"Deben ser precursores de una invasión … tendríamos que matarlos ya mismo" (Ludo Kressh)
Ludo Kressh era descendiente de los Jedi exiliados que se mezclaron con los originarios Sith y cuando su potencial para controlar la fuerza fue descubierto se el entrenó hasta convertirlo en un poderoso líder Sith.
Tenía un hijo llamado Elcho, también conocido con el sobrenombre de "Kressh el joven", y cuando no estaba realizando campañas bélicas pasaba la mayor parte del tiempo en su palacio del planeta Rhelg donde se dedicaba al estudio de la magia con la ayuda de su hijo y de familias de humanos esclavos que cubrían todas sus necesidades.
Su trato para con estos últimos era terrorífico y, en una ocasión, cuando una joven de tan solo 13 años llamada Seelah, no curó como debía una herida que había sufrido en uno de sus pies, durante una batalla, ordenó la ejecución de toda su familia.
Aunque era sumamente poderoso tuvo la mala suerte de coincidir con Naga Sadow, otro gran Lord Sith con quien se disputó el control de la Orden tras la muerte de Marka Ragnos, el noveno lord del Sith. El duelo por el trono entre ambos comenzó en el mismo funeral donde el espíritu del fallecido se apareció ante ellos y vaticinó que si los Sith seguían peleándose entre ellos acabarían con su Edad Dorada.
El espíritu de Marka Ragnos se aparece a Naga Sadow y Ludo Kressh
La aparición de Ragnos consiguió que la lucha cesase, pero ambos siguieron estando enfrentados motivo por el cual cuando los hermanos Gav y Jori Daragon, descubrieron por casualidad el imperio Sith fueron encerrados en una cárcel del planeta Ziost sin que se supiese bien que hacer con ellos.
Sadow era partidario de aprovechar la ocasión para atacar la República ampliando así el Imperio Sith pero Kressh, mucho más conservador, pedía prudencia. Los Sith estaban divididos y cuando se reunieron en el planeta Ziost para discutir el asunto el artero Sadow aprovechó la ocasión para proclamarse Señor Oscuro del Sith.
Horak-Mul, descontento con la ambición de Sadow y, asustado por lo que su espíritu impetuoso podía acarrear para la Orden, se volvió un incondicional de Kressh pero, sabedor de los riesgos que suponía hablar en contra del nuevo Señor Oscuro, mantuvo su afiliación en secreto. Gal-Ram compartía sus ideas y ambos hicieron causa común y conspiraron en silencio en favor de "su candidato".
En un intento por convencer a los Sith de que el ataque era la mejor opción Sadow organizó un atentado en el hangar de Ziost usando la nave de los Daragon para que todo el mundo creyese que se trataba de una acción ofensiva de la República que precisaba una rápida respuesta.
Horak-Mul y Gal-Ram en Rhelg con Kressh
Kressh, que era muy desconfiado, analizó los restos del suceso y descubrió restos de un estandarte de Sadow que probaban que este había sido preparado por su rival. El Sith se puso entonces en contacto con Gal-Ram y con Horak-Mul y los citó en sus aposentos de Rhelg donde, tras contarles lo que había descubierto, los convenció para que le ayudasen a acabar con Sadow.
El plan que trazaron consistía en atacar por sorpresa la base que tenía Sadow en Khar Delva y las flotas de Gal-Ram y Horak-Mul así lo hicieron arrasando el lugar en un rápido envite. Para su desgracia el lugar era solo un señuelo y la flota de su rival, oculta tras la luna Khar Shian, se lanzó contra ellos cogíéndolos por sorpresa.
Todo formaba parte de un pérfido plan trazado por Sadow que incluía que los guerreros massassi que servían en las naves de los atacantes se volviesen contra ellos. Así fue y eso supuso el fin para Horak-Mul y Gal-Ram que, ocupados con el sorpresivo ataque de Sadow, no tuvieron tiempo de ver que sus siervos se revelaban y los asesinaban.
Kressh fue derrotado, pero pudo escapar y Sadow cubrió a Gav de joyas y artefactos Sith y, tras asegurarle que su hermana estaba sana y salva en el espacio de la Antigua República, le confesó que le había colocado un rastreador y trató de convencerlo de que acatar a los republicanos era tan urgente como necesario.
Ludo Kressh dibujado por Dario Carrasco Jr.
El joven Daragon no lo tenía claro y, aun estaba sopesando que hacer cuando Kressh volvió a aparecer en su nave insignia emitiendo por todos los canales que Sadow era un traidor. Sadow pidió a Gav que distorsionase las comunicaciones de su enemigo y este apretó los controles que el Sith le indico. El joven acaba de ser engañado y lo que pulsó fue el control de fuego que acabó con Kressh.
Sadow pensaba que su gran enemigo era ya historia pero este se las arregló para escapara a la muerte y esperó su momento. Este llegaría cuando Sadow falló en su intento de conquistar la República y fue entonces cuando Kressh regresó en su nave insignia y trató de acabar con su viejo enemigo.
Sin defensa posible Sadow ordenó a los tripulantes e una de sus naves más dañadas que se suicidasen chocando esta con la de Kressh y estos así lo hicieron acabando, esta vez si, con Ludo Kressh.
El cuerpo de Kressh fue colocado en una tumba en "El Valle de los Lores Oscuros" donde tiempo después fue descubierto por la Jedi Exiliada que había tenido varias visiones y deseaba hacerse con al espada del poderoso Sith.
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