gorax, entre ellos los ewoks. Aparentemente los gorax estaban obsesivamente interesados en los ewoks y gustaban de saquear sus pueblos para llevarse prisioneros a puñados. Gracias a su estatura excepcional, el gorax a menudo podía alcanzar los pueblos de los ewoks en las copas de los árboles, y capturar a sus habitantes para comérselos. Aunque los ewoks sentían un saludable respeto por el gorax y eran reacios a las temeraridades, ellos tampoco se permitían quedarse quietos esperando el desastre. En vez de eso, desarrollaron técnicas de caza y armas capaces de desafiar al gorax y a otros enemigos gigantes de Endor; éstas les resultaron útiles más tarde para enfrentar a los AT-STs imperiales durante la batalla de Endor.

Los guerreros ewoks tradicionalmente recurrían a arcos, cuchillos, dardos envenenados con raíces de arbusto Fgir, hachas, hondas y lanzas para enfrentar a presas pequeñas, y que resultaban insuficientes para derrotar a un gorax (aunque podrían convencerle para que se retirase). El equivalente ewok a la artillería estaba en la sorpresa y en ataques que no diesen al gorax la oportunidad de reaccionar. Cuerdas con las que pueda tropezar o lazos que le enreden eran frecuentes. Un truco ewok llamado kal puk consistía en tirar troncos cilíndricos desde una colina cercana para obligar al coloso a resbalar. El tek swee, o "golpea-cabezas", era un tronco masivo único atado a árboles, que se balanceaba hacia el gorax a modo de ariete, y había demostrado su eficacia más de una vez: Los gorax golpeados mientras atacaban un poblado, eran ahuyentados. Durante la batalla de Endor, los ewoks rápidamente comprendieron que la "piel" del AT-ST era más robusta que la del gorax y desarrollaron una variante del tek swee con dos troncos. Los ewoks a menudo estaban alerta por si un gorax se acercaba a su poblado, y le recibían de forma activa: Salvas de flechas, lanzas y proyectiles pétreos desde catapultas, hondas y planeadores, también servían a los ewoks para disuadir a estos gorax.



El gorax se asoma en los poblados ewoks que no están demasiado altos para capturar a su presa.

Aunque los gorax eran depredadores, también mantenían relaciones menos hostiles, y hasta simbióticas, con varios otros animales locales. Destacaba entre éstos el borra o lobo-jabalí, un mamífero carnívoro y cuadrúpedo de aproximadamente tres metros de estatura. El peludo borra tenía enormes colmillos afilados, dos de los cuales eran siempre visibles, además de grandes garras en forma de gancho capaces de agujerear árboles y un agudo sentido del olfato para rastrear. Su piel era resistente incluso a disparos de bláster, aunque éstos le hacían chillar de dolor. Los borras, que aullaban al gigante gaseoso en el cielo nocturno, solían ir en parejas para cazar cualquier cosa que se cruzase en su camino, a la que atacaban salvajemente. Eran un problema especialmente para los ewoks, que necesitaban una batida con cebos, lanzas, redes y dardos envenenados para acabar con uno de estos seres (y con él alimentar a todo el pueblo durante días). Otra de las presas favoritas de los borras era el enorme blurrg, presa fácil para un cazador más astuto: El borra era además paciente y astuto, capaz de esconderse fuera de la vista durante mucho tiempo cuando sabía que su presa estaba arrinconada. En general, el borra era una amenaza para cualquier criatura de Endor más pequeña que un gorax.

Pese a lo terrible que podía ser el borra, el gorax a menudo lo mantenía como mascota semidomesticada y animal de caza. El procedimiento para adoptar un gorax era algo así: El gorax descubría una cueva subterránea en que una madre borra se había recluido para usar como paritorio. El gorax aplasta entonces el lugar, mata a la madre borra y a todos sus cachorros recién nacidos, excepto a uno que ha elegido como mascota. Manteniendo su interés por adornos corporales, atacará en su nuevo sabueso arneses y collares de cuero. A veces un mismo gorax puede llegar a tener varios borras simultáneamente y tiene que adoptar el rol de líder de la manada. Con el tiempo, el gorax puede decidir matar a sus mascotas premeditadamente.



Este gorax tiene dos mascotas borras y las está separando.
El ewok del suelo no sabe si eso le beneficia o le perjudica.

Otra criatura temible de la luna de Endor era la araña de crianza, una bestia de seis patas, grandes colmillos y el tamaño de un dewback. Estos seres, lentos en su movimiento, vivían en el fondo de las grutas de los gorax y se alimentaban de las sobras podridas que abandonaba el coloso, y de los restos de mascotas olvidadas. Cuando atrapaba a una presa, la retenía con sus colmillos y entonces masticaba la carne con sus mandíbulas afiladas como agujas. Una araña podía atacar a un intruso, pero sólo si se la provocaba; en general eran carroñeras. Las arañas tejían enormes redes que utilizaban más como nidos que como trampas.

El hanadak, un primate púrpura de tres metros parecido a un oso, compartía su territorio de caza con el gorax y en ocasiones actuaba en conjunto con éste. Los ewoks opinaban que los gorax controlaban de algún modo a los hanadaks, pero esto nunca pudo demostrarse. El Antropólogo shi'ido Mammon Hoole reflejó en su obra tanto la leyenda ewok sobre hanadaks manipulados por goraxes, como la carencia de pruebas fiables. Era poco probable; los hanadaks exportados desde Endor demostraban ser demasiado tontos y malhumorados para cualquier función productiva como caza o gurda, y sólo se les utilizaba como gladiadores.

Los gigantescos phlogs, de veinte metros de altura, estaban entre los pocos animales de Endor comparables en tamaño al gorax. Era bien conocido el odio que los phlogs sentían por el gorax. Los phlogs eran cazadores-recolectores que vivían en el desierto de Simoom, siendo rara vez un peligro para los ewoks y otros habitantes del planeta. Aunque su hábitat estaba lejos del del gorax, a veces ambas especies se enfrentaban en disputas territoriales, en peleas brutales.



El phlog, uno de los enemigos del gorax.

Más cerca estaban los grass trekkers, brutales bípedos semiinteligentes de más de tres metros de altura. Los trekkers habitaban la zona del este del Desierto de Salma. En general carroñeros, los trekkers a veces cazaban criaturas locales, como makkants y gupins. Sólo los gorax eran lo bastante feroces para cazar a su vez a los trekkers, que a veces atravesaban el territorio del gigante en su ruta para hacer una incursión en un pueblo ewok.

Por último, los merodeadores sanyassanos eran una brutal comunidad de piratas varados en la luna de Endor. Gracias a sus blásters, habían conseguido defenderse de los gorax más cercanos y ganarse su respeto. A lo largo de los siglos, varios otros náufragos sobrevivieron a las atenciones de los goraxes el tiempo suficiente como para poder ser rescatados; pero otros tuvieron menos suerte.

En cuanto a la relación de un gorax con otro gorax, en general ésta era escasa. Un gorax solía elegir una vida solitaria, alejado de otros gorax. Existían precedentes de varios gorax en el mismo territorio, lo bastante cerca como para afectar al mismo grupo de personas, pero no se podían encontrar estudios detallados de este comportamiento. Ya era difícil sobrevivir a un encuentro con un gorax; pocos lograban ver a dos gorax a la vez y vivían para contarlo.

A menudo los eruditos dudaban de la existencia del gorax, creyéndolo un mero producto del folclore ewok; y es cierto que los ewoks tenían muchas leyendas al respecto, con una parte de verdad sorprendente: La leyenda del Corazón del Rey Gorax explicaba el peculiar brillo de una estrella porque era un diamante que se había comido un gorax; y de hecho el núcleo de esa estrella era un diamante del tamaño de un planeta. Los menos escépticos visitaban Endor en busca de goraxes; por ejemplo, cazadores alienígenas gustaban de exhibir la cabeza disecada de un gorax en su pared como señal de su valentía y eficacia.

Los informes populares de criaturas de más de treinta metros rara vez eran creídos; el gorax registrado más grande medía sólo veinticinco metros.

El poder del gorax inspiró, al menos en nombre, un movimiento del arte marcial teräs käsi. La técnica se llamaba gorax aplasta y estaba entre las múltiples maniobras bautizadas en honor a animales de la galaxia. Sin embargo, no hay pruebas de que el ataque en sí mismo se inspirase en el movimiento del gorax.


Historia


 

Aunque la República Galáctica duró veinticinco mil años, el sector Moddell estaba tan alejado del Núcleo que se encontró en las Regiones Desconocidas hasta unos pocos siglos antes del Imperio. Eso no impidió a la República echar un vistazo por Endor: Los reconocimientos oficiales llegaron ya no al sistema Endor, sino a la superficie de la luna boscosa, especificando que el gigante gaseoso Endor era visible en el cielo… y que la astronavegación por la zona era especialmente difícil. Habiendo identificado a los ewoks como única forma de vida relevante, la República estableció la luna como reserva natural, designándola "Luna Santuario", para proteger a sus habitantes inteligentes pero primitivos de toda contaminación cultural hasta que ellos pudiesen desarrollar tecnología interestelar por sí mismos.

Mas un amparo meramente formal no impedía naufragios de naves espaciales por los problemas de navegación en el sector. Muchos buques chocaron en Endor a lo largo de los milenios incluyendo, supuestamente, una caravela desviada con un cargamento de phlogs, que después desapareció de los registros oficiales y que explicaba la población planetaria phlog. Algunos xenobiólogos creían que los gorax también viajaban en esa misma nave y que ambas especies de gigantes compartían mundo de origen, pero esto nunca se ha podido demostrar, sobre todo porque nunca se consiguieron muestras genéticas de phlogs.

Aproximadamente en 100 ABY, un grupo de merodeadores sanyassanos con pocas habilidades de pilotaje espacial chocaron en el bosque de Endor. Los supervivientes, bajo el mando del rey Terak, construyeron una fortaleza en la savana abierta, domesticaron blurrgs para usarlos como monturas y acosaron a ewoks y yuzzums. Gracias a sus blásters, conseguían mantener a raya a los gorax que se les acercasen, y convencerles para que no siguiesen molestándoles.

El sector Moddell se unió oficialmente a la República en el 50 abY, pero por entonces el sistema Endor no estaba explorado ni se podía navegar hacia allí fácilmente. No era más que una estrella en el cielo de la capital sectorial, Annaj, y que estaba oficialmente bajo su jurisdicción.

En el año 19 ABY, la Orden Jedi estaba familiarizada con los gorax, incluso como antagonistas: Durante el Torneo de Aprendices de ese año, la maestra Ilena Xan indicó que algunos aprendices habían pedido duelos más realistas, por ejemplo combatiendo a criaturas cuya fisiología imposibilitase ciertas técnicas, y mencionó al gorax explícitamente como ejemplo. Xan reconoció que no era práctico introducir un gorax en el Templo Jedi de Coruscant, pero dificultó el combate de la segunda ronda, entre las aprendizas Tallisibeth "Scout" Enwandung-Esterhazy, humana, y Hanna Ding, arkaniana, apagando la luz (Ganó aquélla, por cierto).

Entrando en los tiempos del Imperio, algunas personas privilegiadas tenían acceso a Endor, o a otro mundo habitado por gorax: El capitán imperial Ozzik Sturn, cazador de éxito, mantenía una sala de trofeos en sus aposentos de la base imperial de Kashyyyk, entre los que destacaba una cabeza disecada de gorax. Era acompañada por las testas, de taxidermia afín, de otras presas de Sturn, incluyendo un acklay, un dragón krayt, un nexu, un reek, un tauntaun, un wampa, y además un gungan en carbonita. Galen Marek, nombre en clave Starkiller, un agente de Darth Vader que quería infiltrarse en círculos antiimperiales, colaboró con la familia Organa para ganarse su confianza, y en el proceso detuvo el proyecto imperial en Kashyyyk, mató a Sturm y destruyó su base, incluyendo la cabeza de gorax, en 2 ABY.



La cabeza disecada entre los trofeos de Ozzik Sturn.
El jugador puede opcionalmente tirarla con telekinesis.

En el año 3 DBY, en pleno auge del Imperio Galáctico, una familia de humanos llamada Towani naufragó en la luna de Endor. Los progenitores, Catarine y Jeremitt Towani, fueron apresados por un gorax con la ayuda de su fiel borra, y encerrados en una jaula. Los jóvenes hijos de aquéllos, Mace y Cindel, escaparon de la captura y se asociaron con una tribu de ewoks para liberar a sus padres. Desafiando las probabilidades, los niños Towani y los ewoks no sólo prevalecieron, sino que incluso acabaron con la vida del titánico gorax.

Poco después, el emperador Palpatine decidió usar la luna de Endor como sede para construir su segunda Estrella de la Muerte. Los informes republicanos a los que él tenía acceso hablaban de que la única forma de vida de importancia real en esa luna era la especie ewok. El emperador envió a uno de sus equipos a inspeccionar la zona, y éste corroboró el informe inicial: Los topógrafos imperiales pasaron por alto al inmenso gorax.

Descontento con este reporte, el emperador envió una segunda fuerza expedicionaria de cuatro tropas con entrenamiento científico, cinco soldados de asalto como escolta y AT-STs, bajo el mando del sargento Pfilbee Jhorn, pero sin indicaciones claras sobre qué tenían que buscar en Endor porque el proyecto Estrella de la Muerte era secreto. El informe de Jhorn fue tan exhaustivo como pudo con los recursos disponibles, aunque a la vez fue crítico con las condiciones. El equipo imperial, después de pasar tiempo con ewoks y conocido a teeks y dragones cóndor, topó con un gorax que mató a varios de sus miembros. Jhorn y los otros supervivientes después encontraron a los merodeadores sanyassanos, y observaron la relación de éstos con los gorax.

El emperador quedó finalmente satisfecho con la luna de Endor como lugar de trabajo, especialmente por ser un mundo remoto y difícilmente accesible. Hizo que los astrocartógrafos imperiales analizasen las rutas hiperespaciales y extendiesen un camino oscuro pero estable, el Rastro Silvestri, de Sullust hasta Endor. El nuevo túnel, Cañería Santuario, se construyó a base de desplegar maquinaria con un coste de billones de créditos para poder proveer de suministros al equipo de construcción. Una vez en el sistema, los imperiales minaron metales raros y valiosos de los otros tres planetas del sistema para su proyecto.

Lo que sucedió después tuvo fama. El Imperio desplegó AT-STs y AT-ATs en Endor para proteger su base, y después filtró la ubicación de su base para tender una trampa a sus enemigos, la Alianza Rebelde. Los rebeldes se asociaron con los ewoks para enfrentar a los imperiales. Las defensas ewok contra los gorax demostraron se efectivas contra los vehículos acorazados imperiales, y finalmente la Estrella de la Muerte fue destruida en órbita, matando al emperador y dejando una nube de energía oscura en su lugar. La flota espacial imperial se dispersó.

Pero la presencia imperial en el planeta continuó: Las tropa de tierra no pudieron evacuar con facilidad. Una patrulla de exploradores imperiales topó con un gorax, que acabó con ellos. Poco después, agentes rebeldes del Escuadrón Pícaro dieron con este coloso y lo mataron.



Después de la batalla de Endor, una patrulla imperial topó con un gorax, justo
cuando creían que el día no podía ir peor.

Después de la batalla de Endor, los rebeldes abandonaron el sistema, dejándoselo a los nativos. La Cañería Santuario dejó de ser segura porque exigía un mantenimiento que no recibió, y una tecnología que estaba siendo robada. Una compañía turística ofrecía viajes diarios al exótico Endor, pero cerró en cuestión de meses debido a los múltiples accidentes; mis datos no especifican si eran accidentes de astronavegación o encuentros con la fauna local.

Trece meses después de la batalla de Endor, un gorax se acercó a los restos del campo de batalla para cazar ewoks. Encontró varios ewoks cerca del generador de escudo, pero dos náufragos humanos a bordo de un AT-ST mataron al gorax disparando a quemarropa con uno de sus cañones.

Los gorax pasaron años aislados en Endor, sin apenas ser detectados. En 11 DBY, el joven jedi Kyp Durron viajó a Endor en busca de reliquias y, mientras intentaba aterrizar, percibió a través de la Fuerza un gorax desde su nave.

En 12 dbY, el profesor Mankuskett, Jefe del Departamento de Metacrecimiento y Polimorfismo de la Universidad de Sanbra, publicó el texto Náufragos de Endor, ofendido porque los informes públicos más recientes sobre flora y fauna endorianas eran de los exploradores imperiales. Mankuskett admitía que los gorax ya tenían fama intergaláctica (aunque según él no a través de artículos fiables), pero las otras esepcies locales como jindas o phlogs merecían también ese tipo de respeto, así como razas emigradas a Endor como los duloks.

No fue la única publicación de xenobiología que citasen a los gorax en la era de la Nueva República. La Guía Esencial de Planetas y Lunas, por el Antropólogo Senior Moruth Hoole, hablaba de los gorax en su apéndice, presentando las notas incompletas que había obtenido hasta ese momento. Hoole, con su profesionalidad habitual, especificaba claramente que la sección sobre los gorax no era tan exhaustiva como él hubiese querido.

La Guía de Campo Comentada de Lyrre T'enna, escrita por la zoóloga Lyrre T'enna, presentaba su investigación sobre la fauna no inteligente de varios mundos y fue publicada en colaboració con la Sociedad Zoológica Intergaláctica. Aunque mencionaba a los gorax, no entraba en excesivo detalle sobre ellos.

Nos ponemos ya en la era de la Federación Galáctica de Alianzas Libres. Entre los años 35 y 36, los jedi Jacen Solo y Ben Skywalker viajaron a Endor por vacaciones. Durante una noche, fueron testigos de cómo un gorax arrasaba un cercano pueblo ewok. Solo detectó un segundo gorax en las inmediaciones y decidió que, si los jedi revelaban su presencia para ayudar a los ewoks, sucumbirían al ataque de una u otra bestia. Usando la Fuerza, Solo se aseguró de que él y Skywalker permaneciesen ocultos, y después alteró los recuerdos de Skywalker para ocultar sus actos y su vergüenza.


Gorax Notorios


 

Ningún gorax tienen nombre individual conocido. Sólo la Matriarca Gorax ha recibido un apelativo individual que, de todos modos, parece compartido por varios goraxes; y el Rey Gorax es un personaje de leyenda. Ante la necesidad de diferenciarles, este artículo los llama "El gorax de" y añade el nombre de una o más personas que han tenido contacto con ese gorax, como "El gorax del Sargento Pfilbee Jhorn" y "El gorax del Escuadrón Pícaro".

El gorax de los dos borras: Este gorax vestía con un taparrabos adornado con calaveras que colgaban de su cintura. Tenía dos mascotas borra que en al menos una ocasión se peleaban entre sí. El gorax decidió separarlas agarrándolas por las cabezas y utilizando su gran fuerza. Esto ayudó, al menos en ese momento, a un pequeño ewok que estaba justo en mitad de todo ese embrollo.

El gorax de Kyp Durron: En el año 11 DBY, este gigantesco gorax de cabello negro irrumpía a través de los árboles, balanceándose mientras buscaba moradas ewoks a su alcance (Muchos ewoks elegían las ramas más altas para construir precisamente para frustrar a los gorax).

El aprendiz de jedi Kyp Durron estaba llegando a la luna de Endor en un Cazacabezas robado para buscar los restos de la pira de Darth Vader. Sobrevolando los enormes árboles, Durron usó sus poderes mentales para entrar en contacto con las formas de vida, percibiendo a los ewoks en sus ciudades y, entre otros grandes depredadores al acecho, al gorax. Durron no le dio mayor importancia y siguió volando.

El gorax de Egg Man: Este gorax vestía únicamente un taparrabos, con grandes calaveras que colgaban de su cintura. Tenía aterradores ojos verdes sin pupila visible.

Trece meses después de la batalla de Endor, este gorax estaba cerca de la zona donde había estado el generador de escudo de la Estrella de la Muerte (destruido durante la batalla y convertido en una ruina desde entonces). Un grupo de tres ewoks habían llevado hasta allí a dos soldados humanos abandonados en Endor: Un comando rebelde que se había alejado de su grupo y un explorador imperial, apodado "Egg Man" por el anterior, que había esperado órdenes demasiado tiempo y que mantenían una incómoda alianza.

El gorax consiguió acercarse por sorpresa y aferró a uno de los guías ewoks mientras los dos humanos estaban examinando el interior de la cabina de un AT-ST dañado. El rebelde, viendo al monstruo, llamó la atención de éste. El imperial, que estaba a los mandos del AT-ST, se vio obligado a disparar a quemarropa al gorax, que ya había soltado al ewok para atacar al nuevo blanco. El disparo del cañón bláster del AT-ST acabó con el gorax, salvando a los ewoks.

Egg Man recriminó a su asociado que hubiese tomado esa decisión, porque habían sacrificado la escasa energía disponible en el AT-ST y que podrían haber usado para enviar un SOS. El rebelde replicó que no habría podido, en buena conciencia, dejar morir a los ewoks que les habían ayudado.



El gorax de Egg Man.

El gorax del Escuadrón Pícaro: Este gorax de ojos azules llevaba una hombrera, pendientes en forma de aro en las orejas y utilizaba un palo a modo de maza.

Inmediatamente después de la batalla de Endor, la flota imperial se dispersó, pero muchos soldados imperiales seguían en la superficie. Una patrulla de scout troopers se adentró en el bosque, alejándose de los triunfantes rebeldes y ewoks, y se topó con un gorax. El gorax mató rápidamente a los soldados imperiales y se hizo una bandolera con sus cadáveres, manteniéndose alejado del bosque.

Pero los ewoks habían visto a los imperiales retirarse por esa zona, e informaron a los rebeldes. El mando rebelde mandó a dos comandos del Escuadrón Pícaro a investigar, Capitán Tycho Celchu y Teniente Wes Janson. Después de varias horas explorando la zona, oyeron las pisadas del gorax en pleno día. El gorax también vio a los Pícaros, rugió y les atacó. Janson pidió a Celchu que le mantuviese ocupado y así Janson, francotirador, pudo disparar al gorax en la cara, dándole en el ojo derecho. El gorax tuvo ocasión de gruñir enfurecido antes de caer al suelo, humeando por el agujero de salida en su nuca.

Celchu reportó al mando que habían encontrado la patrulla imperial y cumplido su misión; ya les daría los detalles del gorax más tarde. El mando entonces les asignó otra tarea.

El gorax del Sargento Pfilbee Jhorn: Este gorax cazaba de noche y llevaba una bolsa en su cadera para guardar a las criaturas que encontraba. Mantenía jaulas colgantes hechas de troncos atados en la cueva que le servía de hogar. Dormía sobre un montón de pieles a modo de cama y roncaba con el volumen de una tormenta. Había al menos una araña de crianza en la zona infeior de su guarida.

El emperador quería saber si la luna de Endor era el lugar adecuado para construir su segunda Estrella de la Muerte, así que mandó un equipo a inspeccionar el lugar. Insatisfecho con el informe presentado, que no mencionaba a los gorax, envió una segunda fuerza expedicionaria de cuatro tropas con entrenamiento científico, cinco soldados como guardaespaldas y varios AT-ST, bajo el mando del sargento Pfilbee Jhorn. Jhorn y su gente sólo sabían que tenían que analizar la luna, pero no para qué. Jhorn fue tan exhaustivo como pudo en su informe, aunque a la vez fuese incisivo.

Después de pasar un tiempo con ewoks y de conocer a los teeks y a los dragones cóndor, los imperiales encontraron un enorme gorax. Jhorn observó su comportamiento y sus límites en uno de los estudios más fiables disponibles. Favorablemente impresionado por el poder de los gorax, Jhorn explicó en su informe que, si los gorax podían ser entrenados, el emperador tenía a su alcance luchadores imparables.

Una noche, un gorax fue atraido por las luches defensivas alrededor del perímetro del campamento de Jhorn. El monstruo aplastó los focos y persiguió a las criaturas de brillante armadura blanca entre las rocas alrededor del perímetro del campamento. El gorax parecía encontrar divertida la persecución. Los soldados montaron trípodes para cañones bláster portátiles, pero el gorax los aferró y los metió en la bolsa de su cadera. Después capturó al resto del grupo, incluido Jhorn. Comprendiendo que no había escapatoria posible a la vista, Jhorn decidió que su fascinación por los gorax había dejado de ser favorable.

El gorax, satisfecho con su caza, volvió a su cueva y encerró a los imperiales en una enorme jaula. Motivado por su curiosidad, el gorax sacó a los cinco soldados para quitarles la armadura y averiguar qué había dentro del caparazón. El proceso le resultó frustrante y mató a los cinco imperiales en el proceso. Después, el gorax perdió el interés y se colapsó en su lecho para dormir.

Los imperiales supervivientes aprovecharon la ocasión para escapar: Serraron los barrotes de la jaula con cortadores láser en sus mochilas y huyeron a través de las catacumbas inferiores, azotadas por el viento. Encontraron a una araña de crianza, pero ésta huyó de los intrusos bien armados.

El gorax sin embargo despertó e intentó perseguirles, pero los imperiales lograron escapar, corriendo a través de la desolación hasta salir del territorio del gorax.

El gorax de Jahdav Liram: Jahdav Liram era un coreliano que mantenía relación con tribus ewoks en la luna de Endor. Posiblemente poco después de la batalla de Yavin, Liram ayudó a una tribu de ewoks a derrotar a un gorax, y hubo gran regocijo. Lamentablemente, mientras Liram y los ewoks estaban celebrando su victoria, fueron atacados por La Matriarca Gorax, un gorax mucho más temible y peligroso, al que no pudieron derrotar en ese momento. El poblado fue evacuado.

Los goraxes de Jacen Solo y Ben Skywalker: En el año 35 ó 36 BDY, el maestro jedi Jacen Solo y su aprendiz Ben Skywalker decidieron ir de acampada a la luna de Endor (En realidad Solo quería hacer otro recado en secreto y este viaje era en parte una tapadera; pero después del recado, llevó a Skywalker a Endor). Ambos jedi estaban durmiendo en las inmediaciones de una aldea ewok que fue repentinamente atacado por un gorax. El gorax arrasó medio pueblo, matando a muchos ewoks y capturando a otros. Los jedi percibían las emcoiones de los ewoks en la Fuerza, y Skywalker estaba especialmente afectado. Skywalker gritó a Solo que debían ayudar a esos pobre desdichados, y sus berridos incluso llamaron la atención del gorax cuando éste estaba ya de retirada.

Pero Solo había detectado a otro gorax en el bosque, detrás de los jedi, y eso le ponía en una situación táctica pésima: Solo no podía ir a combatir al primer gorax con Skywalker, porque Skywalker no estaba preparado; ni tampoco podía dejar a Skywalker atrás, porque éste caería en manos del segundo gorax. Decidió tomar una decisión desagradable y no rescatar a los ewoks. En vez de eso, usó la Fuerza para esconderse de ambos goraxes junto con Skywalker. El problema era que Skywalker seguía percibiendo la agitación de los ewoks, y eso le afectaba.

Al amanecer, Solo vio a su aprendiz especialmente traumatizado y temía que el chico decidiese alejarse de la Fuerza. Solo utilizó una técnica fallanassi invasiva, la "friega de memoria", para borrar los recuerdos de Skywalker. Una motivación más egoísta de Solo era que no quería que Skywalker recordase la decisión que su maestro había tomado.

Los padres de Skywalker, los maestros Luke y Mara Jade Skywalker, interrogaron después a Solo por varios actos moralmente discutibles que éste había realizado. Jade insistió en que Solo contase porqué había bloqueado la memoria de su aprendiz. Al escucharle, los dos maestros jedi decidieron que ese pecado no era imperdonable, y Jade incluso le absolvió al momento.

La Matriarca Gorax: Esta gorax, enorme incluso para su especie, era mucho más poderosa y peligrosa que casi cualquier gorax que se haya conocido. Podía extender su cuerpo para dar poderosos puñetazos con un alcance de hasta cincuenta metros, golpear el suelo para aturdir a varios oponentes al unísono, e incluso afectarles para que no pudiesen aprovechar anabolizantes.



La matriarca gorax.

La Matriarca Gorax atacó un poblado ewok que estaba de celebración: Los habitantes y su aliado coreliano 'Jahdav Liram acababan de derrotar definitivamente a otro gorax, de ahí la fiesta, pero fueron incapaces de vencer a la Matriarca y se vieron obligados a desalojar todo el pueblo. Liram estaba especialmente preocupado por la Matriarca, temiendo con razón que ella atacase más aldeas ewok, y decidió que era importante advertir a las comunidades ewok cercanas y prepararlas.

Afortunadamente un viajero espacial de nombre, sexo y especie desconocidos dio con Liram, escuchó su relato y se ofreció a ayudar al ranger. Este agente de Liram visitó a la tribu Gondula, que vivían en un lago; y después a la tribu Panshee. La tarea exigió comunicarse por signos, ganarse la confianza de la tribu, y después convencerles de que había un peligro; sobre todo los Panshee tenían poco interés en abandonar sus hogares sin prueba fidedignas del peligro. Liram y su socio encontraron las enormes huellas de la matriarca al norte de la villa Panshee y con eso conquistaron al cacique.

La comunidad Panshee se armó, preparando cayados y bastones para la lucha y pasándoselos a los guerreros. Liram y su amigo verificaron que los ters puntos de acceso al pueblo (noroeste, suroesta y sudeste) habían sido asegurado. Finalmente, con el pueblo ewok preparado para la guerra, el Jefe Panshee sonó su cuerno. La lucha empezó, y la Matriarca consiguió llegar al pueblo, pero fue derrotada por el ataque bien coordinado de los ewoks y sus aliados alienígenas. Tras morir, la matriarca perdió una oreja y varios objetos personales, que fueron requisados por los vencedores. El jefe Panshee les concedió además su cuerno y su amistad, y Liram dio a su socio un cuadro que mostraba un pueblo bajo ataque.

Pero Liram sospechaba que pronto habría otra matriarca, posiblemente oculta en las montañas al este del pueblo. Su asociado partió para combatirla, y regresó con un trofeo, en forma de cabeza de matriarca gorax disecada, que podría colgar en su casa.

La Matriarca Gorax es un personaje no jugador del videojuego Star Wars: Galaxies y aparece como parte de las quests del servidor Legends. Sus acciones específicas, y las de los otros personajes, dependen parcialmente de las decisiones de los jugadores. Parte de la mecánica del juego no se ha transcrito totalmente como narrativa: Las capacidades de lucha de la matriarca están adaptadas (la capacidad de aturdir a un área le fue retirada a la Matriarca en septiembre 2017; y su efecto contra los anabolizantes en el juego es un "debuff"). Cuando el Jefe Panshee toca el cuerno, la Matriarca aparece mágicamente ("spawns") en el pueblo. La Matriarca al morir siempre deja ("dropea") una oreja gorax y otros objetos. Más importante: Una vez el jugador ha matado a una matriarca, puede ir a las montañas del este a matar más. Si consigue matar diez matriarcas, recibirá el trofeo de cabeza disecada de matriarca.



Si matas muchas matriarcas gorax, podrás llevarte este fabuloso trofeo a tu casa.

El Rey Gorax: El Rey Gorax era un personaje de una leyenda ewok, para explicar el peculiar aspecto de una estrella visible en el cielo nocturno.

Según el cuento ewok, el Rey Gorax era enemigo del dios-sol dorado. El sol lideró a los árboles en combate contra el Rey y encerró al Rey en ecielo nocturno. El Rey Gorax exigió retener un enorme diamante impecable, del tamaño de una cabaña ewok, durante su exilio; pero el dios sol rechazó su petición. El Rey Gorax entonces decidió tragarse su diamante y, en sus entrañas, el diamante se abrió paso hasta el corazón del gorax. Finalmente, el Rey murió de algún modo, su cuerpo se pudrió hasta desaparecer, pero el diamante seguía en el cielo, brillando. La estrella visible era el Corazón del Rey Gorax.

El resto de la galaxia llamaba a ese astro Din, que tras morir en una supernova había llegado a ser una nube en expansión en la que gases rojos resplandecientes rodeaban un púlsar destelleante y giratorio, y que por cierto hacía inestable la ruta entre Endor y Trindello (también en el sector Modell) desde aproximadamente 100 abY. Cuando el sistema fue visitado por droides de reconocimiento, descubrieron que los mundos del sistema habían sido vaporizados por la muerte de la estrella, excepto por tres planetas alejados, los núcleos de gigantes gaseosos con atmósferas incandescentes desde el cataclismo del sistema. Uno de los núcleos era realmente un diamante del tamaño de una Tierra, producido por la presión interna de la atmósfera vasta del gigant egaseoso y revelado después por la explosión. No presentaba una oportunidad de negocio: No existía una ruta hiperespacial segura hasta el sistema. Aún después de su muerte, el Rey Gorax retenía su joya.


El Gorax de los Towani


 

En tiempos del Imperio Galáctico, un gigantesco gorax capturó a dos náufragos humanos varados en Endor, y los encerró en la gruta que habitaba. Los hijos preadolescentes de estos prisioneros colaboraron con una tribu de ewoks en un audaz intento de rescate, montando una caravana de valor para desafiar a una bestia hasta entonces invicta. En este épico encuentro, el amor y la lealtad fueron armas más poderosas que los blásters y los poderes místicos.

Pero empecemos por el principio: Érase una vez, hace mucho tiempo, un enorme gorax que cazabaen las profundidades del bosque encantado en la lejana luna de Endor. Este gigante tenía silueta humanoide, pero aspecto simiesco: Estaba cubierto de vello húmedo, tenía un rostro lleno de arrugas con ojos pardos amenazadores y vestía con una bandolera y un cinturón de donde colgaba tecnología primitiva. Se permitía decorar su cabello con abalorios para hacerse trenzas. Era tan grande, que el hacha que manejaba con una sola mano estaba construida con un tronco de árbol entero y una enorme roca. No puedo decir su altura exacta, porque no la sé, pero sospecho que llegaba a los veinte metros.



La fortaleza del gorax.

El gorax vivía más allá del desierto de Salma, en una montaña hueca que servía como fortaleza. Había aperturas a modo de ventanas, pero para un ewok o un humanoide de tamaño medio, escalar hasta allí era prácticamente inviable; y los huecos al exterior a nivel del suelo estaban ocultos y bloqueados detrás de enormes peñascos. En los niveles superiores, el gorax hacía su vida doméstica, usando muebles monumentales como una silla y una mesa para que él comiese… royendo de forma burda los huesos de una criatura enorme en cuya naturaleza no quiero pensar. El gorax mantenía allí, además de una hoguera, jaulas colgantes, a la altura de su rostro, donde retenía a pequeñas mascotas apresadas, a veces con los objetos que les hubiese arrebatado, como cestos y cuerdas. Era sorprendente esta vivienda, porque parecía tan artificial como natural: El techo estaba lleno de estalactitas, pero el suelo era totalmente plano e incluso contaba con unas escaleras del tamaño adecuado para el gorax. No se sé si fue el cerril coloso quien construyó este castillo; me sorprendería, porque el gorax era un bárbaro de mente limitada, ¿pero quién más tenía la capacidad para hacerlo, y el interés por construir una vivienda adaptada a esa talla?

¿Acaso el gorax compartía su hogar con otra criatura que tuviese dotes de construcción? La verdad es que sí, pero no a ese nivel: En los niveles inferiores de la montaña habitaban las arañas de crianza, capaces de tejer redes que usaban como nidos. Las arañas eran carroñeros cobardes que preferían alimentarse de los restos que dejaba el gorax, y quizá de alguna mascota que intentase escapar. Si los gorax eran semiinteligentes, las arañas eran simples animales parásitos, incapaces de desarrollar una civilización.

Pero no todas las mascotas del gorax eran humanoides indefensos. El gorax tenía además un animal de presa, un cazador cuadrúpedo de tres metros de altura al hombro llamado el lobo-jabalí. El gorax había puesto correas y adornos a su can para reconocerlo, y lo utilizaba como rastreador. Le daba libertad para que, por las noches, corriese solo por los bosques aullando al gigante gaseoso en el cielo.



El lobo-jabalí, una de las mascotas del gorax.

El gorax cruzaba el desierto para cazar en un bosque donde vivía una comunidad ewok, el Pueblo del Árbol Brillante (Esto era algún tipo de metáfora; afortunadamente no vivían en un árbol que resplandeciese, porque eso habría atraido a los cazadores nocturnos como el gorax). El pueblo estaba a cincuenta metros del suelo, en las copas de los árboles. Los ewoks conocían al gorax, sabía que el lobo-jabalí le pertenecía y tenían identificada la montaña donde vivía; afortunadamente, estaba lo bastante lejos como para que el gorax se les acercase muy rara vez. Ningún ewok había regresado jamás de la fortaleza del gorax, lo que inculcaba en los ewoks un saludable respeto por su enemigo.

Ya estamos en contexto, ahora podemos empezar la historia propiamente dicha. Érase una familia de humanos que viajaban en un crucero estelar: Jeremitt Towani, su esposa Catarine, su hijo Mace de catorce años y su hija Cindel, de sólo cinco años. En 3 dbY, la nave en que viajaban chocó en el luna de Endor, quedando inutilizable. Jeremitt y Catarine decidieron alejarse de la nave para buscar un lugar civilizado donde tuviesen un transmisor; mientras tanto, contaban con que sus niños estuviesen a salvo en el pecio. Cada miembro de la familia se puso un monitor vital en la muñeca para que todos supiesen en todo momento que los demás seguían vivos. Dejaron además una pistola bláster a Mace por si la necesitaba para protegerse.

Jeremitt y Catarine ordenaron a los niños que se quedasen en la nave, pero cuando los adultos se fueron, la curiosidad fue más fuerte que la convicción de los pequeños. Especialmente Mace era propenso a ignorar advertencias parentales, y ambos vagaron por el bosque nocturno, en parte buscando comida.

Así que, cuando los padres regresaron con las manos vacías y en plena noche, se asustaron y buscaron a sus hijos con linternas y gritos. Eso atrajo la atención del gorax, que surgió entre la bruma y rugió a los cielos para intimidar a sus nuevas presas. Los Towani intentaron huir, pero fueron capturados por el lobo-jabalí. El gorax entonces llevó a sus nuevas mascotas humanas a su guarida y las enjauló. El monitor de Jeremitt acabó enganchado en el collar del lobo-jabalí.



El gorax encerró a Catarine y Jeremitt en una jaula como a mascotas.

Los jóvenes Towani se preocuparon por la ausencia de sus padres, y Mace incluso se echó la culpa. Peor todavía, Cindel enfermó por exposición a algo en el ecosistema. Mace dejó a su hermanita dentro de la nave y siguió explorando, decidido a ser fuerte para cuidar de su febril hermana.

Afortunadamente el crucero fue detectado por un ewok amable, el guerrero Deej Warrick, del Consejo de Ancianos del Pueblo del Árbol Brillante. Deej estaba buscando a sus dos hijos mayores, Weechee y Widdle (llamado Willy), que se habían perdido en el bosque; a la ida se fijó en el crucero y, después de encontrar a sus retoños, decidió hacer una parada de regreso a casa para investigar el objeto no identificado. Los ewoks encontraron a la enferma Cindel, que inmediatamente simpatizó con ellos. Mace era más suspicaz, temiendo que estos nativos hubiesen capturado a sus padres. Tras un malentendido inicial en que Mace fue vapuleado, los ewoks llevaron a los humanos a su poblado. La esposa de Deej, Shodu, curó a Cindel con una medicina hecha de hierbas, y la niña rápidamente hizo migas con el hijo menor de los Warrick, Wicket Wystri, que la reconoció como una igual. Los Towani conocieron también a la bebita de los Warrick, llamada Wista o Winda.

En un día, Cindel recuperó su salud, aunque fue precisa una excursión para obtener más hierbas. Cindel enseñó algunas palabras simples a Wicket, sintiéndose a gusto en el poblado. No fue así con Mace: Éste, impaciente por encontrar a sus padres, despertó a su hermana en plena noche y la instó a que abandonasen el pueblo para empezar su búsqueda, o al menos que se quedasen en el crucero por si sus padres volvían. Lamentablemente, los niños fueron encontrados por el lobo-jabalí, que les persiguió. Ellos se ocultaron en un árbol hueco, pero la bestia seguía en las inmediaciones, arrinconándoles. Los niños pasaron allí la noche.

Al amanecer, los Warrick se dieron cuenta de la desaparición de sus invitados. Deej y sus tres hijos siguieron su rastro y encontraron al lobo-jabalí. Los ewoks desafiaron a la criatura con lanzas, acrobacias y dardos envenenados hasta conseguir matarlo; y entonces animaron a los niños a salir de su escondrijo.



Al morir el lobo-jabalí, Mace se fijó en su collar…

Mace encontró el monitor de Jeremitt en el collar del animal y comprendió que esa bestia tenía que ver con la desaparición de sus padres. Intentó comunicarse con los ewoks para obtener información, y la verdad es que la barrera idiomática lo dificultó, pero los ewoks eran inteligentes y le intentaron hablar del gorax que vivía en una montaña lejana.

Los Towani aceptaron volver al poblado, y allí los Warrick les llevaron a consultar con el místico ewok Logray. Usando sus rituales y una linterna mágica, Logray encontró a los padres perdidos, encerrados en una jaula de madera por el gorax. La magia del chamán mostró estas imágenes a los Warrick y a los niños. Cindel, atribulada, suplicó ayuda a los ewoks, y el audaz y joven Wicket, caballerosamente, se la ofreció. Deej se tomó un instante para pensar, y decidió respaldar a su benjamín: Él había ofrecido su amistad a los niños Towani así que, cuando éstos necesitaron ayuda, habría sido indigno no ofrecérsela, ¡aunque supusiera ir a un lugar de donde ningún ewok había regresado con vida!



La magia de Logray mostraba una imagen del gorax.

La odisea que les esperaba no era trivial. Sólo el viaje hasta la fortaleza del gorax llevaría varios días, cruzando montañas y desiertos. Para ello, organizarían una caravana, con caballos ("pulga" en ewokés) tirando de carromatos y como monturas; una pequeña cabaña con ruedas transportaba a Cindel y a Wicket, mientras que Mace, Weechee y Widdle cabalgarían. El resto del pueblo ayudó a cargar provisiones y se organizó una ceremonia tradicional ewok antes de la partida para desear suerte.

Logray participó en la celebración repartiendo tótems sagrados a los participantes: Deej recibió las alas blancas de la esperanza; Weechee, las alas rojas del valor; Widdle, las alas azules de la fuerza; Wicket, un cayado mágico; y Cindel, la vela de la luz pura que nunca se consumía. Mace se fijó en que quedaban un cristal y un diente de marfil por entregar, y trató de aferrarlos, pero Logray se lo impidió porque esos tótems eran para otros ewoks a los que reclutarían de camino. Mace debía llevar una piedra bendita de aspecto sencillo, pero él se sentía decepcionado por el regalo y se deshizo de él; Wicket, sin embargo, la recogió.

Durante el camino reclutaron al corpulento leñador Chukha-Trok, a quien dieron el diente de marfil, y a la sacerdotisa Kaink, guardiana de los Árboles del Alma, que puso el cristal en su bastón y obtuvo la capacidad de emitir una fuerza mística que hipnotizaba animales. Pero no serían sus únicos nuevos compañeros: Después de varias aventuras, incluyendo una en que Wicket salvó a Mace con su cayado, los viajeros, acampados para pasar la noche, toparon con los wisties, pequeñas criaturas luminiscentes parecidas a hadas que les molestaron zumbando a su alrededor. La vela de Cindel ayudó a todas las wisties a volver a su hogar salvo a una, perdida y débil, a la que Mace adoptó y a la que alimentaron con risas. Se trataba de la reina Izrina, que ya había tenido contacto con Wicket en el pasado. Izrina se unió al grupo en el bolsillo de Mace.

La caravana alcanzó el pie de la fortaleza, y observaron que no había entrada. Kaink instó a Mace a usar su piedrecita; menos mal que Wicket la había guardado. Descubrieron que en su interior había una piedra imán en forma de punta de flecha que fue magnéticamente atraída a una roca concreta. La caravana interpretó esto como una señal y destruyeron esa piedra con el bláster de Mace, revelando una gruta de acceso.

Todos entraron, pero decidieron dejar en la primera cueva a los más pequeños, Widdle, Wicket y Cindel, por su protección. El resto del grupo se aventuró en los oscuros acantilados, donde combatieron a las arañas de crianza en su propia red. Mace empujó a una araña para que cayese al vacío, y otra fue hipnotizada por Kaink y lanzada por Chukha cuando éste rajó la telaraña. Una de estas arañas cayó justo donde estaban Cindel y los jóvenes ewoks; tras el susto inicial, Wicket mató al bicho con su cuchillo.

El equipo veterano de la caravana, mientras tanto, salvaba las escaleras y llegaba al comedor del gorax. El anfitrión se encontraba en ese momento ausente pero regresando allí. Al oírle venir, porque el gorax era muchas cosas pero no discreto, los intrusos tuvieron ocasión de esconderse; Weechee en concreto se ubicó tras el enorme hacha, apoyada en un muro. El gorax, ajeno a su presencia, royó un huesos, contempló a sus prisioneros humanos en la jaula colgante y rugió a susatisfacción.

Weechee se movió y accidentalmente tiró el hacha con estrépito. Eso atrajo la atención del gigante. Sabiéndose localizado, Weechee tiró piedras al gorax y corrió para atraer su atención. Mientras él jugaba al ratón y al gato con el gorax, sus aliados tuvieron ocasión de acercarse a la jaula y preparar una fuga. Los Towani encerrados vieron a su hijo y se alegraron tanto que quizá hubiesen estropeado el plan de Weechee a gritos, de no ser porque Mace les chistó.

Lo primero era bajar a los prisioneros. Chukha se fijó en el hacha y comprendió que podían usarla como catapulta si trabajaban en equipo: Con el objeto adecuadamente equilibrado, Chukha y Deej saltaron sobre el filo y Mace fue impulsado hasta llegar a la pajarera. Descubrió que en el suelo de ésta había una larga cuerda y la usó para que Chukha pudiese subir hasta la jaula. Entonces la usaron para bajar: Primero Mace, después Jeremitt, entonces Catarine y por último Chukha.

El problema era que para entonces Weechee había tenido que zafarse del gorax para evitar su captura: El ewok se había ocultado debajo de un cesto y se había escabullido sin que el gorax lo notase. Para cuando el gigante aplastó el canastillo de un pisotón, Weechee ya no estaba dentro. Burlado por el truco de trilero, el gorax se enfureció y miró a su alrededor. Así vio cómo Chukha-Trok estaba descendiendo por la cuerda desde la gayola de sus mascotas. Peor aún, la cuerda estaba podrida y se cortó, haciendo caer al ewok. Jeremitt se puso debajo de Chukha para reducir el daño que sufriría por su caída; pero aún así el silvicultor estaba vapuleado.



El gorax les ha visto. ¡Huyamos! (En primer plano está Kaink).

La operación de sigilo había sido comprometida: La única opción era huir del gigante. Chukha intentó cubrir la retirada golpeando con su hacha el dedo del pie del gorax. Viendo que le causaba dolor, el talador insistió en el ataque. Mace vio que su amigo se había quedado atrás y liberó a Izrina para que también ayudase. La wistie revoloteó alrededor de la cabeza del gorax, molestándole con su fulgor. Mientras el gorax se cubría los ojos, Chukha le hirió con más insistencia. Enfurecido, el titán intentó golpear a la ágil Izrina; ella le esquivó y el gorax sólo impactó en los muros. Provocó un derrumbe, con enormes peñascos cayendo del techo y de los muros sobre el propio gorax... y sobre Chukha. Aquél era lo bastante resistente para aguantar ese daño; pero el ewok estaba completamente superado y sufrió heridas mortales. Mace intentó ayudarle, pero Chukha expiró en brazos de su amigo, entregándole su hacha como gesto de honor y respeto, y como regalo de despedida.

Si Mace pudo llegar allí, fue sólo porque el gorax estaba alejándose intendo huir del wistie. Bajó las escaleras, pero allí le esperaba una sorpresa: Deej y Weechee le zancadillearon usando una enorme cuerda atada a piedras. El gorax cayó al suelo, pero no estaba derrotado, y podía ver a los humanos intentando huir. No les resultaba fácil: Habían dañado las telas de las arañas para llegar, y ahora eso dificultaba la fuga: Había una sima difícilmente salvable en su camino.



La wistie está molestando al gorax, que intenta librarse de ella y provoca un derrumbe.

Kaink usó la magia de su cristal para tirar una estalactica a la cabeza del gorax. Catarine tomó el bláster de Mace y disparó al gorax, quemándole el brazo. El gigante cayó por el precipicio a su aparente muerte. Discretamente, sin embargo, el gorax consiguió aferrarse a la pared y escaló para regresar a la lid.

Ajenos a esto, los Towani y los ewoks recuperaron el aliento. Mace regresó y abrazó a su padre; Deej se fijó en que llevaba el hacha de Chukha y le preguntó al respecto, sabiendo de antemano lo que significaba. Cindel, Wicket y Widdle se asomaron al otro lado de la cavidad… ¡y entonces el gorax emergió! Levantándose a pulso, el monstruo estaba en una posición privilegiada para aferrar a los más jóvenes y vulnerables entre sus enemigos.

Mace arrojó el hacha de Chukha a la nuca del gorax, clavándosela en el reverso de su cuello. Víctima del dolor, el gorax perdió asidero y cayó, esta vez sí, a su muerte en el insondable abismo.



El gorax cae a su muerte.

Sin el gorax amenazándoles, el abismo no era tan difícil de cruzar: Mace lo atravesó balanceándose en una liana, y después Deej le imitó. Izerina les ayudó a encontrar el camino de salida.

Pronto, los Towani estaban en el poblado ewok, donde celebraron su buena suerte. Izerina regresó con sus súbditos, Logray obsequió a los héroes ewoks y a los niños Towani con tocados de esperanza para celebrar su victoria y Jeremitt empezó a buscar la forma de reparar su crucero, inicialmente esperando que los ewoks tuviesen conocimientos técnicos y pudiesen ayudar. Aún les esperaban nuevas aventuras en el futuro, especialmente a Cindel y a Wicket, pero la amenaza de este gorax había terminado.

He hablado relativamente poco del gorax en concreto, centrándome más en la caravana de valor (y eso que he omitido peripecias de ésta que no aportaban). Eso se debe a que la información sobre el gorax no era más abundante, y casi todo lo que se pudo averiguar era sobre sus adversarios. En retrospectiva, el gorax estaba muerto y no dejaba constancia escrita, pistas de sus actividades, o siquiera un cadáver que estudiar. Por el contrario, los ewoks consiguieron una aventura que narrar en sus fiestas nocturnas, y cómo les gustaba narrar aventuras, y las fiestas. Cindel llegó a ser reportera en Coruscant, así que también estaba inclinada a detallar lo que había visto aún entonces. ¿De dónde esperan ustedes que saque la información? Pues esto es lo que hay.


Curiosidades


 

Después de ver la popularidad de los ewoks en la película El Retorno del Jedi (1983, R. Marquand), Lucasfilm Ltd. estaba interesada en aprovechar el tirón y preparó un especial de televisión de dos horas que sería emitido en la cadena ABC, con una trama familiar influenciada por historia de espada y hechicería: La Aventura de los Ewoks (The Ewok Adventure: Caravan of Courage), estrenada el 25 de noviembre de 1984.

En la historia, dos jóvenes hermanos náufragos interpretados por los actores infantiles (Eric Walker y Aubree Miller) se asociaba con la tribu ewok de Wicket (Warwick Davis, repitiendo su papel de El Retorno) para rescatar a sus padres capturados por el gigante gorax. Dirigía John Korty, que también coproducía desde Korty Films junto con Lucasfilm Ltd. y ABC-TV. El guión estaba coescrito por Bob Carrau y George Lucas. Lucas fue también productor ejecutivo, aunque en proyectos televisivos posteriores decidió implicarse personalmente en menor medidad.

Los títulos de crédito no indicaban quién había interpretado al gorax, pero esto fue revelado en 1986, cuando Thomas G. Smith entrevistó al experto en efectos especiales Jon Berg para un libro. En este film, Berg había construido el traje simiesco, había sido animador de stop-motion y se había metido en la piel del gorax cuando era adecuado.



Jon Berg en el cortometraje Zorgon The H-Bomb Beast From Hell (1972, K. Fernan).
Eran los 70 y la gente tenía este aspecto.

La película no tuvo el presupuesto o el éxito de la trilogía cinematográfica, pero tuvo cincuenta millones de espectadores en su primera edición, representó muchos progresos en las técnicas de efectos especiales, fue emitida en salas de cine en otros países (entre ellos España) y ayudó a olvidar el desastre del Holiday Special (1978, dir. Steve Binder, emitida en CBS). Random House publicó una adaptación en forma de libro, The Ewoks and the Lost Children (1985). La película inspiró una secuela, The Battle for Endor (1985, 1985, Jim y Ken Wheat), y después una serie animada en televisión, Los Ewoks (1985-86, ABC), que tenía lugar argumentalmente antes de La Aventura de los Ewoks, del mismo modo que ésta sucedía antes de El Retorno del Jedi. A nivel continuidad, estuvo claro desde el principio que La Aventura sucedía en el universo Star Wars: Ya en 1984, el gerente general de ILM, Thomas G. Smith, declaró al boletín de fans Bantha Tracks que la película formaba parte del mismo universo, aunque no de la "saga de Star Wars".

Desde entonces, el resto del Universo Expandido ha mencionado a los gorax en varias ocasiones, como su aparición en novelas por primera vez en El Aprendiz de la Fuerza Oscura (1994, Kevin J. Anderson) y en guías como The Essential Guide to Characters (1995, Andy Mangels), en la que se les mencionaba al hablar de Wicket y de Cindel Towani, o en The Essential Guide to Alien Species (2001, Ann Margaret Lewis), en que no sólo eran citados en la entrada sobre los ewoks, sino que recibieron un artículo breve en la sección sobre "Criaturas destacadas adicionales" (pero no se le mencionaba en el artículo de los yuzzum).

Los gorax también son descritos en Inside the Worlds of Star Wars Trilogy (2004, James Luceno), un libro que describe los mundos de la trilogía original. Ese texto es totalmente repetido en Star Wars: Complete Locations (2005, James Luceno et al.), que recopila casi todo el libro anterior y añade más secciones.

Una docena de artículos en The Complete Star Wars Encyclopedia (2008, vv.aa.) hablan del gorax, incluyendo uno de ddicado a él. Catarine, Jeremitt y Mace Towani no tienen artículo propio, pero redireccionan al artículo de Cindel. Los siguientes artículos de personajes de la peli no hablan del gorax: Chukha-Trok, Shodu Warrick (aunque sí habla de Cindel Towani), Wicket W. Warrick y Widdle "Willy" Warrick.

En el mismo año se publica en la web oficial de Hyperspace el artículo Castaways of Endor (2008, Daniel Wallace y Amy Pronovost, ilustraciones de Pronovost), que describe a varias criaturas de la serie de animación de Ewoks y referencia tangencialmente al gorax. Pronovost, ilustradora profesional que ha hecho muchas trading cards, ya había dibujado un gorax con su estilo característico en Star Wars Galaxy Series 2, distribuida por Topps en 1994.



El gorax de Pronovost. Ya dije que ella tenía un estilo característico, ¿no?

Otras fuentes han mencionado al gorax de pasada o simplemente han reproducido alguna imagen de la película o de su cartelería en la que figura. Podemos citar entre éstos Star Wars Insider en sus números 32 (1997, artículo "Caravan of Courage: Star Wars on Television"), 107 (2009, sección "A Long Time Ago…") y 143 (2013, artículo "Memoirs of an Ewok").

Caso aparte es el artículo Drawing from the Imagination: Mythological Creatures in Star Wars, Part 1 (2013, Tim Veekhoven y Kevin Beentjes), publicado en el blog oficial de Beentjes y Veekhoven. Ellos extrapolan relaciones entre leyendas de la Tierra y sus contrapartidas de Star Wars (como la nave del Gran Almirante Thrawn llamada Quimera en honor a un animal fantástico griego). Hablan de cómo muchas culturas tienen gigantes en sus fábulas, y añaden que el nombre del gorax, gigante entre los ewoks, tiene similitudes con el de Goliath, que también fue vencido por un muchacho mucho más pequeño con un pequeño objeto arrojadizo. Por supuesto, el blog no puede confirmar que la inspiración del gorax haya sido explícitamente el Libro de Samuel en la Biblia o en el Neviim.

El nuevo canon iniciado en 2014 no incluye la película de La Aventura de los Ewoks, pero sí casi todo el material oficial publicado desde esa fecha. El libro Ultimate Star Wars (2015, Ryder Windham, Tricia Barr, Adam Bray y Daniel Wallace) menciona al gorax por primera vez como parte de la nueva continuidad; y Star Wars: Galactic Atlas (2016, Tim McDonagh) presenta la primera imagen "evangélica" de un gorax.

Yo creo que ya les he aburrido bastante con detalles bibliográficos. ¿Quieren averiguar alguna cosa más del gorax? Vamos a ello. Empecemos por el principio: Se acentúa en la segunda sílaba, como ya he dicho y como nos demuestra el narrador de La Aventura (Burl Ives en el original, doblado por José María Alarcón en 1985 y por Miguel Ayones en 1992).

En inglés, los nombres de las especies inteligentes aparecen con mayúscula, mientras que los animales no: "The Ewok rides the dewback." La mayoría de las fuentes en inglés ponen la palabra Gorax en mayúscula, excepto el videojuego Star Wars Galaxies ("[jugador] attacks a gorax matriarch with [tipo de ataque]") y Complete Locations. Esta última también es el único caso conocido en que aparece la forma plural "goraxes." Otras fuentes como Ultimate Adversaries (2004, Eric Cagle, Michelle Lyons, Michael Mikaelian, Steve Miller, Owen K.C. Stephens y Wil Upchurch) y The Official Star Wars Fact Files Nº 109 (2004, DeAgostini) hablan de la forma plural "los gorax" (ejemplo: "the Gorax are").

No conviene confundir al gorax con seres de nombre similar: El gorak es una especie de pájaro del planeta Alderaan, que aparece en la novela Aprendiz de Jedi: El Resurgir de la Fuerza (1999, Dave Wolverton). Gorak también es el nombre de una mercenaria y esclava trandoshana que sale en la aventura de rol A Mon Alone (2004, Morrie Mullins). Por supuesto, Gorak Khzam es un ex-esclavista rodiano que llegó a ser jefe de seguridad de la nave neorrepublicana Estrella Remota según se narra en el juego de rol La Campaña del Guardián Oscuro (1995, Peter Schweighofer, Doug Shuler, Bill Smith, Eric Trautmann y Timothy Zahn).

Vamos a hablar de los gorax en videojuegos. En el MMORPG The Old Republic (2011, desarrollado por BioWare) se menciona de pasada al gorax, pero si llega a aparecer, yo no he podido confirmarlo. En el MMORPG Star Wars Galaxies (2003-2011, desarrollado por Sony Online Entertainment), por el contrario, aparecen varios goraxes en la llanura del norte de Endor, con loot aleatorio. Los jugadores que deseen enfrentarlos pueden buscar los spawns de la zona, que puede ser aleatoriamente no élite (ewoks y sanyassanos), élite (agentes de Sol Negro) y Jefe (un gorax); si un mismo jugador mata muchos de un nivel, empiezan a aparecer de nivel superior. El gorax ataca con pisotones y zarpazos y, si es derrotado, se tumba al caer en vez de derrumbarse. Los triunfantes cazadores reciben una Slayer Badge.

El jugador que mate a una matriarca gorax siempre recibe una Oreja de Gorax ("Gorax Ear"), que no sólo se podía utilizar para conseguir un efecto positivo sobre el personaje durante tres minutos sino que era también una carta para el juego de cartas online de Galaxies. Desde 2008 a 2011, este juego estuvo disponible incluso dentro del MMORPG. Además de ésa, había otras dos cartas con imágenes de gorax, ambas en la extensión Agents of Deception: Una de ellas era el gorax como personaje del juego; y la otra, "Search and Destroy", con el texto "Having found you, I shall now destroy you", con una imagen de Ben Wootten en que un usuario de la Fuerza, posiblemente femenino, desafía con su espada láser morada a un gorax que tiene una bandolera con cascos de soldados de asalto. Esta imagen se reutilizó en el libro de rol Nexus of Power (2016, Fantasy Flight Games), del nuevo canon.



"Ahora que te he encontrado, te destruiré".

Ahora que hablamos de los juegos de rol, el gorax ha aparecido en el juego de rol de Wizards of the Coast, con fichas y reglas específicas, primero en el artículo "Endor and the Moddell Sector", por C. Robert Carey, Jason Fry y Dan Wallace, publicado en Star Wars Gamer Nº 9 (2002), y después en el libro Ultimate Adversaries (2004, Eric Cagle, Michelle Lyons, Michael Mikaelian, Steve Miller, Owen K.C. Stephens y Wil Upchurch). El texto descriptivo era prácticamente igual, excepto que en Gamer la palabra "colossal" apareciese en minúscula en uno de ellos porque era descriptiva y no un término de juego; y que al hablar de los hanadaks referenciaba el libro Alien Anthology (2001, Steve Miller y Owen Stephens); pero la ficha de juego de rol era totalmente distinta. Una cosa es una diferencia de dos puntos en la iniciativa, entre 0 y -2; e incluso un cambio en la Defensa de +4 a +12; pero las diferencias son brutales: La fortaleza del monstruo es de 24 ó 41 dependiendeo de la fuente consultada; su tamaño es enorme o colosal, con una importante diferencia; recibe visión con poca luz o no; y recibe quince puntos de reducción al daño o no. Si alguien quiere meter un gorax en su juego de rol, yo le recomiendo que consulte ambas fuentes y elija la que más le convenga.

No fue la única metedura de pata a nivel continuidad. Veamos unas cuantas más, y empezaremos por la película La Aventura de los Ewoks. En primer lugar, cuando Mace y los ewoks encuentran a los padres encerrados en la jaula del gorax, Jeremitt está perfectamente afeitado, pese a que lleva varios días prisionero. Cuando Mace, Deej y Chukha suben a la jaula para liberar a los adultos, no queda muy claro qué están aportando los rescatadores, porque los barrotes están lo bastante separados para que los prisioneros pasen a través y la cuerda ya estaba en la jaula (Yo diría que Jeremitt y Catarine no intentaban escapar porque no sabían por dónde huir en la enorme montaña, pero una vez habían visto a Mace en el suelo del comedor del gorax, podían haberse unido a ellos sin hacerles usar una catapulta para unirse a ellos).

En la escena en que Mace lanza el hacha y se la clava al gorax en la cabeza, se supone que el hacha se queda clavada; pero en los planos siguientes, no se ve el mango sobresalir en la nuca del gorax. Ya que estoy con el tema, el artículo sobre Mace Towani en el Databank de la web oficial (retirado) decía que el arma en cuestión era una vibro-hacha; cuando en realidad el hacha de Chukha era la herramienta primitiva de un leñador, no tecnológicamente avanzada.

Ahora veamos unos cuantos errores de continuidad relativos a Endor con los que me he topado al escribir este artículo, ¿vale? Fact Files Nº 10 (2002) y Geonosis and the Outer Rim Worlds (2004, C. Robert Carey, Jason Fry, Jeff Quick, Jeffrey Quinn y Daniel Wallace) dicen claramente que el gigante gaseoso Endor es orbitado por nueve lunas; según Geonosis, la segunda es Luna Santuario; según Fact Files, Luna Santuario es la cuarta; y según Complete Locations, Endor tiene dos soles pero ninguna luna.

No es la única discusión entre dos de esas tres fuentes. Fact Files Nº 10 dice que los océanos cubren un tercio de la superficie de la luna; Complete Locations dice que el agua en superficie es del 8%, lo que sugiere que los océanos cubren aproximadamente un doceavo de la superficie.

Por último The Essential Guide to Planets and Moons (1998, Daniel Wallace) da una lista parcial de especies inteligentes originarias de Endor que incluye a los teeks; mientras que Castaways of Endor dice que los teeks no son originarios de Endor, sino una de las especies que llegaron en naves espaciales y después se adaptaron a la luna. ¿Alguien quiere leer sobre los teeks? Que me lo diga, ya saben dónde estoy.



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Sección creada por Skippy Farlstendoiro y Al Noah para SithNET
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