I.- LOS COMIENZOS.
Stuart Freeborn nació en Beckenham, Kent, Inglaterra el 5 de septiembre de 1914 y podemos decir que su carrera como "protésico hiperrealista" comenzó en 1937 cuando el periódico Británico "The Times" anuncio que el Emperador Haile Selassie había sido visto conduciendo un coche en Beckenham. Todo había sido una ilusión creada por el joven Freeborn que había fabricado una mascara casera con la que esperaba deslumbrar a todos y hacerse un hueco en la industria del cine. Lo único que conseguiría sería una severa sanción de la policía y la crítica de sus conciudadanos.
Tras este primer tropiezo Stuart Freeborn envió fotos suyas maquillado como si fuese un anciano a los Estudios Denham que eran propiedad del prestigioso Alexander Korda. Los responsables del estudio quedaron impresionados con las fotos y llevaron a Stuart a un set de rodaje y le pidieron que repitiese el trabajo de maquillaje de las fotos para realizar unas pruebas de cámara. El estudio donde se hizo la prueba era el mismo en el que Charles Laughton estaba filmando "Rembrandt" y la calidad artesanal del trabajo de Freeborn captó la atención del mismísimo Alexander Korda. La carrera de uno de los más grandes genios del maquillaje acababa de comenzar.

Foto autografiada de Stuar Freebor (Prestad atención al reloj que lleva ;)
El primer maquillaje destacado de Stuart fue un trabajo de envejecimiento para la película "Oliver Twist" de David Lean en el que transformó a Alec Guinness en el solitario patriarca Fagin. Algo más tarde en "Bridge over the River Kwai" (Puente sobre el río Kwai), transformaría con gran éxito a los extras Ingleses que participaron en la película en soldados Japoneses y prisioneros de guerra.
Sus trabajos empezaban a tener eco en la industria y eso le permitió trabajar en la película de Stanley Kubrick "Dr. Strangelove" (Teléfono rojo volamos hacia Moscú) donde creó el maquillaje de los múltiple personajes encarnados por Peter Sellers.
II.- LA REVELACIÓN
El mismo año que John Chamber recibió la nominación especial y el Oscar por su trabajo de maquillaje en la película "El Planeta de los Simios" Stuart Freeborn presentó un trabajo mucho más brillante en "2001: Una Odisea en el Espacio" sin embargo no recibió el crédito de la academia ¿Por qué?. Esta es, brevemente, la historia.
Para realizar el mítico "Amanecer del Hombre", escena de apertura de 2001, Kubrick insistió en usar actores que pudieran actuar bajo su dirección en lugar de salvajes y espontáneos monos. Obviamente, los actores necesitaban trajes y maquillaje de gran calidad que los hiciesen indistinguibles de los primates y para ello contrató a Stuart Freeborn con el que ya había colaborado en "Dr. Strangelove".
 

Imagen de El Amanecer del Hombre Y Freebron en pleno proceso creativo
Freeborn fabricó los trajes de mono cosiendo pelo humano, de yak y de caballo en una tela de lana y creó una nueva línea de efectos de maquillaje con su revolucionario estudio de la dentadura de los monos. Así, mientras John Chambers había usado simple goma para reproducir los dientes, Freeborn investigó acerca de estructuras dentales y anatómicas y decidió que sus dientes de mono deberían ser parte de una pieza craneal separada bajo la máscara.

Stuart Freeborn con algunos de los monos que creo para 200
No contento con esto fue un poco más allá y unió la pieza bucal de goma por encima de los dientes creando, no sólo un maquillaje más creíble, sino también unas prótesis con las que los actores podían trabajar mejor. Sin embargo todas estas innovadoras técnicas y este afán por la perfección no planteó una amenaza seria para John Chambers ¿La razón? Que los miembros de la Academia estaban mosqueados con el realismo del maquillaje y los trajes y estaban convencidos de que Kubrick había usado monos reales y no actores maquillados.
III.- UNA PELÍCULA PARA LA HISTORIA
En 1975, una nueva película de ciencia ficción iba a ser rodada y su director necesitaba que actores humanos interactuasen con personajes tan variopintos como un ser de mas de dos metros llamado Chewbacca o varias docenas de criaturas suficientemente exóticas como para llenar la cantina de un espaciopuerto. Se trataba, como no, de Star Wars y en esos momentos solo había una persona capaz de acometer el reto, Freeborn.

Stuart Freeborn trabajando en la cara de un Ewok
Freeborn trabajó en las tres entregas de la saga clásica (Episodios IV,V y VI) y diseñó y creó la apariencia de los personajes intergalácticos más famosos y populares de la historia del cine: Chewbacca, Yoda, Jabba el Hutt, Ewoks, Wampas y la mayoría de alienígenas de la Trilogía Clásica de La Guerra de las Galaxias. Los únicos personajes en los que no trabajo fueron los alienígenas filmados por Rick Baker para las escenas de mejora de la Cantina y los "secuaces selectos" del palacio de Jabba del Hutt que fueron construidos por el taller de criaturas de Industrial Light & Magic (Solo pueden verse en la Edición Especial).
Hoy podemos afirmar que George Lucas está en deuda con la imaginación, la constancia y el talento derrochados por Stuart Freeborn y si preguntamos a cualquier fan por su interpretación preferida de Jabba el Hutt los halagos que recibe el animatrón a escala real creado por Freeborn eclipsan la poco convincente imagen generada por ordenador de la Edición Especial.

Stuart Freeborn trabajando en la máscara de Chewbacca
Prestad atención a las piezas de la máscara y al ambiente y materiales de trabajo.
John Chambers le había arrebatado el Oscar de 1968 pero mientras Freeborn estaba disfrutando de la gloria que le había proporcionado La Guerra de las Galaxias, Chambers estaba produciendo las insulsas creaciones de maquillaje para el remake televisivo de "La Isla del Doctor Moreau". Como dijo un sagaz crítico "Si alguien quiere escribir un ensayo en el que se explique que los premios de la Academia no justifican la cumbre del talento solo tiene que comparar las carreras de Chamber y Stuart".
IV.- ¿ES UN PÁJARO? .. ¿ES UN AVIÓN? ..
Nuetra querida Star Wars no es la única saga a la que ha estado vinculado Stuart Freeborn ya que también superviso el maquillaje en todas las películas de Superman de Salkind y por petición de Christopher Reeve trabajo en el "Superman IV" aunque por un salario mucho menor.
Para su maquillaje de Superman Freeborn partió de la regla de que Clark Kent se hace la ralla del pelo a la derecha y Superman a la izquierda. Así pudo tener a ambos, Superman y Clark Kent, como dos personas diferentes. También hizo que el personaje de Gene Hackman, Lex Luthor, fuese calvo y para eso usó un novedoso cuero cabelludo de látex.
Otros efectos especiales incluían la construcción de muñecos voladores, un oso polar para la secuencia del Polo Norte, un falso gato para el encuentro de Superman con la niña, el maquillaje para el Superman malo ("Superman III") y quizás su logro menos conocido, el molde protésico del pecho de Superman que uso para enfatizar los músculos abdominales del famoso super héroe. Christopher Reeve se había entrenado mucho para el papel pero con la diversidad de movimientos físicos requeridos necesitaba algo más que la licra del disfraz para asegurar que su pecho pareciese tan consistente como el del Superman del cómic.

Stuart Freeborn maquillando a Superman
La otra gran contribución de Freeborn a la serie fue el maquillaje tipo robot de Vera visto en "Superman III". Creado como una parodia visual de la María de la película de Fritz Lang "Metropolis" Freeborn fabricó unas lentes de contacto plateadas para la actriz Annie Ross y pego en su cara una serie de microchips que pintó posteriormente con color cromo. Cuando Vera abrió sus párpados en primer plano y sus ojos brillantes miraron directamente al espectador el efecto resultó incluso más escalofriante de lo que el director se había propuesto. La gran interpretación física de Ross, su faceta cómica y el contundente maquillaje de Stuart crearon un increíble enemigo para el Hombre de Acero que ninguna otra técnica de filmación hubiese podido conseguir.
V.- EL RELEVO
Stuart Freeborn ser reitró y una nueva generación ocupó su lugar al frente de los efectos de maquillaje de Star Wars. Ellos cuentan con unas facilidades técnicas que Freeborn no llegó siguiera a soñar pero eso no impide que estén fascinados con el talento de los viejos maestros, de los pioneros, y siguen asombrándose con los resultados que obtuvieron usando pegamento, madera, látex y una gran dosis de imaginación y sudor.
La filmación de la nueva trilogía de Star Wars nos permitió ver un encuentro entre estas dos generaciones cuando el equipo de "diseño de criaturas" del "Episodio I" invitó a Stuart Freeborn a visitar su set de trabajo en Leavesden. Un breve encuentro en el que vimos como el viejo maestro reconocía que había colocado algunos rasgos del genial físico Albert Einstein en Yoda. Cuando su acompañante, Nick Dudman, le dijo que corría el rumor de que también tenía algunos rasgos suyos Stuart dijo que solo su vís cómica (ver foto del momento).

Stuart es comparado con la máscara de Yoda
La visita tuvo otros dos momentos destacados. Uno aconteció cuando Stuart se reencontró con la máscara original de Chewbacca ahora convertida en un icono que solo uno pocos elegidos pueden manipular para tomar referencias. La vieja goma estaba rígida y desgastada sin embargo la mandíbula y la lengua conservaban bastante movimiento lo cual demuestra que estaba muy bien fabricada. El otro momento destacado se produjo cuando Stuart asistió a una demostración en la que pudo maravillarse con la amplia variedad de movimientos que el control remoto daba a la cabeza de un Gran. "Umm es maravillo. ¿Puedes hacer que se cierre un solo párpado mientras se gira el ojo?" pidió Stuart al encargado del control remoto y Nick Dudman añadió entre risas Ya te dije que era difícil de contentar".
Fue un día entrañable que se cerró con la entrega de un pequeño regalo conmemorativo con el que se le agradecía su labor en Star Wars. Se trataba de una estupenda reproducción de la cabeza de Yoda, uno de sus personajes más queridos, que tenía una placa en la que se podía leer :
For Stuart "The Force Will be wiht you Always"
The Star Wars Creature Department
Leavesden 1.997

Stuart con la figura de Yoda que se le entregó
La Carrera de Sturat Freeborn terminó hace tiempo pero su enorme talento para hacer creíbles las más fantásticas criaturas permanecerá indeleble en sus películas y seguirá asombrando a nuevas generaciones.
Nota: La filmación completa de la visita de Stuart Freeborn a Leavesden está recogida en el DVD del Episodio I.
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