"Un buen jugador nunca muestra sus cartas" (Lando Calrissian)
Kanan habla con el dueño del “Pit Stop del viejo Jho” para ver si consigue un trabajo para su grupo y este le responde que lo único que hay disponible es un viajero que busca una tripulación que pueda saltarse el bloqueo Imperial de Lothal. El antiguo Jedi pregunta de quién se trata y Jho le dice que es el humano que está jugando al Sabacc con Zeb y con un Rodiano.
Cuando Kanan llega a la mesa el Rodiano ya ha tirado las cartas y se ha retirado sin embargo Zeb, que tiene una buena mano, desea cubrir la apuesta, y como no dispone de efectivo decide apostarse a Chopper. Kanan le recuerda que el droide no es suyo, pero cuando ve las cartas que tiene su amigo, creyendo que no puede perder, le deja hacerlo. Zeb cierra la apuesta muy confiado, pero su rival, que se llama Lando Calrissian, tiene la “mano del idiota” y gana la partida.
Lando les cuenta que tiene un cargamento que desea introducir en Lothal saltándose el bloqueo Imperial y les dice que está dispuesto a pagar bien de modo que lo conducen hasta la nave fantasma para debatir la cuestión con el grupo. Al enterarse que Kanan ha permitido que Chopper, un miembro de la tripulación, sea apostado, Hera monta en cólera y abronca a sus amigos sin embargo Lando promete que si cumplen con su encargo se lo devolverá y la tripulación acepta la misión.

Lando Calrissian tal como lo vemos en este capítulo
Lando entrega las coordenadas donde deben recoger la mercancía y Hera despega con una grácil maniobra que hace que Lando alabe su forma de pilotar. Una vez fuera de Lothal la capitana pide a Chopper que introduzca las claves para el salto hiperespacial, pero este se niega diciendo que ya no es un miembro de la tripulación. Dado que el droide no está dispuesto a trabajar para su antiguo grupo Lando le pide que le enseñe la nave y este accede a ello.
Cuando llegan a la sala común Lando se detiene en una de las pinturas de Sabine y detecta en ella la influencia de las pinturas protesta de Genuor de Bith. La joven mandaloreana se emociona al descubrir que alguien aprecia la pintura impresionista y conoce sus claves y eso cabrea a Ezra que está celoso. Que Lando se ría de él diciendo que es un niño sin experiencia que no conoce la galaxia y que Sabine se ofrezca a enseñar al recién llegado el resto de sus trabajos no mejora la situación.
Tras un breve salto la nave Fantasma sale del hiperespacio junto a una nave que los está esperando la Mercante Uno. Lando comunica con la nave y pide permiso para atracar y cuando se lo concede la nave Fantasma se acopla a ella. Lando, Kanan y Hera entran en la nave que es propiedad de Azmorigan y cuando pasan por un pasillo custodiado por varios guardias Lando les señala las cápsulas de escape que hay en los laterales y les dice que son un buen elemento de escape si algo sale mal.
El trío se reúne con Azmorigan y cuando Lando le pide la carga que han pactado este manda traer una caja repulsora, pero antes de dársela pregunta a Lando si ha traído su pago. Lando da un empujón a Hera y dice “Aquí esta, se llama Hera”. Kanan, sorprendido, quiere protestar pero Hera le hace un gesto negativo y sigue la corriente a Lando aceptando ser canjeada por el contenido de la caja.
Lando y Kanan regresan a la nave Fantasma con la caja y cuando Sabine ve que han dejado a Hera se enfada con el antiguo Jedi. Kanan pide explicaciones a Lando y este le dice que todo forma parte del plan que ha acordado con Hera. El Jedi le pregunta cuando ha acordado un plan con su compañera y este le responde diciéndole que lo hizo cuando señaló las cápsulas de escape. Kanan está sobrepasado y preocupado, pero Lando le dice que Hera es muy capaz y que no debería tener dudas sobre ella y sobre su capacidad para salir por si misma de un aprieto como ese.
Antes de irse a la cabina con Kanan y Sabine Lando deja la caja en la sala común donde están Zeb y Ezra diciéndoles que no deben abrirla. La pareja se interesa por el contenido y se muestra ansiosa, pero el astuto Calrissian se limita a decir que se trata de material muy especializado pese a que todo, en especial el ligero movimiento de la caja, indica que dentro hay algo vivo.
Azmorigan está cenando como un cerdo y eso pone enferma a Hera sin embargo la twi'lek hace de tripas corazón e interpreta su rol de esclava preguntando al orondo traficante si desea que le sirva. Su nuevo amo afirma encantado y ella, tras coger una bandeja con fruta, le susurra al oído “¿tal vez mi amo desearía cenar sólo?”. Azmorigan entiende la indirecta y manda salir a los guardias y eso permite a Hera golpearlo con la bandeja dejándolo inconsciente. Echo eso la twi'lek deja la sala y, tras noquear con la bandeja a un guardia, coge una cápsula de escape y llega hasta la nave Fantasma que en cuanto la tiene abordo salta al hiperespacio antes de que la otra nave, que ya está virando para dispararles, complete la maniobra.

Hera dispuesta a golpear con la bandeja a Azmorigan
Lando, Kanan y Sabine van al encuentro de Hera que lo primero que hace es darle un puñetazo en la boca del estómago a Lando. Hecho esto la capitana exige a Lando que le enseñe que hay en la caja y este accede sin embargo cuando se dirigen hacia ella ven a Zeb y Ezra corriendo detrás de una extraña criatura, un cerdo pez globo (n de t : Aunque hay quien traduce Cerdo Bola en ingles es Puffer Pig y Puffer es literalmente Pez Globo). El ser, pese a tener pintas de ser poco ágil, se mueve con rapidez y Lando, tras decir que ese era el contenido de la caja, grita a sus dos perseguidores que no lo asusten. El ser, arrinconado por Zeb, entra en pánico, asustado por el grandullón y se hincha hasta alcanzar varias veces su tamaño ocupando todo el pasillo de la nave.
La nave Fantasma sale del hiperespacio en Lothal, junto a los Destructores Estelares que realizan el bloqueo sobre el planeta y Chopper introduce en el ordenador un programa de enmascaramiento que hace que los Imperiales crean que la nave Fanstasma es en realidad la Fragata “Tontine” con premiso para volar entre Voz Pity y Lothal.
Ezra, al oír que al otro lado del pasillo, que está bloqueado por el hinchado cerdo, que Lando flirtea con Sabine se vuelve a poner celoso y trata de cruzar pasando por encima de la criatura que reacciona poniéndose aún más nerviosa e hincándose, aunque parecía imposible, todavía más. El aumento de volumen del cerdo, casi instantáneo, empuja a toda la tripulación y Zeb sale rodando hasta la cabina donde golpea una consola y desactivando el programa de enmascaramiento.
Cuando la máscara cae y los imperiales ven que se trata de la nave fugitiva que llevan tiempo buscando lanzan varios cazas, pero la nave Fantasma, que ya está dentro de la atmósfera, se oculta entre la densas nubes y consigue sorprender y derribar a sus perseguidores. Libre de los imperiales Lando ordena descender en un puesto y anuncia que va a entregar el cerdo a Vizago ya que este puede descubrir metales preciosos con más eficacia que diez escáneres mineros. El camorrista relata también que el Imperio no quiere ningún terrateniente minero excavando en Lothal y que es por eso que hay que introducir esa joya de animal de forma clandestina.
Para desgracia del grupo cuando salen de la nave quien los está esperando no es Vizago sino Azmorigan con sus hombres y entre ambos grupos se inicia un tiroteo. Ezra saca su sable de luz y Kanan le dice que no lo use ya que desvelará su naturaleza (aprendiz Jedi), pero el joven lo tranquiliza ya que el extraño diseño de su arma le permite usarlo como pistola energética y con ella derriba a varios guardias. Sabine se ocupa de otros tantos y Zeb hace lo propio con varios oponentes, pero tropieza con el cerdo y este se hincha y empieza a rebotar por la zona. Mientras tanto, y sin que nadie se ocupe de él, Chopper aprovecha el desconcierto y coge un gran tanque de combustible y, no sin problemas y arriesgándose a quemar sus servos por el esfuerzo, lo introduce en la nave Fanstasma.

Ezra usando su pecular sable de luz como pistola energética
Casi todos los hombres de Azmorigan son reducidos sin embargo este consigue capturar a Zeb y amenaza con matarlo si no le entregan de nuevo su cerdo. Al verlo desde el interior de la Fantasma Chopper dispara con los potentes cañones cerca de Azmorigan y Zeb y ambos salen volando fruto del impacto. El orondo criminal es encañonado tras caer al suelo y es obligado a marcharse con sus hombres, con el rabo entre las piernas.
Cuando su opnoente sale de escena Lando se queda con el cerdo para la venta y como pago por sus servicios devuelve a sus nuevos amigos la propiedad de Chopper. El grupo se marcha contrariado por no sacar ningún beneficio, pero su estado de ánimo cambia cuando ven que el droide al menos se ha hecho con un caro depósito de energía con el que podrán acometer nuevas misiones.
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