“Yo soy solo uno de los muchos que la sirven” (Stazi a Yorub)
El Almirante Valan exige a Stazi que se rinda pero este se niega. El grupo que había enviado para apoderare del Imperioso ha sido capturado, las defensas planetarias están activadas y la flota imperial impide que sus hombres puedan escapar sin embargo el valeroso insurgente rechaza el ofrecimiento, entre otras cosas, porque todo está saliendo como había previsto y la situación esta a punto de dar un giro radical.
La mayor parte de los soldados que han interceptado a los hombres de Stazi en el Imperio son también hombres suyos y en unos pocos minutos retoman el control de la moderna nave llevándola a un punto de encuentro situado al otro lado del planeta (Mon Calamari llamado Dac por los nativos)
Valan considera que Stazi es la llave de la campaña y deja que el Imperioso se aleje con la certeza de que no podrá ir muy lejos y acto seguido ordena concentrar el fuego de sus navíos, y el de las defensas automáticas, contra la flota de Stazi que responde colocando las entre el planeta y los astilleros orbitales obligando así a los imperiales a usar los cazas (ver imagen).

Lucha de caza sobre Mon Calamari
Las cosas empiezan a ir mal para Valan y empeoran aun más cuando ordena a las defensas planetarias abrir fuego contra Stazi y estas responden lanzando una lluvia de fuego contra la flota imperial.
Valan, cabreado, concentra el fuego de su flota en el indomable, la nave insignia de Stazi, que no tarda en ser inutilizado. Stazi pide que todos los sistemas primarios sean transferidos al puente y tras ordenar a todos los tripulantes que abandonen la nave programa su autodestrucción y toma los mandos dispuesto a entregar su vida.
Jaius Yorub, su fiel lugarteniente, no puede permitir que su líder muera y aunque este le dice que lo importante es la causa y no las personas ordena al teniente Jhoram Bey que lo deje fuera de combate y lo ponga a salvo. Bey golpea a Stazi y tras meterlo en su caza lo saca del Indomable mientras Yorub da su vida a los mandos de esta en una gran explosión que destruye gran parte de los astilleros y de la flota imperial.

Jaius Yorub pilotando heroicamente el Indomable hacia su destrucción
El Imperioso y los restos de la flota de Stazi se concentran en el punto de reunión mientras Valan, derrotado y temiendo el castigo que le impondrán sus amos Sith, se retira a sus aposentos y elige una pistola bláster de su armero.
"Los Sith no perdonaran esta acción. Sólo nos falta saber cuan duro golpeará el martillo y donde lo hará" sentencia Stazi anticipando que su exitosa y arriesgada acción tendrá consecuencias graves.
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