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Hohass Ekwesh era un varón thakwaash que vivió en los últimos tiempos del Imperio y en los primeros de la Nueva República. Como todos los thakwaash, Ekwesh era humanoide, velludo, mucho más fuerte que un humano y un mimo con talento; pero medía sólo dos metros de altura, lo cual estaba muy por debajo de la media para un thakwaash. Los hermanos de Ekwesh le apodaron "Canijo", y él tomó ese mote con gracia, aceptando e incluso exigiendo que sus amigos y compañeros le llamasen así aunque estuviesen muy enfadados con él.
Hohass Ekwesh
La ventaja del tamaño de Ekwesh es que le permitía entrar en la cabina de un caza estelar diseñado para seres del tamaño de un humano, y eso le permitió empezar a hacer carrera. Dada su fortaleza física, Ekwesh se hizo piloto militar de combate y comando. Se unió al ejército de la Nueva República después de la batalla de Endor en 4 DBY. Él aprendió combate personal: Su gran fuerza le permitía alzar sobre su cabeza a un luchador humano de ciento treinta kilos que forcejease contra él, o arrancar el brazo a un devaroniano en lo que pareciese un saludo accidental. Combinando esto con entrenamiento específico, Ekwesh aprendió a luchar contra oponentes golpeándoles en zonas concretas de la cabeza o arrojándolos contra paredes cercanas. A veces, la mente de combate personal de Ekwesh le hacía aullar durante las peleas cuerpo a cuerpo.
Como todos los thakwaash, Ekwesh tenía diversas personalidades o "mentes", cada una especializada en una tarea, y cambiaba de una a otra a voluntad para aprovechar estos talentos; esto le llevaba a hablar de sí mismo en primera personal del plural y a utilizar una lógica compleja y enfocar la realidad dando diversos rodeos. Su mente más útil en el trabajo era la que él llamaba "el piloto", un experto en manejo de cazas de combate, muy inteligente, hábil y agresivo que tenía tendencia a enfrentarse al enemigo de modos erráticos, dando vueltas, con maniobras muy peligrosas y efectivas y, sobre todo, desobedeciendo órdenes directas. Además, dejaba de prestar atención para relinchar su grito de guerra, y le preocupaba poco ser derribado. El piloto, una personalidad inestable y a menudo desorientada solía perder el respeto y amistad de sus amigos, ganándose muchas palizas y siendo transferido de una unidad a otra en el Mando de Cazas Estelares de la Nueva República después de diversas expulsiones: Nadie quería trabajar con el piloto. Ekwesh después consideraría que él "se había perdido la pista".
Ekwesh tenía también diversos problemas de adaptación cultural: Le costaba entender algunos chistes característicos del humor propio de los humanos, y le disgustaba escuchar diálogos de holoteatro. Sin embargo, tenía muchos talentos excelentes: Además de su magnífica capacidad de pilotaje especializado en combate aéreo cerrado (quemarropa y esquiva en caza), y de sus dotes como luchador y comando (pese a la dificultad de esconder a alguien tan grande), Ekwesh era un buen astronavegante, un mecánico naval con talento y sobre todo un experto en informática y en telecomunicaciones por la HoloRed. Su tiempo de reacción en combate era muy rápido, y sabía hablar idiomas thakwashi, básico y binario. Tenía un talento latente para ser especialista en comunicaciones que no había pulido con entrenamiento.
Pese a sus problemas para tratar con alienígenas, Ekwesh podía comprender bastante bien las mentes y motivaciones de las personas a su alrededor con cierto talento sicológico, motivarles para atraer su atención y provocar cambios en un intento de atraer a las "mentes buenas" de cada uno, o afectar a la moral de compañeros aún contra su voluntad. También tenía la capacidad de imitar los procesos de pensamiento de un oponente conocido a base de imitar todas las características que conoce de esa persona, incluyendo si hace falta su ego; Ekwesh declaró que este proceso era agotador. Ekwesh tenía experiencia pilotando vehículos como una lanzadera clase Landa o un transporte de combustible, aunque no pilotando TIEs imperiales. Ekwesh tampoco estaba familiarizado con el poco utilizado protocolo de entrenamiento uno siete nueve de la Nueva República.
Corría el año 7 DBY. La Nueva República había arrebatado al Imperio la capital galáctica, Coruscant, y el planeta productor de bacta medicinal, Thyferra, en parte gracias a los esfuerzos del Comandante Wedge Antilles, un humano coreliano al mando del Escuadrón Pícaro. La principal amenaza imperial venía del señor de la guerra Zsinj, cuyos agentes acababan de destruir a todo el Escuadrón Garra de la Nueva República en Gravan Siete, con el comandante del Escuadrón Garra, el también coreliano Teniente Myn Donos, como único superviviente.
Antilles recibió órdenes de unirse a la lucha contra Zsinj. Aprovechando sus victorias, el Comandante Antilles presionó a sus superiores para que le dejasen formar una unidad híbrida de pilotos que fuesen a la vez comandos, y aceptó reclutar a sus miembros entre los fracasados que ninguna otra unidad quería; Antilles y su segundo, Wes Janson, querían dar una nueva oportunidad a esas personas. Antilles exigió que todos los candidatos fuesen voluntarios para posible asignación permanente siguiendo ciertos criterios. Ekwesh cumplía los requisitos y viajó a la base de entrenamiento Folor a entrevistarse con Antilles para esa unidad aún sin nombre, después de haber sido transferido de una unidad a otra verias veces por su mente inestable. Ekwesh no estuvo entre los seis primeros candidatos entrevistados, pero pasó el primer filtro y fue enviado al primer ejercicio de simulación.
En este ejercicio en simulador, Ekwesh recibió el puesto de Oro Dos en un grupo de cuatro personas, con el humano de Sluis Van Kell Tainer como su ala (o escolta de vuelo), Oro Uno; y en la otra pareja del grupo, la humana de Toprawa Tyria Sarkin como Oro Cuatro y el gamorreano genéticamente modificado de Gamorr Voort saBinring como Otro 3. Janson dio las instrucciones: Se acercaban TIEs imperiales escoltando una nave comandante y el Grupo Oro debía mantenerlas lejos de la base mientras dsepegaban los transportes. Janson especificó que se aplicaba el protocolo uno siete nueve, que Tainer y Ekwesh no conocían; saBinring sabía de qué se trataba y se le permitió informar a Sarkin por privado: Para favorecer la cooperación entre aprendices que no habían entrenado mucho juntos, cada piloto recibía puntos de su ala.
Tras derribar un TIE de la primera oleada de cuatro, Tainer intentó tomar el mando, asignando a Oro Tres y Cuatro una revisión de daños en la base mientras Oro Dos, Ekwesh, formaba con él; saBinring derribó a otro y vieron que se acercaban treintaiséis enemigos. Sarkin informó de que los transportes ya no podían abandonar la base por una explosión, y Tainer decidió que podían retirarse o cambiar la misión. Decidió retirarse en cuanto estuvieron a tiro de una fuerza abrumadoramente superior, y así se lo ordenó a Ekwash. Ekwash entonces activó su mente piloto, entró en una ira feroz y, gritando incomprensiblemente, voló hacia el enemigo. Tainer creyó que Oro Dos no podía oírle, y decidió unirse a él como su escolta de ala, dándole soporte en su ataque suicida. Mientras, el caza de Ekwash recibía diversos impactos y su escudo empezaba a fallar mientras él giraba sobre sí mismo y viraba hacia estribor. Ekwash impactó a varios blancos, pero no derribó a ninguno, y mientras tanto él y Tainer sufrían muchos daños, al ser perseguidos por cuatro TIEs.
En cuanto tuvo ocasión, Ekwash preparó otro ataque frontal, pese a que Tainer le indicaba que los cuatro TIEs enemigos se habían dispersado preparándole una trampa. Tainer se ofreció a guiar él en una maniobra más segura, pero Ekwash sólo volvió a gritar, ignorándole, y se lanzó. Tainer estaba decidido a intentar salvarle y preparó torpedos de protones: Cuando los cuatro TIEs vapulearon el caza de Ekwash con fuego láser, Tainer lanzó un torpedo a uno de los enemigos y después al otro; ambos podían evitar el ataque, pero sólo si dejaban de atacar a Ekwash. El tercer TIE empezó su esquiva al detectar que un torpedo le apuntaba. Pese a ello, el caza de Ekwash explotó, y Tainer no pudo evitar sentirse mal pese a que era sólo una simulación. Se aseguró de disparar a uno de los enemigos que había destruido a Ekwash y abatirle. saBinring informó de que los TIEs se retiraban, y Tainer ordenó retirarse también; los supervivientes prepararon un salto a la seguridad del hiperespacio y huyeron. Eso terminó el ejercicio.
Tainer y Ekwesh se vieron en persona por primera vez después de ese entrenamiento. Ekwesh aceptó la mano que le ofrecía su ala y se presentó. Al oírle hablar en plural, Tainer creyó erróneamente que Ekwesh pertenecía a la realeza, y de ahí su desdén hacia otros; Ekwesh empezó a explicarse, pero Janson les interrumpió para evaluar el rendimiento. Ekwesh no había derribado a ningún enemigo, había desobedecido órdenes dos veces pero Tainer cedió el liderazgo la segunda vez de modo retroactivo así que Janson aceptó olvidar una de esas veces, y había sido derribado por usar malas tácticas, lo cual le valdría cero puntos. Sin embargo, Tainer había derribado cinco enemigos, uno de ellos sin la nave en posición de ataque de modo impresionante; y había elegido bien sus órdenes en condiciones que exigían improvisación. Tainer merecía la puntuación más alta, 2300 puntos, mientras que Ekwesh se llevaría cero puntos; y, tal como Janson explicó el protocolo, en ese caso cada piloto intercambiaba puntos con su ala. Tainer protestó por ello, y Janson le explicó que podía quejarse a Ekwesh, pero no comentar este truco pedagógico a otros candidatos antes del ejercicio.
Los cuatro aspirantes se reunieron en Parón, la cantina de la base, en una mesa grande elegida por saBinring previendo que otros candidatos se les unirían más tarde; y Tainer insistió en interrogar a Ekwesh por su comportamiento constitutivo de motín. Ekwesh intentó explicar su mente, inusual a ojos humanos, y su problema con la mente piloto; Tainer no lo acabó de entender hasta que Sarkin lo comprendió y se lo explicó. Ekwesh se disculpó, admitió que su mente piloto le había buscado muchos problemas y predijo que le expulsarían de la unidad para tranquilidad de sus nuevos compañeros; pero insistió en presentarse con su mote, Canijo, como quería que le llamasen sus compañeros.
Al llegar el camarero androide, Chirriante, Ekwesh no sabía qué pedir y, para copiar el pedido de alguien, esperó a que los demás hubiesen pedido (excepto Tainer porque él enfadó rápidamente a Chirriante y el droide le castigó a ser atendido el último). Sarkin explicó que el Chirriante había organizado la fuga de unos droides rebeldes de Kessel usando discreción para subirse a una nave y un piloto automático, pero no había contado con que la nave tuviese que volar por terreno accidentado y colisionaron. Todos, incluso Ekwesh, encontraron divertida la historia. Más animado, Tainer aceptó excusar a Ekwesh por esa vez, pero le prometió que su mente piloto se buscaría un lío si eso se repetía; Ekwesh reconoció que el piloto se lo merecía.
Fue entonces que se les unieron otros cuatro candidatos: Los humanos Garik "Faz" Loran, lorrdiano de Pantolomin y antigua estrella infantil de holodramas; Ton Phanan, médico cíborg; y Chedgar, paranoide; y el rebanador informático bothan Eurrsk "Molinillo" Thri'ag. Todos se presentaron, los recién llegados protestaron por el uno siete nueve, y Tainer reconoció a Loran por su pasado de estrella; Phanan y Sarkin se fijaron en él, mientras que Ekwesh, que no recordaba haber oído tal nombre, sólo miraba inquisitivo al igualmente confuso saBinring. Al oírles hablar, Ekwesh comprendió que Loran era algún tipo de famoso y se disculpó por no saber quién era.
Tainer citó algunos holodramas de propaganda imperial protagonizados por Loran, pero Ekwash y saBinring negaron con la cabeza: No los conocían. Loran explicó que un grupo extremista había intentado secuestrarle de niño, los imperiales habían intentado rescatarle, y en el proceso le habían herido en el rostro con limpieza; asustado, simuló su muerte y se escondió, aprovechando todo el dinero que había ganado, hasta que finalmente se había unido a la Alianza. Podría haberse borrado la cicatriz con cirugía, pero elegía quedársela para recordar ese significativo evento de su vida. Phanan, el médico cíborg, tenía múltiples cicatrices porque, como explicó, era alérgico al bacta con lo que cada vez tenía menos carne. Sarkin explicó que la habían detectado como sensible a la Fuerza pero de nivel muy bajo. Siendo una dama atractiva, Sarkin fue rápidamente cortejada por Phanan, Tainer y, en broma, Loran. Eso consiguió ofenderla y ella fue la primera en retirarse de la mesa a trancos.
En las semanas siguientes, estos parias pilotos siguieron entrenando en la luna de Folor, ganándose el desprecio de los pilotos puristas. El comandante de la base, General Edor Crespin, no estaba de acuerdo con la idea de Antilles de usar candidatos poco admirables como ejemplo. En la siguiente simulación, una emboscada en un mundo volcánico, Ekwesh volvió a ser vaporizado sin conseguir abatir a nadie.
En otra misión de simulador, el Escuadrón Verde simulado que se enfrentaría con un grupo de interceptores TIE en un campo de asteroides para defender una estación especial oculta; Ekwesh era Verde Seis, emparejado con Tainer como Verde Cinco. Cuando estaban a ocho clics de la zona de enfrentamiento, Ekwesh gritó otro de sus aullidos gorjeantes de guerra, se impulsó para lanzarse, y entonces vio que Tainer le tenía en la mira de sus lásers. Janson, como Control de la simulación, le preguntó a Tainer qué estaba haciendo, y Tainer le pidió el beneficio de la duda. Ekwash detuvo su irritante grito de guerra y preguntó directamente a Tainer si iba a dispararle.
Tainer explicó que sólo intentaba atraer la atención de Ekwesh y, cuando se aseguró de que la tenía, le ordenó formar como ala de Tainer. El piloto de Ekwesh, domado por ahora, volvió a su posición y obedeció bien durante parte de la batalla. Sin embargo, cuando Ekwesh había derribado un enemigo y Tainer otró, Ekwesh volvió a arremeter, rugiendo, para perseguir dos interceptores sin formación. Rápidamente, Tainer declaró que le cedía el mando, le siguió y le cubrió desde retaguardia: El interceptor jefe intentó maniobrar para atacar a Ekwesh desde popa, pero Tainer aprovechó su posición para vaporizarle. Poco después, Ekwesh destruyó al otro enemigo con un torpedo, y a Tainer le costó un minuto alcanzar a su ala. De nuevo hablando, Tainer consiguió alcanzar a Ekwesh más allá del piloto, y le pidió que frenase a su otra mente, o al menos sus chillidos. En esa simulación, Tainer fue derribado poco después por el TIE pilotado por Antilles, pero él estaba contento de hacerse entender por Ekwesh y de poder obligarle a responder; además, recibió puntos por ello. Janson también felicitó a Ekwesh, señalando que el thakwaash estaba mejorando visiblemente, y Ekwash reconoció en todos los foros que si era así, era gracias a Tainer.
Varios candidatos, incluido Chedgar, fueron expulsados o se retiraron. En una reunión social en el Parón, Ekwash, Loran, Sarkin y Tainer debatieron pesimistamente sobre sus posibilidades de aprobar; en general cada uno se veía mal a sí mismo pero animaba a los otros. La reunión fue interrumpida por el comunicador, que exigía su presencia en el anfiteatro de instrucciones. Allí se reunieron con otros seis pilotos (Donos; Phanan; saBinring; Thri'ag; Jesmin Ackbar, mon calamariana de Mon Calamari, experta en comunicaciones; y Falynn Sandskimmer de Tatooine, experta en adquisiciones y vehículos de tierra) para que Antilles y Janson les notificasen que formaban parte oficialmente del nuevo Escuadrón. Antilles explicó que buscaba comandos que pudiesen pilotar para misiones de sabotaje, y que algunos habían sido elegidos por su habilidad secundaria. A falta de nombre oficial, el grupo recibió el nombre temporal Escuadrón Gris, pero Antilles aceptaba sugerencias y el ganador del nombre permanente recibiría un permiso.
Antilles enumeró entonces la lista oficial y, cuando llegó a Tainer como Gris Cinco, le preguntó abiertamente si adivinaba quién iba a ser Gris Seis; Tainer apostó por Ekwash, su ala habitual; Antilles le felicitó por su perspicacia y hubo gran regocijo. Tainer estaba al mando de un grupo de cuatro cazas, Vuelo Dos, con Antilles al mando de Vuelo Uno y Janson de Vuelo Tres. Así, Ekwash pasó a ser miembro fundador del Escuadrón, volando con el número Seis que llevaría durante toda su carrera posterior en el Mando de Cazas. Inicialmente había sido elegido por su excepcional fuerza de thakwaash, que le permitía ser el entrenador físico del escuadrón.
Los miembros originales del Escuadrón Espeectro; Ekwesh está de pie a la derecha.
El equipo de serie del Escuadrón incluía un traje de vuelo, un kit de campo, un caza ala-X y un droide astromecánico. El arma de serie era una pistola bláster y, aunque los Wraiths tenían un vibrofilo siempre en la manga, Ekwash usaba sus puños desnudos en combate cuerpo a cuerpo. Inicialmente sólo había ocho alas-X disponibles, que debían ser pintados de gris a la mayor brevedad posible, y una lanzadera clase Landa, el Narra. El mecánico jefe del escuadrón era el humano Cubber Daine, al que todos los Grises conocieron poco después.
Ekwash se unió a Grupo Dos en un ejercicio de bombardeo con naves reales, el primero que hacían en la órbita de Folor. Bajo el mando de Tainer, Ekwash, Loran y Phanan escucharon las instrucciones de Antilles: Desde la lanzadera Narra, Janson maniobraría un blanco a tres metros tras él con su rayo tractor. Ekwash y Tainer harían una carrera contra ese blanco en un ejercicio de bombardeo y, treinta segundos después, Loran y Phanan les imitarían; prepararían las armas a dos clics, dispararían a 1,5 clics una única vez, y regresarían a la base; si oyen la orden de abortar, seguramente sería porque tienen el Narra en la mira por error y debían detener la misión.
Ewkash y Tainer comprendieron la instrucción y esperaron a ver el blanco, una tela que, extendida, medía lo mismo que la lanzadera. El truco: Ekwash no tenía sistemas de armas, y Tainer no tenía sistemas de puntería, así que tenían que aprender a compartir la telemetría. Tainer disparó un torpedo y falló; después les imitaron Phanan y Loran, con la misma clase de problema, pero ellos lo hicieron bien, posiblemente porque vieron el fallo de sus predecesores.
Cargado de tensión y frustración, Tainer entrenó en el gimnasio contra un maniquí. Ekwash se sentó en una barra de equilibrios y le miró un rato con curiosidad hasta que le preguntó si estaba enfadado con el muñeco o poseído por una mente loca. Ekwash explicó que su mente parecía competente y que, si Tainer no pudiese controlarla, posiblemente estuviese atacando a Ekwash. Tainer reconoció para sí que se sentía cómodo con su amigo thakwaash, aunque no siempre le entendiese. Ekwash le explicó que él estaba mejorando su control sobre la mente piloto, pero que todo el Escuadrón estaba preocupado por la "mente malvada" de Tainer, que le carcomía y le vapuleaba con cada fallo.
Tainer intentó justificarse hablando de análisis de errores, pero Ekwash no se lo permitió: Amargamente, el thakwaash dijo que esa mente estaba engañando a Tainer. Ekwash explicó que Sandskimmer y Thri'ag también habían fallado en su misión pero ellos estaban riendo en la cafetería; y que Jesmin Ackbar intentaba hacer sonreír a Donos; pero Tainer estaba solo, amargándose. Tainer preguntó si Sarkin, la chica que le gustaba a él, estaba también en la cafetería, y el cambio repentino de tema pilló desprevenido a Ekwash. Tainer decidió ir con Sarkin y la pandilla, y el thakwaash sintió que su amigo no le había escuchado.
Ekwesh se reunió en la cafetería con el resto del Escuadrón, y poco después Tainer se reunió con ellos; Ekwesh le hizo un gesto. En ese momento, Loran estaba contando una graciosa anécdota sobre un chiste práctico que le habían hecho en la academia militar, y que despertó las risas de Ekwesh y de todos los presentes. El taciturno Donos empezaba a abrirse al grupo y Sandskimmer le preguntó por su pasado de francotirador; él explicó que había montado una galería de tiro con rifle láser en el vacío, y dos pilotos, Ackbar y Sarkin, aceptaron entrenar con él. Phanan se burló de la actitud hosca de Donos, lo cual enfadó a Sandskimmer e hizo que ella se fuese; después, Phanan apostó por quién lograría cortejarla. Sarkin especuló que pronto tendrían una misión de astronavegación y que, como saBinring era experto en ese campo, Antilles le prohibiría ayudar.
Mientras tanto, el Almirante Apwar Trigit desde el puente de mando del destructor imperial Implacable preparaba una trampa para las fuerzas neorrepublicanas en la base de Folor: Uno de sus escuadrones de TIEs y la corbeta CR90 Llamador Nocturno dispersarían las nuevas minas Empion en los sistemas cercanos a Commenor, creando un campo de minas. Después, Trigit atacaría la base neorrepublicana de Folor y huiría hacia la zona de Commenor. Sus perseguidores serían atraídos hacia una trampa.
Al día siguiente, en el desayuno compartido por la mayoría del escuadrón, Sandskimmer disputó la afirmación de Janson de que Antilles fuese el mejor piloto de la galaxia. Para zanjarlo, Antilles y Sandskimmer compitieron en remolcadores la superficie sin aire de Folor, mientras los otros pilotos buscaban comida y objetos para mirarles. Antilles ganó usando tácticas de combate.
En su siguiente reunión informativa, Antilles declaró que tenían ya cazas para todos, lo cual le valió un aplauso general; y que el nombre propuesto por Sarkin, Escuadrón Espectro, había sido aceptado como oficial, en perjuicio de las propuestas de Loran Escuadrón Cena y Escuadrón Tonto. Ekwash admitió no saber qué era un espectro, y Sarkin contó que, en su niñez, le habían hablado de fantasmas bajo la cama y en cubículos de almacenaje, lo cual se correspondía con la imagen que el Escuadrón debía dar a los imperiales; Ekwash sonrió, satisfecho con el nombre. Antilles también anunció que el droide Chirriante había sido nombrado oficial de suministros, y Janson encargó a todos preparar una hiperruta a Doldrums en una hora para su siguiente misión.
El Escuadrón Espectro estaba de camino en menos de dos horas, siguiendo la ruta propuesta por saBinring. Casualmente esa ruta pasaba por Commenor, porque era el mejor camino. Allí, Ackbar recibió una transmisión imperial codificada, y razonó que el Imperio usaba Commenor como repetidor de señales para que ésta no llegase a Folor; Loran, saBinring, Tainer y Thri'ag obtuvieron pistas que señalaban Base Folor como probable blanco de la flota del almirante Trigit. Antilles dio orden de regresar a Folor para preparar la defensa de la base.
En cuanto el General Crespin fue avisado de la inminente llegada de Trigit, ordenó la evacuación completa de la base en sus dos transportes medios Gallofree, Batalla de Borleias y Nébula Brillante; pero un fallo en el motor de Borleias le impedía escapar antes de que los imperiales les tuviesen a su alcance. Crespin activó un señuelo de la base, unos edificios vacíos en las antípodas de la luna que atrajeron la atención de Trigit; el imperial, creyendo que les había pillado por sorpresa, bombardeó una base vacía durante valiosos minutos hasta comprender su error. Entonces, ordenó el despliegue de sus cazas para que cubriesen el destructor, activó los escudos de su nave y empezó a avanzar cerca de la superficie para no ser detectado, de camino a la base de Folor para pillar a los rezagados.
Habiendo perdido de vista al enemigo, Crespin y Antilles decidieron mandar dos alas-X del Escuadrón Espectro y dos alas-A del Escuadrón Azul de Crespin como observadores, con la misión de calcular el punto óptimo de intercepción para emboscar al Implacable en la zona llamada Lápida del Cerdo y, si era posible, hacer un primer ataque por sorpresa. Antilles asignó esta tarea a Espectro Ocho y Nueve, Tainer y Ekwash; y Crespin envío a Azul Nueve y Diez, Dorset Konnair y Tetengo Noor.
La naturaleza competitiva de los pilotos de caza convirtió rápidamente el trayecto en una carrera no declarada. Los alas-A, con más velocidad sublumínica, sacaron una rápida ventaja a los Espectros en espacio abierto; hasta que alcanzaron la zona en que debían pilotar entre valles y fisuras de la roca. Tainer ordenó a Ekwesh volar cerca de las fisuras y el thakwaash respondió con su característico grito de guerra de la mente piloto; pero por una vez no intentó adelantar a su líder y, desde su cola, demostró una precisión que enorgulleció a Tainer. Pese a ello, los alas-A mantenían la ventaja, y Tainer intentó que los Espectros ganasen terreno en el camino serpenteante que seguía a esa zona.
Tainer cedió el liderazgo de la pareja a Ekwesh, y éste realizó un vuelo preciso y útil que permitió a los Espectros dejar atrás a los Azules (aunque durante ese tiempo Ekwesh no transmitió ninguna orden reconocible en Básico, sino que sólo relinchó por el comunicador). Una vez llegaron al destino asignado, Ekwesh bajó la potencia de su nave y los repulsores y, siguiendo instrucciones de Tainer, dejó sólo el soporte vital, los comunicadores y los sensores visuales, para evitar detección. Más tarde, cuando llegaron los pilotos Azules, Tainer se burló de ellos, intercambió pullas, y se presentó a sí mismo y a Ekwesh; los Azules admitieron estar impresionados por la velocidad de los pilotos Espectros, y aceptaron tácitamente que Tainer liderase la operación.
Tras unos minutos de espera, los pilotos detectaron al destructor y transmitieron la información a la base, incluyendo el punto óptimo de emboscada. Sin embargo, Tainer y Konnair razonaron que ellos cuatro no podían atacar con éxito al destructor porque el almirante Trigit había subido los escudos. Tainer tuvo una idea completamente demente pero brillante: Los Azules tenían droides astromecánicos con rodaje, y por tanto con los códigos de encriptado antiguos almacenados en sus archivos; eso les permitiría a todos transmitir con una encriptación que el Imperio ya había roto, para que el Imperio creyese que la República estaba emitiendo en clave.
Sólo necesitaban dar a Trigit un blanco más tentador que la base, así que Tainer propuso que los alas-A volasen juntos, combinando sus escudos para que, de cara a los sensores, pareciese que estaba volando un carguero ligero como el Halcón Milenario, dañado, y con alas-X de escolta. Tainer hablaría por comunicador fingiendo ser "Pícaro Dos", y Konnair respondería en el papel de "Princesa Leia Organa"; y el guión improvisado sugeriría a Trigit que el Halcón, con la importante líder republicana Organa, tenía problemas para despegar. Ekwesh no formaría parte de este radiodrama, pero pilotaría su ala-X como una supuesta escolta y parte del Escuadrón Pícaro; Noor también pilotaría sin transmitir su voz por comunicador.
El resto de los Escuadrones Espectro y Azul atacaron al Implacable en la emboscada y, pese a la superioridad numérica imperial, veinte cazas imperiales (de los setenta y dos que tenían) fueron derribados en la primera oleada con sólo dos Azules abatidos; tras recuperarse de la sorpresa, sin embargo, Trigit empezó a obtener la ventaja táctica. Mientras tanto, Ekwesh y su grupo preparaban el engaño, y Tainer observó que los Azules volaban juntos con mucha más precisión que Ekwesh y él. Ekwesh comprobó si había novedades desde Base Folor sobre el despegue del transporte, y reportó a Tainer que no, así que Tainer transmitió en seudo-abierto para atraer la atención de Trigit.
A medio diálogo, Ekwesh informó a su ala que Borleias despegaba. Siguiendo el plan, Tainer declaró que los Pícaros dejaban atrás al Halcón para evitar caer en manos del Imperio y recomendaban ocultarse al Halcón. El Almirante Trigit razonó que los cazas de la República estaban luchando con tanto ahínco para proteger a Organa, y viró su destructor para perseguir al falso Halcón en un intento de capturarlo con tractores; esa distracción permitió al Borleias despegar sin problemas. En cuanto la evacuación se hubo completado, el grueso de los Espectros y de los Azules se retiraron de la escaramuza con el Implacable, listos para huir. Mientras, las señales de transpondedor de los Azules variaban, revelando a Trigit que el Halcón había sido un simulacro.
Trigit, sabiéndose engañado dos veces, decidió arrasar con fuego láser los valles donde estaban Ekwesh y los otros observadores, en un intento de obtener una mínima victoria moral matando a las personas que le habían burlado. Cuando los lásers derribaban los desfiladores sobre los observadores, Tainer se vio en apuros, pero Ekwesh pidió amablemente el mando y cedió el control de su cuerpo a otra de sus mentes. Este Ekwesh maniobró evitando los escombros y guiando al rseto de cazas por el suelo de la fisura a baja velocidad en maniobras que no llegaban totalmente a la demencia; así, Ekwesh guió a sus compañeros a la seguridad sólo con daño menor. Tainer le preguntó qué mente estaba al mando, y Ekwesh presentó a "el estudiante", una mente que estudiaba para exámenes y recordaba. Esta victoria demostraba el control obtenido por Ekwesh sobre la mente piloto, gracias a Tainer, lo cual permitía al thakwaash ser un valioso miembro de la unidad.
Una vez evitado el problema, Tainer propuso rumbo de ascenso vertical hasta poder alcanzar vector hiperespacial de huida, y los Azules aceptaron. Antes de saltar fuera de la fisura, sin pensarlo, Tainer emitió en abierto una mofa al Implacable afirmando que debían su humillación al Escuadrón Cena; y Ekwesh añadió que el Escuadrón Tonto también había participado. Aunque Ekwesh no pudo apuntarse un solo derribo ese día, todo el Escuadrón sabía que él y Tainer habían salvado el día, con un rendimiento que acabaría impresionando al mismísimo Almirante Ackbar. En cuanto los Espectros y Narra estuvieron a salvo, rumbo a Doldrums para reubicar allí la base, Antilles les felicitó por su excelente táctica, pero les recriminó la burla final por comunicador y amenazó con clavarles sus medallas en el cráneo. Antilles también informó a todos de que Chirriante había recogido los objetos personales de los pilotos de sus camarotes antes de la evacuación, lo cual satisfizó a todos los Espectros.
Todo lo cual está muy bien, pero recordemos que Trigit había dispuesto un campo minado en los sistemas por donde preveía que escaparían los supervivientes de esta batalla.
La batalla de Folor
Los Espectros y el Narra cayeron en la trampa con minas ionizadas que cortocircuitaron los cazas y droides y borraron los datos de navegación, dejando al grupo varado en el sistema Xobome; y, por supuesto, informando al Imperio para que enviasen allí la corbeta CR90 Llamador Nocturno a acabar el trabajo. Los cazas de Ekwash, Phanan y Thri'ag quedaron totalmente inutilizados; y el fallo en los sistemas cibernéticos de Phanan ponía en peligro su vida. Tainer y Daine arreglaron los cazas de Thri'ag y de Ekwash en tiempo récord, pero declararon que el caza de Phanan estaba demasiado dañado para una reparación de campaña.
Previendo correctamente que llegarían los imperiales, Janson, Loran y Tainer prepararon una trampa: Dejarían un comando vivo y armado escondido en el compartimento de contrabando del Narra, flotando en el vacío, para que los imperiales lo recogiesen; y, en caso de que no quisieran recogerlo, le pondrían un propulsor usando piezas del ala-X dañada de Phanan, añadiendo además cañones láser a esa astronave improvisada, que bautizaron Lunático. Daine y Tainer empezaron a improvisar el vehículo usando además el droide de Phanan; Thri'ag programó los sistemas de puntería; y saBinring se ofreció voluntario como pasajero porque los gamorreanos sobrevivían en el vacío mejor que los humanos. Los alas-X aterrizaron en Xobome para empezar las reparaciones, dejando el Narra listo para el despegue. El plan era una auténtica locura pero funcionó: Cuando llegó la corbeta Llamador Nocturno y abrió un hangar para sacar dos cazas TIEs, saBinring entró por sorpresa como un ejército de un solo gamorreano, en el proceso matando accidentalmente al capitán Zurel Darillian. Antilles hizo despegar a los Espectros para rodear al enemigo y darles la orden de rendirse, y poco después saBinring declaró haber tomado la nave enemiga.
Los Espectros descubrieron que su captura de la corbeta Llamador Nocturno había sido tan rápida que los imperiales no habían enviado ninguna señal de auxilio, así que sus superiores no sabían que habían perdido esa nave. Antilles decidió que los Espectros simularían ser la tripulación original del Llamador Nocturno y llevarían a cabo sus misiones (empezando por recoger tres minas empion no detonadas) para Zsinj en un intento de acercarse lo bastante al señor de la guerra para golpearle. Antilles informó de este plan a la mayoría de espectros, excepto a Ekwesh y a Sandskimmer, que estaban custodiando a los más de cincuenta oficiales y tripulantes de la nave (pero ellos dos se enterarían después). Además, los Espectros reabastecieron sus cazas, excepto el de Phanan que había sido destruido en el proceso. Con un poco de tiempo, Tainer y Daine prepararon el Llamador para que pudiese llevar los cazas en sus hangares.
La primera de esas misiones era en el planeta Viamarr 4, donde debían acosar el pueblo de Velery, ignorar los intentos de los nativos de imponer su propia autoridad y volver a la corbeta. Para eso haría falta pilotar TIEs, y Ekwesh, como otros seis Espectros, no tenía experiencia ni siquiera en simulador, así que no fue elegido para la misión sino que recibió órdenes de practicar en el simulador de a bordo. En esa misión, los Espectros decsubrieron que Viamarr 4 proporcionaba suministros a Zsinj y le había transferido la propiedad de una isla bajo el seudónimo de Cortle Steeze. Antilles reunió a todos los Espectros en una sala de conferencias y les informó.
Tras esta misión, el Llamador Nocturno se reunió con la flota de la Nueva República en el sistema Doldrums, en parte para transferir a la tripulación imperial prisionera al Hogar Uno y para recibir a la nueva tripulación neorrepublicana que se haría pasar por imperiales, bajo el mando del capitán Choday Hrakness y la teniente Atril Tabanne. Además, en reunión personal con Antilles, el Almirante Ackbar declaró oficialmente operativo al Escuadrón Espectro por su magnífica actuación en Folor, Xobome y Viamarr; y Antilles explicó su estrategia de hacer que, después de que el Llamador visite un sistema, los Espectros lo ataque, para que Trigit o Zsinj razonen que los Espectros están siguiendo la pista del Llamador. Para entonces, Thri'ag había preparado un ardid que permitiría a Loran hacerse pasar por Darillian en comunicaciones holográficas.
Ekwesh observó que Tainer se ponía tenso en presencia del teniente Janson, lo cual era cierto porque Tainer creía que Janson había asesinado fríamente al padre de Tainer, y que ahora intentaba acabar con la vida o la carrera de Tainer. Ekwesh diagnosticó que la "mente mala" de Tainer le estaba engañando, y Tainer le respondió con un sarcasmo sobre desear matar a las mentes de Ekwesh. El thakwaash encontró esto especialmente divertido y estalló en carcajadas, lo cual desconcertó a su amigo.
Después de eso, hubo una nueva rutina en el Llamador. Ekwesh recibió la tarea de leer el correo de los ex-tripulantes imperiales y escribir respuestas para quienes eran activos en su correspondencia (afortunadamente, sólo unos pocos). Ekwesh había sido elegido por sus múltiples mentes, y enviaba su trabajo al actor Loran para que un humano y experto en fingir le aconsejase. Ekwesh encontraba la tarea razonablemente extraña y a veces aburrida, pero la utilizaba para practicar sus saltos de una mente a otra de modo rápido y sin esfuerzo. También durante ese tiempo, Ekwesh podría o no haber sido testigo de un asalto a Thr'iag por parte de Sarkin, tras lo cual Sarkin reveló a Phanan y a Tainer que un oficial neorrepublicano corrupto, Coronel Atton Repness, se había ofrecido a alterar ilegalmente su expediente de rendimiento.
El Llamador Nocturno visitó Xartun, y allí el gobernador Nojin Koolb guió a Loran en una visita a una fábrica de transpariacero local propiedad de Zsinj (bajo el seudónimo Lord Houghten Ween); Loran grabó la visita en secreto y después Thri'ag procesó los datos para conseguir un modo de acceso para el comando de Espectros: El plan era infiltrarse en el edificio durante la noche y poner explosivos para destruirlo, perjudicando la operación de Zsinj. Loran, que había participado en la primera parte de la operación, fue el único que no participó en el ataque nocturno. Tainer, experto en demoliciones, estaba al mando de la incursión.
Ekwesh, por tanto, se reunió con los otros Espectros con ropa oscura de camuflaje en un bosque cercano a la fábrica. Tainer se aseguró de que todos comiesen y tomasen caf, pero él mismo no lo habría hecho de no haber sido por Ekwesh. Tainer asignó tareas específicas en la zona de entrada a Donos, Janson, saBinring y Sandskimmer, para asegurar su ruta de escape; el resto, incluidos Tainer y Ekwesh, debían entrar en el edificio, poner las cargas y salir.
Thri'ag consiguió abrir la puerta de entrada a un bunker del edificio, pero tuvo problemas levantando la puerta del turboelevador; jactanciosamente, Ekwash le echó a un lado, metió los dientes bajo la puerta y la alzó hasta su cintura en una demostración de fuerza sobrehumana. Los Espectros se descolgaron por el hueco del ascensor y, cuando alcanzaron el piso de hangares que buscaban, Ekwash volvió a levantar la puerta sin esfuerzo aparente. Tainer distribuyó explosivos mientras Thri'ag extraía información de un centro informático.
Por desgracia, los Espectros habían activado una alarma silenciosa: Droides sonda A3 modificados, blindados contra bláster, se les acercaban silenciosamente en el interior del edificio, mientras que una base imperial cercana movilizaba tropas de asalto y dos cazas TIE para bloquear su huida. Ekwash fue el primero en oír el movimiento de los droides sonda e intentó avisar a Sarkin, pero entonces un tentáculo metálico derribó al thakwaash y le golpeó; después, el droide atacó a Antilles y a Tainer mientras que, en otro punto del edificio, otro droide iba a por otros Espectros.
Tainer intentó atrapar al droide cno explosivos, y Ekwash, aún aturdido por su sheridas y con gestos confusos, arrancó un vehículo del hangar para lanzarlo contra el droide e inmovilizarlo. Tainer ordenó retirada, pero insistió en poner más bombas en ciertas columnas de apoyo de los niveles 2 y 4, para lo cual necesitaba que Ekwash le abriese las puertas del turboascensor; para entonces, Thri'ag había usado software para impedir que les atacasen los droides (Atrajo a otro droide al hueco del turboascensor e hizo que el turboascensor lo aplastase).
Al llegar a la salida, Janson les informó de que al menos treinta soldados enemigos se estaban desplegando para entrar por al menos dos lados, y los cazas podrían disparar por la puerta del hangar. Ekwesh y Sarkin se ubicaron en una de las posibles entradas, disparando a quienes intentasen acercarse desde los lados de un remolcador de carga; ellos no eran los mejores tiradores, pero el camino era estrecho. En otro punto del edificio, Janson y saBinring devolvían fuego al enemigo.
Tainer improvisó un plan con Sandskimmer, la experta en vehículos terrestres: Los Espectros se subieron a un gran esquife de carga y Sanskimmer activó un veloz rayador para lanzarlo antes, como señuelo y sin piloto, con una ruta preprogramada. Ekwash y Sarkin fueron los últimos en subir al esquife, porque estaban protegiendo la entrada; junto con saBinring, porque estaba moviendo el señuelo. Efectivamente, el rayador atrajo el fuego enemigo del TIE e hizo virar a las tropas, permitiendo a Sandskimmer pilotar el esquife. De hecho, Sandskimmer embistió a uno de los TIEs, posado en tierra. Los dos cazas imperiales persiguieron al esquife, pero antilles usó el electroimán del cargador a bordo del vehículo para hacer que se estrellasen contra los árboles. El búnker de Zsinj explotó, y los Espectros, a salvo, subieron a bordo de su lanzadera Nara para escapar.
La misión en Xartun fue un éxito, tal como analizaron todos los Espectros al día siguiente en la sala de conferencias del Llamador y a varios parsecs de Xartun. El grupo llegó a la conclusión de que Zsinj estaba montando algún tipo de imperio financiero en las sombras para abastecer de suministros a sus activos militares; y saBinring reconoció que el equipo que Zsinj estaba construyendo era exactamente igual al que había utilizado la empresa Productos Biomédicos Binring en el proyecto de investigación militar que había proporcionado a saBinring gran inteligencia, lo cual relacionaba a Zsinj con Binring. Antilles informó a los Espectros de que redirigiría toda la información al General Cracken, líder de Inteligencia de la Nueva República, y que seguirían investigando las empresas y activos controlados por Zsinj.
Siguiendo la hoja de ruta, el Llamador Nocturno viajó a Belthu. Allí, Antilles, Loran y Thri'ag trabajaron conjuntamente con agentes de Inteligencia de la Nueva República, y juntos destruyeron una fundición de minerales que pertencía a Zsinj.
La siguiente parada programada del Llamador Nocturno era en el sistema deshabitado M2398, y la agenda no mencionaba nada de contacto con las autoridades como en otros casos, por lo que Inteligencia no envió agentes. El Llamador Nocturno encontró en la luna M2398-3 la base oculta de una banda de piratas que habían tenido ya tratos con Darillian y le habían echado exigiéndole no volver. Los piratas fingieron prestar oído la diplomacia de Loran y ofrecerle un muelle de atraque pero, cuando el Llamador se acercó, los piratas les dispararon desde varios cazas "feotes".
El ataque sorpresa impidió que los Espectros desplegasen todos sus cazas inicialmente: Al principio, sólo estaban disponibles Antilles y Sandskimmer, escolta original del Llamador desde TIEs, y el ala-X de Tainer, el único que había tenido tiempo de salir del hangar de la corbeta. Poco a poco, Sarkin, Ackbar, Janson y saBinring, y después los demás, llegaron a la zona de conflicto. Antilles ordenó formar alas según iban siendo lanzados en vez de recurrir a los grupos estándar.
Al despegar, Ekwesh profirió insultos hacia los feotes enemigos hasta que saBinring le pidió que no lo hiciese; esto desconcertó a Tainer, acostumbrado a que la mente piloto de Ekwesh no pronunciase nunca una palabra inteligible, y le hizo preocuparse por los cambios en las mentes de su amigo. Thri'ag se ubicó entonces como ala de Ekwesh.
Durante la batalla, Donos perdió su droide y sufrió una crisis de ansiedad; y Jesmin Ackbar fue abatida y murió en una colisión contra la superficie lunar pese a los esfuerzos de Tainer por salvarla; pero los piratas fueron derrotados y capturados junto con su base, el transporte kuati VI Nido de Sangre. Dos días después, los Espectros asistieron a un funeral por la Oficial de Vuelo Ackbar en la cubierta del Llamador Nocturno, salvo Antilles, que pilotó en un gesto simbólico en honor a la finada; y Donos, que se había vuelto demasiado taciturno por su pérdida.
Los piratas fueron interrogados por la Nueva República pero no aportaron información útil. Sin embargo, tras esta misión, Zsinj concluyó que el Llamador estaba siendo seguido por fuerzas neorrepublicanas, y ordenó al Almirante Trigit ocuparse de ello tras una misión en Talasea, en el sistema Morobe, en la que el Llamador sería asignado como apoyo a Trigit: Los droides rastreadores "morrts" distribuidos por Zsinj indicaban que, posiblemente, los supervivientes de Base Folor estaban en Morobe.
Sabiendo que Donos estaba sufriendo emocionalmente, Ekwesh pasó sus turnos libres sentado al lado de su compañero, hablándole sin cesar e intentando todos los procedimientos thakwaash para hacerle cambiar a otra mente menos dañada. Ekwesh informó de esto a Tainer, y pasó tanto tiempo con Donos que Ekwesh estaba quedándose casi sin dormir. Sin embargo, el método de Ekwesh no dio resultado. Por el contrario, Loran, Tainer, Sandskimmer y Sarkin obligaron a Donos a afrontar sus propios miedos y a reconocer que se sentía fatal por haber perdido a su Escuadrón Garra íntegro, con el droide siendo la última pieza que le quedaba; el grupo recuperó a Donos, y Tainer inició una relación sentimental con Sarkin.
Poco después, Zsinj contactó con el Llamador Nocturno y, creyendo hablar con el capitán Darillian, dio orden de reunirse con la nave Murciélago Halcón para recibir instrucciones sobre un posterior ataque coordinado a la base neorrepublicana de Talasea bajo las órdenes de Trigit; y Zsinj añadió que creía que las fuerzas neorrepublicanas estaban siguiendo al Llamador.
Antilles informó a todos los Espectros y tripulantes durante el desayuno porque esto exigía varias medidas: Primero, necesitaban otros dos TIEs para tener los cuatro TIEs asignados al Llamador, así que tendrían que robarlos; Sandskimmer propuso que Hrakness y Tabanne los pilotasen. Segundo y más importante, debían evitar un encuentro cara a cara con la tripulación del Murciélago, que probablemente conocía a Darillian, y la idea de Phanan de declarar cuarentena al Llamador despertaría sospechas en Zsinj.
Loran propuso introducir un patógeno infeccioso en la tripulación del Murciélago: Zsinj les había enviado la agenda del Murciélago para organizar la reunión, así que los Espectros podrían elegir un planeta donde probablemente los tripulantes del Murciélago fuesen a tener un permiso, robar virus en un hospital, e infectarles; de ese modo, ellos presentarían cuarentena. Antilles pidió una reunión con Phanan y Janson y ordenó al resto dormir para estar despejados al día siguiente. Como todos habían estado haciendo horas extra en secreto para cubrir el trastorno de Donos, Ekwesh y los demás pilotos se echaron a reír sin que Antilles supiese porqué.
La infiltración exigía camuflaje y dividir al Escuadrón en varios grupos con objetivos asignados: El Grupo Paseo (Janson, saBinring, Sandskimmer, Tabanne) debía robar dos cazas TIE; el grupo Plaga (Phanan, Sarkin, Tainer) debía robar un agente infeccioso; y el Grupo Paleto (Antilles, Donos, Loran) distraería a los tripulantes del Murciélago. Los bothans no eran bien recibidos, así que Thri'ag se quedaría oculto en el Narra; y como los thakwaash serían fácilmente reconocibles, Ekwesh tampoco participaría inicialmente: Él se quedaría oculto en su ala-X en una luna lejana de Storinal durante tres días, comiendo comida enlatada, respirando aire reciclado y usando un incómodo tubo como retrete, pero decidido a ser útil a los otros Espectros. Su misión era dar apoyo aéreo en caso de que le llamasen.
Tras el primer día de misión, los Espectros se reagruparon: Todos habían encontrado lo que necesitaba, pero el Grupo Plago pidió apoyo de Thr'iag para robar muestras de una enfermedad leve pero muy infecciosa; y el Grupo Paseo encontró varios TIEs en el búnker 22 Aleph, pero estaba muy protegido y el plan exigía la intervención de Ekwesh: Si Ekwesh realizaba una incursión de ataque al puerto espacial planetario deREvos, el búnker tendría que abrir su techo para que despegase uno de los TIEs, lo cual permitiría entrar a los comandos. Antilles sin embargo reestructuró los grupos: Phanan, saBinring, Sarkin, Tainer y Thri'ag robarían en el hospital, liderados por Janson y cubiertos por el francotirador Donos; mientras que Loran, Sandskimmer y Tabanne, liderados por Antilles, robarían los cuatros TIEs (con el propósito de que al menos dos de ellos saliesen intactos del planeta). Ekwesh fue informado para que atacase en un momento dado.
La infección fue un éxito. La mitad de los Espectros (Janson, Phanan, Sarkin, Tainer y Thri'ag) entonces pilotaron un rayador al bunker 22 Aleph mientras los otros esperaban la incursión de Ekwesh. Ekwash atacó con velocidad sorprendente, disparando a vehículos de equipaje con sus lásers en dos pasadas sucesiva santes de que la alarma imperial sirviese de nada. Antes de su tercera pasada, un enorme cañón tierra-aire surgió del suelo y rotó en un intento de rastrearle. Tainer advirtió por comunicador a Ekwesh y se preparó para atacar la torreta, pero Janson le detuvo: Donos tenía la torreta en su mira telescópica, y se ocupó del artillero con eficiencia y sin poner en peligro la misión.
Dos cazas TIE salieron del búnker occidental para ir a por Ekwesh, y cuatro comandos Espectros (Antilles, Loran, Sandskimmer y Tabanne) aprovecharon la apertura para invadir el búnker y pedir el regreso de los cazas a base, tras lo cual Loran informó a Ekwesh de que los TIEs se retiraban y de que Ekwesh debía empezar a preparar su propia huída. Aunque los imperiales comprendieron rápidamente que el enemigo había tomado la base, era tarde para impedir el éxito de la misión: Los cazas TIE controlados por Sandskimmer y Antilles salieron al espacio; Ekwesh pilotó por su cuenta; y el resto de Espectros huyeron en el Narra. Un escuadrón de TIETs les siguieron hasta que llegaron al Llamador, pero el grupo huyó al hiperespacio antes de que pudiesen perseguirles.
El Llamador alcanzó el punto de reunión pero el capitán Nabyl del Murciélago informó de que su nave estaba en cuarentena. Sin sopsechar nada, Zsinj ordenó al Llamador reunirse con el almirante Trigit.
Continuando la agenda del Llamador, Antilles puso rumbo al sistema Todirium, una colonia de minería de hierro y refinado de duracero. Zsinj había ordenado al Llamador repartir satélites espía por la zona, así que Antilles decidió que, poco después, los Espectros atacarían... haciéndose pasar por el legendario Escuadrón Pícaro. Tras distribuir las cámaras sin incidentes, once Espectros (todos salvo Sarkin) salieron del hiperespacio lo más cerca posible y, siguiendo las maniobras ordenadas por Antilles, Ekwesh y Tainer atacaron un grupo de vehículos de asalto ultraligeros por babor mientras los otros se distribuían en otros puntos. Tras un ataque con éxito, los falsos Pícaros se retiraron sin pérdidas, y la operación engañó a Zsinj y a Trigit.
El Llamador se reunió con el Implacable y con otras naves de Zsinj, la corbeta CR90 Constrictor y la fragata nebulón-B Provocador, a cien años-luz del sistema Morobe para coordinar un ataque simultáneo de las cuatro naves: Al llegar, las corbetas soltarían cada una sus cuatro cazas, y el crucero soltaría sus dos cazas para atacar la base. Tal como los Espectros habían preparado, una flota neorrepublicana les estaba esperando en Morobe , incluyendo el crucero calamariano Hogar Uno, dos fragatas, el Escuadrón Pícaro y varias alas-A; y de hecho los Espectros saldrían del Llamador para enfrentarse a los imperiales. Como los Espectros esperaban mantener el engaño a Zsinj después de eso, uno de sus miembros, Loran, no podría volar en su caza durante la batalla porque debía seguir a bordo del Llamador para hacerse pasar por su capitán.
Justo después de dar el salto final al hiperspacio, el Implacable comprendió el engaño y se detuvo antes de llegar a Talasea; pero no podía contactar con el resto de su flota para advertirles de la trampa, sólo enviar un mensaje asíncrono con órdenes de retirada. Esto alteró los planes: Constrictor y Provocador empezaron a virar para escapar antes de que llegase la flota neorrepublicana. Llamador Nocturno y el Escuadrón Espectro tomaron medidas inmediatas para retener al enemigo: El Llamador disparó a las naves y viró para mirar al Provocador con su bodega. Abrió entonces la puerta de la bodega y los cazas de los Espectros, en formación, dispararon más de doce torpedos de protones al Provocador en la primera pasada.
Tras esa maniobra, los alas-X de los Espectro salieron de la bodega, disparando torpedos al Provocador a la vez que el Llamador lo vapuleaba con lásers, y dañando así a la fragata; mientras que los Espectros en TIEs se enfrentaban al Constrictor en un intento de dejarle sin comunicaciones, y de hecho causaron tantos daños que los tripulantes rindieron la nave. El Provocador logró destruir el puente del Llamador, matando al capitán Hrakness y a otros tripulantes, pero Loran tomó el control del Llamador desde el puente secundario. Ekwesh se mantuvo como el ala de Tainer durante sus varias pasadas y ataques al Provocador.
Tras la rendición de Constrictor, Provocador intentó huir y reunir a sus últimos cazas aprovechando que Llamador estaba demasiado dañado para detenerle y que los lásers de los cazas no podían dañarle; pero Tainer tomó una iniciativa: Envió su telemetría al Escuadrón para que todos esclavizasen la ruta de sus torpedos y que disparasen a la vez, debilitando los escudos un instante en ese punto; excepto Donos y Phanan, que dispararían al mismo lugar pero un segundo después. Todos los Espectros aceptaron la orden, Loran le dio apoyo con información de los sensores del Llamador, y Ekwesh se ubicó detrás de Tainer. El plan fue un éxito y consiguió cuatro impactos en el casco que rompieron el Provocador en dos enormes trozos. La flota neorrepublicana llegó a tiempo sólo de rescatar y capturar a los tripulantes enemigos, pero no de participar en la batalla; aunque Antilles después insistiría en que habrían sido muy necesarios si el Implacable hubiese llegado a Talasea.
Después de esa misión, los Espectros no tenían especial gana de celebración por la pérdida de Hrakness y del puente del Llamador, pero el General Crespin y el Almirante Ackbar encargaron a Antilles notificar los ascensos y elogios ante toda la unidad: Sarkin se reincorporó al servicio; Loran fue ascendido a Teniente; la Teniente Tabanne fue ascendida a capitana del Llamador, y Antilles hizo un chascarrillo sobre lo inusual de que el Mando de Cazas, tradicionalmente rival de la Marina, elogiase a una oficial de la Marina, lo cual valió la sonrisa de Ekwesh y del resto de asistentes; y por último Kell Tainer fue ascendido a teniente y recibió una condecoración, el primer Kálidor Creciente del Escuadrón Espectro, dejando boquiabiertos a todos los asistentes. Por causa del ascenso a Teniente de Tainer, él recibió un camarote individual, dejando de compartir uno con Ekwesh; el Mando asignaría al thakwaash otro compañero de cuarto.
El Llamador Nocturno, con los Espectros a bordo, puso entonces rumbo a una colonia productora de metales para fabricar generadores de potencia, Obinipor. Allí, Zsinj y Trigit contactaron con el Llamador y confirmaron que seguían estando engañados: Ellos creían que el Escuadrón Pícaro estaba siguiendo al siempre fiel Llamador Nocturno. Acordaron usar esta situación para emboscar al Escuadrón Pícaro y a otras fuerzas rebeldes en Ession, en el sistema neutral Lucaya del Sector Corporativo. Ession era la sede de Transporte Ligero Pakkerd, una fábrica de cazas TIE propiedad a Zsinj, que debía dar refuerzos a Trigit durante la batalla.
La estrategia preparada por Antilles era que llegase un transporte capturado ocultando tres escuadrones de cazas de la Nueva República (el Escuadrón Pícaro de alas-X con el capitán Tycho Celchu al mando; el Escuadrón Verde de alas-Y del general Horton Salm; y el Escuadrón Azul de alas-A del general Edor Crespin). El transporte, el Nido de Sangre que había servido de base a los piratas de M2398-3, informaría de inestabilidad estructural y se autodestruiría soltando una cápsula de escape y liberando a los escuadrones. En la cápsula irían los Comandos de Page, con la misión de sabotear la fábrica de la superficie para impedir que Trigit tuviese sus refuerzos.
En los días siguientes, el Llamador Nocturno visitó Ession y se ocultó junto con el Implacable tras la luna primaria. Los Espectros convencieron a Trigit para poner una antena de transmisión de comunicaciones permanente en la superficie lunar para ocultar al destructor de los sensores, pero el propósito real era interceptar los sensores del Implacable para que no pudiese apuntar con precisión al Llamador cuando empezase la batalla. Además, convencieron a Trigit para que permitiese que los cuatro TIEs del Llamador escoltasen al Implacable.
Antilles se puso al mando del Llamador por su experiencia superior en ese tipo de naves, y la capitana Tabanne se unió al grupo de cazas TIE de los Espectros junto con Janson, saBinring y Sandskimmer. Ekwesh y el resto de los pilotos Espectros se subieron a sus cazas ala-X en la bodega del Llamador, excepto Loran, que simulaba ser el capitán Darillian y sólo se uniría a sus compañeros más tarde.
Cuando llegó el Nido de Sangre (bajo el seudónimo Pluma Roja), la perspicaz analista imperial Gara Petothel del Implacable dedujo qué estaba pasando e informó a Trigit. Trigit hizo despegar a su escuadrón de bombarderos TIE, su escuadrón de interceptores TIE y sus cuatro escuadrones de cazas TIE para que se enfrentasen a los Pícaros y a sus dos escuadrones aliados. En cuanto los TIEs estuvieron lo bastante lejos, el Llamador lanzó sus turbolásers al Implacable e intentó anclarlo a la luna con su rayo tractor.
Los cazas estelares Ala-X lanzaron catorce torpedos simultáneos al Implacable desde la bodega del Llamador, con telemetría de Tainer en la maniobra "Escupitajo de Loran;" y al mismos tiempo la escolta TIE del Implacable se volvió contra éste, destruyendo el puente principal (aunque el mando del destructor sobrevivió yendo al puente auxiliar) y el generador de escudos. Mientras los alas-X de los Espectros iban saliendo del vLlamador, Antilles dirigía sus impulsores a la superficie para generar una nube de polvo que ocultase el Llamador a los artilleros de Trigit, y después atacó al destructor desde una torreta. Viéndose atacado a tres frentes y sin escolta, Trigit llamó a sus escuadrones a su lado; los Pícaros y los Azules persiguieron a esos TIEs mientras los Verdes destruían la fábrica de Ession. Para entonces, los Comandos de Page ya habían saboteado las defensas de la fábrica, incluyendo los cazas que contenía.
Ekwesh se mantuvo como ala de Tainer, haciendo fintas desde la proa del Implacable mientras corrían hacia su popa en coordinación con Gris Uno y Dos (Janson y Sandskimmer). Tainer elegía los blancos y daba instrucciones a Ekwesh para que realizase maniobras evasivas, con tanta habilidad que ninguno de los artilleros conseguía tenerles a tiro durante un segundo pese a lo difícil que era maniobrar una nave a tanta velocidad y tan cerca de un casco tan escalonado. Entonces Ekwesh informó a Tainer de que se acercaban los setenta y dos TIEs del Implacable y pidió instrucciones.
Tainer se sintió abrumado por la superioridad numérica y alegó que sus controles no funcionaban bien, así que se alejó de la zona de conflicto. Ekwesh, como su ala, le siguió hasta que Tainer recuperó el control de su nave. En un intento de persuadir a Tainer, Ekwesh apuntó al caza de su amigo con sus torpedos, atrayendo su atención como Tainer había hecho con la mente piloto de Tainer. Ekwesh decidió que una "mente mala" controlaba a Tainer y se despidió de él explícitamente para volver a la zona de conflicto, en un intento de hacerle reaccionar. Tainer razonó que uno de los Espectros sería enviado a ejecutarle por cobardía y pensó que podría ser uno de sus amigos, o Sarkin, de quien estaba enamorado. Ese último punto le hizo reaccionar y volver a la normalidad.
El combate aéreo cerrado continuaba entre los cazas del Implacable y los Escuadrones Azul y Espectro: Aunque los TIE recibían bajas, también escudaban al Implacable de daños graves. Sandskimmer consiguió meter su caza por una grieta del casco del destructor para aniquilar las células de energía desde dentro; Thri'ag la siguió y colaboró en esta tarea, dañando gravemente la nave en combinación con los impactos del Llamador desde la nube. Trigit decidió que no podía salvar la nave y no quería rendirla, así que activó la autodestrucción y huyó con dos fieles guardaespaldas en tres interceptores TIE con hipermotor, sin dar la orden de abandonar el navío. Cierto era que en ese momento llegaron los Pícaros y, con gran coordinación, redujeron el número de cazas imperiales. Sin embargo, Petothel, asqueada por la cobardía de Trigit y su forma de sacrificar a miles de leales tripulantes, dio orden de abandonar la nave.
Mientras tanto, la llegada del legendario 181º Grupo de Cazas Imperiales causó daños graves entre los neorrepublicanos, empezando por la destrucción del caza de Phanan. Para entonces, Tainer había hecho dos pasadas consecutivas entre cazas TIE con el apoyo de Azul 9 y Azul 10, pero éstos se habían tenido que alejar; cuando Tainer quiso preparar una tercera incursión, Ekwesh le avisó de que no lo hiciera. Un caza del 181º destruyó también el caza de Tainer. Por fortuna, ambos Espectros pudieron eyectar y fueron recogidos por la lanzadera Narra, que se había mantenido alejada de la zona de conflicto precisamente para recoger pilotos vehiculares. La misión autoimpuesta de Sandskimmer y Thri'ag dentro del destructor causó que el Implacable cayese a la superficie de la luna, estrellándose allí; pero Sandskimmer y Thri'ag murieron.
Mientras tanto, Petothel informaba en abierto de que Trigit estaba en uno de los tres interceptores que se alejaban, para que la República le apresase. Antilles ordenó la rendición de los cazas enemigos, y éstos capitularon. Mientras, el teniente Donos y el general Crespin persiguieron a Trigit y le mataron cuando éste se negó a rendirse.
Tras la batalla, el mando de la Nueva República concedió a los Espectros supervivientes un permiso en Borleias, y allí fueron felicitados por el Almirante Ackbar.
La victoria contra el Almirante Trigit, el primer gran blanco del Escuadrón Espectro, les dio una reputación como una unidad brutal en la que se lograban grandes triunfos, lo cual anuló su reputación inicial de unidad formada por parias intentando aprovechar su última oportunidad. Los Espectros habían demostrado su valía así que los nuevos candidatos a la unidad para cubrir las vacantes fueron voluntarios y no fracasados.
Casi al mismo tiempo, Ekwesh se ofreció voluntario para ser el nuevo especialista en comunicaciones de los Espectros, reemplazando a la finada Jesmin Ackbar Ekwesh recibió de la Nueva República formación, así como un enlace comunicador de campo en el cinturón, parecido a un datapad pero mucho más voluminoso (Este aparato tenía menos características que el que había llevado la oficial de vuelo Ackbar, pero el de Ekwesh era lo más grande posible que pasase despercibido en una armadura de tropa de asalto; concretamente Ekwesh lo llevaba en su espalda).
Los nueve Espectros viajaron entonces a Coruscant, donde volvieron a salir de permiso y se reunieron en una cantina cercana al nivel Cimiento. Mientras estaban en un espacio para cinco personas, un cíborg sin identificar se les acercó, tomó una botella de vino de la cabina contigua y, sin mediar provocación, la estampó en la cabeza de Ekwesh. El thakwaash se desplomó en su silla, y su ala Kell Tainer fue el primero en reaccionar enfrentándose al cíborg en combate personal. El doctor Phanan examinó la cabeza de Ekwesh y, como diagnóstico preliminar, declaró una conmoción superficial de la que Ekwesh se recuperaría completamente en dos días.
Varios hombres disfrazados de Policía Militar de la Nueva República interrumpieron el enfrentamiento y arrestaron al cíborg y a los Espectros; Phanan despertó a Ekwesh poniendo un líquido maloliente bajo su nariz para que el thakwaash pudiese al menos caminar con elos. Los falsos policías intentaron meter a los Espectros y al cíborg en un transporte de prisioneros, pero Loran dedujo correctamente que eran falsos policías y transmitión con sutileza el dato a sus compañeros (excepto a Ekwesh, demasiado aturdido para leer el lenguaje corporal). Los Espectros atacaron a sus captores por sorpresa, matando al líder y consiguiendo que el resto se rindiesen; mientras tanto, Phanan noqueaba al aullante Ekwesh para mantenerle alejado de la confusión. Janson también fue herido.
Ekwesh fue llevado al cuartel general del Mando de Cazas de la Repúblic, donde el Almirante Ackbar y el Coronel Atton Repness interrogaron a Antilles y a Loran. Mientras tanto, Ekwesh se emepezaba a recuperar de la conmoción y, orgulloso luchador como era, se sentía avergonzado de que Phanan le hubiese alejado de la pelea. Los oficiales quedaron razonablemente satisfechos con el interrogatorio, así que el Escuadrón quedó el libertad, pendiente el resultado de la investigación: Aparentemente, la presencia del cíborg había sido una trampa, ya utilizada para enviar a la cárcel a otros muchos pilotos y posiblemente organizada por Zsinj.
Antilles anuló el resto del permiso y encargó a su unidad que organizasen turnos para tener vigilados a Ekwesh y a Janson hasta que se recuperasen, y los vehículos por si había sabotaje. Sin embargo, al día siguiente, Janson y Ekwesh se reincorporaron al servicio activo; en su siguiente reunión, Antilles bromeó diciendo que algunas personalidades de Ewkesh eran trabajadoras y otras no, con lo que su reincorporación era a la vez buena y mala noticia. Antilles presentó también a los pilotos de reemplazo, el informático humano Castin Donn, Espectro Dos, de Coruscant; la entrenadora en combate personal y táctias imperiales Shalla Nelprin, humana de Ingo; y la experta en vehículos y organizaciones criminales Dia Passik, twi'lek de Ryloth. Donn fue asignado a compartir camarote con Ekwesh, puesto que el thakwaash llevaba durmiendo solo desde que su antiguo compañero, Kell Tainer, había sido ascendido a teniente.
Aunque los Espectros habían sido oficialmente asignados al crucero Mon Remonda y a la flota del general Han Solo para la búsqueda de Zsinj, ellos no partiriían de inmediato hacia allí. Antilles organizó una nueva misión para los Espectros, de corte menos activo que sus operaciones de comando o sus acciones de pilotaje, lo cual le valió unos cuantos refunfuños. Los Espectros se dividirían en tres grupos para meditar y teorizar las siguientes acciones de Zsinj; y tres Espectros fueron elegidos como jefes de grupo por su capacidad de pensamiento táctico y de adoptar rutinas de pensamiento distintas: Ekwesh fue nombrado jefe del grupo Zsinj-Uno; saBinring, el matemático, lideró Zsinj-Dos; y el maestro imitador Loran estaba al mando de Zsinj-Tres. Cada jefe podía elegir a sus tres compañeros, y por acuerdo tácito, cada grupo tomó bajo su protección a uno de los novatos; Ekwesh en concreto adoptó a Nelprin, la entrenadora física, además de escoger a su amigo Tainer y a la novia de éste, Sarkin.
Ekwesh puso a Nelprin en un simulador para ver cómo volaba entre edificios de Coruscant con dos cazas TIE en su cola, y a la vez intentó debatir sus ideas sobre Zsinj; Ekwesh no valoraba especialmente el resultado de la simulación, pero Nelprin prefería centrarse en pilotar tratando cada simulación como si su vida fuese en ella. Incluso así, Nelprin respondió a las preguntas de Ekwesh sobre porqué Zsinj recurría a muchos veteranos de Inteligencia Imperial: Nelprin creía que esos profesionales estaban en gran demanda tras el supuesto deceso de la jefa de Inteligencia Ysanne Isard en Thyferra unos meses antes. Ekwesh insistió: Los agentes de inteligencia sabrían ver a través de las mentiras que Zsinj contase, y según los informes Zsinj era un embustero compulsivo; pero Nelprin creía que no mentía para ocultar la verdad sino para entretener y ser apreciado.
Nelprin fue derribada en la simulación, y Ekwesh siguió hablando con ella como si no hubiese pasado nada: Zsinj por tanto, decía el thakwaash, disfrutaba siendo apreciado y buscaba quizá ser un héroe; según Nelprin, Zsinj podría hacer más daño eligiendo blancos de valor estratégico, pero en vez de eso atacaba lugares públicos de la Nueva República con más valor propagandístico. Viendo la forma de trabajar de Ekwesh, perseverante ante una idea, Nelprin preguntó a Tainer y Sarkin si era siempre de una mente tan centrada, lo cual hizo reír a sus compañeros porque Ekwesh tenía más de una mente.
Los Espectros se reunieron en el salón de oficiales de la Base Sivantlie de Coruscant, antaño un hotel, para poner en común sus ideas sobre Zsinj. Loran, el primero en hablar, pensaba que el superdestructor estelar de Zsinj, Puño de Hierro, tenía valor simbólico y por eso lo usaba para sus batallas más importantes. Loran cedió la palabra a Ekwesh, y se sorprendió: El lenguaje corporal del thakwaash había cambiado para imitar al obeso y agresivo Zsinj en gestos, voz y expresiones. Loran se estremeció al oírle hablar con una voz profunda, sin los tonos melodiosos y amistosos del piloto. Entonces, Ekwesh explicó arrogantemente que Zsinj no daba valor personal a los símbolos: Él sólo usaba símbolos para infundir miedo a quienes él consideraba inferiores, atrayéndoles con ofertas e intimidándoles con amenazas, como hacía con gobernadores que antaño habían apoyado al Imperio y que, desde la muerte del emperador, se mantenían más neutrales. Ekwesh creía que Zsinj realmente valoraba esos ingresos.
Loran y Janson encontraron muy divertida la interpretación de Ekwesh, al punto de que Janson simuló una sobrecarga de su propio cerebro al verle acabar. Tras un breve receso, saBinring llamó la atención de los presentes sorbe los piratas a los que Zsinj había intentado reclutar en M2398; el gamorreano creía que Zsinj buscaba una segunda flota posiblemente prescindible. Ekwesh discrepó: Según él, Zsinj contactaba con piratas para obtener inteligencia de fuentes ilegítimas, pero no los valoraba. saBinring se rió sonoramente de esa apreciación, porque él consideraba a los piratas una fuerza militar a tener en cuenta.
La opinión oficial de Ekwesh era que Zsinj valoraba su imperio financiero e industrial para obtener recursos lo más barato posible, y que seguiría amenazando y atrayendo a gobernadores ex-imperiales, posiblemente usando el Puño de Hiero en las acciones que beneficiasen a estos aliados/súbditos para obtener su gratitud; por ello, Ekwesh proponía buscar a los gobernadores que más podían hacer por Zsinj y causarles problemas que sólo Zsinj pudiese resolver personalmente, atrayendo así al señor de la guerra a una trampa. Antilles recopiló la tres teorías y las envió a los analistas del despacho del Almirante Ackbar para que se basasen en ellas para decidir un plan de acción.
Mientras tanto, Castin Donn pidió oficialmente al comandante Antilles que le cambiase de camarote, alegando que su compañero Ekwesh hedía. Antilles sabía que Ekwesh sólo hedía en situaciones concretas, y que Tainer jamás había tenido problemas con él; sin embargo, revisando el historial de Donn, concluyó que el informático era un especiesista. El comandante propuso cambiarle al camarote de saBinring, otro alienígena, y no se sorprendió cuando Donn lo rechazó. Antilles insistió entonces en que Donn debía acostumbrarse a tener contacto prolongado con alienígenas, algo que éste no había hecho antes, porque no siempre tendrían la posibilidad de dejarle dormir solo. Donn y Ekwesh siguieron compartiendo cuarto.
Poco después, los Espectros se reunieron en una oficina sin ventanas para que Antilles presentase el plan pero, antes de hacerlo, pidió a los líderes de los grupos de investigación que explicasen sus teorías para que todos los asistentes las oyesen. Ekwesh volvió a imitar a Zsinj, incluso cambiando su tono de voz, y habló de un modo erudito que impresionó a Antilles; éste le felicitó por esa mente, y entonces Ekwesh, agotado y torpón, recuperó la normalidad y explicó que le suponía un problema entrar en una mente con un ego tan desmedido. Después, saBinring propuso que los Espectros se hiciesen pasar por piratas para que Zsinj les contratase en su flota.
Loran explicó que él y su compañera de grupo Passik preferían la idea de saBinring mientras que Phanan y Janson apoyaban la idea de Ekwesh. Loran creía que Zsinj planeaba robar otro superdestructor en construcción posiblemente de Kuat, y había transmitido esa idea a Antilles; pero durante esa reunión, el actor, por diversión cómica, propuso que atrajesen a Zsinj simulando ser una compañía teatral, para lo cual aprovecharían el talento mímico de Ekwesh y la voz de tenor de Tainer. Antilles le hizo contar su auténtica idea, y Phanan le obligó a revelar que Loran creía que Isard había sobrevivido; con lo que el comandante le regañó por su comportamiento y sus ideas descabelladas y le castigó a escribir un informe para el general Cracken.
Antilles reveló entonces la estrategia general de la oficina de Ackbar, que combinaba todas las ideas: Mientras Inteligencia averiguaba si los astilleros imperiales de Kuat (no afiliados a Zsinj) estaban construyendo un superdestructor, los Espectros, que ya habían demostrado su talento para infiltración y suplantación, se harían pasar por una banda de piratas y atacarían un sistema que resultaba de interés para Zsinj, Halmad, un centro de comercio en una interesección de varias rutas donde ya estaba trabajando Inteligencia. Oficialmente, los Espectros seguían asignados al Mon Remonda, pero se dejarían ver poco por allí; su nueva nave nodriza sería un destartalado transporte hiperespacial de clase Xiytiar que además no tenía armas.
En la primera operación en Halmad, los Espectros esperaban robar unos cazas TIE de la base imperial local y a la vez empezar a forjar la reputación de los Murciélagos Halcones, la supuesta banda pirata que eran. Phanan y Tainer empezaron una pelea de bar con varios pilotos imperiales, y varios falsos soldados de asalto (Antilles, Janson y Loran) hicieron un arresto general fingiendo ser policía militar imperial. Ekwesh, demasiado alienígena para pasar desapercibido en una situación así, se mantuvo oculto en la base de una colina cercana en la ruta para coordinar un intercambio y que el resto de Espectros pudiesen esconderse en el vehículo, algunos simulando ser soldados para infiltrarse. Su versión de la historia era que esos pilotos imperiales habían peleado contra civiles, la Policía Militar había arrestado a todo el mundo, pero los presos civiles ya estaban en manos de las autoridades pertinentes.
Una vez en la base, los Espectros desembarcaron, dejando a Nelprin la tarea de buscar un vehículo para la huida. Se acercaron al hangar, pero vieron tropas de guardia en la puerta. Tainer razonó que no podían atacarles sin más porque quizá tenían comunicación abierta en el casco, así que Antilles pidió a Ekwesh que averiguase si estaban emitiendo. Ekwesh asintió, tomó su comunicador de campo y, tras unos cuantos intentos, encontró el diálogo que mantenían... pero Ekwesh no entendía las referencias, así que lo transmitió al resto de los Espectros. Passik comprendió que estaban jugando a Cuadrante usando sólo palabras. Antilles decidió que podrían derribar a los guardias si los reemplazaban con falsos guardias Espectros inmediatamente después, y asignó esos roles a Loran y Phanan; Ekwesh y Tainer debían derribar rápidamente y con precisión a los guardias de servicio. Esa maniobra fue un éxito: Ekwesh corrió hacia el guardia que se le había indicado y casi tropezó al frenar para alzar en vilo al hombre. Quince segundos después, Donn verificó que el control de la base no había sido alertado.
Al entrar al hangar, los Espectros encontraron ocho interceptores TIE, aún mejors que los cazas que ellos esperaban. Antilles ordenó sabotear dos y preparar el resto antes de salir, y al mismo tiempo pintar en la pared un mensaje que reclamaba el planeta en nombre de los Murciélagos Halcones. Mientras otros espectros realizaban otras tareas, Ekwesh se unió a Antilles, Janson, Passik y Tainer verificando las naves; Ekwesh no tenía experiencia en pilotaje de TIEs pero podía encontrar y desmontar los rastreadores y la circuitería que permitía controlar remotamente uno de estos vehículos desde la base, porque eso estaba relacionado con sus talentos de comunicaciones.
Por desgracia, otros soldados de asalto llegaron a relevar a los guardias de la puerta, y como Phanan y Loran no lograron engañarles, empezaron un tiroteo. Para entonces, Ekwesh y Tainer estaban intentando obtenido el control de cinco interceptores, pero no habían saboteado ninguno de los que se iban a quedar atrás; Antilles les ordenó dejarlo porque siempre podrían destruirlos de la que se iban. Como tenían pocos interceptores, Donn, Donos, Ekwesh, Loran, Phanan y Sarkin tendrían que escapar a pie.
Donn había preparado una simulación de ataque imperial a la base para distraer la atención mientras huían: La artillería antiaérea buscó blancos externos en vez de impedir que los cazas de Antilles huyeran, y mientras Ekwesh y su grupo corrían a pie. Ekwesh se comunicaba con Nelprin para concertar un punto de reunión, intercambiando los puntos cardinales en un código preacordado fácil pero que confundiría al enemigo.
Los imperiales no les intentaron detener: Un grupo disciplinado corriendo con un claro propósito en una emergencia no despertaba sospechas; y sólo una barrera de dos pelotones amenazaba su avance hasta que Nelprin les embistió con un rayador cerrado (en el que por cierto llevaba los cadáveres de dos soldados imperiales). Los Espectros subieron a bordo, con Loran sirviendo de artillero de Nelprin. Una vez estuvieron fuera de la base, Nelprin les hizo bajar del vehículo y después hizo que el rayador siguiese su ruta él solo para atraer la atención de sus perseguidores mientras ellos se ponían ropa civil y volvían a la ciudad como un grupo de turistas borrachos.
Los Espectros se asentaron en una nueva base en el cinturón de asteroides de Halmad, a la que llamaron Base Murciélago Halcón. Allí llevaron sus nuevos cazas y se reunieron con el capitán Valton del carguero Xiytiar Yerba Solar, y pronto los Espectros apodaron Las Zanjas a un túnel inicialmente inocuo en el que pintaron unas líneas para asemejarlo a las zanjas de la Estrella de la Muerte original. Durante ese tiempo Ekwesh sirvió en la lanzadera Narra. El thakwaash también mantuvo una conversación con el comandante Antilles, que se sentía mal por verse huraño mientras los Espectros se divertían y había buscado el consejo de alguien que estaba en contacto con los diversos aspectos de su personalidad; poco después, Antilles caería víctima de una broma de Loran y Janson hecha con un peluche de ewok.
Loran obtuvo información sobre las rutas de un carguero, Barderia, que los Murciélagos Halcones podrían emboscar y, como premio, recibió el rol del líder pirata, General Kargin, con maquillaje de cicatrices. Siete Espectros (incluidos Antilles, Donn y Phanan) dieron soporte a Loran durante el ataque al Barderia, que fue capturado con relativos pocos daños; Donn, Loran y Phanan abordaron la nave y se llevaron parte de su cargamento, incluyendo alcohol etílico y medicinas. Al descubrir que el Barderia recogería piezas de caza TIE, Loran y Donn descifraron su ruta y emboscaron la nave una segunda vez poco tiempo después.
En esta imagen Hohass Ekwesh ha sido descrito como el piloto caballo
Después de esa misión, la mayoría de Espectros viajaron al Mon Remonda a reportar ante el General Han Solo. Aprovecharon para recoger al nuevo Espectro Trece, la humana Lara Notsil de Aldivy (que era en secreto Gara Petothel, una ex-analista imperial que intentaba infiltrarse en los Escuadrones de Wedge Antilles para hacerse valiosa para Zsinj). Por último, los Espectros colaboraron con el Escuadrón Pícaro en un ataque al planeta imperial Lavisar, no afiliado con Zsinj, con el propósito de amedrentar al gobernador antes de que se aliase con el señor de la guerra; la misión fue un éxito y no hubo muchas bajas neorrepublicanas.
Mientras tanto, Ekwesh se había quedado de guardia en Base Murciélago Halcón junto con Donn, Phanan y Tainer. Ekwesh descubrió que los halmadianos habían reemplazado el sensor viejo de sus islas occidentales por un nuevo sistema de estaciones sensoras en la costa oeste de su continente, pero el alcance real del nuevo sensor era inferior a lo necesario en doscientos kilómetros. Eso creaba un pasillo sin vigilancia que un grupo de cazas podía aprovechar para acercarse a la civilización; una vez dejasen atrás esa zona, los pilotos tendrían que volar a baja altura para evitar ser rastreados, pero los Espectros estaban cualificados para ello. Ekwesh notificó a Tainer de esta posibilidad para hacer incursiones, y el teniente Tainer, por su propia iniciativa, preparó diversas misiones con el propósito de crear una reputación para los Murciélagos Halcones.
En una primera incursión, Ekwesh y su unidad atacaron un distrito portuario de almacenes en la ciudad de Fellon y robaron hologramas recreativos de propaganda; además, dañaron los vehículos marinos de los ciudadanos acaudalados, provocando daños que Tainer estimó en millones de créditos.
Poco después, Tainer envió a Donn a la ciudad de Hullis para que afectase a la seguridad local; el informático proporcionó a Tainer una cuenta de alto nivel en el sistema de información planetario y toda la información sensorial de la red de satélites defensivos. Tainer y Phanan volaron al día siguiente y robaron un banco desde sus cazas; después fueron perseguidos por unos cazas TIE pero huyeron sin problemas.
Halmad empezó a construir dos bases de cazas, una cerca de Fellon y otra al este de Hullis, posiblemente en respuesta directa a estas incursiones; intentaron mantener esta operación en secreto pero Donn les descubrió.
Cuando los Espectros volvieron, Tainer informó a Antilles de sus operaciones; y de un nuevo sistema desarrollado por Donn que les permitía distorsionar sus voces para simular otro acento o sexo, lo cual sería útil para fingir ser piratas. Ekwesh añadió que había descubierto la rutina y ruta de un buque cisterna de reabastecimiento, Bastión, que viajaba desde Halmad a las minas del cinturón de asteroides escoltado por dos cazas TIE, y propuso capturarlo para transportar a todo el escuadrón hasta Hullis: Los cazas cabían en el interior de la cisterna y, si el buque seguía la ruta regular, nadie sospecharía ni iniciaría un contraataque. Antilles felicitó a Ekwesh y a su grupo, y empezó a preparar una misión: Los Murciélagos Halcones iban a destruir las dos nuevas bases de cazas, a la vez, porque destruirían todo lo que el Imperio construyese en Halmad. Sarkin bautizó el plan Operación Temblor de Tierra.
Esa operación ayudaría a que los Murciélagos Halcones tuviesen una reputación que atrajese la atención de Zsinj para que les contratase, y también debía hacer que Zsinj viajase a Halmad para proteger al gobernador de los Murciélagos. Lo que los Espectros ignoraban era que el gobernador de Halmad ya había hecho un trato con Zsinj para que les protegiese.
Ekwesh estaba en el grupo uno, viajando en la lanzadera Narta para capturar el Bastión y sus escoltas junto con Donn, Donos, Tainer, saBinring y Sarkin; estos dos últimos pilotarían los cazas de escolta. Tainer, el experto en demoliciones, debía detonar el Bastión desocupado desde la lanzadera Narra y hacer que se estrellase contra la base de Hullis (aunque dos minutos antes habría transmitido una alerta para que evacuasen la base). Mientras tanto, el resto de los Espectros fingirían ser la unidad de Kargin y atacarían Halmad viajando por el pasillo descubierto por Ekwesh.
El primer inconveniente era que Ekwesh debía pilotar Bastión, pero la silla estaba diseñada para un piloto humano más pequeño que Ekwesh y resultaba incómodo. Sin embargo, Ekwewsh se adaptó y se preparó, coordinándose con el teniente Tainer como su oficial y mientras Donn mantenía controlada el Narra. Entonces empezaron los problemas: Ekwesh detectó demasiada actividad naval en la atmósfera, y no conseguía contactar con Antilles porque Zsinj estaba interfiriendo la señal. Era perfectamente normal: El grupo de Antilles acababa de caer en una emboscada, enfrentándose a treinta y séis TIEs enemigos con los colores del 181º. El problema que tenía Bastión era de magnitud al menos comparable: Acababa de ser atrapado por el rayo tractor del superdestructor de Zsinj, Puño de Hierro.
En el puente del Bastión, los tripulantes notaron la sacudida. Ekwesh inicialmente creyó que les habían disparado, pero Tainer comprendió lo que sucedía. Ordenó a Ekwesh dar toda la potencia posible a una señal de comunicación y, cuando no pudo comunicarse con Antilles, Tainer probó con Sarkin para darles orden de huir y abortar, sobre todo cuando Ekwesh detectó que el Puño de Hierro estaba desplegando sus cazas. Tainer entonces ordenó a Ekwesh apagar las comunicaciones.
La primera idea de Tainer era que todos los demás se metiesen en la lanzadera Narra y despegasen, alejándose del Bastión; para impedir que el rayo tractor les pillase al momento, Tainer pretendía detonar las bombas del Bastión, sacrificándose. Ekwesh, horrorizado ante la idea de perder a su amigo, buscó rápidamente una mente que tuviese alguna habilidad útil; pero Donos, el francotirador, ya tenía una: Él podía detonar explosivos a distancia, sin comlink, utilizando un disparo y un sistema de transmisión de rayo estrecho no interceptable configurado por Donn. Ekwesh expresó su sorpresa al ver que Donos había llevado consigo su rifle de francotirador; Donos afirmó que no se separaba nunca de él. Mientras Tainer informaba a Donos y a Donn de los detalles técnicos del explosivo, Ekwesh se puso en el asiento de piloto del Narra y preparó la lanzadera.
El Narra despegó desde la bodega del Bastión, con Ekwesh poniendo los motores a tan gran potencia que quemaron el casco del buque cisterna. Ekwesh intentó que el Narra escalase en un rizo hacia la superficie planetaria, y Donos disparó su arma... pero falló y no provocó la explosión. Un segundo disparo resultó inútil, y el Narra también fue capturado por el rayo tractor. Por fortuna, el tercer disparo de Donos destruyó en una enorme explosión la cisterna, y la onda expansiva empujó el Narra hacia la seguridad relativa. Ekwesh relinchó de júbilo y, siguiendo órdenes de Tainer, pilotó la nave para ponerles a salvo. Ekwesh comprobó que el Puño de Hierro no estaba intentando perseguirles ni capturarles, y Tainer ordenó a Donn calcular un salto hiperspacial para sacarles totalmente de ese aprieto. Nadie había sido herido de gravedad, aunque el rostro de Donos había sufrido quemaduras superficiales.
El Narra aterrizó en la Base Murciélago Halcón para ser informados de lo sucedido con el otro grupo: Dos de los pilotos, Loran y Phanan, no habían regresado: Phanan había sido abatido en una zona boscosa, y su amigo Loran se lanzó a buscarle para no regresar. Los Espectros se sentían derrotados, incluso Antilles, pero éste insistía en recordarles que habían conseguido burlar a Zsinj y salirle muy caro.
De hecho, Zsinj acababa de enviar un mensaje al general Kargin de los Murciélagos Halcones para ofrecerle una reunión en espacio neutral: Le prohibía, decía, seguir acosando Halmad; pero le aseguraba que encontraría más provechoso reunirse con Zsinj que buscarse la vida en otro lugar. Antilles decidió aceptar la oferta de inmediato y empezó a organizar el grupo que podría ir a esa reunión: Quedaban inmediatamente descartados los pilotos más reconocibles por ser condecorados o buscados en el Imperio, y Ekwesh pertenecía a una especie infrecuente entre los pilotos de caza, así que no participaría en esa misión.
Loran no logró salvar la vida de Phanan, y regresó solo y deprimido a la base. Antilles intentó animarle y, por lo demás, asignó a Notsil como ala de Loran y como nuevo oficial médico temporal.
Antilles dio un informe al día siguiente sobre las misiones: Loran, Passik y Tainer viajarían a reunirse con Zsinj en el Narra; Notsil tenía un asunto familiar al que iría escoltada por Donos; y Antilles viajaría en ala-X a Coruscant a dar un informe rutinario y recibir órdenes, con una escolta de hasta cinco Espectros que al final resultaron ser sólo cuatro: Ekwesh, Nelprin, saBinring y Sarkin. El equipo de Coruscant podría disfrutar de algo de reposo en Coruscant. El resto se quedarían de guardia en la base.
El viaje de Notsil tuvo sus complicaciones, pero ninguna que no se pudiese resolver: Supuestamente ella se iba a reunir con un hermano al que creía muerto, pero en realidad era una trampa de los imperiales para asegurar la colaboración de Notsil como infiltrada; sin embargo, Notsil no podía dejar de acudir sin revelar su afiliación imperial a los Espectros. Ella preparó una contratrampa haciendo que Donos disparase al falso hermano de Notsil y a su cómplice imperial y después, sin nadie que pudiese contradecir su versión, Notsil se lamentó de que su pariente delincuente intentase venderla.
La misión de Loran fue un éxito en el sentido de que Zsinj quedó impresionado por la banda pirata y les contrató para que pilotasen seis cazas en una misión, en un campo de batalla que no reveló en ese momento. También les pidió informes sobre sus expertos en infiltración para contratar más profesionales en otras tareas. Loran descubrió que los Espectros habían engañado accidentalmente a Zsinj haciéndole creer que Espectro Uno, Antilles, era en realidad un piloto ewok modificado genéticamente. En la parte negativa de la misión, Donn se había subido a la lanzadera como polizón para impresionar a sus compañeros con una misión no aprobada, pero fue capturado por Zsinj y ejecutado. Cuando Antilles y su grupo, incluido Ekwesh, regresaron a Base Halcón Murciélago, Loran dio un informe detallado a Antilles. Aunque Loran estaba exento de culpa por la muerte de Donn, las diversas bajas estaban suponiendo un daño grave para la moral de la unidad, y no hacía falta la percepción sicológica de Ekwesh para darse cuenta de ello.
Lo cual no quita que el perspicaz Ekwesh decidiese tomar medidas; en un pasillo él se cruzó con Janson y Antilles, que discutían precisamente la alta tasa de mortalidad en una unidad formada por parias y su impacto en los supervivientes. Los dos oficiales al mando y la analista Notsil analizaron la misión de Zsinj y Antilles descubrió que Zsinj planeaba atacar el planeta Kuat, afiliado a otra facción del Imperio; pero si la República enviaba a la flota, los espías kuati de Zsinj le informarían y él cancelaría la misión.
Mientras tanto, y en reacción a las palabras de Antilles, Ekwesh tomó una iniciativa: Cuando algo resultaba dañado, no se debía esperar que ese algo se arreglase solo, sino que había que curarlo; y en ese caso, la moral de la unidad estaba dañada. Por ello él decidió preparar un baile de gala bajo las estrellas para subir la moral: Según lo que sabía Ekwesh de los rituales de oficiales militares neorrepublicanos, un baile era un evento relacionado con las parejas, las amistades y la vida de los bailarines lo cual, para él, suponía un excelente contrapunto a toda la muerte que los Espectros habían visto. Como no era posible utilizar césped real en la Base en un asteroide, Ekwesh decidió que pintaría el suelo pétreo de verde para simular esta parte. Ekwesh se hizo con pintura en pulverizador, gafas protectoras, mochilas de mantenimiento y varios droides (incluidos Chirriante y Chunky, el astromecánico de Sarkin) que le ayudasen a preparar el comedor para el evento Ekwesh requisó extraoficialmente el comedor de oficiales poniendo un cartel en la puerta según el cual él se lo apropiaba como pirata, y no explicó con precisión de qué se trataba.
Antilles topó con los preparativos extraños de Ekwesh y éste le habló vagamente de un ritual tradicional que realizaba "la gente" de Ekwesh; éste se refería a los oficiales de la Nueva República, pero lo dijo de tal modo que Antilles creyó que se trataba de una costumbre de la especie thakwaash. Ekwesh le aseguró que habría comida y pidió a Antilles que ordenase a los pilotos personarse a las ochocientas horas en uniforme de gala, y al personal civil no de servicio en ropa formal; prometía dar mucho a cambio de ese pequeño sacrificio. Antilles encontraba el evento divertido e, intrigado por el misterio aceptó; Janson, que odiaba vestirse de gala, se lo recriminaría durante el resto del tiempo; y otros Espectros también se sentirían incómodos con las restrictivos ropas.
Finalmente, los Espectros y personal asociado se reunieron para admirar un suelo pintado de verde y negro con las dotes artísticas de un niño que intentase pintar yerba, un foco que iluminaba poco más que esa zona, y altavoces con cables. Ekwesh se presentó elegantemente tarde tras apagar la luz para que los Espectros viesen estrellas falsas pintadas en el techo. Como maestro de ceremonia, Ekwesh explicó que el comandante Antilles podría haber sido inducido a engaño por otra de las mentes de Ekwesh, y que, al estar en un baile formal, hiciesen el favor de salir a bailar. Algunos Espectros se miraron unos a otros, considerando la posibilidad de avisar a la policía militar, y saBinring se enfurruñó y propuso negarse. Ekwesh exigió que se uniese al baile obligatorio so pena de ejecución y de dañar los sentimientos del thakwaash. Ante este chiste de estilo humano, Tainer dio un paso al frente, abrazó a su amigo íntimo y le felicitó por su integración.
Después, el teniente Tainer siguió hacia la pista, extendió la mano para llamar a su novia Sarkin y después miró singificativamente a Ekwesh. El thakwaash comprendió el lenguaje corporal de su ala, que le estaba pidiendo música. Ekwesh miró a Chunky, que estaba de guardia junto al poste del foco, y el droide hizo sonar un baile formal alderaano; Ekwesh encontraba que el volumen de la música era demasiado alto y, con un gesto vertical de su mano, pidió al droide que lo bajase.
Tainer y Sarkin empezaron a bailar ignorando el resto del universo, y Janson decidió que Ekwesh merecía un castigo, pero Antilles pidió a su amigo que esperase a ver el resultado de la táctica heterodoxa: Nelprin estaba sacando a bailar a Donos, y una mecánica hacía salir a un renunente Daine. Al poco, Janson estaba arrastrando a su ala, la ex-bailarina exótica Passik que, decía nunca había bailado con otra persona. Mientras tanto, Ekwesh entraba en la cocina y sacaba de dentro una larga mesa con el buffet que serviría de cena, y que en realidad no tenía más materias primas que las habituales en la Base; Chirriante ayudó a Ekwesh a cargar la mesa, pero después volvió a la cocina.
Antilles felicitó a Ekwesh por su maniobra y le pidió que le explicase detalles de su decisión. Antilles entonces nombró a Ekwesh oficial de moral de la unidad, lo cual pilló de sorpresa al alienígena y le hizo escupir la bola de queso que estaba comiendo; Ekwesh recordó que, cuando alguien trabajaba para Antilles, aquéllo que se le diese bien a esa persona se convertiría en su deber. Este nombramiento sin embargo fue extraoficial. Antilles se despidió de Ekwesh y se retiró sin bailar pero mucho más animado; y mientras, la maniobra de Ekwesh para que los Espectros pensasen en parejas presentes y ausentes llevó a la creación de una nueva pareja: Garik Loran y Dia Passik se besaron al ritmo de un vals alderaano. Gracias a la maniobra de Ekwesh, los Espectros se sintieron más vivos y ansiosos, algunos hasta arrogantes, en su siguiente misión. Antilles estaba encantado de contar con Ekwesh en su unidad, y el resto de compañeros de Ekwesh consideraban que el thakwaash era sabio y capaz, aunque un poco friki.
Antilles reunió a los Espectros para informarles de la misión: Ellos habían deducido que Zsinj planeaba atacar el astillero imperial en Kuat para robar un superdestructor en construcción, pese a que los planes proporcionados sugerían que Coruscant era el blanco, y de hecho otros piratas contratados estaban seguros de que irían a Coruscant. A partir de los valiosos datos de inteligencia obtenidos, saBinring informó de que los piratas, incluídos los Murciélagos Halcones, posiblemente recibirían orden de proteger el nuevo superdestructor de las defensas de Kuat mientras los agentes de Zsinj a bordo intentaban sacar el gran buque del planeta para enviarlo al hiperespacio.
Las órdenes de Antilles eran meter un transmisor en el nuevo superdestructor y/o en el Puño de Hierro para seguir el rastro de Zsinj; y por lo demás seguir vivos y matar al máximo de enemigos, sean agentes de Zsinj o de Kuat. Antilles añadió que la misión no era necesariamente suicida, pero que detener a Zsinj bien debía valer el sacrificio de la propia vida. Antilles, Loran, Passik, saBinring, Sarkin y Tainer volarían como los piratas Halcón Murciélagos; Nelprin se haría pasar por "Qatya Nassin" en el equipo de infiltración de Zsinj; y el resto de Espectros (Danos, Ekwesh, Janson y Notsil) esperarían en sus alas-X a bordo del Mon Remonda para emboscar a Zsinj con la flota del General Solo: La República creía que Zsinj no se arriesgaría a dar un solo salto hiperespacial para huir, sino que daría varios saltos cortos para cubrir su rastro; y Solo le esperaba en su ruta de escape más probable, en Halmad, con todos los recursos que había podido reunir (incluyendo una fragata Nebulón B, un crucero clase Fuego Quasar para trasnporte de cazas, una corbeta clase Merodeador y demás naves dispares). Si era posible, Antilles y los pilotos Murciélagos Halcones se unirían a la flota de Solo en ese enfrentamiento final. Antes de partir, Antilles felicitó a los Espectros por su excelente rendimiento y su capacidad de trabajo en equipo, como demostraba el reciente baile.
Zsinj y sus agentes se hicieron con el nuevo superdestructor, Beso de la Cuchilla, y huyeron de Kuat con el resto de su flota, el superdestructor Puño de Hierro, el destructor imperial Malos Vientos, el crucero interdictor Red del Emperador, cuatro cruceros de la clase Carraca y diversas corbetas y cargueros. Durante la operación, Nelprin y saBinring quedaron incomunicados, pero al menos teóricamente, ambos superdestructores estaban intervenidos. Antilles y su grupo volaron a Halmad, subieron al Mon Remonda y prepararon la intercepción de la flota de Zsinj con el General Solo. Solo pretendía retener a Zsinj en espacio interestelar abierto bloqueando sus posibles vectores de escape, especialmente porque el hipermotor del Beso de la Cuchilla necesitaba ser revisado antes de que pudiesen huir.
La flota de Solo interceptó entonces a la de Zsinj. Los alas-X de los Espectros recibieron orden de formar junto con los alas-X del Escuadrón Pícaro, los alas-B del Escuadrón Nova y los alas-A del Escuadrón Arma de Mástil; pero Zsinj aún no desplegaba sus propios cazas porque esperaba poder retirarse pronto de la batalla y no quería abandonar a sus pilotos. El Mon Remonda personalmente bloqueó la ruta de escape que pensaba seguir el señor de la guerra en una maniobra audaz: Los dos superdestructores de Zsinj Puño de Hierro y Beso de la Cuchilla tenían suficiente potencia de fuego para acabar con el Mon Remonda y con Solo en un enfrentamiento directo.
Zsinj ignoraba que Nelprin estaba oculta en su caza, pegada al casco del Beso de la Cuchilla, y ella destruyó entonces el generador de escudos del puente del Beso de la Cuchilla. Zsinj intentó maniobrar el Puño de Hierro para que protegiese al otro superdestructor sin escudos, pero Antilles ordenó a sus cuatro escuadrones atacar el puente del Beso de la Cuchilla, usando torpedos de protones si era posible (Los alas-A no tenían). Este ataque destruyó el control primario del Beso y dejó la nave en bastante mal estado; Nelprin se alejó poco después del casco del Beso y se identificó; Antilles dijo a sus pilotos que ella era responsable de que ellos hubiesen podido destruir el puente del Beso, y los pilotos vitorearon a Nelprin por el comunicador.
Gracias a un superviviente kuati a bordo del Beso, Zsinj consiguió activar el puente secundario y hacer que el timón del Beso replicase los movimientos del Puño. Zsinj también desplegó sus cazas. Antilles comprendió que la mitad de los Espectros acababan de volver de la batalla de Kuat y estaban agotados, así que ordenó a los Espectros escoltar al Escuadrón Nova mientras éstos atacaban el casco del Puño de Hierro en vez de enfrentarse a los cazas TIE; esto le valió abucheos de algunos Espectros. La superioridad numérica de los cazas TIE de Zsinj empezaba a hacerse notar, pero afortunadamente la Nueva República recibió refuerzos en forma del Escuadrón Wookiee Aullante de alas-A del General Crespin, y sus aprendices en alas-Y. Antilles hizo que éstos se coordinasen con los Novas, y relevasen así a los Espectros como Escolta.
El Puño de Hierro intentaba dañar los motores del Mon Remonda para poder maniobrar sin que Solo le bloquease la ruta. Ahora bien: saBinring, oculto en el Puño de Hierro, redujo los escudos del superdestructor a la mitad en su zona más vulnerable, la que encaraba al Mon Remonda. Zsinj vio que podría perder sus dos superdestructores y decidió sacrificar sólo uno: Ordenó que el Beso de la Cuchilla activase la autodestrucción y que todos a bordo abandonasen la nave; además, todos los TIEs debían volver al Puño de Hierro y éste intentaría escapar al hiperespacio. En una retirada tan precipitada, los cazas TIE pasaron a ser muy vulnerables para los escuadrones de Antilles: Durante los siguientes segundos, los pilotos neorrepublicanos destruyeron más cazas que durante todo el resto de la batalla. El Puño de Hierro logró huir, y poco después el Beso de la Cuchilla explotó.
La flota de Solo recuperó a saBinring relativamente indemne después, así como a Loran, que había sufrido un impacto en la batalla. Loran fue llevado a la enfermería del Mon Remonda, y allí le visitaron todos los Espectros para premiarle, jocosamente, con el supuesto Premio a la Pesadilla del Mecánico por haber traído un caza tan dañado que, dijeron, había costado separarlo del cuerpo de Loran. Antilles ascendió a Nelprin a teniente, y Loran reveló que, siguiendo los deseos de Phanan, él se había hecho una operación para eliminarse la cicatriz de la cara. Ekwesh entonces metió en la habitación un carrito con botellas y vasos razonando que, si Loran no podía beber por su estado, los demás beberían su parte; los Espectros brindaron por sus logros y por los ausentes.
Zsinj continuó con planes en diversos frentes. En primer lugar, hizo recoger todos los restos posibles del Beso de la Cuchilla para utilizarlos en un plan en que simularía la destrucción del Puño de Hierro. Al mismo tiempo, sus científicos habían descubierto un proceso de lavado de cerebro sumamente rápido y eficaz con sugestión posthipnótica desencadenada por una frase aparentemente casual, que le permitía infiltrar agentes "durmientes" en la Nueva República en lo que él llamaba Proyecto Campo de Minas. Aprovechando éste, el Proyecto Funeral sería utilizado para sembrar disensión entre especies en la Nueva República, usando agentes de especies selectas y haciendo que Inteligencia de la Nueva República creyese que había una conspiración de twi'leks entre las filas de la Nueva República. Un teniente twi'lek intentó asesinar al Almirante Ackbar en el Hogar Uno; saBinring, casualmente presente, salvó su vida y mató al asesino, pero resultó gravemente herido en el proceso. Sin embargo, ese supuesto fracaso era una victoria para Zsinj porque el auténtico propósito del plan era desprestigiar a toda una especie.
Antilles reunió a los Espectros y a los Pícaros para informarles de su siguiente plan operativo: En un día, los dos escuadrones (además de los Nova y los Arma de Mástil, no presentes en la reunión) partirían en el recién reparado Mon Remonda para retomar la lucha contra Zsinj, por lo que los pilotos tenían permiso durante esa noche, aunque los miembros más reconocibles del Escuadrón (en particular el colosal y velludo Ekwash, uno de los pocos thakwaash en Coruscant; aunque Loran, antigua holoestrella, quiso darse por aludido) debían cuidarse de no ser reconocidos. saBinring había sido transferido a la enfermería del Mon Remonda para que pudiese retomar su puesto en el Escuadrón en cuanto estuviese recuperado. Además, Antilles presentó al nuevo oficial médico de los Espectros, y Espectro Once, el joven devaroniano Elassar Targon; Janson inició presión social indicando que el equipo debía estar compuesto de lunáticos, así que Targon adoptó una pose ridícula y afirmó ser el amo del universo ante todos, ganándose las risas de los dos Escuadrones. Por último, Antilles ascendió temporalmente a Loran al rango de capitán y le puso al mando de los Espectros en su ausencia.
En la primera salida, los Escuadrones Espectro y Pícaro escoltaron al Grupo Uno de la flota de Solo (los cruceros mon calamari Mon Remonda y Mon Karren, la fragata Nebulón-B Tedevium y la corbeta Merodeador Halcón Etéreo) al sistema Levian, respondiendo a una petición de ayuda contra fuerzas ráptor de Zsinj; Solo mantuvo al resto de su flota, el Grupo 2, en el exterior del sistema. Para cuando llegó Solo, las fuerzas de Zsinj se habían retirado ya, así que el general empezó a organizar un esfuerzo de rescate de los supervivientes. Así la flota Solo cayó en la trampa de Zsinj: Cuando Solo estaba ocupado, Zsinj apareció con su superdestructor Puño de Hierro escoltado por un destructor imperial, un destructor clase Victoria, un acorazado y dos cruceros Carraca.
Superado en armamento, Solo intentó llamar a su segundo grupo (El crucero mon calamari Mon Delindo, el destructor Gancho del Cielo y el crucero quasar Perro de Batalla), pero antes de que llegasen, Zsinj hizo venir otros dos grupos (incluyendo otro destructor imperial, otro destructor clase Victoria, tres acorazados, otro crucero Carraca y una fragata Lancero) para cortar la retirada a Solo. Zsinj desplegó sus múltiples escuadrones de cazas TIE para que acosasen al Mon Remonda, mientras intentaba prolongar la batalla lo máximo posible para causar más daños; el propio Puño de Hierro cortaba la ruta óptima de retirada de Solo. Antilles coordinó a los Espectros y a los Pícaros para que escoltasen a los alas-B del Escuadrón Nova en un ataque a los motores de babor del Puño de Hierro: Primero los alas-X lanzaron torpedos protónicos a los motores, y después los alas-B, diseñados para perjudicar a las naves comandante, atacaron con cañones iónicos y consiguieron dañar al Puño de Hierro. Durante ese tiempo, los Novas estaban indefensos ante un posible ataque de cazas, así que los Espectros y Pícaros les protegieron.
Antilles no podía esperar a ver el efecto que causaba este ataque (Por cierto, realmente consiguió reducir la maniobrabilidad del superdestructor), y ordenó que los Espectros y los Pícaros se separasen para los cruceros Carraca de Zsinj, la nave más poderosa que los cazas pudiesen dañar significativamente. Mientras tanto, Zsinj contactaba con Solo para ofrecerle una rendición honorable, y Solo lo rechazó. Loran dirigió a los Espectros en un ataque por la popa de uno de los Carracas; en cuanto los Espectros estuvieron al alcance de los cañones turboláser del Carraca, éste abrió fuego contra ellos. Loran pidió fuego a discreción, especificando que cada disparo debía importar; los primeros en lanzar torpedos fueron Ekwesh y Donos; después de eso, Loran disparó al centro de la nube de detonación, y consiguieron dañar, sin penetrar, el casco de estribor del Carraca. Por desgracia, Janson fue abatido con cañones iónicos y perdió el control de su nave y tuvo que ser recogido por una lanzadera.
Loran reorganizó a los Espectros para un nuevo ataque al estribor del Carraca, salvo los Espectros en TIE (incluido Tainer en esta ocasión, que no volaba como ala de Ekwesh), que atacarían el flanco de babor para dividir los escudos. Para entonces ya no les quedaban torpedos, pero el ataque con lásers fue fructífero: Los Espectros rompieron el casco de estribor e inutilizaron el crucero imperial, recibiendo sólo daños superficiales en el caza de Sarkin. Loran informó a Antilles, que a su vez reportó una victoria similar de los Pícaros contra otro Carraca.
El Puño de Hierro y el Mon Remonda se enfretaron a quemarropa, y sólo entonces Zsinj vio llegar al segundo grupo de Solo, acercándose por el flanco que había estado protegido por los cruceros Carraca... hasta hacía unos instantes. Peor aún, el Mon Karren se interponía en la línea de fuego de Zsinj para proteger al Mon Remonda. Viendo que no podía obtener beneficio de la batalla, Zsinj se retiró; sin embargo, Zsinj había dañado la moral de su enemigo al haberles emboscado con tanta facilidad.
Después de esa batalla, la mayoría de escuadrones, incluido Ekwesh, se reunieron en un salón de pilotos del Mon Remonda para compartir información, discutir sus tácticas y tomar bebidas sin alcohol. Los pilotos Espectros se encontraban razonablemente animados al saber que Janson no había sufrido daños graves. Los Pícaros explicaron que la flota de Zsinj era mayor de lo que todos esperaban y que tenían muchas pistas, pero no podían seguirlas todas por falta de tiempos o recursos, o por el peligro de caer en una trampa, lo cual ofendió a Targon. Inyri Forge, una humana de los Pícaros, propuso tender una trampa a Zsinj usando como cebo al General Solo, e hizo referencia a la batalla de Folor; Ekwesh alzó la voz para exigir, en broma, respeto cuando se hablase de la intachable carrera del Escuadrón Cena, y Forge sonrió. También sonrió el General Solo, que había estado secretamente presente y que aprobó el plan, pero el Halcón Milenario no estaba disponible.
El General Han Solo explicó también que el plan original de Zsinj pasaba por robar el superdestructor Beso de la Cuchilla, pero ahora el señor de la guerra había pasado a su plan alternativo, y no sabían cuál era. Loran propuso investigar Saffalore, en el Sector Corporativo, la sede de la corporación Biomédica Binring, puesto que tenían pruebas de alguna relación entre Zsinj y el proyecto secreto que había modificado genéticamente a saBinring. Solo aceptó que el Mon Remonda pusiera rumbo a saBinring y salió de la sala.
El supersticioso Targon se avergonzó entonces de haber sugerido ante su propio oficial superior que éste fuese un cobarde, lo cual, según su creencia, le gafaba. Targon propuso a tres de sus compañeros Espectros (Nelprin, Ekwesh y Tainer) que le matasen, pero los tres rechazaron la oferta y se centraron en continuar con el plan. Loran propuso construir un falso Halcón, y Forge aceptó continuar hablando del tema. Entonces entró el piloto Pícaro Corran Horn, que se había perdido el inicio de la reunión y pedía un resumen; esto despertó risas generalizadas, sobre todo porque los otros pilotos nunca veían a Horn y Solo juntos y existía el rumor de que eran la misma persona.
Antilles reunió finalmente a los Espectros y a los Pícaros para informarles de la misión en Saffalore: Un comando formado por los Espectros, bajo el mando de Loran, se infiltraría en las instalaciones de Binring; mientras que los Pícaros, bajo el mando de Antilles, darían apoyo aéreo y, con suerte, bombardearían alguna zona enemiga. Antilles temía que Binring les estuviese esperando y tuviese defensas listas, pero no podrían saber cuándo iban a infiltrarse, ni tampoco cómo.
Loran había preparado un plan para acercarse en una lluvia de meteoros provocada como cobertura; los Pícaros organizarían su campañemtno cerca d la capital planetaria Lurark y los Espectros se acostumbrarían. Loran propuso investigar, ya de paso, las actividades del imperio financiero de Zsinj; pero Lara Notsil le rebatió ese punto de la estrategia (El beneficio obtenido no compensaba el riesgo) y la táctica (Los sistemas de inteligencia les descubrirían) delante de todo el mundo, e incluso se sonrojó al ver que todos la miraban. Loran explicó cómo harían la incursión a la fábrica principal de Binring en busca de datos, y Notsil se volvió a negar a usar el método estándar. Esta tercera negativa en serie al debut de Loran como capitán provocó una carcajada general; pero Loran aceptó rehacer su plan en colaboración con Antilles, Notsil y Tycho Celchu de los Pícaros.
Antes de bajar a Saffalore, algunos Espectros hicieron una visita al convaleciente Voort saBinring para animarle, pero no está claro si Ekwesh estuvo allí.
La primera fase del trabajado plan salió según lo previsto: Los dos escuadrones de cazas aterrizaron en Saffalore y montaron su campamento en un claro del bosque. Antilles organizó guardias, y Ekwesh no participó en la primera. Durante el día, varios Espectros humanos robaron un deslizador terrestre y reconocieron el campus de Binring. Algunos de los Espectros fueron asignados a poner rastreadores en los tejados adecuados, y otros (entre ellos Ekwesh) recibieron la tarea de infiltrarse.
Al caer la noche, los Espectros se vistieron de negro, incluyendo máscaras que cubrían sus rostros salvo ojos y boca, para infiltrarse en Binring. Los Espectros humanos se acercaron ocultos bajo el deslizador aparcado en la zona del almacén, y atravesaron camino a pie hasta el cuadrante noroeste. Loran envió a Donos a por otro deslizador mientras Sarkin y Nelprin burlaban las cámaras de seguridad. Nelprin y Tainer prepararon un gancho con fibrocuerda para subirse al almacén más cercano, menos defendido y más alto; desde allí, Tainer se lanzó a otro tejado cercano balanceándose con fibrocuerda, e hizo llamar a Notsil para que desactivaee las medidas de seguridad. Una vez lo hizo, se les unieron los Espectros alienígenas Ekwesh, Passik, saBinring y Targon. Ekwesh se unió al equipo de comandos junto con Janson, Loran, Nelprin, Passik, Sarkin, saBinring y Tainer, mientras el resto de Espectros estaban en la otra misión en los tejados.
Los comandos ignoraban que habían activado algunas alarmas silenciosas, aún cuando ellos estaban seguros de haberlas burlado; el equipo del tejado lo sospechaba, pero no podían informar a sus colegas. La directora de la base asignada por Zsinj, Dra. Edda Gast, hizo enviar tropas de asalto contra los intrusos. Mientras, saBinring les guiaba en lo posible porque él había sido criado en esos edificios; pero Loran y los demás descubrieron pronto que el Imperio había hecho reformas después de la fuga de saBinring. Al parecer, algunas salas habían sido llevadas a otro piso respetando la distribución y decoración.
Los Espectros encontraron una sala con los muebles usados para torturar, drogar y hacer pruebas a saBinring, según él explicaba, pero que estaban inicialmente en otro sitio. Tainer reconoció uno de los aparatos como una unidad de mesa de juego para emitir de la pantalla a la silla; y Ekwesh, que no quería quedarse atrás, reconoció una máquina de lavar ropa similar a la que había en el Yerba Solar. Tainer y Loran descubrieron que las máquinas tenían fuentes de energía propias, en vez de estar conectadas a la red, precisamente para que se pudiesen mover más fácilmente.
Entonces, el suelo se abrió bajo los pies de los Espectros; ellos no lo sabían, pero la doctora Gast acababa de dar esa orden. El grupo, gritando, cayó con los muebles por un pozo oscuro de al menos seis metros. Ekwesh quedó inconsciente por el impacto, Passik también resultó herida, y todos acabaron magullados. Antes de que tuviesen tiempo de reaccionar, un grupo de soldados de asalto apareció en la boca del pozo, exigiendo que les entregasen el equipo de demoliciones o les dispararían; pero Tainer comprendió que estaban en un incinerador y, astutamente, manipuló la situación para quedarse con su equipo y que Nelprin entregase el suyo. En cuanto los soldados se fueron, el incinerador subió la temperatura y llamaradas de cincuenta centímetros surgieron de orificios en la pared; Tainer, rápidamente, intentaba usar su equipo de demoliciones para abrir un agujero en la pared.
En cuanto Tainer consiguió abrir una salida, Loran la usó llevando consigo a la inconsciente Passik, y el resto empezaron a salir, más o menos chamuscados... excepto Ekwesh, que estaba inconsciente y pesaba demasiado para que otro lo llevase a cuestas. Cuando siete Espectros estuvieron fuera, Loran miró rápidamente para ver quién faltaba, pero Tainer fue quien lo identificó.
Un instante después, Ekwesh salió por el agujero con el vello ardiendo sobre todo en el pecho y el costado izquierdo. Relinchando de dolor y sacudiendo los brazos, Ekwesh aterrizó de rodillas sobre saBinring; Tainer derribó a su amigo thakwaash, y ambos le ayudaron a apagar los focos de fuego. Después de eso, el grupo recuperó el aliento.
Loran ordenó retirada completa, con Janson en vanguardia, y fin del silencio de comunicaciones; Janson tomó el equipo de comunicación de Ekwesh e intentó activarlo, pero Gast estaba interfiriendo las transmisiones. Mientras Nelprin ayudaba a Passik a levantarse, saBinring se ofreció a ayudar a Ekwesh pero el thakwaash se negó con la cabeza y se irguió, con ojos vibrantes. Loran entonces añadió que destruirían todo lo que se interpusiese en su camino, y vio que todos los otros Espectros aceptaban con gusto esa orden.
Pronto esa orden fue puesta a prueba: Cuando los Espectros estaban a treinta metros del turboascensor de salida, se abrió una puerta y fueron interceptados por doce soldados de asalto imperiales, un corpulento capitán sin armadura y una mujer civil. Loran veía a sus Espectros heridos y superados en número por una fuerza en mejores condiciones, pero también reconoció al capitán: Ese hombre, Radaf Netbers, un agente de Zsinj, había visto a Nelprin en una misión anterior como miembro de los piratas Murciélagos Halcones. Si la reconocía e informaba, entonces Zsinj sabría que los Murciélagos eran agentes de la Nueva República. Nelprin, comprendiéndolo también, saltó sobre el capitán, y Loran ordenó a los Espectros atacar. Janson fue derribado rápidamente en el enfrentamiento mientras intentaba cubrir a Nelprin de los soldados de asalto.
Mientras los soldados se enfrentaban a los Espectros, Netbers se preparaba para enfrentarse contra Nelprin; él esperaba ganar porque su oponente estaba herida y él se consideraba resistente al dolor. Ekwesh se interpuso entre ambos para proteger a Nelprin y golpeó el rostro de Netbers tan rápido que él ni siquiera vio quién le había pegado. Netbers cayó sobre otro soldado de asalto, viendo las estrellas y notando que le fallaban partes del cuerpo, entre ellas el oído. Ekwesh se inclinó sobre Netbers, que por fin pudo ver el aspecto de su oponente. El thakwaash agarró a Netbers por el cuello de su uniforme y levantó con facilidad los ciento treinta kilos que pesaba el humano. Netbers intentó agarrar los parches quemados del cuerpo de Ekwesh, pero éste le sostuvo la muñeca y, sin esfuerzo aparente, le lanzó contra un muro metálico, rompiéndole el omóplato y algún hueso del cuello. Mientras tanto, los Espectros estaban dando buena cuenta de los soldados imperiales, resultando heridos sólo Sarkin y Janson. Ekwesh volvió a levantar a Netbers, lo tiró contra la pared del lado opuesto, y el capitán sintió ceder su hombro y explotar su cuello antes de expirar. Pese a que había ganado, Ekwesh se sentía también agotado: Se balanceaba, le costaba respirar y se estaba babando mientras avanzaba.
Durante la fuga, saBinring propuso capturar a la doctora Gast, a la que reconoció de su tratamiento. Loran amenazó a Gast con usarla de escudo humano contra los soldados imperiales, salvo que ella les ayudase a salir evitando más guardias. Gast les llevó a un turboascensor oculto cerca del incinerador y, de camino, Tainer propuso utilizar como antena una columna del edificio para poder pedir a los Pícaros apoyo inmediato. Ekwesh estaba demasiado herido, así que no participó en esta tarea; pero fue un éxito y los Pícaros llegaron a tiempo de bombardear la zona marcada por los Espectros para permitirles hacer una escapada rápida por un túnel. Poco después, los Espectros infiltrados se reunieron con el equipo de los tejados y huyeron de Lurark cubiertos por mantas, en un deslizador robado por Donos, mientras los Pícaros arrasaban la zona. Targon empezó a vendar y medicar a Ekwesh durante este tiempo.
En cuanto estuvieron en el campamento, Loran les preguntó si estaban en condiciones de volar, dudando que fuese así; pero sus hombres le sorprendieron: Ekwesh, por ejemplo, estaba aún mareado por los medicamentos, pero dispuesto a pilotar; Tainer se ofreció a ser su líder para que sólo tuviese que seguirle. Los Espectros y su prisionera Gast regresaron al Mon Remonda… y en cuanto estuvieron a bordo, los equipos médicos ayudaron a sacar a los pilotos de sus cabinas y a llevarlos al ala médica. Ekwesh y Janson fueron puestos inmediatamente en tanques bacta. Sólo cuatro de los Espectros (Donos, Notsil, Sarkin y Targon) habían salido razonablemente indemnes, pero Loran estaba orgulloso de cómo habían sobrevivido a lo peor que Zsinj había podido lanzar contra ellos.
Sólo trece horas después de la huida de los Espectros, Zsinj fue informado de la captura de la doctora Gast. Gast tenía información secreta sobre los proyectos de Zsinj, así que éste ordenó activar a su agente durmiente en el Mon Remonda para que éste asesinase a Gast antes de que ella hablase. Al mismo tiempo, viendo que su plan corría peligro, Zsinj aceleró el Proyecto Funeral: Sus agentes durmientes de especies twi'lek y gotal (y después de otras especies) intentarían atacar a importantes líderes de la Nueva República y posiblemente serían detenidos, pero sembrarían la sospecha racial en la República para propiciar su desintegración.
Mientras Ekwesh seguía convaleciente, los Espectros en activo se unieron a los otros escuadrones de Antilles en la batalla de Jussafet Cuatro: El planeta, en espacio imperial cercano al espacio de Zsinj, estaba siendo atacado por fuerzas de Zsinj y había pedido ayuda. Al inicio de la batalla, dos agentes involuntarios de Zsinj revelaron sus colores: Los twi'leks Teniente Tal'dira (Pícaro Cinco) y Oficial de Vuelo Nuro Tualin (Arma de Mástil Dos) intentaron desde sus cazas asesinar respectivamente a Wedge Antilles y a Han Solo, siendo detenidos con fuerza letal respectivamente por Corran Horn y por Tyria Sarkin.
Después de eso, la flota de Solo derrotó a las fuerzas de Zsinj en la batalla. El esfuerzo de Solo en beneficio de un mundo imperial impresionó al Almirante Teren Rogriss del Imperio, que ofreció una tregua extraoficial a Solo compartiendo la información que cada uno tenía sobre Zsinj. Solo aceptó.
Pero al mismo tiempo, el Consejo Provisional de la Nueva República ordenó retirar a todos los twi'leks del servicio activo, incluyendo a los tres a las órdenes de Antilles (Passik, Ven y la mecánico jefe Koyi Komad). Antilles ordenó reunir a los Espectros en el salón de pilotos para lo que llamó "una sesión de especulación y planes dementes de las suyas", e invitó a los Pícaros que quisieran asistir (que fueron Celchu, Horn y Derek "Hobbie" Klivian); Ekwesh y Janson, sin embargo, seguían en bacta por sus heridas. Los Espectros dedujeron correctamente el móvil de Zsinj, crear disensión y un precedente de discriminación racial. saBinring además concluyó que el método de Zsinj podría ser biológico, similar al utilizado con el propio saBinring, lo cual tenía que dejar desequilibrios bioquímicos perceptibles, identificables en una autopsia. Más tarde los Espectros dedujeron correctamente que el procedimiento de Zsinj debía afectar sobre todo a mamíferos; y que él seguiría trabajando basándose en estereotipos raciales como hasta entonces; lo cual sugería un plan concreto que Inteligencia podía detener.
Poco después, Ekwesh y Janson estaban lo bastante recuperados para tener una fiesta de bienvenida en el salón de pilotos del Mon Remonda. Loran se aseguró de que estuviesen sentados en sillas rellenas e hizo un acto según el cual, por haber interceptado daño y salvado al resto, Loran les coronaba reyes con aros de material reciclado; por resistir el tratamiento médico sin quejarse y sin pedir repetir postre, les entrega centros de madera decorados con cintas; y les ofrecía el elogio de sus supuestos súbditos, los Pícaros y los Espectros, que les lanzaron confeti. Janson declaró que lamentaba haber dicho que no siempre se apreciaban los sacrificios en esa unidad, y Ekwesh, que estaba de acuerdo, le preguntó si esa pesadilla era obligatoria en las monarquías; Janson puntualizó que eso se debía más a que Loran era el mayordomo. Loran rápidamente propuso que los dos reyes combatiesen a muerte y que el perdedor fuese lanzado al espacio; Janson le interrumpió con quejas, así que Loran se corrigió y propuso lanzar al espacio al ganador. Sólo la tercera vez se ofreció a invitarles a unas copas.
En general, los oficiales de alto rango como Antilles y Solo no se mezclaban con los otros para guardar las distancias, pero en esa ocasión, y en un intento de animar a Solo, Antilles preparó una insurrección en la cafetería en la que todos debían prescindir de insignias, negar ser sino los sosias de sus personalidades habituales, e ir acompañados de sus droides astromecánicos, divirtiéndose así al romper las restricciones habituales. Este supuesto motín duró un día completo, consiguiendo eliminar semanas de frustración y fatiga ósea al coste de diversas resacas y necesidad de caf. A instancias de Antilles, los pilotos, entre risitas, simularon amnesia selectiva sobre lo ocurrido la noche anterior.
Al día siguiente, los Espectros y los Pícaros se reunieron en un salón del Mon Remonda para que Antilles les informase. También estaba presente el wookiee Chewbacca, legendario copiloto de Han Solo en el Halcón Milenario. Antilles explicó que un grupo cualificado había construido una imitación del Halcón, provisionalmente llamada la Falsedad Milenaria. Chewbacca y Antilles pilotarían la Falsedad a las zonas boscosas de diversos mundos en el espacio de Zsinj, atrayendo la atención de posibles células y facciones pro-Nueva República y, sobre todo, de Zsinj, en un intento de atraerle para un enfrentamiento. En esa primera operación en el mundo comercial Kidriff Cinco, la Falsedad dejaría a dos agentes de inteligencia en el planeta. Los Espectros con TIEs (Janson, Nelprin, Tainer y Targon) irían antes para advertir a Antilles si la seguridad era muy superior a lo que esperaban y para escoltar al Falsedad en la retirada si hacía falta; el ala-X de Celchu viajaría acoplada al casco de la Falsedad; y el resto de Espectros y Pícaros esperarían en la órbita de la luna primaria para ofrecer más escolta en la huida si era necesario. En esa operación, dijo Antilles, el objetivo era llamar la atención y no causar pérdidas al enemigo.
Cuando Antilles hizo un turno de preguntas, Ekwesh estornudó sonoramente; avergonzado, explicó que el bacta le había hecho cosquillas en las fosas nasales. Al salir, Loran y Notsil bromearon sobre el potencial de los estornudos de Ekwesh como arma ofensiva, pero Targon creía que eso había desencadenado un gafe y que había impedido que los Espectros notasen algún fallo del plan; e incluso que Ekwesh estaba condenado. Loran intentó tranquilizar a Targon, sugiriendo que eso no se aplicaba porque Ekwesh había estornudado a propósito para limpiarse. Aún intranquilo, Targon horneó amuletos de pan duro e insistió en pegarlos por el casco de Ekwesh; el thakwaash, insatisfecho con esa actitud, intentaba en vano ahuyentar al devaroniano hasta el último momento antes del despegue.
También antes del despegue, Janson se acercó a los pilotos y les explicó que Antilles no hablaba el idioma shyriwook de los wookiees; aunque Chewbacca entendía Básico, Antilles no podría entender a su copiloto (Al final resultó que Targon tenía razón y había un fallo que no habían visto). Janson hizo una porra con los pilotos preguntándoles qué iba a hacer Antilles cuando Janson se lo dijera, y Sarkin acertó el expletivo preciso. Por lo demás, Antilles subsanó el problema reclutando al androide de protocolo Chirriante como voluntario para la misión.
La inserción de los agentes de inteligencia en Kidriff fue un éxito, y a la mañana siguiente, la Falsedad despegó del planeta del modo más llamativo posible para atraer atención. Las defensas locales mandaron cazas TIE tras el grupo y, aunque Antilles y su escolta derribaron a varios, aún les quedaban un pelotón y medio en su cola según se alejaban. El Falsedad había recibido varios impactos cuando se reunió con los alas-X de los Pícaros y los Espectros. Los cazas neorrepublicanos abatieron a siete TIEs hasta que el líder ordenó retirada.
Tras la batalla, Antilles ordenó a los escuadrones formar alrededor de la Falsedad. Loran se negó y, en un canal de comunicación privado, dio a Antilles información confidencial: Loran había descubierto que su ala, Lara Notsil, era en realidad Gara Petothel de Inteligencia Imperial. Entonces Loran creyó cambiar a un canal privado con Notsil para ordenarle que se rindiese, pero erróneamente Loran pasó a un canal abierto y reveló a los dos escuadrones la verdadera identidad de Notsil. En favor de Notsil, ella aceptó la orden, se describió como una leal Espectro y apagó sus armas. Sin embargo, Myn Donos (que por cierto había iniciado una relación sentimental con Notsil) recordaba que Petothel había sido una de las responsables de la muerte de varios de sus compañeros y, presa de un impulso incontrolable, disparó un torpedo protónico a Notsil. Loran se interpuso en la ruta del torpedo y ordenó a Donos detonarlo, o de lo contrario estaría matando a su oficial superior. Donos lo hizo en el último momento, dañando el caza de Loran al punto que Celchu tuvo que recogerle. Ante ese ataque, Notsil decidió que la República no podía asegurarle protección hasta su propia corte marcial; ella huyó al hiperespacio con rumbo desconocido para el resto de su escuadrón (En realidad fue a Halmad).
Antilles organizó su siguiente instrucción de pilotos para destruir una academia naval de Zsinj en Belsmuth 2; los Pícaros y los Novas se ocuparían de ello. Antilles vio a sus pilotos con la moral baja por la deserción de Notsil y declaró ante todos que él creía a Notsil una leal Espectro. Antilles también dijo que Inteligencia había logrado frustrar varios ataques siguiendo las indicaciones de los Espectros y que tenían la felicitación personal de Cracken; y que habían encontrado indicadores biológicos que identificaban a los agentes hipnotizados de Zsinj, lo cual iba a impedir una nueva situación como la de Jussafet; eso animó a algunos pilotos. El Consejo Provisional todavía no había votado si rescindir la orden de alejar a los twi'leks del servicio activo, pero Antilles permitió volar a sus twi'leks. Por último, Antilles presentó su estrategia de atacar los negocios que daban mucho dinero o activos a Zsinj y usar la Falsedad Milenaria en esas situaciones, para poner paranoico al señor de la guerra. Los pilotos seguían algo desanimados, pero estaban mejor.
En las siguientes semanas, Antilles envió sus cuatro escuadrones en diversas misiones, aunque en la mayoría de ocasiones sólo iba un escuadrón: A veces eran maniobras propagandísticas en que simplemente la Falsedad Milenaria se dejaba ver, y a veces atacaban un blanco concreto como en Belsmuth. Los pilotos sólo tenían tiempo de recibir información sobre la misión, ejecutarla y dormir; a veces salían en dos misiones el mismo día. Inteligencia detuvo completamente el Proyecto Funeral y la brecha entre especies que Zsinj había deseado nunca llegó a producirse. Al mismo tiempo, el Almirante Rogriss también desplegaba sus activos contra Zsinj, causando diversos daños a sus activs y dejándole sólo con su flota, algunos negocios y sus planes más secretos. Zsinj llegó a considerar durante un instante que el Imperio y la República estuviesen colaborando contra él. Hubo batallas en Corsin, Vispil, Null, Taris y Vinsoth durante este tiempo.
Mientras tanto, Antilles preparaba una broma para Janson que implicaba al resto del Escuadrón. Antilles hizo creer a Janson que el Escuadrón había adoptado un ewok, Chulku, en su visita a Kidriff 5, para entrenarle y que engañase a Zsinj haciéndole creer que tenían un piloto ewok; Janson debía ayudar a Antilles a llevar agua y comida en secreto a Chulku sin que Solo y otros oficiales se enterasen. En una de las visitas, Antilles preparó una trampa e hizo que el resto del Escuadrón esperasen a Janson en una sala contigua a la supuesta guarida de Chulku, el comedor de oficiales de alto rango del Mon Remonda; los otros Espectros, incluido Ekwesh, estaban inmóviles en la habitación oscura, como si se hubiesen quedado congelados en una reunión social, y un ewok de peluche serviría de cebo para Janson en un momento posterior. Entonces, Antilles y Janson teóricamente fueron a alimentar a Chulku para descubrir que el ewok había huido y que debía ser capturado; en realidad, Chirriante fingía la voz de Chulku y Passik se movía en la oscuridad para atraerles. Passik tiró encima de Antilles y Janson un líquido limpiador; Antilles decidió que, para impedir que el hedor alejase a su presa, él y Janson debían desnudarse completamente y frotarse el cuerpo con comida para ewoks. Antilles hizo que él y Janson se separasen para entrar en el comedor de oficiales por distintas rutas y flanquear a Chulku. Al infiltrarse, el teniente desnudo vio el peluche y, tomándolo por el auténtico Chulku, saltó sobre él; sólo entonces vio a sus compañeros de escuadrón paralizados, sin moverse ni mirarle, y la situación le parecía onírica. Janson intentó salir de la sala pero, al abrir la puerta, vio que el Comandante Antilles, adecuadamente uniformado, le interrumpía el paso. Antilles llamó la atención del resto de Espectros, que rompieron la pantomima y se burlaron de Janson. Nelprin dio a Janson una capa y un piropo, y Antilles amenazó con distribuir la grabación de lo sucedido.
Antilles organizó después una visita de la Falsedad Milenaria al planeta Comkin 5; al mismo tiempo Lara Notsil, a las órdenes de Zsinj, había descubierto el algoritmo de la República para los movimientos del supuesto Halcón y predijo correctamente el blanco (Sin embargo, Notsil en realidad trabajaba contra Zsinj, infiltrada, y no le reveló lo que sabía sobre el simulacro del Halcón). Zsinj atrapó a la Falsedad en Comkin enviando un acorazado, Represalia, y dos potentes escuadrones de cazas TIE, el Escuadrón Amplia Hacha y su falso Escuadrón 181º de interceptores TIE al mando del también falso Barón Fel. El plan de Zsinj era atrapar al Halcón para que éste llamase al Mon Remonda, y entonces atrapar también al Mon Remonda. Para esa operación, Notsil pilotó uno de los TIEs, topándose con la lamentable sorpresa de que Donos fuese el artillero de la Falsedad.
La Falsedad no pidió refuerzos en forma de nave comandante, precisamente para no dar a Zsinj lo que quería. En vez de eso usó su propia escolta oculta, el ala-A de Dorset Konnair (Arma de Mástil Dos); y consiguió engañar al Represalia para que un explosivo golpease la proa del acorazado, destruyéndola. Eso les dio tiempo suficiente para que llegasen los siete alas-X de los Espectros bajo el mando de Loran (En esa ocasión, Tainer pilotaba el ala-X de Donos y era el ala de Ekwesh).
Loran dirigió a sus Espectros hacia la popa del Represalia, poniéndoles en el mismo lado que la Falsedad y sus enemigos. Cada Espectro lanzó dos torpedos protónicos y en total derribaron a diez TIEs enemigos; los supervivientes se agruparon en parejas y se prepararon para combate cerrado. Pero Loran contaba con que sus hombres tenían aún tiempo de atacar una vez al Represalia antes de enfrentarse a los TIEs, e hizo que la proa no protegida del acorazado recibiese otros catorce impactos de torpedos protónicos, causando daño estructural masivo y destruyendo el puente. Loran entonces ordenó entrar en combate cerrado.
Tainer ordenó a Ekwesh una maniobra: El humano volaría sobre la Falsedad, y el thakwaash, como su ala, bajo la quilla del caguero, disparando contra los dos TIEs que acosaban al carguero. Para sorpresa de Tainer, su blanco había sido marcado como amistoso en los sensores (Era Notsil, intentando comunicarse en secreto con Antilles), y no le disparó; el blanco de Ekwesh, el supuesto Barón Fel, era demasiado rápido para él, y el thakwaash no pudo evitar que disparase y dañase gravemente a la Falsedad. Ekwesh y Tainer siguieron a la Falsedad y a los dos TIEs que le acosaban. La Falsedad estaba sufriendo tales daños que Notsil sólo podía destruirla o revelarse como traidora a Zsinj, así que en vez de eso ella simuló haber recibido un impacto; y al hacerlo, hizo que Fel dejase de acosar a la Falsedad.
Zsinj ordenó cesar el ataque, incluso abandonando a sus pilotos, al ver que no lograría obtener una victoria: Él no iba a enviar el Puño de Hierro a Comkin, y claramente la República tampoco iba a enviar refuerzos en forma de cruceros calamarianos; ninguno de los dos bandos dejaba atrapar sus activos más grandes. La Falsedad y los cazas tuvieron ocasión de formar para un hipersalto de camino al Mon Remonda.
Después de la batalla, el General Solo decidió llevar su flota a Vahaba porque Notsil planeaba llevar allí a Zsinj. Solo también decidió contactar con el Almirante Trigit para que le "prestase" un crucero interdictor con un pozo gravitatorio artificial, con el propósito de impedir que Zsinj huyese al hiperespacio. Trigit aceptó prestar su interdictor Telaraña Estelar, bajo el mando directo del propio Trigit, a cambio de que la República lo escoltase en todo momento con dos destructores clase imperial-2, Crynyd y Gancho Estelar. La mayoría de oficiales y reclutas de la República ignoraban que el interdictor, que ellos llamaban M-317, era imperial. Veinticuatro escuadrones se desplegaron en Vahaba, con Antilles y Donos entre los Espectros. Para esta batalla, Loran sería el ala de Ekwesh porque necesitaban parejas con hipermotor para actividades de reconocimiento; Loran se divirtió haciendo diálogos de radioteatro por comunicador porque había observado que a Ekwesh esto le disgustaba.
Ignorando la trampa del interdictor, Zsinj envió allí su flota, incluyendo el destructor imperial Guantelete Rojo, el destructor clase victoria Sonrisa de Serpiente, dos acorazados, el crucero carraca Canalón de Sangre y otras varias naves. Ekwesh vio un nuevo contacto en su sensor y Loran fue a comprobarlo visualmente: El actor pudo reportar que era el Puño de Hierro. Loran envió rápidamente a Ekwesh en una ruta de ida y vuelta al Mon Remonda para avisar a Solo y atraer a Zsinj hasta el alcance del interdictor.
Sólo entonces Zsinj vio que el enemigo tenía una flota comparable a la suya e intentó huir al hiperspacio; pero el interdictor le detuvo. En cuanto identificó la raíz de sus problemas, mandó al Guantelete Rojo y al Sonrisa de Serpiente a destruir el crucero de Trigit, mientras el Canalón de Sangre les seguía escoltando y el Puño de Hierro se intentaba retirar a velocidad subluz para salir del alcance. Antilles lideró contra el Puño de Hierro a casi todos los escuadrones (excepto a los del Crynyd y los del Gancho Estelar, que debían proteger el M-317), y el comandante ordenó que los más de doscientos cazas avanzasen en hilera, haciendo prácticamente el mismo ataque y vapuleando los escudos del superdestructor en el mismo punto. Después de eso, Antilles ordenó a sus pilotos dividirse en escuadrones y hacer más pasadas a discreción de sus respectivos comandantes, para evitar a los artilleros del Puño de Hierro. Los cazas neorrepublicanos tuvieron muchas bajas pero consiguieron dañar el casco del Puño de Hierro. Los cruceros calamarianos de Solo Mon Remonda, Mon Delindo y Mon Karren aprovecharon la ocasión para atacar con fuego pesado al Puño de Hierro, que respondía dirigiendo su atención a estas naves comandante.
Mientras tanto, el Almirante Trigit sorprendía a Zsinj, e incluso a Solo, con su frialdad y versatilidad aguantando una colisión con el Sonrisa de Serpiente: La nave de Zsinj fue destruida, mientras que el interdictor aguantó. Por desgracia, esa maniobra alejó al M-317 del Puño de Hierro y dio a Zsinj la oportunidad de huir al hiperspacio. El Guantelete Rojo se rindió y el M-317 se despidió formalmente antes de saltar también al hiperspacio.
Zsinj esperaba salir del hiperespacio en la seguridad del territorio controlado por él; pero Notsil había saboteado su hipermotor para dejarle varado en el cercano sistema Selaggis, y razonablemente lejos del resto de su tropa. Con riesgo para su integridad, Notsil informó a Solo de que Zsinj estaba atrapado en Selaggis; Solo dudó si confiar en ella, pero le convenció el descubrir que Zsinj estaba intentando contactar con los piratas Murciélagos Halcones para aumentar sus fuerzas (Resultaba venturoso entonces que Nelprin y Ekwesh hubiesen matado a Netbers en Saffalore para mantener el secreto de los Murciélagos Halcones). Solo y su flota pusieron rumbo a Selaggis, mientras Zsinj intentaba que el resto de su flota fuese a Selaggis a darle apoyo.
Para cuando Solo llegó a Selaggis, la flota de Zsinj incluía el destructor imperial Cadenas de Justicia, el destructor clase victoria Veneno, una fragata lancero de gran eficiencia contra cazas, un transporte de cazas clase Fuego Quasar y varios acorazados; Solo tenía menos potencia de fuego, pero contaba con que sus hombres eran mejores y le serviría para remontar, así que decidió luchar. Lo que Solo no sabía era que Zsinj había traido los restos del superdestructor Beso de la Cuchilla ocultos con un sistema encubridor y cargados de explosivos, para simular la destrucción del Puño de Hierro.
Zsinj planeaba atrapar a los cazas de Antilles en el cinturón de asteroides de Selaggis, para lo cual puso explosivos en algunos de ellos y ocultó su superdestructor en esa zona. Antilles se acercó al cinturón con seis escuadrones e hizo que se separasen en parejas de escuadrones para hacer reconocimiento por la zona: Los Espectros volarían con los Pícaros por una zona; el Escuadrón Corsario y el Escuadrón ambicioso volarían por el otro; y el Escuadrón Sombra revisaría las lunas con el Escuadrón Arma de Mástil. Antilles prmetió un permiso de tres días para quien encontrase el Puño de Hierro.
Mientras tanto, Zsinj observó que el Mon Remonda estaba escudado por siete escuadrones de cazas, sobre todo alas-Y, así que el señor de la guerra ordenó lanzar todos sus escuadrones contra Solo, salvo el 181º y los escuadrones experimentales de Raptors TIE. Estaba cayendo en la trampa de Solo: Junto al Mon Remonda se ocultaba el destructor Gancho del Cielo con sus seis escuadrones de cazas TIE listos para salir. Los TIE de Solo se unieron a la refriega en cuanto llegaron los TIE de Zsinj.
Mientras, en el cinturón, la capitana Mayn de Arma de Mástil encontró el Puño de Hierro, abriéndose camino a tiros por el cinturón de asteroides. El piloto Sombra Uno, viendo la composición de los asteroides, teorizó que el Puño de Hierro se estaba haciendo un anillo protector con pequeñas partículas de roca que podrían romper un caza en esas situaciones. Antilles razonó que la gravedad de los asteroides más grandes atraería esas partículas hostiles, así que los cazas se podrían acercar al Puño de Hierro saltando de un asteroide a otro; y encargó a cada escuadrón que se acercase independientemente. Los cuatro escuadrones estaban en posición para un ataque contra el Puño de Hierro, y en el último momento Myn Donos gritó suplicando que abortasen el ataque: Él había recordado, de sus tiempos en la academia, una situación similar a ésa en la que el enemigo había puesto explosivos en algunos asteroides y, cuando se acercaban los cazas, los había aniquilado de ese modo. Sin conocer los detalles, Antilles confió ciegamente en Donos y abortó; Donos le explicó entonces lo que había deducido, mientras el Puño de Hierro causaba estragos en los Escuadrones Ambicioso y Sombra. Antilles ordenó un acercamiento lateral evitando asteroides con una masa superior a la mitad de un caza, y un ataque al Puño de Hierro por la popa del superdestructor.
Zsinj vio que la trampa para cazas había fallado y llamó a sus escuadrones que estaban atacando el Mon Remonda; eso suponía aceptar pérdidas entre sus pilotos, pero el Puño de Hierro necesitaba protección. Solo preparó su flota para apresar a Zsinj, y entonces recibió otro mensjae de Notsil con los datos diagnósticos de todas las naves de la flota de Zsinj; Solo lo hizo reenviar al resto de su flota mientras Notsil conseguía escapar del Puño de Hierro. Zsinj también envió a la 181º a destruir a los Pícaros y mantenerlos alejados del Puño de Hierro mientras Zsinj escapaba; el señor de la guerra prometió enviar otro escuadrón como refuerzo. De cada pareja de pilotos de la 181º, uno era humanos y el otro era una máquina, con coordinación computerizada desde el Puño de Hierro.
Los Espectros y los Pícaros vieron a la 181º entrar en la atmósfera de Selacron, una de las más grandes lunes que orbitaban el gigante gaseoso Selaggis Seis. Janson, Nelprin, Tainer y Targon persiguieron a los veintidós cazas de la 181º hasta allí y reportaron que estaban bombardeando las ruinas de una colonia supuestamente deshabitada. Decidiendo que no debían permitir eso por si acaso había alguien vivo allí, Antilles ordenó a sus Espectros enfrentarse a la 181º; pero los imperiales maniobraban para no ofrecer un blanco claro: Estaban esperando al resto de Pícaros y Espectros. Mientras tanto, Zsinj sacrificaba sus otros escuadrones contra la flota de Solo en un intento de retenerla; el señor de la guerra pensaba detonar los restos del Beso de la Cuchilla y saltar al hiperespacio para huir.
Los Espectros y Pícaros formaron frente a la 181º sobre las ruinas. Antilles dio a Fel la opción de rendirse, y empezaron el enfrentamiento. Antilles y su ala, Celchu, se enfrentaron a Fel y a su ala; Tainer y Targon viraron en la dirección opuesta para reagruparse con sus alas habituales Loran y Ekwesh. El thakwaash saludó amistosamente a su compañero habitual, y se prepararon para luchar. Un par de TIEs se acercaron a Ekwesh y Tainer y aceleraron; Tainer se puso detrás de Ekwesh, ajustando su posición para cubrir su TIE con un ala-X y, cuando el enemigo estubo cerca del alcance máximo de sus armas, Tainer se elevó sobre Ekwesh y disparó repentinamente al enemigo de popa; después se ubicó bajo Ekwesh para lanzar fuego continuado al líder enemigo. Los escudos de proa de Ekwesh protegían al caza de Tainer.
Mientras tanto, el Barón Fel derribaba a Celchu sacrificando a su ala, pero él mismo era derribado poco después por Antilles; Antilles aterrizó para capturar a este valioso prisionero. Al mismo tiempo, Horn dedujo que su enemigo era un droide, y saBinring comprendió el truco de la 181º. Explicó en comunicación abierta que, analizando la maniobrabilidad del enemigo, deducía que el enemigo estaba enviando datos sensores a una nave nodriza para coordinar, y propuso que los expertos en comunicaciones de Espectros y Pícaros usasen su equipo para interferir la transmisión en la zona durante treinta segundos; si saBinring tenía razón, eso mejoraría rápidamente la eficiencia de sus grupos. Los comandantes de ambos grupos, Loran y Horn, autorizaron que los expertos en comunicaciones Ekwesh y Ran Kether llevasen a cabo ese plan. La técnica funcionó muy bien: En treinta segundos, derribaron a la mitad de los enemigos; y en un minuto, al resto.
Sólo entonces Zsinj pudo enviar los refuerzos de la 181º: Raptors TIE experimentales, con alas trapezoidales y a los que nadie se había enfrentado antes. Lara Notsil entró en la atmósfera para ayudar a Antilles, aunque fue derribada y dada por muerta en el proceso. Mientras, los Espectros y Pícaros demostraban que esos nuevos diseños de Zsinj no eran rival para sus capacidades, especialmente con la coordinación de saBinring: Durante el enfrentamiento, saBinring propuso a Tainer poner rumbo al este, aprovechando que la nave de Tainer era mucho más rápida que la de Ekwesh, y así los nuevos enemigos no podrían hacer una incursión simultánea sobre Ekwesh y Tainer. Optaron por ir a por Tainer, y éste les hizo pasar por encima de un puesto de artillero en tierra que había improvisado Dia Passik tras ser derribada. Passik abatió a uno de los enemigos, y cuando Tainer se giró para volver con Ekwesh, el thakwaash disparó al perseguidor de su amigo: Sus lásers perforaron el casco del TIE mientras éste lanzaba en vano un misíl de impacto que fallaba aparatosamente al golpear un muro en ruinas.
En el espacio abierto, Zsinj abandonaba su nave insignia a bordo de una lanzadera y huía al hiperespacio. El Puño de Hierro entraba entonces en el encubridor y huía al hiperespacio mientras, al mismo tiempo, los restos del Beso de la Cuchilla explotaban, con lo que Solo dedujo incorrectamente que había destruido el Puño de Hierro.
Habiendo terminado la batalla, Antilles reunió a sus pilotos en un salón del Mon Remonda: Los Espectros no habían perdido a ningún piloto en esa batalla; los Pícaros sólo tuvieron un herido y ningún muerto; pero Arma de Mástil y Nova habían sufrido múltiples bajas. Antilles informó de éstas, incluyendo la pérdida de Notsil después de haber enviado información secreta de gran valor; y anunció que muchos pilotos serían transferidos a otras misiones. Antilles anunció que el ascenso a capitán de Loran era permanente, lo cual le valió elogios de sus compañeros, y entonces dio la otra noticia: El escuadrón Espectro era retirado del servicio como unidad de cazas. Esto fue una sorpresa, pero Antilles puntualizó: el General Cracken, jefe de Inteligencia de la Nueva República, estaba tan impresionado con ellos que pidió reubicar a los Espectros a sus órdenes como equipo de comandos, insurgentes o pilotos según la situación. Cracken se basaba en que los objetivos de los Espectros no eran exactamente los del Mando de Cazas. Antilles dijo que nadie estaba obligado a aceptar, y que podían informarle a él en privado, pero que los que aceptasen serían aceptados de inmediato con la gratitud personal de Cracken (Janson fue el único que lo rechazó en ese momento). Antilles pasó a hacer públicos los ascensos, y anunció una copa en el salón de pilotos para celebrar su victoria.
En realidad, eso es todo. Al menos eso es todo lo que puedo decir sobre Ekwesh. Sé que los Espectros se convirtieron realmente en una fuerza de inteligencia a las órdenes de Cracken, y que antes de tomar esa copa, Loran habló con la mayoría de sus compañeros y muchos de éstos le dijeron que se pasaban a Inteligencia; pero también sé que Donos lo rechazó, y podría haber pasado con Ekwesh también. Es lo que tiene esto de Inteligencia, que se obtiene menos fama y sus operaciones son menos publicitadas.
Sé que los Espectros fueron una unidad excepcional en Inteligencia, tanto por su gran rendimiento como porque eran raros con ganas; incluso retenían rangos militares en el Mando de Cazas. Obtuvieron más autonomía y una reputación legendaria en Inteligencia de la Nueva República gracias a sus proezas. Bajo el mando directo de Loran, trabajaron en posteriores campañas como la lucha contra la Almirante daala, la Crisis de la Flota Negra, la búsqueda del Documento Caamas y el conflicto contra los yuuzhan vong. Después de éste, los Espectros se convirtieron en la unidad de campo destacada de Inteligencia de la Alianza Galáctica. El nombre de Ekwesh era mencionado como uno de los miembros más notables del Escuadrón Espectro.
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El mandaloriano thakwaash: Este probable thakwaash respondió en 32 ABY a un anuncio en prensa que buscaba candidatos para mandalorianos, y se presentó en la dirección designada con una armadura traída de casa, al igual que con muchos otros candidatos. Jango Fett se hizo pasar por el organizador y, mientras informaba sobre las supuestas reglas del Club Fett, mató a diversos candidatos y ahuyentó al resto. No está claro si el thakwaash huyó o murió; tampoco está confirmado que esta persona fuese un thakwaash (aunque desde luego parecía uno); y para acabar de estropearlo todo, esta historia fue publicada en la serie Relatos así que no entra en continuidad (lo cual explica que un thakwaash esté paseando por la galaxia 36 años antes de que la especie tuviese hipermotor; aunque claro, el cánon lo autoriza como situación excepcional). 
