LA LOCURA A VECES PUEDE SER EL CAMINO HACIA LA VERDAD.
El Maestro Yoda medita profundamente en su cuarto sondeando la Fuerza en busca de respuestas para la dramáticas situación que vive la Orden cuando escucha la voz de Qui-Gon Jinn que le llama desde el más allá. Yoda no puede creérselo ya que no se puede mantener la individualidad tras la muerte sin embargo su viejo amigo llega a producir manifestaciones físicas apagando varias velas y elevando objetos.
Durante la reunión del Alto Consejo que sigue al incidente, del que Yoda no cuenta nada, el viejo maestro se muestra distraído y eso llama la atención de todos sus compañeros de modo que, finalizada la reunión, Mace Windu trata el tema con Kenobi que le confirma que todos han notado la confusión en el viejo maestro. Windu se muestra preocupado y sugiere que se vigile de cerca de Yoda porque no cree que sea la guerra lo que preocupe al maestro sino algo mucho más oscuro que se cierne sobre ellos.
El Maestro Yoda meditando en su cuarto recibe la visita de Qui-Gon
Caminando por uno de los jardines exteriores del templo Anakin cree escuchar una voz extraña y descubre al Maestro Yoda con gesto de preocupación. Yoda lo saluda y le pregunta por la visión de Qui-Gon que él y Kenobi tuvieron en Mortis y el joven, tras sentenciar que todo lo que conocen indica que no se puede conservar la individualidad tras la muerte, sentencia que lo que vieron debió ser una ilusión. El viejo maestro le pregunta que pasa con todo lo que no saben y le anuncia que va a reunir al Consejo para hacerles una gran revelación.
Reunido de nuevo el Consejo, Yoda cuanta la visita que le ha hecho la voz de Qui-Gon y las dudas que tiene al respecto y pide que todos mediten juntos para ver si consiguen oírla de nuevo. Todos los miembros del Consejo se levantan de sus escaños y se arrodillan junto a Yoda, que esta en el centro de la sala, y se tocan en los hombros meditando conjuntamente durante horas sin que Qui-Gon se manifieste .
Yoda esta decepcionado por el fracaso, y muy cansado por el esfuerzo, y se abre un pequeño debate sobre lo que podría estar pasando. Windu, pese a que Yoda es el maestro más longevo y mejor preparado de la historia Jedi, no descarta que pueda estar siendo engañado y/o seducido por el Lado Oscuro y Yoda conviene en ello asegurando que el manto oscuro que lo cubre todo también le afecta a él.
Preocupados por su estado Yoda es estudiado por al Maestra Rig Nema que no encuentra nada raro en él salvo una bulliciosa actividad en una parte del cerebro muy inusual. Aunque Kenobi no está de acuerdo el maestro Ki-Adi sugiere que Dooku podría estar usando su conexión con Yoda (fue su alumno y amigo) para atraerlo al Lado Oscuro y usarlo para destruir a los Jedi desde dentro.
Nadie sabe muy bien que hacer y la doctora Nema sugiere realizar un ritual de privación mediante el cual se sumergirá a Yoda en un tanque de aislamiento sensorial que mejorará su meditación apagando el resto de distracciones. Yoda acepta y el proceso se realiza haciendo que entre en un profundo estado que le permite contactar con Qui-Gon. En un breve charla, que sólo escucha él, Qui-Gon le indica que debe ir a Dagobah donde podrá completar lo que él no pudo y le pide que lo haga solo, sin contar nada a nadie y sin confiar en terceros.
El Maestro Yoda dentro del tanque de privación sensorial
Los signos vitales de Yoda están cayendo y se decide sacarlo del tanque. "He hablado con un viejo amigo que estaba muerto" sostiene Yoda semiinconsciente y eso hace que varios maestros se reúnan en privado para tratar el asunto. Ki-Adi recalca lo que todos saben, que al morir los Jedi pasan a formar parte de la Fuerza Cósmica y no mantienen la individualidad, y vuelve a plantear un posible influjo de Dooku. Windu no sabe que pensar pero considera que el tema es muy serio y ordena que Yoda sea retenido en esas mismas instalaciones médicas.
Cuando despierta Yoda pide ayuda a Anakin para dejar la Capital y esta se la presta permitiendo que el maestro, tome un caza y, acompañado de R2-D2, viaje hasta Dagobah donde toma tierra sintiendo en el acto que se trata de un planeta donde la Fuerza es muy intensa.
Yoda pide a R2-D2 que se quede en la nave y, siguiendo unas luces que Qui-Gon le envía para guiarlo, recorre el planeta. Mientras camina la voz de su viejo amigo le dice que Dagobah es uno de los lugares más puros de la Galaxia y que él es en realidad una manifestación de la Fuerza. Le revela también que la Fuerza está compuesta por la Fuerza Viva que habita en los seres vivos y por la Fuerza Cósmica que se crea cuando estos se extinguen creando así un proceso sinfín en el que los midiclorianos son una herramienta para comunicarse con la Fuerza.
Es gracias a los midiclorianos que puede comunicarse con él pero Qui-Gon revela que sus estudios no pudieron ser terminados y que ese es el motivo por el que se manifiesta solo con la voz y no con voz y cuerpo. Qui-Gon le revela también que en el lugar en el que reside ahora no hay ni pasado ni futuro y se niega a rebelarle quien es el Lord Sith diciéndole que sólo puede enseñarle el lugar donde encontrará respuestas.
Las luces guían a Yoda hasta una entrada y Qui-Gon le dice que tenga cuidado ya que si da poder a aquello que teme se manifestará ante él. El viejo maestro entra con paso firme y un humo negro lo cubre todo mostrándole la muerte de muchos Jedi, varios de ellos a manos del maestro sith al que ve usar el sable contra ellos y envolver a Windu con Rayos Fuerza. Yoda escucha varias veces el nombre "Sidious" y este toma cuerpo diciéndolo "Únete a mí. Es la única solución".
El Maestro Yoda ve la destrucción de los Jedi en la cueva de Dagobah
Tambaleándose Yoda sale al exterior y se desmaya. Qui-Gon lo despierta al poco y Yoda, tras asombrarse por tanto poder, pregunta si lo que ha visto se pude evitar. Qui-Gon le dice que cuanto más duren las Guerras Clon más avanzará el mal y le responde que siempre existe una esperanza y que esta en ocasiones está donde menos esperamos.
Qui-Gon le anuncia que ha sido elegido al igual que lo fue él y le dice que debe completar su entrenamiento y que para ello debe ir a un lugar especial al que la misma Fuerza le guiará. Yoda regresa a la nave, sube a ella y, tras decirle a R2-D2 que no regresarán a Coruscant, afirma que el largo viaje que les espera acaba de empezar.
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