Recortamos un cuadrado de 9x9 cm. en el interior de la tabla de cocina y hacemos encajar en ella la tapa de plástico de electricista. Fijamos ambas piezas usando los listones y los tirafondos (ver imagen).

A la hora de hacer los agujeros para las piezas del marco, hay que asegurarse de que éstos quedan en el exterior del contorno de la tapa (ver imagen).

La pieza que vamos a reproducir, en este caso medio huevo de un juguete viejo, debemos fijarla sobre un soporte consistente, alto (+/- 25 cms.), y que no supere el diámetro de la pieza. Asimismo, debemos conseguir un cilindro transparente de un diámetro ligeramente superior que el de la pieza a reproducir. Lo ideal y más fácil de conseguir es un vaso de vidrio o plástico, que también los venden en los "Todo a 1 Euro" (ver imagen).

Llevamos todo el material a la cocina y dejamos el vaso y la pieza con su soporte, bien apoyada, cerca del horno (no sirve el microondas). Metemos la tabla con el plástico en el horno y le damos la máxima temperatura.

Nota: El peligro de este procedimiento es prácticamente nulo, ya que, cuando trabajemos sobre él, la temperatura que habrá alcanzado el plástico no nos causará ningún daño.
Pasados 5 minutos el material estará listo para el moldeado, pero conviene asegurarse, presionando con el mango de un pincel la tapa de plástico en sus esquinas. Ésa es la parte que más tiempo tarda en calentarse y su consistencia ha de ser lo suficientemente blanda para que el plástico se hunda a la menor presión que ejerzamos sobre él (ver imagen).

Cuando el material está preparado, tomamos el vaso en una mano y, con la otra, sacamos la tabla del horno (se puede usar un guante, pero realmente no es necesario) y presionamos (con fuerza pero sin pasarse) el plástico sobre la pieza, bien centrada, hasta que veamos que la lámina de plástico abarca sus formas y perímetro totales (ver imagen).

Ahora, con el vaso invertido, presionamos también la lámina de plástico, desde arriba, para que su adaptación a los bordes de la pieza sea perfecta, y lo mantenemos así durante un breve lapso de tiempo, el suficiente para que el plástico se endurezca de nuevo y la forma quede fijada en él (ver imagen).

Este paso y el anterior han de realizarse con bastante rapidez para que el plástico se mantenga lo suficientemente blando. Con unos pocos ensayos se le coge "el aire" enseguida a toda la operación.
Nota 1: Se ha de tener en cuenta que la pieza resultante será siempre de un diámetro ligeramente superior al del original, dependiendo del grosor del plástico utilizado, de la forma y tamaño de la pieza y de la temperatura del material. Como referencia diré que, usando las tapas de electricidad de 2 mm. de grosor, el resultado final será de entre 0,5 y 1 mm. Muy apropiado para casi cualquier modelo.
Nota 2: Es conveniente ventilar bien el horno después de la operación, para eliminar los posibles vapores o gases que pueda desprender el plástico caliente y, una vez que el horno esté frío, deberemos pasar un paño humedecido por sus superficies interiores para terminar de eliminar cualquier posible resto tóxico.
Bajo este párrafo se puede ver una imagen de los materiales "reales" que se usaron para el proceso que se ha relatado y varias piezas conseguidas con él. Todas estas piezas fueron utilizadas por nuestro artista favorito, Rafael Mateo, para la construcción artesanal del Caza Ala Y a escala 1/48, que cierra este apartado, y que es objeto de un exhaustivo artículo en el apartado de construcción "paso a paso".

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