"Lo he perdido todo y una vez que lo pierdes todo, entiendes lo que está en juego." (Saw Gerrera)
Saw Gerrera habla con Sabine y con Ezra y, aunque se ofrece a llevarlos de nuevo con Mon Mothma para que sigan siendo sus chicos de los recados, les pide que se planteen ayudarle con una misión importante que tiene. Gerrera les cuenta entonces que según sus informadores un carguero civil saldrá de la Estación Faos con abundante material que el Imperio está trasladando en secreto. No sabe que material es, ni con que finalidad se acapara, pero si que está relacionado con el mismo proyecto secreto que estaban desarrollando los geonosianos y por el cual el Imperio los exterminó.
Los jóvenes aceptan ayudarle y tras pintar a Chopper de amarillo para que parezca un droide de carga se infiltran con Guerrera en la Estación dejando a Edrio Two Tubes al cargo del Ala-U . Tras una breve búsqueda localizan uno de los contenedores que va a ser subido al carguero que le interesa, el 2716, se esconden en su interior y Chopper los sube abordo. Una vez en su interior Saw contacta con Edrio Two Tubes y tras activar un localizador para que los monitorice le pide que cuando sepa su destino y se lo envía los recoja en el Ala-U.
Una vez en la bodega salen del contenedor y revisan los materiales que lleva el carguero comprobando que son materiales de construcción de gran calidad. Ezra cree escuchar unos cánticos lejanos, pero como sus compañeros no los escuchan deja correr el asunto. Sabine cree que no hay nada raro en la carga ya que esta podría proceder de Corellia o de cualquier otro planeta con astilleros y ser parte de las compras regulares de la Armada Imperial.
Saw acepta que la joven puede tener razón, pero cuando ven dos soldados de asalto patrullando uno de los pasillos todos coinciden en que pasa algo. Gerrera pide a Chopper que se conecte a la base de datos del carguero y al hacerlo el droide, además de descubrir que en uno de los hangares hay una lanzadera del Imperio, descubre que el destino del carguero es un punto concreto del Sector Tonnis. Tanto Sabine como Saw saben que ese sector está casi vacío y por eso solo contemplan dos escenarios; que sea un escondite para algo que el Imperio quiere esconder, o que sea un punto de reunión.

Mich Matt cuanta lo que sabe a Saw, Ezra y Sabine
El droide también ha descubierto que uno de los hangares, el 17, ha sido marcado como área restringida de modo que se dirigen allí y, tras neutralizar a los guardias que lo custodian, abren el contenedor que estaban protegiendo. En su interior sólo hay prisioneros de modo que deciden hablar con el que parece su líder. Se trata de un Ishi Tib que se identifica como Mich Matt y les cuenta que era supervisor de energía en Coruscant y que, al rechazar una oferta imperial para trabajar en un proyecto militar secreto porque no quería abandonar a su familia, fue secuestrado. Matt también les dice que el resto de presos son todos mecánicos de reactor o especialista en energía con historias similares a la suya y que lo único que saben sobre todo lo que está pasando es que la carga que parece interesar tanto a los imperiales procede de la ciudad de Jedha.
Hay que salvar a los prisioneros y como no pueden usar la lanzadera imperial ya que además de estar protegida eso llamaran la atención, trazan un plan según el cual sabotearán los motores principales forzando al carguero a salir del hiperespacio y gracia a ello los prisioneros podrán escapar usando las cápsulas de escape. Fijado el plan encargan a Chopper que guía a los prisioneros hasta las cápsulas y que se ocupe de que suban a ella mientras ellos boicotean los motores.
Mientras se dirigen hacia la sala de motores Ezra vuelve a escuchar cánticos y siguiéndolos llegan hasta el hangar 6 y nada más entrar en él se dan de bruces con varios miembros de las tropas de la muerte. Sabine lanza bombas de humo y uno neutralizan a todos lo imperiales menos a su comandante que, al ver que “el bloque” que protegían ha recibido un disparo y ha quedado comprometido escapa. Mientras corre por los pasillos en busca de refuerzos el imperial contacta con el capitán y le pide que avise inmediatamente de lo sucedido tanto al Director Krennic como al Centro de Mando Imperial.
El bloque que ha recibido el disparo resulta ser un gigantesco cristal Kyber y eso deja claro que el Imperio está detrás de algo gordo. El místico cristal es como el que se usa en los sables de luz, de ahí que Ezra escuchase su cántico en la Fuerza, pero su tamaño es descomunal. Pese a lo sorprendente del hallazgo a los dos jóvenes sólo parece preocuparles los prisioneros y parar la nave cuanto antes de modo que Saw dispara sobre ellos con el aturdidor para neutralizarlos porque quiere ver cual es el destino del carguero.

Saw, Ezra y Sabine encuntran un gran cristal Fyber
Además de enviar refuerzos que busquen a los rebeldes el capitán imperial ordena que todas las cápsulas de escape sean destruidas para evitar la fuga de estos de modo que Chopper, que ya había metido en ellas a los prisioneros, se ve obligado a sacarlos de inmediato. Sin saber que hacer con ellos decide ir hacia la sala de motores para reunirse allí con sus amigos.
Saw contacta con Edrio y le dice que su destino es el Sector Tonnis y solicita que los recoja en cuanto pueda. Los jóvenes despiertan y discuten con Saw pero ya es tarde y el carguero llega a su destino donde solo hay un Destructor Estelar. Gerrera sabotea el cristal para que sufra una inestabilidad y estalle y al ver que Edrio ha llegado pide a los jóvenes que se marchen con él de inmediato. Ni Sabine ni Ezra están dispuestos a dejar a los prisioneros allí de modo que Saw, tras afirmar que el Imperio debe estar creando una super arma y que la ciudad de Jedah es la clave para llegar hasta ella, les dice que se dirigirá hacía allí y se despide de Ezra desando que sus caminos se vuelvan a juntar algún día.
Cunado Saw se marcha Ezra contacta con Chopper y le pide que avise a Hera y que lleve a los prisioneros hasta la lanzadera Imperial. El droide así lo hace y cuando todos se juntan en la nave, tras neutralizar a la guardia, dejan el carguero justo en el momento en el cristal, que ha estado acumulando mucha energía la libera y estalla.
No hay tiempo para dar un salto de modo que Sabine decide ponerse detrás del Destructor para que este absorba la mayor parte de la explosión de energía. La táctica funciona y, aunque tanto el carguero como el destructor son destruidos, la lanzadera recibe daños que acaban con sus motores, pero mantiene la integridad estructural. Aunque han quedado varados allí y pronto vendrán los imperiales la Fantasma no tarda en aparecer y los recoge.

El cristal Kyber estalla desparramando de golpe toda la energía acumulada
Hera asegura a los prisioneros que en cuanto sea posible los devolverán a sus mundos natales pero estos, impresionados por lo que han visto, se ofrecen a colaborar con la Rebelión integrándose en su equipo de técnicos. Ezra cuenta a su maestro todo lo sucedido y aunque Kanan no tiene claro si con los gigantescos e inestables cristales, famosos por ser capaces de acumulara y liberar energía, se puede hacer una super arma como creía Saw, pero asegura que habrá que investigarlo.
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