Portada del Nº4 de la serie Star Wars Rebellion

"No quería hacerlo. Por favor créeme. Ellos me obligaron. Era parte de su plan"
(Jorin a Luke tras disparar sobre Leia)

Cuando Luke y Tank llegan a la posición que ocupa Deena Shan ven que la hermosa joven resiste a duras pernas el envite de los hombres del capitán Rushuir. Tank está herido y Luke y Deena no pueden contener a los Soldados de asalto durante más tiempo de modo que el Jedi dispara sobre los controles de una puerta romboide y consigue cerrarla separando a los imperiales en dos grupos.

El acceso a la nave está a unos pocos metros de su posición de modo que los tres rebeldes acceden a ella y despegan. La maniobra, al estar su nave adherida al casco, abre un hueco en este que hace que los imperiales que han quedado en su lado de la puerta salgan volando y perecen en el espacio (ver imagen). En el otro lado Rushuir consigue abrir la puerta pero al comprobar que hay un agujero en el casco y que la diferencia de presión amenaza con arrastrar al resto de sus hombres al exterior cierra las puertas y anula la persecución.

La abertura del casco aboca a los imperiales a una fría muerte en el espacio

Cuando el grupo regresa al convoy rebelde Leia abronca a Luke por emprender el rescate en solitario y aunque se alegra de que haya encontrado a su amigo Tank no se fía de él y pide a Tungo que emita un informe. Durante varios días Tungo Li estudia a Tank sin llegar a una decisión clara sobre si miente o no y su recomendación final es que se le permita acceder libremente a los niveles de menor seguridad de la nave pero vigilado siempre por uno de sus hombres.

Luke trata de convencer a Leia para que de más libertad a su amigo pero la princesa está en el puente ocupándose de un asunto muy importante y no le presta atención. El joven Jedi está decide dejar su petición para otro momento y cuando está a punto de salir de la sala se cruza con Jorin que para su sorpresa desenfunda su blaster y dispara sobre la princesa y sus hombres.

Jorin, al que todos creían plenamente recuperado, sigue sin poder librarse por completo del condicionamiento imperial y entre sollozos anuncia que no ha podido evitarlo. Leia esta mal herida y dos de sus lugartenientes han muerto (ver imagen) y por si esto fuera poco un impresionante grupo de naves imperiales comandadas por Darth Vader surge del hyperespacio y rodea a los rebeldes.

El condicionameinto imperial hace que Jorin ataque a los suyos.

Luke sugiere que todas las naves salten al punto de reunión fijado para las situaciones de emergencia pero Jorin les ruega que no lo hagan y anuncia que no solo a manipulado sus sistemas sino que ha dado a los imperiales todos los destinos fijados para las emergencias. Huyan a donde huyan encontrarán naves imperiales esperándolos.

Desesperado Luke trata de poner a Leia a salvo pero uno de los soldados rebeldes se lo impide. Se trata de Tank, que tras matar al hombre de Tungo Li que lo seguía, se ha infiltrado en el puente de mando y está dispuesto a llevar a Luke y a Leia ante Vader tal como el señor oscuro le ha ordenado.

"Usted no es importante. Es solo un insignificante peón. Un personaje incidental
en una historia mucho más grande" (Vader, en sueños, a Tank)

I.- LA HISTORIA

La anterior entrega se cerraba con una imagen de Deena parada a medio metro del capitán Rushuir y sus hombres y esta se abre con una viñeta que muestra a la joven abriendo fuego contra los imperiales parapetada en una esquina y en compañía de Luke y Tank. ¿Qué ha pasado? Nada dice el guionista al respecto y el hueco, que pese a poderse explicar con facilidad no es ni mucho menos pequeño, ha de ser el lector quien lo rellene.

A este comienzo, ciertamente chapucero, hay que añadirle una fuga estrambótica y la penosa impresión que se da de los servicios de inteligencia rebeldes. Tanto en este número como en el anterior se no dice que tanto Jorin como Tank son personajes sospechosos y se encarga a Tungo Li, uno de los grandes expertos en contrainteligencia, que estudie ambos casos. ¿Qué hace este supuesto experto? El peor trabajo jamás visto y auque todo se puede justificar con la socorrida “licencia artística” lo que subyace en el fondo es una preocupante falta de imaginación y un nulo interés por ofrecer un producto de calidad.

  

Última viñeta del Nº3 y continuación inexplicada del Nº4

¿Costaba tanto buscar un planteamiento sensato al doble juego de Tank o al control que ejerce el imperio sobre Jorin? Yo creo que no pero supongo que como ocurre con otras series de Star Wars el interés editorial es escaso y por ende el cuidado que se pone en la publicación limitado.

Como único punto favorable, y pese a que no es original pues ya ha salido en más de una ocasión, citaré el momento en el que Tank escucha como Luke narra la destrucción de la Estrella de la Muerte. El aguerrido teniente escucha a su amigo con clama mientras piensa en los miles de veces que habrá narrado su hazaña y se pregunta si alguna vez ha tenido en cuenta los miles de soldados imperiales, de buenos hombres, que murieron cuando destruyó la gigantesca estación estelar.

II.- EL DIBUJO

Tras el efímero relevo de lápices del anterior número Badeaux retoma la serie y vuelve a obsequiarnos con personajes sumamente alargados y embutidos en ceñidos trajes que resaltan su musculatura. Si no fuese un cómic de Star Wars uno pensaría que se trata de una publicación americana de superhéroes o de una novela gráfica de las que se venden en chueca.

Que Tank parezca una montaña de músculos puede justificarse con la disciplina imperial y la profesionalidad del joven teniente pero para explicar los abdominales de Luke habría que recurrir al clenbuterol ;). Observar la siguiente viñeta en la que Luke y Deena parecen una pareja recién salida del gimnasio que se encuentra con un científico loco que tiene problemas para domar su pelo (Tungo Li) y con Miguel Indurain que anda en busca de su “espada” (no me refiero a su sable de luz sino a la súper bicicleta de contrarreloj con la que batió el record de la hora)

Mr y Ms musculitos, el profesor chiflado y Miguel Indurain

De las imágenes de las flotas me limitaré a decir que parece que la reunión se ha producido en el rincón más pequeño de la galaxia. Manda hue... de bantha que con lo grande que es el espacio la acumulación de naves por metro cuadrado sea tal que disparando al azar resulte imposible errar el disparo. Con un abigarramiento como este ordenes del tipo “concentren el fuego sobre ese superdestructor” son absurdas y basta con emitir un escueto “Abran Fuego sobre el mogollón” para que incluso el más negado de los artilleros imperiales dispare y haga blanco sobre algo, sea amigo o enemigo.

Entre lo positivo, que también lo hay, me quedo con el tratamiento que se hace de los episodios oníricos de Tank. En uno de ellos el teniente ve como Vader lo agarra por el cuello y le obliga a cumplir sus órdenes y en el otro contempla apesadumbrado como Luke, sable en mano, mata a cientos de soldados de asalto y acaba subido en una montaña de cadáveres imperiales (no pondre la captura de este mometno para evitar la calificación “mayor de 14 con reparos” juas)

© S I T H N E T
Esta sección está coordinada por Nassira A. Dors y el Coronel Kurtz y es posible gracias a la
inestimable colaboración, entre otros, de: Keyan Sark, Shirokawa Akira, Al Noah y Darth Jako
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