RESÚMEN DEL CAPÍTULO Nº1

Sección creada por el Coronel Kurtz y varios colaboradores para SithNET
Prohibida la reproducción total o parcial sin el consentimiento de los autores.

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Episodio 1: Droid in Distress

 
“Enséñame que tienes de este grupo rebelde” (Bail Organa a R2-D2)

Kanan y sus compañeros son atacados por varios cazas imperiales cuando intentan roban un cargamento y deben dar un salto hiperespacial para ponerse a salvo. Apenas tienen comida, los explosivos están casi agotados, e incluso andan cortos de combustible, de modo que de no ganar algo de pasta rápidamente tendrán que dejar la nave en tierra y será el fin para ellos.

La única solución que ofrece Kanan es aceptar otro trabajo del contrabandista de armas Vizago y, aunque Zeb no ve con buenos ojos los trabajos en los que se venden armas, tanto él como el resto aceptan la propuesta. Kanan tienen ya todos los datos y, tras decirles que se trata de una “redistribución de armas”, todos se dirigen al Espacio Puerto y, tras dejar a Hera en la nave Fantasma, toman el transporte ST 45 que se dirige a Garel.

Para no levantar sospechas el grupo sube al transporte regular de forma separada de modo que Ezra simula ir acompañado de Chopper, Zeb hace lo propio con Sabine, y Kanan finge viajar solo. Tras tomar asiento en el pequeño transporte que dirige el piloto droide RX-24, todos se fijan en su objetivo, un aqualish llamado Amda Wabo al que acompaña la Ministra Maketh Tua. Wabo no habla básico y por eso Tua cuanta con la asistencia de C3PO que actúa como traductor y viaja acompañado de su pequeño complemento R2-D2.



La Ministra Maketh Tua con el aqualish Amda Wabo

Siguiendo el plan trazado Chopper monta un escándalo que hace que Kanan proteste ante RX-24 y pregunte si no hay alguna norma que regule la presencia de androides entre el pasaje. El piloto le responde afirmativamente y ordena que Chopper deja la cabina y vaya a la parte trasera del transporte. Ezra protesta y, señalando a C3PO y R2-D2, afirma que si su androide debe ir a la parte trasera, también lo deben hacer los demás.

El piloto reconoce que el muchacho tiene razón y ordena que todos los androides dejen la cabina. La Ministra Tua protesta y sostiene que está en una negociación para el Imperio y pide que se dispense a sus androides, pero el piloto insiste que es normativa y legislación imperial que deber cumplirse. Tua no desea arriesgar el trato que debe cerrar por un conflicto tan nimio y pide a C3PO y R2-D2 que cumplan con la orden. La pareja así lo hace con el pequeño astromec emitiendo silbidos y con C3PO respondiéndole “Misión secreta ¿Qué misión secreta?”.



C3PO, R2-D2, Chopper y otro androide son apartados del pasaje

Sin C3PO ejerciendo de traductor Tua no entiende a Wabo y se desespera hasta que Zeb, que está sentado tras ellos con Sabine, le dice que la muchacha es una gran estudiante de idiomas y que podría ayudarla. La ministra no lo ve claro, pero cuando la muchacha afirma que está a punto de hacer los exámenes de nivel cinco en la academia imperial acepta su ayuda.

Para ganar algo de tiempo, y dado que el viaje es muy corto, Tua pide que a Sabine que le pregunte a Wabo el que muelle de embargue se efectuará el intercambio al llegar a Garel y este le responde en su idioma que será en el muelle 7. La joven toma buena nota de la respuesta, pero cambia la traducción y le dice a Tua que será en el muelle 17.

El viaje es corto y cuando toman tierra Ezra, aprovechando su pequeño tamaño, se cuela en un conducto de ventilación y accede a los tejados. Una vez allí y, tras usar las Fuerza para dar varios saltos imposibles, se dirige el techo del muelle 7 y, usando otro conducto de ventilación, entra en él y abre las puertas para que el resto de sus amigos accedan a la estancia. El Fantasma, pilotado por Hera, los ha estado siguiendo y desciende también en la puerta del muelle.

Antes de subir la carga Zeb abre uno de los contenedores y se retira alarmando mientas Sabine, maravillada, toma una de las armas y las identifica como disruptores de iones T-7, unas armas que fueron prohibidas en su día por el Senado ya que pueden cortocircuitar naves enteras de un sólo disparo.



Ezra obsreva como Sabine empuña una disruptor de iones T-7

Tua y Wabo, que al aterrizar se han reunido con C3PO y R2-D2, y están siendo escoltados por un pelotón de Soldados de Asaltos, se dirigen al muelle 17, pero cuando llegan allí el aqualish se muestra disgustado y lanza una perorata en su idioma. C3PO traduce sus palabras e informa a la ministra que el muelle que él indicó es el 7 y añde, orgulloso, que si no se es un buen traductor como él es sencillo confundir 7 con 17.

Desesperada por al pérdida de tiempo Tua ordena a todos ir al muelle 17 y Chopper, que la está vigilando, al ver que su engaño ha sido descubierto se lo comunica a Hera. La piloto le pide que los entretenga y mientras su compañero lo hace ella avisa el resto para que se den prisa y carguen las armas. Para ganar tiempo Chopper choca contra R2-D2 y ambos pelean y, aunque esto detiene al grupo un instante, en cuanto Tua reconoce al androide concluye que es una trampa y ordena ir al muelle 7 a todo prisa.

Tua y los demás llegan al hangar cuando Kanan y los suyos aun no han terminado de cargar las armas y se produce un tiroteo. Gracias a Zeb y a Kanan el grupo puede huir con al armas. A ellos se une C3PO que no tiene otro remedio que subir a la nave Fantasma siguiendo a R2-D2 que está empeñado en no perder de vista los T-7.



Zeb usa su Bo-Rifle contra los Soldados de Asalto

Perdida la carga y arruinado el trato, Tua se comunica con el Agente Kallus y le cuenta lo sucedido. Al escuchar las descripciones de los asaltantes el Imperial concluye que son el grupo que persigue y ordena que se ponga rumbo a Lothal y se asignen todos los recursos a su búsqueda.

Los dos androides son descubiertos en el acto y aunque C3PO trata de explicar que no son androides imperiales y afirma que sólo estaban al servicio temporal de la Ministra Tau. Kanan no termina de creerle y ordena que se les pongan cerrojos de seguridad y anuncia a sus compañeros que se los venderá a Vizago para ganar algo más de dinero.

Sabine, que ha estado investigando la carga, anuncia que se trata de prototipos que el Imperio necesita para producirlos en serie y Kanan recibe la noticia con alegría ya que se trata del golpe perfecto. Zeb, que se ha mostrado abatido desde que ha visto las armas, ruega a Kanan que las dejen fuera de circulación, pero este no le hace caso.

Zeb se encierra en el camarote que comparte con Ezra y echa al joven que se dirige a la cabina con Hera. La piloto le pide paciencia y le cuanta que los T-7 son armas que, empleadas contra seres orgánicos son monstruosas y le cuenta que Zeb lo sabe bien ya que los Imperiales las usaron contra su gente, los lasat, matando a la mayoría. La polito le asegura que quedan pocos como Zeb y que ya ninguno vive en su planeta natal y cambia de tema preguntándole cómo va su entrenamiento Jedi. El joven, que aun no ha conseguido que Kanan empiece a entrenarlo, arruga el gesto y deja la cabina.



C3PO lanza un mensaje de socorro que llega a Kallus

Antes de bajar de la nave el grupo tiene una pequeña reunión y Sabine traduce unas palabras de R2-D2 en las que afirma que su verdadera misión es evitar que los T-7 caigan en manos imperiales. El androide sostiene que Tau no es su dueña y que su verdadero propietario les pagará generosamente por su devolución sin embargo Kanan aparta el asunto y ordena llevarle las armas a Vizago. C3PO, que no sabía nada de la misión secreta, cree que su compañero está loco y, cuando nadie le ve, lanza un aviso de auxilio que es monitorizado por el Destructor Estelar de Kallus. El Imperial le promete ayudarle si le da sus coordenadas y C3PO se las envía.

El grupo de Kanan se reúnen con Vizago y cuando la carga está a medio entregar aparece Kallus con sus hombres. Al verlos, y antes de que lleguen a ellos, Vizago se marcha con la mitad de los disruptores si pagar un solo crédito ya que, según el mismo afirma, ni paga por la mitad de una carga, ni paga a aquellos que le traen problemas.

Kanan toma un T-7 para luchar con los AT-DT que han desembarcado los Imperiales y Sabine, siguiendo la sugerencia de R2-D2, convierte las cajas de T-7 en bombas sobrecargándolos. Kallus también ha desembarcado con Soldados de Asalto de modo que todos se parapetan y se protegen del fuego del enemigo.

El Imperial exhibe un Bo-Rifle igual que el que tiene Zeb y le reta a duelo. El lasat, aunque sus compañeros se lo desaconsejan, acepta el reto y sale para enfrentarse a Kallus. Mientras luchan el last le dice que sólo la guardia de honor de su pueblo puede llevar un Bo-Rifle y el imperial lo enfurece al decirle que el mismo se la quitó de las manos a uno. Por si esto fuera poco Kallus confiesa que fue el quien dio la orden de usar los T-7 contra su pueblo y eso vuelve loco de furia a su rival.



Zeb y Kallus se enfrenta en duelo con sus Bo-Rifles

Usando las improvisadas bombas Kanan y los suyos acaban con los AT-TD y con varios Soldados de Asalato, pero mientras lo hacen Kallus vence a Zeb al que deja de rodillas y medio inconsciente. El Imperial alza su Bo-Rifle para darle en golpe de gracia sin que Kanan, lanzado a tierra por una explosión, sea consciente de ello y pueda ayudarle. El que si lo ve es Ezra que, de forma intuitiva, usa el Empujón Fuerza para hacer que Kallus salga volando y se estrelle contra unas rocas cercanas.

Tras recoger a Zeb el grupo consigue huir y el grandullón al enterarse que su salvador ha sido el joven se lo agradece a su modo. Kanan está impresionado por lo que ha hecho Ezra y, no pudiendo eludir más el momento, asegura al joven que al día siguiente comenzará a instruirlo en la senda Jedi.



Bail Organa se muestra contento al recuperar a sus androides

Sólo queda una cosa por arreglar y es llevar a los dos androides con su verdadero dueño de modo que Kanan los conduce hasta la nave de este, el Senador Bail Organa, que le paga generosamente. Kanan, que no llega a saber su nombre ya que R2-D2 se lo oculta, se despide de Organa y este hace lo propio usando un viejo dicho Jedi que hace que los dos se vean con nuevos ojos.

Ya a solas, y con C3PO desconectado por voluntad propia ya que dice estar agotado, Organa habla con R2-D2. El senador le dice que se olvide por un momento de los imperiales y de los T-7 y le pregunta si lo ha grabado todo. R2-D2 asiente.


Curiosidades del capítulo 1

 

La voz del androide piloto RX-24 la pone el actor de doblaje Paul Reubens conocido por muchos de vosotros como Pee Wee Herman. Este actor puso también la voz a Rex el piloto de la atracción ambientada en el universo Star Wars “Star Tours”.



Ilustración de pre-producción para RX-24 pilotando

Tras Sabine se sienta un pasajero que está vestido y tiene el aspecto que le dio al general Skywallker el genial ilustrador Ralph McQuarrie en las primeras ilustraciones de Star Wars, cuando la historia era muy distinta a la que finalmente vimos en pantalla.



El pasajero tras Sabine es el General Skywallker de Ralph McQuarrie

Hasta la parte trasera del transporte además de R2-D2, C3PO y Chopper es enviado otro androide. Ni en el guión ni en la web se nos da su nombre y lo único que sabemos de él, además de que se trata de un droide de protocolo modelo RQ, es que su aspecto está basado en las primeras ilustraciones que hizo Raph McQuarrie para C3PO en los primeros momentos de la producción de "Star Wars".



El androide y la ilustración de Ralph McQuarrie para C3PO

Galácticamene hablando Garel está “puerta con puerta” con Lothal. Ambos planetas están separados por un viaje hiperespacial de pocos minutos y la ruta que los une está muy transitada por ciudadanos de ambos mundos. Esto explica la regularidad de transportes como ST 45 que son como los autobuses de línea que unen nuestros barrios.

La nave de Bail Organa, con sus inmaculados pasillos blancos, es, como todo buen fan sabe, la Tantive IV. Si habéis sido observadores habréis visto también que se incluye una escena con el senador arrodillado a los pies de R2-D2 que homenajea el mítico momento en el que Leia introduce los datos de la Estrella de la Muerte en el vivaracho androide.



El androide y la ilustración de Ralph McQuarrie para C3PO

Aunque no se desvela en el capítulo emitido, el guión indica que aunque los protagonistas identifican a C3PO y R2-D2 como androides imperiales estos en realidad están en misión para el Senado Imperial. Aunque esto ya no se especifica podemos suponer que quien cede su uso temporal es el Senador Bail Organa y que el Senado Imperial, heredero del Senado Galáctico, esta dando algo de guerra al Emperador que, como sabemos por "Una Nueva Esperanza" terminará cerrándolo.

En esta serie, como ocurría en "Clone Wars" se cuidan todos los detalles, incluso si son pequeños. Es por ello que C3PO tiene, de rodilla para abajo, su pierna izquierda planteada en lugar de dorada tal como se veía en "Una Nueva Esperanza".

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