Estoy preparado para morir (Darth Kruhl). Bien. Yo lo estoy para matarte. (Roan Fel)
I.- LA HISTORIA.
 Argumentalmente hablando esta entrega de la serie Legacy esta francamente bien sobretodo porque recoge con acierto el espíritu Sith y porque plantea una historia corta de mentiras, traiciones y sacrificio que queda bien reflejado en el subtítulo de la obra "Ready to die" (Preparado para morir).
Darth Kruhl es, salvando las diferencias, una mezcla de Maul y Anakin en la que del primero se toma el aspecto siniestro y la diligencia en el combate y del segundo las contundentes y frías amenazas realizadas tanto a sus enemigos como a sus "aliados" (Los Sith en realidad no tienen aliados sino grupos con los que contemporizan en función de unas necesidades temporales. Tiempo tendrán para actuar contra ellos cuando convenga).
La respuesta de Roan Fel, al que no le tiembla el pulso a la hora de ordenar la ejecución de todos los tripulantes del "Intrépido", arroja muchas sombras sobre este personaje que hasta ahora había sido tratado con guante blanco y como si fuese un "buen tipo" y esto es, en mi opinión, todo un acierto. También lo es la destreza que muestra con el sable y los escasos reparos que pone al uso de "trapas" pues a la armadura de Cortosis (sigo odiando este material y a su inventor original) hay que sumar que una vez desarmado no duda en disparar contra Kruhl usando un pequeño blaster que ocultaba bajo su túnica.
El final del cómic es también interesante porque nos anticipa que la caída de Fel vendrá con una traición interna y aunque Lady Malady le confiesa a Krayt que aun no dispone de un agente infiltrado su aseveración final es contundente "Siempre hay alguien que puede ser moldeado para nuestros propósitos. Sólo tenemos que descubrirlo".
II.- EL DIBUJO.
Colin Wilson, que ya se ocupó de la novena entrega de esta serie, vuelve ha realizar un trabajo muy apreciable en el que Darth Kruhl es el protagonista destacado y dominante. Dejando de lado que no me gusta que casi todos los Sith de esta serie lleven tatuajes a lo Darth Maul, debo reconocer que las viñetas en las que aparece Kruhl están llenas de acción y dramatismo y son las "mejores" de esta nueva entrega.
De los fondos escénicos hay poco que decir ya que casi toda la acción se desarrolla en espacios cerrados y se trabaja con planos cortos siendo la imagen de Munto Codru que abre el cómic la única gran imagen de exteriores que podemos ver en el cómic. Es cierto que podemos ver parte de Bastión aunque de modo parcial y fugaz e incluso los jardines Pellaeon pero sin grandes alardes. Pese a ello la imagen en la que Roan Fel medita sobre el gran logo imperial en medio del jardín es bastante simbólica (ver imagen) .
Roan Fel medita sobre el logo Imperial en los jardines Pellaeon de Bastión
A modo de curiosidad debemos indicar que Jassar, el hijo de Rikkar-Du, no tiene aspecto humanoide como sus progenitores sino el aspecto de un lobo, eso si, de seis patas. No sé si estamos ante una imposición del "background" que envía Lucasfilm sobre las razas que aparecen en el Universo Star Wars o ante una licencia del autor pero desde hoy debemos asumir que los crodu-ji pasan por una fase animal antes de convertirse en humanoides de cuatro brazos que caminan erguidos sobre dos piernas.
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