"¡Cuando los duloks vienen a la Aldea del Árbol Brillante sin invitación, los destripamos!" (Chirpa)
Situada 8 meses antes de los acontecimientos narrados en "El Retorno del Jedi", esta historia nos cuenta una pequeña aventura de los ewoks a la vez que amplía el mundo de estos pequeños seres. La historia arranca con el díscolo Wicket, al que conoceremos de "El Retorno del Jedi", metido en problemas por haberse enfrentado a sus enemigos los duloks, una especie de coyotes bípedos que son otra raza inteligente y primitiva de la Luna Santuaria de Endor.
En el transcurso de la disputa Wicket es apresado por un depredador volador, similar a un dragón, y debe ser rescatado por Teebo. Meterse con los duloks esta prohibido y Wicket es castigado y obligado a ayudar a Chukha, el brujo de la tribu, quien trata de detener una infección de hongos que ataca a los árboles impidiendo que se extiendan.
Un estruendo cercano despierta la curiosidad de Wicket que quiere ir a ver que la causa, pero Chukha, mucho más sabio, ordena volver a la aldea. Más tarde, cuando la noche cae, la aldea recibe un extraño visitante, un dulok que les pide ayuda, afirmando ser superviviente de una catástrofe que ha destrozado su aldea y que ha sido causada por los que él llama "los calaveras". Su dramático testimonio finaliza con una extraña narración "¡rayos y fuego! ¡Destruyen árbol y roca! ¡Y despertaron al Griagh!".

Un dulok acude al poblado ewook para pedir ayuda
Aquellos a los que llama calaveras son en realidad los Soldados de Asalto del Imperio con sus blancas armaduras, que están comenzando a instalarse. Pero lo que en realidad asusta a los Ewoks es el Griagh que es parte de una vieja leyenda y que según Chukha es un "durmiente" que puede acabar con todos ellos.
Kneesaa, princesa e hija del jefe, Paploo, sobrino del hechicero, y Wicket, intrigados por el relato deciden ir a hablar en secreto con el dulok preso y, llevados por su innata curiosidad, lo liberan para que les conduzca al lugar donde vive el monstruo. Antes de partir con sus amigos Paploo es sorprendido por su tío y cuando este advierte al jefe Chirpa manda una expedición para que rescaten a su hija a la que cree secuestrada.
Los dos jóvenes y su preso se encuentran por el camino con Teebo y su novia Latara quienes, obligados por la princesa, se unen a la comitiva-Cuando finalmente llegan al lugar donde estaba la aldea dulok comprueban como las eficientes tropas imperiales ya han comenzando la construcción de sus extrañas instalaciones.
Mientras no muy lejos de allí, el hechicero Chukha lleva a su sobrino, y ahora aprendiz, Paploo a ve a Charal, una poderosa bruja humana, para pedirle consejo sobre cómo enfrentarse al Griagh. Charal lejos de ayudarles les traiciona y trata de quedarse con la fuente de la magia de Chukha, su "Piedra Solar". Tras una espectacular pelea mágica, y con la oportuna intervención del tirachinas de Paploo, Chukha consigue deshacerse de ella, sin embargo la energía de su amuleto está prácticamente agotada.

Charal luchando con Chukha y Paploo
En otra parte de la luna, Wicket y los demás al ver que el dulok usa, como en su pueblo es costumbre, una wistie luchan con él para liberarla. Las wistie son hadas luminosas que los dulok mantienen encerradas hasta que mueren usando la luz que emiten como lámpara y los Ewoks no están dispuestos a permitir semejante brutalidad.
El estruendo de la lucha atrae a una gran criatura de múltiples bocas, el Griagh. Todos se ponen en fuga y mientra escapan se encuentran con Chukha y Paploo luego, tras liberan a los duloks, todos juntos se enfrentan a los soldados. En plena lucha el Griagh sale a la superficie y , tras matar a varios soldados, es vencido por Chukha que le arroja la Piedra Solar con lo que en esta queda de energía mística.

El Griagh ataca por igual a ewooks, duloks e imperiales
El final de la contienda se recibe con alegría "El Griagh ya no existe y los duloks se han dispersado". Los invasores siguen allí, y ya no poseen magia pero nada de eso importa porque como muy bien dice uno de ellos "nos tenemos a nosotros mismos". El grupo rinde honores a los jóvenes y astutos guerreros, y a Teebo, que es algo mayor, se le asciende al rango de guerrero. "El futuro es incierto, pero por ahora ¡permitámonos celebrar nuestras victorias y pensemos sólo en esta noche!" proclama el jefe de la tribu.
Ocho meses más tarde, y cuando los ewoks se han acostumbrado a ver a los imperiales recorriendo su bosque, Wicket encuentra algo que no espera. ¿Quién será este ser algo y hermoso? parece preguntarse y cuando golpea su cuerpo con su lanza Leia, que había quedado inconsciente tras caer de la moto jet, abre lo ojos y lo mira sorprendida.
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