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Así, en el año 11 DBY, el político calibop Ponc Gavrisom fue elegido para servir en el Senado Galáctico de la Nueva República. Por entonces, Gavrisom se caracterizaba por su imperturbabilidad y solemnidad. Hablaba con suavidad incluso cuando presentaba medidas severas, y muy rara vez su voz adoptaba un tono violento. Sin embargo, en algunas ocasiones, permitía que su rostro alargado reflejase la gravedad de sus pensamientos.
Como casi todos los calibops, Gavrisom tenía más facilidad para la palabra que para la acción. Han Solo opinaba que Gavrisom sólo sabía hablar y, despectivamente, le apodó "Puffers". Chewbacca, sin embargo, admiraba al calibop en una de sus poquísimas discrepancias con el coreliano.
Con una formación adecuada para su trabajo, Gavrisom estaba familiarizado con el derecho intergaláctico e incluso con los potenciales peligros de presentar un proyecto de ley, pese a que rara vez la República aprobaba nuevas leyes. Gavrisom también tenía conocimientos de economía, tanto en general como aplicados a los miembros más importantes de la República, y por supuesto conocía la situación del conflicto con el Imperio Galáctico (Precisamente, en sus tiempos el Imperio cada vez era menos peligroso). El calibop también conocía y respetaba la labor de un político previo, Bail Prestor Organa de Alderaan, padre adoptivo de su Jefa de Estado, la Princesa Leia Organa Solo.
En el año 18 DBY, Leia Organa Solo era la Jefa de Estado de la Nueva República y había dirigido al naciente gobierno en momentos dramáticos como "La Crisis de la Flota Negra", el "Alzamiento de Almania" y la "Insurrección Coreliana". Sin embargo, muchos eran críticos con la actitud y medidas de Organa Solo. Disgustada con el pago que recibía por trabajar en política, Organa Solo exigió una excedencia indefinida como Jefa de Estado, y ésta le fue concedida. Se llevaron a cabo elecciones provisorias, y Ponc Gavrisom las ganó.
Gavrisom se convirtió en el Presidente del Senado y de la Nueva República. Como Jefe de Estado (a veces llamado Jefe de Estado en Funciones), pero sin autoridad absoluta en todos los planetas, Gavrisom pronto descubrió el botón que dejaba sin audio los micrófonos de todos los Senadores, y lo utilizaría repetidas veces para recuperar el orden en un debate. Entre otras maniobras políticas, también se dedicaba a distraer la atención de los senadores pasando a un informe de economía o del ejército, dando a sus colegas la oportunidad de meditar con calma: Siempre fue un tipo dispuesto a utilizar todos los recursos a su alcance. De hecho, siendo un firme creyente en la Fuerza, Gavrisom solicitaba el consejo de los Jedi cuando tenía ocasión.
El Presidente Gavrisom demostró una gran integridad durante su mandato. Repetidas veces se negó a utilizar medios inmorales para alcanzar fines nobles. Únicamente, en caso de que una noticia pudiese afectar en mayor medida a algunos senadores, Gavrisom se tomaba la molestia de advertir en privado a esas personas del comunicado que haría posteriormente, pero no alteraba su agenda por ello. Por otro lado, también estaba dispuesto a respetar la letra de un acuerdo más que su espíritu si eso era estrictamente necesario.
Corría el año 19 DBY. La Nueva República seguía oficialmente en guerra contra el Imperio, por entonces llamado Remanente Imperial. Los herederos de Palpatine apenas controlaban mil sistemas planetarios en ocho sectores. En tiempos recientes, las hostilidades habían sido accidentales y escasas.
Por ello, Gilad Pellaeon, comandante en jefe de las fuerzas militares del Imperio, propuso una capitulación completa a la Nueva República antes de que el Imperio fuese aniquilado. Los otros líderes imperiales, los Moffs, mostraron reticencia pero en su mayoría aceptaron rendirse a cambio de que el Imperio sobreviviese. Pellaeon entonces envió un emisario con la oferta de paz a Morishim, y él se ocultó para evitar que los moffs le destituyesen si se lo pensaban de nuevo. Sin embargo, uno de los moffs, Villim Disra, se oponía a esta medida y capturó al embajador de Pellaeon antes de que pudiese entregar su mensaje. Pellaeon esperaba en vano, creyendo erróneamente que la República estaba considerando sus condiciones.
Ajeno a todo esto, Gavrisom se preocupaba más de la política interna. Los diamala y los ishori eran dos especies habitualmente enfrentadas por motivos comerciales. En ese momento, los diamala se negaban a confiar en patrullas de seguridad locales cuando visitaban puertos ishori, y los ishori se negaban a autorizar el acceso a sus planetas a naves diamala armadas. Gavrisom decidió organizar una reunión entre ambos en Iphigin, un punto de importantes transferencias sectoriales y por tanto lleno de activos de todos los bandos (para evitar que los diamala o los ishori iniciasen violencia). Entonces llamó a Leia Organa Solo, que estaba en Wayland, para pedirle que fuese la mediadora.
El marido de Organa Solo, el general Han Solo, no quería molestar a su esposa que estaba descansando, y decidió que, como enlace oficial de la República con la Asociación de Pilotos Independientes, él estaba cualificado para llevar a cabo estas negociaciones si le acompañaban sus amigos Chewbacca y Luke Skywalker. De lo contrario, pensaba él, el gobierno central nunca permitiría a Organa Solo descansar tranquila. Por supuesto, el general Solo no consiguió alcanzar un acuerdo, pero para cuando Organa Solo se enteró, era demasiado tarde para que interviniera sin ridiculizar aún más a la República.
Mientras tanto, el devaroniano Lak Jit se hacía accidentalmente con una copia incompleta del llamado Documento Caamas, que demostraba que algunos bothan de alta alcurnia habían colaborado con el Imperio Galáctico en el 19 DBY, para que el Imperio atravesase las defensas del planeta Caamas; después, posiblemente sin que los bothans lo supiesen, el Imperio arrasó con la especie nativa caamasi. El contrabandista Talon Karrde, asociado ocasional de la República, y Leia Organa Solo se hicieron con el Documento Caamas y así pudieron comprobar que la copia de Jit no incluía nombres de bothans implicados.
Pero para entonces demasiada gente sabía del descubrimiento de Jit. Gavrisom tenía que presentar la situación en el Senado, aunque antes asignó a Organa Solo la labor de intentar descubrir los nombres de los bothans implicados (Ella a su vez le colocó el marrón a Inteligencia). Intentando minimizar el daño, Gavrisom explicó que un *pequeño grupo" de bothans "no identificados ni identificables por el momento" habían estado implicados en la tragedia de Caamas.
El senador bothan Borsk Fey'lya reconoció que su especie sabía esto, pero ellos tampoco conocían los nombres. Varios delegados, incluyendo a los opquis y los forshul, exigieron que todos los bothans fuesen castigados, pese a que Gavrisom les indicó las diferencias entre el derecho neorrepublicano, que prohibía castigar a los inocentes, y la justicia forshuliri, que aprobaba el castigo a un grupo. Los ishori, ayrou y otros sugirieron que la especie bothan estaba ocultándoles información, y el debate degeneró al punto de que Gavrisom tuvo que cortar el audio. No resultó suficiente; en cuanto Gavrisom les cedió la palabra, ni siquiera la mediación de Organa Solo pudo impedir otro alboroto. El Presidente cortó el audio por segunda vez consecutiva, se negó a continuar el debate en ese momento, explicó que estaban intentando obtener los nombres de los implicados, y pasó a analizar el informe de economía, que por cierto se alargó más de lo normal. Pese a que ningún comité tenía nada digno de ser hablado, Gavrisom los recorrió todos, intentando que el incidente quedase un poco más ahogado.
Poco después, Gavrisom recibió una petición, firmada por muchos senadores, instando a la Nueva República a que obligase a los bothans a indemnizar a los caamasi supervivientes. Según la petición, los bothans deberían buscar un mundo adecuado para los caamasi y reformarlo, terraformarlo si fuese necesario. Gavrisom llamó a Organa Solo y a Fey'lya a su despacho. Fey'lya explicó entonces que los bothans habían estado falsificando en secreto sus libros de cuentas para animar a inversores externos, pero que en realidad no tenían riquezas suficientes para afrontar tal empresa, ni las tendrían posiblemente en menos de una década. Gavrisom mantuvo la flema pese a que estaba totalmente indignado.
El Presidente pidió consejo a Organa Solo, como Jedi que era, y escuchó su informe de progresos en la búsqueda de nombres, que era bastante escaso; más posiblemente, la República tendría que invadir un planeta imperial para acceder a una copia del Documento. La situación era difícil, pero Gavrisom preparó su estrategia.
Como Presidente, el propio Gavrisom intentaría ganar algo de tiempo; sería imposible ganar diez años, sobre todo si alguien proponía esa idea como proyecto de ley y el Senado lo ratificase. Mientras tanto, Organa Solo viajaría a Bothawui para analizar los auténticos registros financieros de los Clanes Combinados de los Bothan, y Fey'lya bajo ningún concepto les avisaría. La autoridad de Gavrisom para ver la contabilidad bothan resultaba insuficiente, y Organa Solo tuvo que recurrir a un ardid simulando que su droide pertenecía a Fey'lya.
Pero, mientras tanto, el Imperio llevaba a cabo sus propios planes. Un saboteador abrió fuego contra el líder del clan Rayl'skar en Bothawui de modo que parecía que había sido Han Solo. La investigación no pudo demostrar nada contra él pero, viendo que la polémica se hacía cada vez más grande, Gavrisom decidió tomar medidas. Llamó al almirante Ackbar y le encargó preparar una incursión contra el Ubictorado Imperial en el planeta Yaga Menor, posiblemente el mundo más protegido de toda la galaxia, para intentar robar una copia del Documento Caamas.
Utilizando la Crisis de Caamas como excusa, la Nueva República empezó a dividirse entre sistemas que exigían castigar a los bothans y otros que se negaban a permitirlo. Gavrisom se veía abrumado por su nueva agenda de compromisis diplomáticos para impedir que saltasen chispas.
Mientras tanto, un falso Gran Almirante Thrawn reapareció, supuestamente venido de entre los muertos. En realidad, se trataba del actor Flim, siguiendo las órdenes del moff imperial Villim Disra y de su sicario, el clon de Grodin Tierce; sin embargo, Thrawn servía como símbolo para unificar el Imperio mientras que la Nueva República se dividía.
El falso Thrawn se reunió con el senador diamala Porolo Miatamia y con Lando Calrissian. Ofreció su ayuda a Gavrisom para resolver la crisis: Thrawn sólo necesitaba entrevistarse con los líderes bothan y los culpables no podrían ocultarse de su agudeza. Por supuesto, el Imperio, que "sólo quería ayudar" a la República, también estaba investigando en sus archivos en busca del Documento Caamas, pero eso les podría llevar semanas o hasta meses. Thrawn además sugirió que Gavrisom podría no querer resolver la crisis.
Miatamia y Calrissian informaron al Senado y a Gavrisom. De nuevo, la opinión estaba dividida: Éstos no temían a Thrawn porque el Imperio contaba con pocos recursos por entonces; ésos sugerían un ataque preventivo que, en opinión de aquéllos, podría ser muy perjudicial. En todo caso, Gavrisom tomó la decisión de no permitir bajo ningún concepto que un oficial de un ejército enemigo interrogase a líderes de un mundo neorrepublicano, ni tampoco reunir al ejército para atacar al Imperio en tanto que sus tropas y naves estaban esparcidos por la galaxia para impedir guerras civiles. El senador ishori Ghic Dx'ono, por otro lado, dudó sobre la credibilidad de los testigos. Gavrisom, desesperado y con un calambre en el dedo de apagar el audio, cedió la palabra al almirante Drayson para hablar de la situación militar.
Cuando un grupo de leresai impidió actuar al Escuadrón Pícaro en un ataque contra varios bothans, el general Garm Bel Iblis protestó contra Gavrisom por la politización del ejército, pero Gavrisom en ese caso tenía las manos atadas.
Mientras tanto, varias especies, incluidos los diamala, los sif'kries, y los mon calamari, enviaron sus naves de guerra a proteger Bothawui. Pronto se unirían a otros grupos, tanto de defensores como de potenciales atacantes, en la órbita, y todo ello siguiendo un plan del Imperio Galáctico que quería aprovechar la ocasión. Gavrisom se mudó a una de las naves de Bothawui para estar cerca del epicentro de los hechos y para intentar calmar a los diamala y los ishori (los más propensos a la violencia), y marcó el horario de la ciudad de Drev'starn para seguir alguno.
Garm Bel Iblis, Wedge Antilles y el Escuadrón Pícaro esperaban que se les asignase ir a Bothawui y proteger la paz, pero el almirante Ackbar les interceptó y les dio la misión de obtener una copia del Documento Caamas en Yaga Menor, explicando que las órdenes venían de Gavrisom. Les dio dos semanas para preparar el plan de ataque.
Mientras tanto, Organa Solo y su marido visitaban por sus propios motivos el planeta Pakrik Mayor. Allí fueron atacados vanamente por los clones imperiales Carib Devist y Sabmin, que creían que Organa Solo había sido enviada por Gavrisom. Poco después, el jefe de criptografía de la República, Zakarisz Ghent, se infiltró en los archivos de Gavrisom para averiguar la localización de Bel Iblis y de Organa Solo; puesto que Bel Iblis estaba ausente, se reunió con Organa Solo y, de camino, confraternizó con el caamasi Elegos A'Kla.
Gavrisom intentaba mediar entre los enfurecidos Miatamia y Dx'ono en una reunión privada mientras Bel Iblis preparaba su plan, para lo cual contactaba con el contrabandista maestro Booster Terrik, y a la vez las flotas se agrupaban en la órbita de Bothawui.
El falso Gran Almirante Thrawn dio una copia falsa del Documento Caamas a Han Solo; Organa Solo puso rumbo a Bothawui para informar a Gavrisom de lo que ella creía era un avance decisivo, en tanto que no sabía de las dos falsificaciones, y además de otra noticia decisiva. Le costó alcanzar la nave de Gavrisom, pero con diplomacia llegó adelante.
Organa Solo presentó a Gavrisom una petición oficial del comandante en jefe de las fuerzas armadas imperiales, el almirante Gilad Pellaeon. El Imperio quería al fin firmar la paz con la Nueva República, a cambio de retener los sistemas planetarios que les quedasen. Gavrisom no podía permitirse eso; la diversidad de la Nueva República estaba a punto de fragmentar el gobierno central, y el Presidente necesitaría cualquier cosa disponible para mantenerlos unidos, aunque fuese un enemigo común. Por eso, Gavrisom se permitió dudar de la sinceridad de Pellaeon, o incluso de la libertad de Pellaeon para hacer esa oferta ahora que Thrawn estaba en escena. Si era necesario, aunque la historia fuese a tratar a Gavrisom como un monstruo, el Presidente tendría que estar preparado para iniciar un ataque unificado contra el Imperio. Por otro lado, sabiendo que Organa Solo no compartía esta opinión, Gavrisom le ofreció recuperar la Jefatura de Estado; pero ella no podía permitir que la nave neorrepublicana cambiase de capitán a medio viaje.
El falso Thrawn, siguiendo el plan de Disra, había ocultado el destructor "Tiránico" y otras dos naves de guerra en un cometa la órbita de Bothawui. El capitán del "Tiránico", Nalgol, seguía atentamente las acciones de Gavrisom y asumió que todo iba según el plan.
Han Solo descubrió que su copia del Documento era falsa. Se reunió con su esposa y le dijo su plan: Exigirá a Gavrisom y a todos que abandonen Bothawui antes de hacer público el Documento... y ahí se acababa el plan. Organa Solo propuso que ella y Gavrisom se reunieran con los líderes ishori tal y como tenían planeado, mientras Calrissian intentaba calmar a los diamala. En plena planificación, Carib Devist se presentó y ofreció su ayuda a Gavrisom, informando a Organa Solo de las naves imperiales ocultas.
Siguiendo la agenda, Gavrisom y Organa Solo se runieron con los ishori en la nave "Predominio". El "Tiránico" entonces inició ataques contra las naves republicanas, fingiendo que los disparos venían del "Predominio". Aunque Gavrisom ordenó el alto el fuego, el Imperio envió órdenes falsas de fuego a discreción y bloqueó las comunicaciones, y el Presidente no pudo controlar a sus súbditos.
Organa Solo informó a Gavrisom de la presencia imperial, y Gavrisom quiso convencer al capitán de la nave, Av'muru, de que otra amenaza era prioritaria; pero Av'muru se centraba en los atacantes diamala. Gavrisom entonces intentó ayudar a Organa Solo a contactar con su marido telepáticamente, ofreciéndole valiosos consejos.
Descubriendo gracias a esto que los imperiales se ocultaba en un cometa, Organa Solo intentó usar la Fuerza para manipular los mandos de la nave, pero el piloto la detectó. El capitán Av'muru amenazó con declarar la guerra a la Nueva República en el nombre de la Confederación Ishori si Organa Solo no cejaba. Para evitar esa situación, Organa Solo dimitió como senadora, presidenta y miembro del Alto Consejo, con lo que actuaba como ciudadana sin privilegios diplomáticos. Gavrisom se acercó a ella durante la conversación. Av'muru decretó que Organa Solo se había amotinado en una nave de guerra ishori y que por tanto debía ser ejecutada, y Organa Solo intentó llegar al cometa antes de que pudieran detenerla.
Entonces, Gavrisom tomó el mando del "Predominio" en nombre de la Nueva República, requisándolo durante una emergencia según la sección 45-2 de los Tratados de Alianza que, según Av'muru y Gavrisom explicaron, habían sido redactados con cierta vaguedad para no indicar claramente cuándo empieza la requisa. Gavrisom, que por cierto rechazó la dimisión de Organa Solo, decidió que la requisa había empezado cuando ella había movido la nave hacia una fuente de peligro percibida. Al no poder comunicarse con su gobierno, Av'muru se vio obligado a aceptar la visión de Gavrisom, y cedió el control. La nave encontró el destructor imperial poco después.
Incluso al descubrir la presencia imperial, Gavrisom se temía que muchas naves de supuesto aliados desertasen si se les pedía combatir en defensa del planeta Bothawui, y los refuerzos tardarían en llegar. Buscando desesperadamente un general que resultase al menos aceptable para todos los bandos en división, Gavrisom pidió ayuda a Lando Calrissian.
La batalla se ganó no sólo gracias a esto, sino también a la oportuna intervención de Talon Karrde y de Gilad Pellaeon, que descubrieron el plan de Disra y el engaño de Thrawn. Disra y Flim fueron arrestados, y el clon de Tierce murió durante su captura. Luke Skywalker y R2-D2 obtuvieron una copia completa del Documento Caamas, que identificó a los bothans implicados; aquéllos que estaban en esa lista y seguían con vida, fueron arrestados y llevados a juicio.
Gavrison saluda a Pellaeon
Quince días después de la batalla de Bothawui, Gavrisom se reunió con Pellaeon en la sala de mando secundaria del destructor de éste, el "Quimera", y en la órbita del planeta Bastión, para firmar el acuerdo de paz que acabaría con la guerra entre la Nueva República y el Imperio (ver ilustración). Talon Karrde aprovechó la ocasión para vender a Gavrisom, a Pellaeon y a Bel Iblis la idea de un servicio de inteligencia conjunto, de modo que cada bando pudiese saber por sí mismo que el otro bando no estaba planeando ninguna gran operación contra ellos. El armisticio fue duradero, y durante tres años no hubo ningún problema grave.
En el 21 dY, Ponc Gavrisom abandonó la Presidencia, cediendo su puesto a Leia Organa Solo y no tenemos más datos de él.
© S I T H N E T
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Sección creada por Skippy Farlstendoiro y Al Noah para SithNET
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Los calibops son una especie poco conocida, pese a que uno de ellos fue el primer presidente no humano de la República en al menos sesenta años. No hay mucho que se sepa de ellos, pero empezaré por hablar de su aspecto.