Grish B'reen: Este antipático chistori era un piloto de moral discutible pero indiscutible talento. Como otros chistori, tenía hocico largo y estrecho de lagarto, con dientes serrados que crujían detrás de sus labios. Aunque muchos pilotos vestían monos flojos que permitían facilidad de maniobra, B'reen solía vestir armadura corporal completa, posiblemente con un sistema de control de temperatura incorporado, porque los reptilianos chistori, de sangre fría, eran muy vulnerables a cambios de temperatura drásticos.
Poco después de la Batalla de Yavin, B'reen se había convertido ya en uno de los mejores pilotos independientes de la galaxia. Recibió una oferta de empleo de un hombre misterioso que le tentó con promesas de una suculenta paga, así que B'reen decidió ir al lugar de reunión en Iope, tercera luna de Rinn. Por entonces, la nave de elección de B'reen era un carguero espacial.
Voy a explicar lo de la oferta de empleo, incluyendo los detalles que B'reen ignoraba. El empleador era el hombre llamado X-7, un ex-asesino imperial caido en desgracia por no haber conseguido matar al joven piloto rebelde Luke Skywalker. En un intento de redimirse, X-7 buscó la forma de cumplir su misión, así que convocó a los diez pilotos más hábiles y despiadados para esa misión, entre los que estaba B'reen.
Ahora bien, X-7 quería poner a prueba a sus candidatos antes siquiera de reunirse con ellos, así que les preparó una trampa: En cuanto las 10 naves llegaron al unísono a Iope, fueron recibidas por fuego láser desde la superficie. Los disparos venían de un hangar subterráneo oculto, pero los pilotos inicialmente los atribuyeron a una base en forma de domo que X-7 usaba como distracción. La prueba se tomó las vidas de tres de los candidatos, incluidos el kobok Slis Tieeer Dualli y el findiano Jayn; otros dos pilotos huyeron. El humano Lune "Div" Divinian, a bordo de su Firespray, demostró ser el mejor candidato, destruyendo los cañones reales.
Los pilotos supervivientes atracaron en un hangar y desembarcaron. Además de B'reen y Divinian eran Fallon Pollo, varón humano y piloto de un Ave de Presa; Clea Sook, mujer humana, también piloto de carguero; y un varón 'sorrusiano. Todos tenían un aspecto y actitud hostil. Cuando hubieron recuperado el aliento, X-7 se dejó ver. Divinian le interrogó apuntándole con su bláster y X-7 mantuvo la calma, explicando que el desafío le había convencido de su talento. Divinian, decidiendo que era más rápido que el resto de los presentes, enfundó y accedió a escuchar a X-7.
X-7, sin dar su nombre, expuso sus condiciones: Su blanco era Luke Skywalker, piloto rebelde, aunque el Imperio, enemigo natural de los rebeldes, no estaba detrás de la operación. X-7 consideraba que los rebeldes protegían a Skywalker en tierra, pero esperaba que le pudiese vencer en combate aéreo. X-7 envió a los datapads de sus pilotos información sobre una inminente misión de Skywalker en el lejano planeta Kamino, incluyendo datos sobre la ciudad de Tipoca y sus comunidades satélite, para que supiesen por dónde iban a pilotar.
X-7 exigía que sus pilotos trabajasen en equipo. El sorrusiano exigió más autonomía, pero X-7 le ejecutó de un tiro, rápida, eficientemente y delante de los otros pilotos, que quedaron impresionados. X-7 puso a Divinian al mando del grupo.
La Alianza Rebelde efectivamente envió a Skywalker a Kamino para investigar un laboratorio imperial supuestamente abandonado un mes antes. Skywalker era el líder de un improvisado Escuadrón Rojo de cazas espaciales alas-X, siendo sus hombres Han Solo, Wedge Antilles, Zev Senesca y el wookiee Chewbacca. Instantes después de que esta unidad saliese del hiperespacio en el sistema Kamino, el equipo de Divinian emergió en sus respectivas naves y, sin mediar provocación, Divinian abrió fuego contra Skywalker.
Skywalker maniobró para evitar ser impactado, y Solo propuso contraatacar. Se inició entonces un combate espacial cercano. Mientras Solo y Chewbacca se enfrentaban a la nave de Fallon, Skywalker fue acosado por los cargueros de B'reen y Sook a la vez. B'reen y Sook avanzaban en zigzag, de modo que Skywalker siempre estaba en la mira de al menos uno de ellos.
Afortunadamente, Solo logró librarse de Fallon y se lanzó a ayudar a Skywalker. Para ello, Solo pilotó directamente hacia el carguero de B'reen, como para embestirlo. En este juego de la gallina, las naves estuvieron tan cerca que Solo vio el hocico de B'reen antes de que el chistori se acobardase y virase su vehículo.
Para cuando B'reen se recuperó, Skywalker estaba planificando una estrategia: Como los enemigos trabajaban bien en equipo, intentarían separarles. Skywalker, Solo y Chewbacca pusieron rumbo hacia la superficie planetaria mientras Antilles y Senesca se mantenían en órbita alta. Ignoraban que el único objetvo de los cuatro enemigos era Skywalker, y todos, incluido B'reen, siguieron al grupo de Skywalker.
Una defensa planetaria automática activó un rayo tractor que capturó todas las naves y las atrajo a la superficie oceánica, por separado. B'reen consiguió aterrizar mal que bien y logró reunirse con Divinian y Sook, que ya se habían reagrupado. Ignoraban que Fallon había sido devorado por una criatura desarrollada en laboratorio por kaminoanos como arma biológica.
Los tres mercenarios entraron en un edificio kaminoano y allí encontraron a Skywalker y a sus aliados en una habitación grande con un enorme agujero en el suelo que daba al mar. Los sicarios se ocultaron, pero la intuición de Skywalker le hizo desconfiar. Cuando Divinian y los demás se dieron cuenta de que les habían descubierto, se dejaron ver pero con las armas empuñadas y apuntando al grupo.
Solo desenfundó rápidamente y apuntó a la cabeza de B'reen; pero no abrió fuego todavía. Chewbacca rugió en un vano intento de intimidar a Sook; ella insistió en que los rebeldes morirían inmediatamente.
Divinian sin embargo tomó la palabra y ordenó a su gente retroceder. B'reen exhibió sus dientes, rechazó la orden y rugió a Solo; pero Divinian insistió: Divinian creía que, como eran pilotos, no debían asesinar en tierra, y que la colaboración entre ambos bandos sería el modo de salir del planeta. Esto no convenció a B'reen y Sook.
En plena negociación, Divinian se distrajo un instante al ver movimiento bajo el agua, y Sook tomó el control de la situación: Ella y B'reen, dijo, matarían a los rebeldes, y a Divinian si no se ponía de su lado. B'reen respaldó a Sook, criticando la debilidad de Divinian. Divinian creía ser capaz de desarmar a sus antiguos aliados, pero no antes de que todos fuesen acribillados por los rebeldes.
¿Se acuerdan del movimiento bajo el agua que había visto Divinian? Era una de esas bestias de ingeniería genética como la que se había comido a Fallon, y estaba preparada para atacar porque después de todo era un depredador. La criatura emergió sigilosamente del agua detrás de los mercenarios, y Skywalker gritó una advertencia. B'reen creyó que se trataba de un pobre ardid de Skywalker para salvr la vida, rió, insultó a Skywalker y le disparó. Skywalker esquivó y, junto con sus aliados se puso a cubierto.
Divinian entonces vio a la bestia y advirtió a B'reen y Sook. Ella echó a correr, pero B'reen mantuvo su escepticismo. El chistori fue entonces apresado a la altura del pecho por un largo tentáculo que lo elevó del suelo hacia la boca de una horrible criatura con seis tentáculos, una mandíbula casi tan ancha con su torso y más de seis metros de largo. B'reen perdió su bláster al ser atrapado, pero Divinian intentó salvarle disparando a la bestia. La piel negra aceitosa del engendro no fue afectada por los impactos, e inmediatamente después B'reen fue devorado.
A continuación el monstruo consumió a Sook, Skywalker y Divinian, y se alejó hacia su guarida, una cueva submarina con una bolsa de aire. Allí el ser vomitó los restos de B'reen, parcialmente digerido y despedazado, sobre una pila de basura que incluía algas, núcleos de fruta podrida y tiras de plastiacero.
Skywalker y Divinian sobrevivieron al viaje, porque el monstruo había sido diseñado para transportar prisioneros. Los dos humanos fueron regurgitados en la cueva, posiblemente para su ingestión posterior, y el monstruo volvió a sumergirse. Divinian encontró los restos de B'reen y dedujo datos sobre esta criatura, mientras Skywalker buscaba una salida. Nunca supieron qué había sido de Sook, aunque Divinian especulaba que los restos de su compañera podrían estar debajo de los de B'reen.
Divinian y Skywalker colaboraron para escapar, matando a uno de los monstruos sólo para descubrir que había muchos más. Cuando abandonaron la gruta, dejaron atrás el cadaver de B'reen; Divinian le dedicó una última mirada para acabar de convencerse de las ventajas de escapar.
El guardia de honor: Este chistori tenía aspecto salvaje. Durante la Era de la Rebelión, este chistori trabajaba en el mundo-prisión de Kessel en la guardia de honor del alcaide Kluskine.
Kluskine, que supervisaba un negocio ilegal de exporación de especia, se reunía frecuentemente con gánsters que examinaban sus instalaciones, así que había decidido hacerse con una guardia de honor de alienígenas de aspecto peligroso, pero de lealtad indiscutible, para impresionar a sus invitados. Entre éstos había un aqualish, dos barabels, un enorme ithoriano y un wookiee. Los guardias recibían restos de blindaje gamorreano hediondo y vibrohachas sin energía denominadas alabardas ceremoniales. Kluskine reforzaba su escolta con tropas imperiales tradicionales, pero mantenía consigo a la guardia a tiempo completo mientras que los imperiales a veces se ausentaban para cumplir otras tareas.
En una ocasión, Kluskine debía recibir a un jefe criminal twi'lek en la superficie planetaria. Los guardias acompañaron a Kluskine y a su invitado a una sala de recepción construida cerca del muelle planetario.
Resultaba que el guardia wookiee, Gyylghrard, no era totalmente leal a Kluskine. En realidad le odiaba a muerte. En una reunión posterior de Kluskine con el contable toydariano Fossco, Gyylghrard decapitó a Kluskine con su hacha, siendo acribillado inmediatamente después por soldados de asalto imperiales.

El matón de Cato Neimoidia
El matón chistori en Cato Neimoidia: Este alto y corpulento chistori tenía piel amarilla con una franja morada que avanzaba desde su frente por su espalda. En sus mejillas había semiesferas rosadas y se pintaba el rostro con franjas. Vestía un mono de piloto y calzaba sandalias. Aunque era fuerte, robusto y veloz, no destacaba en inteligencia y tendía a enfurecerse. Cuando lo hacía, salivaba especialmente.
En el año 19 ABY, tras el fin de las Guerras Clon, el chistori estaba en el planeta Cato Neimoidia, que había perdido su prestigio y atraía a criminales. El chistori, buscando empleo extraoficial, había acudido a una cantina donde los empleadores adinerados ofrecían trabajos para criminales, evitando todo registro.
Entró una mujer humana, Ember Chankeli, solicitando un batallador para que librase a su pueblo de una banda de criminales, y declaró que habría una entrevista de trabajo al día siguiente en una fuente. El chistori estaba interesado en este empleo y observó que un humano canoso, Dass Jennir, reaccionaba de forma similar. El chistori decidió intimidar a Jennir con amenazas de violencia física para librarse de un competidor.
Jennir, que había sido jedi y general, no se acoquinó. El chistori atacó a Jennir en plena cantina, pero el humano usó artes marciales para lanzarle lejos. No viéndose superado aún, el chistori volvió a atacar a Jennir, y éste le arrojó al exterior de la cantina, rompiendo el escaparate del local y aturdiéndole. En un intento de librarse del chistori, Jennir le pateó la cara y le exigió que se quedase tumbado. H2, el droide de Jennir (y antaño de su enemigo Denozo Qua) recriminó a Jennir que se buscase problemas.
El chistori no se rindió. Cuando se recuperó, buscó refuerzos en forma de tres belicosos neimoidianos y un kilmaulsi, para que le ayudasen en un segundo encuentro con Jennir. No sería difícil encontrarle: Jennir sin duda acudiría a la entrevista de trabajo con Chankeli. Al día siguiente, Chankeli se reunió en la plaza con Jennir y otro candidato humano, para explicarles que una banda de unos cuarenta criminales estaba hundiendo los negocios de su pueblo. El otro humano no estaba convencido de querer el puesto; Jennir lo consideró; y lel chistori y sus aliados interrumpieron las negociaciones.
El chistori volvió a amenazar a Jennir, sólo para que el humano se burlase de él sugiriendo que no había traido suficientes refuerzos. Jennir intentaba tomar el control del combate limitando las posibles acciones de su enemigo. El chistori reaccionó al insulto atacando en solitario, sin coordinarse con los otros. Era lo que Jennir esperaba: Pilló desequilibrado al chistori, le derribó y lo lanzó contra sus aliados en una fuente. El chistori cayó sobre los tres neimoidianos.
El kilmaulsi sin embargo esquivó este proyectil y atacó a Jennir. Jennir derribó al kilmaulsi y lo lanzó sobre el chistori, justo cuando éste estaba levantándose y recuperándose. El chistori quedó incosnsciente en la fuente. Para entonces el otro candidato humano había huido, así que Chankeli dio el trabajo a Jennir.
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