El estreno de La Guerra de las Galaxias en 1977 liberó un estallido de imaginación que ha florecido durante un cuarto de siglo, y contando. Cientos de millones de personas de un período de dos generaciones se han abrazado a la épica saga de George Lucas, de grandes metas y diversión ilimitada. Su envolvente fantasía espacial, humanidad y tecnología, entretiene e inspira al tiempo que explora el conflicto entre el bien y el mal. La historia de la familia Skywalker celebra el heroísmo y el ilimitado potencial de cada individuo. El nuevo capítulo de la saga de Lucas, Star Wars Episodio II: El Ataque de los Clones, transcurre siete años después de los sucesos del Episodio I, la Amenaza Fantasma. La República continúa sumida en las disputas y el caos. Un movimiento separatista que abarca a cientos de planetas y poderosas alianzas corporativas amenaza nuevamente a la galaxia, amenazas que ni los Jedi pueden detener. Este movimiento, largamente planeado por una todavía no revelada y poderosa fuerza, conducirá al inicio de las Guerras Clon, y al principio del fin de la República.

Para detener esta alarmante amenaza, el Canciller Supremo Palpatine, continuando con la consolidación de su poder, autoriza la creación de un gran ejército de la República para ayudar a los abrumados Jedi.

Así, nuestros familiares héroes Obi-Wan Kenobi, Padmé Amidala y Anakin Skywalker, se encuentran de nuevo y por primera vez desde el conflicto entre la Federación Comercial y el planeta natal de Padmé, Naboo Anakin se encuentra ahora bajo la tutela de Obi-Wan, que ha pasado a ser de aprendiz a maestro, mientras que Padmé, antigua reina de Naboo, es ahora una distinguida senadora. Anakin y Obi-Wan son asignados a protegerla, pues es objetivo de asesinos.

Mientras Obi-Wan investiga el misterio que amenaza la vida de Padmé, viajará a dos dispares mundos en el Borde Exterior de la galaxia. Allí se encontrará con un temible caza recompensas cuyo papel en el misterio es mayor de lo que Obi-Wan supone inicialmente. El Jedi, además, se cruzará en el camino de un antiguo y venerado Maestro Jedi, ahora líder del movimiento separatista. Con Obi-Wan viajando por la galaxia, Anakin permanece al lado de Padmé para escoltarla, primero en Naboo y luego en el planeta natal del joven padawan, donde hace un fatídico descubrimiento. De este modo Anakin y Padmé se encontrarán envueltos entre el deber y el honor y un amor prohibido. Mientras que poderosas fuerzas se preparan para chocar en una épica batalla, sus elecciones y las de Kenobi impactarán no solo en sus propios destinos sino en el destino de la República.

Star Wars Episodio II: El Ataque de los Clones ha sido escrita y dirigida por George Lucas, co-escrita por Jonathan Hales, producida por Rick McCallum y con Hayden Christiensen, Natalie Portman, Ewan McGregor y Samuel L. Jackson como protagonistas. Miembros adicionales del cast incluyen a Ian McDiarmid, Christopher Lee, Temuera Morrison, Kenny Baker, Anthony Daniels y Frank Oz.

El Ataque de los Clones es rica en temática que hemos visto en todas las películas de Star Wars: aspiraciones personales, heroísmo, deber y honor. La segunda parte de la saga contiene pasión, amor, aventura... pero por encima de todo, diversión. Entretejiéndose con estos temas ya conocidos, aparece uno nuevo, el amor prohibido, junto con la noción de heroísmo Jedi en una escala jamás vista antes en películas de Star Wars: en una secuencia, cientos de Jedis batallando contra poderosas y aparentemente innumerables fuerzas.

El propio título ya nos conduce de vuelta a la imaginación y excitación que caracterizaban las clásicas películas y seriales de fantasía de los que deriva Star Wars. "El Ataque de los Clones es una gran película de aventuras que sigue la tradición de los seriales matutinos de los sábados, en la edad dorada de Hollywood", dice Lucas "Eran modestas e ideadas para entusiasmar con mucha energía, suspense y excitación. Ibas a ver estas películas para escapar y disfrutar de ti mismo, y eso es lo que he querido hacer con El Ataque de los Clones".

La película es una historia completa en sí misma, al mismo tiempo que forma parte de un relato épico continuado. "Finalmente, la saga se compondrá de seis películas, una historia de doce horas" Lucas señala "Siempre he estado centrado en acabar la nueva trilogía. Entonces el público podrá ver las seis películas a la vez, que es para lo que están". Lucas compara la estructura de la saga y su temática con una pieza musical. "Star Wars es, de algún modo, sinfónica por naturaleza", explica. "Tengo unas cuantas claves musicales, estribillos que repito siempre. Son diferentes, pero repetitivos". Esta estructura sinfónica conduce a "enlaces" que en algún momento u otro aparecen en la saga, motivos, temas, acciones, actitudes y frases. Más importante aún, unen en la historia a memorables personajes: la guerrera princesa Leia, hija de la tozuda reina, Padmé Amidala; y el hijo de la reina, Luke Skywalker, un joven granjero cuyos deseos de aventuras conducirán al fin de un Imperio y a la revelación de secretos familiares; Obi-Wan Kenobi, el Padawan que se convierte en un Caballero Jedi y conecta al padre y al hijo, y Anakin Skywalker, un corredor de podracers que viajará a través del tortuoso camino del Lado Oscuro para finalmente encontrar la redención a manos de su hijo.

El Ataque de los Clones, su historia, sus personajes, escenarios, vehículos y otros elementos añadidos a la riqueza de contenido de la saga. Para dar vida a todo eso, Lucas vuelve a sentarse en la silla del director. Cuenta con la ayuda del guionista Jonathan Hales. Ambos habían estado asociados trabajando con las series televisivas del joven Indiana Jones, para las cuales Hales co-escribió varios episodios.

El Ataque de los Clones se une a la saga, pero no sólo en la forma de nuevos personajes, lugares y androides. La historia incluye el creciente malestar político en la galaxia, añadiendo complejidades políticas a la saga. Es similar al oscuro tema de El Imperio contraataca, pero con todo el entretenimiento, acción y aventura que todos esperan de una película de Star Wars.

De nuevo tomando estos elementos, Lucas y Hales continúan refinando el guión, incluso con los trajes diseñados y los sets construidos. "A esa altura, El Ataque de los Clones parecía una película virtual porque tuvimos el guión completo sólo tres días antes de comenzar el rodaje", dice el productor Rick McCallum "Habíamos tenido que construir escenarios para un guión que no existía".

La historia continuó evolucionando sin problemas durante la producción y la post-producción, mientras Lucas afinaba escenas y diálogos específicos, a veces añadiendo nuevas secuencias meses después del rodaje principal. En lugar de seguir el viejo sistema de la pre-producción, rodaje y post-producción, Lucas emplea un modo más fluido para hacer la película, menos lineal. Anticipadamente se previeron periodos de filmación adicional con el equipo técnico y los actores juntos durante meses en el proceso de edición para rodar escenas adicionales cuya necesidad fue señalada por el exigente Lucas. "Es normal que un rodaje dure setenta y dos días" dice McCallum "excepto cuando esos setenta y dos días se alargan durante dieciocho meses".

El personaje de Anakin Skywalker es el centro de El Ataque de los Clones, y de hecho de la saga entera. "Lo que me condujo a crear esta nueva trilogía, fue en primer lugar el crear una historia de alguien que en un principio es una excelente persona, pero es seducido por el Lado Oscuro y se convierte en malvada, y finalmente se redime" dice Lucas. "Por eso empecé la historia como lo hice en La Amenaza Fantasma, con un chaval de nueve años, Anakin, siendo un niño maravilloso y normal". "Yo siempre quise explorar cómo alguien puede volverse tan malo" añade Rick McCallum "Obviamente conocemos el destino de Anakin pero con estas películas sabremos el 'cómo' y el 'porqué'".

Al inicio del filme, Anakin lleva diez años como aprendiz Padawan de Obi-Wan Kenobi. Anakin se ha convertido en un confiado y tozudo joven de diecinueve años con una impulsiva naturaleza y deseo de aventura. Cambios importantes son evidentes en él. "En El Ataque de los Clones comenzamos a ver destellos de ira de Anakin" informa Lucas "y la semilla de sus sentimientos se dirige hacia el Lado Oscuro. Las mismas imperfecciones que maldicen a todos le maldicen a él. Hay mucho en juego en eso" Jonathan Hales dice "Anakin es una portentosa, dotada y buena persona destinada a ser el mejor y más poderoso de los Jedi. No se propone ser malvado, pero en esta película vemos las presiones que soporta y las tentaciones a las que está sometido. Para encarnar a alguien con estas características se necesitaba un actor de impresionantes habilidades. La directora del casting, Roban Hurlad, tuvo seis meses de duro trabajo antes de dar con el canadiense Hayden Christiensen para el Anakin Skywalker para los Episodios II y III de la saga. "Estaba realmente desesperada, hasta que llegó Hayden" dice Hurlad " Él tenía esas habilidades especiales que esperas encontrar en un actor. Se salía de la pantalla. Y tenía vulnerabilidad y egocentrismo, dos características que buscábamos para el papel. Era en verdad una buena combinación y es extraño encontrar un actor así. Sabía que tenía las capacidades físicas y emocionales para representar a Anakin en la edad más problemática y compleja del personaje".

El productor Rick McCallum está de acuerdo en que Christiensen tiene especiales cualidades que parecen estar ahí a propósito para representar a Anakin "Hayden tiene una inocencia y decencia maravillosas, pero con aspereza en sus ojos. Pueden pasar muchas cosas.

Christiensen representa un papel que ha sido desempeñado por actores desde Jake Lloyd en La Amenaza Fantasma hasta Sebastian Shaw en El Retorno del Jedi. Christiensen, ya fan de la saga desde hace tiempo, es consciente de la vida del personaje, y el arco que la historia del mismo traza para pasar a ser desde un niño esclavo a un Señor Oscuro del Sith, y a un Caballero Jedi redimido. "La parte más dura de representar a Anakin era encontrar el punto medio entre los papeles representados por Jake Lloyd y la representación de Sebastian Shaw como Darth Vader sin máscara, haciendo creíble ese punto entre el bien y el mal.

Christiensen posee ambas naturalezas del carácter, y pasó largas horas hablando con Lucas acerca del personaje, al tiempo que trabajaba en el papel por su cuenta. Recalca de forma especial los primeros atisbos que vemos del carácter oscuro de Anakin, incluyendo las inesperadas salidas agresivas del personaje cuando pierde el control de sí mismo. "Anakin es muy apasionado en lo que se refiere a sus responsabilidades como Jedi" comenta el actor "Está determinado a ir por libre, a hacer lo que quiera, a nunca volver atrás de un desafío".

Las pasiones de Anakin conducirán además a un romance entre él y Padmé, aunque es algo que no está permitido a los aprendices Jedi. Anakin y Padmé se unen después de diez años, cuando la vida de ella es amenazada y se le ofrece la protección de Obi-Wan y su joven discípulo.

Anakin y Padmé se ven envueltos en una creciente relación "Es una delicada y creciente historia de amor" dice Jonathan Hales "No es una cuestión de amor a primera vista. Cuando se ven por primera vez tras tanto tiempo, ella le ve todavía como un niño. Inicialmente, hay tensión, pero siempre con una cierta atracción. Añadiendo a todo eso que los sentimientos de cada uno hacia el otro están prohibidos. Por eso es interesante y adulto.

Como Anakin, Padmé, interpretada por Natalie Portman (quien ya la había interpretado en La Amenaza Fantasma) ha vivido importantes cambios desde su último encuentro. Su periodo como Reina Amidala de Naboo ha acabado. Todavía queriendo ayudar como figura pública, ahora es Senadora. En una galaxia bajo tumultuosos cambios, es de naturaleza franca y comprometida posición en un cada vez más dividido Senado. Las creencias de Padmé la convierten en objetivo de asesinos de un movimiento separatista muy extendido por toda la galaxia, y eso la llevará a reunirse con Obi-Wan y Anakin.

Las obligaciones de Padmé para con su posición política al principio impedirán cualquier tipo de romance, mientras que de igual forma, el Código Jedi prohíbe relaciones amorosas. "Padmé es una mujer madura" señala Portman "Es idealista, honesta y buena, y a causa de eso, a veces ingenua. Padmé no quiere enamorarse porque piensa que tiene cosas más importantes a llevar a cabo. Ve futuro para ella misma como una líder, lo cual no le permite según que cosas. Esto será un componente clave en el romance.

Otra relación clave de Anakin en El Ataque de los Clones es la que tiene con Obi-Wan Kenobi, quien guía a Anakin por los caminos para convertirse en Caballero Jedi. El filme explora su amistad, que es uno de los temas centrales: la dinámica padre/hijo, maestro/aprendiz, profesor/estudiante. La relación Anakin-Obi-Wan hace volver de nuevo las esperanzas que tenía Kenobi con el padre de Luke Skywalker (que se nos muestran en Una Nueva Esperanza). De muchos modos, Anakin parece encontrar en Obi-Wan la figura paterna que jamás ha tenido. "Obi-Wan y Anakin han estado trabajando juntos un largo tiempo, probablemente cada día desde la muerte de Qui-Gon (el maestro Jedi encarnado por Liam Neeson en La Amenaza Fantasma)" señala Ewan McGregor. El actor vuelve al papel que jugó en La Amenaza Fantasma y que Sir Alec Guinness creó por primera vez en la trilogía original. McGregor aprecia particularmente la envolvente dinámica entre ambos personajes. Obi-Wan creía incorrectamente que podría entrenar a Anakin al mismo nivel que el venerado Yoda. El error de Kenobi trajo grandes consecuencias a Anakin y a la galaxia.

El Ataque de los Clones da el primer paso en esa dirección. A pesar de la profunda amistad entre Anakin y Obi-Wan, el padawan se siente prisionero y sin libertades a causa de las enseñanzas de su mentor y comienza a resentirse y resistirse ante Obi-Wan.

McGregor señala que esa relación, a medida que el filme avanza, es comparable con su reacción en las primeras películas de la trilogía original. "El Ataque de los Clones recuerda a Una Nueva Esperanza y a El Imperio Contraataca" explica "Puedes sentir la tensión que crece, al mismo tiempo que se dan escenas de humor. Realmente he disfrutado de los aspectos misteriosos del filme, como las habilidades detectivescas de Obi-Wan que le conducen a los niveles inferiores, callejones y bares, y extraños planetas.

Samuel L. Jackson vuelve al papel del Maestro Jedi Mace Windu, y está de acuerdo en que El Ataque de los Clones nos recuerda a la aventura y tensión de la trilogía original. "Todos esos millones de personas que aman este tipo de películas, tendrán la misma cantidad de tensión, aventura, acción y romance con esta película", dice. "Va a entusiasmar a mucha gente".

El papel de Mace es mucho más vital en la nueva película. Un respetado Jedi a la par con el venerable Yoda, Mace es un importante miembro del Alto Consejo Jedi. A medida que la galaxia se encuentra fragmentada a causa de un poderoso movimiento secesionista encabezado por un antiguo Jedi, Mace se da cuenta de que el tiempo para negociar ha quedado atrás, y que ha llegado el momento de la acción. "He visto y he disfrutado con todas las películas de Errol Flynn y ahora por fin voy a participar en una de esas increíbles escenas de lucha" Por encima de los enemigos de la República con los que Mace y Obi-Wan se cruzan hay un caza recompensas, considerado el mejor y más temido de la galaxia. Su nombre, su armadura y su nave, la Slave I, son familiares a las miríadas de fans de la saga. El brutal cazador es Jango Fett, quien tiene una única relación con su hijo, Boba.

Boba Fett, el temido guerrero introducido en El Imperio Contraataca cuando buscaba a Han Solo para entregarlo a Jabba el Hutt, finalmente emerge de la sombra en El Ataque de los Clones. (El personaje fue re-introducido en el Episodio IV para la edición especial). En esta película se revela la historia de Boba Fett, su identidad y su destino, y se nos muestra el papel que Boba juega en el mayor conflicto de la galaxia. Sabremos de donde viene, y por qué se convierte en el más temido cazador y asesino conocido. Ahora es Daniel Logan, de 14 años, quien interpreta al joven Fett, y el aclamado actor neozelandés Temuera Morrison (Once were Warriors) quien da vida a Jango.

Boba sigue el camino de su padre. El tema padre/hijo sale de nuevo con una nueva figura del universo Star Wars: el Conde Dooku. El una vez venerado Maestro Jedi, Dooku había servido como Maestro de Qui-Gon Jinn, a su vez tutor de Obi-Wan . El padawan de Kenobi, Anakin, se convertirá en el cuarto estereotipo maestro-aprendiz de la Orden Jedi.

El legendario actor Christopher Lee, quien definió el terror a una generación de fans del tema con sus interpretaciones de Drácula en las series de la Hammer Films, da vida a Dooku. El elegante, distinguido actor y su papel en la película nos recuerdan a un personaje clave de Una Nueva Esperanza: el Gran Moff Tarkin, oficial imperial encarnado por el amigo y colega de Lee, Peter Cushing. La semejanza está lejos de ser coincidencia. En lo que se refiere a Roban Hurlad, Lucas quería que Dooku fuera "el Peter Cushing de esta película. En cuanto George dijo eso, le vino enseguida a la cabeza Christopher Lee". Las habilidades de Dooku no son menos formidables que las de otros antagonistas de la saga. Dooku, un maestro espadachín de la vieja escuela, es, en lo que hace a Lee "un hombre de inmensos poderes físicos y mentales. Él es muy distante, autosuficiente e intrépido. Hay mucha fuerza en él".

La desilusión de Dooku con la República se debe al continuo alzamiento de poder de Palpatine. Tras el embargo comercial de Naboo en La Amenaza Fantasma, Palpatine había accedido al poder y convertirse en Canciller Supremo. Prometió unir a la República y traer el orden y la justicia a su gobierno. Pero a pesar de sus promesas, la República continuaba sumida en las luchas internas y el caos. Nuevas amenazas sobre la galaxia condujeron al Senado a extender la legislatura de Palpatine y garantizarle poderes de emergencia como Canciller. Entonces él ordenó la creación de un masivo ejército de la República para protegerla. Este ejército es una conexión a la otra trilogía, una referencia de Una Nueva Esperanza en la que mencionan las Guerras Clon, elemento clave de la nueva película.

Ian McDarmid representa a Palpatine, del mismo modo que lo hizo en El Imperio Contraataca y en El Retorno del Jedi El actor continúa llevando a la pantalla al hombre más malvado de la galaxia y quizás de todo el cine.

"Palpatine es un político consumado" explica McDiarmid "En público es 'Don Buen Chico' pero en realidad es todo lo contrario. Palpatine es alguien interesante de interpretar porque es un brillante actor y un completo mentiroso con aquellos que más confían en él"

Volviendo también al Universo Star Wars están los simpáticos androides R2-D2 y C-3PO. El Ataque de los Clones representa un avance para ambos. En el Episodio I, 3P0, una creación de Anakin, carecía de carcasa y estaba poco avanzado. En este tiempo transcurrido, finalmente recibe su cubierta, pero no es la figura dorada que recordamos de la primera trilogía. En cambio, es un montón de piezas sueltas puestas juntas.

La película da un nuevo disfraz a Anthony Daniels. Veterano de todas las películas de Star Wars, Daniels ha interpretado a C3P0, incluida su voz.

Kenny Baker, el hombre dentro de R2-D2 en las cuatro primeras películas de Star Wars, se une a Daniels siendo así los dos únicos actores que aparecerán en todas las películas. Aunque la tecnología robótica en el interior de R2 se ha desarrollado tanto hasta el punto en que puede desempeñar casi todas las funciones del personaje, tener a Baker 'bajo la cúpula' en ciertas escenas añade un importante elemento de humanidad. El supervisor y operador de androides Don Bies supervisa las actualizaciones no sólo de R2 sino de todos los androides astromecánicos de las películas.

Otro punto importante de las relaciones en El Ataque de los Clones es entre Owen Lars (interpretado por el australiano Joel Edgerton) y Beru Whitesun (interpretada por la joven australiana Bonnie Piesse). Owen fue introducido en la saga en Una Nueva Esperanza como el cansino y brusco tío de Luke, y Beru su simpática tía. Ambos todavía no están casados pero están muy unidos. En el Episodio II descubriremos finalmente la conexión de Owen y Beru con Anakin, y comenzaremos a entender por qué eran tan protectores de Luke en Una Nueva Esperanza.

El padre de Owen es Cliegg Lars (interpretado por el actor australiano Jack Thompson), también figura en el viaje de Anakin, igual que la madre del joven Jedi, Shmi Skywalker, interpretada por Pernilla August, quien retoma su papel del Episodio I. El ganador de un premio Emmy, Jimmy Smits, hace el papel de Senador Bail Organa de Alderaan, a personaje que ya salía en Una Nueva Esperanza y que ahora está envuelto en los debates del Senado acerca de la creación del nuevo ejército para la República.

Habiendo desarrollado un completo estilo de lucha para los Jedi de La Amenaza Fantasma, el coordinador de extras Nick Gillard vuelve a su trabajo con El Ataque de los Clones. Para las épicas batallas del Episodio II, Gillard ha creado un estilo de lucha para cada Jedi, incluidos los extras, escogiendo entre diferentes artes marciales y técnicas de lucha con espada. Gillard llama al proceso de describir al detalle los movimientos de las batallas "escribir las luchas de espadas de luz". "En otras películas, las luchas son una simple coreografía, pero necesitábamos algo más para El Ataque de los Clones" explica.

Gillard visitó veinte escuelas Kendo y 'clubs de lucha', donde se entrevistó con cerca de quinientos espadachines para que representaran a los Jedi. "Oí que un grupo había sido eliminado de las competiciones nacionales por usar métodos demasiado agresivos" dice Gillard "Cuando lo supe, me di cuenta de que podrían venirnos bien" El coordinador encontró a muchos de sus Jedi en una colonia australiana, Bryon Bay, viviendo en los árboles "como en una escena de 'Apocalypse Now'".

Gillard se centró además en entrenar a Hayden Christiensen, que tenía que mostrar las formidables habilidades de Anakin con la espada de luz. "Necesitábamos ver pequeñas muestras de la brillantez de Anakin, el hombre que será Darth Vader, en acción" dice Gillard. "Tiene más habilidad que el propio Obi-Wan y siempre ataca".

Christiensen, un talentoso atleta, que suele jugar al tenis y al hockey; se entrenaba de tres a cuatro horas diarias con Gillard, con los subsiguientes chichones y magulladuras que Hayden llevaba como insignias honoríficas. "No sientes que has hecho tu trabajo hasta que vuelves a casa con algunos chichones", señala el actor.

Christensen hace más que dar a su personaje todas esas habilidades. "No sólo es un brillante actor, sino que es uno de los más hábiles atletas que he conocido" dice enfáticamente Gillard "Para daros una idea de hasta que punto es bueno, os diré que casi superó a uno de los mayores espadachines Kendo en Australia"

Aunque Christiensen era quien recibía mayor atención por parte de Gillard, el coordinador de extras trabajó también con Ewan McGregor, Samuel L. Jackson, Christopher Lee y Temuera Morrison. En opinión de Gillard, la fiereza con que lucha McGregor Obi-Wan vuelve a ser el mismo que en La Amenaza Fantasma, lo cual se nota claramente en una lucha que mantiene con el Jango Fett de Morrison. La batalla Jedi versus caza recompensas apunta a la diferencia entre ambos estilos. "Comparar a un Jedi con un caza recompensas es como comparar a un tiburón con un tigre" Gillard puntualiza "A una distancia de tres pies, nada puede detener a un Jedi. Los caza recompensas prefieren pelear a larga distancia, la mayor posible".

Y hablando de las habilidades del Maestro Mace Windu, Gillard dice "El estilo de Mace es bastante 'económico'. Si te pilla, no hay duda, estás muerto" Samuel L. Jackson, que había colaborado ya con Gillard en Shaft, añade "Nick me ha puesto en una lucha increíble. Y aunque Mace es la segunda persona más mala del universo, es muy eficiente. No hay jueguecitos con la espada. Con la mínima energía, pero es letal"

Las habilidades del Conde Dooku con la espada de luz son tan letales como las de Mace. Dooku aparece como uno de los personajes con la secuencia de lucha mayor planeada, lo que impresionó al actor que interpreta al carismático separatista, maestro espadachín y antiguo Jedi "He hecho más peleas con espadas ante las cámaras que cualquier otro actor de la historia" recuerda Christopher Lee "y tengo las cicatrices para probarlo. Y esta batalla es mayor que cualquiera en las que he luchado".

Aunque Natalie Portman no usa una espada de luz, ella se mete en la acción del mismo modo que sus compañeros masculinos. "Padmé es más reacia a actuar en Ataque de los Clones que en la anterior película" Gillard señala "y Natalie estaba más bien para los cambios físicos del papel".

Muchos talentudos artistas han sido quienes han interpretado la visión de George Lucas para dar un nuevo 'look' a la épica saga. Trabajando sin el guión (la historia todavía estaba desarrollándose a esas alturas) el diseñador de producción Gavin Bocquet y el diseñador conceptual Doug Chiang y sus equipos creativos fueron a trabajar durante los primeros meses de la preproducción, estableciendo a pinceladas el estilo y la forma de El Ataque de los Clones.

Los mundos de la nueva película eran la mayor prioridad. Kamino, un desconocido planeta perdido en el Borde Exterior, eternamente azotado por lluvias y vientos. Los avanzados, altamente técnicos residentes de este planeta ultra-moderno están envueltos en un proyecto ultra-secreto: la creación de un ejército de clones.

"Creo que Kamino es realmente un ambiente magnífico" señala Rick McCallum "Es algo nuevo, vigorizante, para George, porque es muy tecnológico, algo clásicamente de ciencia-ficción que nadie espera de una película de Star Wars. Sueles ver cosas más familiares".

El rojo planeta de Geonosis, quizás más reconocible, sigue impresionando con su estrafalario aspecto: un planeta anodino, dejando de lado las colinas y picos que se levantan dramáticamente en el árido mundo. Para sus residentes, Lucas planeó unos industriosos alienígenas similares a insectos -"son como termitas" dice Chiang - únicamente dedicados a su tarea: construir cientos de miles de androides que amenazan la propia existencia de la República.

Un mundo familiar del Episodio I es Coruscant, el centro de la galaxia de Star Wars donde una gigantesca ciudad que ha cubierto todo el planeta de colosales rascacielos. Allí es donde se halla el Templo Jedi y desde donde el Senado Galáctico rige la República. Añadiendo una nueva dimensión al planeta, El Ataque de los Clones nos muestra un Coruscant jamás visto antes, por sus calles, callejones y tugurios, manteniendo vivos los gustos futurísticos de George Lucas.

Los vehículos diseñados para la película mezclan las fluidas y artísticas formas de La Amenaza Fantasma con las rígidas e industriales figuras de Una Nueva Esperanza. Un nuevo vehículo, desconcertadamente familiar para un fan de Star Wars, es el caza Jedi, un vehículo monoplaza equipado con un droide astromecánico. Pilotado por Obi-Wan, la nave nos recuerda a la triangular forma de los Destructores Estelares Imperiales que tan onminosamente aparecían en la trilogía anterior. Esta conexión es más que visual "De hecho, el Destructor Estelar nació de los cazas Jedi" dice Gavin Bocquet "así que el simbolismo es muy poderoso, pues comenzamos a ver como todo se tuerce hacia el Lado Oscuro".

Otros vehículos van desde el chillón y brillante aerodeslizador pilotado por Anakin hasta la carreta que recuerda a una rikisha china conducida por un droide por las calles de Tatooine.

El diseño de los trajes en esta película señala también hacia los antiguos episodios. La diseñadora Trisha Biggar (con la ayuda de los artistas conceptuales Ian McCaig y Dermot Power) crearon los trajes para Anakin Skywalker, que señalarían hacia lo que luego será su encarnación, Darth Vader. Al principio Biggar quería dar a Anakin un vestido similar al de Ewan McGregor en La Amenaza Fantasma. "Pero al final quisimos dar algunas referencias al futuro, y miramos aspectos del traje de Darth Vader", dice Biggar, otra veterana del Episodio I.

El uso del cuero en los trajes de Anakin da al Jedi un poco más de aspereza. Biggar cogió la capa de Vader y trató de adaptarla a un estilo Jedi pero haciendo que fuera diferente. El resultado consiste en una vestimenta completamente de Jedi pero que recuerda a Vader.

Padmé, ya no siendo reina de Naboo, lleva trajes igualmente impresionantes, aunque menos ceremoniales que los que llevaba en el Episodio I. Su guardarropa en esta película, más simple que en la anterior, ha dado a pesar de todo mucho trabajo. "Hay mucho trabajo manual en todos los vestidos del Episodio II" señala Biggar "Necesita muchos bordados y molduras, todo tipo de cosas decorativas"

En El Ataque de los Clones, vemos a Padmé más como persona y menos como líder de una nación. Lleva ropas más simples, menos formales. Desde que el personaje ha crecido, además, Natalie Portman podía llevar prendas más sexys y provocativas, que digamos. "George quería que Natalie tuviera un aspecto más sencillo, más femenino, menos formal en definitiva" dice Biggar.

A medida que el film avanza, las ropas de Padmé son cada vez más informales a medida que pasa de ser Senadora, a mujer enamorada, y finalmente una mujer de acción que lucha por su propia vida.

En una escena al principio de la película Padmé lleva un conjunto complejo, con una gruesa prenda de terciopelo violeta por encima de un vestido estilo reina Elizabeth con anchas mangas. Piezas de joyería en ellas y unas enaguas que dan formalidad a ese traje.

Tras un atentado contra su vida, Padmé y Anakin dejan Coruscant y el romance entre ellos comienza. Entonces Padmé usa vestidos más delicados, de colores pastel y una diadema plateada sobre su cuello. "Tratamos de hacerlo más romántico y fluido" dice Biggar. Un suave vestido con una falda gruesa de chiffon, bordada es lo que lleva Padmé durante una escena de picnic. Para una cena romántica en Naboo, Padmé lleva un vestido negro muy abierto con las mangas y la parte superior de piel, y algunos abalorios.

Cuando Padmé llega a Tatooine con Anakin, lleva una embarazosa capa de viaje de terciopelo unida al cuello por un broche. "Cuando lleva esa capa, va de incógnito" explica Biggar "Va cubierta y es misteriosa".

Para las escenas de acción de Geonosis, Padmé lleva un traje ajustado que le da mucha movilidad, similar al de los Jedi. Parte de ese vestido es desgarrado cuando Padmé lucha por su vida contra monstruosas criaturas.

Trabajando conjuntamente con el departamento artístico estaban Dan Gregoire y David Dozoretz, los supervisores de la previsualización y efectos visuales que condujeron a los equipos de animática a través de una primera versión del filme. "Estábamos muy ceñidos a lo que hacía el departamento de arte" dice Gregoire "Queríamos ser el primer grupo de artistas en acabar nuestro trabajo como diseñadores".

El equipo de animática ha jugado un papel clave en la película, proveyendo rápidamente los primeros bocetos (storyboards), cerca de 4000, para ser luego usados por el director, actores, editores y artistas de efectos para pre-visualizar y comprobar que las escenas finales serían como ellos querían. Gregoire señala que con los avances de la tecnología, los trabajos de animática son mejores y más rápidos que nunca. Usando ordenadores gráficos de alta resolución, los artistas de animática diseñaron algunas de las mayores acciones del Episodio II y sus secuencias de efectos.

La rica paleta de color y variedad ha sido diseñada por los supervisores Erik Tiemens y Ryan Church. Ha sido de las cosas más excitantes a las que el departamento de arte se ha enfrentado. Tiemens y Church han diseñado además escenas clave como las de la fábrica de droides y la arena del coliseo, como también para la climática batalla.

Su producción clave era el enlazar los conceptos artísticos con el trabajo final que desarrollaría ILM. "Es una clase de trabajo de previsualización, esquemas de luz y color" dice Church, y añade Tiemens: "Nuestro trabajo era dar vida a la pantalla azul"

El creciente potencial dramático de El Ataque de los Clones condujo a Tiemens y Church al proyecto. "Disfrutábamos con que George Lucas y Rick McCallum quisieran sensación dramática y humorística al mismo tiempo como tan a menudo se ve" dice Tiemens "Queríamos dar a los efectos visuales mucha emoción".

Otro veterano del Episodio I, el diseñador de producción Gavin Bocquet, se encarga de llenar los huecos entre las imágenes del departamento artístico y la realidad para que Lucas pueda montar sus cámaras. Claramente disfrutando con la oportunidad, nuevamente, de construir una fantástica galaxia, Bocquet nota que acerca de los dieciséis años que él y su equipo han trabajado, uno de los sitios particulares que sobresale es el club nocturno de Coruscant. Allí, deambuladores y gente de mal vivir se entremezcla con gente de la misma clase, juega, bebe o simplemente está allí. "Está bien moverse por esta clase de mundos y ver como la gente disfruta en este loco universo", dice Bocquet. Él y su equipo diseñaron también el exterior y el callejón cercano del local nocturno, punto de lanzamiento de una excitante persecución que comienza en los cielos de Coruscant y termina en las entrañas de la metrópolis.

Bocquet ha reproducido meticulosamente la cocina del hogar de los Lars a partir del set que pudimos ver en el Episodio IV. Recrear una pieza de la historia de la saga era especialmente significativo para Bocquet y su equipo. "Como otros escenarios de Tatooine, el hogar de los Lars es parte de la historia de la familia Skywalker" señala. "Creo que todo el mundo que está metido en el mundo Star Wars siente que los ambientes de Túnez son ideales para Tatooine"

Bocquet también ha reconstruido las cámaras del Consejo Jedi según las de La Amenaza Fantasma. Para ahorrar tiempo, calcó el escenario de la sala del Consejo y creó otros ambientes del Templo Jedi, como los despachos de Yoda y Mace Windu, las salas de análisis y un porche donde se entrenan algunos Jedi.

Los nuevos escenarios del filme tienen sus propios aspectos y características. El apartamento de Padmé y el despacho del Canciller Palpatine tienen mucho más detalle y están más personalizados que muchos otros sets de Star Wars, y lo mismo con la casa de vacaciones de Padmé, con una gran mesa de comedor hecha de mármol donde Anakin y ella tienen una romántica comida.

La tecnología digital ha sido siempre el mayor elemento del proceso creativo de George Lucas. Hace veinte años, creó SoundDroid y EditDroid, los primeros sistemas informáticos de edición de sonido e imagen no lineales. Estas herramientas ayudaron a la revolución del campo de la edición, permitiendo a los editores la edición simultánea de la imagen y el sonido de una sola vez, en lugar de enterrarlos bajo montañas de celuloide.

La tecnología para convertir el mundo digital en el propio proceso de rodaje ya se puede conseguir. En 1996, Rick McCallum acordó con Sony que desarrollaría una cámara de escaneo progresivo de alta definición de 24 fotogramas, así como un sistema de post-producción de 24 fotogramas. Panavision desarrolló unos revolucionarios objetivos y lentes que permitirían la filmación digital.

Cuando las cámaras rodaron en Junio de 2000, Star Wars: Episodio II El Ataque de los Clones se convirtió en la primera gran película creada usando videocámaras digitales de alta definición, de veinticuatro fotogramas por segundo. "Recibimos el modelo final de la cámara una semana antes del primer día del rodaje principal" recuerda McCallum. "Comenzamos a filmar sin saber si funcionaría. Y simplemente lo hicimos. Rodamos en los desiertos -donde las temperaturas alcanzaban los 125 grados Farenheit durante semanas- , rodamos bajo lluvias torrenciales, y en cinco países diferentes en todo el mundo. Todo sin ningún problema"

El director de fotografía de El Ataque de los Clones, David Tattersall hace notar que el interés de Lucas en el rodaje digital viene desde antes de 1996, desde que ambos colaboraban en The Young Indiana Jones Chronicles y Radioland Murders. Lucas y Tattersall rodaron algunas escenas digitalmente en La Amenaza Fantasma, pero la tecnología no estaba lo suficientemente desarrollada para ser usada en toda la película.

En El Ataque de los Clones, Lucas y Tattersall tienen finalmente la oportunidad de aprovechar las nuevas y numerosas técnicas y ventajas de la cinematografía digital. "Con esta tecnología, podemos medir la duración de la película al tiempo que la rodamos" dice Tattersall. "Además, nunca hay dudas acerca de lo que se ve o no en los planos de la película. Antes, cuando revisabas las tomas, era todo más difícil, era complicado descubrir los errores. Pero con cámaras de alta definición, no hay dudas con lo que las lentes y objetivos han capturado. La post-visualización en el monitor de alta definición es totalmente clara. Ves lo que quieres ver y lo que no tendría que verse.

El uso de cámaras digitales fue un salvavidas en lo que se refiere al tiempo, en numerosos aspectos de la producción. Apenas se habían acabado de rodar las escenas cuando podían ser inmediatamente retocadas, modificadas y editadas tan pronto como Lucas gritaba "¡Corten!", eliminando las fronteras entre la producción y la post-producción. El formato digital daba flexibilidad sin precedentes a la elaboración de las tomas, con el editor Ben Burtt y Lucas con la libertad de cambiar o mover escenarios, personajes, y cambiando la imagen en sí. Además, los efectos visuales y sus tomas no tenían que ser introducidos en un ordenador, manipulados y devueltos al celuloide.

Con esta nueva cámara de alta definición, Lucas traza un nuevo y excitante futuro al cine digital. Pero él lo ve más como un proceso evolutivo más que un proceso revolucionario. "Los avances del cine al mundo digital es algo normal y era de esperar" dice el director. "Igual que el paso del cine mudo al cine sonoro, de las películas en blanco y negro a las películas en color, pues las cámaras digitales son una herramienta más dentro de todo eso". Todo este sistema se aprecia mucho más en los cines, pues el formato digital permite que en algunos de ellos las imágenes mantengan su integridad y su calidad sea mejor aún. No habrá arañazos, rayas, borrones, desgastes o polvo en El Ataque de los Clones durante su estancia en los cines.

La trilogía original de Star Wars impactó mucho a causa de sus efectos visuales. Para conseguir y poder plasmar las ideas que Lucas tenía y pensaba usar con Star Wars, el cineasta creó la empresa de efectos Industrial Light & Magic, que ha introducido la tecnología computerizada en la industria del cine y revolucionadores efectos especiales. ILM ha sido premiada con dieciséis Oscar por los mejores efectos visuales, y varios premios técnicos por sus trabajos de investigación.

Estos importantes avances en el campo de los efectos continuaron con el Episodio I, realizando mundos de fantasía pero que mantienen un aspecto realista y donde los actores ayudan mucho. Y no sólo eso, sino que muchos escenarios, vehículos e incluso personajes fueron generados por ordenador. Un 95% de los fotogramas de La Amenaza Fantasma¸ y casi dos mil tomas, tienen retoques digitales.

Aún habiendo avanzado tanto con los trabajos digitales del Episodio I, Lucas y ILM no podían quedarse dormidos durante la siguiente película. "Todavía estamos aprendiendo" dice Lucas, "moviéndonos paso a paso, probando, y aprendiendo diferentes modos de crear los mundos y las criaturas de la saga".

La tarea de los efectos visuales en El Ataque de los Clones ha sido tan grande que cuatro de los dieciséis supervisores de ILM fueron llamados para compartir la carga, cada uno tomando responsabilidad de una o más secuencias de acción, y varios de los efectos de la película.

El mundo digital también juega un papel clave en el filme. Ha tenido mucha importancia a la hora de crear exóticos mundos como el oceánico Camino, el rocoso Geonosis, el planeta-ciudad Coruscant y el paradisíaco Naboo.

John Knoll, quien supervisó las secuencias de naves y la carrera de podracers del Episodio I, se hace cargo de la impresionante persecución que Anakin y Obi-Wan, a varios cientos de millas por hora en un aerodeslizador, tras una mortífera caza recompensas, por las calles de Coruscant. La escena, a través del denso tráfico y masivos edificios, usa cerca de 300 tomas de efectos.

Knoll ha supervisado además, otra escena de persecución de alta velocidad, esta por un campo de asteroides. Knoll llama a esta secuencia una "escena rítmica", que es similar a la famosa escena de El Imperio Contraataca. Otra escena supervisada por Knoll es la del escenario del coliseo, donde nuestros héroes luchan contra tres nuevos monstruos: el reek, similar a un toro, el nexu, una especie de león, y el acklay, una crustácea criatura.

Fuera del estadio, tiene lugar una épica batalla, que proporciona el primer vistazo a las "Guerras Clon" a las que Una Nueva Esperanza se refiere. Doscientos Jedi y cientos de miles de tropas clónicas recién manufacturadas contra un número similar de androides de batalla, con seis patas y caminantes AT-TE de aspecto temible (que suponen una referencia a los AT-AT de El Imperio Contraataca) y gigantes misiles androide.

Esta escena, la mayor escena de batalla de todas las películas de Star Wars, fue supervisada por Ben Snow. Él y Dennis Muren, otro veterano de los trabajos originales de Star Wars, que también supervisó los efectos de batalla y las escenas bajo el agua del Episodio I; también han supervisado una escena en una enorme fábrica de manufacturación de androides. Crearon la fábrica a partir de cámaras interconectadas, máquinas, brazos robóticos, y laberintos de tubos y pasadizos. Pablo Helman, de ILM, se encargó de los escenarios más pacíficos de Naboo, que en El Ataque de los Clones proveen las localizaciones para el amor prohibido. Helman y su equipo han diseñado nuevos paisajes, cascadas, y una casa de campo donde tiene lugar el romance.

El reino digital también se extiende a la creación de algunos personajes de la película. El director de animación Rob Coleman ha diseñado una nueva criatura CG conocida como Dexter Jettser. Un gran personaje extraído de los detectives de los años cuarenta, Dexter aporta importante información a Obi-Wan en su búsqueda para desvelar el misterio que se encuentra tras los atentados sobre Padmé. Una figura que "ha estado en todos los sitos y lo ha hecho todo", Dexter tiene cuatro fuertes brazos y manos, una mugrienta camiseta y un igualmente sucio delantal y pantalones que tienden a caérsele.

Coleman y su equipo dieron vida a los Kaminoanos, altos, con delgado cuello, modos elegantes que recuerdan a las criaturas de los clásicos de ciencia-ficción. Los fabricantes de los clones son el contraste de los primitivos geonosianos, similares a insectos, cuya labor es producir los androides.

Coleman también ha resucitado a personajes familiares para todos los fans de Star Wars, incluyendo a un Yoda totalmente generado por ordenador. Los efectos por ordenador dan a Yoda mucho más movimiento, lo que permite al carácter tomar más papel protagonísta en la acción y en el drama que en otras películas de Star Wars. "La oportunidad para Yoda de trabajar como un carácter CG es uno de los puntos que más resaltan en esta película", dice Coleman, quien señala que Lucas tan sólo le dio vía libre con el Yoda CG cuando tras extensas pruebas Coleman y su equipo demostraron que podían hacerlo.

Las primeras apariciones de Yoda en pantalla fueron definidas por Frank Oz, quien ha ayudado mucho ahora a Coleman. El talentudo cineasta ha proporcionado de nuevo su voz única para el Maestro Jedi, y Coleman ha tratado que en Yoda quede un poco de la esencia de la marioneta de Oz.

Otros personajes CG conocidos que vuelven son el chatarrero comerciante Watto (con la voz de Andy Secombe) y Jar-Jar Binks, el favorito de los pequeños de la saga. Ahmed Best sigue dando vida a las voces del torpe gungan, que aunque ahora es un respetable senador, a veces (cuando está excitado) nos muestra algunas de sus niñerías.

En añadidura al trabajo digital hecho por ILM, algunas de las localizaciones de El Ataque de los Clones tuvieron lugar en diversos países. Aunque las cuatro películas previas de Star Wars fueron montadas en estudios ingleses, la tradición ha cambiado cuando Lucas y McCallum han escogido, para los Episodio II y III, los estudios de la Fox en Sydney, Australia (Aunque una pequeña muestra del rodaje adicional tuvo lugar en los estudios ingleses de Elstree y Ealing)

El trabajo de producción en Australia comenzó el 26 de Junio de 2000 y se prolongó durante dos meses y pedio, después de los cuales la compañía se trasladó a Italia. El Palacio Real de Caserta (que fue el palacio de la Reina Amidala en La Amenaza Fantasma) de nuevo forma parte de los escenarios de Naboo en el Episodio II. Caserta sirvió perfectamente para capturar la avanzada sociedad de Naboo y su rica cultura.

Al norte de Italia, los jardines del Lago Como, sus cristalinas aguas y la imponente Villa Balbaniello sirvieron como los emplazamientos del romance entre Padmé y Anakin. La zona, que el propio Lucas exploró durante sus vacaciones, ha impresionado a muchos actores y miembros del equipo técnico, especialmente a Hayden Christiensen, quien disfrutó mucho de su viaje allí: "El Lago Como es tan hermoso que parece casi surrealista" dice. "Parece como si tuviera que pertenecer a una película de Star Wars"

Ni siquiera una fuerte lluvia interrumpió el entusiasmo del equipo de producción. Lucas simplemente trasladó la escena a un porche a un lado de la villa. Al final del día, la tormenta se retiró milagrosamente dejando en su lugar un bello arco iris que aparece en la escena. "La gente dirá que es una creación digital" comenta Lucas "pero es real".

En septiembre del 2000, la producción fue hacia un territorio muy familiar: Túnez, el mundo real que ha hecho de planeta Tatooine en las anteriores películas de Star Wars. Con a veces 130 grados Fahrenheit, las temperaturas eran la maldición del lugar, aunque el equipo de producción ha evitado esta vez las tormentas de arena que destruyeron muchos sets durante los rodajes del Episodio IV y el Episodio I en 1976 y 1999, respectivamente.

El rodaje continuó en la Plaza de España de Sevilla, haciendo las veces de la ciudad de Theed, capital de Naboo. Allí se acercaron cientos de entusiastas fans de Star Wars de todas las edades esperando poder echar un vistazo a la filmación. Después del proceso, muchos miembros del equipo satisficieron a los fans firmando autógrafos.

George Lucas ha notado que los efectos visuales y de sonido trabajan juntos en estas historias, y El Ataque de los Clones no es una excepción. El filme muestra el talento de dos artistas aclamados en todo el mundo. Una y otra vez han hecho sus contribuciones al universo Star Wars: los ganadores de varios Oscar Ben Burtt, editor de sonido, y John Williams, compositor.

Durante veinticinco años, George Lucas ha mantenido que las aportaciones de Williams a la saga son inolvidables e indispensables. Su música cubre a los personajes, a sus emociones y a sus acciones. "Siempre he dicho que esto son películas mudas" dice Lucas "y soy muy afortunado porque John lo entiende"

Williams, a su vez, aprecia la estructura de la saga de Lucas, que le permite, quizás por vez primera en la historia, un cuerpo de temas musicales a través de todas las películas, mientras que también van apareciendo nuevos temas. "Cuando escribo la música para una película de Star Wars, hago como si fuera una única pieza a la que voy añadiendo nuevos temas" dice Williams "Por lo que sé, en las películas es algo único".

En El Ataque de los Clones, Williams usa el 'Tema de Anakin' del Episodio I, que estaba basado en la Marcha Imperial, tema de El Imperio Contraataca y El Retorno del Jedi. Williams de nuevo usa el "Tema de Yoda" y "Duel of the Fates" , este último muy importante en el Episodio I.

La música nueva para esta película es el tema de amor que subraya el romance entre Anakin y Padmé. Lucas describió a Williams su visión de este tema. "George me dijo 'Porque no haces como si fuera una escena de amor de una vieja película de Hollywood'", recuerda Williams "'donde veías a Claudette Colbert enamorada de un hombre atractivo' Eso quería decir que quería que lo expresara como la vena romántica clásica de los temas de amor"

En lo que refiere a Williams, el tema de amor recuerda a las músicas románticas de los años treinta y cuarenta. "Hay una particular sensibilidad en las historias de amor de ese período que no está del todo presente ahora" dice. "En las películas de aquellos tiempos, las historias de amor eran más idealistas y espirituales y menos físicas que ahora. La tarea para los compositores de entonces era transmitir los aspectos eróticos que no podían ser mostrados"

El tema de amor de El Ataque de los Clones refleja el amor trágico y prohibido entre Anakin y Padmé. "Hay un aspecto de su romance que me recuerda a las clásicas historias de amor como Romeo y Julieta, Tristan e Isolda, donde las parejas se encuentran separadas por su clase, familia o rango" el compositor explica. "En el Episodio II tenemos a una reina/senadora y a un soldado/Jedi y sus rangos y estructura social los separan, creando tensión. Y por eso el tema de amor expresa este aspecto trágico. Era un tipo de estructura musical a la que nunca me había enfrentado antes en Star Wars

Las colaboraciones entre Williams y Lucas son memorables para los fans, y el afamado compositor es de los mayores admirados en la saga. "En cualquier sitio del mundo, los niños conocen a los personajes de George Lucas. Es increíble, y quizás conocen también la música, que es algo por lo que estoy muy agradecido a George"

Como los temas de Williams, los diseños de sonido de Ben Burtt han jugado un papel igualmente clave en todas las películas de Star Wars. Burtt de nuevo entrega sus talentos -y sus oídos- a la banda sonora de El Ataque de los Clones. El Episodio II, como sus cuatro predecesoras, tiene acerca de mil grabaciones de sonidos, que incluyen a vehículos, armas y voces. Cualquier cosa de la película está creada a propósito y no ha sido grabada durante la filmación.

Burtt y el co-supervisor de sonido Matthew Wood viajaron alrededor de Australia grabando a pingüinos, pájaros de la jungla, factorías de cañas de azúcar; cualquier sonido interesante con el que se encontraran. Burtt se arrastró bajo el mecanismo de un cine para grabar los motores, lo que se ha convertido en el lanzamiento de las armas de Jango Fett. Muestras de la fauna australiana procuraron muchos sonidos para las armas (el ruido de los cañones de la Esclavo I, la nave de Jango, es en verdad el canto manipulado de un pajarillo). Y el sonido de un submarino navegando a través de las olas en el puerto de Sydney ha resultado ser el rugido del monstruo de Geonosis, el reek.

Burtt asume también sus deberes como editor de imagen, tomando su puesto al lado de Lucas en una de las posiciones fundamentales de la estructura de El Ataque de los Clones. Los avances de Burtt en el diseño y la edición de sonido ayudan a su papel como editor de imagen. "El sonido y la imagen están tan relacionados en el modo en que la historia es finalmente presentada que tratamos de crear un departamento que se ocupara de enlazar ambos aspectos" dice Burtt.

Dos de las escenas favoritas del diseñador, en lo referente a imagen y sonido son la persecución por Coruscant ("Es como una persecución policial al viejo estilo" dice Burtt) y la persecución por el campo de asteroides, que tan sólo incluye sonido (ni música ni diálogo) como la carrera de podracers.

Al tiempo que Ben Burtt y John Williams completan su trabajo, Rick McCallum estaba ocupado supervisando otros aspectos importantes del sonido: la traducción a diecinueve idiomas extranjeros de El Ataque de los Clones, que se estrenarán casi simultáneamente.

Luchando contra un estrecho margen de tiempo, McCallum ha disfrutado con esos toques finales, y la anticipación para el comienzo del Episodio III. "No hay reglas cuando trabajas para George" explica. "Él te crea este espacio increíble para trabajar, y las cuatro palabras que nunca quiere oír son: 'esto no puede hacerse'".

Habrá poco tiempo para Lucas, McCallum y sus equipos para relajarse tras el estreno global en Mayo de El Ataque de los Clones. Poco después, McCallum ya estará buscando localizaciones, el departamento de arte trabajando en los diseños de los trajes, y George Lucas sentado, escribiendo el guión del Episodio III, a mano, con la carpeta que ha usado para todas sus películas.