"El chico es tú ultima esperanza ¿Verdad Obi-Wan?" (Vader sobre Luke)
Mientras Han y Leia tratan de abrirse paso con el AT-AT que han robado, y al que han subido a varios esclavos, Darth Vader y sus hombres acaban con tantos fugados como pueden. Los imperiales que cercan al robusto caminante son cada vez más y entre ellos se encuentran varios tanques y vehículos AT-ST.
Han sabe que no durarán mucho de modo que contacta de nuevo con C3PO para que acuda a recogerlos con el Halcón Milenario cuanto antes. El atribulado androide, que tras ser desmembrado por el disparo de los carroñeros ha quedado medio tapado en una bolsa, reporta lo funesto de si situación. Han está a punto de aceptar que todo está pedido cuando, sin previo aviso, aparece el poderoso Chewbacca quien, tras sobrevivir a la destrucción de su puesto de tiro (ver el Nº1), llega a la zona y pone en fuga a los carroñeros.
Chewbacca pone en fuga a los carroñeros
El Halcón Milenario, al que los carroñeros ya habían quitado varias piezas, no está en condiciones de emprender el vuelo y Chewbacca inicia unas reparaciones de urgencia y promete acudir al rescate en cuanto sea posible.
Vader, que acaba de recibir un mensaje del Supervisor Aggadden indicando que ha conseguido detener la fusión del reactor de la fábrica de armas, decide ocuparse en persona del AT-AT y, usando su sable de luz, corta varias piezas de una de las patas hasta que consigue amputarla. Sin uno de sus apoyos el caminante cae al suelo y Han y Leia lo abandonan ayudando a los esclavos que viajaban en su bodega.
Luke, que ha estado ayudándoles desde una moto jet, recibe una orden de Leia para que los deje y escape, pero el joven no hace ninguna de las dos cosas y, sabiendo que la fusión ha sido detenida, regresa a la fábrica para que la misión no termine en fracaso. Al verlo Vader toma un vehículo y sale tras él abrindo fuego y ordenando a sus hombres que se ocupen de los supervivientes del AT-AT.
El joven aspirante a Jedi consigue llegar hasta el núcleo de la fábrica y dispara contra él iniciando una reacción en cadena que hace estallar las instalaciones. Luke consigue salir de la instalación en el último instante, ya casi envuelto por una gran bola de fuego, y es recogido por el Halcón al que ya han subido también Han Solo, Leia y varios esclavos.
Darth Vader contempla como le aleja el Halcón Milenario
De las llameantes ruinas surge poco después Vader que ve impotente como el Halcón deja la atmosfera planetaria para acto seguido dar un salto hiperespacial rompiendo con ello el bloqueo de sus Destructores Estelares. Vader está enojado y habla con su antiguo maestro, Obi-Wan Kenobi, diciéndole que entiende que muriese para salvar al joven. "Puede que sea poderoso en la Fuerza pero es inexperto. ¿Quién queda para entrenarle?" pregunta a su antiguo maestro mirando al cielo y él mismo se responde diciendo "Nadie excepto yo. Cuando le encuentre, y le encontraré, se convertirá en mi arma y no en la tuya".
En el Halcón, y ya a salvo, Leia trata de confortar a Luke. El joven, que sabe que todos han estado a punto de morir, está frustrado y reconoce que Vader tenía razón. No es un Jedi y sin Kenobi a su lado no dispone de ninguna guía. No es cierto ya que, aunque aun no lo sabe, lejos de allí, en la antigua casa de su maestro en los Mares de Dunas de Tatooine, hay una pequeña caja y en ella pone "Para Luke".
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