"Esos cañones están destruyendo nuestras posiciones de vanguardia" (San Hill)
Al llegar a su destino Obi-Wan mantuvo una breve charla con un pelotón de soldados ARC a los que había encargado una misión especial y les aseguró que cuando alcanzasen su objetivo se reuniría con ellos. Tras este encuentro Kenobi se entrevistó con Anakin en el hangar y discutió con su antiguo discípulo como se repartirían la operación.
Aclaradas las competencias de cada uno, y tras tomar tierra con las cañoneras, Obi-Wan se ocupó de comandar el ataque terrestre y, mientras Anakin se encargaba de liderar el ataque aéreo orbital, el transporte aéreo en el que viajaban los ARC se separó del grupo y se infiltró en la ciudad procurando no ser visto.

Los ARC contemplan el super cañón desde la distancia
La nave de los ARC fue localiza por el enemigo y derribada con un misil pero todos sus ocupantes resultaron ilesos y siguieron su camino a pie siendo atacados desde los altos edificios por androides de batalla y posteriormente por un tanque de la Federación. Pese a ello lo aguerridos soldados consiguieron alcanzar su destino, un monstruoso cañón láser que debía ser destruido (ver captura).
Los ARC acabaron con los androides de batalla que defendían la poderosa arma y tras colocar minas en toda la zona subieron a la cima de una enorme torre que había junto al mortífero artefacto y desde allí lo hicieron estallar mientras Anakin y los miembros de su escudaron diezmaban a los cazas droide.
En tierra las fuerzas republicanas estaban rompiendo las filas enemigas pero entonces apareció el mercenario Durge comandando un grupo de lanceros IG que acabaron con relativa facilidad con gran parte de la artillera pesada de las tropas republicanas.
Los droides, montados en veloces motos jet y usando larga picas de energía debían ser detenidas y Obi-Wan organizó un grupo de defensa cuyos miembros, montados en motos jet, establecieron una especie de "moderna justa" contra el enemigo.
Tras un duro combate en el que se produjeron muchas bajas en ambos bandos Obi-Wan y Durge se enfrentaron en un feroz duelo cuerpo a cuerpo. El mercenario era un hueso duro de roer y, tras salir airoso de la explosión de su Speeder Bike y sobrevivir a una estocada de su rival, hizo uso de varias armas ocultas (Una ametralladora de clavos, lanzallamas y una maza con cadena).
Nada de eso fue suficiente y Durge fue vencido y mutilado sin embargo cuando todos lo creían vencido un ARC llamó la atención de Obi-Wan indicándole que el mercenario estaba empezando a regenerarse sin embargo el Jedi tenía otras prioridades.

Obi-Wan Traspasa con su sable a Durge
Kenobi regresó al edificio donde le esperaban el comandante ARC y un destacamento de clones y con ellos irrumpió en las instalaciones del CBI y tras luchar contra droides y destructores aniquilaron a todos los Muun menos a San Hill que pidió, y obtuvo clemencia quedando preso de la Antigua República.
Tras la victoria Obi-Wan detectó de la presencia de Durge ya totalmente regenerado segundos antes de que este atravesase una cristalera y les ataque. Los clones dispararon contra el intruso destruyendo los propulsores que lleva a su espalda y después, gracias a un disparo de bazooka, destrozaron su armadura revelando que Durge tenía enormes y elásticos músculos.
Obi-Wan se enfrentó cuerpo a cuerpo con el mercenario y aunque este llegó a engullirlo el Jedi salió de su interior haciéndolo estallar y consiguiendo destruirlo definitivamente gracias a lo cual el edificio quedó definitivamente bajo el control republicano.
Mientras la situación en tierra se normalizaba en el espacio Anakin se aburría derribando con facilidad a los cazas enemigos hasta que divisó un oponente que parecía estar a su altura. El joven, desoyendo los avisos de Obi-Wan que le urgía a que siguiese con su misión se centró en el nuevo oponente y, cegado por la ira de no darle caza cuando este dio un salto estelar dejó el combate para ir tras él.
La batalla para entonces ya estaba finalizada y los droides de batalla fueron desactivados cuando Voolvif Monn y el Tercer Ejército destruyeron las últimas unidades en Harnaidan.
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