ENTREVISTA CON IAN MCDIARMID

Entrevista de Todd Gilchrist / Traducción: Jefe Pícaro y Jee-Wan / Maquetación: Coronel Kurtz
Prohibida la reproducción total o parcial sin el consentimiento de los autores

[ Menú Actores ]

ENTREVISTA CON IAN McDIARMID

 

McDiarmid12 de octubre de 2.005- Ian McDiarmid es probablemente uno de los actores más famosos pero del que no habrás oído nada. Ha aparecido en "Sleepy Hollow", de Tim Burton, y en alguna escena de "Un par de seductores", de Michael Caine y Steve Martin; pero su verdadera carrera a la fama comenzó cuando hizo su aparición en una de las mayores sagas de todos los tiempos. En "El Retorno del Jedi", McDiarmid ofreció una enormidad más allá de la primera impresión interpretando, cómo no, al Emperador, probablemente la única persona capaz de poner a Darth Vader en su sitio.

McDiarmid volvió a la saga en 1.999, cuando George Lucas lanzó su trilogía de precuelas con "La Amenaza Fantasma", donde jugó un papel tan mínimo en el desarrollo del joven padawan Anakin Skywalker (Jake Lloyd), que por entonces no era más que un niñato con una imperecedera pasión por las carreras de vainas. Seis años después, tanto Anakin como el Emperador, conocido por entonces como senador Palpatine, se encuentran en mitad de la trama; mediante delicadas (y no tan delicadas) maniobras políticas, Palpatine se nombra a sí mismo soberano de toda la galaxia, al tiempo que nombra a Anakin su hombre de confianza, portavoz y protector.

Durante la reciente rueda de prensa sobre el lanzamiento del DVD de "Episodio III: La Venganza de los Sith", McDiarmid habló sobre su evolución de insignificante burócrata a Emperador de la galaxia; como él mismo explica, ha sido un largo y extraño viaje que le llevó atrás y adelante en el tiempo -a menudo, simultáneamente- pero esa experiencia forjó un pacto con el Diablo con éxito, y cuyo precio sólo él está dispuesto a pagar.

IGN DVD: Cuando actuaste en "El Retorno del Jedi", ¿tenías idea de que años más tarde jugarías el mismo papel en otras entregas de la saga?

McDiarmid: Como diría Frank [Oz], 'no'. No, fue extraordinario. Para empezar, fue increíble cómo conseguí el papel. Tuve una breve entrevista con George a la hora de la comida -aunque no comimos, porque estaban muy muy ocupados- y cuando volví, mi agente me llamó diciendo: "es estupendo, has conseguido el papel." Yo dije: "¿Qué papel?" Y él me contestó: "Pues nada, el de emperador del universo." Yo pensé: "guau, imposible que haya personajes tan importantes después de esto.", y lo cogí con mucho entusiasmo, y así ha sido desde entonces. Pero, ¿imaginaba yo que estaría aquí hablándote 25 años más tarde? Pues no, puedes estar seguro de que no, pero ha sido un viaje increíble.

IGN: ¿Imaginabas que tu personaje tendría una importancia tan grande?

McDiarmid: Una vez más, no. Cuando George me pidió que actuara en las precuelas, fue el mismo tipo de reunión: muy corta y al grano. Me gustó verle después de tanto tiempo, y nos encontramos en la habitación de un hotel. Él dijo: "Por cierto, ¿sabes de alguien que quiera actuar como emperador?". Yo contesté: "Es gracioso que tú me digas eso". Él dijo: "¡Estupendo!" y ya estaba hecho, una vez más, pero esta vez me contó algunos secretos -no muchos, pero es su forma de hacerlo y yo estoy de acuerdo. Es el estilo de un gran narrador de historias: nunca adelantar secretos. Pero sí me dijo que el personaje estaría en un segundo plano en los episodios Uno y Dos, que no sería hasta el Tres cuando sería el centro de la acción, pero no pensé que lo haría de manera tan estrepitosa. Y me hizo caer en la cuenta poco a poco de que, si Vader era la peor criatura, la más diabólica y oscura, el peor villano de la historia cinematográfica, yo era peor que él -y la verdad es que poco a poco me doy cuenta de que es así. Así que supongo que mis relaciones con Satán son más estrechas de lo que nunca imaginé que serían (se ríe).

IGN: ¿Cómo reaccionan los niños cuando te ven en persona?

McDiarmid: Se muestran indecisos, lo que es un alivio, en realidad, y suelen abordarme con preguntas negativas, como "Tú no eres él, ¿verdad?". Y entonces puedo contestarles sinceramente que "no", porque no sé qué "él" tienen en mente. No es muy sincero por mi parte, pero no tan deshonesto, y para cuando ya han pensado su próxima pregunta yo he desaparecido por un recodo. Pero una vez hubo un niño, cuando vine aquí, justo cuando la película se estrenaba por primera vez, y en esta misma sala, y yo estaba en el aeropuerto recogiendo mis maletas. Un jovencito vino y me dijo "¿Tú estás en La Guerra de las Galaxias?" y le dije que sí. Volvió con su madre, que se disculpó por haberme interrumpido, aunque no lo hizo. Más tarde volvió de nuevo, cuando estaba en la cinta y me dijo: "¿Eres un mentiroso?".

Esto, si lo analizas, es una pregunta muy interesante, y la respuesta es sí y no; el personaje sí que miente, desde el primer momento en que fue concebido. Yo espero que no, pero por otro lado, nadie podría estar en "La Guerra de las Galaxias" y estar a tu lado en la cinta transportadora, ¿o sí? Además, es mi trabajo haceros creer cosas sobre él que en realidad no son ciertas de mí mismo. Así que es prácticamente la mejor pregunta que he oído nunca, y me la hizo un chaval que no tendría más de 8 años.

IGN:¿Estabas mordiéndote las uñas para dejar a un lado la diplomacia y sutilezas de las dos primeras precuelas para llegar a ser la pura encarnación del mal en el Episodio III?

McDiarmid: Sí que lo estaba, y de nuevo, no sabía hasta qué punto iba a ser diabólico -sabía que iba a serlo bastante- hasta que me dieron el guión. Tampoco sabía que tendría habilidades de lucha, y tuve que desarrollarlas bastante rápido. Imaginé que sus poderes estarían en sus dedos y en su cabeza; pero no podía imaginar que era el espadachín más rápido del universo, pero ahora ya lo sé y él lo es. Hubo bastante gente que me ayudó a conseguirlo, y a quien siempre nombro es Michael Byrne, el gran maestro espadachín y brillante doble.

IGN: ¿Te gustaría retomar el personaje en las series de acción planeadas?

McDiarmid: Bueno, nadie sabe con certeza los detalles de estas series de televisión; no creo que sea porque quieren guardar el secreto, sino porque hay muchas cosas que aún no están pensadas. Pero sé que la intención de George es continuar la historia de personajes que no han tenido tanta importancia hasta ahora pero que son muy populares. Por supuesto que en los períodos entre las películas debe haber referencias al Emperador, pero recordarás que ya fue objeto de referencia en la primera película de "La Guerra de las Galaxias" sin llegar a aparecer realmente, y Peter Cushing era su representante a todos los efectos. Así que sospecho que podría haber de la misma manera varios representantes. Pero ya sabes, yo siempre contesto el teléfono.

IGN: ¿Cómo se te ocurrió qué voz poner al personaje?

McDiarmid: La respuesta rápida es que fue cuando vi su cara -cuando vi la máscara tantos años atrás en los Estudios Elmstree. La intención original fue, yo creo, que sería mi voz -podría haber sido la voz de Clive Revill, pues ya había puesto su voz en la película. La consistencia es muy importante cuando estás haciendo películas, y Richard Marquand, el director, me dijo "Si puedes conseguir que tu voz sea parecida a la de Clive, puede que George te la deje". En ese momento no tenía ni idea de que podrían doblarme, y me arriesgué -porque por supuesto Clive no vió la cara que yo estoy mirando; él vió un actor dentro de una máscara y trató de encajar la voz en una sesión de grabación -y yo tuve bastante tiempo para conocer el personaje. Yo pensé, bueno, viene de lo más recóndito de la tierra, parece un viejo sapo, y antes de que me diera cuenta ya estaba haciendo la voz. Esto salió a colación, y George, como siempre, oyó la voz y en unos 10 segundos le gustó, afortunadamente, y desde entonces no se ha separado del personaje.

IGN: ¿Hasta qué punto fue difícil pasar del sutil diabólico de las primeras películas al Emperador agresivo que se muestra en el Episodio III, particularmente dado el hecho de que ya habías establecido su comportamiento en "El Retorno del Jedi"?

McDiarmid: Bueno, es muy interesante. Lo he dicho ya unas cuántas veces, pero en las notas que George me dió -no eran notas realmente, sólo me hablaba- él me dijo que debía pensarlo como si mis ojos fueran las lentes de contacto de Sidious. En otras palabras, mi cara es su máscara, cosa que es extremadamente interesante para un actor. Sabía que su cara tendría que asomar a través de mi máscara, así que en cierto sentido no podía esperar, y también sabía que las juntarían y cambiarían de una cara a otra -mi particular Dr. Jekyll-Mr. Hyde, mi momento Dorian Gray, donde el exterior bueno es transformado por el interior diabólico. Así que realmente lo estaba esperando con ansia, así como el momento en el que la voz de Palpatine cambia de una a otra -de gris claro al más oscuro negro. Era una escena que estaba deseando hacer, y me entregué a ella por completo, y cuando la estábamos filmando, George se acercó más y más y más con la cámara -estaba prácticamente en mi nariz al final. Así que supe que era el momento en el que debía dar lo mejor de mí mismo para hacerlo bien.

IGN:De las cuatro películas en las que apareces, ¿qué escena fue la más divertida de rodar y cuál la más desafiante?

McDiarmid: Supongo que es fácil representar un político hipócrita con una cara sonriente; y también es muy gratificante. Las más difíciles fueron sin duda las escenas de acción, cuando estoy luchando con Sam [Jackson]. Pero veréis en el DVD que tuvimos problemas ese día -no fueron muy grandes y fueron solucionados muy bien- pero aprendí cosas y trabajé con Nick [Gillard], y cuando George lo vió, no era lo que necesitaba. Curiosamente, necesitaba más de mí; en lugar de eso yo pensaba que no querría tanto de mí, pero no sólo quería ver la expresión de mi cara, que habría sido obvia -y a él no le interesa cambiar caras salvo que sea total y absolutamente necesario- sino que quería también mi energía. Así que tuvimos que hacer cambios, para ajustarnos a eso, y para alguien que no tiene experiencia en lucha a esas velocidades fue un proceso de aprendizaje rápido. Pero fue bueno y excitante, aunque difícil.

La lucha con Frank [Oz], con Yoda, fue un juego, y pude experimentar toda la belleza de la animación con CGI -en otras palabras, actuando, luchando con gente invisible. Era una coreografía muy precisa, viéndolo os habríais dado cuenta de que tenía que serlo; entonces noté, y de hecho George me lo pidió amablemente, que quería unos cuántos movimientos improvisados, así que básicamente hice una lucha con el aire al final de la coreografía y entonces me colapsé en una risa histérica en el suelo. No sé si alguno de esos movimientos están en la versión final; pero no fue tan difícil.

Eso fue muy divertido, y lo más divertido fue la gran secuencia de acción, que probablemente no la veréis como tal, y es la escena de la ópera. Hayden y yo estábamos sentados juntos, como estamos Jim [Ward] y yo ahora mismo, y hablábamos mientras la ópera se desarrollaba. Curiosamente la gente ha dicho que está tan llena de acción como cualquier otra escena con naves espaciales o luchas con sables láser, porque es muy activa, y es como una batalla de sables, pero del intelecto. La escena fue como un juego porque pude trabajar con Hayden; estábamos juntos a cada segundo del día, viéndonos los ojos, que es como a los actores les gusta trabajar.

IGN: ¿Qué se siente al protagonizar una versión más joven de un personaje 25 años más viejo?

McDiarmid: Confusión. Es algo muy extraño, y lo será cuando vea los DVDs en secuencia: uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis. Ser escogido cuando tienes 30 años para protagonizar alguien con 120, y después encontrarte conque con 50 años vas a protagonizar el mismo personaje con la edad que tenías antes, o sea, con cincuenta y tantos, no creo que haya salido aún del trauma, de hecho. Pero lo interesante de esto es un desafío único para un actor; no recuerdo a nadie que le hayan pedido hacer algo parecido, ni tan siquiera que le hayan dado la oportunidad de hacerlo, y siempre estaré agradecido por ello.

[ Menú Actores ]

© S I T H N E T
Entrevista de Todd Gilchrist / Traducción: Jefe Pícaro y Jee-Wan / Maquetación: Coronel Kurtz
Prohibida la reproducción total o parcial sin el consentimiento de los autores
barra
Para cualquier duda, sugerencia o colaboración contacta con nosotros usando el e-maul ;-)