KANAN: THE LAST PADAWAN Nº4

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Ficha técnica y portada

 
Editorial: Marvel Comics.
Números: 4º de 6.
1ª Edición: Julio de 2.015.
Páginas: 23 Aprox.
Precio: 3,99 $ EE.UU.
Historia: Greg Weisman.
Dibujo: Pepe Larraz.
Color: David Couriel.
Letras: VC's Joe Caramagna.
Portada: Regular: Mark Brooks.




Portada Regular de Kanan The Last Padawan Nº4

Resumen argumental

 
"Ahora sólo soy un traidor para el nuevo Imperio y nade duda en traicionar a un traidor" (Caleb Dume)

Kasmir entrega a Caleb a Gamut Key anunciándole que se trata del Padawan Jedi huido que están buscando los Imperiales y exige que se le entregue parte de la recompensa que se ofrece por su captura. Tapusk, uno de sus mayores enemigos, es quien está en realidad detrás de Gamut y cuando este anuncia que la recompensa será para él Kasmir pide que al menos se le deje quedarse con los androides que ha cogido.

Gamut concede a Kasmir su deseo y cuando este se marcha encierra al joven Jedi en una celda y comunica con los Imperiales mostrándoles que tiene al fugitivo que buscan. El comandante Grey reconoce a Caleb y anuncia que acudirá de inmediato en compañía del Capitan Styles para recoger y ejecutar al traidor.

Sólo en su celda Caleb no puede creer que lo consideren un traidor y se resigna a su suerte, pero Kasmir aparece tras los barrotes y le dice que se aparte. Uno de los poderosos androides que le han dejado quedares arranca los barrotes y media pared y el joven escapa en compañía de su recuperado amigo. Kasmir, medio en broma medio en serio, le propone repetir falsas entregas para cobrar recompensas en distintos planetas, pero el joven se niega a ello aunque, al no disponer de ninguna otra opción, acceder a continuara su sociedad con él.



Caleb escapando de la cárcel

Sin dejarse tiempo para meditar sobre lo que pensaría de él su antigua Maestra (Deba Billaba) Caleb inicia una nueva carrera de ladrón y contrabandistas en compañía de Kasmir y, aunque le cuesta reconocerlo, disfruta con cada segundo de acción que su profesión le ofrece. Eso si, tanto el como su amigo deben ser muy cuidados ya que Grey y Styles se han empañado en capturarlos y los siguen de cerca de planeta en planeta.

Kasmir y Caleb llegan a Lahn donde han fijado un encuentro con un contrabandista llamado Jondo con el que van a realizar un intercambio. Al tomar tierra Kasmir ordena a Caleb que se reúna con Jondo y compruebe que este tiene el material que le ha pedido y gane tiempo mientras él usa las ganancias de su último trabajo para comprar la especia que usará para el intercambio.

Cuando Caleb se encuentra con Jondo lo reconoce como uno de los líderes separatistas con los que se enfrentó, el General Kleeve, y lo encañona con su arma. Kleeve le hace ver que ya no son enemigos, que de hecho nunca lo fueron, y que como él muchos entre los separatistas buscaban la libertad y su único error fue confiar en líderes corruptos como el Conde Dooku.

Caleb sabe que Kleeve tiene razón y que la República que defendía hasta hace poco es ahora una dictadura opresora de modo que baja el arma. Kleeve le dice que la nave está lista y que se la entregará en cuanto tenga su especia y Caleb, que no sabía en que consistía el trato, se muestra emocionado ya que él y Kasmir habían hablado muchas veces de la necesidad de disponer de dos naves que les permitiesen separarse si Grey y Styles los alcanzaban.

Emocionado el joven regresa a buscar a su amigo, pero cuando llega a la nave comprueba con pesar que el Comandante Grey lo acaba de apresar de modo que huye del lugar antes de ser visto. El joven cree que si escapa del planeta no habrá pruebas contra su amigo ya que este negará que está con él y las autoridades, que no tendrán pruebas de lo contrario, lo dejarán libre.



El Comandante Grey captura a Kasmir

Lo único que tiene que hacer es dejar el planeta sin ser visto y para ello sólo tiene una solución hacerse con una nave y sólo tiene una forma de conseguirla. Es por ello que Caleb regresa con Kleeve, le cuenta lo sucedido y le pide que le de la nave asegurándole que cuando lo suelten Kasmir este le entregará la especia. Kleeve intenta hacerle ver que los clones jamás soltarán a Kasmir, pero accede a entregarle la nave y lo conduce hasta el muelle en el que está amarrada.

Kleeve le dice a Caleb que la nave se llamaba "La esperanza de Farbrooke" y añade que, en un alarde de imaginación su compañero la quiere llamar "Kasmiri II". Caleb mira entusiasmado la nave y le responde que debería llamarse "la fuga", pero no tiene tiempo para más porque aunque la Fuerza le avisa que un peligro se cierne sobre él, antes de que pueda echar la mano a su arma Styles lo golpea en la cabeza con su rifle y lo noquea.


Comentario crítico

 
"Enfunda el arma chico. Ya no somos enemigos. Quizás nunca lo fuimos" (Kleeve)

Aunque en este número, penúltimo del arco, vuelva a estar orientado claramente a la acción, el guionista, Greg Weisman, realiza una gran labor al presentarnos los dilemas que surgen entre los antiguos bandos rivales cuando la guerra acaba y la República se transforma en dictatorial Imperio. Tal como certeramente apunta el General Kleeve entre los separatistas había mucha gente honesta que ansiaba la libertad y cuyo único error fue confiar en unos líderes corruptos que escondían otros intereses y los traicionaron. El viejo militar acierta también al hacerle ver a Caleb que el bando por el que luchó es ahora una dictadura que lo considera un traidor algo que, unido a lo anterior hace que ya no sean enemigos sino gente que está en el mismo barco (El enemigo de mi enemigo es mi amigo).

Añádase a esto que hay un buen equilibrio en la narración, que esta es sumamente ágil y que termina, otra vez, con un gran cliffhunger en el que los dos protagonistas han sido arrestados y eso hace que el lector tenga ganas de echarle mano a la quinta y definitiva entrega de este primer arco que auguro no será el último protagonizado por Kanan (Aka Caleb Dume).



El Comandante Grey noquea y captura a Caleb Dume

Del dibujo de Pepe Larraz debo decir que, no sólo no baja un ápice en la calidad de las entregas anteriores, sino que incluso se luce en varios momentos. El estudio anatómico y postural sigue siendo tremendo, los picados y contrapicados acertados, el toque "cartoon" refrescante, las imágenes marinas acertadas, etc. No se le puede poner ninguna pega, tampoco al maravilloso coloreado de David Curiel, y se deben alabar momentos como la doble página que dedica al bloque de detención y a los arrestos de Kasmir y Caleb Dume.

Resumiendo, una cuarta entrega de un magnífico arco, que sigue entregando una historia sólida, un dibujo magnífico y un respeto y una integración absoluta en el universo creado en Star Wars Rebels. Sin duda, al menos para mi, y de largo, lo mejor que pública sobre este universo la editorial Marvel hasta que pueda echarle mano a Shattered Empire.




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