"Si no te estrellas de vez en cuando es que no estas en la pelea" (Anakin)
Gracias a un localizador que colocaron en la nave de Tofen los republicanos descubren que el enemigo tiene una base secreta en la Nebulosa Veil y trazan un plan de ataque. Anakin, al mando del "Escuadrón Oro", se enfrentará a los caza enemigos con la ayuda de los maestros Plo y Tiin mientras Obi-Wan, dirigirá el ataque de los destructores contra la base.
Tras la reunión estratégica Anakin se dirige al hangar donde R2-D2 ha pintado su nuevo caza, un interceptor ETA-2, con sus colores, el azul y el amarillo. Junto a el está Ahsoka, algo deprimida porque no la dejan volar junto a su maestro, pero este la consuela diciéndole que la necesita para que ayude a Obi-Wan en el puente de mando.
En la Estación Hako, XT, el asistente robótico de Tofen, encuentra el localizador y avisa a su amo que le ordena que no lo deje donde esta porque quier que Anakin lo encuentre.
Tras ultimar unas reparaciones Tofen recibe un holomensaje de su madre, la vizcondesa Elodore, que le dice que tras revisar las pruebas aportadas por Kenobi esta convencida de que Dooku es el verdadero responsable de la muerte de su padre. El joven, que ya tenía sus sospechas, acepta lo que su madre le cuenta pero se niega a dejar la lucha porque se ha convertido "en la única esperanza de aquellos que se oponen al yugo de la República".
Las fuerzas republicanas llegan a la base y los cazas de ambos bandos se enfrentan y en medio del barullo Anakin y Tofen se las arreglan para enlazarse en un duelo singular. Los destructores mientras tanto intentan suprimir las defensas de la estación pero desde esta se emite una señal que hace que los Neebray, uno gigantescos seres que viven en la nebulosa, acudan a la zona de batalla y destrocen las naves republicanas.
Ahsoka decide tomar la iniciativa y se pone al mando del "Escuadrón Sombra" cuyos bombarderos atacan la base acabando con la emisión de la señal que atrae a al bestias y con las defensas precipitando así la caída da las instalaciones.
Las naves de Anakin y Tofen, maltrechas tras un duro y largo duelo, está en las últimas y el reactor de Tofen termina explotando por culpa de una sobrecarga. Anakin usa un gancho para atrapar la nave en llamas de su rival y la lleva hasta un hangar donde es apagada por un grupo de bomberos. Anakin saca a Tofen de la cabina pero este, mortalmente herido, fallece en sus brazos pidiendo al Jedi una sola cosa "Justicia para mi padre".
Tofen muere en los brazos de Skywalker
Cuando recibe la noticia Dooku acude a consolar a Elodore y le dice que lo entenderá si decide posponer su boda pero la vizcondesa, tras decirle que sabe que él es el verdadero responsable del sabotaje que mató a su marido, le dice que no habrá boda. "Eres veneno" le espeta y le jura que si vuelve a poner un pie en Valahari ordenará su muerte.
Elodore se reúne en el funeral con Anakin y Obi-Wan y tras aceptar el pésame de estos les comunica que para su gente Las Guerras Clon han terminado y que no tomarán partido por ninguno de los dos bandos.
Dooku acude a ver a Sidious que le felicita por su misión. Las cosas no han salido como estaba previsto pero Valhari, que era un poderoso enemigo si permanecía leal a la República, no solo ha dejado el conflicto sino que ha perdido su influencia en su sector.
El oscuro señor detecta que su discípulo está afligido por lo sucedido con Elodore, de la que estaba enamorado desde hace años, y le obsequia con una de sus lecciones "Ella era una distracción para ti. Un apego que te enfermaba pero no te preocupes porque esta Galaxia tiene muchos otros premios para ti amigo mío".
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