LOS ANZATI

Articulo creado por Skippy Farlstendoiro y maquetado por Al Noah, los xenobiólogos de SithNET
Prohibida la reproducción total o parcial sin el consentimiento de los autores
| Introducción | Miembros notorios | Volfe Karkko | Dannik Jerriko |

Introducción - Presentación


 
"Beberé la esencia de esos otros Jedi y escaparé de esta tumba" (Volfe Karkko)

La leyenda popular habla de los anzati (forma plural de la palabra anzat) como unos demonios que utilizan los adultos para asustar a los niños. Al alcanzar la madurez, la mayoría de los habitantes de la galaxia concluyen que los anzati son criaturas mitológicas y dejan de creer en ellos. Excepciones a esta regla son los pocos desafortunados que se encuentran con un anzat; muchos menos todavía sobreviven a este encuentro para contarlo.

Los anzati existen. Son seres de aspecto humanoide y gran inteligencia que aprovechan su inmenso parecido con los humanos para acercarse a sus presas. De hecho, y con unas pocas excepciones biológicas, el aspecto de un anzat es prácticamente igual al de un humano.

La más notable de estas diferencias es que los anzati ocultan en sus mejillas unas probóscides que pueden desenrollar para insertar en las fosas nasales de sus víctimas. Las probóscides entran en las fosas nasales de la víctima para avanzar hacia su cerebro, donde consumen la materia gris propiamente dicha y todas sus energías vitales, sin dejar una sola marca. Los anzati denominan "sopa" a este alimento.

Ciertas teorías no confirmadas sugieren que esta "sopa" está también relacionada con el concepto coreliano de "suerte", de modo que, aún si la víctima lograse sobrevivir al encuentro, resultaría menos afortunada en el futuro. Debido a que los anzati son muy discretos y a que sus víctimas rara vez sobreviven, ha sido imposible confirmar esta teoría.

Aparentemente, los anzati pueden oler o detectar de algún modo la sopa de sus víctimas, para ver cuál sería más apetecible. Los jedi podrían ser capaces de ocultar la intensidad de su "sopa" a los anzati utilizando alguna disciplina institiva.

Algunas especies feroces de anzati tienen la habilidad de extender largos tentáculos parecidos a cuerdas que utilizan para envolver a sus víctimas, atrapándolas para alimentarse después de ellas. Los anzati que carecen de esta capacidad han mostrado sin embargo algún tipo de capacidad sobrehumana de hipnosis telepática, que les permite paralizar a víctimas mucho más fuertes que ellos.

Aparentemente, los anzati pueden oler o detectar de algún modo la sopa de sus víctimas, para ver cuál sería más apetecible. Los jedi podrían ser capaces de ocultar la intensidad de su "sopa" a los anzati utilizando alguna disciplina institiva.

Algunas especies feroces de anzati tienen la habilidad de extender largos tentáculos parecidos a cuerdas que utilizan para envolver a sus víctimas, atrapándolas para alimentarse después de ellas. Los anzati que carecen de esta capacidad han mostrado sin embargo algún tipo de capacidad sobrehumana de hipnosis telepática, que les permite paralizar a víctimas mucho más fuertes que ellos.

Aparentemente, los anzati pueden oler o detectar de algún modo la sopa de sus víctimas, para ver cuál sería más apetecible. Los jedi podrían ser capaces de ocultar la intensidad de su "sopa" a los anzati utilizando alguna disciplina institiva.

Algunas especies feroces de anzati tienen la habilidad de extender largos tentáculos parecidos a cuerdas que utilizan para envolver a sus víctimas, atrapándolas para alimentarse después de ellas. Los anzati que carecen de esta capacidad han mostrado sin embargo algún tipo de capacidad sobrehumana de hipnosis telepática, que les permite paralizar a víctimas mucho más fuertes que ellos.

Éstas son las únicas diferencias perceptibles a simple vista entre un anzat y un ser humano normal. Los anzati parecen por lo demás seres humanos, normalmente altos y desgarbados. La altura media registrada para un anzat ronda 1.70 m.

Sin embargo, internamente son muy distintos a los humanos. En primer lugar, no parecen tener un ritmo biológico propiamente dicho. Un anzat simplemente "es", sin envejecer visiblemente en muchos siglos, y aparentemente con la capacidad de vivir indefinidamente salvo por muerte violenta. Ni siquiera duermen como la mayoría de las especies, cuando el agotamiento se lo ordena, sino que entran en un estado cuasi comatoso cuando ellos lo eligen conscientemente. Un anzat alcanza la pubertad aproximadamente a los cien años, momento en el que abandona su planeta para cazar su "sopa", y un milenio después sigue viviendo sin problemas.

Respecto al susodicho planeta natal de los anzati, conocido como Anzat, no es un lugar turístico particularmente visitado. Los propios anzati sólo vuelven allí después de marcharse para encontrar cónyuges y reproducirse, y ni siquiera esto lo hacen a menudo. La localización exacta de Anzat es otro misterio aunque, de los exploradores y científicos que han viajado a cualquiera de los varios planetas identificados como Anzat, ninguno ha regresado jamás.

Existe una lengua anzat que utilizan los anzati en las raras ocasiones en las que varios anzati se reúnen (puesto los anzati suelen ser vagabundos solitarios). De esta lengua sólo conocemos una palabra, fillip, que se utiliza para describir un placer simple.



Un varón anzati con sus probóscides desplegadas

En la galaxia, los anzati son relativamente conocidos, pero poca gente toma en serio su leyenda. Existen términos de argot para referirse a los anzati, como pillacráneos o vampiros de hocico, siendo este último un término muy despectivo.

Sin embargo, también hay gente que está familiarizada con los anzati, y que incluso trata con ellos habitualmente y consigue retener su "sopa". Históricamente, se conoce el caso del jefe criminal Nogga el Hutt, también conocido como Nooga el Hutt, Norgo el Hutt y Walla el Hutt. Este hutt, comoquiera que se llamase, había adquirido o recibido como obsequio una esclava capturada por los piratas sennex, una niña llamada Aurra Sing, que había sido padawana de la jedi llamada Dama Oscura. Sing odiaba a su antigua maestra porque creía que ésta la había rechazado, y a los jedi en general por extensión.

Nooga el Hutt reconoció el potencial de Sing como asesina, y la envió con unos asesinos anzati que le debían un favor para que la entrenasen. Entre estos anzati que se encontraban Anis y Torgo Tahn. Los anzati le implantaron un bioordenador rhen-orm en su cráneo para incrementar su capacidad mental, y la adiestraron para convertirla en una hábil asesina y el brazo armado de Nooga.

Convirtieron a Sing en un cíborg para superar las deficiencias de lo que ellos llamaban "una especie más débil", pero ellos mismos se sorprendieron de lo fácilmente que Sing se adaptaba, tanto a la caza como al asesinato, por no hablar de la mentalidad amoral que facilitaba ambas cosas. Cuando terminaron de entrenarla, los anzati enviaron a Aurra con Nooga. Ella asesinó rápidamente al hutt, y después se convirtió en una temible cazarrecompensas y asesina especializada en el asesinato de jedis gracias a los anzati.

En la actualidad, la localización de Anzat sigue siendo un misterio, y mucha gente se pregunta qué serían capaces de hacer los anzati si se organizasen mejor.


Miembros Notorios


 
"Si sobrevive a mis enseñanzas será la bailarina más mortal" (Anis)

Anis: Era un famoso asesino anzati que aceptó entrenar a la joven Aurra Sing, que entonces era tan solo una bailarina, para que puediese servir a Walla el Hutt. Si aceptó el encargo, pese a que la joven no era anzati, fue unica y exclusivamente porque tenía una gran deuda con el Hutt y aunque no se arripintío de su acción nunca más entrenó a alguien que no fuese de su especie.



Anis con su "amigo" Walla el Hutt

Anis vivió muchos años y fue un gran líder para los anzati, hasta que fue asesinado por Torgo Tahn en un acto vil que puso precio a la cabeza de este que, curiosamente, fue cobrada por Aurra Sing aunque desconocemos si se trató de un trabajo más para esta asesina o se trató de un postrero servicio a su primer maestro.

Nota: Este personaje aparece en el comic "Aurra's Song".

Nikkos Tyris:Tyris fue un Caballero Jedi caído de origen anzati que, tras participar en la Batalla contra Bando Gora, se ocultó con sus seguidores en la luna de Susevfi. Allí encontraron un libro escrito por Larad Noon, otro Jedi caído que se había ocultado en esa misma luna tras la "Guerra Sith", y tomando como base lo allí expuesto crearon una organización a la que llamaron Jensaarai.

El nombre era una palabra Sith que significaba, al menos según constaba en el libro, "Integrado en la sombras" y sus miembros crearon una filosofía propia que se separaba tanto de las ideas Jedi como de las ideas Sith. El origine de este batiburrillo de pensamientos estaba tanto en lo escrito por Noon como en le contenido de un holocrón robado por el Conde Dooku al que Tyris había tenido acceso y en el que se decía que los Jedi habían copiado y subvertido las enseñanzas Sith.

Saarai-kaarAunque el domino de la Fuerza de los anzati no se podía comparar al de los Jedi contaban con armaduras de cortosis, un material resistente a la energía de los sables de luz, obtenido del estudio de la armadura de Noon, encontrada junto al libro, y eso los hacía dignos de respeto.

Poco después de la famosa "Batalla de Praesitlyn" los Jedi Najaa Halcyon, Ylenic It´kia encontraron el campo de entrenamiento de los Jensaarai y trataron de detener a los líderes que los guiaban. It'kia, que bautizó a Tyris con el nombrd de "Sudor Nocturno" porque ser ese el aspecto físico que se le antojaba que tenía su rival, fue derrotado por este que le atravesó el pecho con su sable.

Antes de morir It'kia uso la Fuerza para absorber la energía del sable de Tyris y la usó para crear con una proyección parecida a un puño con la que aplastó a Tyris y la muerte de este y la de otros grandes líderes anzati hizo que el edificio se derrumbase matando a casi todos los miembros del grupo. Saarai-Karr, la aprendiza de Tyris (ver imagen) fue una de las pocas que sobrevivió y la encargada de guiar a los Jensaarai heredando el título de "Guardián de la Verdad" de su maestro.

Torgo Tahn: Este anzati intentó capturar a Aurra Sing después de que, al inicio de la carrera de este como cazarrecompensas, se pusiera precio a su captura y aunque nucan lo reconoció abiertamente se sentía físicamente atraído por la cazadora y pensaba, erróneamente, que el sentimiento era recíproco.

Tahn encontró a Aurra Sing por primera vez cuando esta fue confiada a los anzati por Walla el Hutt, que quería que la entrenasen como asesina y aunque estos no entrenaban a nadie que no fuese de su especie Anis, que le debía un gran favor al Hutt la había tomado como discípula.



Torgo Tahn trata de huir de los anzati

Tras dar con su localización Tahn mató a Anis y huyó de los anzati, esperando encontrar a Sing y volver a disfrutar su belleza pero los papeles se invirtieron y fue la joven la que lo cazó a él y tras entregarlo a los anzati para que lo ajusticiasen, cobró el precio que se había puesto a su cabeza por el asesinato de Anis.


Volfe Karkko


 
"Otros vendrán y entonces me alimentaré. Oh si " (Volfe Karkko)

KarkkoEste anzati demostró muy pronto tener potencial suficiente para convertirse en un Caballero Jedi y el Alto Consejo debatió durante largas sesiones sobre los pros y los contras de entrenar a un miembro de esa raza. Finalmente Karkko fue admitido entre otras cosas porque nunca se había alimentado de la "sopa" de otro ser.

El joven se reveló enseguida como un ser arrogante y no se ganó la simpatía de sus compañeros y su afición por estudiar los holocrones sobre los Sith hizo que poco a poco se aislase de los demás. En ocasiones manifestaba con orgullo que algunos de los primeros Sith fueron miembros de su especie y, convencido de poder superar el deseo innato de su raza por consumir "sopa", decidió probarse a sí mismo.

Fue así como Volfe Karkko decidió probar "sopa" una única vez, convencido de que no le afectaría sin embargo, cuando quiso darse cuenta, estaba alimentándose frecuentemente de otros seres. Después, y casi como un paso lógico, Karkko empezó también a alimentarse de otros Jedi y descubrió que al hacerlo también conseguía absorber parte de su poder en la Fuerza, y eso le hizo caer en el Lado Oscuro y lo convirtió en una gran amenaza que debía ser neutralizada de inmediato.

No sin mucho esfuerzo el Consejo Jedi consiguió capturar a Karkko y lo encerró en un campo de estasis en el mundo prisión de Kiffex, con su sable de luz apresado en otro campo más pequeño junto a él pero el encierro por desgracia duró poco. En Kiffex existía una población local de anzatis a los que Karkko consiguió alterar mental y físicamente usando la energía del "Reverso Tenebroso".

Karkko con Aayla SecuraLos anzatis, que se referían a Karkko con el nombre de "Aquel que duerme" mataron a Pethros y a Quian Vos, padres del Jedi Quinlan Vos, y guardianes de Kiffex mientras en el lejano sistema Ryloth, Pol Secura borraba la memoria de su sobrina Aayla Secura, padawana del citado Quinlan Vos.

Pol mantuvo a la pobre Aayla encerrada en su harén particular y la atiborró de la especia glitterstin para tenerla controlada sin embargo Vos rastreó a su aprendiza y se enfrentó con Pol que murió cuando su sobrina le empujó accidentalmente desde gran altura. La joven twi'lek escapó de Ryloth para evitar el castigo y, vagando sin rumbo, oyó la llamada de Volfe Karkko y, sin poder resistirse a su influjo, acudió hasta él para despertarle.

T'ra Saa (o Tr'a Saa), la maestra Jedi encargada de proteger Kiffex detectó el resurgimiento de energía del Lado Oscuro del despertar de Karkko y fue a investigar, pero resultó abatida y quedó varada en Kiffex. Después, y una vez recuperado y con completo control sobre los feroces anzati, Karkko tomó a Aayla Secura como su reina y la acicaló para convertirla en una extensión y un reflejo de su poder del Lado Oscuro.

El despertar de Karkko hizo que mucha gente tomase medidas. Tinte Vos, sheyf de los guardianes de Kiffu y prima de Quian Vos, exigió que el Consejo Jedi enviase a Quinlan Vos. El jefe criminal Gorto Zaga, alias Gorto Draga, Gorto Yaga y Gran Yaga, armó a los criminales bajo su mando y les encargó proteger su base de cualquier ataque de los anzati feroces.

En dicha base trabajaba como cocinero el maestro Jedi Zao y cuando se enteró de esto, abandonó el mandil para enfrentarse a Karkko mientras el erudito Jedi de raza baragwin Astaal Vilbum encontraba un holocrón que hablaba del encierro de Karkko en Kiffex y gracias a ello Mace Windu envió a Kiffex no sólo a Vos, sino un equipo completo formado por él mismo, Adi Gallia, Plo Koon y Tholme (cuya misión era inicialmente vigilar a Vos) que al llegar a su destino se reunirían con Zao y T'ra Saa.

Aayla se enfrentó a su antiguo maestro, pero no pudo matarle, así que intentó hacer que los anzati feroces le capturasen para consumir después su "sopa". Vos reveló a Aayla que su tío Pol estaba detrás de su pérdida de memoria y le dijo que había esperanzas fundadas de recuperar sus recuerdos y al oírlo la joven dejó de combatir.



Quinlan Vos parte en dos a Volfe Karkko

Karkko al ver que su "amada compañera" lo abandonaba intentó matar a Aayla pero Vos se interpuso y aunque estuvo apunto de caer en el Lado Oscuro resistió gracias a la ayuda de los otros maestros Jedi presentes, y logró cortar por la mitad a Karkko. Aayla se liberó del lado oscuro, pero no volvió a entrenar con Vos.

Años más tarde uno de los holocrones Sith de Karkko fue el detonante para la caída en el Lado Oscuro de Nikkos Tyris, otro Jedi de raza anzati que tuvo acceso al artefacto con la ayuda del Conde Dooku y que años más tarde fundaría a los Jensaarai.


Dannik Jerriko


 
"Algunos anziti se autocondenan a pequeñas vidas" (Dannik Jerriko)

Jerrikó nacion durante la denominada "Nueva Guerra Sith" y tenería cerca de mil años cuando Palpatine se convirtió en Emperador. Como el resto de miembros de su especie se alimentaba frecuentemente de la "sopa" de otros seres aunque el la llamaba "sopa de vida" y, creyendo que nunca sería apresado mató sin freno para conseguirla.

Dispuesto a sacar partido a sus acciones Dannik se convirtió en asesino y cazarrecompensas a sueldo y no tardó en ganar fama entre los jefes de los bajos fondos que, pese a considerarlo un profesional un tanto caro, lo tenían en gran estima y le ofrecían trabajos de gran importancia y complejidad.

Altivo y orgullo aunque el así lo creyese no era perfecto y uno de sus primeros fallos fue alimentarse de la "sopa" de un sujeto adicto a la nic-i-tina, una droga que se obtiene al quemar hojas de t'bac. Debido a ello Jerrikó también adquirió la adicción, y desde ese día se vio obligado a llevar siempre consigo una pipa, también llamada hookah, con la que fumaba la citada droga. De todos es sabido, y así lo expuso Karkko, que un anzati raramente supera una adicción y esta afición por la nic-i-tina acompañaría a Dannik toda su vida.

Uno de los lugares preferidos de Jerriko era Tatooine pero su presencia allí no tenía relación, como algunos han sugerido, con la supuesta similitud entre el entorno de este planeta y el de su mundo natal. La razón de su presencia allí era que a Jerriko le encanta la gran variedad de "sopa" de sus habitantes, a menudo asesinos, cazarrecompensas y, cuando estalló la guerra contra el imperio, rebeldes, traficantes e informadores.

A esto había que añadirle que Tatooine era un lugar ideal para encontrar gente que precisase sus servicios y uno de sus empleadores más importantes era el líder local Jabba el Hutt aunque este no era el único. Jerriko trabajó también, pese a correr el riesgo de enemistarse con él, para Lady Valarian, una whífida que pretendía hacerse con el imperio criminal del hutt.

Otro de sus clientes habituales, aunque siempre en misiones muy puntueles, fue el prefecto imperial Talmont sin embargo su preferido fue siempre Jabba entre otras cosas porque soñaba con alimentarse de su "sopa" aunque si no lo hizo fue, además de por lo bien protegido que estaba el líder criminal, porque no tenía claro que sus probóscides consiguiesen llegar hasta el cerebro del hutt a través de las fosas nasales.

Dannik Jerriko estaba en la cantina de Mos Eisley, fumando su hookah, el día que Luke Skywalker entró por primera vez momento en el que Kabe, una pequeña ladrona chadra-fan, se planteó si debía intentar robarle algo que no hizo porque al mirar a Jerriko sintió un miedo inexplicable.

Poco después, dos borrachos intentaron empezar una pelea con el joven granjero, y un anciano intervino encendiendo su sable de luz. Jerriko no había visto un hombre así desde hacía años, pero comprendió rápidamente que se trataba de un Jedi y ansió alimentarte de su "sopa".

La única razón por la que no lo intentó fue que comprendió que el viejo era demasiado peligroso para él, pero observó con detenimiento al chico, pensando que, si era el padawan del viejo, podría ser un buen bocado. Al seguir sus pasos vio que la pareja se reunía con un wookiee y un coreliano, y Jerriko se concentró entonces en la "sopa" de este que era la más espesa, caliente y dulce que había olido en mucho tiempo.

La pareja dejó la cantina y Jerriko vio como Solo despachaba a Greedo, un inexperto rodiano cuya "sopa" despreciaba. Al descubrir, gracias a la charla previa entre el corelliano y su victima, que se llamaba Han y que Jabba lo buscaba, vivo o muerto, decidió que debía atraparlo, beberse su "sopa", y entregarle los restos al Hutt. Por desgracia Solo dejó el planeta a toda prisa antes de que él pudiese idear un plan.

Sin saber cual era su destino Jerrikó decidió que lo mejor era esperar a que otro atrapase al corelliano y tratar de hacerse con él cuando fuese traído ante Jabba claro está si su captor optaba por traerlo vivo.

Por fortuna para él pocos días después Lady Valarian le pidió que espiase a Jabba, y el anzat aceptó el trabajo que le permitía obtener unos ingresos por algo que iba a hacer de "motu propio". Por si esto fuera poco el prefecto Talmont le hizo una oferta idéntica y el anzati, con dos sueldos por un mismo trabajo, pudo vivir holgadamente en espera de la llegada de Han Solo.

Su sed debía ser saciada y Jerriko se alimento de la "sopa" de todo tipo de personajes incluyendo a varios sicarios de Jabba. Uno de ellos, al que asesinó sin piedad fue Ak-Buz, el weequay que estaba al mando de la barcaza de Jabba y cuyo cadáver fue descubierto por el cocinero Porcelus quien, para evitar que nadie lo implicase por error lo arrojó a la basura.

Pese a todo los restos de Ak-Buz fue descubierto por otros weequays de Jabba pero como sus métodos de investigación eran sumamente burdos no consiguieron ninguna pista sobre al asesino. No está confirmado pero se cree que Jerriko fue también quien mató a Phlegmin, el pinche de Porcelus, así como a un monje b'omarr que desapareció sin dejar rastro.

La espera de Jerriko tuvo al fin recompensa cuando Boba Fett trajo a Han Solo encerrado en carbonita pero antes de que pudiese urdir un plan para hacerse con él corelliano el intento de rescate que hicieron tanto Leia Organa como Luke Skywalker no le dejó la más mínima oportunidad.

Por fortuna ninguno de los dos consiguió salvar a Solo y cuando los tres fueron condenados a morir en la Fosa de Carkoon Jerriko vio en ello otra oportunidad sin embargo nada salió como estaba previsto y los fugitivos huyeron. Frustrado y ansioso de "sopa" Jerriko decidió que la menos podría alimentarse del hutt y cuando descubrió que este había muerto a manos de Organa intentó asesinar a todos los que pudiese encontrar en su palacio. Una de las víctimas que eligió fue Yarna d'al' Gargan, una bailarina askajiana a la que hipnotizó hablándole en su lengua y aunque esta cayó victima de su influjo mientras la paralizaba fue descubierto por Gartogg, uno de los guardias gamorreanos, que chocó contra él.

Jerriko se desequilibró con el empellón y los probóscides erraron el blanco y, al ver que en lugar de una víctima sumisa ahora tenía dos rivales el anzati optó por escapar hacia la oscuridad. Por temer a se implicada la bailarina no dijo nada pero el gamorreano, pese a no ser muy despierto, dedujo que Jerriko debía ser el verdadero responsable de mucha de las muertes anteriores (Ak-Buz, el pinche, etc) y contó lo sucedido a Ortugg, el jefe de la guardia.



Ilustración de Dannik Jerriko en la cantina de Mos Eisley

Ortugg no creyó a su subordinado pero se dirigió a Mos Eisley llevando consiguo los cuerpos momificados para que fuesen analizados y mientras tanto Jerriko, convencido que no tardaría en descubrirse que era un anzati huyó. Pronto se puso precio a su cabeza y aunque Jerriko siguió trabajando como cazarrecompensas puso mucho cuiado a la hora de aceptar nuevos trabajos y tomó nuevas medidas de seguridad.

Poco se sabe sobre lo que le sucedió después salvo que fue el responsable de la muerte de Domisari, una asesina imperial corelliana que pretendía matar a los hermanos Zak y Tash Arranda, dos humanos oriundos de Alderaan sensibles a la Fuerza que años después se incorporarían al "Praxeum", la academia Jedi montada por Luke Skywalker cuando el Imperio fue derrotado y que supuso el inicio de la "Nueva Orden Jedi".

Tras ese encargo se le perdió la pisa y aunque el precio por su cabeza siguió activo durante años nadie lo cobró ni dio noticia sobre su paradero. Se cree, aunque no se ha podido probar, que cambió su identidad y siguió trabajando bajo el amparo de esta.



© S I T H N E T

Aquí puedes encontrar todas las fuentes consultadas en la elaboración de este artículo.
Sección creada por Skippy Farlstendoiro y Al Noah para SithNET
Prohibida la reproducción total o parcial sin el consentimiento de los autores.

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