"Tú me prometiste una vida y yo la tomaré junto con las vuestras" (Hazzen a Dossa)
Mientras los hombres de Lucien Draay se enfrentan con los Jedi el joven Zayne pregunta a su antiguo maestro quien es el misterioso Sith. La respuesta es sencilla "Se llama Haazen y es alguien con el que tienes mucho en común. Es un sirviente de mi familia, un inútil incapaz de manipular la Fuerza". Acto seguido se cuenta su historia.
 Estamos en el planeta Arkania, hace muchos años, donde una contrabandista nautolana llamada Dossa desarma con facilidad a un joven padawan llamado Hazzen y dispara sobre la columna en la que este se apoya. El gran cilindro pétreo cae sobre Hazzen pero en el ultimo instante queda suspendido en el aire. Barrison Draay, futuro padre de Lucien, ha usado la Fuerza para salvar a su amigo que agradecido se incorpora y lo saluda con afecto mientras ambos se dirigen al lugar en el que se va a celebrar una gran fiesta.
En un lujoso edificio, en el que se aglutinan miembros de la orden Jedi y gente vinculada con el clan Adaska, la pareja de amigos se encuentra con la bellisima Krynda una de las tres hijas del maestro Hulis que sirven a la orden. La hermosa joven mantiene un romance con Barrison y hace poco caso a Hazzen pese a que este se desvive por ella.
Unas horas más tarde, lejos de la multitud, en el "Praxeum de Arka Jeth", un grupo de maestros y caballeros Jedi celebran un acto importante en el que Krynda y Barrison son nombrados Caballeros Jedi. A Hazzen se le niega tal privilegio porque no da la talla, porque su pensamiento es desordenado y su capacidad organizativa y para manipular la Fuerza escasa y el joven abandona airado la sala.
Barrison sigue a su amigo y ambos terminan peleándose. La familia Hazzen ha servido fielmente y durante años a la de Barrison y aunque el joven creía que esto iba a cambiar ya que ambos servirían como iguales a la orden la cruda realidad indica otra cosa.
Hazzen acusa a Barrison de haber comprado su título de caballero con el dinero de los Draay y le pide que haga lo propio con su título. Indignado Barrison derriba a Hazzen y le dice que el no ha interferido nunca en las decisiones de la orden y, tras pedirle que se comporte, le ofrece un puesto a su servicio como piloto y ayudante. Hazzen, hundido y humillado, con sus rodillas clavadas en la nieve (ver imagen), acepta su destino de siervo con un escueto y lacónico "Si mi señor".
Años más tarde Barrison, al frente de un nutrido grupo Jedi derrota a los Sith en Toprawa en lo que será uno de los últimos capítulos de la guerra. Tras la refriega Hazzen es enviado a limpiar el campo de batalla de cuerpos muertos y allí se encentra de nuevo con Dossa. La nautolana, que siempre flirtea con él, le dice que trabaja con los Sith y que conoce la base de Exar Kun y tras ver que el joven no lleva nada bien su posición de siervo le propone un trato, emboscar y matar a los Jedi.
Hazzen le dice a Barrison que Dossa le ha revelado donde esta la base de Exar Kun y lo conduce, junto al resto de los Jedi, en su búsqueda a través de las cavernas de Ansharii. Al llegar al punto pactado Hazzen sale corriendo y le dice a Dossa que los Jedi están en posición y esta hace estallar una trampa explosiva sin esperar a que el joven se ponga a salvo tal como habían pactado.
Hazzen despierta medio muerto en una de las cavernas con su cuerpo convertido en el de un monstruo. Su rostro y su torso están quemados y deformados y los miembros que ha perdido, ambas piernas desde la rodilla, el brazo derecho al completo y uno de sus ojos, han sido remplazados por diversos artefactos mecánicos que le ha colocado Uburluh un orondo doctor que trabajaba para los Sith.
Uburluh y Dossa contemplan el nuevo aspecto de Hazzen
Hazzen esta horrorizado por su aspecto y pide la muerte pero el doctor le dice que ha salido bien parado ya uno de los implantes, el que le ha puesto como ojo, es el "Yugo de Seeming", un artilugio Sith que le permitirá anticipar el futuro con nitidez.
Dossa que había prometido a Hazzen una nueva vida le dice que hay muchos artefactos Sith repartidos por la Galaxia y, tras afirmar que si los descubre y aprende a usarlos se convertirá en el ser más poderoso, se ofrece a ayudarle. Hazzen abraza a Dossa y tras decir que no es ni un Jedi ni un Sith aplasta su cabeza mientras dice "tu me prometiste una vida y yo la tomaré junto con las vuestras".
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Otro detalle que explica, al menos en parte, el odio que siente Lucien hacia Zayne es la semejanza que guarda su antiguo alumno con Hazzen, el sirviente de su padre Barrison, el siniestro asistente que ronda siempre a Krynda, su madre, controlando y censurando las decisones del pacto. ¿Cómo reaccionará Lucien cuando sepa que Hazzen fue el responsable de la muerte de su padre y que mató a los padawanes en vano ya que el enemigo cuyo regreso quería evitar era uno de sus sirvientes? 
