LOS REUSSI

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Los Reussi


 
"'En el caso de muerte, todos los arreglos funerarios serán supervisados por la Corporación Reuss a la entrega obligatoria del cadáver'. Corporación Reuss. Eso es Vorne" (Eedund Cus)

Reuss VIII: un mundo controlado por una enorme corporación industrial, sin respeto por los recursos del planeta ni por la vida de sus habitantes. Los reussi cuasihumanos quedaban reducidos a vidas de miseria en una pesadilla contaminada en la que sólo salir a la calle exigía inasequibles máscaras de respiración. Lo único que les quedaba eran sus propios órganos, y aún eso acababa en manos de la plutocracia. Conozcamos hoy a los reussi.

El planeta Reuss VIII se encontraba en el sector Portmoak del Borde Exterior. Formaba parte de la popular Ruta de Especia de Llanic, que empezaba en Especia Términos (sector Parmic) y entonces pasaba por Reuss para ir a Andalasa (sector Cor'ric), Bahalian (sector Astal), Socorro (sector Kibilini) y Llanic (sector Karhtakk) antes de salir del Borde Exterior; ya volveré más tarde sobre esta ruta de especia.

Reuss era un mundo de gravedad estándar, hidrosfera moderada y temperatura caliente. Tenía un periodo de rotación de diez horas estándar, y un año de doscientos diez días locales. La superficie estaba urbanizada casi en su totalidad, incluyendo al menos un puerto estelar nada desdeñable de clase estelar. Era la ventaja de ser un centro neurálgico industrial con grandes fábricas automatizadas que operaban sin descanso. El coste de ello fue convertir el mundo en una monstruosidad de asfalto y metal en la que mucha gente no podría ver una planta en toda su vida.

La atmósfera era clasificada como tipo III, es decir, que requería máscara de respiración. Eso se debía a la gran cantidad de toxinas que cubrían el aire. La lluvia era tan ácida que literalmente podía perforar la ropa, cocer el lodo de las cloacas y provocar vapores capaces de abrasar pulmones humanos. Incluso cuando amainaba, todo estaba cubierto por una niebla tóxica que causaba enfermedades y destruía el revestimiento de la garganta si se respiraba el tiempo suficiente.

Era un error salir al exterior sin un filtro de respiración: En dos semanas, el daño pulmonar era irreversible y la mejor opción era el reemplazo cibernético. En los días de peor clima, salir sin un traje ambiental completo podía letal en cuestión de minutos. Afortunadamente, estas medidas podían obviarse en muchos locales y domicilios. Desafortunadamente, muchos nativos carecían de domicilio.

Es el momento de hablar de los nativos: Los reussi eran una especie cuasihumana nativa de Reuss VIII. Parecían en muchos sentidos humanos de piel oscura, con las proporciones y características propias de los humanos. Se movían sin embargo más despacio, caminando a la velocidad de un niño humano.



Torel Vorne, un reussi con máscara de respiración.

Los ojos de un reussi tenían una variedad de colores que incluía el azul; algunos reussi se caracterizaban por tener ojos llorosos y parpadear infrecuentemente.

El cabello de un reussi podía ser negro o de otros tonos oscuros. Algunos reussi se afeitaban la cabeza. Otros mostraban pelo fibroso que iba cayéndose con la edad. Los reussi más vanidosos procuraban ocultar este síntoma de envejecimiento.

Nótese que la esperanza de vida de un reussi era de sólo cuarenta años, pero eso tenía en consideración las condiciones muy hostiles de Reuss VIII. Los reussi niños tenían proporciones más reducidas; y algunos reussi alcanzaban la madurez manteniendo esas medidas y alterando sólo su rostro y su voz.

La anatomía reussi era mucho más adaptable que la de otros humanoides, lo que les convertía en excelentes donantes de órganos: Un órgano reussi rara vez era rechazado, incluso por un ser de otra especie.

Los reussi que querían mantenerse en buena forma tenían la opción de realizar ejercicio físico intensivo. Algunos reussi de agradecido metabolismo conseguían tales condiciones incluso sin cansarse.


Cultura


 

El planeta Reuss VIII estaba habitado principalmente por reussi y por humanos, con cantidades residuales de seres de otras especies como jillsarianos. La población total era de varios miles de millones; aproximadamente 25.000.000.000 en 0 DBY.

El mundo producía tecnología media e importaba grandes cantidades de comida, agua y máscaras de respiración. Pese a su superindustrialización, Reuss VIII tenía sin embargo un nivel tecnológico inferior al resto de la galaxia. La tecnología estándar, como armas bláster y transportes repulsores, era infrecuente, aunque existían taxis speeders para llegar a los puertos de lanzaderas. Simplemente encontrar ropa de la talla adecuada podía ser difícil aún para los reussi ricos.

El gobierno planetario estaba en manos de corporaciones, que a su vez estaban en manos del crimen organizado. La superficie estaba plagada de fábricas y refinerías, algunas de ellas inactivas, así como de incineradores de residuos ineficientes y bloques de rascacielos en diversos estados de descomposición. Las zonas residenciales eran mínimas, mientras que los cinturones industriales crecían rápidamente, combinándose unos con otros. Los reussi cometieron el error de permitir que las corporaciones les comprasen el planeta, condenándoles a vivir sólo como inquilinos.

La población de Reuss VIII estaba compuesta por una élite rica y una inmensa mayoría repartida entre la pobreza y la más absoluta miseria. Los más afortunados eran empleados, prácticamente esclavos, de la Corporación Reuss, sometidos a los caprichos de sus mejores. Rara vez poseían algo.



Las Ratas de Óxido siguen a un deportista en una calle contaminada.

En lo más bajo de la sociedad estaban las Ratas de Óxido: Niños correteando en las calles, buscando entre las basuras, desmantelando speeders y robando y mendigando para conseguir comida y dinero. Eran los huérfanos que dejaba la Corporación cuando sus padres morían o eran expulsados de sus casas por conceptos como mora del arrendamiento (algo inevitable cuando los precios subían y los sueldos se estancaban). Sin poder ir a ningún sitio, las Ratas vivían precariamente en restos de edificios corroídos. Precisamente por no tener acceso a máscaras de respiración adecuadas y protecciones eficaces, las Ratas morían lentamente por las quemaduras de ácido y otros problemas de la polución.

Raro era que alguien importante se preocupase por el bienestar de las Ratas; desde luego, nadie en Reuss VIII. Una médico imperial humana, la doctora Sena Pakkallo, viajó a Reuss VIII antes de 0 DBY para proporcionar instrucción de higiene a las Ratas de Óxido. Pakkallo después siguió sirviendo al Imperio con poca distinción, siendo destinada frecuentemente a otros mundos desagradables.


Historia


 

El sistema Reuss no fue descubierto hasta el último milenio de la República.

Por entonces, Reuss VIII era un planeta boscoso y exuberante, verde y frondoso, que se convirtió el principal productor de comida para varios planetas coloniales cercanos. Famoso por su esplendor visual y su clima templado, obtuvo reputación de ser un mundo agradable para visitar, aunque algo aburrido.

Unos pocos siglos antes de Yavin, varias grandes corporaciones industriales de la República se fijaron en el Reuss VIII, y se fijaron para mal. Decidieron que Reuss VIII tenía mucho terreno relativamente barato que ellos podrían comprar a los nativos para construir fábricas de producción de comida. En apenas unos pocos años, el planeta fue comprado a los reussi y, poco a poco, convertido en una pesadilla industrial sin un ápice de vegetación. Las corporaciones, en su supuesta magnificencia, permitieron a los reussi quedarse en su propio mundo como inquilinos, para contemplar cómo su ecosistema era devastado.

La llegada de las Guerras Clon no alteró realmente la situación en Reuss, aunque la República perdió el control de la zona durante el conflicto. Los Separatistas no se molestaron en tomar ese territorio.

En 19 DBY, el Imperio Galáctico reemplazó a la República como potencia política dominante. Pronto tomaron el control del sector Portmoak. El Imperio dio control sobre el planeta a la Corporación Reuss y convirtió a cada reussi en un empleado de la Corporación. La Corporación decidió que la industria estaba muy bien, pero el negocio no era la comida, sino la tecnología y el duracero. Reuss VIII se convirtió en la potencia industrial del sector Portmoak, mientras los reussi empezaban a padecer hambrunas. ¿A nadie se le ocurrió que la comida también se consumía en Reuss VIII? Seguramente sí lo pensaron, pero no debía importarles.

El planeta se llenaba de humo y lluvia ácida, las calles se convertían en zona de riesgo donde sólo respirar sin máscaras especiales era perjudicial para la salud, y cada vez más y más reussi perdían su empleo y acababan malviviendo en las calles hasta morir. Sin embargo, esto no satisfacía a los economistas de la Corporación: Su producción no podía competir con la de empresas aún más grandes, así que estaban perdiendo dinero.

La Corporación recurrió a uno de sus empleados más despiadados, el reussi Torel Vorne de pequeña estatura y gran ambición. Vorne organizó una infame política de donación de órganos para satisfacer el mercado de los Mundos del Núcleo: Los centros médicos pagaban bien por órganos tan adaptables como los de los reussi; y algunos ciudadanos ricos pagaban aún mejor. Lo único que necesitaban era separar a los pobres de sus órganos.

Siguiendo las indicaciones de Vorne, la Corporación subió el coste de la vida y animó a los reussi a apostar. Los reussi empobrecidos, amenazados por los matones de Vorne, recibían una oferta de Vorne: Vender sus órganos vitales para dar comida a sus hijos; o quizá sacar una cantidad inferior por vender órganos menos necesarios. Un reussi podía pedir dinero o simplemente crédito. A menudo, sin embargo, el donante expiraba en la mesa de operaciones y sus herederos no llevaban a ver el dinero. En vez de eso, eran desahuciados o se convertían en la próxima generación de trabajadores, de donantes, o de sicarios de Vorne. La operación era muy eficiente en casi todos sus aspectos, excepto en uno: Los cirujanos que extraían órganos a menudo causaban daños innecesarios al donante, en tanto que el bienestar del donante (o su supervivencia) no eran prioritarios. El contrabandista reussi Tiv Pocarno expiró en la mesa de operaciones y, como sus órganos no valían lo suficiente para pagar la deuda con Vorne, éste se quedó también con la nave de Pocarno.

Vorne prosperó como jefe criminal influyente en el sector Portmoak desde su base en Reuss VIII. Tenía agentes que cuidaban de sus activos extraplanetarios, como el traficante de información reussi Deral Reiko; Reiko sin embargo se independizó de Vorne para montar su propio negocio criminal de venta de información. Vorne también usó su influencia para que Reuss VIII estuviese en la ruta de tráfico ilegal de especia hacia el Núcleo. Sin embargo, la principal potencia criminal del sector Portmoak no era Vorne: Eran la alianza conocida como los Mandroxanos. Los Mandroxanos hacían negocios con Vorne, pero también con los hutts, y tenían agentes en todos los sistemas principales.

La población de Reuss VIII no era exclusivamente reussi en esa época, aunque poca gente quería asentarse en un mundo así. El ex-luchador y cantinero jillsariano Resik se asentó en Reuss VIII después de haber poseído y atendido bares en otros planetas, que a menudo tenía que abandonar por la presión anti-alienígena de las políticas imperiales. Muchos nativos de Reuss sospechaban que Resik mantenía operaciones ilegales con su bar como tapadera; lo que nadie sospechaba es que Resik era un agente secreto de la Alianza Rebelde, especializado en obtener información valiosa y ofrecer refugio a otros rebeldes en aprietos.

Ya que hablamos de locales de copas en Reuss VIII, uno de ellos había alcanzado altísimas cotas de infamia, e incluso desarrollado su propia leyenda: El Colmillo Roto.



El Colmillo Roto.

La historia del Colmillo empieza con dos hermanos gamorreanos excepcionales: El imponente y robusto Gorge, que no sólo era buen luchador sino también sensato al elegir sus combates; y el esbelto, pequeño y sorprendentemente inteligente Greel, un zalamero impecable que hablaba Básico gracias a un implante cibernético. Ambos eran esclavos del cazarrecompensas tolanés Var'Rotha Fin'Rotha, realizando tareas físicas y pesadas para él a bordo de su nave, Colmillo de Tolan. Descontentos con su sino servil, los gamorreanos prepararon su propia fuga en un viaje desde Coruscant al Borde Exterior para hacer modificaciones ilegales a la nave. Fin'Rotha permitió a Greel salir de su jaula para limpiar el interior de la nave, y Greel aprovechó para sabotear el hipermotor. Eso generó un problema que atrajo la atención del amo; mientras éste intentaba diagnosticar el problema, Greel liberó a su hermano, y éste redujo a Fin'Rotha. Los gamorreanos ofrecieron al tolanés dos salidas: La escotilla o una cápsula de escape. Fin'Rotha optó por la segunda y desapareció durante varios años.

Resultó que los gamorreanos no eran excelentes tripulantes navales. La nave agotó sus células de combustible y tuvo un aterrizaje forzoso en Reuss VIII, rompiéndose en dos mitades. La proa se desintegró, pero la popa quedó relativamente intacta y casi vertical, medio empalada en una fábrica abandonada (y si no estaba abandonada durante el impacto, no debió tardar mucho). Los gamorreanos sobrevivieron relativamente indemnes; Greel emergió el primero y, viendo el casco varado, decidió que era un excelente local para abrir una cantina como aparentemente siempre habían deseado. Gorge apareció después; Greel le explicó la idea y Gorge sonrió excitado, exhibiendo los restos de su colmillo frontal derecho, roto en el impacto. Greel propuso un nombre para el local: El Buen Lugar de Greel Para Tomar Bebidas y Comer y Después Meterse En Peleas. Gorge no podía retener un nombre tan largo, y Greel propuso como nombre alternativo Colmillo Roto.

El Colmillo Roto, un local nocturno, sellaba y magnacerraba sus puertas dobles antiimpacto durante el día; para cuando abría, a menudo había una cola de personas ansiosas para obtener algo de relax. El local ofrecía comida mala, bebidas más inundadas que aguadas, camareros soeces que literalmente escupían a los clientes en la cara, pero también una atmósfera respirable sin máscara gracias a las unidades de procesado atmosférico y un excelente entretenimiento. El ambiente primitivo sugería un peligro de tipo selvático, visible en las mesas de repli-madera y sobre todo en los luchadores que merodeaban por allí.

La principal atracción era la Pista Dool: Una gran foso de combate rodeado de muros de plastiacero de cinco metros de altura, con dos puertas reforzadas y que se podía contemplar igual de bien desde cualquier asiento; después de todo, el club disponía sus mesas en capas concéntricas precisamente para asegurarse de que cualquier cliente pudiese ver bien las peleas.

¿Cómo funcionaba esto de las peleas? La única regla era que no se permitían armas a distancia; los luchadores incluso podían recoger objetos afilados que la clientela "accidentalmente" arrojaba a la pista. Normalmente el duelo terminaba cuando un contendiente señalaba su rendición; esto era favorable porque los clientes volvían para ver a sus favoritos. El ganador recibía algo de dinero y prestigio; a veces incluso un contrato con el local. El perdedor recibía gratuitamente tratamiento médico del droide MD-5 residente, Remedios. Las apuestas estaban permitidas y eran de hecho el principal negocio del Colmillo; supuestamente no había ningún combate amañado, pero en ocasiones resultados muy improbables enriquecieron mucho a la casa.

El Colmillo organizaba periódicamente noches de aficionados abiertas a cualquiera que aceptase el riesgo. Además, Cada cuatro meses estándar, cien de los mejores luchadores se batían en duelos eliminatorios para elegir un campeón, atrayendo a luchadores de otros sectores de la galaxia. Los precios del cubierto dependían de la pelea que tuviese lugar ese día, oscilando de cinco créditos por la noche amateur a más de cien en las finales del campeonato.

El campeón en activo desde el año 1 ABY era el barabel Tull Raine, con el récord de oponentes a los que había matado en la pista. La mayoría de parroquianos habituales le adoraba y había apostado por él con éxito. Raine sin embargo había sido derrotado por tres de los otros diez mejores contendientes, aunque nunca en un campeonato.

Otros luchadores fijos incluían a Norrin Vaxx, jedi caído humano que atacaba con su sable láser; Yrrcanna, guerrero y ex-esclavo wookiee, Zomil, asesino defel; y el nuevo favorito, con treinta victorias consecutivas (aunque aún no había derrotado a ninguno de los diez mejores), Lusubrin "Brin" T'shkali, un misterioso guerrero nagai experto en el manejo de las cuchillas tehk'la y tan atractivo que atraía la atención de las damas, consiguiendo vítores más altos que otros luchadores más veteranos. El propio Gorge había combatido en Dool en los primeros tiempos del Colmillo, pero abandonó esa actividad.



De izquierda a derecha: Gorge, Greel, Yrrcanna, Norrin Vaxx, Zomil, Brin y Var'Rotha Fin'Rotha.

Greel, elegante en el vestir y en sus aficiones, era un empresario astuto y perspicaz, consciente de que tenía que competir con otros locales en lugares como Nar Shaddaa y La Rueda. Para atraer interés, Greel decidió no informar antes de la pelea de quiénes iban a competir esa noche (Ni siquiera los propios luchadores lo sabían), lo cual atraía al público. También empezó a organizar duelos de droides gladiadores, en que cualquier persona podría inscribir a su droide en un torneo eliminatorio por poco dinero; los tres primeros puestos recibirían premios.

Precisamente por la constante presencia de temibles luchadores y del enorme Gorge, las peleas eran infrecuentes en el Colmillo. Además, se había extendido el rumor de que uno de los inversores del local era el temible jefe criminal local Torel Vorne, a quien nadie querría plantar cara. Eso no significaba que no hubiese actividades ilegales en el Colmillo: Estaba el Día de Supervivencia.

Varios altos cargos imperiales pagaban generosamente a Greel, en forma de sobornos, regalos y favores, para poder echar a Dool a prisioneros que resistían interrogatorios normales, que debían morir o a los que los imperiales querían ver sufrir. Los presos se enfrentaban a feroces bestias de la galaxia (A veces bestias acuáticas, con la Pista llena de agua) o al propio Tull Raine; y a veces los imperiales les dejaban armas que podrían o no funcionar. Los imperiales afirmaban que el preso sería liberado si vencía (algo que nunca sucedió) o si revelaba información (En ese caso, los imperiales sacaban al preso del foso, pero nunca nadie volvía a saber de él). Greel comprendía la importancia de este procedimiento y, si un prisionero lograse escapar, Greel estaba preparado para enviar a Raine y Zomil a rastrearle.

Poco después de la Batalla de Yavin, los Días de Supervivencia empezaron a sucederse cada vez con más frecuencia hasta que la Alianza empezó a oír rumores sobre ellos. Agentes rebeldes investigaron el asunto, y descubrieron a antiguos asociados suyos condenados a esa clase de enfrentamientos.



Zomil contra Norrin Vaxx, una noche en el Colmillo Roto.

No sería ése el principal problema del Colmillo: Var'Rotha Fin'Rotha había sobrevivido a su derrota, aunque desfigurado por unas quemaduras. Una vez recuperado, reclutó a un pelotón de matones para vengarse de sus ex-esclavos fugados. Fin'Rotha y su gente entraron en el Colmillo con el objetivo de asesinar a Gorge y Greel, y sin importar quién más muriera en el proceso. Aparentemente, Fin'Rotha logró acabar con sus adversarios y en el proceso voló el local.

Torel Vorne se hizo con el arrendamiento del Colmillo Roto, remodeló el local y llevó a cabo una serie de reformas. De pronto, el Colmillo era demasiado caro para los reussi porque se había vuelto "respetable". Además, la Pista Dool pasó a ser sólo una pista de boxeo de choque, en vez del estilo libre no regulado que había tenido hasta entonces. Eso exigió proveer a los luchadores de una holocaja para entrenarse, un refrescador para ducharse y el material reglamentario, que incluía guantes que lanzaban descargas eléctricas y un escudo que protegía de ellas hasta cierto límite. Tull Raine retomó su rol como campeón, con un entrenador arcona y un droide MD, y su patrocinio por parte de Vorne no era totalmente desconocido.

Todo esto formaba parte de la nueva conspiración de Vorne para su comercio ilegal de órganos. Cualquier contendiente que quisiera subirse a la Pista tendría que firmar un contrato concediendo a la Corporación Reuss, y por tanto a Vorne, los derechos funerarios sobre su cadáver si moría en combate. Vorne tenía un "rebanador" que podía manipular remota y discretamente los escudos de cualquiera de los contendientes, bajándolos en el momento clave para que el otro luchador (habitualmente Raine, que estaba en el ajo) acabase con su vida. Vorne de hecho subastaba las entrañas de los luchadores entre clientes adinerados incluso antes del combate; de ese modo, el producto llegaba fresco a sus clientes. Evidentemente, la población general ignoraba cuán corrupto era Vorne.

El Imperio empezó a tambalearse en 4 dbY cuando el emperador murió en la batalla de Endor; mas, aún sin líder claro, el Imperio se resistió a caer. Se escindió en diversas facciones, algunas de ellas en conflicto con otras, y fue incapaz de detener el auge de otra potencia política, la Nueva República, opuesta a muchas de las políticas del Imperio. Aún así, Reuss VIII mantenía su statu quo con el apoyo de líderes imperiales poderosos.

En 6 DBY, la joven reussi Mygo Skinto, una de las Ratas de Óxido, contactó con la Nueva República para informarles de la situación en Reuss VIII. Su informe atrajo la atención del Mayor Bren Derlin, de Inteligencia de la Nueva República. Derlin investigó a Vorne y a sus contactos, descubrió lo extenso de su conspiración e inició una operación para derrocar a Vorne.

Derlin supo que Vorne había vendido los órganos del siguiente contrincante de Raine, el cuasihumano caliano Lobar Aybock. Si Aybock vencía en el combate, sin embargo, Vorne no podría cumplir su trato y se metería en un lío con sus clientes, que incluían al menos a un moff imperial. Derlin viajó a Reuss VIII con una rebanadora propia, la sargento Dansra Beezer, para que impidiese al rebanador de Vorne sabotear el escudo de Aybock; y con un enorme reussi, Tisocco, para la seguridad física de la operación. Derlin aseguró la colaboración de Aybock al aceptar que no influiría en el combate en favor de ninguno de los luchadores.

Sin embargo, Derlin también inició una campaña para perjudicar a Vorne y su gente: Las Ratas de Óxido, organizadas por Skinto, se reunieron en una multitud supuestamente espontánea para animar a Aybock cuando éste hacía una carrera de entrenamiento, pidiéndole autógrafos e intentando tocarle como a un ídolo. Además, la prensa descubrió rumores sobre el comercio ilegal de órganos de la Corporación Reuss y sacaron el tema cuando Aybock entró al estadio; la seguridad del local intentó silenciar este dato, pero Tisocco lo impidió.

Vorne contempló el combate rodeado de sus clientes y sus sicarios, y se sorprendió cuando las cosas empezaron a no salir según su plan. Dedujo la naturaleza del problema, hizo localizar al rebanador adversario y envió a varios matones a acabar con él. La sargento Beezer fue protegida por Tisocco, pero aún así ella se pasó las diez fases de la lucha combatiendo con el otro rebanador. El público pasó a vitorear a Aybock, y no a Raine. Después de la décima fase, Aybock se mantuvo en pie; Raine seguía en pie, pero el árbitro rodiano le declaró perdedor. Vorne se dio a la fuga.

En las dos semanas siguientes, Aybock obtuvo fama y fortuna; Vorne pasó a tener una orden de arresto y varias recompensas por su cabeza. La República suspendió la licencia de operación de la Corporación Reuss, pendiente de una investigación judicial, y tomó el control del gobierno de Reuss VIII para iniciar un plan que devolviese el mundo a sus raíces agrícolas. Skinto lideró el esfuerzo de alivio a los niños locales; y Aybock donó el dinero obtenido en su combate a esta causa.

Tres años después, sin embargo, la Nueva República no podía mantener el control sobre Reuss. Para entonces, un señor de la guerra imperial, el Gran Almirante Thrawn, conquistó un tercio de la galaxia, incluyendo el sistema Reuss, en su ofensiva contra la República. Thrawn falleció en esa campaña en 9 DBY, tras lo cual ninguna de las potencias políticas principales de la galaxia se hizo con Reuss.

En el año 25 ABY, la población de Reuss VIII era de varios miles de millones de habitantes, siendo el mundo más poblado en su entorno.

Ése fue también el año en que estalló la guerra contra los yuuzhan vong, un conflicto en el que Reuss pasó desapercibido. Reuss tampoco fue afectado por la Nueva Guerra Civil Galáctica de los años 40-41 DBY.

En el año 137 DBY, Reuss estaba en el Imperio Sith de Darth Krayt, peligrosamente cerca de dos zonas de influencia del Remanente de la Alianza Galáctica.


Reussi Notorios


 

Tiv "Hurga" Pocarno: Tiv Pocarno, llamado "Hurga", era un contrabandista de armas gruñón y de éxito limitado. Era el capitán y propietario del transporte TL-1800 de Suwantek Llave Rota, un carguero comercial fiable, con un casco robusto y una bodega amplia, pero limitado en escudos, armamento y velocidad. A lo largo de tres décadas de carrera, Pocarno recurrió a técnicos forajidos independientes para realizar mejoras y modificaciones a su nave; esto le llevó a malgastar el dinero a cambio de un servicio mediocre.

En la era del Imperio, Pocarno necesitaba fondos para el caro mantenimiento evolutivo de su nave. No se le ocurrió nada mejor que pedir dinero al principal jefe criminal de Reuss VIII, Torel Vorne. Vorne llevaba a cabo una política de donación de órganos, según la cual Pocarno ponía sus entrañas como aval: Si Pocarno no pagaba su deuda, entonces Vorne podría extirparle órganos valiosos para venderlos. En el proceso, Pocarno tenía muchas posibilidades de morir.

Pocarno esperaba hacer un transporte exitoso que le diese gran beneficio y así pagar la deuda. Lamentablemente, Pocarno metió la pata en ruta a Rampa, en el Sector Corporativo. Vorne encontró a Pocarno y le destripó, vendiendo sus órganos para saldar parte de la deuda. Además, como el montante era insuficiente, Vorne también se quedó la nave de Pocarno. Vorne tuvo que terminar las reparaciones de la nave para poder añadirla a sus activos.



Una TL-1800 Suwantek como la de Pocarno.

Deral Reiko: Este reussi de cabello corto y ojos azules era un criminal especializado en el tráfico de información, activo en tiempos del Imperio Galáctico y la Nueva República.

Al inicio de su carrera, Reiko hizo "trabajos extraños" para Torel Vorne, magnate y jefe criminal del planeta Reuss VIII. Reiko llegó a ser, en cierto modo, el protegido de Vorne.

Cuando Reiko tenía sólo quince años, decidió que la información era la clave para el progreso en cualquier tipo de actividad. A los dieciséis, Reiko decidió dejar Reuss VIII para ser un agente de Vorne fuera del planeta. Los activos de Vorne se beneficiaron del talento del despiadado e hipócrita Reiko para encontrar información oculta.

Pronto Reiko creó su propia agencia de información para cazarrecompensas y criminales. A menudo los sindicatos del Borde Exterior y los mejores mercenarios le contrataban. El propio Vorne también recurría a Reiko a menudo, sobre todo para hacer tratos fuera de Reuss VIII.

Con ropa casual, Reiko daba la imagen de ser un ejecutivo de éxito, aparentemente amistoso de forma implacable; en realidad, no mantenía su palabra si recibía una oferta mejor. Reiko se mantenía en buena forma física de algún modo pero se negaba a hacer ejercicio intensivo regular si podía evitarlo. Llevaba consigo sólo un bloc de datos (que podía encriptar comunicaciones), un comunicador, 3.500 créditos en un vale, y un mero bláster de bolsillo. Excelente estafador y buscador, sabía moverse bien en la calle.

En el año 6 dbY, Inteligencia de la Nueva República supo de una conspiración enorme que incluía a Torel Vorne. El Mayor Bren Derlin investigó a Reiko, lo cual le llevó a descubrir la profundidad de los negocios de Vorne. Derlin inició una operación que llevó a la caída de Vorne, aunque por lo que se sabe, Reiko no se vio perjudicado.

Mygo Skinto: Mygo Skinto era una reussi con aspecto de niña pero vozarrón de adulto. Era una de las Ratas de Óxido, el grupo irregular de niños huérfanos que malvivían en las calles de Reuss VIII durante el mandato de la Corporación Reuss. La vida de las Ratas era tan breve como atroz: La Corporación había convertido el planeta en una pesadilla industrial, esclavizando a los nativos hasta matarlos y desahuciando a sus familias a un ecosistema que requería máscara respiratoria para evitar daños pulmonares graves. Las Ratas de Óxido buscaban alimento y recursos entre las basuras o hurtando discretamente a gente más afortunada.

Skinto, que vestía una camiseta usada del grupo de música Boba Fett y los Androides Asesinos, era consciente de que la Corporación Reuss y uno de sus líderes, el jefe criminal reussi Torel Vorne, mantenían una conspiración continuada en la que controlaban mucho más que los negocios legítimos de Reuss. Vorne llevaba años ejerciendo un truculento negocio ilegal de tráfico de órganos en que sus deudores eran literalmente destripados, y manipulaba los contratos que firmaba para poder ejercer los "arreglos funerarios" en caso de que su empleado muriese en el trabajo, siendo ésta una situación que Vorne se aseguraba de producir.

Corría el año 6 DBY y la galaxia empezaba a cambiar. La Corporación Reuss se había alzado con el apoyo del gobierno galáctico dominante, el Imperio Galáctico; pero en los últimos dos años se había afianzado otro gobierno antiimperial, la Nueva República, que se oponía a muchas de las prácticas establecidas. Skinto contactó con la República para explicarles cuál era la situación en Reuss VIII y hablarles de la trama corrupta de Vorne.

Las palabras de Skinto atrajeron la atención del Mayor Bren Derlin, de Inteligencia de la Nueva República. Hasta ese momento, la República no había sabido cuán corrupta era la Corporación Reuss. La investigación de Derlin corroboró los datos de Skinto. Derlin viajó a Reuss VIII con su equipo, la rebanadora informática sargento Dansra Beezer y el enorme reussi Tisocco, y se reunió con Skinto.

Skinto y sus asociados descubrieron que Vorne había amañado una pelea de boxeo de choque en que el campeón barabel Tull Raine combatía con el aspirante caliano Lobar Aybock. Los escudos reglamentarios de Aybock serían saboteados durante el combate por un agente de Vorne, permitiendo a Raine matar a Aybock. Entonces los valiosos órganos de Aybock se venderían en el mercado negro merced al contrato que Aybock había firmado; Vorne incluso había subastado ya cada pieza.

Derlin planeaba sabotear el plan de Vorne: Beezer era una rebanadora que podía detener al agente de Vorne. Derlin quería que Aybock ganase el combate, o al menos que sobreviviese a él. Eso metería a Vorne en un gran aprieto cuando no pudiese complacer a sus clientes. En el proceso, Derlin esperaba mejorar la reputación de Aybock y convertirle en un héroe local.

Derlin y su gente, incluida Skinto, se metieron en una furgoneta speeder y allí se reunieron con Aybock. Como Aybock no estaba muy por la labor de reunirse (Su agente, el chevin Eedund Cus, le había convencido para que abandonase el planeta), "capturaron" al médico gungan de Aybock, apodado "Costuras", para asegurar la reunión. Una vez en la furgoneta, Derlin explicó su plan, con Skinto participando en la conversación. Pese a la reticencia de Cus, Aybock aceptó las condiciones de Derlin sólo si Derlin se comprometía a asegurar una pelea justa (Es decir, que Beezer no sabotease los escudos de Raine).

Antes de dejar salir a Aybock, Derlin confirmó que, al amanecer del día siguiente, antes de ir a la pelea, Aybock cumpliría con su rutinario paseo matinal, y se aseguró de que Skinto lo oyese. Así, Skinto pudo avisar a las otras Ratas de Óxido y organizar una "espontánea" muestra de apoyo: Cuando Aybock salió a correr, docenas de niños en trajes sucios e incompletos, con máscaras de segunda mano, se unieron a Aybock corriendo a su lado y vitorearon su nombre. Algunos niños, sonriendo, intentaban tocar los brazos de Aybock y le pedían autógrafos. Skinto contempló la escena desde la lejanía y, cuando vio que Aybock la miraba, levantó los pulgares, también sonriendo tras su máscara de respiración.

El combate tuvo lugar en el local Colmillo Roto, al cual Skinto aparentemente no tenía acceso. Aybock prevaleció ante Raine, derrotándole para sorpresa y desespero de Vorne. Añadiendo a esta injuria los otros aspectos del plan preparados por Derlin, incluyendo la difusión de los negocios ilegales de Vorne ante la prensa, el jefe criminal se dio a la fuga mientras Aybock era aclamado.

Dos semanas después, la Nueva República había abierto una investigación judicial a la Corporación Reuss y tomado el control del gobierno de Reuss VIII. Mientras el gobierno intentaba desindustrializar el planeta para volver a sus orígenes agrícolas, Skinto lideraba el esfuerzo de alivio a niños. Aybock donó el dinero ganado en la pelea a las Ratas de Óxido, pese a las protestas de Cus y Costuras.

Este episodio, incluyendo la intervención de Skinto, fue narrado en las memorias de Lobar Aybock.

Tisocco: Este enorme y corpulento reussi de cabeza rapada trabajaba para el Mayor Bren Derlin de Inteligencia de la Nueva República en el año 6 dbY. Experto en seguridad física, Tisocco llevaba un enorme poncho que parecía adecuado para ocultar armas personales, además de gafas protectoras para la lluvia ácida del planeta. Tisocco era silencioso la mayor parte del tiempo, y a menudo ni siquiera revelaba su nombre.

En 6 dbY, Derlin viajó al planeta Reuss VIII con un plan para destronar al jefe criminal local Torel Vorne. Vorne había amañado una pelea de boxeadores de choque de modo que los escudos de uno de los luchadores, Lobar Aybock, sufriesen un fallo crítico durante la pelea (En realidad, un sabotaje causado por un agente de Vorne). Esto permitiría a Vorne vender los órganos de Aybock a clientes importantes. Derlin iba acompañado de la Sargento Dansra Beezer, experta rebanadora cuya misión era frustrar al rebanador de Vorne; así, cuando Aybock venciese el combate, Vorne quedaría en evidencia.

Derlin, Beezer y Tisocco se reunieron con su contacto local en Reuss VIII, la Rata de Óxido Mygo Skinto, y todos juntos entraron en una furgoneta speeder. Queriendo reunirse con Aybock, Derlin hizo que Tisocco coaccionase al médico de Aybock, el gungan "Costuras", para que subiese a la furgoneta. Eso animó a Aybock y a su entrenador, el chevin Eedund Cus, a subir y comportarse. En cuanto entraron, Tisocco cerró la escotilla, la furgoneta se movió, y Derlin y sus asociados explicaron el plan a Aybock. Aybock aceptó anular el "amaño" de Vorne y pelear limpiamente contra Raine. Tisocco no dijo ni una palabra, pero abrió la puerta para dejarles salir.

Al día siguiente, cuando Aybock entró en el local Colmillo Roto para el combate, Tisocco ya estaba dentro. La periodista Fionna Flannis preguntó a Aybock sobre los rumores de que Vorne estaba implicado en un mercado ilegal de órganos (rumores que habían llegado a oídos de ella gracias a Derlin). Un enorme defel, guardia de seguridad del local, intentó arrebatar el micrófono a Flannis; pero Tisocco empujó al defel con un aturdidor manual.

La pelea de diez fases empezó, y la gente de Vorne pronto comprendió que algo iba mal: En la cuarta fase, el escudo de Aybock no había caído. Vorne rastreó el origen de la interferencia y envió al defel y a dos matones a ocuparse de su nuevo enemigo. El defel encontró a la sargento Beezer, pero Tisocco estaba de guardia protegiéndola. Tisocco se enfrentó al defel y sufrió una herida en su hombro, pero logró parar al enemigo. Eso permitió a Aybock vencer en el combate, un detonante que provocó la huida de Vorne y, en un plazo breve, la suspensión de operaciones de la Corporación Reuss mientras la República tomaba el control del planeta.

Dos semanas después de la pelea, Derlin contactó con Aybock y le informó de los detalles de lo sucedido. Explicó cómo Tisocco había ayudado a Beezer. Aybock no había sabido el nombre de Tisocco hasta ese momento, pero lo incluyó en sus memorias.


Torel Vorne


 

Torel Vorne era un despiadado jefe criminal reussi nativo de Reuss VIII y posiblemente la persona más poderosa en Reuss VIII durante el Imperio Galáctico.

Su aspecto era sorprendentemente discreto: Vorne era un humanoide bajito de piel azul y cabello oscuro, fibroso y desaliñado que empezaba a escasear. Vestía siempre ropas holgadas, demasiado grandes para su talla y afirmaba no estar especialmente preocupado por su aspecto; no era presumido en ese sentido.

Otros aspectos de su presencia eran más cuidados: Vorne siempre llevaba una inasequible máscara de respiración cuando se reunía con alguien o cuando estaba en exteriores; después de todo, Reuss VIII era un mundo muy contaminado en el que salir sin tal protección podía causar daños graves permanentes. También llevaba consigo un bláster de bolsillo SoroSuub Q-2, oculto en su manga izquierda (pese a que Vorne no era en absoluto un buen combatiente). La mirada de Vorne tenía su punto inquietante: Sus ojos azules y llorosos nunca parecían parpadear.

Vorne era un jefe criminal interesado en el beneficio de cada transacción, no en la naturaleza del intercambio. Sus habilidades estaban orientadas en ese sentido: Vorne sabía negociar, tasar, intimidar, mandar y administrar. No era en absoluto un guerrero, un piloto o un técnico: Para eso estaban sus sicarios.

Torel Vorne trabajaba para la Corporación Reuss, que daba empleo a casi toda la población remunerada de Reuss VIII. Vorne era excepcional en este sentido: Por norma general, la Corporación explotaba a sus empleados, condenándoles a una vida de práctica esclavitud en condiciones de penuria mientras subía los precios de artículos de primera necesidad. Vorne, sin embargo, no era explotado: Vorne era influyente, se enriquecía y explotaba a los otros empleados de la Corporación hasta acabar con sus vidas. Eso provocaba una abundancia de huérfanos sin recursos, expulsados de sus hogares para que malviviesen en las calles. Estas personas, las llamadas Ratas del Óxido, eran más que despreciables para Vorne.

El poder de Vorne no se restringía sólo a Reuss VIII, su base de operaciones, sino que alcanzaba todo el sector Portmoak. Vorne mantenía contactos con el cártel criminal más poderoso de la zona, una alianza de organizaciones criminales conocida como los Mandroxanos con los que hacía frecuentes negocios. Vorne también había ayudado a convertir Reuss VIII en una escala para el tráfico de bienes ilegales desde Especia Términus hasta los Mundos del Núcleo por la Ruta de Especia de Llanic: Gracias a Vorne, las regulaciones de las aduanas reussi se habían "distendido".

Cuando el Imperio Galáctico concedió a la Corporación Reuss el control sobre Reuss VIII, ésta industrializó el planeta, destrozando el ecosistema y las condiciones de vida de los habitantes en favor de la producción. Sin embargo, ni siquiera así podía competir con otras empresas mayores, y estaba perdiendo dinero. Vorne ofreció una alternativa viable a la Corporación: La política de donación de órganos. La idea era que un ciudadano (reussi o no) agobiado por sus deudas tenía la opción de vender uno o más de sus órganos a la Corporación, esto es, a Vorne. Así podría obtener unos cientos de créditos por un órgano poco relevante, o varios miles, hasta docenas de miles, por un órgano vital no duplicado como el corazón o el estómago. La alternativa podía ser enfrentarse a recaudadores violentos en la nómina de Vorne.

Nadie sabía exactamente qué había motivado a Vorne a iniciar este sistema truculento, pero era cierto que existía un mercado de órganos en el Núcleo Galáctico debido a la escasez de donantes: Los centros médicos pagaban bien por este producto, y algunos ciudadanos privados pagaban aún más a cambio de disponibilidad, sin hacer preguntas. Además, los órganos reussi eran rechazados muy rara vez debido a su gran adaptabilidad. La Corporación incentivaba a los reussi a pasar por quirófano a base de subirles el coste de la vida mientras mantenía estables sus sueldos hasta que se endeudaban, y entonces Vorne les hacía una oferta.

El procedimiento de donación de órganos era oficialmente eficiente y bien gestionado, al menos en lo que respectaba a los ingresos de Vorne. Sin embargo, los cirujanos que extraían los órganos a menudo eran chapuceros y causaban daños adicionales a los pacientes.

A lo largo de la historia, la política ofrecía una variedad de opciones. Un cliente podía ofrecer un órgano a cambio de una cantidad de efectivo o de la cancelación de una deuda con Vorne, en cuyo caso el órgano era extraído inmediatamente, dando opción a un injerto cibernético. Otras personas ponían sus órganos como aval de un crédito, y sólo si no conseguían retornar un pago parcial, Vorne y la Corporación se incautaban de sus entrañas y de otros activos que pudiesen tener. En algunos casos, se decía que el donante sacrificaba en la práctica su vida para que sus hijos viesen el dinero, pero entonces la Corporación, con malas artes, modificaba las condiciones y condenaba a la nueva generación a ser meros trabajadores endeudados y/o futuros donantes.

Uno de los donantes de Vorne fue el traficante de armas reussi Tiv "Hurga" Pocarno, capitán del destartalado carguero Suwantek TL-1800 Llave Rota. Tras décadas de trabajo, Pocarno necesitó dinero para hacer costosas modificaciones y mejoras a su nave, y decidió solicitar un préstamo a Vorne. Pocarno esperaba recuperar su inversión en una operación exitosa en ruta a Rampa, pero fracasó, quedó endeudado con Vorne y éste le sometió a su política de donación de órganos. No sólo eso, sino que Vorne se quedó también con su nave, lo único que le quedaba a Pocarno.

Con el fin de amortizar su adquisición, Vorne tuvo que terminar las mejoras en la Llave Rota. El vehículo era fiable, tenía una bodega grande y un casco robusto, pero sus escudos, armamento y motores eran muy limitados. Vorne hizo que le instalasen unas armas ilegales con sistemas de puntería automatizados (pero por debajo de la media) y escudos extraídos de una cañonera imperial. Los motores pasaron a proporcionar alta velocidad, pero las modificaciones convirtieron el sistema en un laberinto de cableado que dificultaba su mantenimiento.

No todos los empleados de Reiko estaban en situaciones tan apuradas: El reussi Deral Reiko, de niño, había empezado a trabajar para Vorne haciendo "trabajos extraños" y se convirtió en una especie de protegido del jefe criminal. En su adolescencia, Reiko decidió que la información era la clave del éxito y, a los dieciséis, se convirtió en uno de los agentes de Vorne fuera de Reuss VIII. Pronto Reiko demostró su valor para Vorne, sobre todo a base de encontrar secretos de otras personas. Con el tiempo, Reiko montó su propio negocio criminal de venta de información: Seguía trabajando para Vorne cuando éste le contrataba, pero tenía también otros clientes.

Existía en Reuss VIII un local nocturno llamado Colmillo Roto. Regentado por Gorge y Greel, hermanos gamorreanos y ex-esclavos fugitivos, el Colmillo era en realidad los restos varados de la nave Colmillo de Tolan, que los gamorreanos habían robado a su amo sólo para que se estrellase en Reuss VIII poco después. El local ofrecía bebidas y alimento, atmósfera respirable y sobre todo entretenimiento en forma de combates casi sin reglas en el foso llamado la Pista Dool. Pese al ambiente peligroso, la seguridad era considerable precisamente porque los luchadores y exluchadores disuadían a muchos buscalíos. Se rumoreaba (o eso decía el tahúr coreliano Cohden K'rey) que Vorne era uno de los inversores de este negocio, y poca gente osaba buscarse problemas con él.

Hasta que un día llegó alguien lo bastante osado. Un cazarrecompensas tolanés, posiblemente el ex-amo de Gorge y Greel, arrasó el Colmillo Roto y acabó con los gamorreanos.

Después de eso, Vorne de algún modo recogió el arrendamiento del local y, como único jefe, lo remodeló y lo convirtió en un negocio más respetable (Es decir, demasiado caro para los reussi). Uno de los guardias de seguridad más imponentes del nuevo Colmillo era un enorme defel, posiblemente el asesino Zomil, que había sido luchador en Dool hasta el incidente.

Vorne también cambió el estilo de lucha en la Pista Dool: En vez de los combates combinados con o sin armas, el Colmillo organizaba combates de boxeo de choque, perfectamente regulado: Dos combatientes se golpean con unos guantes especiales que lanzan descargas eléctricas, intentando sobrecargar el escudo del rival, durante diez fases de dos punto cinco minutos cada una, con un descanso de un minuto entre ellas. Los luchadores tenían acceso a un refrescador para ducharse y a una holocaja para entrenamientos.

El campeón reinante por entonces era el barabel Tull Raine, que ya había sido el favorito local en las peleas en tiempos de Gorge y Greel. Desde que Vorne tomó el control, Raine nunca perdió un combate… porque Vorne amañaba los resultados. Un rebanador a las órdenes de Vorne se aseguraba de bajar el escudo del contrincante de Raine en el momento justo durante el combate, y eliminaba las defensas de éste, permitiendo que Raine le asesinase de forma legítima. Vorne hacía esto para poder proporcionar órganos frescos a sus clientes; de hecho, Vorne subastaba las piezas en privado antes incluso de los combates, para que los clientes recibiesen el "producto" fresco. Los luchadores que quisieran subir a la cuña tenían que firmar un contrato en que cedían a la Corporación Reuss el control de los arreglos funerarios en caso de deceso.

Por supuesto, muy poca gente sabía realmente hasta dónde llegaban los tentáculos de Vorne. En general sólo se sabía que Vorne era dueño de un porcentaje de Raine, pero casi nadie conocía sus intereses en el mercado de órganos, excepto sus clientes. Sólo unos pocos se habían dado cuenta de la cláusula funeraria de los contratos, siendo uno de éstos el nuevo camarero jillsariano del Colmillo, y agente secreto rebelde, Resik.

En el año 6 dbY, algunas cosas empezaron a cambiar. Vorne contrató al luchador caliano Lobar Aybock para enfrentarse a Raine, y rápidamente subastó en secreto sus partes; el Moff Ammar del Imperio se llevó los pulmones. Era una excelente oportunidad porque Aybock era el primer cuasihumano que Vorne subía a la cuña.

Mientras tanto, la situación política de la galaxia empezaba a cambiar. El Imperio Galáctico empezaba a perder terreno ante un gobierno democrático alternativo, la Nueva República. Una reussi líder de las Ratas del Óxido, Mygo Skinto, informó a la República de la situación insostenible de Reuss VIII y atrajo el interés del Mayor Bren Derlin, de Inteligencia de la Nueva República. Derlin investigó a Reiko, el asociado de Vorne, y descubrió la enorme conspiración entre Vorne y la Corporación Reuss. Derlin organizó una operación para poner en aprietos a Vorne: Si Derlin conseguía que Raine perdiese un combate, entonces Vorne no podría vender los órganos del luchador perdedor, y se metería en aprietos con sus poderosos clientes.



El combate que hundió a Torel Vorne.

Derlin reclutó a una rebanadora neorrepublicana, la sargento Dansra Beezer, para los aspectos técnicos; y a un enorme guardaespaldas reussi, el silencioso Tisocco, y fue a Reuss VIII. Por entonces el entrenador chevin de Aybock, Eedund Cus, había descubierto el tráfico de órganos y había convencido a Aybock para huir del planeta; Derlin se reunió con el luchador y su equipo, les explicó su plan para evitar el amaño, y les convenció para quedarse y luchar cuando, a instancias de Aybock, aceptó que la pelea fuese justa (Esto es, que la República no amañaría el resultado en favor de Aybock).

Skinto también organizó una seudo-espontánea muestra de apoyo público de las Ratas de Óxido hacia Aybock, para promocionar a Aybock como héroe local, la mañana previa al combate. Además, cuando Aybock llegó al Colmillo, la prensa había sido informada sobre rumores de que Vorne estaba implicado en tráfico ilegal de órganos, e intentaron preguntar a Aybock al respecto (Éste no hizo comentarios). El defel de seguridad, oyendo esto, intentó deshacerse de la fisgona reportera Fionna Flannis; pero Tisocco le interceptó a tiempo.

Mientras tanto, Vorne se sentaba en posición privilegiada para contemplar el combate junto con algunos de sus sicarios y sus adinerados clientes. El combate empezó con vítores para ambos contendientes, sobre todo Raine. Cuando el rebanador de Vorne intentó desactivar los escudos de Aybock, la sargento Beezer anuló esa orden. Durante toda la pelea, Beezer y el agente de Vorne se enfrentaron desde sus teclados.

Al llegar a la cuarta fase de la pelea, no se veía una clara victoria de Raine, siendo el barabel acaso el primer sorprendido. Varios de los clientes de Vorne, en su misma mesa, se enfadaban con él. Vorne hizo rastrear la señal de Beezer y envió a su defel y a dos matones a ocuparse de este enemigo; pero Tisocco protegió a Beezer. Mientras tanto, un agente de Vorne recriminaba a Raine y a su entrenador arcona por no prevalecer.

Durante la décima y última fase, Vorne de pie, temblaba totalmente desconcertado bajo la mirada avinagrada de Ammar: Sabía que, si Aybock sobrevivía a la pelea, él, Vorne, estaba acabado. Además, el público estaba vitoreando a Aybock, no a Raine.

Cuando terminó la pelea, el árbitro rodiano dio la victoria a Aybock; Raine se retiró a su rincón ayudado por su equipo y, cuando llegó, Vorne y su séquito habían desaparecido de su mesa.

Dos semanas después, Derlin informó a Aybock de algunos resultados de su éxito. En concreto, la Nueva República había suspendido la licencia de las corporaciones reussi para operar en su territorio, a la espera de una investigación judicial; y además Vorne estaba huyendo de una orden de arresto y al menos tres recompensas.

La caída de Vorne fue narrada en la biografía de Aybock, Puños Iónicos: Memorias de un Campeón de Boxeo de Choque, publicado por Perspectus Transgaláctica.


Curiosidades


 

Reuss VIII y los reussi aparecen por primera vez en el libro Galaxy Guide 9: Fragments from the Rim (1993, Simon Smith y Eric S. Trautmann) para el juego de rol de West End Games. El libro no incluye reglas específicas para crear personaje reussi, pero da varios ejemplos con las fichas de Vorne y Reiko. Incluye también reglas para el sistema de donación de órganos de Vorne y para los daños sufridos por exponerse a la atmósfera polucionada de Reuss, así como el primer dibujo de un reussi, de la pluma de Mike Vilardi.

Los reussi serán mencionados después en otros libros de rol de West End Games, incluyendo Cracken's Rebel Operatives (1994, Paul Balsamo et al.), Galaxy Guide 11: Criminal Organizations (1994, Rick D. Stuart), The Truce at Bakura Sourcebook (1996, Kathy Tyers y Eric S. Trautmann), Stock Ships (1997, Pablo Hidalgo et al.) y Wretched Hives of Scum & Villainy (1997, Paul Donner). Este último libro reproduce las tablas de datos planetarios y las reglas de daños por polución vistos en Galaxy Guide 9, además de ofrecer nueva información.

Una década después, los reussi debutan como personajes en el relato breve Fists of Ion (2008, Ed Erdelac, ilustraciones de Cat Stagg) publicado en la web oficial Hyperspace (retirado desde entonces). Fists of Ion representa un extracto de la inminente autobiografía de Lobar Aybock, "Puños Iónicos: Memorias de un Campeón de Boxeo de Choque".

El planeta Reuss aparece en los mapas de The Essential Atlas (2009, Jason Fry y Daniel Wallace) y Star Wars: Edge of the Empire Core Rulebook (2013, Sterling Hershey); y se menciona en el artículo "Take Me Out to the Ball Game: Sports in the Star Wars Galaxy, Part 2" publicado en 2014 en el blog de Tim Veekhoven y Sander De Lange.

Hay un par de irregularidades de continuidad en estas fuentes. La primera es relativa al momento en que las corporaciones empezaron a cargarse el ecosistema de Reuss VIII: Según Galaxy Guide 9, los gigantes industriales de la Antigua República devastaron el planeta durante siglos. Según Fists of Ion, sin embargo, Reuss VIII era un mundo granja cuando el Imperio Galáctico tomó el control del planeta, apenas dos décadas antes de la batalla de Yavin, y sólo tardaron ese tiempo en destrozar el planeta.

El otro problema es relativo a la política de donación de órganos de Vorne. Según Galaxy Guide 9, el sistema parece ser vender un órgano a cambio de dinero, entonces un cirujano extrae el órgano al donante, y el donante no sufre más secuelas que posibles complicaciones en una operación insegura. Stock Ships da a entender que el donante ofrece su órgano como aval parcial de una deuda a cambio de liquidez y, si la deuda es adecuadamente pagada, entonces el donante retiene su órgano. Según Fists of Ion, es todo un engaño: Vorne promete al donante dinero que llegará a su herederos, pero la víctima siempre muere en la mesa de operaciones y los herederos nunca ven el dinero.

Wretched Hives menciona una idea de aventura en que el cazarrecompensas tolanés Var'Rotha Fin'Rotha ataca el Colmillo Roto con el fin de asesinar a Gorge y Greel, y dispuesto a matar a cualquiera que se interponga; pero no menciona el final de la aventura. Fists of Ion, que tiene lugar después, habla de un momento en que un cazarrecompensas tolanés mata a los dueños originales del Colmillo Roto (que según Wretched Hives son Gorge y Greel) y después vuela el local. En esta historia no se da el nombre del tolanés, pero este artículo asume, razonablemente, que debe ser Fin'Rotha, y que el ataque es una referencia a los eventos mencionados en Wretched Hives.



© S I T H N E T

Sección creada por Skippy Farlstendoiro y Al Noah para SithNET
Prohibida la reproducción total o parcial sin el consentimiento de los autores.

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