La Voz de Asturias

 

¡HASTA LUEGO, LUCAS!
Rafael Bosch ( Sevilla )

Visto y no visto. George Lucas y parte del equipo técnico y artístico que le secunda en la producción del Episodio 2 de "La guerra de las galaxias" pasaron raudos por Sevilla para rodar en la plaza de España. Una secuencia que recogerá un diálogo de tres minutos entre la reina Aminala y el senador Palpatine garantizará la entrada de la capital andaluza en la mito del serial de cine más exitoso de la historia.

De ello se encargarán los millones de fans que, como los que ayer acudieron a intentar presenciar la filmación, no se cansan de disfrutar con los duelos de espadas láser. Desde primerísima hora de la mañana, la plaza qued6 acotada y vigilada con unas medidas de seguridad dignas de una visita real. Una valla de barrotes verdes dejaba a seguidores, periodistas y curiosos a unos 200 metros del set de rodaje.

Entrar, imposible. Pero en Sevilla colarse es un arte. Los guardas tuvieron que escuchar los argumentos más peregrinos de quienes querían sortear los controles. Estrategias como "el del catering me ha dicho que entre a hacerle un mandado" o "mi madre está trabajando dentro, en peluquería" resultaron totalmente infructuosas. "Lo he intentado tres veces por puertas distintas", se lamentaba Fran, sevillano de 22 años. "Hasta me he hecho el enfermo, he fingido marearme, a ver si me pueden dar agua, y nada, ya me podía morir en sus narices".

Resignados a atisbar desde la lejanía, los fans más excéntricos se dedicaron a escenificar un combate con las espadas de luz de la serie. Otros sacaban fotos a los que se habían disfrazado y hasta maquillado para la ocasión, como Xavi, un barcelonés estudiante de Matemáticas que aterrizó en Sevilla con un amigo en el primer avión de la mañana: "No hemos dormido por los nervios". Su aspecto, clavado a Darth Maul, el villano de "La amenaza fantasma", le convirtió en una de las estrellas de la mañana a falta del grueso de los protagonistas del filme.

De los actores poco se supo. La majestuosa belleza adolescente de Natalie Portman apenas se intuyó bajo un aparatoso vestido en el camino de la capa camerino a los focos. Ante la decepción, el hervidero de testosterona confinado tras las vallas exigía al menos contemplar a un guerrero como los que encarnan Ewan McGregor o Samuel L Jackson. Pero nada. "Tampoco han venido loe robots", protestaba Manuel Amado, madrileño de 19 años. Y es que la filmación de la película convirtió los aledaños del parque de María Luisa en una improvisada convención galáctica.

Finalmente, el poder de la Fuerza se manifestó a primera hora de la tarde. George Lucas se acercó a la masa humana a saludar y a estrechar unas cuantas manos. El alborozo entre los fieles no lo hubiera superado ni el mismísimo Chewbacca. La conversión de Sevilla en el planeta Naboo llegará a las pantallas dentro de algo más de un año, si el reverso tenebroso no juega una mala pasada.
Fuente: El Periódico de Calaluña / La voz de Asturias
Enviado por: Shirokawa Akira