"Yo soy un arquitecto del genocidio" (Asajj Ventress)
Kenobi encuentra a Asajj Ventres recuperándose de sus heridas dentro de un tanque de bacta en un complejo médico de Boz Pity cuando aparece Dooku acompañado por dos de sus guardias androides (magnaguards).
Kenobi reprocha a Dooku que haya fomentado el odio que siente Ventress en lugar de ayudarla pero este afirma que cuando la encontró el odio ya la había consumido y que era precisamente ese sentimiento lo que la hacía poderosa. Como si pudiese oírlos Asajj despierta y tras hacer estallar el tanque recoge los sables que le lanza Dooku y se enfrenta a Obi-Wan desplegando todo su odio.
Fuera de las instalaciones el general droide Grievous, en dura pugna con las tropas republicanas, consigue incapacitar al soldado Alfa dañándole la espina dorsal y acaba con facilidad con Adi Gallia. Mace Windu, que ha observado toda la escena, se apresta a enfrentarse con el General Grievous cuando este queda enterrado bajo una STAP droide que Anakin lanza sobre el usando la Fuerza.

Windu se apresta a enfrentarse con Grievous
Windu informa a Anakin que las instalaciones están siendo atacadas y que hay que sacar a Obi-Wan de allí canto antes. La tarea no parece fácil porque no saben donde está pero justo en ese momento Kenobi atraviesa el muro y cae al suelo empujado por Ventress. Anakin reacciona con prestaza y se enfrenta con ella pero Kenobi le dice que jamás la vencerán con el sable, que no es tarde para ella y que solo necesita sentir que no está sola y que hay gente que la quiere.
Mientras esto sucede Windu localiza a Dooku y trata de acabar con el pero este emplea a dos de sus guardias para entretenerlo mientras prepara la huida junto a Grievous que ha sido rescatado, muy mal herido, por sus guardia personal.
Kenobi le dice a Ventress que Dooku no siente nada por ella y que la abandonará como a un perro cuando no le sea útil y aunque ella no quiere creerlo cuando ve que el conde va a abandonar Boz Pity corre tras él. Su maestro, cansado de sus fallos, manda disparar sobre ella y Ventress cae al suelo mortalmente herida y siendo plenamente consciente de que Obi-Wan tenía razón.
Kenobi corre a ayudar a Ventress y pide a Anakin que le acompañe pero este prefiere correr tras Dooku. Kenobi le dice que la vida de Ventress y la suya son muy parecidas y que de haber sido otro Jedi y no Qui-Gon el que lo encontró en Tatooine su destino podría ser el mismo pero Anakin le dice que se equivoca y sigue su camino en un postrero e inútil intento por alcanzar a Dooku.
Kenobi trata de ayudar a Asajj mientras llega la asistencia médica pero esta se abalanza sobre él usando un afilado trozo de metralla. Su intención es matarlo pero cuando está a punto de acuchillarlo aparece Anakin y le da un tajo con su sable en la espalda. Obi-Wan da las gracias a Anakin y aunque este no lo entiende sigue ocupándose de Asajj que antes de morir, y odiando en esos momentos aun más a Dooku que a los Jedi, dice a Kenobi que deben protejer el centro de la galaxia porque esa es la llave para la victoria.

Asajj Ventress escapa de todo lo que conoce. (imagen final del cómic y de la serie).
Alfa y Ventress son evacuados y Kenobi pide que la discípula de Dooku sea enviada a Coruscant para un entierro digno. Todos la creen muerta pero Asajj ha empleado las viejas artes de la meditación Sith para mantenerse con vida y tras recuperarse parcialmente despierta y toma el control de la nave médica en la que viaja. Ventress esta confusa y harta de la guerra, de Dooku y de los Jedi de modo que en lugar de acabar con los pilotos les obliga a llevarla lejos, muy lejos, lo más lejos posible de tanta violencia y locura (ver imagen).
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