LO QUE SOMOS NUNCA CAMBIA, LO QUE PANSAMOS SI
Sola y abandona, tras ver morir a la mayor parte de las Hermanas de la Noche Ventress viaja hasta Tatooine para iniciar una nueva vida tal como le sugirió Talzin. Nada más llegar allí la antigua asesina de Dooku intenta olvidad sus penas ahogándolas en alcohol y entra a tomar unos tragos en la cantina de Mos Eisley.
Cuando la joven va por su segundo lingotazo un alienígena de piel lechosa la interrumpe y trata de iniciar una charla que ella no le hace el menor caso. Después, antes de que el desdichado sujeto pueda hacerle nada, la joven apoya discretamente su sable contra el costado del alienígena y lo enciende y apaga rápidamente matándolo mientras suelta un lacónico "No soy muy habladora".
Los clientes del bar levantan las cabezas brevemente, pero enseguida siguen a los suyo y, mientras dos voluntarios sacan el cuerpo fuera, el barman indica a Ventress que hay dos personas que quieren verla. Ventress se acerca a ellos y loe extraños, que se presentan como los cazarrecompensas Bossk y Latts Razzi, le dicen que, sin demostrar mucha pena, que el tipo al que ha matado se llamaba Oked y era compañero suyo.

Latts Razzi y Bossk hablan con Ventress sobre la muerte de Oked
La pareja amenaza a la joven con llamar a las autoridades si no se presta a ocupar el lugar del fallecido en un grupo que se está formando y, aunque Ventress nunca había pensado en convertirse en cazarrecompensas, se ve obligada a aceptar el ofrecimiento que cuenta con el aliciente de ofrecer un suculento pago.
En un arrabal de Mos Eisley el trío se reúne con el resto del grupo que esta compuesto por un humano llamado Dengar, un mortífero androide llamado C-21 Highsinger y por el joven Boba Fett que dirige, pese a su corta edad, la misión. Cuando Ventress es presentada como la sustituta de Oked elude revelar su nombre diciendo que no lo tiene y, aunque no acepta de buena gana recibir ordenes de alguien tan joven termina siendo reclutada.
Varios días después "El Diente de Hound", la nave de Bossk, aterriza en una lejana estación espacial y desde esta llegan, usando un kilométrico turboascensor hasta el subsuelo de Quarzite, un planeta presurizado al que sólo se puede llegar así y donde solo se puede vivir en el interior de las profundas cavernas.
Los cazarrecompensas se reúnen con el Mayor Rigosso, uno de los hombres de Lord Otua Blank, el opresor gobernante del planeta, que desea que protejan un cargamento muy especial que debe llegar a su jefe transportado en un tren que recorre una red de túneles. Rigosso, que los acompañara en el viaje, les dice que no deben abrir la caja que transporta en ninguna momento y les avisa que el trayecto será movido ya que los piratas tratarán de robarla.
Los cazarrecompensas y los hombre de Rigosso montan en el tren subterráneo y se forman tres grupos. Así, mientras Dengar y Ventrees protegen la parte posterior del vehículo, Boba Fett y Bossk vigilan la sala de maquinas y Latts y Highsinger vigilan la misteriosa caja que han depositado en la bodega.
Los Guerreros Kage no tardan en parecer y varias docenas de ellos saltan al tren. Asajj y Dengar los frenan mientras este último de al aviso "Hey, los de alli adelante, tenemos compañía". Los asaltantes son ágiles y tiene espadas eléctricas pero muchos de ellos caen, especialmente ante Highsinger que esconde todo tipo de mortales secretos en su cuerpo metálico.

Latts Razzi lucha con el líder de los guerreros Kage
En el vagón de cola Dengar termina siendo empujado fuera del tren y Asajj, sóla y superada en número pide ayuda. En respuesta Boba manda a Bossk a la parte trasera pero es emboscado antes de que pueda llegar y arrojado fuera del tren. El líder de los asaltantes llega hasta la bodega y, aunque Latts es una hábil luchadora en el cuerpo a cuerpo, consigue lanzar a esta y a Highsinger fuera del tren y mata al Mayor Riggoso lanzándole una espada mientras dice "Quiero lo que es mío".
Sólo Boba Fett se interpone entre el líder de los Kage y la caja y aunque este trata de protegerla no es rival para el pirata. Fett termina cayendo al suelo y la caja que se abre revelando que en su interior hay un joven muchacha. Fett se acerca a ella y le dice que no se preocupe que él la protegerá, pero ella le golpea y corre hacia el asaltante pues se trata ni más ni menos que de su hermano Krismo.
Fett trata de imponerse a Krismo pero es noqueado por este y cuando su hermana, que se llama Pluma se abraza a él llega Ventress. Krismo usa todo tipo de trucos pero la antigua alumna de Dooku consigue derrotarlo y, con Fett ya despierto lo esposa para asegurarse que no volverá a molestarlos. "Yo no elegí nada de esto. Nunca pedí ser secuestrada y separada de mi familia. Nunca sabrás que se siente ya que par ti es sólo otro trabajo más" dice la joven Pluma sin saber que ese es también el pasado de Asajj y que ha empezado a replantearse la misión.
El tren llega a su destino donde espera ansioso Otua Blank y Asajj, tras entregar la caja cobra la recompensa y se marcha en el tren instantes antes de que este la abra y encuentre a Fett amordazado en su interior. Unas millas más adelante el tren se detiene y Ventress deja que Pluma y su hermano se marchen aceptando un puñado de créditos que le ofrece uno de sus hombres.
Ventress regresa a la estación donde se han reunido los otros cuatro compañeros de misión tras caer del tren y les entrega los créditos diciendo que ha retirado su parte y que pueden repartirse el resto. Dicho esto añade que guarden la parte de Boba Fett para cuando este llegue y, aunque le piden que se quede con ellos ella se niega. Si, se labrará una nueva vida como cazarrecompensas pero sin formar parte de ningún grupo.
|