"Eres un corredor Goethar y eso significa que eres idiota" (Bardon a Goethar)
 Hay cosas que ni la guerra puede detener y entre ellas están los deportes televisados y en especial los duelos de motos swoops organizados por "La Franquicia". Estos juegos, patrocinados por Industrias Lhosan, el mayor productor de woops, tienen lugar en Jervos, una gigante estación que orbita sobre Pantolomin y Goethar Kleej (ver imagen) es el gran campeón, toda una leyenda que acaba de ganar su cuarto "solo aéreo" consecutivo.
La citada competición es una mezcla de carreras y duelos muy violentas pero los participantes usan brazaletes que impiden que en los enfrentamientos haya muertos y el espectáculo tiene millones de seguidores que se pegan a las holopantallas para ver los enfrentamientos.
Tras ganar su carrera Goethar se dirige a los espectadores y, tras afirmar que tiene algo importante que comunicarles, anuncia su retirada del circuito. Eso es al menos lo que todos escuchan sin embargo lo que realmente ha hecho el campeón ha sido acusar a la franquicia por las practicas que desarrolla en los niveles inferiores, en lo que ellos llamen "Nivel de granjeros".
Bardon, el máximo responsable de las carreras, ha censurado sus palabras usando una grabación sonora anterior y tras la carrera ordena que den una paliza la campeón. El avaro directivo no está dispuesto a perder a su mejor hombre y para forzarlo a que vuelva a participar en las carreras le enseña un vídeo en el que se ve a su hijo Aubin participando en las preliminares.
Goethar, que sabe que su joven vástago no está preparado para la competión, pide que le dejen participar con él en la modalidad de tandem pero Bardon le dice que no le dejará participar hasta las finales y que será entonces cuando, si hay suerte, padre e hijo se enfrenten en la final. Luego, por si Goethar decide intentar algo, le informa que los accidentes son posibles y que aunque hace tiempo que no ha habido bajas en directo los brazaletes pueden fallar y su hijo podría morir.
El grupo de Zayne llega a Jervos tras el anuncio de Goethar y el joven, que ha sido y es un entusiasta de las carreras, al ver que puede participar en las preliminares y ganar una moto con los colores del campeón al que tanto admira no se lo piensa y se apunta a la competición.
Zayne Carrick y Jarael a su llegada a Jervos
Gryph, que se hace pasar por inspector y como siempre trata de hacer negocio, intenta que Jarael realice varias apuestas en su nombre pero la joven está frustrada y no le hace el menor caso. Zayne la ha dejado sola para participar en las carreras y Rohlan lleva días persiguiéndola para que realice prácticas para mejorar su dominio de la Fuerza.
El mandaloreano debía quedarse en la nave pero, preocupado por la joven, acude en su búsqueda pero nada más poner pie en tierra es capturado por el servicio policial de Jervos que, al ver su armadura mandaloreana, lo detienen creyendo que es uno de los saboteadores de Coruscant que andan sueltos por la zona.
Gryph interviene en su defensa y convence a Bardon de que Rohlan solo es un participante que viste un disfraz mandaloreano porque así se ganará el odio del público pero también su atención. Bardon, animado por la posible subida de audiencia, deja que Rohlan corra las preliminares y el mandaloreano se reúne con Zayne en un sala en la que también esta Goethar.
El campeón se acerca a ellos y tras agarrar al antiguo padawan Jedi por el cuello le ordena que proteja a su hijo en las preliminares ya que ambos van a coincidir. La amenaza es suficientemente clara, si su hijo muere Zayen lo pagará con su vida.
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Brian Ching, al que se le han dado ya varios números en esta misma serie, sigue dando más de lo mismo y no ofrece un dibujo deslavazado y un tanto chapucero. 
