"Tirad las armas. Han ganado el primer asalto". (Amidala)
I.- Las pistolas bláster de Amidala.
Amidala, al igual que sus fieles asistentas, escondía bajo su traje una pistolas bláster que podía utilizar si sufría algún tipo de ataque. Dicha arma, para cumplir con su propósito de pasar desapercibida, era de pequeño tamaño y sumamente ligera pero como todo lo que se hacía en Naboo su diseño era tan elegante y cuidado que se podía confundir con una pieza de artesanía.
El capitán Panaka fue el encargado de adiestrar a Amidala y a sus asistentas en el uso de este arma y tras horas de práctica las convirtió en unas tiradoras expertas. El tamaño y la ligereza del arma fue una gran ayuda y permitía a las muchachas mantener el pulso firme pero tenia una pega y era que la potencia de fuego era mucho menor que la que proporcionaba un arma convencional. De hecho esta pistola no lanza un haz de energía sino bolas de plasma de mediano tamaño que pese a tener un efecto menos dañino son mortales si hacen blanco en puntos muy concretos del cuerpo humano.
La pistola bláster de cañón corto de Amidala
El cuerpo del arma es cilíndrico y muy redondeado (ver imagen) y no solo por una simple cuestión estética sino porque este diseño permite que al ser desenfundada no se agarre en la ropa retrasando innecesariamente la operación. La empuñadora es de madera y en su interior se esconde la célula de energía que proporciona potencia al arma. El gatillo no dispone de “guardamonte” y debe ser pulsado con firmeza y suavidad para no errar el tiro.
El cañón es muy corto, apenas cinco centímetros, y aunque eso ayuda a ocultarla bajo la ropa la hace menos eficiente en combate. Por eso, si la situación es comprometida, Amidala dispone de una versión de este arma mucho más potente y con un cañón mucho más largo, unos 15 centímetros (ver imagen). Este arma, que es imposible ocultar bajo la ropa, permanece oculta en diversos escondites del palacio y esta siempre cerca de la reina. Uno de los lugares donde se ocultó, tal como pudimos ver en el Episodio I, fue el trono real y eso permitió a Amidala coger desprevenidas a las tropas de la Federación.
La pistola bláster de cañón largo de Amidala
II.- El comunicador.
La comunicación durante la batalla es fundamental y para garantizarla Amidala utiliza un pequeño dispositivo que le permite estar en contacto permanente con sus tropas.
Se trata de un elemento de pequeño tamaño que permite enviar instrucciones sencillas en momentos puntuales y de modo silencioso. Cuenta con un botón de activación y con un sistema de encriptación que protege el contenido de la trasmisión en caso de intercepción.
Su alcance no es excesivo y para que el mensaje sea recibido con precisión la reina tiene que apuntar con él hacia el objetivo como si se tratase de una pistola o un mando a distancia. Pese a ello resulta muy útil ya que permite organizar con sencillez pequeños grupos dando instrucciones tácticas y ordenando despliegues sin romper el silencio.
El comunicador-encriptador de Amidala
El comunicador esta formado por tres cilindros siendo el central, el de mayor tamaño, el que permite la emisión a través de su punta redondeada. Los otros dos cilindros, que son de menor tamaño y se ubican en la parte trasera actúan como encriptador y como célula de energía.
Amidala usó este aparato durante la invasión de Naboo y eso le permitió tener un contacto permanente con el Capitán Panaka organizando así de modo eficaz la defensa del planeta y su propia huida.
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Sección creada por Lady Mishty y Lady Cattya para SithNET. Maquetación del Coronel Kurtz.
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A la hora de la batalla la reina Amidala sigue siendo Padmé y como tal ha de llevar el vestido de batalla de las damas reales, un traje rojo oscuro que además de llevar bordados los símbolos reales de Naboo esta confeccionado con fibras especiales capaces de absorber la energía de un disparo láser y por tanto actual como elemento protector. 