Portada de Star Wars: The Old Republic Nº3

"Si la Sangre de Darth Revan corre por tus venas nos perteneces" (Lord Baras a Satele)

Braden se reúne en Nar Shaddaa con Nok y le dice que ha cumplido la misión que le había encargado y que ha acabado con el Maestro Jedi Zym. Su cliente se muestra complacido pero desea saber que le dijo al Jedi antes de que este muriese y Branden le cuenta que se limitó a cumplir con la promesa que le hizo a Dar'nala, la Jedi que lo salvó de su cautiverio, informándole que, según ella, el culpable del ataque a los embajadores y de la ruputra del tratado era Lord Baras.

Nok pide a Branden que cumpla con una nueva misión en Dantooine y como este no desea volver a dicho planeta tiene que ofrecerle una cantidad de dinero extra para que acepte. Cuando el mercenario se marcha Nok contacta con Lord Angral, quien viaja en el "Opresor", su crucero de batalla, y le dice que fue Lord Baras quien rompió el tratado.

Furioso Angral ordena poner rumbo a Korriban y nada más tomar tierra allí se enfrenta con Baras hasta que este consigue convencerlo de que él no pudo ser el responsable ya que fue él quien ideó y organizó el tratado. Baras le dice que cree saber quien está detrás de todo y termina convenciendo a Angral para que le acompañe a Dantooine.

Lord Baras y Lord Angral se enfrentan en Korriban

Antes de partir hacia su nueva misión Branden es interceptado por el Maestro Orgus mientras toma unas copas en una cantina. El Jedi le pide que se rinda pero Braden no hace caso y trata de disparar sobre su oponente sin embargo este es demasiado hábil y no tarda en reducirlo. Sin apenas cartas por jugar el mercenario le dice al Jedi que sabe quien rompió el tratado y le sugiere que deben ir a Dantooine.

Lejos de allí Fortis Gall conduce a Tavus hasta las ruinas del enclave Jedi en Dantooine donde se topan con la Maestra Dar'nala que esta acompañada por el wookie Dalborra. Todos el mundo creían que la Jedi estaba muerta y la pareja se sorprenden de verla viva y de que Dalborra, que trabaja para los Sith, la ayude pero Dar'nala explica que la mente del wookie es fácilmente controlable y que gracias a ello ha conseguido salvarse. Dicho esto les dice que sabe que los Sith van a venir y les pide que la acompañen a la viaje cueva de la que se extraían los cristales para construir los sables de luz.

Mientras tanto en la nave en la que han llegado Satele descubre que SP-99 ha sido destruido y poco después recibe un holomensaje de Orgus que le informa de que Branden se le ha escapado pero que antes de hacerlo le contó que los responsables estaban allí, en Dantooine. El maestro Jedi le pide que no haga nada hasta que él llegue pero la joven, que es demasiado inquieta, hace caso omiso y sale disparada en busca de Tavus y Fortis en cuanto se corta la comunicación.

En la cueva Fortis, Tavus, Dar'nala y Dalborra se encuentran con Lord Angral y Lord Baras que han acudido allí con tres guerreros y empiezan una lucha a muerte a la que se une, al poco de empezar, la joven Satele que no pude creer que su maestra siga viva. Fortis acaba con los guerreros y Tavus consigue dejar inconsciente a Angral usando una granada pero una inesperada revelación interrumpe el combate. Los dos Lores acusan a Dar'nala de ir contra las normas Jedi y de ser la instigadora de la ruptura del tratado y aunque al principio todos dudan de semejante afirmación terminan dándose cuanta de que es cierto.

Dar'nala trata de matar a Tavus para castigar a Satele

La maestra confiesa su odio a los Sith y trata de convencer a su alumna para que la ayude a destruirlos a ellos y el tratado pero esta se niega. Como castigo Dar'nala, que sabe que la joven se siente atraída por Tavus, trata de matarlo (ver imagen) pero Fortis se lo impide. Airada la maestra Jedi usa la Fuerza para derribar a Fortis pero cuando le va a dar el golpe definitivo Dalborra la golpea con todas sus fuerzas y escapa de la cueva.

Dar'nala ha muerto y todo ha acabado sin embargo los Lores tratan de convencer, sin éxito, a Satele para que se una a ellos ya que por sus venas corre la sangre de Darth Revan. Finalmente cada grupo se va por su lado y Satele, sin contar lo sucedido con su maestra ni la revelación de que tiene sangre Sith, informa a Orgus que las disputas han acabado y que el tratado puede seguir adelante.

No muy lejos de allí Dalborra, ya fuera de la cueva, se detiene un segundo en un claro cercano y acto seguido cae fulminado por el disparo de un francotirador. Instantes después Branden se acerca sujetando su rifle aun caliente al cuerpo sin vida del wookie y le dice "Esta vez fui yo el que te cogió".

"Tú has roto mi corazón y yo romperé el tuyo" (Dar'nala a Satele)

El guionista da en este número un giro argumental de grandes dimensiones mostrando que la culpable del ataque a los embajadores y de la posterior ruptura del tratado es en realidad Dar'nala, la maestra Jedi que, para más inri, el lector había dado por muerta en la anterior entrega.

Curiosamente la razón que "justifica" este comportamiento en la maestra Jedi es el odio a los Sith sentimiento que, paradójicamente, lejos de separarla de sus mortales enemigos la aproxima mucho más a ellos. Su comportamiento pese a todo no es ni justificable ni original ya que esta misma forma de pensar y actuar la hemos visto en otras historias del Universo Expandido aunque, eso si, tiene un punto de originalidad cuando para castigar a Satele, su Padawan, por no ayudarla en su misión, la amenaza con matar al teniente Tavus por el que esta convencida que su pupila siente "algo especial".

"Tú has roto mi corazón y yo romperé el tuyo" es una frase, llegan de fuerza y carga dramática, que antecede a un final que desborda justicia poética ya que la prepotente maestra muere a manos de Dalborra, el wookie al que manejaba como a una marioneta jactándose de que su mente era débil y fácilmente controlable.

Abierto a la especulación, ya veremos si finalmente aclarado en el futuro, queda el hecho de que los Sith quieran que Satele se una a ellos arguyendo que por sus venas corre la sangra del gran Darth Revan. Y es que se ha especulado mucho sobre este punto siendo dos las corrientes de más peso. Una marca que Satele Shan, que ese es su nombre completo, es una descendiente de la unión entre Bastila Shan y Darth Revan, que antes de ser un Sith fue un prometedor Jedi muy próximo a esta. La otra es que Bastila encontró a alguien a quien amar cuando Revan sucumbió y que Satele es descendiente de ese otro vínculo.

Nota: Nótese que hablamos de descendiente y no de hija ya que entre Bastila y Satele hay más de 600 años de diferencia lo cual implica que, con los estándares normales, entre ella hay al menos seis generaciones.

Del dibujo nada más diremos a lo ya comentado en las dos entregas anteriores ya que resulta francamente deprimente y no llega al mínimo de calidad exigible algo que, como ya dijimos, no justifica el hecho de que en su día fuese un web-comic gratuito.

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Esta sección está coordinada por Nassira A. Dors y el Coronel Kurtz y es posible gracias a la
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